EL MITO DE LA ENFERMEDAD
MENTAL
Fernando Gómez Bustamante M.D.
(RAFAEL PAEZ)
Para lograr una mayor claridad en el tema, una
discusión sobre la enfermedad mental debe ir
precedida de una indagación sobre dos conceptos:
enfermedad y mente. Veamos lo primero.
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consultorio en consultorio, quejándose de múltiples obviamente, por la neurología. Muchos psiquiatras
molestias de enfermedades imaginarias. El decidirán seguir siendo médicos y se convertirán eh
“psicótico” no confiesa su maldad o su neurólogos. Otros preferirán convertirse en tutores
incompetencia social, sino que sostiene tercamente (una profesión del futuro propuesta por Torroy), y
que es un enviado de Dios, o que tiene el hígado trabajarán con individuos que tienen problemas en
podrido, etc. la vida, las que constituyen la mayoría de las
personas vistas por los psiquiatras y los psicólogos
c) Una tercera variante es la del individuo que el clínicos.
presenta un comportamiento socialmente
perturbador o inaceptable por lo que es llevado al ¿Qué es la mente? La mente no es un órgano
hospital psiquiátrico, frecuentemente mediante el anatómico, como el hígado o el riñón, por lo cual no
uso de la fuerza o del fraude. Este individuo no puede enfermarse médica y literalmente. La mente
suele asumir el papel de enfermo, sino que es es una metáfora, mediante la cual queremos
condenado psiquiátricamente a padecerlo, iniciando expresar la compleja actividad neuroquímica del
lo que Erving Goffman (1959) llama la carrera moral cerebro. Cuando hablamos de la enfermedad
del paciente mental, la que usualmente conlleva la mental estamos hablando metafóricamente, como
degradación moral, social y política del individuo cuando decimos que la economía “está enferma” o
vituperado como “paciente psiquiátrico” . que el fútbol nacional “está enfermo”. Este uso
metafórico del concepto de enfermedad ha invadido
Una minoría de estos individuos sí están realmente el lenguaje cotidiano y es usado ampliamente por lo
enfermos, pues tienen enfermedades cerebrales medios masivos de comunicación. Incluso una
-tales como la sífilis cerebral, los tumores del lóbulo figura tan brillante como Erich Fromm continúa
frontal, de la región hipocámpicoamigdalina y del aplicando esta Iiteralización de una metáfora en un
tercer ventrículo, la epilepsia del lóbulo temporal, la libro tan reciente como ANATOMIA DE LA
encefalitis crónica y la corea de Huntington-, las DESTRUCTIVIDAD HUMANA (1975), donde afirma
que pueden manifestarse mediante cambios que Hitler era una persona “muy enferma”,
importantes en el comportamiento. Estos pacientes describiéndolo como un “caso clínico” de necrofilia.
constituyen sólo el 5% de los pacientes admitidos
Resumiendo, puede afirmarse que de los individuos vistos por los psiquiatras, aproximadamente un 5%
tiene enfermedades cerebrales comprobadas; aproximadamente un 20% tiene trastornos severos del
comportamiento probablemente debidos a enfermedades cerebrales, las que serán investigadas y tratadas
por los neurólogos; y una inmensa mayoría (más o menos las tres cuartas partes) no tienen ninguna
enfermedad mental, sino problemas en la vida, para los que necesitan ayuda, no médica ni psiquiátrica, sino
moral y educacional. La psiquiatría no es una especialidad médica que se ocupa de las enfermedades
mentales, ya que tales enfermedades no existen, sino una ideología vetusta y poderosa que tiene que ver
con ciertos problemas personales y con ciertos conflictos éticos y sociales. La enfermedad mental es un
mito.
BIBLlOGRAFIA
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revisada de la original de 1961).
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