El contrato de trabajo escrito está regulado por el artículo 39 del código sustantivo
del trabajo, y todo lo que se acuerde debe quedar contenido en un documento,
documento que aparte de la firma de trabajador y empleador, no requiere formalidad
alguna para su validez, por lo que constituirá prueba por sí sólo para cualquiera de las
partes.
Como su nombre lo indica, es aquel contrato que nace con una fecha definida de
defunción. Desde que se firma el contrato de trabajo se acuerda que ese contrato
terminará en una fecha que se ha consignado en el contrato, aunque ello no impide que
el contrato sea renovado, ya sea formalmente o automáticamente si se cumplen los
preceptos legales para ello. Esta modalidad de contrato está regulada por el artículo
46 del código sustantivo del trabajo.
La duración del contrato de obra o labor será el tiempo necesario para culminar una
obra o labor. Es una forma de contrato a término fijo, pero la terminación no está
dada por fechas sino por el tiempo necesario para terminar la obra o labor contratada.
Aquí el contrato no es por un año por ejemplo, sino hasta que se termine de construir
una obra o desarrollar una labor.
Dice el artículo 77 del código sustantivo del trabajo que el periodo de prueba se debe
pactar siempre por escrito, de tal manera que si el contrato es por escrito, en ese
contrato se debe consignar el periodo de prueba, y si el contrato ha sido verbal, será
necesario hacer un documento en el que conste el periodo de prueba, así lo demás se
haya acordado verbalmente.
Duración del contrato de trabajo
Entre las formas expresas pueden hallarse: La verbal, expresada por medio de
palabras (Quiero celebrar el contrato, o -¿Quieres comprarme o alquilarme mi casa? –
Sí). En Roma los contratos verbales estaban rodeados de solemnidades, y algunos,
como la Sposio, requerían la pronunciación de determinadas palabras solemnes (-
Spodes? -Spondeo) que solo podían usar los ciudadanos romanos. La escrita: Cuando
las partes suscriben un documento privado (firmado por ellas) o público (con
intervención de un funcionario público, actualmente, generalmente un escribano). Los
romanos también consideraban forma expresa a los signos inequívocos: Por ejemplo,
asentir con la cabeza, era considerado un sí.
Las formas tácitas, ocurren cuando sin que la o las partes, manifiesten su voluntad de
contratar, comienzan la ejecución del contrato. Por ejemplo, tomar una golosina del
kiosco y entregar el dinero correspondiente sin mediar palabra.
Actualmente no hay motivo para no seguir usando esa clasificación, con las salvedades
correspondientes (por ejemplo lo referente al pater).
El Código Civil argentino remite a las formas de los actos jurídicos al hablar de la
forma de los contratos, dado que estos son una especie de aquellos. Define la forma
como el conjunto de solemnidades prescriptas por la legislación para que se forma el
acto jurídico. Enumera las siguientes formas¨la intervención de testigos, la escritura,
el escribano u oficial público o el juez del lugar. Si la ley no ha establecido formas
determinadas, las partes pueden elegir las que consideren convenientes (arts. 973 y
974 del Cód. Cit.).
El Artículo 1184 del mismo cuerpo legal enumera los contratos que deben hacerse
por escritura pública, indefectiblemente. Si se hubieran hecho privadamente,
significan el compromiso de otorgar a correspondiente escritura pública. Son los
siguientes:
1. Aquellos cuyo objeto sea la transmisión del dominio o del usufructo sobre bienes
inmuebles, el establecimiento de algún gravamen, o el traspaso de derechos reales de
inmuebles de terceros.
2. Las particiones de herencias, efectuadas en forma extrajudicial, salvo que se
presente el instrumento privado para su homologación al juez de la sucesión.
3. Los contratos constitutivos, modificatorios o que prorroguen sociedades civiles.
4. Las convenciones matrimoniales y cuando se constituya dote.
5. El establecimiento de rentas de por vida.
6. Toda cesión de derechos hereditarios, al igual que su renuncia o repudiación.
7. Los poderes a presentar en juicio, generales o especiales, los que se otorguen para
la administración de bienes, agregando el artículo 1184: cualquiera que tenga por
objeto un acto que deba obligatoriamente ser redactado por escritura pública.
8. Toda transacción a efectuar sobre bienes inmuebles
9. Cuando un acto conste en escritura pública, la cesión de acciones o derechos sobre
el mismo debe ser hecho también en escritura pública.
10. Los actos accesorios de contratos realizados en escritura pública.
11. Los pagos de obligaciones establecidos por escritura pública, salvo cuando los pagos
sean parciales, de alquileres o intereses.
La importancia de la forma, tiene directa relación con la prueba, ya que cuando la ley
exige una determinada forma de celebración, ésta será la única admitida para probar
la existencia y las condiciones de contratación. En la que existe libertad de formas,
también las partes deben tomar recaudos para elegir la que en caso de litigio, pueda
ser demostrada, no solo la existencia del acto sino las especificidades del acuerdo. Por
ejemplo, tal vez podamos probar que cedimos una propiedad en alquiler, pero nos sea
difícil, si no consta por escrito, probar su destino. Por eso se recomienda que cuando
la ley no establezca forma determinada, se opte por un instrumento privado, evitando
la oralidad, por su dificultad probatoria
https://www.gerencie.com/contrato-de-trabajo.html
https://derecho.laguia2000.com/parte-general/forma-de-los-contratos
https://www.goconqr.com/flowchart/8995244/actividad-2-mapa-conceptual-
contrato-de-trabajo-