Sus relaciones
CAPÍTULO V
LA SUPREMACÍA Y EL CONTROL DE LA CONSTITUCIÓN
La jerarquía normativa
En efecto, el principio de la supremacía llega a la conclusión de que las normas y los actos
infractorios de la constitución no valen, o lo que es lo mismo, que son inconstitucionales o
anticonstitucionales. Sin embargo, nos quedaríamos a mitad de camino si después de arribar a
esa conclusión, no estableciéramos un remedio para defender y restaurar la supremacía
constitucional violada. Por eso, la doctrina de la supremacía pasa de inmediato a forjar el
control o la revisión constitucionales.
El leading case “Marbury c/Madison”, del año 1803, ha sido el antecedente inmediato en
Estados Unidos de la doctrina de la supremacía y del control constitucionales, y con su
ejemplaridad suscitó seguimiento o imitación dentro y fuera de los Estados Unidos. De allí se
trasplantó a nuestro derecho.
12. — Hay doctrinas que dentro de la misma constitución efectúan una gradación o un
escalonamiento de sus contenidos en planos subordinantes y planos subordinados. Por
ejemplo, cuando a los principios y valores que contiene la constitución se los erige por encima
del resto de sus normas. Se habla, así, de relaciones intrajerárquicas. El resultado es éste: si
dentro de la constitución suprema hay cláusulas o normas que prevalecen sobre otras de su
mismo articulado, estas últimas son inconstitucionales (aunque formen parte de la
constitución) cuando infringen a las superiores. Es verdad que en nuestra constitución
reconocemos que, además de simples normas, hay, implícitamente, principios y valores (ver
cap. IV), pero tenemos hasta hoy por cierto que todos sus contenidos —en cuanto normas—
comparten la misma jerarquía suprema o, en otros términos, que dentro de la constitución no
existe un orden jerárquico de planos diferentes, por lo que no creemos que dentro de la
misma constitución una norma de ella pueda ser inconstitucional por incompatibilidad o
contradicción con algún principio o algún valor contenidos en el conjunto normativo de la
constitución.
14. — Si ahora pasamos a las constituciones provinciales, es evidente e indudable que, dentro
de nuestra estructura federal, pueden contener normas inconstitucionales cuando éstas
resultan lesivas de las pautas que desde la constitución federal se les impone a los
ordenamientos provinciales. (El tema de la relación de subordinación en virtud de la cual
acontecen tales eventuales incons-titucionalidades nos ocupará al explicar el federalismo.)
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