“Esa imagen que me habita”

Introducción:

Bansky, manipula con gran destreza pinturas en aerosol en las paredes londinenses, ofreciéndonos

una mordaz crítica de ciertos fenómenos globales que aparecen en redes sociales cómo

autorretratos e imágenes corporales.

Iluminación, poses, gestos e indeterminados intentos pasan por iluminaciones, filtros y retoques de

aquella imagen que el teléfono celular nos devuelve. Ellas liberadas de censura, navegan entre

bytes, ondas y servidores y aparecen en redes sociales. Una red global, no mundial, que desconoce

fronteras lingüísticas, sociales y culturales. La gran ilusión de un lugar eterno idealizado nos ubica

allí. Felices. Sonriendo hasta el desmayo, secundados por paisajes y monumentos lejanos,

vertiginosas experiencias deportivas, todo es perfecto allí. Somos perfectos allí.

Desde que el hombre dominó la técnica de la perspectiva, el Renacimiento trajo consigo hiperreales

retratos de monarcas, clérigos, santos, ángeles y salvadores, pasando por Louis Daguerre y sus

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primeras fotografías hasta nuestros días, la imagen corporal que las técnicas captan no ha dejado de

fascinar a las personas.

En la última década las redes sociales cobraron gran interés debido a la posibilidad de ser integrante

de esa gran democracia que seguidores y amigos que alimentan los contadores con "likes" y/o "me

gusta". Somos populares. Somos mirados. Deseados. Obturados por una imagen que creemos

propia. ¿Pero qué obturamos?

La intención de estas líneas es abordar, desde la perspectiva del psicoanálisis, la construcción de la

imagen corporal, desde su constitución, a través de un recorte de la conceptualización del estadío

del espejo de Lacan y la función del yo como rechazo de la aceptación de la realidad, en este caso,

de la imagen propia.

Lacan va a decir que la experiencia psicoanalítica demuestra que en el lenguaje el sujeto se

expresa como el yo o negación y señala que este fenómeno puede deducirse a partir de expresiones

que surgen dentro del dispositivo psicoanalítico cómo "esto no es lo que quise decir" o "esto no es

así". Creo parece oportuno deslizar la posibilidad que la elaboración idealizada de nuestra imagen

en una fotografía opera como una negación a una realidad que inquieta cuando nos observamos,

más aún, cuando observamos, detenidamente, nuestro rostro en un espejo o en este caso en una

fotografía de nuestro rostro: un autorretrato.

Lacan se apoyará en Freud, más precisamente en "Introducción del narcisismo" (1914) para decir

que el yo se construye no es dado y como se construye puede desconstruirse y es el primer objeto

dónde se depositará la libido. "Lacan resalta como funciones como fundamentales del yo su

desconocimiento y objetivante...) (Leserre, 2018, 99) "Nuestro punto de vista es que la función de yo

es la del sistemático rechazo de la aceptación de la realidad" (1953, 176) pero esta afirmación debe

ser entendida no como un rechazo en el sentido estético si no que nuestra propia imagen siempre

genera inquietud. Un Otro, va a decir Lacan, es garante de esa imagen que el espejo nos devuelve

en nuestra primera tierna experiencia ante un espejo. De esta manera se va a poner de manifiesto la

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multiplicidad del yo ya que esta estará construida por identificaciones imaginarias que otorgarán

ilusión de completud.

Estas “selfies”, imágenes corporales, pueden operar cómo significantes que funcionan como

mensajes para el Otro y no sería más que distintas formas de obturar la castración.

Idea directriz:

El trabajo tiene cómo guía temática la articulación del caos de las imágenes del cuerpo

fragmentado, el estadío del espejo y la relación con la operación de la castración.

A partir de la relación de estos tres elementos los sujetos se enfrentan con la imagen como ilusión de

unidad que corre el riesgo a deslizarse en el caos desde el cual se inició.

Temas:

Los temas a desarrollar en este trabajo son:

•La constitución del yo como un objeto.

•La imagen especular y la identificación con el otro “...previo a que el lenguaje restituya en lo

universal su función de sujeto.” (Lacan, 2008, 87)

•Mecanismos paranoicos en la alienación del yo.

•El yo como Verneinung o negación.

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Estado del arte:

En relación al tema a desarrollar en el presente trabajo, la articulación entre la fragmentación del

cuerpo, estadío del espejo y la operación de la castración, he encontrado información en las

siguientes publicaciones:

•Lacan, J. (2008) El estadio del espejo como formador de la función del yo [je] tal como se nos revela

en la experiencia psicoanalítica. En “Escritos 1”. Buenos Aires: Siglo XXI editores, 2da. ed. revisada,

pp. 99-107.

•Leserre, L. (2018) Una selfie para ser feliz. En “Psicoanálisis orientación lacaniana: recorrido del

goce en la enseñanza de Lacan”. Buenos Aires, JCE Ediciones pp. 97-107.

•Lacan, J. (1976) Algunas reflexiones sobre el yo. En “Revista uruguaya de psicoanálisis”.

Montevideo. pp. 175-186.

•Nasio, J. (2008) El archipiélago del cuerpo y sus imágenes. En “Mi cuerpo y sus imágenes". Buenos

Aires. Paidós. pp. 127-138.

•Freud, S. (1985). Introducción del narcisismo. En Trabajos sobre metapsicología, y otras obras.

«Contribución a la historia del movimiento psicoanalítico». Obras Completas, XIV. Buenos Aires:

Amorrortu editores.

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Marco teórico:

El marco teórico en el que nos apoyaremos para este trabajo es el psicoanálisis. Tiene como punto

de partida las conceptualizaciones de Lacan acerca del estadio del espejo. Comienza hablando de

las funciones del yo (je) pasando en la imagen que le devuelve el espejo al niño y va a sostener que

“... el estadío del espejo como una identificación... la transformación producida en el sujeto cuando

asume una imagen... “ (Lacan, 2008 pp 87) y va decir que aquella imagen especular asumida que

produce júbilo en el infante no es más que una matriz simbólica y será una forma primordial antes de

objetivarse en la dialéctica de la identificación con el otro y sucederá antes que el lenguaje le asigne

la función de sujeto. También colocará el acento en esta línea sosteniendo que a partir de la

constitución de aquel acto será el tronco de identificaciones secundarias. Pero lo que más destaca el

artículo en referencia es que “... el punto importante esta forma sitúa al yo, aún antes de su

determinismo social, en una línea de ficción, irreductible siempre para el individuo solo...” (Lacan,

2008 pp. 87) De esta manera lo forma total del cuerpo será un espejismo que se adelanta al proceso

madurativo.

Lacan utiliza el concepto de gestalt para decir que es propia de la especie humana y que a partir de

ella se producirá un doble movimiento; por un lado simboliza la permanencia mental del yo y al

mismo tiempo prefigura su destinación enajenadora. Surgen las imagos, para nuestra articulación es

necesario introducir la función de las imagos “... la imagen especular parece ser el umbral del mundo

visible, si hemos de dar crédito a la disposición en espejo que presenta en la alucinación y en el

sueño la imago del cuerpo propio, ya se trate de rasgos individuales, incluso de sus mutilaciones, o

de sus proyecciones objetales, o si nos fijamos en le papel del aparato del espejo en las pariciones

del doble en que se manifiestan realidades psíquicas, por lo demás heterogéneas.” (Lacan, 2008 pp

88).

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Por otra parte y en referencia a este texto Lacan va a decir que el estadío del espejo es un drama “...

cuyo empuje interno se precipita de la insuficiencia de la anticipación...” (Lacan, 2008 pp. 90) El

sujeto preso de la ilusión de la identificación espacial, maquina una serie de fantasías a partir de la

fragmentación de la imagen del cuerpo y la armadura rígida asumida será una identidad enajenante

y determinará su posterior desarrollo mental. Esto permitirá la ruptura de ese círculo del Innenwelt

(mundo interior) y el Umwelt (medio ambiente)

Otro tema importante es el estudio que realiza Lacan sobre el “conocimiento paranoico”. Va a

considerar los mecanismos paranoicos de alienación del yo como pre condición del conocimiento

humano. Para ello se centrará en los celos y va a decir que de ellos nacerá una relación triangular

entre el yo, objeto y “un otro” y va a sostener que el objeto del deseo del hombre es un objeto

deseado por algún otro y va a decir que estos pueden volverse equivalentes a otros “... debido al

efecto producido por este intermedio, en hacer posible que los objetos se intercambien y comparen.

Este proceso tiende a disminuir el significado especial de un objeto particular, pero al mismo tiempo

permite prever la existencia de objetos sin número.” “... somos guiados a ver nuestros objetos como

yoes identificables, teniendo unidad, permanencia y sustancialidad... reconocimiento de objetos...

proceso dialectico incesante.” (Lacan, 1976 pp 178).

También es importante la observación que realiza Lacan en “Algunas reflexiones sobre el yo” (1976)

acerca del demonio senso motriz en el infante y va a sostener que la estabilidad de la postura erecta,

establecerá el estilo para la identificación en el cual el yo encontrará un punto de partida y dejará

huella en él para siempre.

En el mismo texto destaca algo fundamental para nuestro trabajo. Hace referencia a la resistencia

del yo de transformarse a las variaciones del deseo y va a decir “... Esta ilusión de unidad, en la cual

el ser humano siempre busca autodominio, encierra un constante peligro de volver a deslizarse en el

caos desde el cual se inició; cuelga sobre el abismo de un asentamiento vertiginoso en el cual uno

puede tal vez ver la esencia misma de la angustia. “ (Lacan, 1976 pp 185).

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Por último creo necesario para abordar la articulación la introducción del artículo de Lucas Leserre

“Hacia el paradigma dos: la significación de la imagen” (2018). En el mismo el autor realiza un

recorrido desde la conceptualización de Lacan desde la “prematuración biológica” hasta la castración

y va a decir que la imagen del propio cuerpo va a taponar a la castración. “... En el sujeto histérico,

quien sufre por no encontrar el significante que lo represente en el Otro, la imagen del cuerpo propio

puede funcionar como tapón de esta falta significante... … la imagen del cuerpo puede funcionar

como un significante... el sujeto se hace representar por el Otro por la imagen de su cuerpo propio,

de tal manera que esta imagen y su manipulación funcionan como un mensaje al Otro y, a la vez,

dependen del mensaje recibido del otro.” (Leserre, 2018 pp. 106) De esta manera las imágenes o

autorretratos plasmados en redes sociales podrían ser un goce imaginario inerte, el cual se

encuentra estancado en la imagen privilegiada del propio cuerpo. Esta acciones pueden estar

dirigidas a Otro y así taponar la castración.

Objetivos:

•Caracterizar el autorretrato cómo una forma particular de goce.

•Articular conceptos de imagen especular y la identificación con el otro y alienación del yo.

•Contextualizar los anteriores objetivos en función a la época actual.

•Analizar el concepto imago y articularlo con el concepto de castración.

Bibliotecas consultadas:

•Biblioteca virtual de la Facultad de Psicología, Universidad de Buenos Aires:

http://biblioteca.psi.uba.ar/cgi-bin/koha/opacmain.pl

•Biblioteca Vitual APA

http://bibliotecadigital.apa.org.ar/

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Referencias bibliogáficas:

•Lacan, J. (2008) El estadio del espejo como formador de la función del yo [je] tal como se nos revela

en la experiencia psicoanalítica. En “Escritos 1”. Buenos Aires: Siglo XXI editores, 2da. ed. revisada,

pp. 99-107.

•Leserre, L. (2018) Una selfie paraq serfeliz. En “Psicoanálisis orientación lacaniana: recorrido del

goce en la enseñanza de Lacan”. Buenos Aires, JCE Ediciones pp. 97-107.

•Lacan, J. (1976) Algunas reflexiones sobre el yo. En “Revista uruguaya de psicoanálisis”.

Montevideo. pp. 175-186.

•Nasio, J. (2008) El archipiélagodel cuerpo y sus imágenes. En “Mi cuerpo y sus imágenes". Buenos

Aires. Paidós. pp. 127-138.

•Freud, S. (1985). Introducción del narcisismo. En Trabajos sobre metapsicología, y otras obras.

«Contribución a la historia del movimiento psicoanalítico». Obras Completas, XIV. Buenos Aires:

Amorrortu editores.

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