Anda di halaman 1dari 28

ANATOMIA Y FISIOLOGIA DEL APARATO UROGENITAL Y SISTEMA

NERVIOSO

NATALIA GISSELL FLOREZ JAIMES


ESTUDIANTE
CODIGO: 20571822534
PRIMER SEMESTRE ODONTOLOGIA

WILLIAM CHIA
DOCTOR-TUTOR

UNIVERSIDAD ANTONIO NARIÑO

CUCUTA

2018
APARATO GENITOURINARIO

APARATO URINARIO

Conceptos generales:
También se le conoce con el
nombre de Aparato Excretor. Está
formado por una serie de
estructuras cuya función principal
es recoger y eliminar todas las
sustancias de desechos resultantes
de las reacciones bioquímicas que
tienen lugar en el organismo.

Los órganos principales de este


aparato son los riñones que forman
la orina a partir de un proceso de
filtración de la sangre.

Por tanto, las funciones del aparato


urinario se pueden resumir como:

Formación de la orina en el riñón.


La formación y eliminación de la
orina contribuye a la regulación del medio interno.

El riñón también se comporta como una glándula endocrina secretando una


hormona, la eritropoyetina, que es necesaria en la producción de glóbulos rojos
(hematopoyesis). También produce renina que participa en la regulación de la
presión arterial.

Transporte de la orina hasta la vejiga urinaria a través de los uréteres.

Almacenamiento de la orina en la vejiga.

Eliminación de la orina a través de la uretra.

ANATOMIA Y FISIOLOGÍA DEL APARATO URINARIO

Constituido por dos riñones, dos uréteres, la vejiga y la uretra.

RIÑONES
Son dos órganos macizos, uno derecho y otro izquierdo, situados en la región
lumbar,uno a cada lado de la columna vertebral y algo por delante de ésta. Su
tamaño es de 11 x 3 x 5 cm, aproximadamente y su peso oscila entre 110 y 180
gramos. En forma de habichuela
el riñón presenta dos bordes,
uno externo y otro interno en el
que se localiza una hendidura
central denominada hilio renal.

El riñón derecho está


ligeramente más bajo que el
izquierdo, ya que el hígado lo
desplaza hacia abajo.

Esquema general del riñón


Si realizamos un corte en un
riñón en sentido vertical, se
observarán las siguientes
partes:

Corteza renal: Es la porción más externa del mismo. De aspecto uniforme. Tiene
aproximadamente 1 cm de espesor y rodea la médula.

Médula renal: Es la porción más interna del riñón. Tiene aspecto estriado y está
formada por pirámides cónicas denominadas Pirámides de Malphigio. El número de
pirámides oscila entre 8 y 18 en cada riñón. La base de cada pirámide está orientada
hacia el exterior y el vértice hacia el hilio renal. En el vértice de la misma se localiza
la papila renal.

El hilio renal es una hendidura situada en el borde interno del riñón. A través del
hilio renal penetran en el rinón la arteria renal y nervios y salen la vena renal y uréter.
La zona de la corteza renal situada entre cada dos pirámides se denomina columna
de Bertin.

Un lóbulo renal está formado por la pirámide renal y la correspondiente zona de


corteza que la rodea.

Las pirámides renales se unen por su extremo convexo en los llamados cálices
menores, que son de 8 a 10 por pirámide, y que a su vez se unen para formar de 2
a 3 cálices mayores. Los cálices mayores se unen entre sí para formar la pelvis
renal. La pelvis renal desemboca en el uréter.

La unidad estructural y funcional del riñón se denomina Nefrona. En cada riñón hay
entre 1 y 3 millones de nefronas. Cada nefrona está formada por:

Corpúsculo renal: Constituido por el Glomérulo y la Cápsula de Bowman. El


glomérulo está formado a su vez por una tupida red de capilares sanguíneos
envueltos por una membrana denominada Cápsula de Bowman. En el interior de
esa cápsula entra una arteriola, denominada arteriola aferente y sale otra llamada
arteriola eferente. La Cápsula de Bowman es una membrana de doble hoja, que se
invagina sobre sí misma para alojar al glomérulo, creando en su interior un espacio,
el espacio de Bowman, donde se recoge la orina filtrada del glomérulo.

Túbulo Contorneado Proximal (TCP): Es la continuación del corpúsculo renal.


Presenta dos zonas, una situada en la corteza renal, que presenta muchas
sinuosidades alrededor del corpúsculo renal, y otra situada en la zona medular del
riñón, mucho más recta que la primera. La pared del TCP está formada por una
capa de células epiteliales apoyadas sobre una membrana basal.

Asa de Henle: En forma de U. Está formada por una porción descendente y


delgada y una porción ascendente que en la primera parte del trayecto es delgada
mientras que en la segunda es gruesa.

Túbulo Contorneado Distal (TCD): Es la continuación del Asa de Henle.

Túbulo colector (TC): Es un tubo recto. Se reúnen entre sí para desaguar en los
cálices de la pelvis renal.

La cápsula de Bowman, TCP y TCD están situados en la corteza renal. Asa de


Henle y TC se sitúan en la médula renal.

Hay nefronas que ocupan en el riñón una posición cortical mientras otras se sitúan
en posición yuxtamedular.

Uréteres
Son dos largos tubos, uno izquierdo y otro derecho, que comunican por su extremo
superior con la pelvis renal y
por su extremo inferior con la
vejiga urinaria. Tienen una
longitud aproximada de 30 cm.

La pared uretral está formada


por las siguientes capas: una
capa mucosa, que tapiza
internamente la luz del tubo,
una capa de músculo liso y
una capa externa o adventicia.
Vejiga
Es una especie de saco
membranoso que actúa como
reservorio de orina entre cada
dos micciones. Situada detrás de
la sínfisis del pubis tiene forma de
pera. Presenta una
base ancha de forma triangular, el
trígono de lietaud, en cuyos
vértices superiores
desembocan los uréteres. En el
vértice inferior tiene su comienzo
la uretra.

URETRA
Representa la parte final de las vías urinarias. En la mujer la uretra es muy corta (4
cm aproximadamente). En el varón mide unos 20 cm aproximadamente.

En el varón hay que


diferenciar tres
segmentos, a saber:
uretra prostática, uretra
membranosa y uretra
cavernosa.

a. la uretra prostática
mide unos 3 cm de
longitud, Atraviesa el
espesor de la
próstata y en ella
desemboca la próstata
y los dos conductos
deferentes.

b. la uretra membranosa es muy corta (2,5 cm), y presenta un engrosamiento de


fibras musculares esqueléticas que corresponde al esfínter externo. Dicho
esfínter está controlado voluntariamente.

c. la uretra cavernosa discurre en el espesor del músculo del mismo nombre, mide
unos 15 cm y termina en el meato urinario.

La unión de la uretra con la vejiga presenta un engrosamiento muscular denominado


esfínter uretral interno, formado por fíbras musculares dispuestas en haces
espirales,
circulares y longitudinales que constituyen el músculo detrusor de la vejiga.

VASCULARIZACIÓN DEL RIÑON


La arteria renal, que es una rama de la aorta abdominal, penetra en el riñón a través
del hilio, ramificándose internamente de manera que el riñón sea uno de los órganos
mejor vascularizados.

La arteria renal se ramifica formando pequeñas arterias interlobulares que llegan a


la
zona cortical para formar las arterias arqueadas que se sitúan alrededor de la base
de las pirámides de las arterias arqueadas nacen las arteriolas aferentes que llegan
a la cápsula de Bowman para dividirse en su interior en una tupida red de capilares,
los capilares glomerulares.

Los capilares glomerulares vuelven a fusionarse entre sí para dar lugar a la arteriola
eferente que abandona la cápsula de Bowman y, a su vez, desaguan en las venas
intertabulares y éstas a su vez en la vena renal que abandona el riñón por el hilio
renal.

La vena renal desemboca en la vena cava inferior. El flujo de sangre que llega al
riñón es muy elevado, 1.200 mi/minuto, lo que representa la quinta parte de sangre
que bombea el corazón en un minuto.

la sangre es sometida en el riñón a un proceso de depuración donde son eliminados


todos aquellos metabolitos de desecho y sustancias que se encuentran en exceso,
para mantener así el equilibrio homeostático.

Formación de la
orina
La homeostasis
consiste en el
mantenimiento
constante del medio
interno, sin
modificación de los
parámetros
bioquímicos. Esta
función se lleva a
cabo gracias al
riñón que se
comporta como una
estación depuradora
de la sangre que
atraviesa los
glomérulos renales.
La formación de la orina definitiva que produce el aparato excretor es el resultado
de tres mecanismos diferentes, a saber:

Filtración glomerular.
Reabsorción tubular.
Secreción tubular.

FILTRACIÓN GLOMERULAR
La sangre que atraviesa los glomérulos es sometida a un proceso de filtración, que
la hace pasar desde la luz de los capilares glomerulares hacia la luz de la cápsula
de Bowman. La barrera de filtración la forman: endotelio de los capilares
glomerulares, la membrana basal y la capa de células epiteliales (podocitos) de la
cápsula de Bowman. No todos los componentes de la sangre son capaces de
atravesar esta barrera. Así, en condiciones normales, las células sanguíneas y las
moléculas de medio y alto peso molecular no son filtradas.

El filtrado glomerular está compuesto fundamentalmente por agua, electrolitos y


moléculas de distinta naturaleza, pero de bajo peso molecular, manteniendo una
concentración similar a la del plasma sanguíneo. En el filtrado glomerular apenas
existen proteínas, dado que su elevado peso molecular dificulta que atraviesen la
barrera glomerular.

Esta filtración se produce debido a la presión efectiva de filtración, que es la fuerza


neta que permite el paso de agua y solutos a través de la barrera de filtración. La
Presión efectiva de filtración es el resultado de:

a. La diferencia de presiones entre la presión hidrostática de la luz de los capilares


glomerulares y la presión hidrostática de la luz de la cápsula de Bowman. Esta
presión favorece la salida de los líquidos hacia la cápsula de Bowman.

b. La Presión oncótica del capilar glomerular. Se debe a las proteínas del plasma
que por su carga eléctrica de superficie son capaces de atraer y retener agua y
solutos dentro de la luz capilar. Esta presión evita en cierto grado la salida de un
mayor volumen de líquidos hacia la cápsula de Bowman. Los riñones humanos
filtran al día aproximadamente 180 litros y sin embargo se eliminan en condiciones
normales 1,5 I de orina.

Reabsorción tubular
En condiciones normales el riñón reabsorbe el 99% del agua y del sodio filtrados.
También reabsorbe moléculas importantes que son aprovechadas en el
metabolismo general y que por su bajo peso molecular son filtradas, tal como ocurre
con la glucosa, aa, etc.

a) TCP
La reabsorción se realiza con el paso de líquidos desde la luz tubular al espacio
intersticial inmediato y de ahí a la sangre (capilares).
En este fragmento se reabsorbe entre el 65-70% del sodio filtrado. La reabsorción
de sodio se acompaña de la reabsorción de cloro y bicarbonato para mantener la
neutralidad eléctrica. Se reabsorbe la totalidad de la glucosa y aa filtrados.
Se reabsorbe el 50% del potasio filtrado bien por un mecanismo activo o pasivo con
predominio del segundo mecanismo. Como consecuencia de la reabsorción de los
anteriores, se produce una disminución de la osmolaridad del líquido filtrado y
aumenta la del líquido reabsorbido al espacio intersticial. Se crea así una diferencia
de concentración entre ambos compartimentos que favorece la reabsorción pasiva
del agua. También se reabsorbe el 50% de la urea filtrada por un mecanismo pasivo.

b) Asa de Henle
En la rama descendente del Asa se reabsorbe agua y también se produce la
secreción neta de urea, que pasa del espacio intersticial a la luz del Asa para ser
eliminada por la orina. El líquido que queda en la luz del Asa se vuelve hipertónico
al perder el agua y mantener los solutos. En la porción delgada de la rama
ascendente del Asa de Henle se reabsorbe sodio y
cloro de forma pasiva, debido al gradiente de concentración, que es mayor en el
Asa que en el espacio intersticial. Al final de este fragmento el líquido es isotónico.
En la porción gruesa de la rama ascendente del Asa se reabsorbe por transporte
activo cloro al que acompañan sodio y potasio. El líquido tubular se vuelve
hipotónico.

c) TCD
Hay un intercambio de sodio por potasio. El sodio es reabsorbido y el potasio
secretado desde el espacio intersticial a la luz del TCD. Este mecanismo de
intercambio está controlado por la acción de la hormona llamada aldosterona. El
paso del sodio al espacio intersticial se acompaña del paso de cloro. El líquido
resultante sigue siendo
hipotónico.

d) TC
En este segmento tiene lugar la regulación definitiva del agua a favor de gradiente.
El epitelio del túbulo es impermeable al agua y para que lo sea necesita de la acción
hormonal. Se reabsorbe agua hacia el espacio intersticial por mecanismo activo que
es controlado por la hormona antidiurética (ADH). El líquido del túbulo colector se
vuelve hipertónico.
Se reabsorbe entre el 60-70% de la urea.

Aclaramiento renal
El riñón actúa como una estación depuradora retirando de la sangre gran cantidad
de metabolitos y sustancias tóxicas producidos en el metabolismo general del
organismo. El aclaramiento en él permite valorar esta capacidad renal. Mide la
capacidad de los riñones para eliminar una sustancia del plasma. Se puede definir
como el volumen de plasma que por la acción depuradora de los riñones queda libre
de esa sustancia en la unidad de tiempo.
En condiciones normales el proceso de formación de la orina en sus tres fases de
filtración, reabsorción y secreción ayuda a mantener el equilibrio hidroelectrolítico y
ácido base de la sangre. El aclaramiento renal permite valorar el buen
funcionamiento del riñón.

PATOLOGÍAS APARATO URINARIO

A los niños pequeños, antes de aprender a controlar el esfínter urinario, se les


escapa la orina en cuanto se llena la vejiga. Muchos niños mayores y adultos
padecen un trastorno denominado ENEURESIS en el que el afectado no puede
controlar el esfínter urinario, y cuyo origen puede deberse en algunas ocasiones a
un desequilibrio emocional. El miedo o temor pueden producir enuresis temporal.
En los ancianos ciertos tipos de degeneración del sistema nervioso provocan
incontinencia urinaria. La incapacidad para eliminar la orina almacenada puede
deberse a un espasmo del esfínter urinario, al bloqueo del esfínter por un cálculo, a
una hipertrofia de la próstata en varones o a una pérdida del tono muscular en la
vejiga después de un shock o intervención quirúrgica. La retención de orina puede
originarse también por una lesión nerviosa donde la médula espinal resulte afectada
o una esclerosis múltiple.

La NEFRITIS, o inflamación del riñón, es una de las enfermedades renales más


frecuentes. Sus características principales son la presencia en la orina, en el
examen microscópico,
de albúmina (lo que se
denomina
albuminuria), hematíes
y leucocitos, y cilindros
hialinos o granulosos.
Es mucho más
frecuente en la infancia
y adolescencia que en
la edad adulta.

La forma más común de nefritis es la GLOMERULONEFRITIS, que aparece con


frecuencia entre las tres y las
seis semanas después de una
infección estreptocócica
debido al mecanismo
inmunológico (anticuerpos
frente al estreptococo que
dañan proteínas específicas
del glomérulo)
(véanse conceptos básicos del
sistema inmunológico). El
paciente sufre escalofríos,
fiebre, cefalea, dolor lumbar,
hinchazón o edema de la cara,
en especial alrededor de
los ojos, náuseas y vómitos.
La orina puede ser escasa y de
aspecto turbio. El pronóstico
suele ser positivo y la mayoría
de los pacientes se recuperan
sin secuelas, aunque en
algunos casos evolucionan hacia una nefritis crónica. En este tipo de nefritis la
lesión renal progresa durante años en los que el paciente está asintomático. Sin
embargo, al final hay uremia (urea en sangre) e insuficiencia renal.

Existe además otro grupo de glomerulonefritis de causa desconocida, quizá


autoinmune, que tienen peor pronóstico y evolucionan con más rapidez hacia la
insuficiencia renal.

Otro trastorno frecuente es el denominado síndrome nefrótico, en el que se pierden


grandes cantidades de albúmina por la orina debido al aumento de la permeabilidad
renal, con edema generalizado, aumento del colesterol en la sangre y un flujo de
orina casi normal.

La HIDRONEFROSIS es el resultado de la
obstrucción del flujo de orina en la vía excretora, que
casi siempre es consecuencia de anomalías
congénitas de los uréteres o de una hipertrofia
prostática.

La NEFROESCLEROSIS, o endurecimiento de las


pequeñas arterias que irrigan el
riñón, es un trastorno caracterizado por la presencia
de albúmina, cilindros, y en ocasiones hematíes o
leucocitos en la orina (hematuria y leucocituria). Por lo
general se acompaña de enfermedad vascular hipertensiva. La lesión fundamental
es la esclerosis de las pequeñas arterias del riñón con atrofia secundaria de los
glomérulos y cambios patológicos en el tejido intersticial.
Los CÁLCULOS RENALES, o piedras en el riñón, se pueden formar en éste o en
la pelvis renal por depósitos de cristales presentes en la orina. La mayoría de ellos
son cristales de oxalato de calcio. La infección o una obstrucción, pueden
desempeñar un importante papel en su formación. En algunas ocasiones aparecen
cuando el nivel de calcio en la sangre se eleva de forma anormal como en los
trastornos de las glándulas paratiroides. En otros casos aparecen cuando el nivel
de ácido úrico en la sangre es demasiado alto (véase Gota), por lo general debido
a una dieta inadecuada y un consumo excesivo de alcohol. La ingestión excesiva
de calcio y oxalato en la dieta, junto con un aporte escaso de líquidos, pueden
favorecer también la aparición de cálculos. Sin embargo, en la mayoría de los casos
la causa es desconocida. Los cálculos pueden producir hemorragia, infección
secundaria u obstrucción. Cuando su tamaño es pequeño, tienden a descender por
el uréter hacia la vejiga asociados con un dolor muy intenso. El dolor cólico
producido por los cálculos requiere tratamiento con analgésicos potentes o
espasmolíticos, y puede aparecer de forma súbita tras el ejercicio muscular. Una
vez que el cálculo alcanza la vejiga, es posible que sea expulsado por la orina de
forma inadvertida, desapareciendo el dolor. Si el cálculo es demasiado grande para
ser expulsado, es necesario recurrir a la cirugía o a la litotricia, procedimiento que
utiliza ondas de choque generadas por un aparato localizado fuera del organismo,
para desintegrar los cálculos.

La UREMIA es la intoxicación producida


por la acumulación en la sangre de los
productos de desecho que suelen ser
eliminados por el riñón. Aparece en la
fase final de las enfermedades crónicas
del riñón y se caracteriza por
somnolencia, cefalea (dolor de cabeza),
náuseas, insomnio, espasmos,
convulsiones y estado de coma. El
pronóstico es negativo, sin embargo, el
desarrollo de las diferentes técnicas de
diálisis periódica en la década de 1980,
cuyo objetivo es eliminar de la sangre los
productos de desecho y toxinas, y la
generalización de los trasplantes de riñón
han supuesto un gran avance para estos
pacientes.

La PIELONEFRITIS es una infección bacteriana del riñón. La forma aguda se


acompaña de fiebre, escalofríos, dolor en el lado afectado, micción frecuente y
escozor al orinar. La pielonefritis crónica es una enfermedad de larga evolución,
progresiva, por lo general asintomática (sin síntomas) y que puede conducir a la
destrucción del riñón y a la uremia. La pielonefritis es más frecuente en diabéticos y
más en mujeres que en hombres.
TUMORES RENALES
Existen distintas
clasificaciones de tumores
renales, sin embargo,
prácticamente ninguna de
ellas ofrece una manera
simple y sistemática de
agruparlos.
Una manera sencilla de
agrupar los tumores renales
es de acuerdo al origen de
éstos. Así
tenemos:
- Tumores derivados del
epitelio tubular:
• benignos
• malignos
- Tumores derivados del estroma:
• benignos (fibroma, lipoma, leiomiosarcoma, etc.)
• malignos (fibrosarcoma, liposarcoma, rabdomiosarcoma, etc.)
- Tumores derivados del urotelio:
• Carcinoma de células transicionales
• Carcinoma escamoso (epidermoide)
• Adenocarcinoma

Los tumores derivados del epitelio tubular son los que deben concentrar nuestra
atención, por su frecuencia e implicancias clínicas.

CLÍNICA
La tríada clásica del cáncer de riñón es sangre en la orina, dolor en un flanco y la
aparición de una masa abdominal. A esta tríada se le conoce como la
tríada demasiado tarde, pues para cuando el paciente presenta los tres síntomas, la
enfermedad ha avanzado más allá de un punto curativo.
En la actualidad, la mayoría de los tumores renales son asintomáticos y se detectan
accidentalmente durante un examen de imagenología, por lo general, en busca de
causas no relacionadas.

Otros signos pueden incluir:

Color anormal de la orina (marrón, rojizo, cobre, etc) debido a la aparición


de hematíes en la orina.

Pérdida de peso y apariencia malnutrida.

El principal síntoma puede ser debido a una enfermedad metastásica, tal como
la fractura patológica de un hueso por diseminación ósea.
Varicocele o agrandamiento de un testículo por bloqueo de la vena gonadal, por
lo general del lado izquierdo debido a la compresión por el tumor de lavena renal—
la vena gonadal drena directamente a la vena cava inferior.

Anormalidades en la visión.

Palidez por hipervolemia.

Hirsutismo - crecimiento excesivo de vello en las mujeres.

Estreñimiento

Hipertensión arterial

Valores elevados de calcio (Hipercalcemia)

El TUMOR DE WILMS, que es un tumor renal


muy maligno, es más frecuente en los niños
pequeños.
Los últimos avances en su tratamiento han
conseguido la curación de muchos niños con
esta enfermedad. En el lupus eritematoso
sistémico, que afecta sobre todo a mujeres en
la cuarta década de la vida, el organismo
produce anticuerpos que lesionan el riñón.

Tumores del Urotelio


Los tumores de urotelio se originan de la
mucosa que recubre toda la vía urinaria: alta
(cálices, pelvis y uréter) y baja (vejiga y uretra). Centraremos nuestra atención en
los más frecuentes, es decir, en el cáncer de vejiga y de pelvis renal.

CÁNCER VESICAL
Epidemiología
El cáncer de vejiga es el segundo cáncer
más frecuente del tracto genitourinario. Es
más frecuente en el hombre que en la mujer
(2,7:1) y la edad promedio de presentación
es de 65 años.
Al momento del diagnóstico,
aproximadamente el 85% de estos tumores
están confinados a la vejiga y 15% ya están
diseminados.

Etiología y Patogenia:
Varios factores etiopatogénicos han sido identificados en esta neoplasia, como el
tabaco, que sería responsable del 50% de los tumores en el hombre y del 30% en
las mujeres. Así también, la exposición a ciertos agentes químicos, pinturas,
tinturas, cuero y goma han sido relacionados con el cáncer de vejiga.

Se mencionan también el uso de ciclo fosfamida y el trauma físico crónico al urotelio,


inducido por infección, instrumentación y cálculos.
Alteraciones genéticas son frecuentes en este tumor.

Cánceres vesicales, por lo cual este es un evento precoz en el desarrollo de este


tumor. Cambios tardíos serían pérdida de material genético en el brazo corto de los
cromosomas 11 y 17 (11p y 17p), eventos que han sido relacionados con la
progresión del tumor. El gen p53 se ubica en el brazo corto del cromosoma 17 (17p),
cuya mutación es frecuente en tumores vesicales)
ANATOMIA Y FISIOLOGÍA DEL SISTEMA NERVIOSO

El sistema nervioso (SN) constituye el sistema de control más importante del


organismo y, junto con el sistema endocrino, desempeña la mayoría de las
funciones de regulación. En general, el SN controla las actividades rápidas del
cuerpo, como las contracciones musculares, los fenómenos viscerales que
evolucionan rápidamente, e incluso las secreciones de algunas glándulas
endocrinas. En cambio, el sistema endocrino, regula principalmente las funciones
metabólicas del organismo.
Anatomía del sistema nervioso
El sistema nervioso central está formado por el cerebro y la médula espinal. En él
residen todas las funciones superiores del ser humano, tanto las cognitivas como
las emocionales. Sus partes más importantes son:
encéfalo

 Cerebro
 Cerebelo
 Tronco del encéfalo

Médula espinal
SISTEMA NERVIOSO CENTRAL (SNC)
El sistema nervioso central es
una estructura
extraordinariamente compleja
que recoge millones de
estímulos por segundo que
procesa y memoriza
continuamente, adaptando las
respuestas del cuerpo a las
condiciones internas o
externas. Está constituído por
siete partes principales
Encéfalo anterior que se
subdivide en:
 Hemisferios cerebrales
 Diencéfalo (tálamo e
hipotálamo)
 Tronco encefálico
 Mesencéfalo
 Protuberancia
 Bulbo raquídeo
 Cerebelo
 Médula espinal
A menudo, el encéfalo se divide en tres grandes regiones: el prosencéfalo
(diencéfalo y hemisferios cerebrales), el meséncefalo y el rombencéfalo (bulbo
raquídeo, protuberancia y cerebelo).
Todo el neuroeje está protegido por estructuras óseas (cráneo y columna vertebral)
y por tres membranas denominadas meninges (*). Las meninges envuelven por
completo el neuroeje, interponiéndose entre este y las paredes óseas y se dividen
en encefálicas y espinales. De afuera hacia adentro, las meninges se denominan
duramadre, aracnoides y piamadre.
DURAMADRE
La más externa, la duramadre, es dura,
fibrosa y brillante. Envuelve completamente
el neuroeje desde la bóveda del cráneo hasta
el conducto sacro. Se distinguen dos partes:
DURAMADRE CRANEAL: está adherida a
los huesos del cráneo emitiendo
prolongaciones que mantienen en su lugar a
las distintas partes del encéfalo y contiene
los senos venosos, donde se recoge la
sangre venosa del cerebro. Los tabiques que
envía hacia la cavidad craneana dividen esta
en diferentes celdas:
TENTORIO O TIENDA DEL CEREBELO: un
tabique transversal tendido en la parte posterior de la cavidad craneal que separa
la fosa cerebral de la fosa cerebelosa. En el centro y por delante delimita el foramen
oval de Pacchioni, una amplia abertura a través de la cual pasa el mesencéfalo. Por
detrás, a lo largo de su inserción craneal corren las porciones horizontales de los
senos laterales.
La hoz del cerebro, un tabique vertical y medio que divide la fosa cerebral en dos
mitades. Presenta una curvatura mayor en cuyo espesor corre el seno sagital
superior y una porción rectilína que se une a la tienda del cerebelo a lo largo de su
línea medio por la que corre el seno recto.
Tienda de la hipófisis que separa la celda hipofisiaria (un estrecho espacio situado
sobre la silla turca del esfenoides y ocupada por la hipófisis) de la celda cerebral
La hoz del cerebelo, que separa los dos hemisferios cerebelosos.
DURAMADRE ESPINAL: encierra por completo la médula espinal. Por arriba, se
adhiere al agujero occipital y por abajo termina a nivel de las vertebras sacras
formando un embudo, el cono dural. Está separada de las paredes del conducto
vertebral por el espacio epidural, que está lleno de grasa y recorrido por arteriolas y
plexos venosos
ARACNOIDES: La intermedia, la aracnoides, es una membrana transparente que
cubre el encéfalo laxamente y no se introduce en las circunvoluciones cerebrales.
Está separada de la duramadre por un espacio virtual (o sea inexistente) llamado
espacio subdural.
PIAMADRE: Membrana delgada, adherida al neuroeje, que contiene gran cantidad
de pequeños vasos sanguíneos y linfáticos y está unida íntimamente a la superficie
cerebral.
En su porción espinal forma tabiques dentados dispuestos en festón, llamados
ligamentos dentados. Entre la aracnoides y la piamadre se encuentra el espacio
subaracnoideo que contiene el líquido cefalorraquídeo y que aparece atravesado
por un gran número de finas trabéculas.

ANATOMÍA DEL ENCÉFALO:


Desde el exterior, el encéfalo aparece dividido en tres partes distintas pero
conectadas:
Cerebro: la mayor parte del encéfalo
 Cerebelo
 Tronco del encéfalo
El término tronco, o tallo del encéfalo, se refiere a todas las estructuras que hay
entre el cerebro y la médula espinal, esto es, el mesencéfalo o cerebro medio, el
puente o protuberancia y el bulbo raquídeo o médula oblongada

El encéfalo está protegido por el cráneo y, además, cubierto por las meninges.
CEREBRO:
Constituye la masa principal del encéfalo y es lugar donde llegan las señales
procedentes de los órganos de los sentidos, de las terminaciones nerviosas
nociceptivas y propioceptivas. Se desarrolla a partir del telencéfalo. El cerebro
procesa toda la información procedente del exterior y del interior del cuerpo y las
almacena como recuerdos. Aunque el cerebro sólo supone un 2% del peso del
cuerpo, su actividad metabólica es tan elevada que consume el 20% del oxígeno.
Se divide en dos hemisferios cerebrales, separados por una profunda fisura, pero
unidos por su parte inferior por un haz de fibras nerviosas de unos 10 cm llamado
cuerpo calloso, que permite la comunicación entre ambos. Los hemisferios suponen
cerca del 85% del peso cerebral y su gran superficie y su complejo desarrollo
justifican el nivel superior de inteligencia del hombre si se compara con el de otros
animales.
Los ventrículos son dos espacios bien definidos y llenos de líquido que se
encuentran en cada uno
de los dos hemisferios.
Los ventrículos laterales
se conectan con un
tercer ventrículo
localizado entre ambos
hemisferios, a través de
pequeños orificios que
constituyen los agujeros
de Monro o forámenes
interventriculares. El
tercer ventrículo
desemboca en el cuarto
ventrículo, a través de
un canal fino llamado
acueducto de Silvio. El
líquido cefalorraquídeo que circula en el interior de estos ventrículos y además
rodea al sistema nervioso central sirve para proteger la parte interna del cerebro de
cambios bruscos de presión y para transportar sustancias químicas.
Este líquido cefalorraquídeo se forma en los ventrículos laterales, en unos
entramados vasculares que constituyen los plexos coroideos
 En cada hemisferio se distinguen:
La corteza cerebral o sustancia gris, de unos 2 ó 3 mm de espesor, formada por
capas de células amielínicas (sin vaina de mielina que las recubra). Debido a los
numeroso pliegues que presenta, la superficie cerebral es unas 30 veces mayor que
la superficie del cráneo. Estos pliegues forman las circunvoluciones cerebrales,
surcos y fisuras y delimitan áreas con funciones determinadas, divididas en cinco
lóbulos. Cuatro de los lóbulos se denominan frontal, parietal, temporal y occipital. El
quinto lóbulo, la ínsula, no es visible desde fuera del cerebro y está localizado en el
fondo de la cisura de Silvio. Los lóbulos frontal y parietal están situados delante y
detrás, respectivamente, de la cisura de Rolando. La cisura parieto-occipital separa
el lóbulo parietal del occipital y el lóbulo temporal se encuentra por debajo de la
cisura de Silvio.
La sustancia blanca, mas interna constituida sobre todo por fibras nerviosas
amielínicas que llegan a la corteza
Desde del cuerpo calloso, miles de fibras se ramifican por dentro de la sustancia
blanca. Si se interrumpen los hemisferios se vuelven funcionalmente
independientes
El diencéfalo origina el tálamo y el hipotálamo:
TÁLAMO: Esta parte del
diencéfalo consiste en dos
masas esféricas de tejido
gris, situadas dentro de la
zona media del cerebro,
entre los dos hemisferios
cerebrales. Es un centro de
integración de gran
importancia que recibe las
señales sensoriales y donde
las señales motoras de
salida pasan hacia y desde
la corteza cerebral. Todas
las entradas sensoriales al
cerebro, excepto las
olfativas, se asocian con núcleos individuales (grupos de células nerviosas) del
tálamo.
HIPOTÁLAMO:
El hipotálamo está situado debajo
del tálamo en la línea media en la
base del cerebro. Está formado por
distintas regiones y núcleos
hipotalámicos encargados de la
regulación de los impulsos
fundamentales y de las
condiciones del estado interno de
organismo (homeostasis, nivel de
nutrientes, temperatura). El
hipotálamo también está implicado
en la elaboración de las emociones
y en las sensaciones de dolor y placer. En la mujer, controla el ciclo menstrual.
El hipotálamo actúa también como enlace entre el sistema nervioso central y el
sistema endocrino. En efecto, tanto el núcleo supraóptico como el núcleo
paraventricular y la eminencia mediana están constituídas por células
neurosecretoras que producen hormonas que son transportadas hasta la
neurohipófisis a lo largo de los axones del tracto hipotálamo-hipofisiario. Allí se
acumulan para ser excretadas en la sangre o para estimular células endocrinas de
la hipófisis.

SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO (SNP)


El sistema nervioso periférico está constituido por el conjunto de nervios y ganglios
nerviosos. Se llaman nervios los haces de fibras nerviosas que se encuentran fuera
del neuroeje; ganglios, unas agrupaciones de células nerviosas intercaladas a lo
largo del recorrido de los nervios o en sus raíces . Aunque también es periférico, el
sistema nervioso simpático (también denominado vegetativo o autónomo), se
considera como una entidad nerviosa diferente que transmite sólo impulsos
relacionados con las funciones viscerales que tienen lugar automáticamente, sin
que influya la voluntad del sujeto
GANGLIOS: Las fibras sensitivas contenidas en los nervios craneales y espinales
no son sino prolongaciones de
determinadas células nerviosas
(células «en T»), agrupadas en
pequeños cúmulos situados fuera del
neuroeje: los ganglios
cerebroespinales.
Los ganglios anexos a los nervios
espinales son iguales entre sí, en
forma, dimensiones y posición. De
ellos parte la raíz posterior de cada nervio, siempre en la proximidad del agujero
intervertebral que recorre el nervio para salir de la columna vertebral.
Los ganglios de los nervios craneales tienen, por el contrario, una forma,
dimensiones y posición mucho más variables. Sin embargo, las funciones y la
constitución histológica son muy similares para ambos tipos de ganglios
NERVIOS CRANEALES Y ESPINALES:

Los nervios craneales y espinales se presentan como cordones de color


blanquecino y brillante. Están formados por el conjunto de muchas fIbras nerviosas,
casi todas revestidas de vaina mielínica.
Todos los nervios craneales y espinales resultan de la unión de fibras que salen del
encéfalo o de la médula espinal. Sin embargo, mientras que, para los nervios
craneales dichas fibras se unen directamente para formar el nervio, en los nervios
espinales, las fibras se unen primero en dos formaciones diferentes, la raíz anterior
y la raíz posterior. Las uniones de ambas raíces dan origen finalmente el tronco del
nervio espinal. El tronco de todos los nervios espinales tiene una longitud de poco
más de 1 centímetro ya que se divide en una rama anterior o ventral, más gruesa,
y una rama posterior o dorsal, más delgada.
Las ramas posteriores se mantienen siempre separadas e independientes entre sí,
mientras que, en las vías anteriores, además de los nervios intercostales
independientes forman los plexos nerviosos
Los nervios con gran frecuencia, acompañan a los vasos sanguíneos que deben
alcanzar el mismo territorio formando los paquetes vasculo nerviosos, resultantes
del conjunto de un nervio, una arteria y una o varias venas, adosados y mantenidos
unidos por tejido conjuntivo. Al dirigirse hacia la periferia, los nervios emiten ramas
en distintas direcciones. Estas ramas se llaman ramas colaterales, mientras que las
ramas en las que termina el nervio para subdividirse en su terminación, se llaman
ramas terminales. Un caso particular está representado por las ramas que
abandonan un nervio para penetrar en otro nervio, estableciendo así anastomosis
entre nervios distintos; son las llamadas ramas anastomóticas.

Las numerosas fibras nerviosas que constituyen un nervio están reunidas, por
medio del tejido conjuntivo, en muchas unidades sucesivas. El conjuntivo que
envuelve en superficie la totalidad del nervio se denomina epinervio (*) ; de él se
dirigen hacia el interior del nervio innumerables prolongaciones de tejido conjuntivo
y pequeños vasos sanguíneos y linfáticos, destinados a la nutrición de las fibras
nerviosas. Inmersos en este conjuntivo laxo, encontramos cierto número de
hacecillos secundarios, grupos, generalmente circulares, de fibras nerviosas, bien
delimitados y separados uno de otro. La envoltura de cada fascículo secundario se
llama perinervio. Del perinervio parten tabiques que se insinúan hacia el interior del
fascículo secundario, subdividiéndolo en muchos fascículos de fibras, más
pequeños y de forma variada: los fascículos primarios. Los fascículos primarios, a
su vez, están envueltos por el endonervio primarios se llama endonervio (*)

Cuando un nervio se bifurca, cede uno o más de los haces secundarios completos
incluyendo el perineuro y además el epinervio del nervio del que se origina. Lo
mismo ocurre con los haces primarios e incluso con las propias fibras nerviosas que
al ramificarse van acompañadas de tejido conjuntivo el perineuro y epineuro
formando una vaina llamada vaina de Henle

En el nervio se observan fibras nerviosas de dimensiones muy variadas: las


provistas de vaina mielínica oscilan entre 20 y 1 micra de diámetro; las que están
desprovistas de dicha vaina no llegan a la micra.
SISTEMA NERVIOSO VEGETATIVO O AUTÓNOMO (SNA)

El sistema nervioso autónomo regula la actividad de los músculos lisos, del corazón
y de algunas glándulas. Casi todos los tejidos del cuerpo estan inervados por fibras
nerviosas del sistema nervioso autónomo, distinguiéndose dos tipos de fibras: las
viscerosensitivas (aferentes) y las visceromotoras y secretoras (eferentes). Las
neuronas de las fibras sensitivas se reunen en los ganglios espinales, mientras que
las fibras eferentes forman grupos esparcidos por todo el cuerpo, en los llamados
ganglios autonómicos. Estos ganglios dividen las vías nerviosas en dos secciones
denominadas pre-gangliónicas y post-ganglionicas, siendo diferentes las fibras que
constituyen dichas vías. Las fibras pregangliónicas son fibras mielinizadas, mientras
que las fibras postgangliónicas son amielínicas.
La función del sistema nervioso autónomo es la regular la función de los órganos,
según cambian las condiciones medioambientales. Para ello, dispone de dos
mecanismos antagónicos, el sistema nervioso simpático y el sistema nervioso
parasimpático
El sistema nervioso simpático es estimulado por el ejercicio físico ocasionando un
aumento de la presión arterial y de la frecuencia cardíaca, dilatación de las pupilas,
aumento de la perspiración y erizamiento de los cabellos. Al mismo tiempo, se
reduce la actividad peristáltica y la secreción de las glándulas intestinales. El
sistema nervioso simpatático es el responsable del aumento de la actividad en
general del organismo en condiciones de estrés.

Por su parte, el sistema nervioso parasimpático, cuando predomina, reduce la


respiración y el ritmo cardiaco, estimula el sistema gastrointestinal incluyendo la
defecación y la producción de orina y la regeneración del cuerpo que tiene lugar
durante el sueño.
En resumen, el sistema nervioso autónomo consiste en un complejo entramado de
fibras nerviosas y ganglios que llegan a todos los órganos que funcionan de forma
independiente de la voluntad. En un gran número de casos, los impulsos nerviosos
de este sistema no llegan al cerebro, sino que es la médula espinal la que recibe la
señal aferente y envía la respuesta

SISTEMA NERVIOSO SIMPÁTICO


Las fibras preganglionares de la división simpática se originan de los niveles torácico
y lumbar de la médula espinal y casi inmediatamente terminan en ganglios situados
en la proximidad de la médula espinal. Por lo tanto, en este sistema las fibras
pregangliónicas son cortas, mientras que las posgangliónicas que contactan con los
órganos son largas. El simpático es especialmente importante durante situaciones
de emergencia y se asocia con la respuesta de lucha o huida. Por ejemplo inhibe el
tracto digestivo, pero dilata las pupilas, acelera la frecuencia cardiaca, y respiratoria.

SISTEMA NERVIOSO PARASIMPÁTICO


Está formado por pares craneales incluyendo el nervio vago y fibras originadas de
niveles sacros de la médula espinal. Por lo tanto, este sistema frecuentemente se
denomina la porción craneosacra del SNA. En la división parasimpática las fibras
pregangliónicas son largas y las posgangliónicas son cortas ya que los ganglios
están en la proximidad o dentro de los órganos.
El sistema parasimpático está relacionado con todas las respuestas internas
asociadas con un estado de relajación, por ejemplo provoca que las pupilas se
contraigan, facilita la digestión de los alimentos y disminuye la frecuencia cardiaca.
TRANSMISIÓN DE LOS IMPULSOS EN EL SISTEMA NERVIOSO AUTÓNOMO
En la transmisión de los impulsos nerviosos del sistema simpático interviene la
norepinefrina como neurotransmisor, mientras que en el parasimpático es la
acetilcolina, por lo que ambos sistemas también reciben el nombre de sistema
adrenérgico y sistema colinérgico respectivamente.
En algunos órganos como el corazón y el pulmón, el antagonismo entre ambos
sistemas es claramente apreciable. En otros órganos, la regulación consiste tan solo
en el cambio de tono de uno u otro sistema, y en algunos órganos concretos, solo
está presente un sistema (por ejemplo, el útero solo está inervado por el sistema
adrenérgico)
Las neuronas autonómicas se caracterizan por disponer en las ramas terminales de
los axones de unas varicosidades o ensanchamientos que contienen las vesículas
sinápticas, unos pequeños contenedores en donde se encuentran los
neurotransmisores. En estas zonas, los axones no están recubiertos de vainas de
mielina para permitir que los neurotransmisores puedan difundir fácilmente y llegar
a los receptores de las células de músculo liso o glandulares (*) . Al llegar los
neurotramisores a estos receptores se abren los canales iónicos situados en la
membrana de las células, lo que permite la entrada de iones, es decir de cargas
eléctricas.
BIBLIOGRAFIA
http://www.iescarlosbousono.com/wordpress/wp-content/uploads/2008/04/Aparato-
Genitourinario.
https://www.ecured.cu/Aparato_genitourinario
http://www.iqb.es/neurologia/a001.htm
https://www.significados.com/sistema-nervioso/

Anda mungkin juga menyukai