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Para intentar un bosquejo de la idea que mejor refleja el nivel de comprensión del ser humano acerca

de lo que es el Universo en los inicios del Tercer Milenio no es tarea fácil, por cuanto obliga a la
concurrencia de varios elementos que usualmente no se suele combinar en la ciencia y para los que la
Teología tan solo tiene una referencia en Génesis (la razón de la existencia de la Tierra) que no agota el
tema. En otras palabras para aceptar este Universo es requisito indispensable establecer un nuevo
paradigma de cómo se produce el conocimiento y extrapolar de esta consideración algo más
importante aún: ¿Para qué se produce el conocimiento?.

Adelantemos desde ya la respuesta, aunque luego nos vayamos por los meandros que la bordean de
lejos. No lo sabemos. Solo se han formulado preguntas como esa e incluso otras relacionadas, como
por ejemplo: antes de contestar la pregunta cabe preguntarse y ¿Quien hizo a Dios? ¿O para que existe
Dios?.

La primera interrogante permanece en el campo de la cosmología, aunque sus parámetros se abordan


desde perspectivas muy novedosas y para decir lo menos desconcertantes. La segunda interrogante
pertenece al de la cosmogonía y la unión de ambas es un intento de alivio de la tensión ciencia -
religión, pero para ser más precisos: ciencia - fe.

Lo realmente curioso es que este alivio de la tensión se ubica en la aproximación teológica o en la


elucubración filosófica, sino que lo más lejos que podemos llegar tratando de contestar la pregunta es a
montarnos sobre elucubraciones de la ciencia , como resultado de la reflexión de de la física, pero tan
solo del área de la de la física cuántica o del mundo subatómico y de la extrapolación de los hallazgos
observacionales y empíricos al ambiente que nos rodea y al Universo como un todo.

Para abordar el tema es necesario hacer algunos planteos previos:

No hay ningún planteamiento previo al Cristianismo que aborde este asunto. Ni siquiera en religiones o
en creencias anteriores a esta fe. Y si lo hacen es desde el ángulo de la interpretación que deja
sembrada la duda . Einstein lo había adelantado con un juicio corto: “lo incomprensible del Universo es
que sea comprensible”. Sí , pero se refería a cómo es que es el Universo, no a la pregunta: ¿Para qué se
hizo el Universo.

En resumen: no es posible contestar la pregunta. Ahora bien, podríamos hacer algunas reflexiones en
torno a aspectos aledaños a la pegunta, pero no contestarla ni directa ni indirectamente.

Veamos ,entonces: el conocimiento científico clásico se obtiene como resultado de la medición de las
diversas propiedades de la materia ( o de la energía, ya que los conceptos son intercambiables como lo
demostró Einstein con su fórmula ya clásica E = Mc Exp 2) y en términos generales se afirma que fuera
de las modalidades en que se manifiestan estos epifenómenos de la materia, no es posible afirmar nada
con seguridad y si existen otros epifenómenos o entre ellos subyacen otras condiciones, la ciencia no
puede referirse a ellos, porque precisamente serían de carácter metafísico, esto es, más allá de lo físico
real conocido y medible.

Esta visión da origen a una concepción materialista del mundo y a la teoría del conocimiento que lo
sustenta: el realismo. Frente a esta noción estrictamente materialista que nace de la impresión que
causa en nosotros la percepción por medio de los sentidos, hay otra forma de valorar la percepción de
los epifenómenos de la materia y consiste en estimar - por deducción intuitiva que lo real no existe y
carece de sentido y substrato material, porque lo único real existente es la conciencia que se manifiesta
por medio de las imágenes que teje nuestro pensamiento y se materializan por medio de nuestras
percepciones sensibles. Esta visión da origen a una concepción espiritualista del mundo y a la teoría del
conocimiento que lo sustenta: el idealismo.
Históricamente la ciencia se ha parapetado detrás de la primera visión y la filosofía ha periclitado entre
ambas visiones, según diversas corrientes de opinión. Asimismo las religiones muestran tendencias
hacia favorecer una u otra visión o bien mezclas de ambas y dependiendo de la rigurosidad con la que
se aborde el conocimiento lo cierto es que la afirmación de los realistas acerca de que el mundo resulta
conocible por ser cuantificable y de los idealistas acerca de que esto no es así, por cuanto sólo
accedemos a representaciones dispersas e inconexas del mundo, ha impactado el conocimiento
teológico, desacreditando el enfoque idealista.

Los descubrimientos debidos a la física cuántica desafían los métodos de razonamiento clásico y
desmoronan la lógica que resulta de aplicarlos. Este cambio de canon del conocimiento que ha sido
refutado de materialista y de metalógico, tiene varias características que lo definen:
Una síntesis del conocimiento por la vía del realismo y la vía del idealismo que se fusionan sobre la base
del primero, para ir más allá. Lo que el filósofo francés Jean Guitton denomina meta -realismo

Una nueva manera de abordar el conocimiento de todas los componentes físicos del Universo; pero
también de las interrelaciones de todos esos componentes, en un marco que supera la cadena de
relaciones de la lógica ortodoxa, para situarse más allá de los niveles de comprensión y de los lenguajes
que los explican, pasando la frontera de la forma usual de acceder a lo conocible y aún a lo
supuestamente no conocible, configurando, entonces, lo que Jean Guitton denomina una metalógica ,
para lo que utiliza - a manera de ilustración, dos fenómenos científicos comprobables:
1.-La indecidibilidad matemática, esto es la imposibilidad de comprobar si una proposición es falsa o
verdadera.
2.-La complementariedad física, esto es la propiedad de entes subatómicos para comportarse como
ondas o como partículas, lo que depende de la forma y/o el momento en que se les determina para su
cuantificación.
De las dos características señaladas surge una situación epistemológica totalmente novedosa,
revolucionaria, en que es preciso situarse bajo estas coordenadas:

Existen límites físicos para el conocimiento y para el caso del nacimiento del Universo, es el denominado
“Muro de Planck”, constituido por estos valores: Tiempo= 10 EXP - 43, Temperatura= 10 EXP - 32, Area=
10 EXP - 33. Esto significa que más allá de estos valores no es posible acceder al conocimiento de lo que
había antes de esta situación, dado que es físicamente imposible hacer ninguna afirmación con asidero
científico, de las condiciones prevalentes antes de esos límites, que marcan el inicio del Universo, según
la teoría del Big Bang.

Tampoco es posible acceder al conocimiento de la existencia de partículas cuya energía fuese menor a
la denominada Constante de Plank, que la fija en 6.626*10 exp - 34 jaules/segundo, lo que marca un
límite para la divisibilidad de la expansión.
Existe también un límite para la medición de la distancia que separa dos objetos subatómicos, la
denominada longitud de Plank, que la fija en 1 * 10 EXP - 33. Y existe igualmente un límite para el
tamaño de las partículas subatómicas, en que el denominado quark es la más pequeña físicamente
posible con un tamaño de 1*10 exp - 18 metros

De estas limitaciones reales para acceder al conocimiento de lo que existía en el momento mismo (T=0)
y aún antes del Big Bang, surgen planteamientos meta realistas que requieren - a su vez - de conjeturas
meta lógicas que abundan no en los trabajos propiamente científicos, sino en la escritos de divulgación
de Einstein, Eddinton, James, Schorodinger , Bohr , Plank, Heinsemberg , Gamow , todos señalados entre
1920 - 1960, y que más recientemente el cosmólogo Wheeler condensa en esta fase: “ Todo lo que
conocemos hoy se encuentra antes de su aparición en un océano infinito de energía que tiene la
apariencia de la nada” y que el físico David Bohn denomina “fuente eterna creadora situada más allá del
espacio y del tiempo”.
Estos planteamientos encuentran asidero desde que el físico Edward Tryon en Canadá, y también P.J.
Fomin en la Unión Soviética , ambos por separado y por coincidencias en 1973 postulan la creación de
partículas como resultado de fluctuaciones que ocurren en el vacío cuántico (en donde el concepto
nada como vacío absoluto cesa de tener sentido) y se singulariza por la presencia de fluctuaciones
energéticas, es posible no sólo aceptar (fe), sino entender (razón) , que el Universo físico nació de esa
nada o vacío cuántico.

Antes del Big Bang ( nombre que los modernos cosmólogos tratan de suplir por Singularidad Desnuda
o Fluctuación Original o Espacio de Simetría Quebrada ) no es posible hacer ninguna medición física por
la existencia de condiciones intrínsecamente inconmensurables e incalculables que al romper los
cánones de la física se han denominado condiciones cuánticas del inicio o Muro de Plank. Sin embargo
los físicos contemporáneos suelen calificar a esas condiciones previas como la Simetría Perfecta.

Tal Simetría Perfecta - en donde no hay ninguna manifestación energética de las cuatro fuerzas
fundamentales ni física, se habría roto en un instante dado, dando origen al Big Bang y éste, al Universo
conocido, en una sucesión evolucionista que habría pasado - mutatis mutandis - por la aparición
primero de la fluctuación cuántica como originadora del fenómeno; luego vendría la aparición de una
foto - partícula denominada x (posteriormente denominado Boson de Higgs y aun –incorrectamente
Partícula de Dios) , que estaría inmersa en un mar de radicación con condiciones no medibles y pasaría
a partir del momento 10 - 43 segundos por un proceso de creación de partículas, que formaron átomos,
luego moléculas, éstas galaxias, aquellas estrellas y otros cuerpos y por último planetas, uno de los
cuales sería la Tierra.

La Tierra, por procesos diversos habría acogido en su seno material evolucionado y en capacidad de
evolucionar más y mejor, gracias al manejo de información, dando origen a la vida que, transformada
también y capaz de manejar más y mejor información permitiría la emergencia de conciencia,
conciencia que se pensaría a sí misma, pensaría al Universo y trataría de explicarlo accediendo a cada
paso al manejo de más y mejor información.

Esa capacidad de explicarse el Universo ha sido llamada por varios físicos - entre ellos Einstein - lo
maravilloso del proceso porque para él “lo más sorprendente del Universo, es precisamente la
comprensibilidad del Universo”.
Esa comprensibilidad del Universo se ha abordado desde la línea de la lógica occidental y ha dado
origen a la teoría del Big Bang que a todas luces parece ser una teoría correcta por ser falsificable (en la
acepción de Popper) o sea probable mediante pruebas empíricas que para 1995 son cuatro:
1.-El proceso de expansión del Universo, como resultado de la expansión del espacio - tiempo.
2.-La abundancia de los elementos calculados desde la década de los 40, midiendo los procesos de
nucleosíntesis estelar.
3.-El fondo de radiación caliente remanente predicho formalmente en 1964 y comprobado
experimentalmente en 1965.
4.-La medición de las sutilísimas variaciones de ese fondo de radiación efectuada en 1992, y
reconfirmada por cálculos en 1994 - 1995.

Para tratar de explicar por qué existe algo y no nada (Simetría Perfecta no manifestada) y por qué el
Universo es comprensible para el Ser Humano, último escalón en la cadena evolucionista del ascenso de
la materia, el físico Brandon Carter postuló en 1974 el Principio Antrópico Perfecto que es un intento
científico para darle respuesta a la pregunta ¿Para qué existe el Universo?. Según este planteamiento
todo lo creado tiene una finalidad específica: que apareciera la conciencia humana para explicarse y
entender el Universo.

Según los cálculos matemáticos acerca de la especificidad de la materia biológica evolucionada ésta es
la resultante directa de condiciones exactas existentes en el inicio del Universo, ya que si alguno de los
parámetros hubiese sido diferente no existiría ni la materia, ni la vida, ni la Tierra, ni el Hombre ni su
conciencia; de lo que se desprende que existimos no como resultado del azar, sino justamente por lo
contrario: de la existencia de condiciones específicas precisas que predeterminaron los procesos
posteriores. Tan específicas son que se ha calculado que el umbral crítico de diferencia es del orden de
apenas de 10 EXP- 40 lo que implica que el Universo fue necesariamente calculado antes de nacer y por
lo tanto no somos obra del azar ciego jugando al cálculo de las probabilidades.

Esas consecuencias específicas nacidas antes o durante el quiebre de la Simetría Absoluta no son
calificadas por los físicos, o si lo hacen ( en razón de la seriedad científica) es en términos ambiguos - y
allí donde la ciencia calla, la fe - sin reticencias - ve en la Simetría Absoluta, la Perfección Absoluta, al
Creador y en la ruptura de ella la emergencia del Universo, es decir la Creación.

Pero de esta vez la argumentación no es tomada de la filosofía o de la teología, sino extrapolada de la


ciencia misma, con lo que desaparece la tensión entre Ciencia y Fe. Aunque esto no lleve a la
desaparición de la tensión Ciencia - Religión, dado que la fe o la creencia de que existe un creador y de
que somos el resultado - y por lo tanto - parte de la creación no necesariamente pasa por el tamiz de la
religión.

La explicación de la teoría antrópica puede ser un buen intento ,del lado de la ciencia por darle
respuesta a la interrogante ¿ Para qué existe el Universo? Sin recurrir a un Creador (todo se queda
dentro de los límites de la ciencia, aunque los ingredientes de construcción del Principio Antropico
Débil o Fuerte son francamente metafísicos) Asi, si no es posible por esta vía contestar la pregunta ¿Por
qué existe el Universo? ,intentemos al menos hacerlo con esta otra: ¿Cómo percibimos el Universo?

¿COMO ES EL UNIVERSO? Trata de dar una respuesta es intentar descifrar la intención del Creador, sin
acceso directo, sino a través de su obra: La creación y utilizando como instrumento el pensamiento a la
vez que tratando de descifrar cómo se produce el pensamiento y cuáles son los límites físicos existentes
para tal ejercicio.

Esa labor exige cuatro condiciones previas :


a) La disposición a utilizar una meta lógica y una vía meta realista,
b) Plantear desde el inicio una apertura para entender que la Simetría Perfecta anterior al Big Bang es el
Creador o el reflejo del Creador
c) Carecer del temor para tratar estas ideas en un contexto materialista y descreído y
d) Carecer del temor para discrepar con planteamientos ortodoxos provenientes de instituciones
religiosas y de instituciones científicas.

Para facilitar el intento de encontrar una respuesta se plantea el camino de la reflexión derivada de las
aseveraciones y los hallazgos de la ciencia:

SIMETRÍA: De la Simetría Perfecta anterior al Universo que es aceptada por los físicos, se pasa a éste en
potencia: una explosión (nombre que en realidad no hace honor al evento máximo) en que ya no hay
simetría, porque su rotura ahora hace aparecer el caos aparente . En ese caos, sin embargo se encuentra
latente toda la información que servirá de eje para que la transformación siga un patrón previamente
determinado que dará como resultado un proceso evolutivo en el que la diferencia serán las estructuras,
cada vez más complejas que la materia va formando y en donde a mayor información, más ordenada
será la estructura resultante, pese a que las condiciones externas: exceso de calor en el Big Bang; exceso
de frío en los espacios interestelares no facilitan el proceso de ordenamiento, salvo que se admita - a
priori - que la materia está destinada - irremediablemente - a sufrir un proceso de ascensión que será
ostensible desde la partícula X, al quark, al átomo, a las moléculas, a la materia viva y a la conciencia.
HOMEOSTASIS: De acuerdo a la Segunda Ley de la Termodinámica, todo sistema cerrado (y los
organismos vivos lo son en teoría), pasa necesariamente del orden al desorden en el transcurso del
tiempo, como resultado de su interacción con el medio; sin embargo el bioquímico belga - ruso Ilya
Prigogine plantea que frente a la interacción con el medio el sistema o es destruido por las
fluctuaciones a que es sometido (esto es entra en un proceso de desorden), o bien entra en función la
homeostasis que caracteriza a los procesos no disipativos, cuyas características le permiten al organismo
vivo superar las fluctuaciones y utilizar su información para subsistir.

Esta facultad de auto estructuración radica en el nivel molecular (y que se supone nivel visible del nivel
atómico y éste lo tomaría del nivel subatómico y aquel de los quarks y estos de los niveles virtuales
informáticos subyacentes) lo que implica que las “órdenes” (o información) que permite pasar de
estructuras sencillas a estructuras cada vez más complejas, es una propiedad no de los seres vivos -
como se había pensado siempre - sino de la materia inerte.

INFORMACIÓN: Si en efecto la información existe (como se ha comprobado científicamente) en los


niveles subatómicos (en los quarks) y éste viene de la partícula x y tal partícula es el resultado primario
de la ruptura de la Simetría Perfecta; entonces la información habría sido suministrada (o impresa) por
el Creador con un propósito definido. Si se sigue este planteamiento se arriba a la conclusión de que el
Universo y todo lo que en él existe, no es el resultado del azar, porque tiene un eje, un sentido, que se
encuentra implícito en cada uno de sus constituyentes, desde los niveles más pequeños y sencillos hasta
las estructuras más grandes y complicadas. Ese sentido se puede designar con el nombre de presencia y
al estar en todo: de Omnipresencia. Y esa omnipresencia que el físico inglés David Bohn llama
“profundo orden implícito” es información altamente estructurada. Es decir ese orden subyacente es
inteligencia; inteligencia altamente estructurada, quizá un reflejo del Creador, o bien el Creador mismo.

ANTROPISMO: Y en esa línea de pensamiento - siempre dentro de la idea antrópica - el ser humano con
su conciencia es el que da testimonio del Universo, pero no desde fuera, sino desde dentro mismo,
porque es parte del Universo y forma parte de su inteligencia y por lo tanto, si ésta se piensa a sí misma
es parte de su conciencia, y si el ser humano es lo más elevado de la inteligencia y por ende de la
conciencia, es entonces la Inteligencia y la Conciencia del Universo ( expresado en términos teológicos:
una gracia concedida por Dios)..

ORDEN IMPLÍCITO: Ahora bien surge la pregunta inevitable: si todo estaba calculado desde el inicio; si
hay un orden implícito subyacente en todos los epifenómenos, por qué el Universo se muestra así y por
qué, entonces no tenemos acceso a lo implícito, sino apenas a manifestaciones que por no entenderlas
parecen caóticas, dispersas, contradictorias ¿ y por qué si el Universo físico marcha hacia el desorden,
según la Segunda Ley de la Termodinámica, se afirma entonces que los seres vivos superan esa
tendencia y crean cada vez más orden? A qué obedece tal contradicción y por qué existe ésta ?

Para contestar esta pregunta es necesario plantearse otra: ¿ En verdad existe contradicción? Y si no
fuese así: ¿ Si por contradicción tomamos lo que no podemos entender y creemos que es desorden lo
que en otro nivel es orden? Para contestar esta pregunta es necesario replantear el concepto de materia
y entonces entender porque su comportamiento es como es, y sus epifenómenos son percibidos como
tales.

MATERIA: Todos los objetos que perciben nuestros sentidos son sólidos, o más o menos sólidos y todos
tienen características que les definen con mucha precisión: altura, ancho, profundidad, extensión, frío,
caliente, sólido, líquido, vapor, con olores variados y además pueden sernos gratos o no, causarnos
alegrías o tristezas, ser conocidos o desconocidos, en fin que producen sensaciones. Si tales objetos
pueden ser analizados no ya en su conjunto, sino en sus componentes a menor cantidad es el
componente que se analiza, así cambia nuestro conocimiento de su estructura organizativa y la reacción
frente a tal conocimiento.

ORGANIZACIÓN: Al examinar un componente bajo el microscopio, conforme se eleve la capacidad de


aumento o poder de resolución del microscopio (primero o del acelerador de partículas que se use
luego) el objeto analizado se irá desdibujando y aparecerán estructuras organizativas, cada vez menos
familiares y cada vez más peculiares y en cantidades asombrosamente altas, conforme se va
profundizando en lo pequeño. Así aparecerán estructuras como tejidos; luego macromoléculas,
moléculas solas, átomos que conforman moléculas (10 EXP- a), núcleos (10 EXP- 14) rodeada por
electrones (10 EXP-), dentro de los núcleos aparecerán los nucleones conformados por protones y
neutrones (10 EXP - 15) y al descomponer éstos aparecerán los quarks (10 EXP - 18), que parecen ser lo
más pequeño divisible (estamos entonces ante el Muro de Plank).

En este viaje imaginario, pero real - porque es efectuado diariamente en los laboratorios de física
atómica - conforme se desdibujan los objetos familiares, se dibujan otros objetos que no nos son
familiares (aunque si a los físicos atomistas). Y lo interesante del viaje es la constatación evidente de que
estos elementos aunque en cantidades de miles de millones se encuentran prácticamente solos,
inmersos en un vacío (aparente que es el espacio - tiempo en que se desenvuelven).

VIRTUALIDAD: Sin embargo hay pruebas suficientes en placas fotográficas especiales que captan los
trazos dejados por las partículas descritas (electrones, por ejemplo), hay cada vez más certeza en los
físicos que trabajan con la materia infinitesimal, de que estos entes no existen en la realidad; son así
“virtuales” y lo que se observa de ellos es una trayectoria que no es en realidad la de esa partícula, sino
la de la interacción provisoria (aleatoria) de campos de energía; por lo tanto de campos inmateriales,
cuya duración tiene dos características diferentes: así el electrón, el protón, el neutrón y el fotón son
estables, no así otras partículas elementales menores (llamadas genéricamente hadrones), cuya
“existencia”, es mucho menor o bien sólo “existen” por brevísimos instantes.

POSIBILIDADES: Ante esta situación los físicos que se ocupan del campo de la física cuántica de campos
se han planteado salidas para explicar lo que ocurre y así plantean tres posibilidades:
No hay Muro de Plank y la materia puede seguir dividiéndose al infinito, presentándose en niveles cada
vez más inestables e inaccesibles. A su vez este enfoque se subdivide en dos posibilidades: o bien la
accesibilidad estaría solamente limitada por el problema del desarrollo tecnológico para ir a campos
cada vez más y más pequeños; o por lo contrario no hay en realidad ninguna partícula “elemental
inicial”, sino tan sólo niveles de interacción diferentes y tales “acoplamientos” originan “visiones
teóricas” de realidad que nos hacen creer que son realidades distintas.
No hay posibilidad de dividir hasta el infinito y con la tecnología apropiada se llegará a la última
manifestación de elementos básicos o elementales no divisibles.
Las partículas son a la vez elementales y compuestas y aunque se les divida aparecen como teniendo las
mismas características, sin importar cuentas veces se haga esa división, esto es los elementos
constituyentes de tales partículas tienen la misma naturaleza que éstas por lo que son a la vez “lo uno y
lo múltiple”, (como lo adelantaron los antiguos pensadores ).

INTERACCIONES: Esta última posibilidad planteada por el físico norteamericano Murray - Gell - Mann,
en 1964 ha permitido desarrollar la teoría de los “quarks” no detectados aún, pero las formulaciones
matemáticas trabajan bien y hoy día son las más favorecidas por los físicos atomistas, pese a que tienen
conciencia que estos quarks son entes matemáticos sin modos, sin forma, que trascienden el espacio -
tiempo y son tan sólo una “ nube de cifras”, que precisamente por ello ha originado el concepto de
Matriz S, que pertenece a la “Teoría Cuántica Relativista de los Campos” formulada en 1986 por el físico
norteamericano George Chew que designa la propiedad de las partículas elementales de manifestarse
por medio de interacciones que pueden ser captadas por los instrumentos que el ser humano utiliza
para extender sus sentidos, esto es que esta teoría afirma que se hacen presentes por medios accesibles
a la inteligencia humana. Y en ello hay un propósito indudablemente.
PROBABILIDADES: Si se vuelve a la idea original, los objetos normales que no son familiares lo son
precisamente porque nuestra inteligencia capta ciertas interacciones de sus partes constituyentes con el
medio, que afectan nuestros sentidos y si comenzaran a dividirlos más y más con el auxilio de la
extensión de nuestros sentidos, siempre habrán manifestaciones de interacciones que nos permiten
conocerlos por esas manifestaciones y si llegamos a lo más pequeño tales interacciones seguirán
manifestándose aunque los constituyentes últimos de la materia (llamados cuantones en esta teoría) no
se manifiesten ellos mismos. Esto significa que lo que percibimos como materia en el examen normal y
en el examen de sus eventuales constituyentes en realidad son interacciones en el espacio - tiempo, lo
que permite concluir que la sustancia de lo que creemos real en realidad no existe, son sólo
interacciones, probabilidades matemáticas, como había intuido el astrónomo inglés Jean James al
expresar que la materia del Universo es “mind stuff”.

MATERIALIZACIÓN: Aquí es preciso recurrir al postulado de la indecibilidad de las matemáticas, esto es


a la imposibilidad de declarar si un postulado matemático es cierto o falso, con lo que si la materia (el
ser de los filósofos) es un sí y por último nada más que un postulado matemático según la teoría de la
Matriz S y por lo tanto como postulado puede ser falso o no, nuevamente es necesario plantear otras
preguntas: ¿Si no existe la materia, si no existe la energía como manifestación de esa materia, qué es
esa interrelación en que ambas se manifiestan? ¿Qué es ese campo? ¿Cómo se materializa, si es
inmaterial?

CAMPO CUÁNTICO: En términos de definición pura un campo cuántico es la resultante de la medición


de las fluctuaciones captadas como vibraciones o como cuerdas ondulantes de las interacciones entre
elementos subatómicos intervinientes (llamados genéricamente Fermiones); tales interacciones se
manifiestan por medio de fuerzas en que actúan elementos subatómicos (llamados genéricamente
Bosones) y todo este conjunto conforma una Red de Información que al ser accesada por el observador
en un momento dado presenta un comportamiento distinto a si es accesada en otra ocasión, por lo que
la apreciación diferente crea la impresión de discontinuidad. Tales campos son medibles pero si se
observa, por ejemplo una interacción dada es posible medir una propiedad y no todas a la vez y si se
repite la experiencia no es factible repetir la misma medición.

FLUCTUACIONES: En consecuencia los físicos que trabajan en este área suelen afirmar que un campo
sólo puede ser descrito en términos de la transformación de las estructuras de espacio - tiempo en un
lugar dado y a partir de él lo que se denomina realidad no es más que una sucesión de fluctuaciones
discontinuas, que aportan datos que en su conjunto - son la red de información que impacta los
sentidos de distinta forma e intensidad.

RED DE INFORMACIÓN: En otras palabras que lo que el ser humano tipifica como real es apenas una
forma de accesar esa Red de Información (postulada por Edward Fredkin) en un momento dado en que
se captan los efectos que se produce en la interacción y tal captación a veces se produce en la forma de
partículas o en la forma de ondas, pues así se manifiestan los “entes” intervinientes en el nivel
fundamental en que todo está en perpetuo movimiento cambiando, transformándose, mostrando ora
una faceta, ora otra faceta de un sutil tejido que los físicos denominan la simetría primordial que está
sujeta a una invariancia de medición, no obstante todas las transformaciones (fluctuaciones locales) que
sufra. En otras palabras que pese a las diferentes formas de medición de las discontinuidades que
presenta la materia, en el fondo existe una invariancia tal que lo que en esencia es la sustancia última
estaría tipificada por la palabra simetría primordial, o sea la misma condición que reinaba antes del Big
Bang: la Simetría Perfecta; la Simetría Absoluta.

INVARIANCIAS PASAJERAS: Como una consecuencia de esta teoría se desprende que las partículas
elementales no tienen existencia real, pues son apenas manifestaciones instantáneas de campos que
tampoco existen porque son apenas interacciones de fluctuaciones, esto es de invariancias pasajeras; y
se desprende que el vacío en que parece producirse estas fluctuaciones, estas transformaciones,
tampoco es tal vacío sino un escenario en el que el tiempo no existe como entidad independiente;
tampoco el espacio existe como entidad independiente, pues ambos, en este nivel de lo infinitamente
pequeño son únicamente proyecciones, datos, ligados a los campos fundamentales que como se ha
dicho tampoco existen como entes reales.

REALIDAD: De esa nada, sin embargo nacen las partículas virtuales (cuantones) que son medibles y
cuyos efectos, conforme se avanzan de lo infinitamente pequeño a lo grande (¿e infinitamente grande?)
son también medibles puesto que afectan nuestros sentidos y convivimos con los resultados de esa
nada materializada en efectos. Esa nada que son los campos cuánticos serían, a la vez un conglomerado
infinito de datos, de información, constituyendo, por lo tanto una red de información que al cruzarse,
entrelazarse, modificarse en toda especie de formas, planos y períodos darían como resultado lo real
observable y medible.

INTELIGENCIA: Si por información se entiende un conjunto de datos y éstos no tienen ningún asiento
real, el campo cuántico sería, en última instancia la resultante de una forma de manifestación de la
inteligencia; la inteligencia pura y el Universo la materialización de un pensamiento. Y al descomponer
la materialización por divisiones sucesivas, se lleva a la simetría absoluta que subyace en lo profundo e
íntimo de lo creado; esto es, se llega a la perfección, que es la manifestación de la inteligencia pura, y
esta inteligencia es, a su vez, la concreción de un pensamiento; con lo que el Universo sería tan sólo
materia pensada.

MICRO - MACRO: Pero si bien es cierto dentro de la Teoría Cuántica Relativista de los Campos es
posible tener una idea de que es un campo cuántico, aún queda unas preguntas por aclarar, antes de
volver a la interrogante inicial : ¿Por qué existe el Universo? Esas preguntas serían: ¿Qué es lo que
determina la existencia de partículas elementales en el mundo cuántico? Y, serán extrapolables al
Universo esas funciones de determinación? ¿Y si así es cómo funciona?

En realidad las respuestas a estas preguntas están implícitas en experiencias físicas llevadas a cabo, por
ejemplo en 1801 por el físico inglés Thomas Young, así como en las primeras formulaciones de los
físicos atomistas Dirac, De Broglie, Bohr, Schörodinger, Heisemberg; que más tarde darían origen a dos
tipos de interpretación acerca de los fenómenos que ocurren a niveles subatómicos.

La primera interpretación, es la determinista, seguida por Einstein que se negó - hasta su muerte - a
aceptar la segunda interpretación que fue calificada de metafísica y esotérica, por decir lo menos. La
segunda interpretación, no determinista se debe a la denominada Escuela de Copenhague y desde la
formulación de sus postulados básicos ha creado como preocupación que introduce el concepto de lo
real no determinable a nivel micro y de la extrapolación de ese extraño concepto de realidad al nivel
macro se obtiene la impotencia de hacer ciencia.

COMPROBACIÓN EMPÍRICA: La segunda escuela es la que ha dominado el quehacer y el pensamiento


de los físicos atomistas y de ella se derivan estas observaciones que resultan de la comprobación
empírica:

Señalar que una partícula elemental tiene asiento en un determinado lugar del espacio carece de
sentido.
La partícula sólo existe con la forma de un objeto o ente puntual definido en el tiempo y el espacio
cuando es observada.
La observación sólo puede hacerse para alguna de sus características mediante las cuales puede
manifestarse, pero no para todas a la vez.

EMPATÍA: Lo anterior obliga arribar a la conclusión que cuando una partícula o más precisamente una
onda de probabilidad no es observada conserva abiertas todas sus opciones de comportamiento;
cuando se la observa en una experiencia precisa la onda de probabilidad se “sintoniza” con el
observador. Expresado de otra manera parece que la onda de probabilidad y el pensamiento
constituyen un acto de empatía y la partícula se determina como tal en ese momento, pues antes no
existe, salvo como información en potencia. El mundo cuántico no está determinado, sino que se
determina a cada instante que se hace un proceso de observación.

EXTRAPOLACIÓN: En una extrapolación de estas realidades observadas y cuantificadas, es posible hacer


planteamientos como los siguientes:
No sólo el mundo cuántico, sino todo cuanto existe, esto es Universo mismo no está determinado, sino
que se encuentra en función de probabilidad y se determina a cada instante, cuando la conciencia
humana interactúa con él.
Si el Universo no está determinado sino que es determinable entonces el hombre en uso de su libre
albedrío determina el Universo a cada instante.

PLURALIDAD DE UNIVERSOS: Si el Universo no está determinado sino que se determina en un


momento dado esto plantea la probabilidad no de especulación de ciencia ficción, sino nacida de la
misma física cuántica acerca de la existencia de Universos probables, también llamados Universos
Fantasmas, o Universos Divergentes o Universos Paralelos, según sea las características de las
propuestas provenientes de los físicos que combinan las leyes relativistas y las características del mundo
de las partículas.
Por supuesto que en la tesis de la Escuela de Copenhague la existencia de otros mundos es sólo virtual;
pero no así en la explicación de los Universos Paralelos, altamente especulativa debida al físico Hugh
Everett (1957) e incluso apoyada por otros físicos entre ellos Bryce De Witt, John Wheeler (de gran
reputación como físico cuántico - relativista), para quienes, en efecto tales Universos paralelos no son
virtuales, sino que tienen existencia real

DETERMINISMO: De esta situación se deriva una consecuencia paradójica (la física relativista y la
cuántica está precisamente llena de paradojas ) el acto de observación y la toma de conciencia que ello
implica no sólo modifican la función de onda (la probabilidad), sino que más aún: la determinan, lo que
implicaría la primacía de la conciencia por sobre la materia. Por último cabe señalar que si el Universo
no se determina a cada instante, al hacerlo por medio del acto de observación del observador, de
inmediato las otras funciones de onda se derrumban, quedando en consecuencia sólo una interacción
posible que es la que se materializa, es captada y cuantificada. Ahora bien, en un acto de extrapolación
de esta explicación científica es dable afirmar que para todo el Universo existiría un sólo observador
posible que lo determina al pensarlo, derrumbando así todas las otras probables funciones de onda.

DIOS: Este observador universal sólo es posible pensarlo precisamente como el Creador del Universo
( DIOS ), toda vez que sólo este Creador tiene esa posibilidad para materializar así los epifenómenos
sobre los cuales descansa nuestra noción del Universo. Este Creador, tiene además la posibilidad de dar
más y más campo al libre albedrío del hombre al irnos abriendo espacios para la interacción de nuestra
mente con la inteligencia sobre la que descansan todas las estructuras que poco a poco vamos
descubriendo, lo que a su vez permite el perfeccionamiento del conocimiento y por lo tanto la
evolución hacia formas cada vez más conscientes, más inteligentes, más perfectas, más cercanas al
concepto de Simetría Absoluta que Theilhard de Chardin visualizó como Omega, (hacia la cual todo se
dirige) y que es la misma Simetría Perfecta que llamó Alfa (de la que todo viene).

UNO - MÚLTIPLE: Pero si el hombre está hecho - como es en efecto - de la misma materia
(evolucionada claro está) que la que eclosionó en el Big Bang y fue producto de la quiebra de la
Simetría Perfecta o Absoluta, y la materia en su proceso de evolución accede cada vez más al
conocimiento de lo último, que es lo primero, resulta entonces que el ser humano es de la misma
esencia que el Omega hacia el cual se dirige la evolución, con lo que resulta que aquel remoto concepto
de la identidad de lo Uno y lo Múltiple, resultarían como en la experiencia obtenida por medio de
hologramas que el Todo contiene a las partes (lo múltiple) y a la vez las partes contienen al Todo.

Precisamente sobre esta situación son reiterativos los planteamientos de los hombres provenientes de
las llamadas “culturas atrasadas” (como sería el caso de los aborígenes de América del Norte, para
recordar el planteamiento del Jefe Seattle al presidente de su país), que incesantemente han reiterado lo
mismo aunque - claro está en sus propios códigos lingüísticos, en sus propias “meta lenguas” y bajo sus
propias “meta teorías”.

Pero llegado el momento actual convergen en la nueva visión ecológica que cubre a la Tierra, la
restauración de esas verdades primitivas, pero primordiales y de gran actualidad ahora que la física
cuántica abre una posibilidad real de terminar el enfrentamiento entre Ciencia y Fe.
En consecuencia veamos ahora si es posible volver a plantear la pregunta que hemos venido
postergando.

¿POR QUÉ HIZO DIOS EL UNIVERSO? Si se recurre a la ciencia no hay respuestas y es obvio. Pero
tampoco la respuesta la tienen las religiones y como mi búsqueda se reduce al Cristianismo , solo
puedo usar como asidero en Génesis la orden de Dios al ser humano de que la Tierra es para ser
dominada y poblada, pero es obvio que la Tierra no agota al Universo ni mucho menos.Debe buscarse
por los recodos de las explicaciones que la ciencia no recorre y es útil para que en este caso el lector
encuentre su propia explicación reflexionando que si el destino final del Universo no lo determina el
hombre - no obstante que pueda asomarse al conocimiento del propio Universo - la única manera de
intuir la respuesta es partir de la idea de que el Creador no necesita de rezos ni reconocimientos por su
obra, los urge el hambre para concienciarse acerca de su Creador y de aquí extrapolar pensamientos
acerca de sus atributos. En esa línea el ser humano goza de libre albedrío y en su escogencia está
implícita la libertad para llegar a la respuesta que más cuadre a su razón, con lo que ipso - facto se
coloca en el campo de las probabilidades, no de las certezas. O si escoge el camino de la fe, no tiene
probabilidades, porque también ipso - facto llega a la certeza. Como se nota no hemos podido dar con
la respuesta. Continuemos buscando.

PROBABILIDAD: El concepto de probabilidad se utiliza tanto en las relaciones determinadas y limitadas


que se dan en la física clásica, como en relaciones a nivel subatómico con la diferencia que en este nivel
se pueden presentar dos tipos de relaciones:
a) aquellas que son correlaciones de sucesos aislados en el espacio, conectadas por medio de señales y
sucesos que se comportan clásicamente y guardan separaciones normales en el espacio
b) aquellas que son ilimitadas e instantáneas, que no pueden predecirse matemáticamente y en las que
hay una interacción con todo el conjunto del Universo, lo que dificulta separar las partes, porque no hay
posibilidad de distinguir donde comienza y donde termina la conrrectividad entre dos partículas o entre
una partícula dada y el Todo (Universo).

CAUSA - EFECTO: Como esta dificultad implica admitir variables ocultas o misteriosas, cuando Bohn
postuló sus planteamientos de probabilidades, Podolsky Einstein se negó a admitirlos y la experiencia
EPR (Einstein - Podolsky - Rosen) fue un intento einsteniano de demostrar la imposibilidad de que
existiese relación entre dos partículas ubicadas una en un extremo y otra en el otro extremo del
Universo. Precisamente aunque Einstein admitió la realidad de esta desconcertante situación - avalada
por la tesis de Bohn - creyó que tarde o temprano se encontraría una relación de carácter determinista
(causa - efecto) en este comportamiento de dos partículas, que a su juicio debían - necesariamente - ser
independientes una de la otra en el espacio.

INDIVISIBILIDAD: En 1976 el físico inglés John Bell formuló un teorema en relación con la experiencia
EPR y en este señalaría que la existencia de variables ocultas no está en concordancia con los
pronósticos derivados de la estadística cuántica; de esta manera Bell puso fin póstumo a la polémica
Einstein - Bohn y demostraría (gracias a la comprobación experimental debida a Alain Aspect, físico
francés en 1982) que el concepto físico clásico (cartesiano - newtoniano) de una realidad que se
presenta como partes aisladas enlazadas por conexiones limitadas no es compatible con la teoría
cuántica y sacaría como conclusión genérica que “El Universo es anárquico e indivisible” (De paso esta
disputa la ganó la tesis de Bohr y la perdió la tesis de Einstein). Aspect del Instituto de Óptica Teórica de
Orsay informaría de un experimento con fotones que violaba las desigualdades de John Bell. Estas
desigualdades pretendían demostrar una serie de teorías locales de variables ocultas que eran
incompatibles con la mecánica cuántica. Venían a decir que lo que ocurre en un determinado lugar y
tiempo sólo podía depender de cosas próximas en el espacio y en el tiempo .

Con ese experimento se confirmaría la no localidad del universo al nivel de las partículas subatómicas.
Estas parecen intercambiar información a velocidades superiores a la luz a través de conexiones
“misteriosas”. Aunque, realmente lo que ocurre es que dos fotones emitidos al mismo tiempo ( en su
experimento) deben considerarse como un único estado cuántico, como una realidad expresada por
una única función de onda.
Por ello deduciría que las conexiones ilimitadas y de comportamiento probabilístico encierran un nuevo
concepto de causalidad que representa en todos los órdenes de la vida, porque así como en la física
clásica las partes determinan el comportamiento del Todo, en la física cuántica es el Todo el que
determinaría el comportamiento de las partes y lo que es más importante es que la conciencia del
observador interviene en el proceso y condiciona entonces los resultados, por lo que la realidad, la
interconectividad de sucesos aparentemente aislados, su ubicación en el tiempo y su relación espacial
es tan sólo mecanismos ilusorios; idealizaciones cuyo valor no es absoluto, sino meramente
aproximativo.

CONECTIVIDAD: La experiencia EPR consiste en lo siguiente: Elegidos dos electrones aislados se toma
nota de su eje de rotación, de manera que uno rote hacia la derecha y el otro hacia la izquierda, para
dar como suma rotacional cero. Se procede a separar ambos electrones a distancias considerables y se
toma nota que su eje de rotación inicial no ha variado.
Luego se varía el eje de rotación de un electrón y se observa que el otro se modifica instantáneamente,
como si estuviesen conectados y comunicados a velocidad de la luz o aún superluminar.
El experimentador es libre de seleccionar el eje de rotación del primer electrón y tales ejes que en física
cuántica son apenas tendencias a rotar, pero que una vez determinado se comportará conforme el
experimentador desea.
para explicarse por qué el segundo electrón “adivina” el cambio sufrido por el primero y archiva su
rotación para dar, un cambio y suma 0.

Para Einstein –quien reiteramos-pierde su posición con el experimento efectuado por Aspect debía
existir una relación determinista: causa - efecto; para Bohn existía como explicación la interconectividad
de ambas partículas, independientemente de la distancia y del tiempo. Cuando Bell demuestra que la
teoría de Bohr y de Schorodinger que la apoyó está en relación con las leyes cuánticas el concepto
mecánico: causa - efecto, es desplazado por el concepto de causalidad estadística, que hace más justa
la descripción de lo que es la realidad en el mundo cuántico, por lo que la denominación de “mecánica
cuántica” es hasta cierto punto contradictorias porque la primera alude a relaciones causa - efecto
normales y la segunda a lo contrario.

Por otra parte si el comportamiento de ambas partículas son la resultante del arbitrio humano: la
conciencia del experimentador es la que pone las condiciones para que el experimento se lleve a cabo y
así - como en otra experiencia, por ejemplo, la del físico inglés Thomas Young en 1836 , las partículas se
comportarán como tales o como ondas, a voluntad, aunque antes y después vuelvan a estar apenas en
función de “Probabilidad de estar”.
CONCIENCIA: El hecho que la conciencia intervenga ha creado - por supuesto grandes polémicas y por
una parte entre quienes ven una situación tajante entre cerebro y mente y por la otra parte de quienes
expresan (caso del físico inglés Paul Davies) que la situación no reviste características morales y de
quienes caso del físico inglés David Bohn, para quien si las experiencias están condicionadas por la
mente, entonces los conceptos, las ideas, los planteamientos y por ende los valores, determinan los
experimentos.

Otra consecuencia inmediata que se produce como resultado de estas interpretaciones es que el
tiempo y el espacio son en efecto artificios resultantes de conceptos relativos que juegan un rol
subjetivo, no objetivo, como partes de una visión que se estructura por el lenguaje que se utiliza para
describir las percepciones fenoménicas.

AUTOCONSISTENCIA: Por tanto la materia que observamos es colocada por nuestra mente dentro de
parámetros que constituyen modelos, pero tales modelos no existen en realidad, porque son
figuraciones mentales coordenadas entre sí, para darle coherencia a lo que se observa. Al efecto, el
físico teórico norteamericano de la Universidad de Berkeley, Geoffrey F. Chew ha formulado la teoría
llamada “bootstrap” ( o Teoría S que literalmente significa “alzarse sobre los talones”) que busca deducir
todas las propiedades de las partículas y sus diversas interacciones de la auto consistencia, esto es de
características intrínsecas, con lo que todo lo existente en la naturaleza estaría integrado por partículas y
sistemas de relación auto contenidas, cerrados sobre sí mismos, en donde ninguno es más importante
que el otro, pero son interdependientes e inter funcionales y este orden correlativo es el que permite su
existencia.
Chew va más allá de la "ecuación fundamental" de Heisenberg, formula y sistematiza una teoría global
de las partículas subatómicas y desechan la idea de los ladrillos fundamentales de la materia. También,
haciendo inevitable la idea de que la metáfora del conocimiento ya no es la del "edificio" o la "realidad
objetiva" del paradigma cartesiano; la nueva metáfora del conocimiento es como una red sin cimientos
firmes, es una aproximación a la realidad y no una descripción exacta como se había afirmado por la
ciencia durante mucho tiempo. En consecuencia, si la naturaleza no puede ser reducida a entidades
fundamentales, como bloques de materia, sino que debe entenderse plenamente a través de la
autoconsistencia de sus elementos, esto va a significar que no acepta ninguna entidad fundamental en
absoluto.
O sea: ninguna constante, ley, ni ecuación fundamental . Por lo tanto el Universo se ve como una red
dinámica de sucesos interrelacionados, ninguna de las propiedades de cualquier parte de dicha red es
fundamental, todas se desprenden de propiedades de otras partes y la consistencia global de sus
interrelaciones, determina la estructura de la totalidad de la red.

ORDEN IMPLÍCITO: Otro de los que postulan formulaciones acerca de la eventual existencia de un
Universo Holográfico ( el todo recuerda a cada parte y cada parte recuerda al todo es el físico de
cuerdas Edward Witten). Mas o menos en la misma línea de pensamiento que se abre con las
formulaciones de Chew, para el año de 1971 el físico norteamericano , que enseñó en varias
universidades de EUA, Israel e Inglaterra , David Bohm este orden implícito o orden implicado tiene una
naturaleza de carácter informacional a un nivel profundo, sobre la que descansa, en definitiva las reglas
de la relación de la materia y se deriva la interacción con la mente para reproducir realidades como en
los “hologramas” (pero no en su condición estática sino en vibración/constante), que denomina “holo -
movimiento” y en que cada una de las partes refleja el Todo.
De aquí Bohm extrapolaría su idea de que mente y materia son interdependientes y correlativas, como
proyecciones de un orden más elevado (Superior), que trasciende la materia y la conciencia. Así de la
teorías de la Matriz S de Chew y la teoría del holo movimiento del propio Bohm nace la necesidad de
considerar la conciencia como una variable - hasta ahora no considerada seriamente - que interviene en
los procesos físicos; pero más aún, que es la que en esencia determina al Universo, en el que no se dan
dos órdenes distintos de realidad, sino una única totalidad implicado-explicada. El orden explicado es
parte constitutiva del orden implicado, que le da razón de ser. Toda la realidad explicado-implicada es la
existencia promovida por un mar de energía en incesante actividad, un holo movimiento causal que
todo lo genera y sustenta. Este movimiento holístico incluye también una dimensión psíquica de la
materia. Es un todo dialéctico de energía y mente que causa el orden explicado físico y psíquico. Aquí,
en esta visión , cuasi mística, en buena parte debido a su relación con el pensador hindú Krisnamurti , si
bien hay una posibilidad de nuevo acercamiento a nuestra pregunta es tema que aun se queda en ese
dintel.

NUEVOS CÁNONES: Esta consideración hace necesario recordar que las ciencias exactas - entre ellas la
física y la cosmología, aunque nacen entre los siglos XVII - XVIII en Occidente, en realidad se acomodan
al pensamiento universal porque se corresponden con categorías que la mente humana puede elaborar
por igual, con independencia de diferencias culturales y lingüísticas. Lo que ahora sucede es que - ante
el agotamiento de categorías para entender y expresar los sorprendentes hallazgos de la física cuántica
se están incorporando categorías de análisis y conceptos tomados de otras latitudes; aunque
dependerá de la serenidad y objetividad con que tales categorías sean tratadas, que la ciencia pueda
utilizar esos conceptos, sin caer en posiciones poco serias o pseudocientíficas.

SINGULARIDAD: Por otra parte se requiere un gran esfuerzo para entender cómo nace el Universo de
una singularidad cuántica, o más correctamente de una transición de campo (según la fórmula de Hoyle
Narlikar expuesta en 1984), si para que ésta se dé en el área de las posibilidades obedece a un número
extraordinariamente elevado que es de 1 en relación con 10 elevado a 10 multiplicado por 80 años, en
donde el azar queda descartado, para convertir el fenómeno en un evento ocasionado por una causa
pensante. Esta otra puerta que se abre para volver a plantear la pregunta: ¿Por qué Dios hizo el
Universo? Se queda de nuevo en su dintel, aunque nos acerca a una conclusión: si el azar está
descartado y el Universo-como ya hemos visto anteriormente-no es un simple amasijo de “accidentes”
sino un Todo con interconexiones explicitas y no explicitas , es porque tiene una causa que los teólogos
suelen llamar “Causa Primaria” o “ Causa Eficiente”, es decir una causa superior: Dios.

PSICOLOGÍA PROFUNDA: La cosmología que se inicia en el Tercer Milenio debe unir a los esfuerzos
experimentales una línea que busque en el área de la psicología profunda las interrelaciones cerebro -
mente - conciencia - realidad y logre entender cómo se produce el proceso que transforma
cerebralmente la materia que captan los sentidos humanos como epifenómenos sólidos, estables,
quietos y no como ondas, vibraciones inestables, fugaces. Asimismo entender cómo es que se da la
interrelación entre los diversos sistemas y niveles de información subyacentes en la materia, con las
neuronas y otras estructuras cerebrales encargadas de interactuar con ese sistema de información. En
fin, que esto requiere de una nueva visión, de una ruptura con el pasado; requiere, en suma de la
eclosión de un nuevo paradigma, a la altura de las rupturas que ocasionaron en su momento; la teoría
de la relatividad y las tesis cuánticas de la incertidumbre, la complementariedad y la probabilidad.

EVOLUCION DE LA CONCIENCIA: El concepto clásico de mente, como el resultado de mecanismos y


productos propios de la actividad cerebral, en su interpretación del entorno, ha cedido paso a una
concepción que se debe a la teoría de sistemas, en donde el concepto mente es el resultado de la
interacción dinámica entre los organismos auto organizados y el contexto y que en el caso del ser
humano muestra varios estadíos evolutivos. La evolución de la conciencia es el resultado del desarrollo
de la mente, definida ésta - según el antropólogo,lingüista y comunicador el británico-norteamericano
Gregory Bateson en 1971- como la interacción de sistemas de información visibles en tres
epifenómenos: pensamiento, aprendizaje, memoria, que estarían presentes en los organismos vivientes,
pero no sólo en ellos, sino también en las sociedades y en los ecosistemas.

De acuerdo con esta teoría la mente es el resultado de un proceso de compleficación de la materia


anterior a la existencia del cerebro y el sistema nervioso superior, en la que la vida no es una sustancia o
una fuerza y la mente no es una entidad que establece una relación con la materia; sino todo es un
proceso en que la mente es un modelo de organización para entablar relaciones dinámicas y por ello la
materia y la mente no son categorías diferentes y opuestas, sino aspectos diferenciados de un mismo
proceso universal de compleficación de la materia

El concepto de función mental referida al ser humano es la dinámica de la auto - organización de todas
las funciones, esto, al ir más allá de tales funciones se convierte en una meta función que se
descompone en las diferentes actividades mentales. Bateson visualiza las actividades mentales en el ser
humano, por niveles:
a) la metabólica, que se relaciona con las células, tejidos y órganos;
b) la “neural” que se descompone en varios subniveles correspondientes al desarrollo evolutivo del
sistema cerebro - espinal - neuronal;
c) la “relacional” (o conciencia expandida) que permite al ser humano ubicarse en una mente más
vasta .Esto es la mente cósmica o universal.
La mente humana operaría- siguiendo a este autor- según tres mecanismos de relación mediante:
a) la percepción sensorial;
b) la percepción extrasensorial
c) la interpretación psicológica que parece acompañar a las dos primeras (cuya separación es tan sólo
formalista).
A su vez los aspectos fisiológicos de la percepción están íntimamente relacionados con los aspectos
psicológicos de la interpretación, de manera que el “mundo exterior” está en estrecha relación con el
contexto (o mundo exterior).
Las respuestas y las interpretaciones respecto al ambiente y los sucesos están determinados por la
matriz mental, que es - a su vez - la resultante del complejo entre cruce de experiencias, necesidades,
intereses, aspiraciones, motivaciones archivadas en la memoria, pero actualizadas según el impacto del
momento.

El ser humano posee conciencia:


a) de sus sensaciones,
y b) conciencia de ser consciente y estas dos realidades abstractas permiten formular juicios, esto es
valorar simbólicamente el mundo interior y exterior; describir objetos (reales) y conceptos (abstractos) y
dejar todo ello para su mundo interior o comunicarlo. Si decide comunicarlo puede utilizar el lenguaje
simbólico estructurado en diversas categorías, o el lenguaje figurado o aún el lenguaje corporal o
posicional.
Al tener conciencia de sí mismo y conciencia de su entorno el ser humano puede recordar el pasado,
vivir el presente y presentir el futuro, pero no sólo como individuo, también como parte de una
sociedad, de un ecosistema y al respecto Carl Jung planteó el concepto de mente colectiva y de
conciencia colectiva, al igual que inconsciente colectivo, que interactùan con cada ser humano; por lo
que en extrapolación de estas categorías es posible formular que hay una mente planetaria y una
conciencia planetaria, como lo plantea la tesis Gaia de Lovelock y Margulis y una mente cósmica y una
conciencia cósmica, como lo plantean las teorías orientalistas desde los antiguos escritos védicos y
taoistas, o como ya lo empiezan a plantear algunos científicos occidentales

CONCIENCIA EXPANDIDA: Hay dos formas de comunicación entre la mente individual y la mente
cósmica: Dentro de la concepción orientalista el acceso a esa conciencia primigenia se logra por medio
de la expansión de la conciencia personal para conectarse con la conciencia cósmica (el Uno se funde
en el Todo).
Dentro de la concepción occidental el planteamiento proviene del campo de la psicología transpersonal
cuyas formulaciones se deben al psicólogo norteamericano que muy tempranamente ( 1941)
comenzaba a plantearse ideas sobre el conocimiento que el llamaría “piramidal” . Abraham Maslow, tira
así un puente que trata de unir la concepción mística con la experiencia científica occidental, porque
postula que mediante alteraciones de la conciencia la mente de una persona trasciende ese plano para
entrar en contacto con la realidad trans personal (esto con el ambiente).
En esa línea de unificación de conceptos aún bastante distanciadas trabajan grupos de neurofisiólogos
buscando la unificación de las tres partes constitutivas del cerebro que están dotadas de inteligencia y
subjetividad propias y grupos muy diversos (desde físicos hasta pseudocientíficos, desde religiosos de
diversas denominaciones cristianas, y hasta filósofos orientalistas y místicos) que buscan la
simplificación de las experiencias personales para hacerlas accesibles al gran público, como medio de
convencerles de la verdad de sus experiencias y por ende de sus aseveraciones.

Por tanto cabe advertir que uno de los problemas con lo que suele tropezar todos los intentos
racionales del conocimiento se solucionan con el uso que se le dé al avance y a la profundización del
conocimiento nuevo adquirido. Esto es la libertad humana para obrar, permite escoger entre el Bien y el
Mal, que son categorías absolutas para algunos y relativas para otros; y en el caso de la búsqueda de
integración bajo estos nuevos postulados se han generado toda suerte de especulaciones y
desviaciones cuyos fines se apartan de la intención legítima y moral de buscar la explicación a la
pregunta para la cual buscamos respuesta : ¿ Por qué hizo Dios el Universo ?: , pero vemos que ,aunque
se nos ha abierto otra puerta , aun nos quedamos en el dintel.

A juicio del físico austriaco-norteamericano Fritjoh Capra, profesor de física en Austria, Francia y EUA
,quien es autor de un célebre libro titulado :” El Tao de la Fisica” de los años 80 , los planteamientos de
Theilhard de Chardin en torno al sentido de la vida y su complejidad ascendente de los pueblos
primitivos en realidad son anticipos del moderno enfoque de una visión integral de la vida (captada por
el cerebro) que si bien nace de la física cuántica, tenían sus antecedentes en planteamientos
antiquísimos debidos a la filosofía de la vida. Y es que la ciencia moderna plantea que los organismos
están determinados por procesos y no por estructuras toda vez que éstas no funcionan según líneas de
causa - efecto, sino que siguen patrones que denotan un alto grado de plasticidad y flexibilidad internas
que permite a los organismos a adaptarse a nuevas circunstancias, mediante procesos y flujos de
información retroactivos de creciente complejidad, que en conjunto se ha denominado auto
organización, que se manifiesta en dos procesos dinámicos e interrelacionados entre sí y entre sí y el
entorno.

Estos dos procesos se conocen como la auto renovación, que es la capacidad para renovar y recuperar
continuamente sus componentes conservando la integridad de su estructura general y la auto
trascendencia, que es la capacidad de superar, de forma creativa, las limitaciones de carácter físico y las
de orden mental en el aprendizaje, desarrollo y evolución .
Desde la perspectiva de la teoría de sistemas todas estas interrelaciones entre los sistemas vivos y el
entorno, permite plantear el concepto de libertad dentro de un nuevo enfoque: mientras mayor sea la
dependencia del organismos respecto al entorno, menor es su libertad y, en el caso del ser humano la
libertad es cada vez mayor, puesto que - a lo largo de su evolución se ha independizando más y más del
ambiente externo. Esa libertad le permite hoy día escoger ente dos posiciones que cada día se van
acercando mas y mas: las explicaciones científicas y las visiones de los místicos. Al unirse ambas, porque
son puntas de una misma cuerda , es posible lograr el conocimiento absoluto. Como vemos aquí se
abre otra puerta, que vuelve a dejarnos en el mismo dintel.
CONSECUENCIAS

Si el Universo no está determinado, sino que es determinable y si la mente creadora ( Dios ) ha


permitido llegar a su conocimiento progresivo, conforme la mente humana se iba preparando para ello,
la pregunta de ¿ Por qué hizo Dios el Universo ?, puede seguir postergándose buscando más y más
argumentos, hasta agotarlos.
La historia registra muchos, muchísimos intentos desde el campo místico, filósofo esotérico y teológico.

Desde el campo de la ciencia no se ha intentado, porque no entra - es obvio - dentro de sus


posibilidades.

De manera que el lector puede hacer su escogencia, para eso tiene plena libertad, buscando su propia
verdad y esa es precisamente la respuesta a la pregunta.

Para el autor de esta obra, Dios hizo el Universo, que los cosmólogos tratan de descifrar primero con
modelos al alcance de nuestro entendimiento y luego enfundar en meta teorías y metalenguajes de
difícil comprensión y que los teólogos tratan de explicarnos con planteamientos fundamentalistas que
poco se han abierto a nuevas concepciones , aferrados a
posiciones que no satisfacen las inquietudes postmodernas.

En consecuencia la búsqueda debe seguir en plena libertad, porque, al igual que Conciencia y Universo
son un ente único e indivisible, la búsqueda, pero sobre todo el encuentro de esa verdad genera la
libertad de conocer la Verdad.
Etiquetas: Ciencia y Fe, Historia Astronomia, Historia Cosmogonias, Historia Cosmologia, Inicio Universo

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