Vida y Enseñanza de Jesús

Primer informe de Lectura

Dios con nosotros

El amor de Dios es inmensurable, podemos verlo a través de la creación, donde cada

obra creada tiene un propósito y no solamente vive para sí. A través de Jesús, notamos
que la gloria de Dios está basada en dar, ya que todo lo que recibió del Padre lo entregó.
Esto se conoce como la ley de la vida, un amor desinteresado que busca el bien de otros
y tiene su fuente en el corazón de Dios. A raíz del egoísmo esta ley fue transgredida
cuando Lucifer quiso ser el primero en el cielo y trató de apartar a los ángeles de Dios.

Dios no tenía pensado que el pecado existiera, sin embargo tenía previsión de su
existencia. Tanto amó Dios al mundo que entregó a su único hijo para salvar a la
humanidad del pecado y mostrar la luz de su amor por medio de él. La profecía fue
cumplida y Emanuel fue su nombre, el cual significa Dios con nosotros. Él fue el
mediador entre Dios y la humanidad, vino a enseñarnos el camino correcto, y aun
siendo tentado por el enemigo, nos enseñó que es posible seguir los mandatos de su
padre por medio de su ejemplo de obediencia.

Nuestro mundo lleno de pecado será honrado delante de todos los demás mundos
creados por Dios. Aquí fue donde el hijo de Dios vivió, sufrió y murió en forma humana,
donde todas las cosas serán creadas nuevas, y donde Dios morará con nosotros.

El pueblo elegido

Dios eligió al pueblo de Israel para que guardaran entre los hombres el conocimiento
de su ley. Dentro de los planes de Dios estaba que Israel fuera la fuente de salvación
para el mundo y que fueran honrados y ensalzados sobre todas las naciones.
Lamentablemente los Israelitas perdieron ese rumbo y se comenzaron a interesar en
cosas paganas. Por esa infidelidad, el propósito de Dios no pudo realizarse y pasaron
adversidades y humillación.

Al haber sido llevados a Babilonia en cautiverio, los israelitas fueron curados de la

adoración idolatra a imágenes gracias a la luz de la verdad de Dios que se difundió entre
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ellos. Sabían que para su prosperidad, debían obedecer la ley de Dios. Esta obediencia
llego a ser influenciada por el egoísmo, para exaltarse como pueblo y no para glorificar
a Dios. Se volvieron tan rígidos que realmente no manifestaban el amor de Dios en sus
corazones, sino que medían su santidad por medio de la multitud de ceremonias. Era
imposible guardar la ley con todas las órdenes impuestas. Lo que el pueblo realmente
quería era ser libres de los romanos.

Satanás estaba feliz al ver lo que había logrado con el pueblo de Israel y pretendía
demostrar que los mandatos de Dios no eran justos, e imposibles de obedecer.

El cumplimiento del tiempo

La venida del Mesías estaba predicha desde los días en el Edén. Fue repetida por los
patriarcas y profetas en el tiempo de Enoc, y aunque lo esperaban pronto, el tiempo de
su venida a la tierra todavía no llegaba en aquel entonces.

Los Israelitas se cansaron de vivir de una manera pagana y anhelaban la existencia

de una religión que llenara su corazón. Los judíos se reunían anualmente en Jerusalén
y al regresar a sus casas, compartían las noticias de la llegada de Jesús. Anhelaban que
llegara el Libertador a dispersar las tinieblas y aclarar la oscuridad en la que se
encontraban. Definitivamente Cristo debía bajar a la tierra para pronunciar palabras
que fueran entendidas claramente y sin ningún problema, ya que la verdad estaba
mezclada con decretos humanos.

El objetivo de Satanás en ese momento era agotar el amor de Dios por la existencia
humana, y desviar la atención de Dios a los hombres, lo estaba logrando. Al pervertir la
fe de los israelitas, Satanás había obtenido su mayor triunfo. Los hombres comenzaban
a adoptar el principio pagano que decreta que el hombre puede ser salvo por sus obras.
Los agentes de satanás estaban anexados con los hombres y en sus cuerpos moraban
demonios.
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En lugar de destruir el mundo que estaba lleno de perversión, maldad, y desafío,

Dios mando a su hijo para rescatarlo, y el amor de Dios se manifestó en favor de los
hombres.

Os ha nacido un salvador

Definitivamente cuando Jesús vino a nacer a la tierra, el ambiente a su alrededor era

hostil y tosco. No estuvo rodeado de lujos ni riquezas mundanales ya que lo que quería
era reflejar el amor y la verdad celestial a quienes les siguieran.

Antes de su llegada, Ángeles bajaron del cielo a Jerusalén con el fin de exponer la
proximidad de la venida de Cristo a los ministros de la casa de Dios. Se divulgaron las
noticias de su venida y su misión, sin embargo el pueblo se mostraba indiferente hacia
la venida del Mesías.

Augusto Cesar fue el elegido para cumplir la profecía de que el hijo de Dios nacería
en Belén, lo hizo al decretar el censo, Ángeles acompañaron a María y José en su viaje
de Nazaret a Belén. Lamentablemente no los reconocieron su propia cuidad y tuvieron
que pasar la noche en búsqueda de un lugar para el nacimiento. El redentor nació en un
refugio donde habitaban bestias. El cielo estaba lleno de fiesta, los ángeles se reunieron
sobre los collados de Belén esperando una señal para compartir las buenas nuevas al
resto de la humanidad.

Ángeles se presentaron ante pastores de ovejas y les anunciaron gozosos la llegada

del Salvador, quien se encontraba postrado sobre un pesebre envuelto en pañales. Les
indicaron a los pastores como encontrarlo. Los pastores viajaron hasta Belén para
encontrar al hijo de Dios acostado en el pesebre.

Es impresionante como Dios cambió su trono al lado de Dios en el cielo por un

pesebre. Aun estando sumergidos en el pecado durante cuatro mil años, Jesús acepto a
la humanidad y vino voluntariamente a morir por nosotros.