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Vílma Vargas!

Una semiología
del
texto poético
Universidad Central de Venezuela
C a r a c a s , 1989

HHL
U. C . V. 2104401 I S B N 980-00-0354-1 P. V. P. B s . 200
i-ViS J I U E E D O áiVAREZ AYESTERA.';

V I L M A VARQAS

Una semiología
del
texto poético

U n i v e r s i d a d C e n t r a l de V e n e z u e l a
Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico
Caracas, 1989

HHL
Rafael, Valeria y Valentina

Copyright, 1989 .
Vüma Vargas
Consejo de Desarrollo Científico
y Humanístico. Universidad Central de Venezuela

I S B N 980-00-0354-1

Impreso en Caracas, Venezuela,


en los Talleres de Anauco Ediciones, C . A . ,
durante el mes de noviembre de 1989

HHL
Agradecimiento

Ante todo a TuUio De Mauro,


Profesor de Filosofía del Lengua-
je en la Universidad de Roma, a
quien debo la estupenda sensación
de placer cuando escuchaba sus
clases magistrales, así como la
guía y los consejos adecuados para
llevar a cabo esta investigación.
A los Profesores Domingo Milia-
ni, Rafael Cadenas y Judit G e -
rendas, por sus oportunas obser-
vaciones.

HHL
INTRODUCCION

Se descrivere un linguaggio é desctive-


re una forma di vita, interpretare i
segni verbal] significa viverll o rivi-
verli in un lavorio di scavo e appro-
fondimento del loro senso che puó ave-
re un limite ultimo solo con Testin-
guersi dell'esistenza soggettiva, in quan-
to puó confondersi con Tintero fluiré
della vita stessa.

TuLLio D E MAURO

Uno de los problemas más importantes a los que se


enfrenta el investigador que se dedica al estudio de la
poesía en lengua española, es la falta de un instrumental
apropiado para el análisis del texto poético. Gran parte
de los trabajos dedicados a este tema, se han sustentado
en un acercamiento impresionista o historicista, obviando
el análisis directo del instrumento central del texto poético,
el lenguaje; y con él, sus usuarios.
Si bien es cierto que existen algunos trabajos de corte
estructuralista,' todavía no se puede decir que sea éste
el instrumental apropiado que abarque todos los niveles
que inciden notablemente en la palabra poética, ya que
como es bien sabido, el análisis estructuralista se centra
sólo en el lenguaje como objeto sin tomar en cuenta otros
elementos extralingüísticos, nivel del lenguaje que creemos
fundamental.
Esta carencia de un instrumental apropiado, no sólo
la hemos sentido como necesidad personal para el desarrollo
1 Véase el trabajo de María del Carmen Bobes Nones: Gramática del
"Cántico" (análisis semiológico). Santiago. E d . Planeta. 1975.

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de nuestros estudios sobre la palabra poética latinoameri- te a la conclusión de esta primera parte que hemos titulado
cana, sino también nos ha hecho falta para poder guiar "Comportamiento del lenguaje poético", y que considera-
a nuestros alumnos hacia u n estudio serio y verdadero del mos como un aporte nuestro.
texto poético.
La segunda parte trata de explicar qué es la semió-
Por estas razones nos propusimos estudiar el pro-
tica, cómo se da el proceso semiótico, y qué es la función
blema, con el f i n de alcanzar "esa" metodología ideal.
semiológica; así como también, qué es el signo y cómo
Nuestro libro E l devenir de la palabra poética, Vene-
funciona, todo en aras de tratar de lograr una "Semiótica
zuela siglo XX, ^ es un primer paso hacia la meta que nos
del texto Hterario", fragmento en el cual nos extendemos,
hemos planteado, es "sólo un intento de sistematización
y que igualmente lo consideramos un aporte de nuestra
metodológica para alcanzar un mejor conocimiento del
parte. Es importante hacer notar que los temas manejados
texto poético" mediante un estudio diacrónico del uso del
en estas dos primeras secciones del trabajo son tan com-
lenguaje en la poesía venezolana, de acuerdo a parámetros
plejos y problemáticos que cada uno de ellos puede ser
estructuralistas combinados con algunos elementos de so-
desarrollado en un ensayo tan largo como el total de éste
ciología de la literatura.
que presentamos; pero nosotros sólo queremos puntualizar
Este trabajo que presentamos aquí, como su nombre algunas definiciones que son pertinentes al resultado que
lo indica, es una contribución a la búsqueda de una semio- buscamos.
logía del texto poético y sólo pretendemos explicitar
algunos pasos en el análisis del poema, pasos que aún Como síntesis de los dos trabajos que cierran la pri-
consideramos incompletos. mera y segunda parte respectivamente (por u n lado to-
E l instrumental que proponemos trata de ser original mando en cuenta el comportamiento del lenguaje poético,
(sobre todo en el análisis de la poesía en lengua española) y por el otro, apoyándonos en las características de la
e intenta aportar elementos que sirvan para continuar en semiótica del texto literario), es que hemos podido armar
busca de ese instrumental metodológico que creemos toda- este intento instrumental de análisis semiológico del texto
vía está por lograrse plenamente. poético, que veremos paso a paso en la tercera sección
Es en la tercera parte del trabajo, titulada "Semiología del trabajo.
del texto poético", donde se establecen los posibles pasos Hemos optado por denominar este instrumental,
a dar para el análisis del poema, pero hemos considerado semiología del texto poético en lugar de semiótica porque
que teníamos que explicar cómo hemos llegado a instru- consideramos que el término semiótica nos dirige más
mentar este acercamiento semiológico a la poesía; de allí hacia el hecho de la posible comunicación entre los usua-
que en la primera parte, titulada "Problemas del lenguaje", rios del signo, que a aquello que pretendemos y que
explicamos el comportamiento de la lengua y del lenguaje, creemos más importante para el estudio de la poesía, es
de sus cambios, de los juegos Hngüísticos, de sus relaciones decir la significación.
con el pensamiento; hablamos de la capacidad metafórica
La semiótica parece ser más bien una teoría general
y de la propiedad creativa del lenguaje, para así llegar,
del signo, la semiología parece estar ceñida a ciertos signos
conociendo el comportamiento del lenguaje de uso corrien- particulares (en el parágrafo 1° de la segunda parte, pp. 73-
2 Publicado por Ediciones de la Biblioteca de la Universidad Central 74, llamado Semiótica o semiología, explicamos este punto
de Venezuela, Caracas, 1980. extensamente).

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Así, pues, proponemos este intento de sistematiza-
ción metodológica para el análisis del texto poético, intento
que trata de seguir las premisas propuestas por Tullio
De Mauro en su Minisemántica:
A noi pare ciie una buona teoría dell'organizzazione semántica,
e non sol tanto semántica, m a anche pragmática e sintattica PROBLEMAS D E L L E N G U A J E
d'una lingua, debba daré contó delle une e delle altre ragioni,
debba riuscire a spiegare i n qual modo l a stessa realtá lin-
güistica ci si presentí con i l volto ambiguo deU'autocontrad- II linguaggio é un labirinto di strade.
dittorietá e si configuri ora come calcólo ora como non-cakolo. Viem da una parte e ti sai orientare;
giungi alio stesso punto da un'altra
parte, e non ti raccapezzi piú.
y agrega que una teoría que trate de entender el compor-
tamiento del lenguaje de uso corriente debe estar entre: LUDWIG WlTTGENSTEIN

. . . razionalismo e irrazionalismo, tra ragione e imprevedibili


impulsi vitali, e che, scrutando al fondo della scelta, hanno INTRODUCCION
cercato le radici comuni di realtá, esperienze e forme di vita
che si configurano prima facíe come contrapposte (p. 95). Nuestro interés en comentar algunos conceptos de la
lingüística y de la filosofía del lenguaje, antes de entrar
Teniendo muy en cuenta estas palabras, tratamos de en el proyecto de semiótica que aquí proponemos, se debe
proponer un instrumental que logre captar lo de racional a que el lenguaje poético parece ser una entidad que se
y lo de irracional que encierra todo lenguaje, y que trate escapa a todas aquellas reglas y definiciones que rigen el
también de indagar entre aquellos impredecibles impulsos lenguaje verbal y, al igual que todo lenguaje, parece expre-
humanos que guían al hombre y que se expresan en forma sar conocimiento. Debido a todo esto, para poder lograr
mucho más compleja a través del lenguaje poético. aprehender " l a verdad" que a través de él se nos da, de-
bemos tratar de entender de qué manera, cuándo y cómo
este lenguaje viola todas esas reglas que parecen regir la
forma y el empleo del lenguaje de uso corriente, y para
comprender cuándo y cómo se violan las reglas debemos
conocer cómo funciona el lenguaje.
Será el lenguaje centro e instrumento preferido de
trabajo del poeta, por tanto, cualquiera que sea la visión
del crítico-lector, éste marcará el inicio y final de su bús-
queda; si el crítico pretende acercarse a la poesía desde
el punto de vista del mundo simbólico, debe tener claro
el momento en el cual se tropieza con el símbolo, ya que
el poeta usa la palabra como tal y ha roto de cierta manera
con la relación significado/significante para introducirse,
de la mano de la palabra, en el mundo de los símbolos, el

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crítico-lector debe saber que el creador ha cambiado el aparece el acercamiento del hombre al medio formal que
nivel del signo y que ya aquella relación, arriba mencio- le sirve para darse orden y razón; en ese momento en-
nada deja de ser una relación motivada necesaria para con- frenta al mundo en cuanto tal y trata de entenderlo como
vertirse en una relación arbitraria no necesaria en la cual una cosa ordenada (el nominalismo griego). Así, por
lo simbolizado es motivo de parecido, o de contigüidad, ejemplo, la lengua griega se convierte en herramienta que
en la relación simbolizado/simbolizante. debe explicar y ordenar el mundo, será entonces instru-
Si el crítico-lector tiene interés en el hablante o locu- mento de la filosofía, la lógica, la gramática, la retórica,
tor, en nuestro caso, el poeta que nos envía el signo la poética, etc. De esta manera, a través del acaecer histó-
estético, debe también centrar su análisis en el lenguaje, rico-filosófico, el lenguaje se convertirá, según diferentes
con la intención de decodificar el signo poético, para poder teorías, en u n elemento por excelencia para explicar el
llegar al hombre-poeta que ha construido este mundo de mundo.
signos, ya que todo signo, de alguna manera, está arrai- Wittgenstein, en su primera etapa, proclamará que
gado en códigos subyacentes que se encuentran en el la explicación apriorística de la constitución ontológica del
hombre en forma latente. mundo, teoría que se viene desarrollando desde el nomi-
Si la atención del estudioso está centrada en el mundo nalismo griego, debe ser sacada del mundo en sí y descar-
de referentes que rodea al locutor-poeta, tendrá que apo- gada en el lenguaje, en consecuencia, vemos a este último
yarse en la hipóstasis del lenguaje poético, es decir, en la convertido en un instrumento del conocimiento.
relación existente entre la naturaleza humana con el verbo, La lengua vista como sistema de signos comunes
jorque es de esta manera como el poeta proyecta sobre manipulables y constituibles a placer, permitiría la apari-
a lengua cotidiana las configuraciones translingiiísticas ción de disciplinas como la sintaxis y la semántica lógicas,
que producen una dislocación en el lenguaje comunicativo bajo la influencia del positivismo lógico, para tratar de apre-
y lleva a la destrucción del signo. hender el conocimiento del mundo; pero por otro lado,
Ya sea el mundo psicológico lo que interesa al lector, también la filosofía del lenguaje de uso corriente, valorará
o ya sea el contexto que rodea al hombre, aquél debe a éste como portador de conocimiento.
tener conciencia que todo texto poético está conformado
por un encadenamiento sintagmático de signos poéticos
1. LENGUA Y CONOCIMIENTO
que van desde h palabra al discurso, y que éste es un
signo completo que es .necesario decodificar y posterior-
La relación entre lengua y conocimiento es una idea
mente recodificar para percibir, si es posible, la realidad
que viene desde muy atrás, quizás tiene sus orígenes en el
subyacente del lenguaje.
nominalismo del tardo Medioevo (Apel, 1975) que con-
Según Lohmann (Apel, 1 9 7 5 ) , el lenguaje comenzó cebía la lengua como u n sistema de signos que ordenaba
siendo mithos, es decir, una identidad mágica; era sólo un mundo prelingüístico ya dado. ^ Este problema, dis-
materia interpretativa del mundo. E l hombre no tenía idea cutido desde entonces, nos llega hasta hoy en una de las
de la cosa en cuanto cosa, su relación con el mundo no corrientes de la filosofía del lenguaje como idea que pasa
era hermenéutica, por esto el lenguaje sólo le servía como
identidad mágica "contenutística"; pero llegado u n mo-
mento, el lenguaje como mithos deviene logos, es cuando Corriente relacionada íntimamente con el nominalismo griego.

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a través del siglo x i x y llega al siglo x x de la mano del 2. E L L E N G U A J E

positivismo lógico.
E l lenguaje, decía Heidegger, no es un utensilio del
A su vez, Wittgenstein (1980-a) reconocerá esta rela-
cual se dispone, sino es u n acontecimiento que contiene
ción, explicando en qué forma todo problema filosófico,
en sí mismo la posibilidad más alta del ser humano. Es a la
y por lo tanto del conocimiento, debe ser resuelto pene-
vez esclarecedor y / u ocultante del ser mismo (Apel, 1975).
trando en el funcionamiento de nuestro lenguaje, para allí
reconocerlo, lo que significa que el conocimiento viene E l lenguaje, sin lugar a dudas, debe ser visto como
dado por las formas de expresión. Así u n análisis de ellas inseparable del hombre con sus tareas y sus recuerdos,
a veces individuales y otras heredados por la sociedad en
puede ayudar a aclarar algunos malentendidos que el uso
que vive; es un medio de comunicación cuyo objeto prin-
de la palabra, debido a ciertas analogías, ha logrado ocul-
cipal puede hallarse fuera de él —quizás por esto se le
tarnos en nuestra posibilidad de conocimiento del mundo.
puede llamar trascendente.
Wittgenstein dirá (90) que conocimiento, es la bús-
queda que nos permite mirar a través de los fenómenos Si lo consideramos desde el punto de vista de la
para estudiar sus posibilidades, búsqueda que está funda- definición que le da De Mauro de habla del hombre, que
mentada en el tipo de enunciado con el que expresamos le servirá en u n proceso semiológico, entonces estamos
nuestro acercamiento al mundo. hablando del lenguaje como medio de comunicación. A la
En las teorías de hoy, el conocimiento puede ser visto luz de esta definición, lo podemos concebir como un sis-
como identidad, en esta forma, al concebir un objeto me- tema de signos tendientes a hacer lo más fácil posible el
diante el lenguaje, lo podemos reconocer como miembro contacto del destinador con el destinatario y así establecer
de una clase; en otras palabras, el conocimiento que la una relación semiótica. Visto de tal manera, es u n sistema
que modela la expresión y el contenido arbitrariamente,
lingüística toma como objeto se sitúa a nivel de identidad.
de modo específico en el habla del individuo, y está cons-
Esta relación entre lengua y conocimiento se puede
tituido de tal forma que puede conformar nuevos signos
comprender u n poco más si nos adentramos en la relación
debido a que la relación expresión/contenido es arbitraria.
lengua y pensamiento. Así podemos ver cómo los dife-
Tanto el contenido lingüístico como el sistema semántico
rentes pasos que da el hombre-niño para adquirir la lengua
se pueden manipular y así crear nuevas palabras; esto con-
madre, abren las puertas del conocimiento; el lenguaje en firma que el lenguaje no es lógico y no obedece ciegamente
un momento del- desarrollo del hombre, será medio de a reglas, el lenguaje refleja una mentalidad más primitiva
exploración para conocer personas y cosas, en esa oportu- de la que encuentra expresión en la lógica consciente del
nidad él adquiere función cognitiva, lo que vale decir ten- pensamiento.
drá valor social; porque llegará el momento cuando el
lenguaje verbal será signo de madurez del cerebro y a la E l lenguaje, como medio de comunicación, no es una
transcripción de conceptos universales. Por el contrario,
vez factor de tal madurez, así se convertirá en receptáculo
cada lenguaje tendrá sus propios patrones que utiliza
de toda cultura transmitida de una comunidad a otra.
durante la conversión de la experiencia humana en signi-
ficado; y aún cuando ellos se convierten en un complejo
racional común, poseerán sus características particulares
diferentes. A propósito decía Leibniz: .

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E noto che i l linguaggio é uno specchio dell'intelletto e che E n consecuencia, reconociendo este pasado de la
i popoli, se tengono alto Tintelletto, esercitano bene, nel lengua, podemos decir que ella no está atada a los univer-
contempó, anche la lingua, come dimostrano gli esempi dei sales del conocimiento, no sustrae conocimiento a priori
Greci, dei Romani e degli Arabi. (Apel, 1975, p. 3 8 9 ) .
de estos conceptos individuales, la lengua más bien es con-
formadora de obras de arte, y a la vez es cambiante.
3. L A L E N G U A
Así como no procede de conceptos apriorísticos del
saber universal, sino todo lo contrario construye mundos,
La lengua, dice Saussure, no es otra cosa que la ima- tampoco es de uso cierto y automático como lo son los
gen verbal que está depositada por la práctica de la palabra, lenguajes científicos (los cuales tienen características de
que es el hablar, en los sujetos pertenecientes a una misma certeza que le son conferidos por los usuarios); la lengua
comunidad; así la lengua no es sólo de un individuo, es de con su capacidad cambiante e incierta nos constriñe a estar
una colectividad, es obra de una colectividad que en algún adecuados con la situación y nos lleva a descubrirnos como
momento depositó en el cerebro del hombre a la manera seres himianos, seres humanos que deben saber que la
de u n diccionario una serie de significaciones idénticas lengua acrecienta nuestro saber, porque siempre servirá
para luego ser repartidas en los individuos (Saussure, para explicar cualquier plano de la experiencia a pesar de
1 9 7 9 ) . Idea muy contraria a aquella del siglo x i x que su pobreza, de su carácter aproximativo y de su posibilidad
consideraba a la lengua como objeto. Será sólo en el de manipulación.
siglo X X que aflora la noción de lengua como condición Las lenguas no son estáticas pues están continua-
de posibilidad, no ya como objeto, sino como conformadora mente en movimiento, las usamos y nos entendemos a pesar
de objetos según la concepción trascendental del lenguaje, de que existe entre los usuarios disparidad en el conoci-
y será ya con Saussure que asume el carácter de entidad miento de palabras y reglas. De acuerdo a como se entien-
social. dan y usen las palabras y frases, se garantiza la sobreviven-
E n la actualidad, la lengua se ha convertido en u n cia o la muerte, la persistencia o el cambio, o las continuas
instrumento del saber racional científico, pero en ella oscilaciones de formas o valores. La lengua será hecha para
siempre se conservará, a pesar de las ideas logicistas, el el hombre y no éste para la lengua.
trasfondo tradicional heredado por las lenguas desde la L o interesante es reconocer que tiene una relación con esa condición
época en que se constituyeron, época en la cual no existía no controlable interna del hombre que es toque sagrado y que sólo
pertenece a algunos; esta noción pasará a ser depositarla del intelectual,
la ciencia, pues era tiempo de guerras y de mitos. De esta que desde el Quinientos, tomará la creacióp como parte de la
manera cada lengua tendrá su propio genio unido a las autonomía del profesional de las letras, como depositario de una
cultura adquirida. D e esta manera llega a la crítica alemana y en
vivencias históricas de la nación que la usa. ^ Kant será el talento natural y la locura del arte, se afianza entonces
como noción de individualidad y llegará a ser parte del carácter
2 Genius, en latín, significaba un espíritu bueno o malo_ que asistía ^al individiial de la lengua; entonces en el siglo x v i i i nace el concepto
hombre durante toda su vida y que era parte de la función "creativa ; de genio de la lengua, concepto perfeccionado por Humboldt para
luego en la cultura cristiana se trasmite como "ángel custodio", aunque quien la lengua nq, es un simple medio de comunicación, sino la
ya hay una evidente relación de genius con ingenius como mecanismo expresión del espíritu y la concepción del mundo de los sujetos
para esforzar el ingenio. Así pasa a la tradición humanística, y será hablantes. Para él, el espíritu humano construye la lengua tratando de
para Boccaccio la fuerza creativa del hombre, y para Dante y Petrarca ser fiel a su propia imagen para así tomar posesión de sí mismo, es
una facultad que viene del cielo: el ingenio sería algo dado por el la tesis romántica idealista, pero que tendrá ciertos ligámenes con la
destino, como si fuera parte de la "locura", porque el genio es lo concepción actual que se tiene del genio de la lengua como idea
irregular, lo contrario de lo exacto y de lo serio. individualista del lenguaje, como su parte individual.

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M a le lingue non sonó fatte per linguisti bennati. Sonó fatte y la de la expresión; y sobre todo es una institución de
per aiutarci a sopravvivere, per aiutarci a trovare la via dei carácter social y nacional. ^
discorsi limpidi e chiari, e della comprensione convinta,
una folla di discorsi non limpidi e non chiari attra-
verso discorsi senza capo né coda, frasi assurde e smoz-
4. CAMBIOS D E L A LENGUA
zicate, silenzi, attraverso incomprensioni e fraintendimenti
o sorditá e disattenzioni. L e lingue consentono anche questo:
che si parli male e ci si capisca male. E che dal parlare La lengua no es inmutable, como pareciera, ya que
approssimativo e dai fraintendimenti si possa uscire dialogi- no es un mecanismo creado por ciertos conceptos que deben
camente, disfacendo e rifacendo i caminí che vanno dai sensi expresarse ordenadamente, la lengua es cambiante a través
alie espressioni, dalle espressioni ai sensi, fino a innovare
del tiempo de manera, si se quiere, casual. Lo importante
e cambiare la lingua. Tutte le tensioni, contraddizioni, in-
coerenze, che possono intrecciarsi alie interazioni tra esseri de estos cambios, es que cada cambio diacrónico corres-
umani sonó presentí in queUa particolare forma di interazione ponde a una evolución considerable de un período deter-
che é l'interazione comunicativa attraverso le parole che minado.
abbiamo appreso neUa vita con i nostri cari e i nostri awersa-
E l espíritu del cambio fortuito, como lo llama Saus-
ri, i superiori e gli inferiori, gli strannei e gli amici, entro la
nostra societá.
sure, que está en el interior de la lengua, es el que permite
que se pueda jugar con las palabras eventualmente, pero
( D E M A U R O , 1 9 8 2 , p. 146)
sin alterar el sistema, ya que estas alteraciones no afectan
el bloque que lo constituye, sino sólo a ciertos elementos.
Cuando se habla del bloque entero del sistema se
Una lengua se adhiere a cada movimiento y pliegue tiende a cometer una equivocación al creer que la lengua
de la vida psicológica de los individuos, tanto como a cada es algo totalmente mecánico, hay que estar atentos a no
momento o aspecto de la práctica social e intelectual. creer en esto, la lengua tiene un r o l que cumplir frente
Para Saussure, la lengua es un mecanismo capaz de al pensamiento, no sólo sirve para expresarlo sino también
)roducir un número infinito de signos que funcionan sobre es hilo entre el pensamiento y el sonido.
a base del consenso de una sociedad determinada y res-
ponde a exigencias particulares y contingentes. Así la
lengua será radicalmente social, pero esto no quiere decir
que sea una superestructura, porque al mudar la base
3 Hjelmslev define la lengua de acuerdo a la función que asume, según
económica no cambia el mecanismo funcional, como tam- esto, puede ser definida: según su uso, como esquema y como norma.
poco asume la tarea de servir a una clase determinada Si la lengua se asume como actividad del hombre y es iin conjunto
de hábitos adoptados por una sociedad dada, la definición correspon-
(son los usos especiales de una lengua la que puede llamar- dería al llamado uso de la lengua. Si es institución de carácter social
se superestructura [ D e Mauro, 1 9 8 2 ] ) . y nacional, podría ser definida como esquema, porque posee las carac-
terísticas especiales de un pueblo en un período determinado; pero
Como entidad radicalmente social, la lengua está i n - la lengua podría también ser considerada como norma porque es un
conjunto de reglas y estatutos que el individuo en su actividad lingüís-
serta en el contexto de la sociedad que la usa y la hace tica está obligado a acatar. A l admitir estas tres definiciones de la
vivir, así como en el contexto de la cultura. Según Hjelms- lengua, propone usar la t«rminología de Saussure para distinguirlas,
es ésta: parole, a la lengua como actividad del individuo: langue,
lev, la definición de lengua está vista como una forma a la lengua como institución; y langage, a la lengua con reglas y esta-
específica organizada entre dos sustancias, la del contenido tutos (Hjelmslev, 1976).

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5. L A LENGUA COMO SISTEMA Quant on reconnaít qu'il faut considérer le signe (dans sa
valeur et son existence sociale) on est tenté de ne prendre
A la lengua debemos entenderla como u n sistema de d'abord que ce qui semble dépendre le plus de nos volontés;
conversiones que son necesarias para permitir el desenvol- et on se borne á cet aspect en croyant avoir pris ressentiel:
c'est ce qui fait qu'on parlera de la langue comme d'un con-
vimiento de la facultad de articular palabras, esto nos trat, d'un accord. C'est négliger le plus caracteristique. L e
permitirá también considerar al signo dentro de u n con- signe, dans son essence, ne depende pas de notre volonté.
junto que se llamará sistema. E n consecuencia, podemos (Saussure, 1908-9, p. 21. Citado por D e Mauro, 1975,
decir que la lengua es u n sistema de posibles estructuras p. 1 7 2 ) .

de signos mínimos que producen los mismos signos unidos


a los mismos conceptos. También Wittgenstein piensa que el signo está prote-
De acuerdo con esto, el valor de la palabra está gido de los caprichos individuales, no sólo por el uso social,
subordinado, pues el significado de una palabra está ente- elemento importantísimo para él, sino también por el hecho
ramente en función del sistema de donde la palabra parte. de que la palabra es uno de los cuerpos de signos com-
Así al cambiar uno de sus elementos, cambia todo el plejos cuyas partes no pueden ser cambiadas de un momen-
sistema (recordemos a Wittgenstein). to a otro, al arbitrio; igualmente entenderá el lenguaje
Dentro de ese sistema, que es la lengua, la determi- como sistema, si bien no usará el término propiamente. ^
nación de u n signo viene dada no sólo por lo que quiere Dirá que el signo, usado en forma aislada del sistema, que
decir, sino por lo que no quiere decir, digamos que de- es el lenguaje, se puede convertir en u n lenguaje primitivo;
pende de u n rasgo pertinente. N o existirán los signos al lexema, dirá, será imposible usarlo sin ponerlo en la
aislados, la palabra dependerá del sistema y éste defenderá comunidad particular en donde el hombre está organizado
al signo de los caprichos del individuo. ^ socialmente.
" . . . immaginare u n linguaggio significa immaginare
una forma d i v i t a " , piensa Wittgenstein, así su idea de la
4 Leibniz decía que el fondo y el terreno de una lengua son las palabras,
de ellas "nacen a manera de frutos los valores del saber". lengua como sistema, viene dada porque considera que el
L a palabra hoy en día ya no es utensilio como lo era para la filosofía uso de los signos lingüísticos está relacionado con todas
aristotélica, idea que se extendió hasta el siglo pasado. E r a una
concepción que hacía creer que la lengua, en relación a la mente del las posibilidades de uso de otros signos lingüísticos, u n
que la usa, contenía no sólo los signos de las cosas, sino las cosas signo lingüístico se puede identificar si se puede reempla-
mismas; debidp a esta relación relativamente ciega del signo, no se
lograba un juicio crítico sobre el mundo. zar por otro signo.
E n cambio hoy las palabras sirven a la intención de un mundo eviden-
temente significante. L a palabra es como el reflejo de la conciencia, M a i n che cosa consiste Tusare una parola contrapponendola
pues ella y los gestos son las primeras señales que constituye el ad altre proposizioni? Forse, mentre le usiamo, queste prp-
hombre para tocar la conciencia y así desarrollar la actividad psíquica, posizioni sonó sospese davanti a noi? Tutte? E mentre ne
desarrollo que se hace en dos fases que van unidas: la palabra como
pronunciamo una oppure prima di pronunciarla, o dopo averia
sonido y la palabra como sentido.

L a coscienza si riflette nella parola come i l solé in una picco- in cui si sedimentano usanze, costumi, credenze, modi di
lissima goccia d'acqua. L a parola sta a la coscienza come un ojperare e di produrre, idee religiose, morali, intellettuali, espe-
piccolo mondo a uno grande, come una cellula orgánica al suo rienze di ricerca teórica e filosófica ( . . . ) non sapremmo con-
organismo, come l'atomo al cosmo. Essa é ü microcosmo della cepire una cultura umana senza le parole di una lingua.
coscienza umana (Vygostky, 1980, p. 2 3 2 ) . (De Mauro, 1982, p. 155).
L e parole, con i loro grappoli di accezioni e le esperienze L a explicación de este principio viene dada en las Investigaciones
e memorie che in ciascuna accezione si condensano, sonó scrigni Filosóficas desde el número 2 al 6.

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pronunciata? — No! Sebbene una spiegazione del genere rienza che egli ne h a : forme e valori che egli stesso ha creato,
eserciti su di noi una certa attrattiva, basta che riflettiamo e la cui unione egli solo, solídale coi suoi simili e con se
un momento su ció che effettivamente avviene per accorgerci stesso, puó e sa garantiré. L'esperienza semántica riposa
di essere su una falsa strada. N o i diciamo che usiamo i l dunque sulla possibilitá d'azione delTuomo. (De Mauro,
comando in contrapposizione ad altre proposizioni, perché 1975, p. 2 2 5 ) .
il nostro linguaggio contiene la possibilitá di queste altre
proposizioni. (Wittgenstein, 1980 a [ 2 0 ] ) . La comunicación es pues una experiencia normal para
el ser humano y su garantía está en la disposición a en-
U n signo puede ser sustituido por otros signos l i n - tenderse de los seres humanos, más que en las formas
güísticos siempre y cuando tenga el mismo sentido, * o lingüísticas tendencialmente similares.
dicho de otra manera, un sentido puede ser expresado
La garantía del significar en la comunicación está en
por una diversidad de signos. Lo que significa que
la sociedad que usa las formas lingüísticas, ya que éstas
u n signo puede ser sustituido por otro — " M a l'uguale
en sí no tienen ninguna capacidad semántica, son sólo
senso delle proposizioni non consiste nel loro uguale
instrumentos de los que hace uso el hombre para comuni-
impiego?" se pregunta Wittgenstein, y contesta con el
carse, no se puede creer que las palabras o las frases signi-
ejemplo de que en ruso se dice piedra roja en lugar de la
fiquen algo por sí solas, es el hombre quien garantiza la
piedra roja.
comunicación; todo esto hace desaparecer el fantasma de la
Así, pues, si describimos el lenguaje como un sistema
incomunicación que permanecía en pie hasta comienzos
abierto, nos podemos explicar por qué siempre hay un
de este siglo.
grado mínimo de comunicación.
Mas para que se dé la comunicación, las palabras
usadas por el hombre deben estar insertadas en una red de
6. L A COMUNICACION
relaciones (código) conocida por los usuarios (emitente
y receptor); estos pueden cometer u n error de entendi-
L'uomo é i l solo responsabile. del suo parlare, del quale egli
solo foggia, sorregge e trasforma forme e valori. I I suo parlare miento, o no entender simplemente si una frase que ha
é uno dei suoi modi di intervenire nel mondo, ordinando estado enmarcada en una situación dada es arrancada de
secondo valori coUegati a forme note collettivamente l'espe- ella; podemos decir que entendemos una frase cuando
la valoración sintáctica y la semántica se integran en una
6 E l sentido de la palabra es el conjunto de eventos psicológicos desper-
tados en nuestra conciencia por la palabra. E s algo dinámico y com- valoración pragmática, esto permitirá que dos hombres que
plejo formado por una-serie de zonas diferentes, donde una de ellas tengan u n bagaje de conocimientos distinto puedan enten-
es el significado. E l sentido cambia gracias a una operación mental
diferente de aquella que rige el significado de la palabra. derse, porque viendo la frase desde estos tres niveles
E l sentido de la palabra es una entidad compleja y dinámica expuesta siempre se dará un mínimo de comunicación a pesar de
a un cambio constante, aunque sea dentro de ciertos límites, cambio
gue depende de cada conciencia individual, por esto el sentido será las diferencias.
inextinguible.
E n un último análisis, el sentido efectivo viene definido por la riqueza La comunicación perfecta o la perfecta incomunica-
de los contenidos de conciencia que se refieren a aquello que una ción, hablando semánticamente, no se pueden dar, sólo
palabra dada, expresa; podrá separarse de una palabra cuando pueda
ser asumido por otra palabra cualquiera. Así el sentido será un movi- se pueden concebir como los límites a los que nunca se
miento del pensamiento, es aquello que, hablando en términos semán- llegarán y entre los cuales oscila nuestro comportamiento
ticos, en un momento particular viene indicado por un usuario como
una señal. lingüístico. Contrariamente a lo que piensa el escepticismo

26 27

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semántico que cree que si la comunicación no se realiza conceptos interdependientes. E l signo, como es sabido
plenamente, no se da. gracias a Saussure, es la unión indestructible de significado
La comunicación existe gracias a la lengua que opera y significante, de concepto e imagen acústica, * d e pensée
como u n código creativo en donde las realizaciones de los y forma exterior, es decir, que u n signo es forma de algo
signos se deben someter al continuo llamado del mutuo que reside fuera del signo mismo; es, según Saussure, una
entendimiento, y a la colaboración de los usuarios; pro- unidad psíquica de dos caras. ^ Para De Mauro (Saussure,
ceso que se va dando según una relación de escogencias 1 9 7 9 ) , estas categorías —significado y significante— son
sucesivas y que parten del momento en que se decide clases abstractas, ya que cuando oímos una cierta fonía
hablar y el usuario realiza expresiones de poca profundidad le damos u n cierto sentido para así cumplir una operación
(ya sea a través de u n monema o de varios), y una vez abstracta.
escogida la realización verbal, a través de varios monemas, A l hablar no sólo cumplimos esta operación, sino que
debe buscar una conexión predicativa para lograr la reali- realizamos una actualización de estas clases d e unión que
zación del signo. Por cada escogencia productiva (del existen en potencia en el cerebro. Según esto, el contenido
emitente), se da una receptiva (del receptor). no será aprehendido fuera de la forma que lo expresa, y la
Se logra así u n campo que va desde la incertidumbre forma sola, según decía Croce, no es nada, es algo inerte,
de entender, hasta el entender más comprometido al reco- si logramos pensar en ella como separada del contenido.
nocer el número más alto de indicios, lográndose de esta (De Mauro, 1 9 7 5 ) .
manera la comunicación más alta.
Immagina una scrittura, in cui le lettere vengano utilizzate
Y aún más, el silencio será u n elemento de comuni- per designare suoni, ma anche per designare l'accentuazione,
cación; ante la imposibilidad de comunicar todo lo que e come segni d'interpretazione. (Una scritura puó essere
se quiere decir, se puede optar por el silencio, luego que concepita como un linguaggio per la descrizione d'immagini
el lenguaje ha dado su lucha contra lo indecible; pero sonore). O r a immagina che qualcuno intenda quella scrittura
callar, no responder, las pausas, las no respuestas, los como se ad ogni lettera corrispondesse semplicemente un

puntos suspensivos, etc., son formas que se pueden llamar visto en sentido propio, como pura entidad física (señal). D e esta
de muda elocuencia usadas para significar. E l silencio y la manera semainotnenon era lo que se dice del signo y que no repre-
página en blanco son significativas, el silencio será una senta una entidad física (sentido).
8 Para Bally y Sechetiaye, editores del Cuno de Lingüísiica General
forma de significante. Lo no dicho pesa en la comprensión de Saussure, la imagen acústica según este último, es la representación
del discurso porque está -inscrito en lo dicho. natural de la palabra en cuanto a hecho virtual de la lengua, más allá
de cualquier realización de la palabra.
9 Luis Prieto lo llama entidad bifacial formada por una clase de señales
y una clase de sentidos, así el significado de un signo no es siempre
7. E LSIGNO 7 una clase no universal que coincide con una de las clases que deter-
minan la incertidumbre del receptor o con la suma lógica de dos
o más de estas clases. E s la clase más amplia de señales que es correla-
N o se puede hablar de comunicación o de significado tiva al significado de este signo. Así que cada sema es en consecuencia
un signo, pero habrá signos que no son semas ya que el significado
ignorando el concepto de signo. Signo y significado son no es necesariamente la clase más estrecha (1976).
10 También aclara, y es interesante tenerlo en cuenta, que Saussure le
7 Nos parece útil recordar el pensamiento griego sobre el signo, ya ha dado al concepto abstracto un sentido diferente del valor negativo
que al fin y al cabo de allí parte toda la reflexión lingüística de Occi- con que lo había cargado Kant. Y a no es lo falsamente preciso; para
dente. Para Platón, el signo era aquello que remite a otra cosa ya evitar la confusión usará Saussure con frecuencia términos como sus-
sea natural o convencional; y para Áristóletes, el signo semainon, era tancia y forma antes de usar abstracto.

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suono e le lettere non avessero anche altre funzioni, del tutto Pero el significado sí será un componente indispen-
diverse. (Wittgenstein 1980 a [ 4 ] ) . sable de la palabra, ya que una palabra sin significado será
sonido vacío, por esto podemos considerarlo fenómeno del
Según estas palabras sería una escritura demasia- lenguaje, pero podemos verlo también como fenómeno del
do vacía. Para Hjelmslev esto quiere decir, que la forma pensamiento sólo en cuanto el pensamiento es incorporado
del contenido de un signo puede absorber ese algo, como a la palabra.
sustancia del contenido, así se podrá decir o hablar de: Significado será entonces un fenómeno del pensa-
signo de la sustancia del contenido, y signo de la sustancia miento semantizado o de lenguaje conceptualizado, será
de la expresión. unidad de palabra y de pensamiento. A su vez será pro-
Igual que antes sentimos la necesidad de usar la palabra piedad constante de la palabra, apta para expresar deter-
sentido, no simplemente del contenido, sino también de la minados conceptos, pero no apropiada para expresar otros,
expresión, igualmente aquí, en aras de la claridad, a contra- así el significado debe ser un factor constante que deter-
corriente de los conceptos consagrados por el tiempo, cuyas minará su movilidad con respecto a los conceptos. Hjelms-
limitaciones se hacen ahora cada vez más evidentes, sentimos
lev llama significado fundamental al carácter más abstracto
el deseo de invertir la orientación del signo: en realidad debe-
ríamos poder decir precisamente, con el mismo derecho, que que debe estar detrás de los significados específicos, de
un signo es signo de una sustancia de la expresión. L a secuen- este significado fundamental abstracto sale una sucesión
cia de sonidos que integran la palabra anillo, por sí misma y fija de significados especiales posibles. Esto se debe a que
como fenómeno único, pronunciada hic et nunc, es una entidad el pensamiento, en el curso del desarrollo histórico de la
de sustancia de la expresión, la cual en virtud del signo y sólo
lengua, muda la estructura misma del significado de las
en virtud de lo que de él se deriva, se ordena con una forma
de la expresión y se clasifica bajo la misma juntamente con salabras, muda la naturaleza psicológica de este significado
otras diversas entidades de sustancia de la expresión (otras Duscando siempre formas superiores más complejas que en-
posibles pronunciaciones, por otras personas o en otras oca- cuentran su expresión en conceptos abstractos, lo que hace
siones, del mismo signo). (Hjelmslev, Louis, 1980, p. 8 6 ) . que cambie no sólo el significado de una palabra, sino el
modo en que la realización se refleja en la palabra.
8. E L SIGNIFICADO

9. L A ARBITRARIEDAD D E L SIGNO n
E n el ámbito del lenguaje verbal, el significado es
aquello que un signo comunica. Hablar del significado i m -
La relación que une el significado al significante es
plica definir el signo lingüístico que Saussure actualizó
como una relación íntima entre el significante y el signifi- arbitraria, Saussure tiene buen cuidado de usar la palabra
cado, así el significado es parte del signo mismo cuando lo 11 De Mauro comenta que Saussure después de varias oscilaciones entre
los términos, arbitrariedad y convencionalidad, se decidió por el uso
vemos como signo de la sustancia del contenido. del término arbitrariedad, porque convencionalidad confundía el con-
A su vez el significado es la unidad que refleja, en cepto con el pensamiento de aquellos que concebían la lengua como
una nomenclatura, cosa de la que no participaba. (Ambos términos
la forma más simple, la interdependencia del lenguaje y el son tomados de Whitney en Language and the Study of Language).
pensamiento. Unidad no descomponible ya que no se puede Se decide por el término arbitrariedad por " . . . che l'aggettivo espri-
meva bene l'insussistenza di ragioni naturali o logiche ecc. nel deter-
decir de ella que es sólo un fenómeno del lenguaje o sólo minare gli articoli della sostanza acústica e semántica" (Saussure, nota
un fenómeno del pensamiento. 137. 1978, p. 413).

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arbitrariedad, de manera que no pueda confundirse su ver- E l hecho que tanto los significantes como las signi-
dadero sentido con la idea aquella de que el sujeto parlante ficaciones se asemejan o se distinguen, es decir que haya
es absolutamente libre al hacer la relación significado- en la lengua diversidad o semejanza fonoacústicas o con-
significante; para él más bien la arbitrariedad significa ceptuales, y aún psicológicas, no explican el porqué se
algo inmotivado, es decir, que el sujeto parlante hace esta dan tales semejanzas o distinciones, dependen según De
relación en forma inmotivada, pero teniendo en cuenta Mauro, del dominio de la accidentalidad histórica y por
que la arbitrariedad del signo no es total, porque no lo eso son arbitrarias.
es la del significante. Así el signo lingüístico es arbitrario porque es una
Es importante tener en cuenta el presupuesto que combinación arbitraria de dos faces, el significado y el
dice que el signo puede ser relativamente inmotivado, significante, que son ante todo arbitrarios en cuanto uni-
porque podemos concluir con que no todos los signos son fican, sin ningún orden lógico, a signos muy dispares o d i -
inmotivados, y que hay grados de arbitrariedad. Saussure ferentes de muy distintos tipos de realizaciones fónicas.
piensa que sólo una parte de los signos es absolutamente De esta arbitrariedad es que depende la naturaleza siste-
arbitraria; he aquí u n ejemplo que da: la numeración mática del signo lingüístico.
veinte es u n signo inmotivado, no obedece a ningún obje- Pero el signo como está formado por dos clases abs-
tivo o relación, pero diecinueve no es inmotivado, obedece tractas, constituidas en forma arbitraria, es radicalmente ar-
a la unión de diez y nueve; de manera que según Saussure bitrario y será la arbitrariedad el principio fundamental de
se debe tener en cuenta la limitación de la arbitrariedad toda la realidad lingüística que, según Saussure, conforma
jorque, si bien todo el sistema de la lengua se apoya sobre el principio de clasificación de los sistemas semiológicos
a arbitrariedad del signo, que aplicada sin restricciones nos que dependerán del mayor o menor grado de arbitra-
traería una complicación enorme, la inteligencia humana riedad.'^
llega a imponer u n cierto orden y una reglamentación en E l grado de arbitrariedad del signo, que es en prin-
ciertas partes de la masa de signos; dentro de esta regla- cipio clasificación de los códigos semiológicos, va desde
mentación es que se introduce el signo inmotivado. Quizás los lenguajes simbólicos que no poseen ningún grado de
si no se impusiera esa reglamentación, el signo caería u n arbitrariedad, hasta lenguajes como el de la poesía que
poco en el caos. Si se sabe el grado de arbitrariedad del comporta u n alto grado de arbitrariedad (en el símbolo
signo se puede conocer su comportamiento.
E l concepto de la arbitrariedad del signo merece Según Benveniste, cuando Saussure afirma que la relación entre signi-
cierta aclaratoria, para De Mauro la arbitrariedad reside ficado y significante es arbitraria, sólo lo puede demostrar saliendo
fuera de la lengua, ya que sólo la referencia es algo inamovible
en el hecho de que y extraño a la lengua, y por esto puede consentir la afirmación de
arbitrariedad del signo (De Mauro, 1975). Pero después que se publi-
caron los manuscritos saussurianos, se aclaró este punto pues se logró
. . . i l parlante categorizza una particolare entitá fónica come ver que acerca de la arbitrariedad del signo había cierta ambigüedad
una altra entitá significante e una particolare realtá percettiva y oscilaciones en su pensamiento, ambigüedad que aclara Godel al
e concettuale come una altra entitá sigriificata. I n tali catego- hacer una lectura detenida del texto de Saussure, y logra entender el
rizzazioni non c'e nessun motivo intrinseco alia natura della sentido profundo por el cual "se ci si domanda che cosa sonó in se
stessi significante e significato, si deve costatare che essi non esistono
sostanza fonoacustica o concettuale (Saussure, 1979, p. 3 8 3 ) . se non in virtü del loro légame, che e arbitrario, ossia che né 1' uno
né l'altro corrisponde a una realta precostituita" (De Mauro, 1975,
p. 136).

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es más que todo el significante el que tiene la caracterís- constituida por el consentimiento social. Según De Mauro,
tica de no ser jamás arbitrario, implica u n rudimento de este consenso social viene desde los tiempos de Aristóteles,
relación entre el significado y significante, como por ejem- 3ero siempre dentro de los límites de la concepción de la
plo el símbolo de la justicia). engua como nomenclatura; al consenso social se le dejaba
La arbitrariedad del signo es la base sobre la que se mano libre sólo en la organización de los significantes:
apoya el edificio de la lengua como forma, es la regla " E l mundo de los significantes era considerado como u n
fundamental de cada posible juego lingüístico. mundo dado y preexistente al lenguaje. E l mundo de los
Pero debemos recordar que arbitrariedad no es que significantes y sus articulaciones estaban vistos como arbi-
el significante dependa de la libre escogencia del hablante, trariedades determinadas por la convención". (De Mauro,
o emitente, el cual no puede cambiar a voluntad u n signo, Apuntes de clase, 1 9 8 2 ) . Ese mundo de significantes se
una vez que se ha establecido u n grupo lingüístico, la arbi- imponía a la convención como una realidad preexistente
trariedad es inmotivada, en relación al significado con el a ella.
cual no tiene en la realidad ningún enlace natural.
Los signos lingüísticos son arbitrarios tanto en el También en la teoría de Saussure, o aquella que se
reagrupar los posibles sentidos en significados, cuanto en desprende de sus ideas, el consenso social lo es todo, el
reagrupar los sonidos en fonemas y significantes; y aunque uso que una sociedad hace de su propia lengua es la con-
no obedecen a normas preexistentes a la lengua misma, dición por la cual es capaz de estar viva.
la arbitrariedad no degenera en arbitrio individual, pues
así se haría imposible la comunicación. La arbitrariedad E l propio ser social de la lengua le evita caer en
está limitada por la misma naturaleza de la lengua, es manos de los caprichos personales o de grupo; y por otra
decir que los límites son inherentes al signo mismo, esto parte el estar radicalmente enlazada a la sociedad, expone
desde el punto de vista semiológico. a la lengua a los cambios, cuando las exigencias de distin-
De la arbitrariedad del signo.se desprende una conse- ciones ya existentes se agotan o disminuyen, o por el con-
cuencia importante, como lo es la mutabilidad de la lengua trario, surja la exigencia de distinciones nuevas.
en el curso del tiempo debido a que el significado y el
significante, y su organización en sistemas, están libres de Arbitrariedad y sociabilidad de la lengua, combinadas
vínculos rígidos que los aten a una realidad lógica, eso a la complejidad de las relaciones opuestas y sintagmáticas
)ermite que la lengua sufra cambios profundos, por esto entre la unidad concreta, hacen que el surgimiento y
a posibilidad de reagrupar signos parece infinita. Pero desaparición de los significados a través del tiempo sean
absolutamente impredecibles.
la arbitrariedad es, en último análisis, aquello que amor-
tiza las sacudidas provocadas por las posibles transforma- De acuerdo a esto los cambios golpearán a un ele-
ciones sufridas por la fonética y los significantes. mento singular para luego revertirse en todo el sistema
También de la arbitrariedad deriva, según De Mauro, de la lengua, como ya hemos visto.
la radical sociabilidad de la lengua, ya que los signos, en
L'arbitrarietá é la modalitá genérale con cui la capacita di
su interés por diferenciarse y organizarse en u n sistema, coordinare e associare, che é un universale biológico comune
no responden a exigencias naturales, n i externas, la única a tutti gli uomini, opera nel tempo, dando luogo a sistemi
base válida para configurarse en esta o aquella lengua está linguistici difformi dall'una all'altra societá umana. E s s a é

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dunque la modalitá con cui ció che nell' uomo é ereditá le permitirá a la lengua ser libre, porque a su vez permitirá
biológica, collocata al di qua delle contingenze sociali e tem- a las fuerzas sociales ejercitarse sobre ella.
poraU, si incontra con la contingenza storica. É la forma Una vez convencidos de la relativa arbitrariedad de
secondo cui la natura si fa storia. (De Mauro, en Saussure,
la lengua y de cómo funciona la arbitrariedad, nos damos
1978, p. X V I I I ) .
cuenta que el signo lingüístico conlleva u n empleo par-
ticular: permite libertad a la lengua.
10. MUTABILIDAD E INMUTABILIDAD D E L SIGNO Cada vez que se emplea una misma palabra se asiste
a u n acto fónico diferente y por lo tanto a u n nuevo acto
Hablar de inmutabilidad y mutabilidad del signo a la psicológico.
vez, es parte de la dialéctica de la lengua, los cambios De esta manera la relación que se establece entre dos
debidos al tiempo son relativos, ya que ellos mismos son formas de emplear una misma palabra, no se apoya n i en
en cierta manera fieles al pasado, es decir, que de alguna la identidad material, n i en su semejanza en el sentido,
manera domina la materia antigua, la infidelidad al pasado sino en los elementos que habremos de buscar y que nos
es relativa. harán llegar más o menos cerca de la naturaleza efectiva
Verdaderamente la comprensión de este hecho es bien de la unidad lingüística.
complejo, la lengua situada en la masa social y tocada por E l procedimiento para el oyente es distinto porque
el tiempo no llega a ser posible de modificación, es decir, debe partir de un punto fijo que no varía: lo que ortodoxa-
que a la vez que es parte de la masa social, y que el tiempo mente significa la palabra oída. Así puede darse cuenta
la acosa, no puede ser cambiada; y por otra parte, la arbi- de la variación o matiz que se da en la palabra.
trariedad de sus signos lleva en sí u n comportamiento de Es importante hacer notar que el creador o hablante
libertad que pudiera permitir una relación cualquiera entre tiene u n punto de vista diferente al oyente o receptor,
la materia fónica y las ideas, pero resulta que estos dos por eso el receptor debe indagar en el interior del hablante,
elementos unidos en el signo, conservan su propia vida, quien puede utilizar una misma fonía con u n sentido psi-
y sólo la lengua se alterará bajo la influencia de todos cológicamente distinto, o utilizar diferentes fonías para
los agentes que pueden incidir tanto en sus sonidos, transmitir igual sentido particular. E l receptor, en cierta
como en sus sentidos. Así las leyes de transmisión de la medida, decodifica lo codificado por el emitente, se con-
lengua no tienen-nada que ver con aquellas en su for- vierte en intérprete.
mación. Esto parece acabar con la idea del valor de las pala-
Todo esto nos habla de la naturaleza social como bras, ya que es sólo ilusión considerar a u n término
característica interna de la lengua, siempre ante nosotros únicamente como la unión de u n cierto sonido con u n cierto
se dan dos características inseparables, lengua y masa concepto, si así se le define, siempre estaría aislado del
hablante, y esto permite decir que la lengua es vital, quizás sistema lingüístico, porque es de la totalidad que se debe
esta idea es lo que le permite a Saussure hacer una rela-
ción paralela entre lengua y el juego de ajedrez: "une langue 15 Para D e Mauro este concepto es muy importante dentro del pensa-
n'est comparable qu'a la complete idee de la partie d'échecs, miento de Saussure, porque este hecho nos habla del conocimiento
que tenía el lingüista suizo de la individualidad absoluta no repetible
comportant á la fois des changements et des états" (Saus- del único acto expresivo que él Hama parole. Tenía conciencia de la
sure 1978, p. 423, n . 1 6 2 ) . Por otra parte el tiempo no totalidad concreta del habla, aquella hic et nunc que rige este acto.

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11. L A CREATIVIDAD E N E L L E N G U A J E
partir, para obtener mediante el análisis, los elementos que
lo contienen.
La creatividad es la propiedad más importante del
Dicho de otra manera, una palabra es susceptible de
lenguaje verbal, propiedad del todo ajena a los lenguajes
cambio al ser sustituida por otra de igual naturaleza, así
simbolizados, y que le permite la continua renovación de
su valor no estará fijado hasta constatar la posibilidad de
sustitución por otra que fije el concepto, lo cual significa sus expresiones.
que para que una palabra pueda tener cualquier otra signi- Es la disponibilidad a la variación de las formas de
ficación, tendrá que depender del concepto con el cual un sistema o de u n código semiológico, radicada en los
se la puede sustituir; y también su valor tendrá relación usuarios del sistema o código, y reconocible como pro-
con aquellas otras palabras que le son opuestas. piedad del mismo (De Mauro, 1 9 8 2 ) . E n un código crea-
Por todo esto, las lenguas están sujetas a u n posible tivo, las realizaciones de signos se deben someter al
xl y permanente movimiento de transformación de las ar- continuo llamado de nuestro entendimiento, a la colabo-
ticulaciones formales en la masa hablante a través del ración de los usuarios. Así, la ausencia de cualquier
tiempo, y los valores atribuibles a los signos dependen, realización también puede resultar significativa.
cada vez más, del conjunto y del grado de entendimiento La creatividad se manifiesta en el plano del .signifi-
que se establezca entre hablantes de diferentes estratos cante y en el plano del significado dada una serie de
sociales y diferente colocación temporal. oscilaciones entre u n máximo de informalidad y u n mínimo
La historia cultural y lingüística muestra cómo rudi- de formalidad; dependerá así del uso más relajado, o del
mentarios usos especiales se van enriqueciendo según su uso más formal del signo.
desarrollo, sofisticándose, hasta dar lugar a una construc- Veamos cómo se da esta creatividad en los planos
ción simbólica dotada de una lengua autónoma, respecto lexical, sintáctico y de contenido.
a la lengua de partida. E n el plano lexical habrá una tendencia a escoger
Entonces podemos decir que al lenguaje lo caracteriza nuevas palabras, a utilizar viejas palabras, a redeterminar
la cooperación, en su constituirse, entre factores que viven viejos sintagmas, a acoger nuevas expresiones idiomáticas,
en aislamiento en otros códigos semiológicos, factores a la construcción de bloques terminológicos, a utilizar pala-
como lo son, la capacidad de articulación, la sintacticidad, bras de uso técnico-científico, etc. E n el plano de la sin-
la convencionalidad del signo, su arbitrariedad, la posi- taxis, habrá una posibilidad de pleno reconocimiento de
>j bilidad de creación o creatividad, la posibilidad de con- las articulaciones de cada signo y sus conexiones con
formar neologismos, la ilimitación del contenido posible otros. E n el plano del contenido se pueden rearticular el
t de los signos, etc. Son características que se valorizan recí- plano de la realidad lingüística y el plano de la realidad
\e y establecen entre sí enfrentamientos fecundos; extralingüística en una pluralidad de planos difíciles de
\r esto, la capacidad del lenguaje le concede a la especie delimitar. E n consecuencia, vehicular u n sentido es siem-
• humana u n puesto excepcional, ya que es la usuaria de u n pre u n problema que depende de la interrelación de estos
^ tipo de código semiológico capaz de todo esto. tres niveles.
La creatividad, dicho de otro modo, puede darse en
tres diversos aspectos de la realidad lingüística: a nivel
de la expresión, dado u n signo, se puede realizar en u n

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número infinito de modos fonética y semiológicamente del contenido, y una de la expresión; pero el previo entendi-
diversos. A nivel del signo, dada una lengua, se puede ñiiento entre usuarios no es suficiente, como en el cálculo,
producir con ella u n número infinito de signos. A nivel para aclarar la vaguedad, porque siempre hay una continua
de la lengua, dada la capacidad del hombre de construir reconfirmación del acto de producción y recepción de cada
el lenguaje, se puede constituir infinidad de diversas len- realización del signo; así se da u n contacto recíproco
guas o sistemas de producción de signos. oscilante, casual, entre los usuarios.
En f i n , la creatividad permite la imposibilidad de De esta manera iremos desde la nitidez del lenguaje
calcular la sinonimia en el plano de las relaciones entre los escrito, hacia una nitidez precaria en donde el signo será
signos, debido a aquello que se puede llamar metaforicidad sólo u n indicio elusivo a una forma significante.
y vaguedad de los significados de monemas y signos. Para hablar de la metaforicidad debemos referirnos
a la definición de lo que es la metáfora, que parece no
haber cambiado mucho desde los tiempos de Aristóteles,
12. LA VAGUEDAD Y LA METAFORICIDAD quien decía que metáfora es la "traslación de un nombre
ajeno", de un género a la especie, de la especie al género,
La vaguedad surge cuando, sabido el referente y cono- o de especie a especie; de esta manera la mente del hombre
cida, la expresión, no podemos decidir en base a considera- construirá la metáfora por analogía.
ciones formales, si esa expresión es aplicable siempre, o no Veamos la definición actual que De Mauro da sobre
es aplicable jamás al referente. la metaforicidad en el lenguaje: "será, dice, la transferibili-
La vaguedad del significado en las palabras hace que dad progresiva de los límites del significado hasta incluir
el significado no sea satisfactoriamente descrito en su posi- nuevos sentidos, que en base a la contigüidad nacen y se
bilidad de extensión a ciertos y nuevos sentidos, sino en buscan entre sí".
relación a unos usuarios dados, en u n tiempo dado. Pero Para Aristóteles, el espíritu operaba de tal manera
no comporta necesariamente el relajamiento, n i del signifi- porque no había podido jamás formarse una idea clara de
cante, n i del significado, comporta más bien la posibilidad una cosa no sensible, la única forma de asirla era aveci-
de oscilación entre formas más nítidas y formas más rela- nándose, parangonándola o asemejándola a alguna cosa
jadas. sensible.
La vaguedad puede ser pragmática y sintáctica, en Para De Mauro, la metaforicidad funciona de acuerdo
la medida que interesa a "los signos y al código; cuando a dos puntos de vista diferentes: desde el punto de vista
nos tropezamos con el lenguaje gestual del hablante, que genético, donde pareciera que el hombre tiene necesidad
puede ser usado en forma ambigua, nos encontramos en de nombrar nuevos sentidos, por eso debe romper la de-
este caso con que la vaguedad será condición del signo, terminación semántica propia de ciertos códigos, transfor-
el signo será entonces instrumento de una actividad elusiva, mando los signos con significados determinados, en pala-
de u n juego tendiente a establecer un entendimiento entre bras con significado y significante flexibles.
usuarios que establecen una relación entre una zona o área Desde el punto de vista fenomenológico y funcional,
conviene asumir la indeterminación como condición p r i -
14 Tenemos que tomar en cuenta que no nos referimos a la vaguedad
subjetiva debido a aquellos usuarios mal informados del funciona-
maria, así será posible extender los confines del signifi-
miento de un código. cado de cada monema o signo, hasta tocar sentidos nuevos

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sin cambiar el código, o sólo modificándolo en algún Por todo esto, el significado se puede expandir, aun-
punto, en función de nuevas miras de la significación, de 'que a veces no está muy clara esta expansión, ya que la
aquí se desprende: persona que vive en el interior de una lengua tiene la
impresión que el tejido de las acepciones es muy compacto,
. . . che un códice semiológico i cui significati siano caratte-
que existe un único hilo entre las palabras y sus acepciones,
rizzati da metaforicitá non é descrivibile se non in stretta
connessione con le usanze e credenze vigenti in un certo
pero no es así, cada palabra tiene varias posibilidades de
tempo tra i concreti gruppi di utenti. (De Mauro, 1982, jugar con ellas.
p. 1 0 2 ) .

La metaforicidad y la vaguedad del lenguaje también 14. OSCILACION D E L V O C A B U L A R I O

sirven como condición de la constitución de expresiones


fuertemente determinadas y formales. Por su plasticidad, E l vocabulario de las lenguas histórico-naturales tiene
el significado de los signos vagos es tan manipulable, de una relación directa con el sentido de creatividad del sis-
acuerdo a la tolerancia de los interlocutores, cuanto rigu- tema, relación que le permite la posibilidad de convertirse
rosos y delimitados en las tecnologías científicas y los en algo altamente inestable. Dicho de otro modo, debido
lenguajes simbólicos, así como en la utilización iconológica al sentido de creatividad de la lengua se advierte una osci-
o gestual de ritos. lación del vocabulario, oscilación que le asigna a ella u n
carácter cambiante.
E l vocabulario oscila gracias a los deslizamientos o co-
13. L A A C E P C I O N
locaciones oscilantes de u n mismo monema; que va de
una serie a otra, pero estas oscilaciones del vocabulario
La indeterminación del significado de los signos per-
no tienen carácter permanente, ya que están continuamente
mite la conformación de la acepción, porque es condición
cambiando debido a los usos lingüísticos. Algunos lexemas
gracias a la cual el usuario puede ensayar la extensibilidad
están institucionalizados por el uso de generaciones de
del signo hasta lograr alcanzar u n sentido nuevo o diverso
hablantes, otros, son formaciones ocasionales dadas gracias
a los ya usados.
a las posibilidades de oscilación del vocabulario.
Ese sentido diverso puede darse por la repetición de
una palabra o frase con modalidad diferente al pasado o al Entonces podemos ver cómo las oscilaciones del con-
junto de vocablos conocidos, varía de acuerdo a una comu-
futuro, hablamos de una palabra que se usa en dos momen-
nidad lingüística, o de un momento a otro en el tiempo,
tos diferentes o en dos puntos del espacio; por eso, cada
o de u n punto a otro de la estratificación social.
vez que se usa tendrá u n sentido nuevo debido al trasporte
de la palabra de u n ámbito a otro ámbito social y cultural- Podemos decir también que las oscilaciones del voca-
mente diferenciado. bulario están en relación a problemas de otra naturaleza,
Pero la acepción no será siempre conocida por todos, como lo son sociológicos, cronológicos o de prohibición.
se darán casos de palabras pertenecientes a un ámbito muy Por ejemplo, las palabras que pasan de un ámbito
íarticular, que van usadas en ese ámbito, sólo cuando ellas profesional al vocabulario común (átomo), son oscilacio-
ogran deslizarse de este espacio a otros más usuales, toman nes de origen sociológico; las oscilaciones de motivación
el carácter general de acepción. cronológica, son las de aquellas palabras comunes que se

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16. USO D E L A S PALABRAS
convierten en arcaísmos o viceversa; y por último las osci-
laciones debido a las prohibiciones, son aquellas palabras
La idea de la importancia del uso de las palabras está
que están vetadas por una sobrecarga emotiva (cáncer),
presente desde siempre en el pensamiento lingüístico,
o porque son palabras crudas, o eufemismos.
líoracio en su Ars Poética pensaba que siempre será lícito
La oscilación será, pues, otro factor de variabilidad
agregar a las antiguas, otras palabras nuevas, porque, como
del vocabulario a través del tiempo, así como por otra
mudan las hojas en u n bosque, así mudan los vocablos de
parte conformará la movilidad entre la masa parlante.
las lenguas. Igualmente, dice, morirán esos vocablos de
hoy, si así lo quiere el uso, que es el que tiene en la mano
15. L A FUNCION METALINGÜISTICA R E F L E X I V A
cada decisión, cada ley, cada norma en materia lingüística.
Y Leopardi en el Zibaldone, escrito en 1821, observaba
La estructura de los signos lingüísticos prevé la auto- algo que puede considerarse vigente hoy en día, decía que
corrección, y es tal que admite en sí, como parte constitu- "cada individuo tiene una lengua propia, derivada del uso
tiva del signo, toda suerte de enmiendas adjuntivas, correc- habitual que hace de ciertas voces escogidas entre la diver-
tivas, o de tachaduras; esta propiedad se debe a la sidad de frases sinónimas que tiene una lengua, será así
posibilidad metalingüística reflexiva de la que goza el signo un lenguaje que ya es costumbre", por lo tanto el signifi-
lingüístico. cado de la palabra deriva del uso diario y de las circuns-
La función metalingüística reflexiva será como un tancias en donde aquella palabra es usada.
espejo deformante; es el uso de un signo como nombre La lengua, contaminada de este uso diario, hace que
de sí mismo o de una de sus partes, o mejor, la reflexión las palabras ya oídas vengan impregnadas de las impre-
de las palabras sobre las palabras, con las palabras mismas. siones que las acompañaron cuando fueron oídas o dichas
Podríamos decir que es un signo que se refiere a sí en circunstancias especiales.
mismo, o a otro signo. La reflexión sobre sí mismo es la Pero si bien el uso de la lengua depende de los indi-
capacidad autontmica del lenguaje y es ilimitada. Es lo viduos, y de sus impresiones, este individuo pertenece tam-
que permite la autocorrección, es la llamada función de bién a una colectividad histórica y por lo tanto.
editing (De Mauro, 1 9 8 2 ) .
La autonimia es la gran transgresión para el lenguaje L a realtá é che il segno é connesso al significato della tradi-
simbólico, porque permite- el readaptamiento mediante la zione storica venutasi lentamente costituendo ed evolvendo
attraverso l'infinito ripetersi e rinnovarsi del coUoquio umano,
reflexión sucesiva, para comunicarle cierta certeza al len-
e che conviene sempre sostanzialmente rispettare anche in
guaje histórico-natural, y es también fuente de lo contra- ogni parziale innovazione, perché fare altrimenti significhe-
dictorio y, como tal, puente a través del cual pasan signos rebbe affrontare un'impresa tanto difficile quanto gratuita
que contradicen la conexidad sintáctica. ( . . . ) Per questo aspetto, nuUa di piü prettamente strumen-
tale, di piü radicalmente subordínalo alia sua capacita d'uso
del linguaggio. L a sua bontá é tutta nella sua efficienza
comunicativa: se con esso ci si intende, lo scopo é raggiunto
( . . . ) D i qui el fatto che neWuso, cioé nella piü frequente
o stabilizzata consuetudine dei parlanti, sia el canone ultimo
della funzionale correttezza di una lingua. (Calogero, Estética,

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semántica, storica. 1947, p. 181. Citado por D e Mauro, 17. E L HABLA
1975, p. 1 8 5 ) .
Históricamente el habla precede la lengua, aunque si
Esto evita claramente el arbitrio individual de la bien ésta es necesaria para que el habla sea entendib e, el
palabra, cosa que el propio Saussure también pensaba. habla es indispensable para que la lengua se estabilice;
habrá así una interdependencia entre las dos, lo importante
L e systéme de signes est fait pour la coUectivité, et non pour
un individu, comme le vaisseau est fait pour la mer. . . L e es que siendo el habla una manifestación anterior a la len-
systéme. . . tend toujours a trouver ce milieu oü seulement gua, y siendo como parece, según Saussure, una realización
il vit. (Citado por D e Mauro, 1975, p. 176 del Cours de individual, se acerca mucho más al pensamiento del hom-
linguistique genérale, 1908-1909, introduction [d'aprés des bre. De allí la tendencia a tratar de reproducir mediante
notes d'estudiants, en: " C a h i e r s F . de Saussure", 15, 1957,
pp. 5 - 1 0 3 ] ) .
mecanismos escritos el pensamiento del hombre.
Como la lengua siente la necesidad de ser represen-
Así parece estar claro que el uso de una palabra tada, apela a signos tangibles como lo es la escritura, para
depende de las relaciones extralingüísticas, por eso el así poder fijarse en imágenes convencionales. Estos signos
lenguaje no es sólo u n juego fono-acústico regulado por tangibles serían imposible de encontrar en el habla, pues
ciertas normas, consiste más bien en usar formas poniendo es casi imposible fotografiar en todos sus detalles el habla.
en correlación ciertas reglas con hechos y comportamientos La lengua será el conjunto de convenciones necesarias adap-
extralingüísticos. De esta manera, las formas lingüísticas tadas por el cuerpo social para permitir el uso de la facultad
tendrán u n significado de acuerdo a como ellas son usadas del lenguaje en los individuos, a pesar de esta última defi-
por el hombre, la garantía de su significado viene sólo nición, podemos ver cómo ambos conceptos, lengua y habla,
dada por su uso. son u n tanto ambiguos y por lo tanto difíciles de meter
Hablar forma parte de una actividad o forma de vida, en una definición muy clara, por eso admiten varias defi-
y depende mucho de los modos de empleo de las palabras, niciones que se complementan unas a otras.
se puede hablar de u n cierto mecanismo en el uso de las Sería conveniente aclarar un poco el pensamiento de
palabras, pero lo importante es hacer notar esa posibilidad Saussure, por considerarlo muy importante con respecto
que tiene la palabra de ser usada en contraposición a otra a estos dos conceptos. Por lo dicho anteriormente, la
proposición, para así explicar su uso. E l uso de una frase lengua tiene una evidente relación con lo social, y el habla
se conecta con el conjunto.de las posibilidades de uso de lo tiene con lo individual, de manera que al separar lengua
otras frases. La misma posibilidad de ser identificada por de habla, estamos separando lo social de lo individual, lo
sus elementos constitutivos, está en la conexión con otras esencial de lo accesorio. Esto parece darnos una idea de
frases que son una alternativa de uso. lo que se inserta en estos conceptos. De Mauro dice que
la distinción entre langue y parole tiene un carácter eminen-
temente dialéctico.
15 Tullio D e Mauro, en el extenso trabajo realizado a través de las
anotaciones del Corso de Lingüistica genérale, aclara las posibles tra-
ducciones de las definiciones usadas por Saussure en gran parte de
los idiomas modernos, así en español será "lengua" para langue,
"lenguaje" para langage y " h a b l a " para parole.

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La langue, entendida como esquema, y Saussure así se deben a la razón de que solamente puede emitir sonidos,
lo entiende, es el sistema dentro del cual se colocan identi- o los puede imitar, sino porque es una ejecución individual
ficándose funcionalmente las significaciones y las realiza- que depende exclusivamente de él.
ciones fónicas del hablar, es decir las significaciones y Hjelmslev asevera que de la misma manera como el
fonías del solo acto de parole, tal sistema regula el habla hííbla puede ser considerada como un documento de la
y será su única razón de ser. lengua, el acto del hablar puede ser considerado como u n
Así como la lengua es sólo el producto que el indi- documento de uso individual, y el uso individual puede
viduo registra pasivamente sin premeditación alguna, el ser considerado a su vez como un documento colectivo,
habla es u n acto de inteligencia individual en el cual el todo esto sin coartar las posibilidades de libertad y espon-
sujeto parlante distingue las combinaciones con las cuales taneidad del acto, ya que el uso sólo podrá ser u n conjunto
se usa el código de la lengua, adecuándolo a su pensa- de posibilidades entre los que todo acto tendrá libre
miento personal, y que funcionará gracias al mecanismo expresión.
físico-psíquico que le permite expresar tal combinación. E l rasgo individual se confirma, cuando nos damos
La importancia del habla quizás viene dada porque es u n cuenta que el habla es el signo distintivo de la personali-
acto que precede a la lengua, aunque sean interdependien- dad, del hogar, y de la nación, pero no es sólo una opera-
tes, y la primera sea a u n mismo tiempo, instrumento de ción pasiva, sino que es un medio para plasmar la propia
la otra. Pero aún siendo interdependientes, son dos cosas experiencia que está en el contenido. Se acentúa el concepto
absolutamente distintas, que en u n momento determinado individualista del habla cuando recordamos que ella se
se pueden estudiar separadamente. desarrolla según el carácter arbitrario del hablante, de ma-
Pero así como la lengua representa la colectividad, nera que las combinaciones sobrepasan los marcos que
y por esto la colectividad de alguna manera incide en ella, dicta la gramática, es una unidad que es una realidad.
y reprime a la lengua escrita, el habla es u n acto libre, que E l hablar es articulado, porque los signos lingüísticos
no depende de la colectividad, que, dependerá de las combi- están compuestos de partes significantes (sintagmas, pala-
naciones del que habla, serán actos de fonación voluntarios bras, monemas) que se combinan para formar el signo;
y necesarios para ejercer la combinación escogida libre y pero el hablar también es combinatorio. E n esta forma,
momentáneamente. con u n número relativamente pequeño de elementos, pode-
Resumiendo, -el habla tendrá una posible definición mos construir u n número relativamente grande de signos
de acuerdo a tres características que se entrecruzan y le lingüísticos diversos aunque estas dos características hay
son indispensables; el habla es ejecución — e l uso consti- que tenerlas en cuenta, no alcanzan la totalidad de los
tuye el objeto de la teoría de la ejecución— es individual signos verbales, n i caracterizan el habla con respecto a
y es libre, así vemos que es una noción compleja. Será u n otras formas de comunicación.
acto individual de voluntad y de inteligencia, que depende E l habla es en cierta medida un caso particular de
de las combinaciones del código que hace el sujeto parlante comunicación representado por las expresiones. Es también
para adecuarlas al pensamiento personal. Este hombre que una acción comunicativa que tiene u n resultado particular
utiliza el habla está haciendo una ejecución personal e indi- (es decir, se utiliza una fonía determinada para dar una
vidual debido a que los conceptos que emite, y que pro- significación determinada). Se creará así una relación entre
ducen los mismos signos unidos al mismo concepto, no lo fonoacústico y lo lógico-psicológico, estableciendo que

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los valores de la significación son los significados. Desde Además el lenguaje oral es bastante más pobre, lo
ambos puntos de vista, estos valores se limitan recíproca- que hace que se sirva de las mismas palabras con mayor
mente para hacer un sistema diferente del simple acto frecuencia. Así para el enriquecimiento del lenguaje, pare-
del habla. ciera que el escrito es el más apropiado, pues su vocabulario
esí más extenso y rico, ya que le está permitido una esco-
18. LENGUAJE ESCRITO Y LENGUAJE ORAL
gencia lexical que le viene de la experiencia del hablado.
Esta diferencia, desde el punto de vista formal, está
Sobre estas dos formas de comunicación, por años, poco delimitada, porque es posible escribir como se habla,
en forma alternada, los estudiosos del lenguaje le han ido o hablar como un libro, así ambos lenguajes pueden oscilar
dando importancia a una vieja polémica, al parecer sin po- entre uno y otro.
nerse de acuerdo; todavía hoy no está muy definida la E l lenguaje oral es, en cierta manera, un diálogo en
importancia de uno sobre el otro. Ya para Sócrates, el len- donde las abreviaciones y la predicación se hacen porque
guaje escrito era el cadáver del logos, y hoy en día, para un los interlocutores se encuentran en una misma situación
estudioso como Pagliaro, el signo lingüístico vive sólo en práctica, de allí que hay una comprensión recíproca que
la vida del hablante (De Mauro, 1 9 7 1 ) . permite velocidad, por lo cual se obvian las formas extensas
Es cierto que en el lenguaje oral entran factores extra- estructuralmente formales. La forma de comunicación será
funcionales que permiten que la comunicación se haga más evidentemente primaria, de allí que al lenguaje oral se le
fácilmente; factores como lo son los gestos, la entonación, llamará estilo informal; en el caso del lenguaje escrito nos
la mímica, etc., que para nada entran en el lenguaje escrito, enfrentamos a un monólogo cuyo sistema puede ser redim-
son en realidad variantes de un mismo signo lingüístico, dante y tiene más relación con el productor que está en
unidos a otra clase de signos. función de la comprensión que se da de parte del posible
Por otra parte el lenguaje oral está permanentemente receptor, esto parece comunicarle un carácter muerto al
condicionado por un continuo feed back que le da un signo escrito, de allí que se le dará el nombre de estilo
carácter impreciso al signo, son ajustes del signo que per- formal.
miten desviaciones, retornos, correcciones y repeticiones, La transmisión por vía fonoacustica exige un gasto
que le confieren un carácter vivo a la lengua; en cambio mínimo de energía en su proceso de producción y recep-
en el signo escrito debe darse una comunicación completa ción, comparado con cualquier otro tipo de transmisión.
y más formal, para explicitar bien el pensamiento y el Por todo esto pareciera estar el signo escrito en des-
discurso. Debe ser clara y formal porque le faltan los ventaja, Vygostky lo llama mala copia mental, porque con
factores extrafuncionales y de corrección a los que apela frecuencia, primero nos decimos a nosotros mismos aquello
el lenguaje oral; hay quienes ven en esta forma de expre- que luego escribiremos.
sión, la escrita, una forma artificiosa porque depende de E l hombre se ha visto en la necesidad de expresar la
una elaboración mental larga, presupone una conciencia lengua mediante la escritura. Ya desde Platón se discutía
determinada, y una premeditación, para que se pueda dar sobre el lenguaje escrito, para éste, en el Pedro, la escritura
la comunicación perfecta a través de las palabras y sus es elixir de la memoria, así lo dice el dios Theuth al rey
combinaciones, diríamos que es una forma de actividad Thamus cuando le expone las bondades de la utilización
bastante completa. de la escritura; pero el rey Thamus responde concedién-

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dolé a la escritura el carácter sólo de rememoración; para dez, y porque la existencia de una lengua literaria ha hecho
Platón, la escritura no será productora de sabiduría, sino que crezca en importancia el papel de la escritura.
sólo un medio para recordar aquello que han dicho hablan- Mas para las teorías de hoy no parece estar muy
do los sabios. clar^ la importancia de u n lenguaje sobre el otro. E n
Ya entonces el lenguaje hablado aparece a los ojos principio pareciera que el escrito es secundario de acuerdo
de Platón como el lenguaje más importante y no así el a los varios factores que inciden sobre él, por ejemplo,
escrito, porque este último, dirá, tendrá un parecido a la el hecho de que no se pueda negar que en la evolución
pintura ya que es mudo como ella y no puede responder de la especie los signos lingüísticos se han realizado sobre
a preguntas que le hagamos, dan a entender una sola cosa todo en forma oral; y desde el punto de vista sociológico,
y siempre la misma, no serán los lenguajes escritos capaces resulta que una lengua escrita sólo es comprendida por
de defenderse si son atacados. una minoría de la población que la habla; psicológica-
Será así el lenguaje escrito la imagen del lenguaje mente, parece estar probado que cuando el usuario puede
oral, y sólo el discurso oral podrá servir a la enseñanza, escoger entre los dos medios de comunicación, escoge el
escribiendo realmente en el alma (Platón, 1 9 7 7 ) . oral porque se siente ayudado por los elementos extralin-
Pero siglos después, para Leopardi, la escritura tendrá güísticos que le permiten expresarse mejor y más fácil-
una verdadera razón de ser, representará a las palabras mente.
y a la lengua, aunque será consecuencia de ellas; si ellas Así pareciera que el texto escrito sólo sirve para
no existen, no existe la escritura, es decir, una será depen- evocar el texto oral, de manera que parece que la trans-
diente de la otra. misión oral comporta muchas ventajas, porque además de
Si bien la única razón de existencia de la escritura las ya enumeradas, las vibraciones acústicas viajan inde-
parece ser la de representar la lengua, éste es un sistema pendientemente de las condiciones físicas del medio, luz,
muy diferente al de la lengua y será a la vez riesgoso, obstáculos, movimiento, etc., por esto se podrán transmitir
porque puede tratar de destruirla; y recibir en movimiento, en quietud, al sol, en la oscuridad,
etc. Esto le reporta al lenguaje oral una gran ventaja.
E l sistema del lenguaje escrito está conformado por
Pero sucede que cuando se ve que algunas lenguas
signos arbitrarios que parecen no tener relación con el
fueron sólo usadas a la manera escrita como el elamita,
verdadero sistema de la lengua, son signos arbitrarios por-
acadio, arameo, latín medieval y moderno, etc., parece
que el signo usado por una persona puede ser representado
que la importancia del oral no es total; también se puede
o escrito por otra persona en forma diferente aunque tra-
ver que en la grafía hay algunos lenguajes pictográficos
tando que no se confunda con otro. Así la palabra escrita
o ideográficos que no fijan una forma hablada, sino que
al hacerse realidad, traiciona, en cierta manera, la palabra
pasan de la grafía al sentido, sin pasar por la realización
hablada.
fónica. Igualmente el signo escrito adquiere importancia
Opina Saussure, que si bien la lengua escrita aparece cuando vemos que en realidad es en él, que la lengua vive
como la más importante, no lo es. L o parece porque el plenamente todas sus posibilidades.
vocablo escrito se mezcla de tal m.anera con el vocablo E l balance total pareciera decirnos que cada uno
hablado que termina por usurparle su r o l principal, esto dentro de sus posibilidades tiene una importancia que no
porque la imagen gráfica golpea mucho más, con más soli- puede ser ignorada.

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19. LENGUAJE Y PENSAMIENTO mayor de palabras. E l recorrido de la palabra al pensa-
miento pasará a través del significado.
Las relaciones entre pensamiento y lenguaje se han Detrás de nuestras palabras está siempre un pensa-
venido manejando desde los tiempos griegos, pero siempre miento latente, por esto el pasaje del pensamiento al len-
las teorías surgidas han dejado un vacío a llenar por otras guaje es una compleja y mediata transposición.
disciplinas, como lo es la psicología. A u n así, siempre se ^ La mediación del pensamiento se da primero interior-
ha tenido en cuenta que existe una relación muy importante mente a través de los significantes y luego a través de la
que se debe definir; un poeta como Leopardi, tenía cierta palabra, por esto él no está directamente correlacionado
idea de que esta relación era muy importante para entender con la palabra, será el significado el que estará entre el
la visión de mundo del hombre. Nosotros pensamos pensamiento y la palabra. Pero detrás de él hay otro plano
hablando, decía Leopardi, o mejor, cuando hablamos logra- que será el de la motivación; así sobre el plano del análisis
mos pensar, pero ninguna lengua tiene tantas palabras para psicológico de una cualquiera expresión verbal, sólo cono-
poder expresar las infinitas particularidades del pensa- cemos la verdad cuando descubrimos el plano más escon-
miento. Una palabra nos ayudará a ordenar nuestro dido del pensamiento, la motivación.
pensamiento confuso, y también ayudará a fijarlo en
nuestra conciencia; nuestro pensamiento, razonamiento,
y discurso interior, dependen de la lengua de la cual nos 20. LENGUAJE INTERIOR
servimos.
E l lenguaje interior es una formación muy particular
Vygotsky, por su parte, dirá que cualquier frase pro- en cuanto a su naturaleza psicológica; sus características
nunciada por un ser viviente tendrá siempre la base en un serán muy específicas y vienen dadas por sus relaciones
pensamiento recóndito (Vygotsky, 1 9 5 4 ) . Habrá así una con el pensamiento y con la palabra. E l lenguaje interior
relación entre predicado gramatical y predicado psicológico, tendrá una estructura muy diversa del lenguaje exterior,
en esta forma un mismo pensamiento puede ser expresado porque no es lo mismo hablar para sí mismo, que hablar
por frases distintas, o viceversa, una misma frase puede para los otros; y tampoco se puede decir que el lenguaje
servir para expresar pensamientos diferentes; las diferen- exterior sea un antecedente, o sea reproducción de éste en
cias entre los dos. predicados, residirá en el pensamiento la memoria, porque es verdaderamente su opuesto, veamos
que la frase quiere expresar. por qué.
En consecuencia nos damos cuenta que el pensamiento E l lenguaje exterior es u n proceso que va del pensa-
no coincide siempre en manera inmediata con su expresión miento a la palabra, mientras que el interior es lo inverso,
verbal, el pensamiento representa una totalidad notable- va de la palabra al pensamiento, es según Vygotsky, "vola-
mente mayor que una simple palabra. Es decir, aquello tilización del lenguaje en el pensamiento".
que en el pensamiento está contenido simultáneamente, en En el lenguaje exterior el pensamiento se encarna en
el plano del lenguaje, se explica en orden de sucesión. la palabra; en el lenguaje interior la palabra muere al nacer
E l pasaje del pensamiento al lenguaje es un proceso el pensamiento. Como el lenguaje interior es un pensa-
muy complejo que presupone un fraccionamiento del pen- miento dado por meros significados, será un proceso ines-
samiento y una reintegración y expresión en u n número table, dinámico y fluctuante entre pensamiento y palabra.

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Vygotsky ha estudiado el lenguaje interior a partir del 21. COMPORTAMIENTO D E L LENGUAJE POETICO

lenguaje egocéntrico del niño, haciendo una serie de expe-


L e parole che diciamo e scriviamo, leggiamo e ascoltiamo,
rimentos para así lograr darnos una teoría sobre las carac- le parole che rivolgiamo nella nostra mente, sonó certamente
terísticas del lenguaje interior. anche al tro: Espressione e prova dei nostri affetti, anche
Ante todo no es sólo una abstracción del aspecto segreti e non coscienti, strumento e stimolo delle inteUigenze,
sonoro, sino que también es muy diferente del lenguaje testimonianze di pensiero e di storia (De Mauro, Minise-
\ p. 3 ) .
exterior, con una función verbal muy propia y específica.
Se ha encontrado que tiene una sintaxis muy par-
21.1. E l lenguaje, decía Heidegger, no es utensilio
ticular, lo que significa fragmentación y abreviación del
del cual se dispone, sino u n acontecimiento que posee por
lenguaje interior en relación al exterior.
sí mismo la posibilidad más alta del ser humano: la de
La abreviación se dará porque como es u n lenguaje comunicar. Pero si bien goza de la propiedad de comunicar,
para nosotros mismos, ocurre u n fenómeno que conocemos puede ser ocultante a la vez, es decir que es esclarecedor
de sobra: aquello de lo cual estamos hablando; por eso,
y / u ocultante del ser mismo. A pesar de este sentido de
el sujeto viene así sobreentendido. Es abreviación, no en
comunicación que Heidegger le otorga al lenguaje, es consi-
el sentido de eliminación genérica de las palabras, sino
derado como uno de los más importantes pensadores que
en el sentido de que lo sometemos a una predicación. Es
propugnaban el escepticismo semántico de corte existen-
decir, conservamos el predicado y todas las partes de la
cialista-idealista.
proposición que se refieren a él, en detrimento del sujeto
que, como ya dijimos, lo sobreentendemos, y por eso no Teóricamente suponía la comunicación lingüística i m -
es necesario explicitarlo; así u n lenguaje interior se puede posible, y así en Ser y Tiempo consideraba la incomunica-
ver compuesto sólo y exclusivamente del predicado. La pre- ción como la característica normal del hombre de la calle,
dicación será, eso sí, u n componente psicológico esencial sólo " l a silenciosa contemplación del ser, y el éxtasis de
al lenguaje interior. los poetas" sería la única posibilidad de comunicación.
De esta manera, le otorgaba a la poesía la posibilidad
Por otra parte también podemos encontrar la agluti-
de comunicar, pero sólo mediante el tan nombrado éxtasis
nación como otra de las características y como elemento
o rapto creador del poeta. A pesar de estas teorías, que
evidente, ya que los, sentidos se unen y se combinan para
suponen la posibilidad de la incomunicación, sabemos que
influenciarse unds a otros, de allí la aglutinación regida
nos comunicamos con nuestros vecinos día a día, es decir,
por el significado.
que a nivel pragmático humano se da la comunicación, ya
Toda esa sintaxis particular pone en evidencia la i n -
que la lengua es un sistema abierto que permite que dos
comprensibilidad del lenguaje interior, que como no tiene
individuos aunque no dispongan de la misma carga de
función comunicativa pues es u n lenguaje para sí mismo,
conocimientos lingüísticos, puedan entenderse.
y goza de las características arriba mencionadas, es intra-
ducibie en términos del lenguaje exterior. Por esto, a pesar de que ciertas teorías se pueden
apoyar en pensadores como Heidegger, o Kierkegaard,
quien también era solidario de estas ideas, existen otras
que hacen que los teóricos traten de buscar juicios válidos
para explicar por qué los hombres se comunican a pesar de

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ellos mismos, y cómo se caracteriza la comunicación; con el mismo código semiológico, de manera que la más
gracias a estos juicios, sabemos que el poeta, algunas veces simple relación semántica implique la conexión de dos
a pesar de sí mismo, se comunica a través de sus palabras, formas; por lo tanto, de dos sistemas de clases: significado
gracias a los patrones que construye alrededor de su texto y significante.
poético. Y esto parece darse, porque el lenguaje concebido E l código escogido por el poeta debe ser más o menos
como u n sistema abierto permite siempre u n grado mínimo conocido por el lector para que este último pueda identi-
de comunicación. ficar las entidades, por eso es necesario lograr u n sistema
Debemos recordar con Wittgenstein que la comuni- de análisis que nos permita aproximarnos al código u t i l i -
cación perfecta o la total falta de comunicación pueden zado por el poeta, quizás ese sistema pueda estar centrado
pensarse sólo como límites nunca alcanzados por los usua- en la relación paradigmática que se puede dar dentro de
rios, así podemos decir con Pagliaro ( " I I segno vívente", un texto determinado.
1952, citado por De Mauro, 1 9 6 7 ) , que las posibilidades La posibilidad de que tanto el poeta como el lector
cognoscitivas de la mente, y los innumerables momentos operen con un mismo código semiológico, propone el pro-
afectivos de nuestra vida, están increíblemente limitados blema de identificación del sentido de una misma señal.
en el valor semántico del signo; pero éste y sus infinitas Esta identificación está colocada en la fuente misma del
combinaciones ofrecen una gran ayuda, a quien sabe em- acto sémico en el momento en que se realiza una relación
plearlos, en cuanto a comunicación, pero la realidad en semiótica cualquiera; el poeta, como usuario, tiene por
toda su plenitud es sustancialmente incomunicable, por delante u n número infinito de características intrínsecas
eso el signo lingüístico será sólo alusivo a ella; así el poeta, propias de la entidad y así el lector para identificar el
a pesar de que trata de fijar en el signo lingüístico todos sentido dado por el productor-poeta tiene que escoger
aquellos momentos de la vida afectiva, sólo logrará expre- algunas características intrínsecas, porque ellas son infini-
sar algunos de ellos y a veces en forma precaria. E n conse- tas, y el usuario no tiene la capacidad infinita de operar
cuencia, la realidad en plenitud es imposible de comunicar con todas estas características, de allí que debe hacer una
porque faltará la parte afectiva de esa realidad que nunca escogencia y contentarse con u n número determinado de
será plenamente expresada por el signo lingüístico. ellas, es decir debe trabajar con las características perti-
Pero aún dentro de estos límites, de los que nos habla nentes. Por eso se puede hacer la hipótesis de la que ya
Wittgenstein, el lenguaje como medio de comunicación no hemos hablado, de que la identificación no es buena n i
será una mera transcripción de conceptos universales, sino plena, sino aproximativa.
que cada lenguaje tendrá sus propios patrones que son Así el poeta opera con una cantidad ilimitada de carac-
utilizados durante la conversión de la experiencia laumana terísticas que pueden identificar la entidad, pero él mismo
en significados. Lo interesante para el lenguaje poético debe escoger algunas de ellas, por no tener capacidad i l i m i -
sería poder explicar cómo está conformado ese patrón que tada de identificación del objeto. E l usuario, lector-receptor,
rige el texto poético, para que una vez conocido, se entre hace una operación de pertinentización escogiendo el carác-
en él y se palpe la experiencia humana que el poeta ha ter pertinente como cree conveniente para la identificación,
querido expresar a través del signo lingüístico. De esta por eso la comprensión de la poesía no es siempre absoluta.
manera para que se dé la comunicación entre el locutor- La pertinentización a su vez será arbitraria, ya que
poeta y el receptor-lector, es necesario que ambos operen no está dada por las características intrínsecas impuestas

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por la entidad misma, sino por la capacidad y fines de a su verdadero valor. De acuerdo con esto, la información
quien identifica. Por lo tanto, repetimos, la identificación que recibimos a través de la lectura de un texto poético,
que es una forma lingüística, no podemos tomarla como
y comprensión de la poesía puede ser arbitraria.
un racimo de palabras o de ideas aisladas, sino que debe-
Lo importante en poesía es que cualquier entidad mos inexorablemente relacionarla con el autor del texto,
puede ser una señal que tiene un sentido a escogencia, o al que no es otro que el poeta, y con la situación extralin-
arbitrio del poeta, aunque dentro de ciertos límites, porque güística en donde se ha dado o creado dicho texto. Debe-
depende de quién es y qué quiere el poeta, y de las difi- mos por esto tener muy claro a la hora de leer poesía que
cultades con las que tropieza a veces, para expresar una tenemos que tomar muy en cuenta al poeta y a su contexto,
entidad cualquiera bajo el aspecto de señal. pues así, cuando evaluamos el texto semánticamente y sin-
21.2. Según la colocación que tenga el signo entre tácticamente, no podemos dejar a un lado el plano prag-
los otros códigos, se puede apreciar el valor semántico del mático del lenguaje.
mismo, de esta manera el puesto que ocupe en relación Dentro de esta misma idea, podemos colocar aquello
con los otros signos puede darnos su sentido o valor semán- que Saussure llamó punto de vista (aunque él no habló
tico. La palabra no viene semánticamente sola sino en explícitamente del nivel pragmático del signo, en cierta
nidos, como dice De Mauro, y el puesto que cada una tiene manera trató este problema al estudiar su llamado punto
en el nido, le da sus posibles sentidos. Así, si se quiere de vista). Para Saussure es aquello que permite la identi-
comprender la dimensión semántica de un código, es nece- ficación de un texto por parte del receptor que es muy
sario tener en cuenta la dimensión sintáctica, que en verdad diferente al punto de vista del ejecutante-hablante. Por eso
es una combinatoria semántica. debemos buscar en lo que los hablantes saben, en su
Como es lógico, para comprender un código poético, interior, en sus conocimientos, porque ellos al construir
será necesario conocer cómo funcionan las relaciones para- un texto discriminan agrupamientos lingüísticos diversos
digmáticas y sintácticas, para así encontrar un sistema que y utilizan sólo aquellos en los que los fenómenos psicoló-
nos permita encontrar el puesto que tiene cada signo en gicos o fónicos pueden reconocerse de acuerdo a la identi-
ese nido semántico, y así lograr la clave semántica del dad de sus funciones.
texto. Por esta razón el lector-receptor, para conocer el
Mas para codificar un texto poético, no sólo es nece- significado de un texto, tiene que tener muy en cuenta el
sario tener en cuenta estos niveles semántico y sintáctico. hecho de que el poeta-ejecutor ofrece su punto de vista,
Es imprescindible también conocer cómo se da y funciona por lo tanto se debe tratar de buscar en esa interioridad
el nivel pragmático; de esta manera vemos que las rela- del hablante y en sus conocimientos; por esto es conve-
ciones extralingüísticas son importantes en el proceso de niente saber algo sobre la intimidad, personalidad y rela-
comunicación del lenguaje; la información que recibimos ciones sociales del poeta, para poder internarnos en este
de las formas lingüísticas no depende de ellas solas, sino texto-poema.
de ellas en relación con el locutor, y con las relaciones En caso de códigos creativos, léase texto poético, se
no-lingüísticas en donde se han dado; en términos semió- debe apelar continuamente al sujeto usuario del lenguaje
ticos, la evaluación semántica y sintáctica de un signo debe 16 E n la Parte ii de este trabajo hablamos en forma más extensa de los
ser integrada con la evaluación pragmática para poder llegar niveles semánticos, sintácticos y pragmáticos del signo.

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para conocer la posibilidad de uso que tienen los signos acuerdo a las necesidades y características de un conglome-
o el conjunto de códigos, es decir, que volvemos a tocar la rado social. De esa manera aparecen, por ejemplo, los tics
dimensión pragmática del lenguaje, porque esta dimensión lingüísticos, las palabras que son preferencias de grupos
es usada por el locutor-poeta con libertad. De esta manera sociales, familiares, territoriales, etc., que a su vez apare-
para que la frase tenga un sentido, y ya estamos hablando cerán en el texto poético y cuya comprensión nos permi-
de comunicación, debe ser pronunciada y oída de acuerdo tirá tener concienca de la relación de las palabras del texto-
a lo que se quiere decir, a cómo se quiere decir, y a las poema con los modos de vida, hábitos y vocabularios
relaciones externas al lenguaje de los usuarios, así el re- impuestos al poeta por el ambiente físico.
ceptor puede descubrir el sentido que el locutor quería Por su parte, los neologismos también nos permiten
darle. Pero si separamos la frase de todas estas relaciones acercarnos a la comunidad o grupo social del poeta, porque
extralingüísticas que la rodean, nos enfrentamos a un ellos han sido introducidos en el lenguaje gracias a la doble
posible caso de incomunicación, pues ella, la frase, ya no articulación permitida por la enorme redundancia. Así estos
será tan clara debido al carácter plurisemántico que ad- neologismos, usados por el poeta, deben remitirnos a la
quiere, y que le comunica ambigüedad al lenguaje. comunidad, o al grupo social y cultural en donde éste se
Así para evitar la ambigüedad, a la que tenemos que mueve, la comprensión de la relación que se da entre las
combatir, si queremos "leer" un poema y entrar en cono- palabras y el contexto sociocultural del poeta a través del
cimiento de lo que el poeta ha querido decir, debemos estudio de los tics lingüísticos, de los neologismos, de
trabajar más allá del nivel superficial, porque por debajo aquellas palabras que son preferencia de grupos sociales,
de esta ambigüedad está todo lo que el poeta ha querido familiares y territoriales, nos permitirá a su vez obtener
expresar. De esta manera deberíamos tratar de conocer ciertas claves en la aprehensión del texto poético.
cómo ha trabajado el poeta, y a la vez conocer las rela-
ciones extralingüísticas que lo han condicionado, lo que 21.3. E l lenguaje como sistema de signos, modela
nos pone de manifiesto que siempre habría diferentes posi- la expresión y el contenido arbitrariamente y está consti-
bilidades de lectura que hacer, y que ningún texto es abso- tuido de tal forma que puede conformar nuevos signos,
lutamente oscuro, porque la lengua como entidad radical- ya que, como la relación expresión/contenido es arbitraria,
mente social está inserta en el contexto de la sociedad el contenido Ungüístico y el sistema semántico se pueden
que la usa y la hace vivir, así como en el contexto de la manipular para crear nuevas palabras. Así el poeta, que
cultura, por lo tanto, hay que verla con el nexo que tiene es un gran manipulador del contenido lingüístico y del
con el pensamiento de su autor; de manera que en todo sistema semántico, crea nuevas palabras y le da nuevos
texto poético va implícito el pensamiento del poeta y todo significados a viejas palabras, aprovechándose de esta rela-
aquel contexto cultural que lo ha conformado. ción arbitraria que le permite jugar con ellas.
2 1 . 2 . 1 . Hay una relación muy evidente y par- De esta arbitrariedad, tan propia del signo, se des-
ticular entre quien habla (el poeta) y las palabras, que prende una consecuencia muy importante, como lo es la
son signos de tal naturaleza que se funden profundamente mutabiUdad de la lengua a través del tiempo debido a que
en los modos de vida de cada uno y de la comunidad. la relación significado/significante y su organización en sis-
E l patrimonio lingüístico sufre las presiones de la colecti- tema está libre de vínculos rígidos que la atan a una reali-
vidad, así las palabras se extienden o se comprimen de dad lógica.

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La arbitrariedad del signo pone en evidencia una regvila los procedimientos de invención. Porque cada len-
contradicción muy importante: el signo lingiiístico se es- guaje forma sus propios patrones durante la conversión
capa a nuestra voluntad porque está mediatizado por la de la experiencia humana en significados. Esto quiere decir
masa social, la lengua así situada no llega a ser susceptible que el lenguaje poético, considerado como un tipo de len-
de modificación, y por otra parte el tiempo no le permi- guaje, tiene una superfunción semántica, es decir, que si
tirá ser libre porque dejará que las fuerzas sociales se tiene una solidaridad contextual, creará sus propias reglas
ejerzan sobre ella; todo esto es un obstáculo para el creador sistemáticas como cualquier otra lengua, tendrá su propio
pues él se encuentra también en una contradicción, debe diseño semiótico, aunque dé la idea de no tenerlo.
utilizar el signo lingüístico así impuesto para poder ser En el texto poético se establece un hipersistema por
entendido, pero a la vez necesita romper con estas ataduras encima o sobrepuesto al sistema de la lengua, y por esto
para lograr una palabra más libre, sólo el poeta puede adquirirá condición de superficie semiótica. Así el lenguaje
sustituir abitrariamente el signo, violentando todas las leyes poético, visto como una lengua propia, no puede ser juz-
impuestas por una tradición, para formar esa extraña gado o medido dentro de un tipo universal.
lengua que es la lengua poética. 21.4. Ya hemos hablado abundantemente de la
Esta violación del signo también es relativa en el arbitrariedad del signo, pero es conveniente recordar
poeta, pues no lo hace con todos los signos que utiliza, nuevamente que la relación que une el significado al signi-
sino sólo en los momentos en que crea la metáfora (pero ficante también es arbitraria y que esa arbitrariedad está
debemos recordar ciertas excepciones cuando el poeta llega limitada en la lengua de uso corriente por elementos tan
a casos extremos sustituyendo arbitrariamente casi todos variados como lo son aquellos históricos, sociales, analó-
los signos de una frase, aunque mantiene sintácticamente gicos, etc.; en el lenguaje poético esta relación arbitraria
la organización de la misma). se hace mayor ya que el poeta la trata de romper adrede
Esa inmutabilidad del signo dada por la tradición, que al conformar la metáfora con aquellos elementos que lo
desespera al poeta, pareciera depender del factor histórico limitan; quiere evitar que lo histórico y lo social se im-
que rige la lengua, que es hereditario, y que evidencia la pongan de tal forma que no le permitan construir su me-
dificultad de cambiarla en forma individual. táfora, así que trata de romper en forma decidida con la
relación conformadora del signo, para hacer intervenir
E l grado de arbitrariedad del signo, que es principio
otros elementos, como lo son las asociaciones libres arbi-
de clasificación dejos códigos semiológicos, va desde los
trarias.
lenguajes simbólicos, " que no poseen ningún tipo de arbi-
trariedad, hasta lenguajes como el de la poesía que com- Basándose en esta relación arbitraria, Jakobson tra-
porta un alto grado de arbitrariedad, aunque esta arbitra- bajó sobre la función del signo y determinó una función
riedad es relativa ya que las normas que rigen el lenguaje que se relaciona con lo que venimos hablando, la función
también lo coartan en su libre expresión, porque aunque poética; en ella se traslada el principio de equivalencia
vemos como acto libre cualquier acto creativo —la poesía del eje de la selección al eje de la combinación; se da una
por ejemplo— este acto conoce o capta constantes, conoce combinación de relación, ya no del mensaje con el emisor,
normas, es un acto disciplinable, y admite una técnica que como en lo que se llama función emotiva, ni del mensaje
con el receptor, llamado función connotativa, sino que
17 Recordemos que cuando hablamos de lenguajes simbólicos hablamos la relación del mensaje viene siendo consigo mismo.
de lenguajes artificiales como los de las ciencias.

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creando así el mensaje-objeto portador de su propia signi- puntos del espacio, por eso al usarse en forma repetitiva
ficación. Esta relación del mensaje consigo mismo es lo tendrá un sentido nuevo debido al transporte de la palabra
que busca construir el poeta al crear su texto poético sobre de un ámbito a otro ámbito social y culturalmente diferen-
todo en la poesía moderna, para tratar de despersonalizar ciado. Así la acepción permite la expansión del significado,
su expresión poética, que por supuesto no logra totalmente y como es muy usada en el lenguaje poético, el lector debe
ya que sus relaciones con el contexto mediatizan de alguna apelar a la ya nombrada relación paradigmática de las pala-
manera su poesía. bras para poder encontrar ese sentido diferente cada vez
En busca de ese lenguaje poético, el poeta como que se tropieza con la palabra repetida.
hombre que es, obedece a la necesidad de nombrar nuevos Otro problema con el que se tropieza el lector, es el
sentidos, para lo cual, debe romper la determinación se- de la vaguedad del significado de las palabras (vaguedad
mántica propia de ciertos códigos, transformado los signos que se da gracias a la referida arbitrariedad del signo
con significados determinados en palabras con significados lingüístico), que hace que el significado no sea satisfacto-
y significantes flexibles, es lo que llamamos capacidad meta- riamente descrito en su posibilidad de extensión a ciertos
fórica del lenguaje. E l lector decodificador debe tener en y nuevos sentidos, sino en relación a unos usuarios dados
cuenta este factor y así tratar de comprender cómo se en un tiempo dado. Esto nos hace comprender que es
rompe esa determinación semántica para poder entrar en necesario conocer las relaciones extralingüísticas en las que
la comprensión de este código metaforizado. Para esto el se encuentran ambos usuarios para poder fijarle el valor
poeta tiene que trabajar con la relación paradigmática, que semántico a la palabra vaga.
es una relación asociativa, aquella que las palabras le ofre- Además de la metaforicidad y la vaguedad, el lenguaje
cen a la memoria dándole una posibilidad de asociar in- posee otras propiedades que el lector debe tener en cuenta
conscientemente, es decir, que una palabra cualquiera trae al tratar de decodificar el texto poético, y son ellas: la
a la mente otra que guarda relación de significación con propiedad de creatividad y el espíritu de cambio fortuito,
la primera. La relación paradigmática o asociativa (término propiedades que se dan también gracias a esa capacidad
saussuriano), es interesante para nuestro trabajo porque de arbitrariedad del signo.
permite no sólo la asociación o rememoración de una pala- La creatividad es la disponibilidad a la variación de
bra, sino de una serie asociativa creada en muchos casos las formas de un sistema o de un código semiológico, esta
por el sufijo, o sobre el significante. disponibilidad está radicada en los usuarios del sistema
Así en la creación, del texto poético funcionará la o código y reconocible como propiedad del mismo; se dará
relación paradigmática, cuando se está en el acto de crear a nivel lexical, donde se experimentará una tendencia a es-
la metáfora, una palabra podrá evocar todo aquello que coger nuevas expresiones idiomáticas, a utilizar viejas pala-
es susceptible de serle asociado de una u otra manera, bras, a construir bloques terminológicos, a utilizar palabras
y esto le permitirá al poeta alejarse bastante de la cadena cien tífico-técnicas, etc. Igualmente se da a nivel de con-
asociativa, la cual puede ser infinita. tenido donde se puede rearticular el plano de la realidad
También el poeta opera con la acepción, que se da lingüística y el plano de la realidad extralingüistica en una
por la repetición de una palabra o frase con modalidad cantidad de planos difíciles de delimitar. Esta propiedad
diferente al pasado o al futuro; se está hablando de una creativa del lenguaje abre un sinnúmero de posibilidades
palabra que se usa en dos momentos diferentes o en dos al lenguaje poético, de allí lo importante que es.

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Por su parte el espíritu de cambio fortuito, propiedad 21.5. La lengua tiene características y sufre cam-
del lenguaje con la que cuenta el poeta, permite que se bios que inciden en forma fundamental en su estructura
pueda jugar con las palabras en forma también fortuita y significado. Veamos cómo se comporta y cuáles son esas
sin afectar el sistema. Así funcionará en el texto poético, características que nos permiten también adentrarnos en
ya que en toda ocasión que lo ha necesitado, la poesía ha el lenguaje poético.
efectuado estos cambios fortuitos que afectan algunos De acuerdo al cambio que sufre la lengua a través
signos pero que no afectan el bloque entero del sistema del tiempo, podemos darnos cuenta de que cada cambio
poético, porque si así lo hiciera, la palabra poética se con- diacrónico corresponde a una evolución considerable de
vertiría sólo en desfile de palabras. un período determinado, esto nos puede ayudar a decodi-
Igualmente el poeta al construir un texto, debe tener ficar el lenguaje utilizado por el poeta, si logramos aden-
en cuenta otro factor que en cierta manera lo mediatiza trarnos en su época, y observar los cambios ocurridos en
y que incide en el lenguaje, hablamos del uso lingüístico, su lengua de uso corriente con la que construye su lenguaje
factor que no es de propiedad interna del lenguaje, sino poético.
que viene signado por las relaciones extralingüísticas. La lengua también irá cambiando de acuerdo con los
cambios fonéticos; debemos recordar que la lengua está
Para el estudioso del lenguaje, el uso lingüístico es
conformada por los actos fonéticos que son fenómenos
un punto de apoyo para la determinación del significado,
espontáneos y combinatorios que dependerán de muchos
pero hay que tener en cuenta que algunas obras literarias factores; según Saussure, la situación geográfica y el clima,
importantes, las cuales son al decir de Apel, "momentos los cambios producidos durante la infancia, o cambios
particularmente intensos en la vida del lenguaje", utilizan producidos debido al sustrato lingüístico anterior que
el lenguaje apartándose del uso lingüístico. Es esto lo que puede reaparecer tardíamente, así como también cambios
tratará de hacer constantemente el poeta: se apartará debidos a la Ley del mínimo esfuerzo y debidos a la moda,
o ttatatá de apartarse de los usos lingüísticos más comunes, influyen notablemente en la conformación de la lengua. Si
para comunicarle a su texto una mayor amplitud semántica. todos estos elementos la modifican a través de los cambios
Así la poesía, como toda obra literaria, puede cambiar fonéticos, hay que tener presente que esa lengua usada
y ampHar el uso lingüístico de ciertas expresiones. por el creador ha sufrido todas estas transformaciones, lo
que nos lleva a tratar de encontrar, en un análisis del
Para Saussure" la individualidad absoluta de las pala-
lenguaje poético, elementos que señalen la época de niñez
bras es ese hic et nunc que se da en un momento jamás
de un creador, su relación con posibles antepasados o su
repetible, visto de otra manera, la palabra tendrá un signi-
relación con su geografía. Igualmente, aquello que se llama
ficado determinado cada vez que se use, ya que depende carácter lineal de la lengua constituye otro elemento de
del uso que se le dé, y de las circunstancias que rodeen su cuidado para el análisis del texto poético, pues el compor-
producción. tamiento de la lengua también obedece a ciertas normas
De acuerdo con esto, la palabra poética también goza de carácter lineal que conforman una cadena de palabras,
de esta característica, que le comunica un significado operación que se debe al hecho de que es imposible pro-
muy personal cada vez que viene pronunciada o escrita, nunciar dos palabras a la vez, por esto se deben pro-
lo que hace difícil el análisis poético. nunciar de tal manera que formen una sucesión de ellas;

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mas para poder lograr la comprensión del oyente, estas de expresar en la poesía el posible acto individual del
palabras deben guardar cierta relación, y es esto lo que le habla, que se adecúa mucho más a su pensamiento.
comunica su carácter lineal, esta relación es la llamada Retomando algo que habíamos dicho anteriormente,
relación sintagmática. Tomando en cuenta esta relación la lengua no es otra cosa que la imagen verbal que está
sintagmática, es interesante ver como reacciona el lenguaje depositada por la práctica de la palabra (que es el hablar)
poético ante ella. La poesía moderna ha tratado de romper en los sujetos pertenecientes a una misma comunidad. Así
esta solidaridad gramatical, ha operado tratando de sustraer la lengua no es de un individuo, es de una masa. Por eso
ciertos términos que rompen la solidaridad sintagmática el poeta se siente apresado y obligado al uso de una lengua
de la frase. Es así como el lenguaje poético vuelve nueva- que no es suya como individuo, sino que es parte de una
mente a violar la norma. comunidad, que le pertenece a la masa en la que vive, y por
21.6. E l creador de hoy tiene la conciencia de que lo tanto debe respetar las normas que la rigen. Este es
el habla es un acto más original y más puro, si se quiere, uno de los problemas más importantes a los que se en-
que el lenguaje escrito, porque representa con mayor exac- frenta el creador, quien se siente encerrado en la cárcel
titud el pensamiento; por eso tratará de imitar las carac- de la lengua y trata desesperadamente de deshacerse de
terísticas momentáneas del habla, que tienen mucho que estos ligámenes que son fuertes y poderosos.
ver con lo psicológico y lo individual y por consiguiente 21.7. Decía Wittegenstein, que cuando se habla de
están mucho más cerca de la poesía, que es expresión de las sensaciones que tenemos en nuestra interioridad, que
la subjetividad del hombre. Históricamente el habla pre- es la expresión de experiencias vividas interiormente, las
cede a la lengua, aunque ésta es necesaria para que el habla palabras que se usan deberán referirse a algo que sólo
sea entendible, pero el habla es indispensable para que la conoce quien habla. De esta manera, se da una correlación
lengua se estabilice, hay una interdependencia entre las dos. entre la red de asociaciones verbales y los fenómenos emo-
Lo importante es que siendo el habla una manifestación tivos. También Vygotsky plantea que, "la coscienza si ri-
anterior a la lengua y siendo una realización individual, se flette nella parola come il solé in una piccolissima goccia
acerca mucho más al pensamiento del hombre; de allí, la d'acqua. . .Essa é il microcosmo della coscienza umana".
tendencia a tratar de reproducir la estructura del lenguaje (1980, p. 232). Si todo esto es así, es importante tomar
hablado mediante mecanismos escritos, cosa que el poeta en cuenta la parte psicológica de los usuarios del lenguaje,
lleva a los extremos, tratará en muchos casos de utilizar en nuestro caso del poeta, ya que en la palabra viene refle-
una forma escrita que se asemeje lo más posible al habla, jado todo aquello que pertenece a la parte oculta de la
para darle ese carácter individual que lo separará de la conciencia.
colectividad, característica muy propia de la poesía que Una lengua se adhiere a cada pliegue de la vida psico-
tiende a ser individualista. Como la lengua es colectiva, lógica del individuo, así como a cada momento y aspecto
el poeta busca romper con esa cárcel que lo encierra, y así de la vida práctica, social e intelectual. De manera que
en la poesía moderna, tratará de explicar los altibajos, las en la palabra poética vendría reflejado cada matiz de la
dudas, las combinaciones posibles del habla, persiguiendo vida psicológica del poeta, así como cada momento de su
liberarse de un mecanismo que no considera suyo sino de relación social e intelectual, por eso no podemos ignorar
la colectividad, algo que es exterior a él. Así, buscando esa el factor psicológico que rodea el lenguaje, y de alguna
palabra pura, de la que habla Mallarmé, trató y aún trata manera debemos intentar adentrarnos en él, tratando de

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lograr un método de análisis que nos remita a los principios
de la psicología o a la posibilidad de un análisis fundado
en el psicoanálisis. Dentro de este mundo psicológico la
relación que se da entre el lenguaje interior y el lenguaje
exterior es importante, el primero es un lenguaje consti- PROBLEMAS D E L A SEMIOTICA
tuido por significados, por eso su sintaxis es muy particular,
lo que le permite una conformación estructural dada por
la predicación y la aglutinación; además es un lenguaje o, s¡ se quiere, la semiótica da una
que no tiene sujeto, todo esto lo hace incomprensible para especie de explicación fotomecánica de
la semiosis al revelar que, donde
un posible oyente, porque el lenguaje interior sigue el nosotros vemos imágenes, hay ajustes
ritmo interno del pensamiento. Este problema se nos estratégicos de puntos blancos y negros,
alternancias de llenos y vacíos, pulu-
plantea en el lenguaje poético en dos vertientes, por una lación de rasgos no significantes de
parte, el poeta sabe que el lenguaje interior es el lenguaje la redecOla que se pueden diferenciar
por la forma, la posición, la intensidad
de la interiorización de sentimientos, y por eso tratará de cromática. La semiótica, como la teoría
expresarlo en forma externa buscando de alguna manera musical, nos dice que por debajo de la
melodía reconocible hay un juego com-
mantener la estructura del lenguaje interior. Así el lector plejo de intervalos y de notas y por
debe estar atento ante esta posibilidad, a sabiendas de que debajo de las notas hay haces defor-
mantes.
cuando se tropieza con estas formas, se trata del intento
UMBERTO ECO
de interiorización de ciertos pensamientos. Por otro lado,
también el poeta intentará llevar al lenguaje escrito los 1. ¿SEMIOTICA O SEMIOLOGIA? 1
vaivenes del pensamiento, de allí la enumeración caótica
y la metáfora arbitraria, que no son otra cosa que la exte- Umberto Eco sostiene que todos los conceptos de la
riorización del pensamiento. semiótica actual los podemos encontrar en embrión en el
pensamiento que se expresa en la historia de la filosofía
Como hemos visto, si estudiamos atentamente el y de la medicina clásica. Según él, podemos encontrar entre
comportamiento del lenguaje y del habla y su mundo de las presocráticos, en Hipócrates, Parménides, Platón y aun
relaciones, podremos, con ayuda de la semiótica, a la cual en Aristóteles, la esencia de las discusiones sobre esta
le dedicaremos el siguiente capítulo, encontrar un instru- nueva ciencia denominada semiótica. Asegura que todos
mento de análisis que nos permita hacer una lectura lo estos pensadores sabían que se significaba no sólo a través
más verídica posible de la poesía, alejando de una vez
por todas, el tan usual y poco valedero análisis impresio- 1 Etimológicamente las palabras semiótica y semántica vienen de un
mismo tronco, recorriendo hilos etimológicos diferentes. Partiendo de
nista del texto poético que tiene tanto de invención por to sema, palabra que significaba signo en griego, va a convertirse en
parte del lector que funge de crítico; y superar el análisis el sustantivo semeion que quiere decir la señal, este sustantivo será
el punto de partida para el verbo semeioo, hago señales o hago señas.
estructuralista, cuyos aportes no negamos, pero que ignora Luego se adjetiva el sustantivo, cosa bastante frecuente, y surgirá
todo aquello relacionado con el mundo extralingüístico semiotikos que sería señalativo o sintomatológico, un adjetivo relativo
a los indicios que usaba Hipócrates para indicar síntomas de enfer-
que rodea la palabra, y que es tan importante en la con- medad. E n el siglo xvii, los médicos ingleses lo usarán con frecuencia,
formación del ser humano, y por lo tanto del poeta. será entonces semiotics, que ya no venía directamente del griego sino
del latín semioticus que era una trasposición del griego.

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del lenguaje, sino también, a través de otros signos no della scienza "de signis pulcre cogitatorum et dispositorum";
lingüísticos. senonché la pars altera deU'opera, apparsa nel 1758, si arrestó,
grosso modo, alia fine del caput i , e il seguito non si ebbe
Sugiere igualmente, que se puede decir lo mismo de per la morte del Baumgarten (1763). Questi comunque
todo el pensamiento medieval y moderno. Se permite decir sembra attestare che il termine dovesse esser in uso in am-
esto, porque todas las discusiones y teorías están funda- biente leibniziano e wolffiano anche prima del Lambert"
mentadas en la Teoría del Conocimiento, por lo tanto todas (p. 349, N? 11).
tienen que apoyarse en el significado del lenguaje o de
Ambos autores nos hacen pensar que la preocupación
cualquier otro signo emitido por el hombre o la naturaleza,
por la semiótica no es de reciente manejo, sino que se re-
ya que de alguna manera los signos son el vehículo apro-
monta a fechas bastante lejanas. Por lo tanto, decir que
piado para trasmitir conocimiento. Pero, a su vez, dice
es una teoría nueva no sería lo apropiado, es sólo su deno-
que durante todos estos siglos se le ha negado el nombre
minación la que comienza a ser popular en este siglo.
a esta ciencia, elaborándose mucha teoría semiótica sin
reconocerla como tal, y da razones: Por otra parte aún no están claros los límites de esta
ciencia, cuál es el objeto que estudia, y cómo lo estudia,
Forse perché riconoscere come semiotiche quelle questioni di todos estos son interrogantes de difícil respuesta. Pregun-
cui si discuteva significaba scoprire appunto la forza del
tarse qué es la semiótica parece no ser adecuado, ya que
simbólico, confessare che quando si credeva di discútete sulla
struttura del reale, in fatto si discuteva sulla natura dei la cuestión esencial sería saber lo que es semiótico, como
linguaggi (Avalle, 1982, p. 66). dice Garroni:
Por su parte TuUio De Mauro, en Notizie biografiche ¿qué es aquello que puede ser analizado desde el punto de
e critiche su F. de Saussure, que le sirve de epílogo a la vista semiótico? Todos estos problemas se nos presentan
edición italiana del Corso di lingüistica genérale cita los porque hoy se ha constituido una teoría semiótica tan general
ipansemiótica, la llama Garroni] que incluye todos los
siguientes trabajos como antecedentes de la semiología
moderna, tal como lo proponía el lingüista suizo:
Locke usa o-n ^el<^)Tlx•^ nel parágrafo conclusivo dell' Tercero Sfllie l ü i T i x n . L a tercera rama puede llamarse
Essay (iv 21.4) nel senso di "dottrina dei segni": " i l suo
£i1|iE l u i T i XI) o Doctrina de los signos, y, como las palabras
compito é di considerare la natura dei segni di cui fa uso lo
spirito per l'inteftdimento delle cose", o per trasmettere ad constituyen la parte más útil, también puede Uamarse con sufi-
altri le sue conoscenze"^ (• • •) É probabile che Tuso lockiano ciente propiedad Ao> i x n Lógica. E l asunto de esta cien-
cia consiste en considerar la naturaleza de los signos de que se
sia una determinazione del semiotics in uso tra medici; cfr. vale la mente para entender las cosas, o para comunicar sus cono-
oi\v t i é p o s "scienza dei sintomi" in Galeno Op. cimientos a otros ( . . . ) Los signos que los hombres han encon-
XIV 689 Kühn. Come accenna Abbagnano, Semiotik appare trado más convenientes, y, por lo tanto, aquellos de que se valen
come titolo della terza parte del Neues Organon di J. H . Lam- más comúnmente son los sonidos articulados. Por eso, la conside-
ración de las ideas y de las palabras, en cuanto que son los
bert ( . . . ) (1764). Ma giá quattordici anni prima semiótica
grandes instrumentos del conocimiento, constituye una parte nada
appare nella synopsis áél'Aesthetica di Baumgarten come despreciable de la contemplación de quienes pretendan ver en
titolo del caput i i i áell'Aesthetica theoretica, ossia come nome toda su extensión el conocimiento humano. Y si esos instrumen-
tos fueran objeto de una esmerada ponderación y de un estudio
2 Locke en su Tratado sobre el entendimiento humano (1690), en el cuidadoso, quizás nos ofrecerían otra clase de lógica y de crítica,
libro IV, Cap. xxi, llamado De la división de las ciencias, en el pará- distintas a las que nos han sido familiares hasta ahora (ver
grafo 4 dice: Bibliografía).

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modelos posibles que tienen cabida en la teoría de la infor- a él por primera vez se logra asignar a la lingüística un
mación (Garroni, 1975). puesto en el mundo de las ciencias. *
La tarea de la semiología según Saussure será:
Claro está que estas dudas son menores cuando
Oü s'arrétera la sémíologie? C'est difficíle á diré. Cette science
hablamos del lenguaje, porque la lengua, dice Saussure, es verra son domaine s'étendre toujours davantage. Les signes,
un sistema de signos, y por esto se puede confrontar con les gestes de politesse par exemple, rentreraient; ils sont
la escritura, con el alfabeto de los sordos, con los ritos un langage en tant qu'íls signífient quelque chose; ils sont
simbólicos, las formas de cortesía, las señales miUtares, etc. impersonnels —sauf la nuance, maís on peut en diré autant
Ella, asegura, es el más importante de estos sistemas. des signes de la langue— en peuvent étre modifiés par l'índi-
vidu et se perpétuent en dehors d'eux. Ce será une des taches
Es decir, que la lengua desde el punto de vista semió- de la sémíologie de marquer les degres et les dífférences
tico se puede ver como cualquier otro sistema de signos (1979, p. 416, N? 139).
¿Pero dentro de este sistema podemos conocer los límites?
¿Se puede considerar todo tipo de lenguaje, materia de La utilización del término semiología o del término
análisis semiótico? Todas estas dudas parecen mantenerse semiótica no parece estar muy clara. Saussure, como ya
entre nosotros. hemos visto, denominará a esta nueva ciencia, semiología,
Saussure reclamaba la existencia de una ciencia deno- pero por otra parte la utilización del término semiótica,
minada semiología: desde el punto de vista de hoy, parece arrancar a partir
de 1935 cuando comienzan a aparecer los ocho volúmenes
Si puó dunque concepire una scienza che studia la vita dei de los Collected Papers of Charles Sanders Peirce, aunque
segni nel quadro della vita sociale; essa potrebbe formare una
el fragmento en el que Peirce utiliza por primera vez el
parte della psicología sociale e, di coseguenza, della psicología
genérale; noi la chiameremo semiología (dal greco oime i ov
término se remonta a 1897 y pertenece a la parte de sus
escritos denominada Gramática especulativa {Speculative
—segno—). Essa potrebbe dirci in che consístono i segni,
quali leggi lí regolano. Poiché essa non esiste ancora non grammar); al inicio de este trozo dirá:
possiamo diré che cosa sará; essa ha tuttavia diritto ad
esistere e il suo posto é determinato in partenza. La lingüis- Lógica, nel suo senso genérale, é, come credo di aver dimostrato,
tica é solo una parte di questa scienza genérale, le leggi solo un altro nome per semiótica ( o t i iie lui-r i x n ) ; la quasí-
scoperte dalla semiología saranno applícabílí alia lingüística necessaría, o fórmale, dottrina dei segni. (1980, p. 131).
e questa si trpverá collegata a un dominio ben definíto
neU'insieme dei fatti umaní (1978, p. 26). Para Rossi-Landi, ^ el término semiótica denomina
a \ ciencia general de los signos, y semiología es una
Parece ser que el nombre como tal —semiología— se ciencia particular que se ocupa de los fenómenos pos y
inicia en forma coherente con el lingüista suizo ^ y gracias translingüísticos. Para Avalle,* semiología es el estudio
3 Debemos recordar que Saussure comienza sus cursos de Lingüística
de los signos intencionales y arbitrarios, y semiótica el
General en Ginebra en 1906, es difícil saber la fecha exacta en que éste
utiliza esta terminología en sus clares orales, pero se puede dar como 4 Mounin, en su Introducción a la Semiologia, comenta que después de
fecha de iniciación del término, la de 1916, momento de publicación Saussure, Buyssens, en un libro, que dice ser poco conocido. Les langa-
del C L G . Comenta De Mauro que se puede rastrear el comienzo de ges et le discours, pone las bases para la semiología saussuriana.
estas ideas en Saussure desde los tiempos de publicación de la Memoire 5 Rossi-Landi, F. Semiótica e ideología, Milano, Bompiani, 1972.
(1878), según testimonio de Adrián Naville, Decano de la Faoiltad * Avalle, D'A. S. Corso di semiología dei testi letterari, Torino.
de Letras y Ciencias Sociales de la Universidad de Ginebra, quien Giappichelli. 1972.
conocía, por discusiones personales, el pensamiento de Saussure.

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estudio de los síntomas o indicios. Según Casetti, sólo se Para Barthes, el objeto de la semiología está en todo
puede hablar de un término que sería una denominación sistema de signo, cualquiera que sea la sustancia del signo
de conjunto y a la vez neutro: semiótica. TuUio De Mauro y los límites del sistema, así las imágenes, gestos, sonidos,
en la Minisemantica, califica la Teoría de la Comuni- espectáculos, etc., son sistemas de significación. Pero
cación como semiótica, y propone reservar el término Buyssens le da otro matiz a su definición:
semiología para el estudio de un código semiológico par-
ticular. Por su parte Cesare Segre (Avalle, 1982), comenta La semiología se puede definir como el estudio de los proce-
que a través del tiempo se han venido usando ambos tér- dimientos de comunicación, es decir, de los medios utilizados
para influenciar a ios demás y reconocidos como tales por
minos en forma alternativa, y reconoce que aun en él aquel a quien se quiere influenciar (Mounin, 1972, p. 15).
mismo se puede encontrar esta vacilación; para Eco la
semiótica estudia todos los fenómenos culturales como si De todas estas definiciones parece desprenderse cierta
fueran sistemas de signos, es decir fenómenos de comu- diferencia entre los dos términos discutidos. La semiótica
nicación: es la definición más general, se habla con mucha frecuencia
La semiótica se ocupa de cualquier cosa que pueda consi- de sistemas de signos, de teoría de la comunicación, de
derarse como signo. Signo es cualquier cosa que pueda doctrina de los signos, del signo y su significado. Mientras
. considerarse como substituto significante de cualquier otra que cuando se refieren al término semiología pareciera cir-
cosa. Ese cualquier otra cosa no debe necesariamente existir
cunscribirse a casos particulares (con excepción de Saus-
ni debe subsistir de hecho en el momento en que el signo la
represente. E n ese sentido, la semiótica es, en principio, la sure quien llama semiología a aquella ciencia que estudia
disciplina que estudia todo lo que puede usarse para mentir. la vida de los signos en una manera general), se habla de
Si una cosa no puede usarse para mentir, en ese caso tampoco fenómenos pos y translingüísticos, de signos intencionales
puede usarse para decir la verdad: en realidad, no puede y arbitrarios, de códigos particulares, de procedimientos
usarse para decir nada.
de significación; podríamos decir que la semiótica nos
La definición de "teoría de la mentira" podría representar un
programa satisfactorio para una semiótica general^ (1978,
habla de comunicación y la semiología de significación.
p. 31). Como vemos, la semiótica se extiende a todo con-
texto que esté conformado por signos, pero de acuerdo
7 Cuando Eco califica la semiótica de Teoría de la mentira, está refirién- con Hjelmslev, la teoría del lenguaje construida sobre el
dose a aquel problema propuesto por el referente que ejerce influencia
en la teoría de los códigos y produce aquello que llama falacia refe- modelo formal de los lenguajes naturales, debido a que
rencid. Al darse el proceso semiótico, o función semiótica, según Eco, existe un isomorfismo en todos ellos se puede aplicar a todo
el emisor del mensaje puede decidir transmitir una mentira, es decir
emitir un signo que no tiene referente veraz (da como ejemplo el sistema de signos. Por eso los patrones y métodos de inves-
uso del lexema 'sirena'). Es decir que está comunicando algo que no tigación semiótica utilizados en el estudio del lenguaje son
corresponde a un estado real de hecho, "Siempre que hay mentira, hay
significación. Siempre que hay significación, se da la posibilidad de factibles de aplicar en otros sistemas de signos. Así a partir
usarla para mentir". de los estudios semióticos del lenguaje, se ha ido exten-
Así, hace una diferenciación entre condición de significación y con-
dición de verdad, problema este que nos remite a una teoría del refe- diendo esta ciencia a todo sistema de signos porque al fin
rente, teoría todavía no muy clara, ni suficientemente estudiada. Lo y al cabo funcionan a la manera del lenguaje.
que sí parece ser cierto es que no se puede decir que un significado
corresponde siempre a un objeto real. "La falacia referencial,
consiste en suponer que el significado de un significante tiene que ver
con el objeto correspondiente".

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¿En qué se diferencia la semiología del texto literario 2. SEMIOTICA Y COMUNICACION Y / O SEMIOLOGIA
Y SIGNIFICACION
de la crítica literaria de corte semiológico? La respuesta
nos la da Eco: E l empleo de señales es lo que define la comunica-
Una semiología o semiótica dei testi letterari usa la letteratura ción, así el acto de comunicación se verificará cada vez que
per elaborare ipotesi e trovare conferme a una teoría genérale un emisor empleando señales, trata de hacer llegar a un
dei segni e a una teoría di quell'uso specífico dei segni che
é la letterarietá. Una crítica a impianto semiológico usa le
receptor, alguna indicación. Si planteamos una semiótica
teorie di cui sopra per capire meglio un dato testo, ma de la comunicación, podríamos aclarar qué es la comuni-
potrebbe in línea di principio integrare l'approccío semiótico cación en general. Quizás la semiótica de la comunicación
con altrí approcci, se servono a capire meglío un testo (Avalle, se referiría más exactamente al concepto de semiótica que
1982, p. 67). tiene Barthes, quien extiende el campo de esta disciplina
a todo hecho que considera significante, como lo es el
Los estudios semiológicos se han ido extendiendo vestido, las señales de tránsito, etc.; pareciera, pues, mucho
hasta tal punto que hoy existen aproximaciones semio- más amplio el concepto de semiótica de la comunicación
lógicas de corte psicoanalista y de corte marxista, así Cesare que aquel que se da en llamar semiología de la significa-
Segre responde a la posibilidad de un encuentro entre ción. Según Buyssens, la semiología debería ocuparse sólo
semiología y marxismo: de hechos "perceptibles asociados con estados de concien-
La semiótica é, o sará presto, il migliore strumento per cia, producidos expresamente para dar a conocer dichos
studiare i processi della comunicazione sociale. Ma il rapporto estados de conciencia" (Mounin, 1972, p. 13). Es evi-
tra questi processi e la struttura económica; i rapporti tra dente la diferencia planteada entre la tesis de Barthes y la
movimenti della cultura e mutamenti sociali, possono esse- de Buyssens; pareciera que a nosotros, interesados en el
re studiati soltanto con analisi di tipo marxista. É anzi in análisis del texto literario —concretamente el poético—, de-
base a un impianto di lavoro di puesto genere che si possono
bería interesarnos la semiología de la significación, ya que
evitare le ingenuitá di certo sociologismo volgare. Non propon-
go insomma un eclettico accostamento delle due conce- de alguna manera el escritor-emitente expresa estados de
zioni, ma una integrazione ben meditata. (Avalle, 1982, conciencia difíciles de encontrar en una señal de tránsito,
p. 55). por ejemplo.

Y Marcello Pagnini ve así las relaciones entre el aná- Quizás apoyándonos en De Mauro y Buyssens, po-
lisis semiológico y el psicoanáUsis: dríamos llamar la disciplina que nos interesa, semiología
de la significación. De todas maneras parece bastante
La Psicoanalisi fornisce sistemi da applicare alie caíene signi- difícil poder encontrar los límites que separan a esta
ficanti, e perció é parte delle possibilitá di significazione
opérate dalla semiótica. D'altronde é ormai accettato da tutti
última, de la semiótica de la comunicación. ¿Se puede
gli studiosi che il segno ha anche livelli "profondi". Sará pero comunicar sin significar, o viceversa, se puede significar
opportuno distinguere una psicoanalisi che utilizza il testo sin comunicar?
come sintomatologia degli stati psichici dell'autore da una
psicoanalisi che riconosce modelli psicoanalitici autonomi nell'
opera. (Avalle, 1982, p. 116).

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3. PROCESO SEMIOTICO causado pasivamente por el objeto, porque no es sólo
percibido, debe ser conocido y por lo tanto interpretado.
"Quando parlo, disegno, scrivo, faccio della pratica Si el objeto sólo es representado, se da una experiencia
semiosica", dice Eco, es así como se refiere a un proceso icónica solamente. Se aclara mucho más la idea de Peirce
que practica el hombre a partir de un objeto, un proceso si tenemos en cuenta las siguientes citas de su Semiótica:
que podríamos decir que es práctico. "Quando rifletto sul
fatto que parlo, disegno o scrivo, faccio della pratica Nella sua forma genuina, la Terzitá é la relazione triadica
semiótica, nel senso in cui si parla della pratica scienti- esistente fra un segno, il suo oggetto, e il pensiero interpre-
fica"; continúa diciendo en la entrevista que se le hace tante, esso stesso un segno, relazione considerata como costi-
en Semiótica letteraria italiana. Es decir, el proceso llamado tuente il modo di essere di un segno. Un segno media fra il
segno interpretante e il suo oggetto. Assumendo il segno nel
semiosis contribuye a la transformación del objeto, es una suo senso piü ampio, il suo interpretante non é necessaria-
especie de intervención activa, es un proceso de conoci- mente un segno ( . . . ) Un segno dunque é un oggetto in
miento. relazione con il suo oggetto da una parte e con un interpre-
tante dall' altra, in modo tale da mettere l'interpretante in
Como toda la terminología usada en esta nueva ciencia, una relazione con 1'oggetto, corrispondente alia sua propia
que llamamos semiótica o semiología, todavía el término relazione con l'oggetto (1980 [8.332], p. 188).
semiosis es oscilante y parece no estar fijado por conceptos
precisos, es por esto que al proceso de semiosis también E l interpretante no es el que interpreta el signo, sino
parece que podemos llamarlo proceso semiótico. es lo que garantiza la validez del signo, aun en ausencia
del intérprete. Esta idea de interpretante convierte la teoría
Ya Peirce lo había propuesto como un proceso de de la significación en una ciencia rigurosa de los fenómenos
conocimiento, en donde la realidad externa, el objeto, es culturales, y hace de los signos "el tejido de conocimiento
más importante que el sujeto humano, así el objeto se como progreso del infinito".
convierte en el primer motor del proceso semiótico. Peirce Para entender mejor lo que significa y es un inter-
presentará este proceso basado en su célebre relación pretante, vale la pena hacer un resumen de lo que dice
triádica: Peirce en 2.274, veamos cómo ve esta categoría: Al signo
objeto (llamado por Peirce, Representamen) lo denomina un
Primero que está en una relación triádica genuina * con
signo. un Segundo, que sería el objeto, quien es capaz de deter-
minar un Tercero llamado interpretante. Si recordamos la
'interpretante relación triádica de la página anterior, tendríamos:

Relación que para Eco es "una constante metafísica La llama así porque se debe dar siempre entre los tres elementos y no
y ontológica del universo físico mental, y no únicamente sólo en dos de ellos. Pero nos conviene citar también la nota N? 3
de la misma página; " L a teoría de los interpretantes, por consiguiente,
una organización semiótica" (1976, p. 164) y a la que cumple la función que le asignara Peirce, de hacer de la vida de los
Peirce denomina relación creativa. E l significado no es signos el tejido del conocimiento como progreso infinito".

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el interpretante sea una categoría fértil, ya que se dan
, Segundo desplazamientos continuos que refieren un signo a otro.
(objeto) De lo que estamos claros después de todo esto, es
que a través del lenguaje se establece una relación semió-
Primero^ tica, relación que nos interesa vivamente para el fin que
(signo) nos proponemos, citemos a De Mauro:
Tercero ( . . . ) é assai variabile la misura in cui una fonte e un desti-
(interpretante) natario possono incontrarsi nel riconoscere uno stesso senso
a uno stesso segnale e, dunque, nello stabilire, movendo da
punti di partenza diversi, u n medesimo rapporto semiótico.
Del resto lo stesso riconoscimento di questo fatto, perfino
así el interpretante asume con el objeto la misma relación
il medesimo uso delle parole che in tal riconoscimento fac-
que se da entre signo y objeto. La importancia del ciamo, a cominciare dall'aggettivo stesso, presenta piü d'un
interpretante es que está en relación con el objeto en problema. Pur dovendo tornare su tutto ció, possiamo pero
iguales condiciones que el signo —suponemos que es por fin d'ora convenire che diremo "comunicazione" e "comuni-
care" il convergeré di una fonte e di u n destinatario verso il
esto que Eco lo denomina otro signo— y debe estar en medesimo rapporto semiótico, per quel tanto che ció sia possi-
capacidad de determinar él mismo su propio Tercero o in- bile, avvenga e sia riconoscibile. I n genérale, u n tipo d i
terpretante y así sucesivamente. comunicazione, un linguaggio puó concepirsi come un insieme
di accorgimenti miranti a rendere il piü facile e sicuro possibi-
De esta manera, para Peirce, un signo es un Repre- le l'incontro della fonte e del destinatario nello stabilire uno
sentamen con un interpretante mental. Como ya dijimos, stesso rapporto semiótico, tenuto contó della conformazione
di fonte e destinatario e tenuto contó del tipo di sensi da
para Eco pareciera que el interpretante de Peirce es otro comunicare (1982, p, 7 ) .
signo que traduce el primer signo, o es tal vez una idea
que da lugar a una serie de signos:
4. FUNCION SEMIOLOGICA O SEMIOTICA
Es (el interpretante) el mecanismo semiótico por medio del
cual el significado viene predicado por un significante. Se
llama interpretante a cualquier otro signo o conjunto de
Si bien al hablar de semiótica y proceso semiótico
signos (en cualquier substancia de la expresión se realiza nos hemos referido a todo sistema de signos, hemos tratado
su forma de expresión),- que traduce el primer signo en cir- de centrarnos en aquel que más nos interesa para nuestro
cunstancias adecuadas (Eco, 1976, p. 173). trabajo, nos referimos al lingüístico, que como bien dice
Hjelmslev, es el sistema semiótico por excelencia. ^
Cuando Eco nos habla del interpretante nos introduce E l sistema lingüístico es un sistema semiológico que
en una idea que es muy importante para la lectura del se diferencia de otros gracias a su función principal, que
lenguaje poético, nos referimos a la semiosis ilimitada, dice es la que establece el signo en cuanto tal. Este rasgo funda-
que, para establecer un significado de un significante, es
necesario nombrar el primer significante, que puede ser 9 Ya Saussure hablaba de sistema semiológico, pata esta información
se puede ver el Capítulo iii, llamado "Identitá, realtá, valori", corres-
a su vez interpretado por otro significante, y así suce- pondiente a la Segunda Parte denominada "Lingüistica Sincrónica" de
su Corso di Lingüistica Genérale.
sivamente. Por lo tanto, la semiosis ilimitada permite que
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5. E L SIGNO Y SUS DIMENSIONES
mental es el que reúne al significado-contenido con el signi-
ficante-expresión. E l primero es considerado por Eco, como
elemento de un sistema transmitido, y el segundo como ele- En todo código creativo (lo llamamos así porque no
mento de un sistema transmisor. Dicho de otra manera, nos estamos refiriendo a aquel código elaborado con un
esta función reúne cada significado con su(s) significan- lenguaje simbólico), el signo se puede realizar gracias a un
te(s) respectivo (s) e inversamente: continuo entendimiento entre los usuarios, hablamos del
Existe función semiótica, dice Eco, cuando una expresión y autor del signo y el destinatario del mismo. Esto se debe
un contenido están en correlación, y ambos elementos se con- a aquella característica de las lenguas histórico-naturales
vierten en FUNTivos de la correlación. (1978, p. 79). que hemos llamado creatividad. (Recordemos que esta
Una función semiótica se realiza cuando dos funtivos (expre- creatividad es la disponibilidad que tiene el lenguaje a la
sión y contenido) entran en correlación mutua: pero el mismo innovación, manipulación y, aún más, a la deformación de
funtivo puede entrar también en correlación con otros ele- formas que ya han sido codificadas. Esta creatividad se
mentos, con lo que se convertirá en funtivo diferente que da refleja en los aspectos sintácticos y semánticos).
origen a otra función (1978, p. 100).
De Mauro en su Minisemantica, llama a estos códi-
Es esta función la que separa al signo de una señal, gos creativos, códigos con anfibología, pues dependen del
porque esta última al fin y al cabo puede ser sólo un ele- punto de vista semántico. ¿Qué quiere decir esto? Quiere
mento carente de ella, como lo es un estímulo cualquiera. decir que cuando se intenta entender un código creativo,
Así el signo, gracias a esta función tan importante, se se debe apelar a los usuarios del lenguaje (emitente y re-
convierte en una entidad semiótica variable no fija. Por ceptor) para saber o conocer la utilización que se le está
esto es importante encontrar una metodología, o sistema dando al signo en el código. Así, para leer un código, se
de anáÜsis, basándose en esa función fundamental, para tiene que tomar en cuenta su dimensión pragmática,
poder conocer las diferentes lecturas que se le pueden hacer que será importante porque es mecanismo de identificación
a un discurso, de acuerdo a estas posibles sustituciones de los signos del código, y por supuesto está movida por
semánticas, que se pueden dar en un signo cualquiera. los usuarios con mucha libertad. TuUio De Mauro ha estu-
Es decir, que debemos buscar una metodología que nos diado cuidadosamente el proceso semiológico tomando en
ayude a encontrar la cadena de semas que se pueden dar cuenta las cuatro dimensiones en las que se mueve el signo,
a partir de un signo; claro está, tomando en cuenta la o de las que depende el signo; a saber: dimensión pragmá-
función semiológica. Lo interesante a notar es que, en tica, expresiva, sintáctica y semántica. Todas son proce-
relación con esta función semiótica, la definición de signo dentes para poder adentrarse en el estudio del significado
se hace mucho más compleja, gracias a las innumerables de un signo que pertenezca a un código semiótico par-
relaciones (contextos, circunstancias extralingüísticas, etc.) ticular.
que lo rodean. La dimensión pragmática se da, gracias a una correla-
ción entre emitente y receptor al realizarse un signo del
código, correlación que depende en mucho de elementos
extralingüísticos que rodean a ambos usuarios, así como
al uso que se le aplica al signo. La dimensión expresiva,

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depende de las sustancias, el canal, y los materiales que ficado de un signo poético, podemos seguir dicha cadena
sirven para realizar un significante, entre estos debemos para encontrar otros posibles significados.
tomar en cuenta la grafía, la entonación fonética, la acús- Aceptando que también en el código poético se veri-
tica, la mímica, etc., que acompañan al signo. La dimensión fica un proceso semiótico, debemos tratar de analizarlo
sintáctica se relaciona con los rasgos pertinentes que cons- tomando en cuenta las cuatro dimensiones que inciden en
tituyen y diferencian los signos del código, rasgos internos el signo, de las que ya hemos hablado anteriormente; sobre
o estructurales que pertenecen a la sintaxis. Y por último todo ahondar en aquella llamada pragmática " que está en
la dimensión semántica, que se estudia tomando en cuenta relación directa con el emitente-autor y el destinatario-
los signos que realizan los significantes. lector.
Si logramos conocer cómo funcionan las relaciones
emitente-texto-destinatario, podemos encontrar o tratar de
encontrar un instrumental de análisis para decodificar el
6. SEMIOTICA D E L TEXTO LITERARIO texto poético, y así poder hacer una lectura que nos ayude
a acercarnos con mayor exactitud a él.
. . . gli enunciati del poeta sonó non
solo nuovi, il che accade ad ogni par- "La cooperazione testuale é fenómeno che si realizza,
lante, ma insostituibili e non estrapo-
labili dal contesto genérale, pena la
( . . . ) tre due strategie discorsive, non tra due soggetti
perdita della possibilitá di comunica- individuali". Así nos propone Eco en Lector in Fábula,
zione poética.
las relaciones entre emitente y destinatario con el texto;
MARÍA CORTI ve la construcción del texto literario como una cooperación

En general, la principal tarea del análisis semiótico 10 La palabra poética puede ser vista como un conjunto de signos que
es obtener del estudio del texto literario los elementos produce un significado, pero también algunas veces el emiten te-poeta
nos está enviando algo que puede no ser signo, sino señal. Si
útiles para el reconocimiento y la reconstrucción del sis- eso es así, la palabra poética sirve a un proceso de comunicación,
tema de signos estructurados por el emitente, y que gobier- además de servir a un proceso de significación. Lo interesante sería
poder analizar cuándo la palabra poética es signo, y cuándo puede
nan la comunicación artística. tener característica de señal.
La palabra pragmática viene del latín pragmaticus que es una transpo-
Para esto se toman en cuenta una serie de factores sición del griego pragmatikos, que se deriva de la palabra pragma cuyo
que inciden en el proceso semiótico, como lo son: el prin- significado es acción. E n los siglos xvii y xviii se construyen teorías
interesadas en las relaciones entre el lector y la obra, teorías que lle-
cipio de semiosis ilimitada (palabras de Eco); los diferen- varán el nombre de pragmáticas. Dentro de la discusión lógica con-
tes niveles que inciden en el signo (de los cuales hablamos temporánea, la pragmática aparece definida de diferentes formas,
definiciones a nuestro parecer complementarias entre sí; serían éstas
en el punto anterior); y las relaciones emitente-texto, emi- las siguientes: 1) Conjunto de respuestas idiosincrásicas elaboradas por
tente-destinatario y destinatario-texto. el destinatario después de recibir el mensaje. 2) Interpretación de todas
las opciones semánticas ofrecidas por el mensaje (es decir que está
Gracias a eso que Eco llama "semiosis ilimitada", el planteada la relación código/sentido). 3) Conjunto de las presuposi-
ciones dadas a entender por el mensaje. 4) Conjunto de presuposicio-
signo poético puede ser sometido al análisis semiótico nes que dan a entender las relaciones interactivas entre emisor/desti-
ilimitado, ya que encontrado un primer significado, pode- natario. E n la semiótica moderna, el nivel pragmático es aquel que
señala la relación de los signos con los usuarios y que toma en cuenta:
mos continuar con la cadena semiótica debido a los des- motivaciones, intenciones, creencias y consecuencias de los usuarios de
plazamientos del mismo. Así una vez encontrado el signi- los códigos verbales al codificar y decodificar el signo.

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o trabajo entre dos "estrategias", aquella del autor-emi- cierran el texto, y que puede hacerse cada vez más com-
tente, cuando estructura su obra y la codifica, y aquella pleja ya que con el correr del tiempo la obra puede car-
del lector-destinatario, que a su vez debe desplegar su garse continuamente de información dando lugar a un
propia estrategia para poder decodificar dicho texto; ambos proceso sin fin de lecturas de acuerdo a sus lectores deco-
parecen entonces asumir en el enunciado un rol actancial. dificadores.
Esta relación entre "estrategias" variará según el con- Viendo las cosas desde este punto de vista. Eco lanza
texto histórico-cultural en que se mueve la obra literaria, su teoría de obra abierta en donde el destinatario es cola-
y dependerá del tipo de conciencia que tiene el público borador de la vida polisémica del texto, el cual no cesa
lector sobre el "autor", además del tipo de conciencia que de hacerse continuamente.
tiene el autor-emitente sobre su posible público-lector. Así el destinatario surge como colaborador y decodi-
E l tipo de análisis que hagamos dependerá de la ficador múltiple, " y este es el papel que tenemos que
visión de mundo que tengan ambos polos que inician y asumir para verificar el análisis semiótico del texto, porque
un texto representa una serie de artificios que deben ser
12 E n la Edad Media no se conocía el concepto de personalidad artística, actualizados por cada destinatario (entre estos artificios
como tampoco el de individualidad en la creación artística. E l poeta puede verse uno muy importante, pero a la vez muy com-

r
sólo era imitador de la belleza divina, este sentido de imitación no le
mitía decisión en la creación, ni desarrollo de la personalidad, esto plejo y que dificulta la lectura, es aquello que podemos
convertía en un poeta anónimo. Todavía en el Renacimiento sub- lámar lo N O D I C H O , es decir lo que no viene manifestado
siste la idea del imitador, el ejemplo de la forma artística es la cosa;
pero a finales de la Edad Media se da comieiizo a la subjetivación superficialmente a nivel de la expresión). Por esto el texto
en el arte, la diferencia con el sentido de subjetivación de hoy en día, requiere de la cooperación dinámica del destinatario para
está en que si bien ya el poeta no es imitador de la belleza divina,
como anteriormente, ahora representa la realidad; el objeto artístico poder lograr una lectura aceptable y veraz "el texto, dice
nacerá entonces de las impresiones que las cosas pertenecientes a la Eco, necesita de alguien que lo ayude a funcionar".
realidad efectúan en el hombre-creador, es una concepción que hoy
sería denominada como objetivismo. Pero poco a poco el artista toma De esta manera una lectura real del texto literario
conciencia de su valor. En forma cuantitativa conoce y aprecia su
trabajo pero todavía no considera a la obra como producto de su perso- dependerá en mucho del lector. E l texto estimula el
nalidad, los aspectos sociológicos y psicológicos todavía no son tomados desarrollo de la imaginación del destinatario, ya que gracias
en cuenta, porque no se conocen; será en el siglo xviii, con el Roman-
ticismo cuando nace el genio, es decir la espontaneidad creadora, ya a ésta, percibe elementos que le son comunicados, valores
el artista no crea porque quiere, sino porque Hene que crear,_ la que de alguna manera le producen placer.
obra entonces será" expresión auténtica de la realidad, es la materiali-
zación de su psiquis, y el proceso creador será espontáneo, nace así Por su parte el autor-emitente será un productor del
el autor-creador-eminente de un signo, tal como lo concebimos hoy, texto cuyo yo hablará en forma implícita y en forma explí-
aunque el artista al comenzar a sentirse independiente de la realidad
exterior, comenzará a creerse creador de un universo propio. Es sólo cita; será como decía Mallarmé, "un director de orquesta"
a finales del siglo xix cuando surge la estética psicologista, la obra que maneja todas las estrategias posibles para estructurar
de arte entonces expresará la interioridad del artista y de su psiquis;
el arte, hasta el momento que se asoma a la Modernidad, será sólo un texto que en cierta medida es anónimo, ya que el pro-
la expresión del artista como individuo que no tiene ninguna relación
con el tiempo que le toca vivir. Y a con la Modernidad se sabrá^ que
no sólo la psiquis es ingrediente de la creación, sino que también lo Para Marcello Pagnini (Avalle, 1982), hay dos tipos de destinatario,
son los factores sociológicos, económicos, culturales, etc.; es decir, el interno y el externo. E l interno está constituido por el lector que
todo el contexto que rodea al artista, y es entonces cuando entra el autor prefigura en el acto de locución, es una especie de lector
a valer el concepto de receptor de la obra de arte, que es cómplice imaginario que el autor supone conocedor y lector de sus propios
códigos. E l destinatario externo está constituido por una pluralidad de
de la creación. Receptor que como tal no había aparecido hasta el sujetos entre los cuales se puede encontrar alguno que corresponda
momento. al destinatario prefijado, pero también a muchos otros.

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ductor se esconde tras la red lingüística que ha construido. cuenta este factor subjetivo no quiere decir que debemos
Pero la perspectiva semiótica no eÜmina la noción de crea- tratar de saber "quién" escribe el texto, eso podría no
dor de la obra, el creador, visto a la luz de la semiótica interesarnos; el autor, como persona real, se le escapa a la
es más bien complejo. Se debe tener conciencia de que perspectiva semiótica, sólo se toma en cuenta cuando deja
existe un individuo histórico, que es a su vez autor y/o pro- signos que lo señalan (notas, cartas, diarios, etc.), estos
ductor de la obra, entre estas dos concepciones —el indi- signos formati parte de la enunciación y por esto son inte-
viduo histórico y el autor— existe una distinción, podemos resantes al semiólogo, quien puede rastrear algo de ese
tomar en cuenta al primero sólo cuando la obra en sí misma autor-real porque éste así lo ha querido.
nos ofrece pistas extralingüísticas (biografía, revelación Ahora bien, el emitente-autor puede asumir dos roles,
del contexto histórico, etc.). No quiere decir esto que la uno, cuando se identifica con el destinatario, y otro, cuando
búsqueda de la relación histórica del texto debe extremar actúa con procedimientos de autocomunicación, es decir
ciertos límites pero sí recordar con Saussure que los cuando hay una comunicación entre el texto y el yo que
códigos utilizados en un texto pertenecen a una comunidad habla, en este caso se convierte a su vez en destinatario.
sociocultural y han sido organizados y sintetizados de tal E l enunciado es para el semiólogo una unidad de
manera que si el lector-destinatario pertenece a una comu- análisis en donde tratará de rastrear los rasgos extralin-
nidad afín, puede asimilar los valores que le vienen dados jüísticos que lo afectan; rasgos que señalan no sólo lo auto-
a través de ellos y reconocer, en aquello que Cesare Segre DÍográfico de la obra, el mundo del consciente y del incons-
llama el plurilingüismo de una cultura, los valores de la del ciente del hombre, sino también el contexto referencial
autor. La relación entre texto y comunidad debe necesaria- en donde se encontraba implicado el emitente cuando
mente pasar por la mediación del emitente, en quien se construyó el texto.
verificará una síntesis que dependerá de los factores perso- Los enunciados del autor-poeta, que es el caso que
nales que afecten al mismo. nos ocupa, son nuevos e insustituibles y no pueden ser
E l semiólogo se enfrenta así a elementos extralin- analizados extrayéndolos aisladamente del contexto gene-
güísticos y a la intersubjetividad del autor (que se puede ral en donde están insertos pues se puede correr el peligro
dar en forma consciente o inconsciente) y que puede apa- de que se pierda la comunicación poética.
recer a través de manifestaciones como el idiolecto, que La configuración del enunciado tiene una etapa que
es elemento individual de cada artista. También es impor- María Corti considera pre-textual, la llama el avantesto,
tante tener conciencia de que, en el inconsciente del autor es la fase en la cual el autor se mueve entre lo que dirá
existe una gran "energía poética" que se manifestará en y aquello que no dirá (que tampoco es eliminado del texto
forma oculta dentro del texto, esto le comunica un cierto y que pertenece a lo N O D I C H O , del que ya hemos habla-
toque subjetivista al mismo. Con ese factor por delante, do) , es el momento en que combina significados y signi-
el semiólogo debe ingeniarse para disponer de un instru- ficantes, y reemplaza relaciones ya conocidas por todos,
mental que le permita escudriñar el texto y así encontrar por relaciones nuevas inéditas. Porque sabemos que se da
ese factor subjetivo del hombre. E l que tomemos en esa etapa pre-textual es que nos es útil el análisis semió-

14 Quizás un ejemplo de trabajo de este tipo puede ser el de Julia Kris- 15 E l autor preverá un lector modelo capaz de cooperar en la actualiza-
teva, quien trabaja con el mundo psicológico del autor. ción textual tal como él lo había previsto, al generar el texto.

92 93
HHL
tico, que nos ayuda a conocer también la tipología del
emitente a través de las relaciones con el yo del emitente
y el yo de los personajes explícitos, y en caso de la poesía
el hablante poético
E l papel y trabajo del semiólogo, como podemos ver,
es bastante complejo, ya que tiene que atender a muchos PARA UNA SEMIOLOGIA D E L T E X T O POETICO
elementos que inciden en el texto.
Por un lado no se debe exagerar al tratar de encon- The violation of the norm of the stan-
trar al autor dentro del texto; así como tampoco en aplicar dard, its systematic violation, is what
el método historicista buscando sólo las relaciones extra- malees possible the poetic utilization of
language: without this possibility there
lingüísticas que rodean al autor; por otra parte, también would be no poetry.
el semiólogo tiene que cuidarse de adoptar la actitud de la JAN iVIuKAROvsKy
crítica estructuralista, que ha visto el texto literario sólo
como escritura, en una especie de acercamiento no tras-
cendente de la palabra poética. 1. INTRODUCCION
Teniendo por delante todos estos factores y cono-
ciendo el funcionamiento de las lenguas histórico-natura- En esta tercera parte presentamos un modelo de ins-
les —que son las que utiliza el poeta para construir su trumental semiótico que creemos haber logrado gracias al
obra— el semiólogo debe trabajar para tratar de encontrar acercatniento que hemos hecho al comportamiento del
un anáhsis valedero del texto poético, que lo abarque en lenguaje poético, y al estudio teórico sobre la semiótica
toda su complejidad. Es una tarea difícil, especialmente del texto literario (ambos trabajos cierran la primera y la
por el hecho de que, como bien sabemos, la semiología segunda parte de esta investigación).
poética está todavía en período de estructuración. Es este E l obstáculo inicial con el que se tropieza todo ins-
)ues el intento, todavía incompleto, que proponemos en trumento analítico, que trata de adentrarse en el estudio
a tercera parte de este trabajo. del texto poético, es la capacidad que tiene la poesía de
ofrecernos una multiplicidad de posibles lecturas que de-
penden en mucho de la actuación lingüística de los lec-
tores. E l lenguaje poético no es fiel, ya que no se da una
relación icónica tal como se puede presuponer en algún
moniento, porque el decir del poeta, es más bien un
poieitn; de manera que tratar de hacer una lectura total
parece utópica.
La poesía permite cualquier tipo de reflexión y no
es posible construir cada vez que se hace dicha reflexión
más que un tipo de discurso, así, dice Coquet:

94 95
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Dado el estado actual de nuestro conocimiento, no vemos asunto se hace más grave si nos enfrentamos al instrumento
cómo se podría unificar, mediante una sola reflexión, las pala- que conforma la poesía: nos referimos al lenguaje. E l
bras tan diversas del crítico literario, del antropólogo, del
filósofo, del gramático, del esteta y de otros muchos, sin
lenguaje poético es construcción y destrucción de sí mismo
caer en un grave y ridículo desorden del pensamiento. (1976, gracias a su capacidad creadora y metafórica, y gracias
p. 38). a esa función que llamamos función metalingüistica re-
flexiva. A esta función se unen muchos otros elementos
Así al escoger la semiótica como método de análisis, extralingüísticos, que inciden en él en forma tan variable
tratamos de abarcar varios ámbitos, por una parte el del que lo convierten en un material de análisis bastante com-
lenguaje, tanto en su aspecto gramatical como en su con- plejo; es debido a esto, que hemos escogido la semiótica
dición de signo de la comunicación, y por otro lado, el como una posibilidad de análisis bastante aceptable, ya
de las relaciones extralingüísticas que rodean al emisor y al que toma en cuenta aquellos cuatro niveles que inciden
receptor, es decir, al poeta y al lector. tanto, y en forma tan fundamental, en el signo. Nos refe-
En este punto nos tropezamos con un problema: ¿es rimos a los niveles sintáctico, semántico, expresivo y prag-
la poesía un objeto? ¿La podemos considerar junto con mático, de los cuales ya hablamos extensamente.
los estructuralistas un objeto poético? ¿Qué es un objeto Esta proposición de análisis que presentamos en las
poético? Evidentemente aquello que los estructuralistas páginas siguientes, puede ser vista como un instrumental
han llamado objeto poético aparece como un mito, todavía técnico, cuando analizamos el signo a nivel semántico
no se ha logrado precisar tal concepto, y no ha podido y sintáctico, pero al analizar el mismo signo, a nivel prag-
ser precisado porque ni siquiera el concepto de lo poético mático y expresivo, este instrumental nos permite bucear
está aclarado en forma rigurosa; el objeto poético no parece en lo que de impredecible, imaginario, variable e ilógico
tener características precisas e inamovibles, sino todo lo tiene el lenguaje poético. La semiótica, según Julia Kristeva,
contrario: parece poder:
En el cuadro de una tipología de-los textos, tal y como lo Dar cuenta de ese incesante vaivén entre lo lógico y lo no
concibe Lotmann, o incluso en el de uno de los objetos lógico, lo real y lo no-real, el ser y el no ser, la palabra y la
culturales en general, los objetos poéticos están sujetos a varia- no-palabra, que caracteriza este funcionamiento específico del
ciones en el tiempo y en el espacio debido a las apreciaciones lenguaje poético, (Greimas, 1976 b, p. 58).
connotativas que les prestan las colectividades culturales de
los consumidores-y, en menor medida, de los productores
de poesía. Lo que se considera o no como poético es variable: En la primera parte de este trabajo (recordemos la
la puesta en correlación de dos tipologías —la primera es- lectura del aparte 21 llamado: 'Comportamiento del len-
tructural, basada en los tipos y grados de motivación de los guaje poético'), al considerar el poema como un discurso,
objetos poéticos; la segunda, connotativa, apoyada en la ar- hemos tomado en cuenta las violaciones que se dan en
ticulación taxonómica de las clases de las variables que su-
ponen remitentes y/o destinatarios sociales— aportaría una
dicho discurso, pues éstas tienen mucho que ver con lo
contribución a la historia de las formas poéticas. (Greimas. que de ambiguo y autorreflexivo puede tener el mensaje
1976 b , p . 33). trasmitido por el poema. Estas violaciones se pueden dar
a nivel sintáctico y producir ambigüedad, por ejemplo:
Como vemos, existen obstáculos que impiden la ela- ". . . hace hecho todo lo que puede hacer miserable
boración seria y precisa de ese mítico objeto poético; y el genial. . . " ; pero también se dan a nivel semántico, ejem-

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HHL
pío: "Serpentínica y del biscochero engirafada al tímpano"; en forma diferente ya que es obvio que la estructura del
en la poesía algunas de estas violaciones pueden ser consi- francés, idioma con el que trabaja Zilberberg, es distinta
deradas excentricidades estilísticas. ' a la del español.
Un estudio claro y preciso sobre las desviaciones Igualmente creemos que es un aporte nuestro el es-
o violaciones que ocurren en el lenguaje literario, y más tudio que hacemos de los verbos, basándonos en lo que
aún en el lenguaje poético, no ha sido hecho todavía, y pa- podemos llamar filosofía del verbo. Para esto nos fue muy
rece casi irrealizable gracias a un elemento que pesa enor- útil el Diccionario gramatical de Martínez Amador.
memente: la ambigüedad del lenguaje literario y sobre todo Creemos que los demás pasos los hemos alcanzado gracias
del lenguaje poético. Esta es vestíbulo para la experiencia a nuestro empeño en tratar de lograr una semiología de la
estética, ya que el lector al sentir que se produce cierto poesía escrita en español; pero consideramos todavía que
desorden, se coloca en un estado de alerta y trata de sobre- nuestro trabajo no es suficiente, nos parece que hace falta
llevar este desorden buscando interpretarlo; y no está agregar de aígima manera un análisis semiótico a nivel
errado, pues es allí precisamente, en donde se introduce fonético, que pensamos puede ser muy importante para
el poeta, creador del discurso, para manipular el nivel la lectura del poema. Por los momentos éste es el instru-
semántico. mental que hasta ahora hemos creído alcanzar y que ofre-
Para analizar este último aspecto del poema, nos he- cemos como un aporte, para lograr un análisis serio de la
mos ayudado con el estudio práctico que hace Fran^ois poesía, que redunde en el estudio crítico de este género.
Rastier sobre las isotopías (ver Bibliografía), así que aisla-
mos el semenia para examinarlo a nivel paradigmádco de
2. INSTRUMENTAL SEMIOTICO PARA E L ANALISIS D E LA POESIA
acuerdo con sus esquemas de trabajo, pero esto no nos
bastó, de manera que apelamos ai sentido pragmático para
ampliar la lectura del seraema; creemos que esto ya es un El Corpus que hemos escogido para aplicar este ins-
aporte nuestro, al igual que el resto de las etapas de este trumental que proponemos es bastante interesante, está
primer paso en el análisis. conformado por tres poemas de Ramón Palomares que
pertenecen a poemario Paisano, y que llevan el mismo
Al hacer la lectura final de las isotopías no trabajamos título: "Muerte". E l resultado logrado nos pareció muy
como Rastier, que las lee en forma individual, sino que
ilustrativo de lo que queremos demostrar, ya que nos per-
lo hicimos en forma conjunta, sin importarnos el número
de isotopías" que nos diera el poema. mite constatar las bondades de nuestra metodología.
Trabajaremos en forma detallada con el primer
Para el estudio sintagmático, nos interesó la seg-
poema, para luego aligerar las explicaciones en el análisis
mentación del texto tal como lo hace Claude Zilber-
de los dos restantes; consideramos que el primer análisis
berg y así lograr el análisis sintáctico de la frase, de igual
manera utilizamos sus ideas sobre cómo ver al actante de es suficiente pues abunda en explicaciones. He aquí
la misma (ver Bibliografía). Pero a la hora del análisis el primer poema:
de los complementos circunstanciales, tuvimos que trabajar
' Eco nos recuerda que si la violación o desviación se convierte en
norma, pierde la fuerza que tiene en el discurso poético (los ejemplos
utilizados pertenecen a C. ValJejo).

98 99

HHL
MUERTE igual o superior a la de la oración", según Rastier, y la po-
Te estás durmiendo demos encontrar a niveles fonológico, sintáctico y semán-
te estás terminando tico. Nosotros trabajaremos con aquellas isotopías que se
echa la última rosa por la boca, dan a nivel semántico y sintáctico; así, en el poema, pode-
que viene tu cabeza por entre el agua, mos encontrar hilos temáticos que unen ciertas expresiones
que viene como entre espumas.
del léxico y que podrían ser considerados como los ejes
Escuchó la florecita que entraba por tu ventana de las posibles lecturas.
oí las palomas rozar tus orejas ¿Cómo trabajar estas isotopías semiológicas? Ante
aquí se está hundiendo tu casa.
Primero fuiste azahar y tela de matrimonio todo tenemos que tomar en cuenta que sememas distin-
y después agua tos —los cuales pueden estar o no en relación lineal— lo-
y después niebla espesa gran establecer una isotopía, ya que la relación creada
y después lechada como la que se pone en las tapias. entre estos sememas se da según el principio de la relación
Ya no ves el amanecer. paradigmática.
Es decir, que cada semema con el que trabajamos
Todo texto poético es polisémico, de allí las posibles tiene un sema común con otros sememas del texto, sin
y diferentes lecturas que puede engendrar. Para descubrir que exista entre ellos relación lógica. De allí que no traba-
esas probables líneas de lectura debemos trabajar con las jamos con la relación sintáctica lógica. (Según Rastier, y
isotopías semiológicas ^ que podemos encontrar en la tiene razón, uno de los obstáculos con el que tropezamos
lectura del poema, tomando en cuenta la relación evidente es la falta de descripción científica de los campos semé-
entre expresión y contenido.
micos).
Para esto nos hemos apoyado en el trabajo de
Franfois Rastier, aunque como ya hemos dicho, sólo hemos 3. ANALISIS DE LAS ISOTOPIAS SEMIOLOGICAS (NIVELES
podido utilizar ciertos pasos, ya que su instrumento de PARADIGMATICO Y PRAGMATICO)
análisis es apto para la poesía en lengua francesa, por lo
cual se hace difícil usarlo en el análisis de la poesía escrita Primer Paso
en nuestra lengua, así pues, si bien nos ha ayudado, hemos
Sabemos que en cada texto se funden varias isotopías,
tenido que aportar nuevos elementos de análisis que se
adaptan mejor al español. algunas de ellas fáciles de aprehender a primera vista, pero
otras se nos presentan enmascaradas; a veces son estas
La isotopía tiene definición sintagmática y es un con-
últimas las que ameritan un trabajo más cuidadoso con
junto no ordenado, esto quiere decir que debemos encon-
los sememas.
trar una especie de eje semántico interno relacionado
Leeremos como sememas aquellos sustantivos solos,
directamente con el léxico utilizado en el poema. Puede
o acompañados con el adjetivo, que encontraremos en el
darse "en una secuencia lingüística de dimensión inferior.
texto (se escogen los sustantivos porque son aquellos
1 ara estudiar el problema de las isotopías remi limos al capítulo titulado
sememas que nos permiten jugar más fácilmente con
i:,V^°^^v ' ' ' ' l ^ í f ™ " ? " ^" libro de Greimas. Semántica estructural la relación paradigmática, ya que los llamados metaseme-
{ver iilbiiografia Asi como también al trabajo ya citado de Rastier
en su Freambulo , parte B: 'La isotopía'. mas no conllevan contenidos semiológicos —^hablamos de

100 101

HHL
preposiciones, artículos, etc.). Para esto, haremos una lista
semiológicas que han sido engendradas por la lectura. Para
de os sustantivos del poema que vamos a analizar, empe-
encontrar los semas de cada semema, se trabaja en varias
zando por el título, y que llamaremos /sememas/, ^ así
etapas y tomando en cuenta una serie de diferentes fac-
como también aquellos sustantivos acompañados por el
adjetivo, que llamaremos paralexemas: tores que nos ayudan a encontrarlos; explicaremos a conti-
nuación estas etapas y factores, importantes para hacer la
/muerte/: lectura de los sememas:
/última rosa/:
/boca/: 3.1. Se puede hacer una lectura cuyo campo semé-
/cabeza/: mico tenemos identificado a priori, por ejem-
/agua/: plo, en el caso de proponernos una lectura
/espuma/: política; para esto hacemos un inventario de
/florecita/: sememas que pertenezcan al campo identifica-
/ventana/: do previamente (no es así en este poema de
/paloma/: Palomares que tomamos como ejemplo).
/orejas/: 3.2. A primera lectura puede resaltar un campo
/casa/: semémico que nos lleva a encontrar rápida-
/azahar/: mente una isotopía, en nuestro caso resaltan
/tela de matrimonio/: algunos sememas de la isotopía muerte, deci-
/niebla espesa/: mos algunos, porque otros que nos señalan el
/lechada/: mismo camino, deben buscarse con mayor de-
/amanecer/: tenimiento. (Ver el Cuadro N° 2, pág. 1 1 0 ) .
/tapia/: 3.3. Se trabaja también con las relaciones paradig-
máticas que nos llevan a hacer grupos asocia-
Luego se colocan a su derecha los posibles semas
tivos guiados solamente por la asociación de
encontrados, ^ o como los llama Rastier, las realizaciones
ideas o asociación por semejanza, ejemplo:
' / / encierran los sememas y le dan carácter como tal al sustantivo.
En lingüística, este signo encierra al significante de un significado. /rosa/: fragilidad
* Respecto -iL las isotopías metafóricas o isotopías verticales, Rastier dice
lo siguiente: •Esto lo hacemos tomando en cuenta aquella
Aparte de los análisis clásicos de Pottier y de Greimas, se sabe
aún muy poco sobre la estructura de los sememas; podemos ad- idea de Jakobson, que dice que la relación
mitir, no obstante, que los semas que sitúan un semema en un paradigmática se da asociando una unidad de
campo semémico cualquiera son periféricos en relación con otros
semas nucleares ( . . . ) Entendemos aquí como metáfora toda la lengua, que aparece en un enunciado, con
isotopía elemental o todo haz de isotopías elementales estable- otro no presente en el enunciado (es evidente
cido entre dos sememas o grupo de sememas pertenecientes
a dos campos distintos, la relación de isotopía —marca una que este procedimiento para identificar los
equivalencia: es una relación conjuntiva— tiene lugar en el semas es bastante empírico).
nivel de los semas nucleares centrales; en cambio, una relación
de oposición —relación disyuntiva— se establece a nivel de los 3.4. Debemos recordar que el emisor tiene patro-
semas nucleares periféricos. (1976, p. 118). nes de conversión de la experiencia humana
102
103

HHL

I
en significados. Ahora, si sabemos que cada relacionado con la casa y los recuer-
lenguaje poseerá sus propios patrones y en dos familiares de la niñez.
consecuencia sus características particulares 3.4.2. También nos puede ayudar el co-
(las formas lingüísticas usadas por el emisor nocimiento que tengamos de algu-
pueden ser consideradas como un lenguaje par- nos acontecimientos de la vida del
ticular) , tendremos que dedicarnos al estudio poeta. Muchas veces se aclararán
del nivel pragmático, es decir, a la relación así ciertas unidades lingüísticas
de estas formas lingüísticas con las identida- utilizadas por él; nos referimos al
des no lingüísticas donde estas formas se han mundo cultural, filosófico, etc.,
dado, para así tratar de conocer ese lenguaje que lo rodean. Podemos señalar a
con el cual el poeta —nuestro emisor— ha manera de ejemplo ilustrativo los
querido comunicar toda su experiencia huma- siguientes casos:
na (damos por cierto que quiere comunicarlo Al leer Residencia en la Tierra
a hipotéticos lectores desde el momento en de Neruda, nos ayuda en su com-
que crea esa palabra poética y la lleva al
prensión el conocimiento que tene-
papel).
mos de aquellos terribles años
Para trabajar a nivel pragmático, es preciso pasados en la India, años de sole-
tener presente ciertos elementos extralingüís- dad y aislamiento que signan su
ticos que están en relación con el poeta y el poesía de esa época. También en el
poema, a saber: caso de Vallejo el conocimiento
que tenemos de sus convicciones
3.4.1. Al analizar un poema, en nuestro políticas es esclarecedor del uso
caso "Muerte" de Palomares, pode- metafórico de muchos de sus poe-
mos acudir al conocimiento que mas, sobre todo de aquellos de
tengamos del resto de su produc- España aparta de mí este cáliz. Y
ción, esto nos será útil porque nos entre nosotros tenemos un buen
permitirá adentrarnos en el Código ejemplo de lo que venimos dicien-
usual del poeta, así como de sus do, es el caso de Ramos Sucre, si
patrones de conversión de los que conocemos la base filosófica que
hablábamos arriba. Así, sabemos sustenta su concepción de el sueño
que Palomares es sensible ante una (muy influenciada por creadores
naturaleza humanizada, ante los como Jean Paul, Hoffmann, Nerval,
ritos y ceremonias de los antiguos etc.) lograremos hacer una mejor
pobladores de Trujillo, y ante los lectura de muchos de sus poemas.
fantasmas. Además utiliza con mu- Nos sirve igualmente conocer el
cha frecuencia un mundo metafórico lugar donde nació, donde vive.

104 105
HHL
donde crea el poeta. En nuestro 3.4.4. Y por último debemos recordar
caso es interesante saber que Palo- que podemos apelar al mundo de
mares es de Escuque, población del la simbología, que en ocasiones
Estado Trujillo, este hecho eviden- también podría ser un auxilio in-
cia el uso que el poeta hace de la teresante para encontrar algunos
naturaleza en forma muy repetitiva, semas importantes.
y la importancia que ella tiene en
toda su poesía. Así al conocer la Todos estos elementos extralingüísticos nos ayudan
región podemos conocer también al hacer una lista de los semas, los cuales nos señalan
su historia, sus leyendas y mitos. las posibles características pertinentes que el poeta ha po-
En gran parte de la poesía r í e dido escoger dentro del número infinito de características
Palomares existe un nivel metafó- intrínsecas propias de cada entidad, y es entre ellos que
rico subterráneo conformado por nosotros tenemos que escoger para hacer una lectura
el mundo de leyendas timoto-cui- aproximativa (nos preguntamos si estamos haciendo la
cas, que son los primeros poblado- misma escogencia que el poeta, ya que es tan arbitraria la
res de la región. Este se hace a nuestra como la de él (ver p. 57, 'Comportamiento del len-
veces evidente pues aflora a través guaje poético').
del lenguaje directo, nos referimos Utilizando todos estos elementos hemos podido cons-
por ejemplo al término borococo, truir el cuadro que sigue, en el que aparecen los sememas
que utiliza en otro de los poemas enmarcados entre / / , y a la derecha los semas encontrados:
aquí analizados. Pero igualmente
puede aflorar a través de la concep-
ción que tiene de la vida, la muerte,
la naturaleza, etc. En este sentido,
por ejemplo, leemos el semema
/paloma/ que dentro de la mitolo-
gía timoto-cuica, quiere decir, anun-
ciadora de la muerte.
También tenemos que tomar en
cuenta que existe la posibilidad de
que el poeta, aprovechando la ar-
bitrariedad del signo (ver p. 57,
'Comportamiento del lenguaje poé-
tico') , invente palabras que pueden
ser más apropiadas para expresar
su pensamiento.

106 107
HHL
CUADRO 1
Segundo paso

Para encontrar las isotopías que pudieran darnos la


pista necesaria para las posibles lecturas, operamos de la
ImuerteI: final de la vida - final del camino. siguiente manera: leemos la posible relación paradigmá-
Iúltima rosal: la fragilidad - la delicadeza - final del tiempo,
tica que se da entre los sememas, de acuerdo con los semas
signo de finalidad - la perfección - la mujer amada.
Ibocal: el ser humano - apertura oscura - ejercicio de besar, que hemos logrado dilucidar, de esta manera hemos en-
comer, morder, hablar. contrado tres posibles isotopías:
¡cabezal: el ser humano - el liderazgo - el pensamiento - la la isotopía de la muerte, ^ que llamaremos L , la de la
vida espiritual - el cielo. mufer amada, que llamaremos L , y aquella que señala lo
¡agua¡: lo rumoroso - la transparencia - la frescura - lo ines- pasajero y frágil de la vida, que será L . Para lograr verlas
table, lo pasajero - principio y fin de todas las cosas
claramente detengámonos en el cuadro de la página siguien-
de la tierra - la r.o un tenedora de la vida - la engendradora.
¡espumas¡•. la fragilidad - la temporalidad - la totalidad por te, en donde organizaremos los semema<: comenzando por
lo blanco (color). el título del poema.
¡florecita¡: la fragilidad - la pequenez - lo femenino - lo
pasajero.
¡ventana¡•. apertura - la mirada - la conciencia - la casa.
¡palomas¡•. lo animal - la paz y el amor - el rumor como
anunciador de la muerte.
¡orejas¡•. el sonido - el ser humano.
¡casa¡: el hogar, la familia - lo femenino - identificación con
el cuerpo humano y el pensamiento.
¡•azahar¡ -. lo femenino - el matrimonio - la fragilidad - lo
perfumado.
¡tela de matrimonio¡: la mujer novia - la boda.
/niebla espesa¡: la oscuridad - el frío - el aislamiento - lo pasa-
jero - lo indeterminado.
¡lechada¡: la totalidad por el color blanco - la casa - el muro.
¡amanecer¡i la claridad - la juventud - la vida como opuesto
de la muerte.
¡tapial-.sentido de división - el ocultamiento de lo descono-
cido. '

5 Para Rastier esta relación que se da entre los sememas y los semas
concuerda con el funcionamiento metalingüístico del lenguaje; dice así:
Dar una definición es establecer una equivalencia semántica
entre dos sintagmas; el más largo se llama generalmente a Por supuesto ^^u-^ta i ^ t c ^ í a ^ e s la m ^
definición, y el otro, cuando se trata de un lexema, denomina-
ción. Esta equivalencia se establece mediante un haz isotópico
^"ed^'n Üte^S ^Tc^laf más tmpo^rtantes, hay que tener
que repite en el definidor todos los semas nucleares presentes cuidado con esta aparición tan tacU.
en el definido (la denominación). En la medida en que el
definido es más corto que el definidor podemos decir que es
su metasemia. (1976, p. 111). 109

HHL
CUADRO N ? 2 Como vemos, existe la posibilidad de leer un semema
en diferentes isotopías; se puede hacer así porque toman
I. I2 I3 prestado, según Rastier, los semas característicos de otra
muerte isotopía.
En nuestro poema hemos encontrado un número
rosa rosa rosa aceptable de sememas que pueden leerse dentro de ima
boca boca isotopía que podríamos llamar Naturaleza: serían estos,
cabeza cabeza /agua/, /espuma/, /florecita/, y /azahar/; pero después de
agua un estudio atento del cuadro anterior, vemos que estos
agua agua
sememas se pueden fundir en las isotopías que han resul-
espuma espL'ma tado mucho más importantes de acuerdo al número de
florecita florecita sememas. Este ejemplo es factible de encontrar con fre-
paloma cuencia, de manera que una lectura de un poema puede
darnos una posibilidad de 6, 7, y hasta más isotopías de
orejas este tipo, que siempre trataremos de fundir en aquellas
casa casa que según nuestro entender mandan en el texto. Otro
problema interesante que plantea el trabajo de las iso-
azahar azahar
topías es aquella posibilidad de leer un paralexema, como
tela de en el caso de nuestro tela de matrimonio, el cual es leíble
matrimonio
en la isotopía L .
niebla
amanecer
Tercer paso
tapia

10 semas 9 semas 6 semas Una vez que tengamos el cuadro anterior, procede-
mos a hacer la lectura de las tres isotopías para comenzar
a abrir el poema, o sea, a decodificario. Comenzamos por
la isotopía que tenga mayor número de semas, que será
aparentemente, la de mayor importancia. Así guiándonos
por los dos cuadros anteriores hacemos estas listas:

110 111

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CUADRO N ? 3 CUADRO N ? 4

ISOTOPIA 1 ISOTOPIA 2

/muerte/: final de la vida - final del camino. /rosa/: la mujer amada.


/última rosa/: final del tiempo - signo de finalidad. /boca/: el ser humano.
/boca/: apertura oscura. /cabeza/: el ser humano.
/cabeza/: vida espiritual (se le considera dentro de esta iso- /agua/: la mantenedora de la vida - la engendradora.
topía, por la relación estrecha, ya que la muerte puede
ser fin de la vida espiritual). /florecita/: lo femenino.
/agua/: principio y fin de todas las cosas de la tierra. /orejas/: el ser humano.
/casa/: lo femenino.
/espuma/: sentido de temporalidad, del paso del tiempo (tam-
bién muy en relación con el paso de la vida hacia la Iazahar/: el matrimonio unido a lo femenino.
muerte). /tela de matrimonio/: la mujer-novia.
/casa/: identificación de casa con el cuerpo humano y el pen-
samiento (forma parte de la isotopía muerte porque en
el poema la casa se está hundiendo, lo que nos permite
pensar en el fin del todo, cuerpo-pensamiento).
La lectura de esta isotopía no deja duda de que es,
/paloma/: el rumor de la paloma como anunciador de la
muerte .(creencias timoto-cuicas). o se trata de una mujer ( ¿ o de la personificación de lo
/amanecer/: comienzo de la vida (lo leemos como muerte femenino?), que fue joven novia; "tela de matrimonio",
porque, como ya hemos dicho en otra parte, los semas y que luego fue madre, la gran engendradora: " y des-
también funcionan por los opuestos, así tenemos el con- pués fuiste agua", y luego va envejeciendo, " y después
traste vida-muerte). niebla espesa/ y después lechada como la que se pone en
/tapia/: el ocultamiento de lo "desconocido (que podría ser las tapias". El semema /rosa/, indica mujer amada, segtín
la muerte).
la simbología de la rosa, pero todavía no podemos ase-
gurar a qué tipo de amor se refiere el poeta, cuando deco-
difiquemos más el poema podremos tener seguridad en
cuanto a esto. •

112 113

HHL
CUADRO N ? 5 CUADRO N ? 6

ISOTOPIA 3
Sememas Isotopías
1 1 2 1 3
/muerte/ X
/rosa/: la fragilidad - el final del tiempo (es evidente la /última rosa/ X X X
relación tiempo-fragilidad). /boca/ X X 1
/agua/: lo inestable - por su movimiento constante, lo pasa- X X
/cabeza/ 1
jero.
/agua/ X X X
/espuma/: lo frágil - lo pasajero.
/espuma/ X X
/florecita/: la fragilidad - lo pasajero.
/azahar/: la fragilidad - l o pasajero. /florecita/ X X
/niebla/: lo pasajero (ya que no es u n elemento estable, sino / ventana/
que se desvanece). /paloma/ X
/orejas/ X
/casa/ X X
/azahar/ X X

Podemos así hacer una lectura sobre lo pasajero del /tela de m a t r i m o n i o / X

tiempo (¿la vida, ya que tenemos a la muerte como la /niebla/ X

isotopía más importante?), lo frágil que es la vida, lo /lechada/


inestable que es el trascurrir en este mundo. /amanecer/ X
Todavía con estas tres isotopías no nos podemos i /tapia/ X
sentir seguros sobre la lectura que debemos hacer, por lo
demás no hemos terminado con la búsqueda de ellas
porque pueden existir sememas que no están insertos en
La " x " nos muestra cómo un semema puede leerse
las tres encontradas. Para terminar de estudiarlas hacemos
entonces el siguiente cuadro: en las tres isotopías, por ejemplo el semena /última rosa/,
mientras que otros como /paloma/ sólo se pueden leer
en una isotopía.
De acuerdo con este cuadro, encontramos que hay
dos sememas que no están insertos en ninguna de las isoto-
pías halladas, son estos sememas: /ventana/ y /lecha-
da/. En algunas ocasiones el número de semicmas inde-
pendientes es aceptable, de manera que pueden encerrar
una isotopía importante, y forma parte de esta realidad
subyacente del lenguaje. En nuestro caso tratamos de
buscar semas comunes a ambos sememas para verificar si
aún a pesar de ser sólo 2 sememas pueden ser importantes:

114 115

HHL
/ventanal: apertura - la mirada - la con- tual; el hablante continúa y le llama la atención
ciencia - la casa o el hogar. a ese alguien ante los diferentes signos que
IlechadaI: la totalidad por el color blan- anuncian la muerte, así el rumor de la paloma,
co - el sentido de separación que como vimos es animal anunciador de la
que encierra un muro - la casa muerte; le hace notar que es también el fin de
o el hogar. todo, quizás también de su vida en la tierra,
aquí se está hundiendo tu casa. Ya no ves el
Leídos estos semas es evidente que el sema común amanecer, es la vida que se escapa.
será: la casa o el hogar; lo consideramos como una isotopía
a pesar de que creemos que es muy débil, pero de todas
Lectura de L :
formas, si buscamos el sentido simbólico de casa, vemos
que tenemos tres posibilidades que pudieran servirnos: Hasta ahora no podemos decir de qué mujer
amada se trata, no parece ser la amada en el
—lugar de cobijo
más puro sentido amoroso de la pareja, es sólo
— e l cuerpo y el pensamiento
una mujer amada, no sabemos por quién, si por
— e l elemento femenino del universo el hablante o por otras personas. E n la primera
estrofa, esta figura no aparece en forma explí-
Pareciera entonces que la tercera posibilidad puede
cita pero se nos da a través de varios sememas:
sernos útil, ya que confirma la isotopía 2. Así que la
Primero que todo a través de /boca/ y /cabeza/
leemos como auxiliar de esta última.
que nos señalan a un ser humano, y /rosa/ que
determina, dentro del mundo de la simbología,
Cuarto paso
a la mujer amada. E n la segunda estrofa, además
de que /orejas/, confirma la idea de ser huma-
E s interesante hacer notar que una vez obtenidas las
no, se da la descripción del personaje ya en forma
isotopías se hace una primera lectura relacionando cada
explícita:
isotopía con el texto, es una lectura que se basa en una
hipótesis sólida: la coherencia interna de los textos del primero fuiste azahar y tela de matrimonio
poeta.
E l primer papel asumido por esta mujer amada
ha sido el de novia;
Lectura de I i :
y después {fuiste) agua
E l hablante conversa con alguien que está Si recordamos que el agua es mantenedora de la
muriendo, que está terminando, lo exhorta vida y que es la engendradora, podemos decir
{echa) a decir una última palabra: echa la que, luego de novia, fue madre. Pareciera enton-
última rosa por la boca; /rosa/ según vimos ces que se podría completar la lectura con la
en el análisis del primer paso, es signo de fina- llegada de la vejez, porque de alguna manera
lidad; parece anunciar el fin de la vida espiri- "lechada" y "niebla" nos remiten al blanco,

116 117
HHL
4. ANALISIS A N I V E L SINTAGMATICO
pero también a la totalidad, lo que nos pone
a pensar en la posibilidad de un ser femenino
capaz de representar la totalidad. Primer paso

Lectura de h: Habíamos dicho (p. 57, 'Comportamiento del lengua-


je poético'), que "la palabra no viene semánticamente sola
/rosa/, /agua/, y /espuma/ denotan una evi-
sino en 'nidos' ", de allí que es necesario trabajar con la
dente fugacidad y fragilidad o inestabilidad, por
relación sintagmática del texto. Una vez que hemos traba-
eso la última rosa por la boca evidencia que la
jado con la relación paradigmática y hemos apelado al
vida es pasajera, y la cabeza que viene por entre
nivel pragmático del signo, nos enfrentamos, para confir-
el agua y como entre espumas, confirman la
mar y completar nuestra lectura, al análisis del texto
figura. E n la segunda estrofa sucede lo mismo
teniendo en cuenta algunos elementos del trabajo de
con /florecíta/ y /azahar/, que señalan en
Zilberberg —que ya hemos citado— quien trabaja con
forma evidente la fragilidad, al igual que /nie-
la "proyección de una organización paradigmática en el
bla/ que es un elemento poco permanente.
desarrollo sintagmático del discurso poético".
L a isotopía más importante es sin duda la de la Se supone que a cada unidad lingüística le debe
muerte, recordemos que para darle mayor énfasis viene corresponder, si así podemos decirlo, una unidad semán-
signada por el título del poema, y es evidente también tica. Para esto lo primero que hacemos es segmentar el
que la muerte está relacionada con la fugacidad de la vida. texto en secuencias de acuerdo a las posibles relaciones
E s interesante recordar que al apelar al nivel prag- sintagmáticas que se dan en las unidades lingüísticas. Para
mático del signo, nos a3mda mucho en la lectura de una encontrar estas secuencias podemos trabajar de varias
isotopía, el conocimiento que tengamos del resto de la maneras:
obra del poeta. E n nuestro poeta es muy frecuente en-
contrar el tema de la muerte, de manera que podemos a) E s posible que los segmentos equivalgan a las
leer esa isotopía dentro de una cierta concepción filosófica. estrofas, para esto basta entonces encontrar el
Así, pues, tenemos tres posibles lecturas que podemos punto final de la estrofa.
hacer aisladamente o uniéndolas, pero si recordamos lo que b) A veces las estrofas están unidas entre sí por
de empírico tiene el análisis, necesitamos dar otros pasos palabras como pero, que introduce una disjmn-
jara poder afincamos con más seguridad en la posible ción, de manera que varias estrofas puedan con-
ectura a hacer. formar un segmento. También debemos tomar
en cuenta toda palabra que signifique relación,
lo que crea una posible unión entre las estrofas.
c) También se puede dar la unión entre varias es-
trofas, si al inicio de cada una de ellas se
encuentra una exclamación que propone cierta
simetría entre ellas.

118 119
HHL
E n nuestro poema encontramos dos secuencias: Segundo paso

1- secuencia: Una vez que tenemos delimitadas las secuencias, de-


Te estás durmiendo
bemos hacer un análisis sintáctico de cada una de ellas,
te estás terminando también recordando, como dice Greimas, la relación que
echa la última rosa por la boca, existe entre el nivel sintáctico y el nivel semántico. Así
que viene tu cabeza por entre el agua, lograremos el siguiente cuadro que se desprende de la
que viene como entre espumas.
primera secuencia:
Escucha la florecita que entraba por tu ventana
oí las palomas rozar tus orejas CUADRO N ? 7
aquí se está hundiendo tu casa.

2? secuencia: Sujeto Verbo C. Directo C. Circunstancial

Primero fuiste azahar y tela de matrimonio


y después agua
(tú) estás durmiendo
y después niebla espesa
y después lechada como la que se pone en las tapias. (tú) estás terminando
Ya no ves el amanecer. por la boca
echa la última rosa
(tú)
L a primera secuencia está configurada por varios ele- por entre d agua
mentos relacionantes: t u cabeza viene

como entre
—^El uso del verbo en presente: escucha, ( t u cabeza) viene
espumas
echa, oí.
— L a relación que se establece entre el verbo
en presente y el adverbio aquí, que significa
el hoy.
— E l uso de palabras que nos remiten al ser Este análisis nos da varios resultados: primero, es
humano: boca, cabeza, orejas. interesante notar el verbo echa, porque significa que esta-
mos ante una oración imperativa, ya que usa el verbo en
L a segunda secuencia está bien demarcada con el imperativo, pero el resto de ella, la última rosa por la
inicio de una narración que arranca del pasado: Primero boca, le quita el sentido de mandato imperioso y la con-
fuiste azahar, que luego continúa con: y después, y vierte en oración exhortativa de mandato atenuado. Esto
después, para culminar la secuencia narrativa con ya, el hoy. nos muestra las libertades que se toma un poeta en rela-
ción con la sintaxis.
Una vez fraccionadas las oraciones, fijamos nuestra
atención en los complementos circunstanciales, pues gene-

120 121
HHL
raímente denotan tiempo y lugar, dos elementos que nos Un segundo paso consiste en buscar los actantes
parecen centrales para nuestro análisis. (recordar que seguimos trabajando con el léxico), en
Así tenemos: nuestro caso, fijándonos en el cuadro N° 7, encontramos
por la boca dos:
por entre el agua tú
como entre espumas tu cabeza

Comenzamos entonces a trabajar el léxico: un primer vemos entonces si son figurativos o no (entendemos por
paso consiste en encontrar los adverbios de tiempo y de no figurativos aquellos actantes como la esperanza). E n
lugar; los adverbios de tiempo nos dan el universo narra- este poema nuestros dos actantes son figurativos, lo que
tivo, los adverbios de lugar nos anuncian el espacio en nos remite otra vez al mundo exterior del hombre. Actan-
donde se desarrollan los acontecimientos del poema. Si no tes como el amor, la esperanza, etc., remiten sin lugar a
tenemos adverbio de lugar, como nos sucede en este ejem- dudas hacia el mundo interno del hombre.
plo, fijamos nuestra atención en el uso que se haga de E n algunas ocasiones el sujeto-actante se presenta
palabras que de una u otra manera señalen lugar. E n esta acompañado y se califica a sí mismo, tomemos un ejemplo
primera secuencia no encontramos adverbios ni de tiempo del mismo Palomares:
ni de lugar, pero sí ciertas palabras que señalan lugar, como
lo son: la boca, el agua y espuma. Por nuestro amor oculto en el sagrario

Aquí volvemos a tropezamos con las isotopías, pero


Aquí el actante es amor, actante no figurativo y cali-
ahora las llamaremos isotopías cosmológica y noológica.
A grandes rasgos diremos que lo cosmológico viene dado ficado, es "nuestro".
por un inventario de sememas que conllevan el sentido Estos datos que encontraremos sobre el actante, nos
del mundo exterior, es decir, que señalan hacia el mundo ayudan en la lectura del poema, en nuestro caso, í« y tu
que rodea al hombre; y lo noológico viene dado por cabeza están realizando una acción. Son así actantes figu-
aquellas palabras que señalan hacia el mundo interno y rativos que realizan acciones. Vuelve entonces el poema
conceptual del hombre, ^ a dirigirnos o señalarnos hacia el mundo exterior del
E n nuestro ejemplo, por la boca, por entre el agua, hombre. Terminada la primera secuencia damos los mismos
y como entre espumas, señalan en forma muy clara hacia pasos con la segunda:
una isotopía cosmológica, nos indica entonces que en este
segmento el poema está evidenciando el mundo exterior
al hombre, lo que sitúa al hablante como espectador de
lo que sucede, y la lectura se dirige hacia el mundo que
rodea al hombre.

^ Volvemos a remitir al trabajo de Greimas, Semántica estructural, ya


citado en la nota N ' 2.

122 123
HHL
Ante todo veremos que los adverbios de tiempo
señalan una secuencia narrativa: primero, después, ya. Se
toma al tú desde el pasado de novia, hasta el momento
J actual de la muerte: ya.
a E n cuanto a las isotopías, si nos fijamos en el com-

I plemento circunstancial "como la que se pone en las


tapias", nos damos cuenta que nos envía evidentemente
hacia la isotopía cosmológica, es decir, hacia el mundo
V exterior al hombre.
g.
Cuando operamos a nivel lexical, encontramos que
I iI en esta segunda secuencia sólo existe un actante: tú.
s 8 "
o tú (fuiste) = existir
o tú ves = acción
1
(30 1
OH
Se nos hace evidente que el hablante está frente
5 a este tú —que ya habíamos deducido que era una
mujer— y que está descrita desde afuera, es decir que
s
Q '3 -53 en ningún momento se entra en el mundo interior ni del
hablante, ni de ella, el hablante es un contemplador, lo
que nos confirma el tipo de mujer amada, pues al no parti-
cipar la subjetividad del hablante, suponemos que se trata
de un amor desde afuera, mas bien contemplativo.

I •i?

J J J I
* ü ü
5. ANALISIS D E L N I V E L E X P R E S I V O

Este paso es complementario y nos ayuda sobre todo


con aquellos poemas muy herméticos, en nuestro ejemplo
el análisis se hace mucho más evidente (no hemos querido
s s ^ ? utilizar un poema de difícil lectura para que cada etapa
se pueda seguir con facilidad).
Para trabajar con la relación que se da entre el nivel
expresivo y el nivel semántico se debe operar de la siguien-
te manera:
a) Notar los paralelismos a nivel expresivo, que
a su vez significan paralelismos semánticos.

124 125
HHL
b) Notar la repetición de los mismos sonidos verso que nos vuelve a llevar a la muerte. Así toda la
(aliteración). primera estrofa no nos permite duda: nos encontramos
c) Tener en cuenta el uso de los verbos y los cam- ante la muerte de aquella mujer amada.
bios verbales.
d) Tener en cuenta el uso del español al que apela b) E s interesante notar la repetición del adverbio
el poeta, esto nos indica época, región, uso de después, así como de la conjunción y:
palabras antiguas, tics, la lengua de la niñez, etc.
y después
e) Analizar el grafema intencional: palabras con
y después
mayúsculas, la iniciación de la oración en ma-
y después
yúsculas o minúsculas, la falta de puntuación,
los blancos, los silencios, las interjecciones, etc. E l uso reiterativo semantiza una conjunción, así
adquiere sentido narrativo, lo que confirma la idea de
E n este poema nos interesan solamente los puntos
que a partir del verbo en copretérito comienza la narración
a, b, c, y d; ya que no encontramos ningún elemento que
de la vida de esta mujer amada. Además el uso de la y, se-
podamos considerar como grafema intencional. Veamos
mantizada, también nos recuerda las crónicas antiguas,
entonces el desarrollo del análisis en relación a cada uno
de estos puntos mencionados: lo que podría significar que nos encontramos ante la rela-
ción de una leyenda (confirmada por el subtítulo de esta
parte del poemario: " L a gran leyenda").
a) Vemos cómo los paralelismos expresivos señalan
paralelismos en el significado: c) E l verbo se ha iniciado en presente del impera-
tivo: estás, echa, escucha pero repentinamente
te estás durmiendo
el verbo cambia, del presente pasa al copreté-
te estás terminando
rito entraba, lo hace en forma violenta y vio-
que viene. . . entre. . . lando la sintaxis:
que viene. . . entre. . .
escucha la florecita que entraba por tu
[ventana
Estos dos paralelismos marcan igual situación semán-
tica. Como ya otros pasos del análisis han señalado la
muerte, aquí podemos confirmar aquello que dice Greimas: E l hablante exhorta al tú (la mujer amada) a que
que a formas expresivas paralelas, corresponden planos de escuche el pasado, es decir a que recuerde su pasado, y los
contenido paralelos; en nuestro poema, el verso que no verbos comienzan con este relato del pasado:
tiene una forma paralela está exactamente haciendo de Primero fuiste azahar. . . etc.
pivote:
Recordemos que el presente del indicativo señala un
echa la última rosa por la boca punto en el espacio entre el pasado y el futuro, por esto
puede ser usado como presente absoluto y sirve para
expresar las verdades eternas: el mundo gira. Esto nos

126 127
HHL
Estoy en la mata del sueño
permite pensar en la muerte como una de esas verdades en la sala de la casa
eternas, mi cabeza ha crecido
se convirtió en nubes de aguacero.
d) Vemos cómo Palomares nos señala directamente Yo soy el que toca la noche,
a su tierra natal al usar verbos acentuados de ya te dije que me vuelvo árbol entre relámpagos:
—Vengo de lejos,
acuerdo a la modalidad de uso de los Andes:
de más allá de las casas
echa, escucha, oí. de más lejos que lo que se pierde en los montes.
Agarré mi vara y volví los ojos:
Gracias a este análisis del nivel expresivo sacamos No andaría más por los zanjones
ciertas conclusiones que confirman la lectura efectuada no olería más la carne de asar,
hasta ahora. Vemos cómo sin duda el tema central, o la ni la lluvia.
isotopía más importante, es el de la muerte, pero es una
muerte que parece estar en relación directa con la leyenda, A l analizar este poema hemos abreviado algunos
posiblemente leyenda timoto-cuica, de una mujer, que es pasos ya que consideramos que repetir el análisis al detalle
amada o adorada, lo que puede significar que quizás nos no es tan necesario. Nuestro primer cuadro muestra los
encontramos con la leyenda de una diosa o semidiosa; y resultados obtenidos después de abrir semánticamente los
como se utilizan ciertas estructuras propias de la crónica, sememas. Como podemos ver, el resultado nos arroja la
parece que nos encontramos ante una leyenda de la región posibilidad de hacer la lectura en base a cuatro isotopías
andina. importantes. Estas isotopías son:
Este sería el segundo poema a analizar:
L, isotopía de la muerte;
L, leyenda o mito;
I3, el hombre, el ser humano;
MUERTE L, que nos señala hacia lo ritual o
ceremonial.
Me metí por el canto del borococo,
me^ metí por su oscuridad, me fui donde sus plumas silban,
allí están echados sus perros
allí está su casa entre humo.

Me entré en la negrura,
y me fui
como un muerto me fui donde está la noche
abriendo las ventanas llenas de polvo
oliendo el moho
encontrando vestidos y flores.

Estas son tus piedras donde haces lunas


aquí te dan leche de tigra
donde los huesos brillan.

128 129
HHL
CUADRO N ? 9

A l trabajar este segundo poema a nivel pragmático


ImuerteI: ceremonia - final de la vida - leyenda.
¡canto del borococo!: la lechuza anunciadora de la muerte, tuvimos muy en cuenta la lectura del poema anterior, ya
leyenda o mito - lo ritual - lo animal - presagio - el miedo. que como dijimos, los tres poemas están bajo el subtítulo
Ioscuridad!: muerte - noche - miedo. de " L a gran leyenda", y pertenecen al poemario Paisano;
!plumas!: pájaros, mitos aéreos, pájaro demiurgo, leyenda - de manera que debemos tomar en cuenta la sintaxis in-
ceremonia - lo animal.
terna del poemario.
!perros!: acompañante de la muerte según el cristianismo -
guardián - lo animal. E n el primer poema encontramos la muerte como la
¡casa/: cobijo, protección, refugio - elemento femenino del isotopía más importante relacionada directamente con una
universo - identificación con el cuerpo y el pensamiento. leyenda; esto se confirma en este otro poema; ahora la
¡humo¡: señal, rito o ceremonia - eje entre el cielo y la leyenda se hace más evidente por el uso del término,
tierra - fragilidad.
borococo, palabra, aparentemente heredada de los timoto-
¡negrura¡: muerte - noche - miedo.
¡muerto!: muerte - lo inmóvil, el fin - leyenda. cuicas, que quiere decir lechuza; y que cuando canta,
¡noche¡: muerte - descanso - cobijo - lo femenino (fertili- anuncia la muerte. E s una creencia que todavía se con-
dad) - ceremonia. serva en el Estado Trujillo. E l hablante entra por el canto
¡ventanas¡: casa - la mirada - la conciencia. hacia la casa del borococo, casa que es la muerte, pero
¡polvo¡: muerte, vejez - intocado - principio.
que no es un castigo, ni experimenta temor alguno, la
¡moho! '• muerte, vejez - intocado.
¡vestidos¡: cuerpo, el ser humano - cobertura, protección. muerte es más bien cobijo, protección, recordemos que el
!flores¡: ceremonia, rito - muerte - lo femenino - campo - la canto del borococo es anunciador de la muerte y como la
fragilidad, lo pasajero. casa es del borococo, no nos queda duda de que estamos
¡piedras¡: símbolo del ser - muerte, túmulo - fundaciones - lo entrando en la casa de la muerte, y si nos damos cuenta
perdurable. que simbólicamente la casa es puente entre el cuerpo y el
¡lunas¡: lo oculto, noche y misterio - muerte, país de la
pensamiento, podemos considerar el acto de morir [me fui
muerte - ceremonia y rito - el tiempo por lo cíclico - lo
femenino - leyenda. por el canto del borococo) como un paso del cuerpo hacia
¡leche de tigra¡: protección, amamantar - rito - iniciación - lo la muerte, que es pensamiento. Además el sema /perros/
femenino, fecundidad. nos sigue confirmando la idea de muerte, ya que en la
¡huesos¡: muerte - germen, vida - rito. simbología es el guardián de la muerte, por supuesto el
¡mata de sueño¡: leyenda - inconsciente.
sema /oscuridad/ es muy evidente semánticamente.
¡sala de la casa¡: lugar de reunión, centro de la protección
y cobijo.
¡cabeza¡: ser humano - liderazgo - pensamiento - la vida
espiritual - leyenda.
¡nube de aguacero): presagio de tormenta - oscuridad, miedo.
¡árbol¡: vida - cuerpo humano - vida del cosmos, rito - le-
yenda.
¡relámpagos¡: presagio de tormenta - luz - miedo - leyenda.
¡montes¡: leyenda - lo desconocido - naturaleza.
¡vara¡: mandato, poder - apoyo - vejez - castigo - rito - lo
masculino.
/o]os¡: ser humano, mirada - penetración, conciencia.
¡zan]ones¡: campo - refugio.
¡carne de asar¡: lo animal - muerte. 131
¡lluvia¡: tormenta, muerte - purificación, leyenda, naturaleza
HHL
CUADRO N° 10

Este hablante entra en la casa de la muerte no sólo


0

i
a través del canto del borococo, sino también de la

tu
•S
R
oscuridad, la negrura, y la noche. Además es muy explí-
i 1 "i
cito al decir que lo hace como un muerto. Luego más
adelante aclara que está en la sala de la casa, centro de
reunión de la casa-muerte. E n este lugar es donde se bebe
muerte: X X X la leche de tigra, paralexema que vuelve a confirmarnos
canto del borococo: X X X X X X la idea de que la muerte es cobijo, protección, en este caso
oscuridad: | X X 1 1 maternal. Son muchos los semas que nos confirman lo
plumas: X X X { que ya sabemos, que se trata de una leyenda, entre estos
perros: | X { semas tenemos: /canto del borococo/; /plumas/, recor-
casa: | X Z
demos que simbolizan mitos aéreos; /humos/, que tiene
un poder benéfico; /lunas/, semema muy usado en mitos
humo:
X 1 1 X 1
negrura: X
y leyendas, la luna es el país de los muertos, es lo feme-
muerto: X X
nino del universo; /mata de sueño/ y /nube de agua-
cero/, dos paralexemas que evidencian la leyenda por
«oche: X
X 1 X 1 X X
aquello de que al hablante la cabeza se le convierte en
ventana:
1 X X
nube de aguacero y además, se vuelve árbol entre relám-
polvo:
X 1 pagos; estas conversiones nos remiten en forma bastante
moho: X 1
vestidos: directa a las leyendas indígenas. Hasta podemos recordar
1 X ¡ X
flores:
a Asturias en su Mulata de tal.
X 1 X 1 X 1 X
piedras: 1 X 1 Decimos que el hablante es un ser humano, porque
X X 1 X
lunas: X 1 X 1 X X 1
evidentemente todos aquellos sememas que se refieren a
la casa, nos señalan a su morador, el hombre; además tiene
leche de tigra:
X 1 1 X 1 X {
huesos: j X 1 X i
cabeza y ojos, por lo demás /noche/ y /sueño/ nos remi-
ten a una característica del ser humano, el soñar. Hasta
mata de sueños: .| 1 X 1 X
podemos tomar en cuenta el semema /piedras/, que puede
sala de la casa: |
. 1 X 1 X 1
cabeza: | 1 X
ser tomado como símbolo del ser. Y por último, entre
nube de aguacero: | X 1 X 1 X 1
las múltiples posibilidades simbólicas del árbol está la del
cuerpo humano y de la vida. Hemos así leído las primeras
árbol: 1 X 1 X 1 X 1 X
relámpagos: | X 1 X 1 X {
tres isotopías.
1
montes: |
1 X 1 X 1 L se refiere al mundo de ceremonias y ritos, así
tenemos el canto del borococo; las plumas, que son adorno
vara: | X 1
X 1 X

1 X
frecuente en las ceremonias religiosas indígenas; el humo,
ojos: I
que nos remite como señal al fuego, elemento ritual; la
zanjones: |
1 X 1 X 1
1 noche, las flores, la luna y los huesos, que son germen de
carne de asar: |
X 1 X

lluvia: 1 X 1 X 1
133
Totales |
n 117 1 16 1 3 1 9 I 5 1 7 1 12
1 1
HHL

I 4 1 I, I2 I3
CUADRO N ? 11

PRIMERA SECUENCIA
vida, también todos elementos rituales; y por último, vara
que como bastón de mando se puede encerrar en esta Sujeto * Verbo C. Circunstancial
isotopía, y lluvia que ritualmente es purificación de la vida.
E l resultado es claro, se trata de una leyenda en donde (yo) metí (dónde) el canto del borococo
se hace evidente el rito o ceremonia que parece ser efec- (yo) metí (por dónde) su oscuridad
tuada por el hombre, rito que es algo misterioso y que fui donde sus plumas brillan **
(yo)
comienza como un presagio de la muerte, para llegar defi-
sus perros están echados aUí
nitivamente a la morada en donde ella ofrece cobijo y pro-
está aUí
tección. Pasamos entonces al análisis sintagmático; he aquí su casa
las secuencias y su análisis: (yo) entré en la negrura

(yo) fui como u n muerto

(yo) fui donde está la noche,


abriendo las ventanas
llenas de polvo

tus piedras son estas donde haces lunas

(eUos) te dan leche de tigra donde los huesos brillan

SEGUNDA SECUENCIA

(yo) estoy en la mata de sueño

(yo) (estoy) en la sala de la casa

mi cabeza ha crecido

mi cabeza se convirtió nube de agua-


cero

yo soy el que toca la


noche

(yo) te dije me vuelvo árbol entre relámpagos

yo vengo de lejos, de más allá de los. . .

TERCERA SECUENCIA

(yo) agarré mi vara y . . .

(yo) no andaría más por los zanjones

(yo) no olería la carne de asar

134
* Se señalan entre paréntesis los sujetos tácitos. HHL

** Aunque gramaticalmente inexactos se incorporan algunos ejemplos nece-


sarios para el análisis semiológico.
De acuerdo al análisis sintagmático, encontramos la relatar los caminos seguidos para llegar a ella, caminos
evidencia de que las isotopías más importantes tienen que son rituales y ceremoniosos. Además el grafema inten-
carácter cosmológico, es decir que de acuerdo con los adver- cional nos muestra que está dialogando con la muerte,
bios de lugar y con los complementos circunstanciales, los explicando que viene de lejos.
acontecimientos se refieren al mundo que rodea al hombre, E n la última secuencia explica de dónde vino, del
esto nos confirma que no se trata de un poema en donde mundo cotidiano del campo, dejó atrás los zanjones, la
se propone una concepción subjetiva de la muerte, sino carne de asar, la lluvia. Además es un caminante que utiliza
que se refiere a la muerte vista desde afuera, es decir que la vara, símbolo también de ceremonia y mando.
corroboramos la idea de que se trata de una leyenda. Por Según el nivel expresivo obtenemos los siguientes
otra parte el análisis de las secuencias nos dice que en la
resultados:
primera encontramos dos actantes (yo), el hablante,
me metí p o r . . .
y ( t ú ) , el que recibe el mensaje. E l yo realiza accio-
me metí por. . .
nes, lo que nos remite de nuevo al hombre, quien rea-
me e n t r é . . .
liza las acciones de meterse e ir; en cambio el actante tú
es pasivo, de él son los perros, la casa, es quien recibe paralelismos que representan acción y que semánticamente
la leche de tigra, ese tú parece ser el borococo, por lo
señalan el hoy.
tatito, es la muerte. Además los verbos del yo están en
pretérito, lo que significa que es un hecho que ya ocurrió. allí e s t á n . . .
Nos atrevemos a decir que la ceremonia de la muerte ya allí están. . .
tuvo lugar; pero los verbos del tú están en presente y eso
paralelismo expresivo, denota pasividad: el lugar a dónde
nos recuerda que el presente se usa para decir las verdades
eternas, ¿y no es la muerte una de ellas? Así confirmamos se llega.
que el borococo y su casa entre el humo, vigilada por los de más allá
perros guardianes, en donde el hombre encuentra ventanas de más lejos
cerradas llenas de polvo y moho, donde están aquellas
piedras donde se hiacen lunas, no es otra cosa que la muerte. paralelismo que nos señalan de dónde viene el actante.
no andaría. . .
E n la segunda secuencia, ese yo es el único actante,
no o l e r í a . . .
aquí aclara cuál fue el camino que tomó para llegar a la
casa del borococo, fue necesario que su cabeza creciera paralelismo que confirma que la acción ya se realizó. E s
hasta convertirse en nube de aguacero, y transformarse decir se llegó a la casa de la muerte.
luego en árbol entre relámpagos, es decir que a través E l examen de los paralelismos expresivos nos con-
de la imagen que presagia la muerte logra llegar a ella. firmó todo aquello que ya habíamos comprendido a través
Pero el poema nos sitúa directamente en el presente, yo del análisis de los complementos circunstanciales, es decir,
estoy en la mata del sueño/ en la sala de la casaf. Estamos que el actante está hablando desde el hoy, todo ha ocurri-
otra vez ante el presente de las verdades eternas. E l hablan- do, está contando los acontecimientos que experimentó, y
te ya está en la casa de la muerte y desde allí habla para las ceremonias antes de llegar a este hoy, que es la muerte.

136 137
HHL
Las isotopías en orden de importancia, de acuerdo
Continuamos con el análisis del aspecto expresivo, y
con los dos cuadros que siguen son: muerte, refugio, ser
vemos cómo se comportan los verbos: en la primera secuen-
cia, los encontramos en pretérito, es pues un eslabón cerra- humano y leyenda.
do, una acción ya terminada, en contraposición con los CUADRO 12
verbo de la muerte, que están en presente para confirmar
la verdad eterna que es la muerte.
E n la segunda secuencia otra vez el verbo regresa al
presente porque se está en la casa de la muerte, y sólo ¡muerte!: fin de la vida - casa.
se usa el pretérito en la conversación, así el actante le ¡casa¡: cobijo, protección, refugio - lo femenino del universo -
muerte - identificación cuerpo pensamiento.
cuenta a la muerte lo sucedido anteriormente.
¡bastón¡•. mando - ceremonia - apoyo - castigo, arma.
E n la tercera secuencia, el actante utiliza el pretérito ¡frente¡: ser humano, pensamiento - vida.
y el pospretérito que evidencian la acción terminada, es ¡vidrio¡: agua - reflejo - fragilidad - frío, muerte.
decir que confirma nuevamente cuál fue el camino seguido ¡piernas¡: ser humano - apoyo - firmeza.
para llegar al hoy. ¡torcaces negras¡: leyenda, mito - miedo - presagio - anuncia-
Este hombre que habla de tú a tú con la muerte, dora de la muerte.
ha dejado definitivamente la vida, no volverá a caminar ¡música¡: alegría, tristeza - leyenda - tranquilidad.
por los caminos, ni a oler la carne de asar, no volverá ¡zaguán¡: casa, muerte - entrada a la casa.
a caminar por ese campo que parece ser el de los Andes ¡ángelj: leyenda o mito, muerte - cielo - lo espiritual - pro-
y si nos fijamos en el uso del verbo andar bajo la forma de tección.
andaría, que nos remite al hablar provinciano, se nos ¡cortinas¡^ casa, muerte - ventana - cubierta.
confirma ese mundo andino tan importante en la poesía /noche¡: leyenda o mito - ceremonia - muerte.
de Palomares.
E l tercer, y último, poema de esta trilogía denominada
Muerte, es mucho más breve:

MUERTE

Vas a poner tus pies en mi casa


vas a dejar tu bastón
vas a decir: ¡Hipa! ¿No hay gente?
Me toqué la frente y me encontré como vidrio
y miré mis piernas y vi dos torcaces negras en vez de piernas
y me fui nadando y me encontré en una música.
Yo vi antes este zaguán
que le cantaban al ángel
y escuché silbar por entre las cortinas
y me senté y puse cuidado:
escuchaba conversar, escuchaba la noche.
139
138
HHL
la noche, etc.; y por supuesto, el hombre, que piensa, tiene
CUADRO N ? 13 rente, y pierkas Igualmente el elemento femenino vuelve
a aparecer como para corroborar el carácter femenino de
la muerte. , , i
Pasemos ahora al análisis de las secuencias:
o

1. 1 1
•S •S
s
Ib o

1 la
I
O ^
.3

muerte: X
o lo

S
1 8

casa; X X X
I c
3
bastón: X X
C
frente: X 8.
vidrio: X X X

torcaces negras: X X

música: X

zaguán: X X X X

ángel: X X X

cortinas: X X X X

noche: X X X

Totales 7 6 5 3 4 2

Todas estas isotopías ya las hemos encontrado


en los otros poemas, así que se repiten. E l presagio de la
muerte se presenta otra vez: Me toqué la frente y me en-
contré como vidrio, también se da a través de la conversión
de las piernas en torcaces negras; otra vez nos presenta
el semema /paloma/, que como ya dijimos, entre los
timoto-cuicas era la anunciadora de la muerte, pero en
este caso el significado de muerte se hace más evidente,
pues son torcaces negras. Pero la muerte no es angustiante,
pues a través del zaguán de la casa, y ya sabemos lo que
es la casa, se oye música, se oye silbar, se le canta al ángel,
todo parece conformar una muerte acogedora. Otra vez
aparece la leyenda con aquellas torcaces negras, el ángel.

140
HHL
Este mundo se expresa a través de innumerables
E l análisis sintagmático revela que nuevamente las
imágenes arrancadas a la naturaleza, elemento fundamental
isotopías tienen carácter cosmológico, es decir el poema
no tiene carácter subjetivo. para Palomares:
Ahora es el "tú" quien habla, un "tú" que no ejerce
ninguna acción, sólo le habla al " y o " ; además le dice: que viene tu cabeza por entre el agua,
que viene como entre espumas
vas a dejar tu bastón y vas a decir: ¡Hipa! ¿No hay gente?
Y este caminante ¿no es el mismo que hablaba en el poema
anterior, que venía de más allá de los montes hacia la mi cabeza ha crecido
se convirtió en nubes de aguacero
casa de la muerte, que había agarrado su vara para entrar
por el camino del borococo? E l grafema intencional ¡Hipa!
nos revela que nos encontramos nuevamente con pobla- —Vengo de lejos
de más allá de las casas,
dores de la provincia, que ya sabemos que se refiere a los
de más lejos que lo que se pierde en los montes.
Andes. Entonces nos preguntamos, ¿es la muerte la que
recibe al hombre? Pareciera que es ella la que habla, E s en este paisaje en donde se mueve la historia de
además los verbos en presente otra vez nos señalan la la muerte. E l cronista cuenta que, como todo ser feme-
muerte como una verdad eterna. nino, ella tiene su casa:
E n la segunda secuencia nos encontramos otra vez
con el verbo en pretérito (acción ya terminada), es el allí están echados sus perros
camino seguido por el hombre para entrar en el reino de allí está su casa entre el humo
la muerte. Igualmente la " y " semantizada conforma el
carácter de crónica, de historia coloquial. L a muerte es cobijo y refugio para el que está murien-
do. E n una oportunidad es una mujer que fue novia, madre
y ahora, en el momento final se le exhorta y ayuda a echar
"la última rosa por la boca", se le ayuda a llegar a aquel
6. LECTURA D E LOS POEMAS
lugar que parece ser protección, en donde se escucha con-
versar y se oye salir música, un lugar placentero. E n otra
Palomares es un "cronista", en el mejor y más apro-
piado sentido de la palabra^ cronista que narra, a través oportunidad es el hombre quien conversa de tú a tú con
del lenguaje poético, entregado a nosotros a la manera de la muerte:
las viejas crónicas de indias, todo un mundo de leyendas
y cuentos que parecen haber llegado hasta él gracias a la —Vengo de lejos
transmisión oral que se da por generaciones y que con- de más allá de las casas,
forma la reahdad de un pueblo. Escuque, presumible-
mente, que tiene entre sus antepasados una civilización
E s un hombre que ha dejado atrás su mundo cam-
indígena; es un universo de leyendas que se enriquece en
pesino de zanjones y carne para asar y su llegada a la casa
la "visión de mundo" expresada en la literatura preco-
de la muerte, lugar en donde se oye cantar al ángel, ha
lombina latinoamericana tan cara al poeta.
143
142
HHL
sido a través de una ceremonia que lo ha llevado por un otro estado del ser, la existencia parece continuar, no
largo camino: acabar; pero continuar en otras condiciones que quizás son
más placenteras pues para llegar a ese otro lugar se llega:
Me metí por el canto del borococo abriendo las ventanas llenas de polvo
me metí por su oscuridad, me fui donde sus plumas silban,
oliendo moho
encontrando vestidos y flores
Pero la muerte no llega abruptamente, la muerte se
acerca a través de presagios, a través de una ceremonia,
a través de la imagen de la tormenta que se avecina con
sus relámpagos y sus nubes de aguacero, imagen que nos
recuerda a los dioses que representan el relámpago y el
trueno en las leyendas relatadas en los libros sagrados
precolombinos como el Popol Vuh:

Estoy en la mata de sueño


en la sala de la casa,
mi cabeza ha crecido
se convirtió en nubes de aguacero.
Yo soy el que toca la noche,
ya te dije que me vuelvo árbol entre relámpagos

Aquel que siente el presagio ve que su cabeza se


vuelve "nube de aguacero", y su cuerpo, "árbol entre
relámpagos"; para luego sentir que sus piernas se con-
vierten en "torcaces negras" y su frente, "vidrio": "Me
toqué la frente y me encontré como vidrio".
Este hombre agarrado a su vara, que le sirve de
bastón, y que parece ser a la vez signo de mando, deja
atrás su mundo carñpesino, ¿su realidad real? Pero ahora
no necesitará de ese apoyó, la muerte lo recibe y le dice:

Vas a poner tus pies en mi casa


vas a dejar tu bastón
Vas a decir: ¡Hipa! ¿No hay gente?

L a concepción de la muerte que se desprende de estos


tres poemas nada tiene que ver con el miedo ancestral
que siente el hombre de la civilización judeo-cristiana ante
ella. Aquí el ser que muere penetra en "otro" lugar, en

144 145
HHL
GLOSARIO *

Característica pertinente. Se llama "característica intrínseca de una


entidad", la característica que la hace particular en relación
a otra entidad en un universo lleno de un número infinito
de identidades. Por su parte, cada entidad tendrá un número
infinito de características intrínsecas; entonces, para poder
lograr la identificación se puede proceder de dos manetas:
a) Que el identificante sea capaz de un número infinito de
actos dedicados a determinar las infinitas características de
alguna entidad, b) Si el identificador no es capaz de eso —lo
que parece cierto— gracias a su capacidad limitada, la identi-
ficación, tomando en cuenta todas las características intrínse-
cas de la entidad misma, no podrá darse. Así, ella será siempre
"arte de aproximación"; de manera que para identificar tma
entidad cualquiera, sólo tendremos en cuenta "algunas" de
estas características y estas que han sido escogidas se llamarán;
características pertinentes; la operación de escogerlas se lla-
mará operación de pertinentización. (De Mauro).

Clase. Colección de objetos o hechos lingüísticos que tienen una


misma extensión o propiedad común. Existe una teoría de
las clases, se basa sobre todo en el principio de comprensión
según el cual por cada propiedad bien definida de los objetos,
existe una clase correspondiente.

Clasema. La manifestación del discurso de dos o más núcleos sémicos


comporta la manifestación de "semas contextúales", los cuales
reciben de Greimas el nombre de clasema; ej. La unión de
dos semas contextúales como perro/comisario con ladra, depen-

Este glosario se atiene a ciertas características: Cuando un término


lo requiera, su definición se dará mediante una explicación que pudiera
ser considerada extensa, creemos que una definición escueta no basta-
ría para su comprensión. Por otra parte, hemos indicado el autor en
el cual nos basamos para compartir criterios.

147
HHL
derá del clasema ladra que a su vez dependerá del sujeto: de Eco, quien trata de demostrar que tanto el concepto de
(clase de los animales) o (clase de los seres humanos). E l icono, como el de índice (el otro término de la tricotomía
sema contextual, grito animal y/o grito humano, recibirá el será símbolo), son conceptos "comodín". (Para esto se reco-
mienda la lectura de los capítulos 3.4 y 3.5 del Tratado de
nombre de clasema. (Greimas).
Semiótica General).
Doble articulación. L a manera como se expresa la experiencia
humana es a través de una doble articulación en el lenguaje. Identidad. Aquí es usado como identidad lingüística, que significa
La primera articulación se debe a que esta experiencia humana la identificación de dos entidades relacionadas entre sí, o redu-
se expresa a través de unidades lingüísticas que tienen un sen- cidas a una sola. Para Saussure son aquellas razones que
tido y una forma vocal (palabras), sólo se da la comunicación permiten identificar dos hechos como dos manifestaciones
del ser humano en el cuadro de esta experiencia, que significa de algo que permanece idéntico. (Interesante el Capítulo viii
articular estas "palabras" de tal manera que permiten que del Curso de lingüística general).
el ser humano se entienda. Hjelmslev, llama a las unidades
que comportan la primera articulación, signos mínimos. La Lengua Madre. Es interesante conocer la opinión de Apel quien
segunda articulación depende de unidades que no poseen sen- define el lenguaje de uso corriente como la madrelengua de
tido propio, y permite que con pocas producciones fónicas, un pueblo, Pero es un concepto que está relacionado con la
podamos crear al combinarlas, un número estimado de historicidad común a todo ser humano, de manera que el
unidades lingüísticas (así, los fonemas conforman la segunda lenguaje de uso corriente puede ser un "médium" del pensa-
• articulación). (André Martinet y Hjelmslev). miento intuitivo-especulativo.

Entidad. Es un objeto existente en el sentido primario de la Lenguaje simbólico. Se refiere al lenguaje utilizado por las ciencias
palabra "existencia", es decir, está provisto de una manera que, como bien se sabe, está conformado por una serie de
de ser específicamente definible. Es un "objeto" en el cual se signos convertidos en símbolos, por eso cuando nos referimos
puede definir el status existencial. (Para su mayor compren- al lenguaje simbólico estamos hablando de lenguajes como el
sión se recomienda leer el capítulo xx de Hjelmslev, 1980). de las matemáticas.

Fonema. No tiene significado, sólo puede unirse a otro(s) para Lenguaje verbal. E n principio es aquel que utiliza las palabras para
componer una unidad dotada de significado. Son unidades de comunicarse, tanto en forma escrita como oral. E l lenguaje
la segunda articulación que pueden producir el significante verbal se presenta como "voz". Para De Mauro, realizaciones
correspondiente al mensaje que se quiere trasmitir. (André como el lenguaje de los sordomundos (mínimo-gestual) o el
Martinet y Hjelmslev). alfabeto táctil de los ciegos, son también realizaciones del len-
guaje verbal. Y apunta que hay que tener cuidado en las
definiciones, pues decir que la foneticidad es exclusiva del
Funtores-funtivo. Llamados también "operadores", son signos rela-
lenguaje verbal es un riesgo, porque el lenguaje silbado, por
cionantes (en matemática: + , — , = , etc.). Tienen su equi-
ejemplo, es también lenguaje verbal.
valencia en la lengua, pueden ser las preposiciones o las
partes relacionantes. Su función dependerá de otros "objetos".
(Hjelmslev, De Mauro). Lexema. Unidad de base del léxico (la palabra como aparece en
el diccionario), no tiene relación con la gramática. Esta defi-
nición es de Pottier. Algunos lingüistas lo llaman "morfemas"
Icono. E l icono es un signo que tiene una relación de semejanza o "palabra".
con la realidad externa y por eso presenta la misma propie-
dad del objeto denotado. Un retrato será el tipo de icono
más evidente. Esta definición viene de la famosa tricotomía Monema. No es una definición de orden fónico, ni semántico. Es la
elección operada por un sujeto hablante en el acto de enun-
de Peirce, pero hacemos notar que es interesante la opinión

148 149
HHL
dación, y depende del contenido del mensaje que se quiere
enviar. Según Todorov, es una elección elemental. Para
De Mauro, es la unidad más pequeña dotada de significante
y significado en donde se puede analizar un signo.

Noema. Viene del griego "pensamiento, concepto" en contraposi-


ción a sensación. Para Parménides era pensamiento -f- razona- BIBLIOGRAFIA
miento, para Platón, pensamiento como idea, y para Aristó-
teles, cosa pensada. Para Husserl, el contenido noemático de
una experiencia es producto de la conciencia intencional. Así
el pensamiento noético es la comprensión directa del objeto.
Apel, Karl Otto.
Y el noema lexical, será aquel que garantiza la posibilidad
de expresar cualquier "sentido" o sección del sentido mediante 1975 L'idea di lingua nella tradizione dell'umanesimo da Dante
los signos del código. (De Mauro). a Vico. Bologna. II Mulino. 1975.

Paralexema. E n oposición a lexema, los franceses, y Greimas entre Aristóteles.


ellos, lo usan para denominar una palabra "compuesta", por
1970 Poética. Versión directa, introducción y notas de J . D .
ejemplo "Perro de agua". Es lo que para la gramática caste-
. llana sería un sustantivo con un explicativo en genitivo. García Bacca. Caracas. E d . E B U C . U C V . 1970.
1975 Metafísica. Trad. de Patricio Azcárate. Madrid. Espasa-
Semantema. Transcribimos la definición dada por Zanichelli que Calpe. Colección Austral N? 399. 1975.
encierra la idea de Pottier: E l semantema es uno de los ele-
mentos que constituye el semema, los semas que se encuen- 1979 El Arte Poética. Trad., notas y prólogo de José Goya
tran en el interior del semema se pueden organizar según y Munian. Madrid. Espasa-Calpe. Colección Austral
tres reagrupamientos: los semas "genéricos" constituyen N? 803.1979.
el clasema, os semas "ocasionales", el virtuema, y el conjunto
de estos semas específicos constituyen lo que se Uama el Avalle D'Arco, Silvio y otros.
semantema de la unidad considerada. E l semantema del se-
mema silla comprenderá los rasgos específicos que distinguen 1982 La Semiótica letteraria italiana. A cura de Marin Mincu.
la unidad de las otras palabras del paradigma "silla". Quizás Milano. Feltrinelli. 1982.
la definición de Hjelmslev ayuda a comprender mejor: son,
dice, "elementos que portan el contenido de la serie", es, Barthes, Roland.
diríamos, un elemento relacionado estrictamente con el sentido.
1971 Elementos de Semiología. Madrid. Alberto Corazón
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Tono. Es uno de los elementos que constituyen el nivel expresivo
del signo, no siempre aceptado por todos (caso de los neo-
positivistas). E n el sentido de las palabras cuenta mucho el Casetti, Francesco.
tono. La misma frase depende del condicionamiento pragmá- 1980 Introducción a la semiótica. Barcelona, España. Editorial
tico para dar una significación diferente. E l tono influye direc- Fontanella. 1980.
tamente en el significado. (De Mauro).

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INDICE

INTRODUCCIÓN 11

PROBLEMAS D E L L E N G U A J E 15

Introducción, 15; 1. Lengua y conocimiento, 17; 2. E l lenguaje, 19;


3. La lengua, 20; 4. Cambios de la lengua, 23; 5. La lengua
como sistema, 24; 6. La comunicación, 26; 7. E l signo, 28;
8. E l significado, 30; 9. La arbitrariedad del signo, 31; 10.
Mutabilidad e inmutabilidad del signo, 36; 11. La creatividad
del lenguaje, 39; 12. La vaguedad y la metaforicidad, 40; 13.
La acepción, 42; 14. La oscilación del vocabulario, 43; 15.
La función metalingüística reflexiva, 44; 16. Uso de las pala-
bras, 45; 17. E l habla, 47; 18. Lenguaje escrito y lenguaje
oral, 50; 19. Lenguaje y pensamiento, 54, 20. Lenguaje inte-
rior, 55; 21. Comportamiento del lenguaje poético, 57.

PROBLEMAS D E LA SEMIÓTICA 73

1. ¿Semiótica o semiología?, 73; 2. Semiótica y comunicación y/o


semiología y significación, 81; 3. Proceso semiótico, 82; 4.
Función semiológica o semiótica, 85; 5. E l signo y sus dimen-
siones, 87; 6. Semiótica del texto literario, 88.
PARA U N A SEMIOLOGÍA D E L T E X T O P O É T I C O 95

1. Introducción, 95; 2. Instrumental semiótico para el análisis de


la poesía, 99; 3. Análisis de las isotopías semiológicas (niveles
paradigmático y pragmático), 101; 4. Análisis a nivel sintag-
mático, 119; 5. Análisis del nivel expresivo, 125; 6. Lectura
de los poemas, 142.
GLOSARIO 147

BIBLIOGRAFÍA 151

HHL
. Este libro se terminó de imprimir
en Caracas, Venezuela, en los Talleres
de Anauco Ediciones, C . A., en el
mes de noviembre de mil novecien-
tos ochenta y nueve

HHL

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