A partir del Libreto de Jornaleros, muchos ladinos realizaron trabajo forzado, especialmente en el oriente del país, aunque consistió en trabajo viable que formó un nuevo sistema para tener el control de la población. Los ladinos rurales se convirtieron en intermediarios en el Altiplano Occidental, como enganchadores, pequeños comerciantes, agentes estatales o milicianos que pasaron a controlar los poderes municipales, contribuyendo así a reforzar la bipolaridad étnica en Guatemala. 4.3 Renovación de la élite El sistema de poder también se convirtió en cafetalero y surgió la necesidad de una nueva élite que, para nacionalizarse debía perder su carácter regional “ladino” y se “acriollase”, a todo esto, se suma la incorporación de empresarios extranjeros renovó la clase alta y neutralizó el peso del mestizaje del sector ladino en el centro de la oligarquía. 4.4 Bipolaridad y diversidad La bipolaridad es consecuencia de la diversidad étnica que se redujo a “indios” y “ladinos”. Desapareció el “mestizaje” y fue sustituido por lo “ladino en una forma de negar las raíces indígenas, ello constituyó el cambio más importante que introdujo la ideología cafetalera, el unificar esa autopercepción en la población. Los ladinos pasaron de ser un sector heterogéneo como mestizos diferenciados de indígenas y criollos, a ser un sector socialmente unificado. Mostraron una gran diversidad de poder y fueron en aumento y conformaron las crecientes capas medias urbanas en la capital y el interior. Uno de los triunfos liberales fue desaparecer a criollos, supuestamente se les expulsó del poder político, pero la élite criolla permaneció fundida en la oligarquía, logrando que sus preferencias clasistas permanecieran en la ideología nacional. Otros factores que influyeron fueron la implantación de las empresas bananeras y la creación de fincas cafetaleras que resaltaron la bipolaridad, introdujeron trabajadores negros, chinos, europeos y latinoamericanos y mantuvieron la lógica de trabajo forzado. 5. Modernización capitalista (1944-1978) La elección del general Jorge Ubico, coincidió con la crisis de los años 30 quien estancó la economía de exportación e implementó el Libreto de Jornaleros en vez del trabajo forzoso por deudas que complementó con el Boleto de Vialidad que obligaba a trabajar al campesino 150 días útiles, además de trabajar gratis en la construcción de caminos. Dicha crisis y los efectos de la Segunda Guerra Mundial llevó a la Revolución de Octubre en 1944. Fue un esfuerzo de modernización social política, se promulgó la Constitución de 1945, se abrieron debates sobre el derecho de voto al analfabeto siguiendo una concepción racista y clasista en la que solo se llegó a otorgar la ciudadanía a guatemaltecos varones y mujeres de 18 años que supieran leer y escribir. También se estableció una autonomía municipal en que se eligieron los primeros alcaldes indígenas por un decreto que declaró de interés desarrollar una política integral de mejoramiento económico, social y cultural de los indígenas. Esa transformación tenía que ayudar a la población indígena, se buscaba convertirlos en ciudadanos para redimirlos por vía del indigenismo y así terminar con el trabajo forzado y realizar distribuciones justas de tierra. La Reforma Agraria de Árbenz es un ejemplo de los mayores alcances que tuvo el propósito, pero fue interrumpido por la respuesta negativa del sector terrateniente y de los intereses estadounidenses que no permitieron dicha transformación. 5.2 Políticas hacia los indígenas La fuerza renovadora revolucionaria puso en marcha programas de igualdad a todos los derechos y aunque existió la voluntad de un cambio, la nueva clase política mantuvo la propuesta liberal de la nación. En 1945 con el triunfo de fuerzas conservadoras se adoptó una integración social que, aunque mantenía su énfasis en el proceso de aculturación, buscaba que se garantizara su sobrevivencia y apoyo estatal. La constitución de 1945 fue derogada y Carlos Castillo Armas encabezó un nuevo régimen que promulgó una nueva Constitución en que el reconocimiento de ciudadanía se amplió para hombres y mujeres alfabetas cuya condición de voto sería secreto y obligatorio. Se declaró ilegal cualquier tipo de discriminación por raza, color o religión. Ese pensamiento desarrollista fue elaborado por CEPAL que buscaba garantizar un despegue económico de Guatemala y favorecer la creación del mercado interno. En 1956 se reconoció al fin a todo guatemalteco, hombre o mujer mayor de edad y se terminó con la exclusión de mujeres analfabetas. Con Ydígoras Fuentes en 1963 se propuso la Doctrina de Seguridad Nacional como alternativa contra guerrillas latinoamericanas en medio de la “guerra fría” y se dio el inicio del conflicto armado interno en que grupos de ladinos inauguraron dichas estrategias y posteriormente fueron adoptadas por personas, en su mayoría indígenas. El ejército encargado de la “defensa nacional” inició campañas de alfabetización, salubridad, cooptación y cooperativismo, así como la Doctrina de Seguridad Nacional que se caracterizó por el uso de la violencia estatal contra cualquier opción de ideología democrática.
5.3 Transformaciones sociales
Los cambios socioeconómicos del siglo XX produjeron muchas consecuencias. El país se convirtió en productor y exportador de algodón, azúcar y carne de vacuno en proporciones que alteraron la tenencia de tierra que aumentó la solarización y migración a zonas, también amplió las oportunidades educativas que hizo que importantes grupos ladinos dejaran de dedicarse solo al campo y se fuera consolidando la clase media, mientras que la población campesina enfrentó la escasez de tierras. Se buscó la diversificación geográfica, social y económica que suponían pasos para la “asimilación” o conversión de indígenas a ladinos. 6. Crisis y cambio relativo (1978-2004) 6.1 Movilización y represión Luego del terremoto de 1976 se dio una segunda etapa guerrillera, aún se desconoce si la participación indígena fue autónoma o parte de otras iniciativas, pero aumentó la crisis y provocó sanguinarios resultados, se inició la estrategia de “tierra arrasada” que resultó en 200,000 muertos y más de 600 aldeas arrasadas que la Comisión de Esclarecimiento Histórico ha llegado a señalar como genocidio. Ríos Montt habló de la creación de bases para la participación de los diferentes grupos étnicos, junto con la propuesta de una serie de políticas contrainsurgentes asimilacioncitas como las Patrullas de Autodefensa Civil que promovieron prácticas de violencia racista. Dicho debate provocó que el pensamiento político indígena madurara y formara la idea autónoma de un “nosotros” como un “Pueblo Maya” 6.2 Transición, proceso de paz y multiculturalidad Se diseñó un plan de “normalización política” que dio respuesta al favor indígena de participación política propia. La Constitución de 1985 reconoció la ciudadanía de nacionales mayores de edad alfabetos o no y de ambos géneros, se aceptó que las etnias mayas son pertenecientes a Guatemala. Se aprueba un Convenio 169 de la OIT como los actos del V Centenario del Descubrimiento de América y el Premio Nobel de la Paz otorgado a Rigoberta Menchú, fueron pasos para la firma de los Acuerdos de Paz Firme y Duradera 1996. Específicamente el acuerdo sobre Identidad y Derechos Indígenas plantea el reconocimiento de un Estado multicultural, pluriétnico y multilingüe con la existencia de pueblos: Maya Garífuna y Xinca. Se reconoce el derecho a identidad propia y se declara un país multiétnico. 6.3 Diversidad y globalización Reforzaron las tendencias de aumento de pobreza y mantenimiento de desigualdades que afectaban a los indígenas. Los efectos de la globalización ayudan a que importantes sectores indígenas refuercen su identidad. Aunque resurgieron viejas tendencias racistas, también es un espacio oportuno para la reivindicación indígena. Ejerce presión en el Estado para dar cabida a la pluralidad política e inclusión social y desarrollo humano que no solo beneficie a la población indígena sino a la sociedad en sí.