Donald Trump llega a la Casa Blanca con la convicción férrea de que el cambio
climático es un “cuento chino”, un mito. "Nadie sabe realmente" si es real,
aseguró el mangnate. Lo que ha sucedido en el planeta en los últimos años
demuestra lo contrario.
Como Estados Unidos es uno de los países más importantes en ese esfuerzo,
y Obama había asumido un liderazgo esperanzador en el tema, la llegada de
Trump ha generado precauciones. Centenares de los científicos más
respetados del mundo enviaron una carta alertando sobre los efectos que
podría tener el hecho de que la primera potencia del mundo desatienda esos
compromisos.
Colombia no se queda atrás. A pesar de no ser uno de los países que más
contribuyen al cambio climático tiene su cuota de responsabilidad puesto que,
aunque no emite grandes cantidades de gases de efecto invernadero, sí ha
dejado perder miles de hectáreas de bosque que produce el oxígeno del
planeta. Por otro lado, el país es uno de los más vulnerables del mundo a los
efectos de este fenómeno, una situación que se ha visto en el impacto cada
vez mayor de las inundaciones y las sequías.
1. Derretimiento de glaciares