FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS ESCUELA DE DERECHO
ANÁLISIS LEYES
Participante: Joilymar Ruiz.
V- 24.400.165 Análisis de Leyes
Análisis sobre la ley del estatuto de la función publica
Esta normativa se basa que el estado debe dar respuestas, adecuadas y
oportunas, a la multiplicidad de demandas provenientes de un ambiente caracterizado por la complejidad y el cambio acelerado, lo que requiere de un aparato administrativo ágil y flexible, que responda a tales exigencias y en el cual se dé direccionar bajo este fundamento impartidos en sus artículos debido que la ley regirá las relaciones de empleo público entre los funcionarios públicos y las administraciones públicas nacionales, estatales y municipales. En el cual el objetivo de esta ley es crear el marco regulador que conforme un sistema de incentivos definidos para el funcionario público, con reglas claras de actuación, para que su gestión se oriente a garantizar que la Administración Pública Nacional esté al servicio de los ciudadanos, fundamentada en los principios de honestidad, participación, solidaridad, celeridad, eficacia, eficiencia, transparencia, rendición de cuentas y responsabilidad en el ejercicio de la función pública, con pleno sometimiento a la ley y el derecho. Al respecto también busca promover que el funcionario público se identifique como servidor público, que actúa en función de la acción del estado para llevar a cabo sus fines esenciales y forma parte de una administración pública al servicio de la ciudadanía y crear un régimen que oriente la actuación de los funcionarios públicos hacia una conducta intachable, regida por los códigos de ética y moral administrativa, con el más alto sentido de dedicación y compromiso para la realización de los principios y normas de la constitución. El estatuto de la función pública persigue lograr un adecuado equilibrio entre los intereses de los funcionarios públicos como trabajadores, los derechos y garantías constitucionales de la población y los objetivos de la administración pública como instrumento para el logro de los fines del estado. Teniendo en cuenta que el presidente de la República ejercerán la dirección de la función pública en el poder ejecutivo nacional. Los gobernadores y alcaldes ejercerán la dirección de la función pública en los estados y municipios. En los institutos autónomos, sean estos nacionales, estatales o municipales, la ejercerán sus máximos órganos de dirección y denotando que independientemente de las sanciones previstas en otras leyes aplicables a los funcionarias o funcionarios públicos en razón del desempeño de sus cargos, está quedaran sujetas a las sanciones correspondientes. La función pública como organización es un concepto completamente diferente se refiere a la suma de recursos humanos concretos puestos al servicio de una o del conjunto de las organizaciones público-administrativas. Esta suma de personas concretas opera dentro del marco institucional de la función pública; pero se encuentra ordenado para obtener los resultados específicos de su organización. En realidad, los funcionarios y empleados públicos están sometidos a dos órdenes normativos: por un lado al orden jurídico institucional, determinador, junto al orden institucional informal, del sistema de construcciones e incentivos, y al orden organizacional, determinado por los mandatos organizativos, procedentes de la autoridad responsable de la eficacia y la eficiencia de la organización e investida de la potestad autoorganizatoria, así como por la cultura administrativa específica de cada organización. Análisis sobre la ley contra la corrupción
Al respecto se puede definir que tiene por objeto implementar los
conceptos de ética pública y moral administrativa, en referencia a la conducta que deben mantener los funcionarios públicos en el desempeño de sus funciones, con preeminencia de los intereses del estado, sobre el interés particular, fundamentado en los principios constitucionales que rigen la Administración Pública y se considera corrupción, además del daño al patrimonio público. El objeto de esta ley es establecer las normas que regirán la conducta que deben asumir las personas sujetas a la misma, a los fines de salvaguardar el patrimonio público, garantizar el manejo adecuado y transparente de los recursos públicos, con fundamento en los principios de honestidad, transparencia, participación, eficiencia, eficacia, legalidad, rendición de cuentas y responsabilidad consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, así como la tipificación de los delitos contra la cosa pública y las sanciones que deberán aplicarse a quienes infrinjan estas disposiciones y cuyos actos, hechos u omisiones causen daño al patrimonio público. El objetivo principal de la ley contra la corrupción es crear mecanismos preventivos y represivos que resulten eficaces para confrontar la corrupción. Porque esta ley no ha tenido el éxito esperado. Desde el punto de vista legal, nadie duda la necesidad de que se sancione de manera fuerte y eficaz los delitos de corrupción. Acontece que la Ley por sí sola no ataca la causa principal de este problema de la corrupción, ya que se debe fomentar paralelamente una educación y cambio de cultura que contra ataque el flagelo de la corrupción en cada ciudadano y se pueda erradicar la corrupción desde su causa raíz. La ley Contra la Corrupción refuerza la ley orgánica del sistema nacional de control fiscal y contraloría general de la república, pues ratifica la obligación de los funcionarios públicos de rendir cuentas de su gestión, también obliga hacer una declaración jurada del patrimonio. Este mecanismo de control podría permitir llevar estadísticas y tener indicadores importantes para un mejor control y aplicación de la ley. La corrupción se combate con educación en valores, sin mayores aspiraciones que le de modelar una ciudadana o ciudadano integrado al proceso de desarrollo de su país y de su estado. Que se sienta que pertenece a una comunidad de valores. Análisis sobre la ley orgánica de la contraloría general de la republica
Esta Ley persigue promover y fortalecer institucionalmente a los órganos
de control fiscal al establecer que la designación de sus titulares, a excepción de la Contraloría General de la República, debe hacerse mediante concurso público que garantice la idoneidad, aptitud técnica para el mejor ejercicio de sus funciones y la estabilidad necesaria para actuar de conformidad con las exigencias constitucionales y legales. En Venezuela, la Contraloría social es una derivada concepción constitucional de reciente data que aún no posee norma. Por esa razón, la Contraloría Social no se traduce en una condición administrativa estructurada. Inclusive es desconocida en su concepto y trascendencia, por amplios sectores de la sociedad civil. La contraloría social tiene la misión de lograr que gobierno y ciudadanía trabajen de forma corresponsable en la vigilancia y evaluación de la gestión pública, como mecanismo idóneo de control preventivo. Esta vigilancia resulta particularmente relevante en la aplicación de recursos y operación de programas de desarrollo social, para garantizar que sus beneficios lleguen íntegramente a la población y evitar su utilización en favor de intereses ajenos al beneficio común. La Contraloría social expone las bases del Control Social como un mecanismo organizado a través del cual todo ciudadano y ciudadana, individual o colectivamente participa en la vigilancia, seguimiento y control de la gestión pública, en la ejecución de programas, contrataciones, planes y proyectos, en la prestación de los servicios públicos, así como en la conducta de los funcionarios públicos, para prevenir, racionalizar y promover correctivos. Como se ve, es un mecanismo de la participación social con criterios de inclusión; esto es porque la contraloría social procura rediseñar un nuevo tipo de vida en la cual todas las personas tienen derecho a ser considerados en los planes y decisiones del estado de manera más efectiva y que, además, la contraloría social busca convertirse así misma en el único factor de verdadera diferenciación competitiva que pudiera llegar a tener un país como Venezuela para tener viabilidad en el mercado global. La contraloría social es ejercida por todo ciudadano venezolano mayor de edad. La ley agrupa a aquellos que ejercen este poder en tres grupos: el individuo, a través de denuncias, quejas o reclamos ante las entidades correspondientes; la colectiva a través de contralorías sociales formadas por dos o más ciudadanos; y colectiva a través de Contralorías sociales que actuarán como voceras de comunidades o sectores sociales organizados. En el cual la ley estará fundamentado en los principios de la ética socialista, estando obligadas las distintas instancias del Poder Público, a desarrollar programas, políticas y actividades orientadas a la formación y capacitación de los ciudadanos, ciudadanas y organizaciones sociales en materia relacionada con el ejercicio de la contraloría social. Carácter constitucional y administrativo de las leyes señaladas
Al respecto de la ley del estatuto de la función pública según el contenido
de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, corresponde a la Ley establecer el Estatuto de la Función Pública mediante normas reguladoras del ingreso, ascenso, traslado, suspensión y retiro de los funcionarios públicos. Asimismo, establece la Carta Magna que los funcionarios públicos están al servicio del estado y no de parcialidad política alguna, por lo tanto su nombramiento y remoción no podrá estar determinado por la afiliación u orientación política. En el texto constitucional se establece de igual manera, que el ingreso de los funcionarios públicos a los cargos de carrera será a través de concurso público, fundamentado en principios de honestidad, idoneidad y eficiencia. El ascenso estará sometido a métodos científicos basados en sistemas de méritos y el traslado, suspensión o retiro será de acuerdo con su desempeño. Dentro de la administración pública existe una diferenciación entre la administración pública nacional, la estadal y la municipal, sin embargo, cada una en su nivel tiene por objetivo común la acción de administrar la satisfacción de necesidades de la población mediante la ejecución de políticas, planes y programas desarrollados por las distintas dependencias que la integran, por lo cual es obvia la importancia del rol del funcionario público. De esta manera, se evidencia la íntima relación existente entre la concepción, estructura y organización de la función pública, con la estructura y la organización de la propia administración pública nacional, estatal y municipal. En el conjunto de relaciones integrantes de la vinculación de sus servidores con la administración pública, está la esencia de lo que se conoce como función pública, la cual busca dar respuesta a la naturaleza de esa relación, de ese vínculo de unión entre el servidor público y la administración. En cuanto a la ley contra la corrupción la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela eleva al rango constitucional la atribución del Ministerio Público de dirigir la investigación penal, lo cual le da al proceso la característica de imparcialidad que no tenía antes, pues ahora quien investiga no es quien decide el asunto; por su parte en el Código Orgánico Procesal Penal se describen los mecanismos procesales que deben cumplirse para que el fiscal realice el trabajo de ordenar y dirigir la investigación penal y en la Ley Contra la Corrupción se describen todas las conductas típicas que afectan al patrimonio público. Es claro entonces que no se han escatimado los esfuerzos por parte del parlamento de darle a los operadores de justicia las herramientas necesarias para combatir efectivamente el asunto, también se han destinado importantes recursos a los fines de dotar a los distintos de una adecuada infraestructura logística, aunado a ello se han celebrado varios convenciones y firmado varios convenios contra la corrupción. Entonces cual es el problema que se presenta en Venezuela con respecto al asunto, donde cada día los clamores por demanda de castigo a los culpables de delitos contra el patrimonio público se hacen más evidentes, los resultados obtenidos son verdaderamente desalentadores, son muy pocos los culpables de estos delitos que efectivamente son sancionados. En definitiva el problema existe pero no está enfocado en un solo lugar y nos referiremos exclusivamente a uno de los problemas presentes en uno de los operadores de justicia es decir, el Ministerio Público, se trata de la estructura organizativa de las fiscalías y aquí pudiera estar uno de la gran variada gama de causas a la falta de efectividad en los resultados. Las fiscalías del Ministerio Público tenían para la vigencia del Código de Enjuiciamiento Criminal una estructura que es la misma que conserva en la actualidad con la novedad que ahora es el director del proceso, para entender un poco mejor el asunto las fiscalías del Ministerio Público están estructuradas de una manera unipersonal, es decir; cada fiscalía solo cuenta con un fiscal quien tiene una gran responsabilidad que se traduce en trabajo efectivo que le demandan la inversión de una parte importante de tiempo en el desarrollo de cada caso, aunado a esto tiene que atender una serie de asuntos de carácter administrativo que ameritan una buena cantidad de tiempo. Y al respecto de la ley orgánica de la contraloría general de la republica el Control Fiscal en Venezuela surge con el objeto de garantizar el cumplimiento de la Ley en cada una de las actividades llevadas a cabo por la Administración Pública, y en consecuencia afianzar el resguardo del patrimonio público. La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela incorpora la norma para el ejercicio del Control Fiscal como mecanismo de transparencia y eficacia en los procedimientos llevados a cabo por los distintos niveles del Poder Público; municipal, estatal y nacional, mediante la implementación de procedimientos especialísimos, llevados a cabo por la contraloría general de la república y el sistema nacional de control fiscal, dentro de los cuales se encuentra inmerso un procedimiento denominado determinación de responsabilidades administrativas. Siendo así, el control fiscal en Venezuela no nació como brazo ejecutor de sanciones para castigar políticamente, sino debido a la necesidad de vivir en una sociedad libre de vicios e irregularidades que pongan en riesgo la gobernabilidad, la soberanía y la buena gobernanza, mediante el resguardo y control del patrimonio público, la observancia de la constitución y las leyes, así como de las virtudes republicanas, la ética pública y la moral administrativa.