DOCENTE:
ETICA DOCENTE EN LA PRÁCTICA
ETICA PROFESIONAL
Dr. Francisco Ralón Afre
Universidad del Valle de Guatemala Altiplano
1. Introducción
Es preciso no olvidar que la ética del profesor debe expresar, profundo respeto a la
formación de nuevas generaciones, herederas de un presente estructurado sobre la
base de un pasado cultural que no puede ser omitido sin grave perjuicio para la
colectividad.
Contexto de las Relaciones Éticas de un
Docente
1) Relaciones del docente con la sociedad
El éxito docente depende en gran parte, del apoyo que le preste el medio social. Pero
la comunidad va a depender del grado de confianza que le inspire el profesor; confianza
ésta derivada de su conducta como profesional y como ciudadano.
El docente es un ciudadano “especial” puesto que está bajo una observación constante
en lo que respecta a su comportamiento total. Sus pasos, actos y opiniones son
continuamente observador por el medio social.
Todas sus acciones, públicas y privadas, tienen repercusión social, pues van a reflejarse
en la confianza que la sociedad deposita en él. Se le asemeja a un sacerdote, pues
ambos son permanentemente focalizados y criticados y de ambos se exige una
conducta ejemplar.
El docente es el continuador directo de los padres en la educación de los hijos. Tiene
pues, compromisos morales para con la familia.
Es el representante de la sociedad en la educación, pues le confía seres muy jóvenes
para que los prepare técnica e ideológicamente. No puede traicionarla. Hasta su
presentación personal es importante como “modelo”
2) Relaciones del Docente con la Escuela
De la forma de actuar del profesor dependerán las buenas relaciones con los
alumnos. La comprensión del alumno es fundamental para que se establezcan
lazos de simpatía y de amistad con el profesor, los cuales son importantes para que
sean alcanzados los objetivos de la educación.
El docente debe cultivar una actitud de justicia y trato igualitario con sus alumnos,
independientemente de las condiciones sociales y económicas de los mismos.
Hay docentes que son especialistas en pretextos para no dictar sus clases.
Están siempre dispuestos a hablar de cualquier cosa, o hacer otras cosas
con tal de escapar del tema del día.
No es recomendable que el docente trate de “sensibilizar” a sus alumnos
contándoles “en confianza” sus propias desventuras.
El tiempo disponible debe planificarse y aprovecharse en lo que conviene.
EL TIEMPO DEL ALUMNO EN LA ESCUELA DEBE SER PRODUCTIVO 100%.
Todas las actividades deben fundamentarse en éste principio.
7. Nunca ridiculizar a los alumnos