DEL PERÚ
(Mayo 2018)
108-B: Feminicidio
La figura del Feminicidio ha sido recientemente incorporada al Código Penal
Peruano, exactamente en 2013. Desde ahí ha tenido una diversa cobertura
mediática, mas que todo por los emblemáticos casos que se han suscitado desde
entonces, imponiendo al legislador una mayor presión al momento de impartir
justicia. Pero hay algo curioso en este artículo, el asesinato a una mujer ‘por su
condición como tal’, algo bastante confuso al momento de la tipificación del
delito, pues ¿se refiere al aspecto biológico o de género? Pues eso dificulta la
labor, al no saber si es feminicidio, parricidio, homicidio, homicidio calificado o
según sea la circunstancia del delito.
Un punto mas a destacar es que, la figura de feminicidio en el Código Penal
Peruano solo rescata la violencia intima, y no da mas detalles acerca de la
violencia que puede cometer el Estado y sus funcionarios.
Ahora, la modificatoria mas reciente (Mayo 2018) nos trae novedades y la más
resaltante es el tiempo de pena, que pasa de 15 años a 30 años como mínimo,
algo que se puede tomar con aprobación por la mayoría de la población, pero un
aumento de pena lastimosamente no garantiza que estos delitos bajen
drásticamente y eso lo demuestran las estadísticas.
Otro aspecto que destacar es la modificatoria del inciso 8, muy acertada a mi
parecer pues el anterior solo contemplaba los grados de parentesco y/o tutoría
de niños, niñas o adolescentes respecto a la víctima. Ahora, será agravante
cuando este presente cualquier niño, niña o adolescente lo cual es muy asertivo,
pues el daño psicológico causado a cualquiera de los mencionados es
irreparable solo con ser testigos de un crimen de tal magnitud, además revela la
intención del Estado de dejar caracterizar el feminicidio solo como un delito de
violencia intima, acogiendo así más supuestos.
La inclusión de un nuevo inciso como el número 9 era bastante necesaria desde
el momento de la aparición de esta figura y es un agravante bastante coherente
sobre todo respecto al grado de violencia en el cual puede ser cometido el delito
donde muchas veces el alcohol, drogas y estupefacientes tienen un alto grado
de intervención debido al estado que producen sobre el victimario y el cual
muchas veces es usado como defensa de este, con el fin de poder reducir la
pena algo bastante indignante teniendo en cuenta la gravedad de los casos.
La aclaración de la inhabilitación impuesta al victimario en cualquier
circunstancia es de bastante ayuda al legislador, siendo los numerales más
importantes (para este delito) del Artículo 36 del Código Penal del Perú el numero
5, el cual incapacita para asumir la patria potestad, tutela o curatela (según sea
el caso) y el numero 11, donde se le prohíbe al victimario acercarse a la victima
y sus familiares (protegiendo especialmente aquí a los hijos, si los tuviera). De
esta manera, se agrega también a los artículos 75 y 77 del Código de los Niños
y Adolescentes, los cuales están directamente relacionados con el numeral 5 del
articulo 36 del Código Penal del Perú.
En resumen, la modificatoria de este articulo denota una mayor atención del
Estado en dejar de catalogar el Feminicidio como delito de violencia interna y
además ayuda en la precisión de su tipificación, sin embargo, el aumento de la
pena podrá ser interpretado como algo acertado (a simple vista) debido a los
últimos casos en aparecer, sin embargo, me parece una medida bastante
populista, pues como exprese líneas arriba, el aumento de una pena no asegura
la reducción del delito.
442: Maltrato
En este articulo podemos encontrar una modificatoria que se ha hecho extensiva
durante todo este análisis, la protección hacia los familiares sean estos cónyuge,
excónyuge, convivientes, ex convivientes, padrastro, madrastra y por
consanguinidad hasta el cuarto grado y por afinidad hasta el segundo y/o
adopción, en los casos de maltrato independientemente de que se viva o no con
ellos y lo más destacable es quizá la protección que se brinda tanto a
trabajadores que laboren en establecimientos donde se encuentren detenidos,
recluidos o internos. Muchos de estos trabajadores sufren maltratos por parte de
sus superiores ya sea por su condición o aprovechándose de la víctima por su
cargo.
Se hace hincapié en la violencia contra la mujer en el inciso e y además se
agrega el maltrato que puedan sufrir los agentes del estado y del orden en pleno
ejercicio de sus funciones (algo que pasa muy seguido sobre todo con los
miembros de la Policía Nacional del Perú por parte de infractores, en especial
los de transito).
Al igual que en los artículos antes mencionados se agrega como agravantes la
presencia de niños , niñas o adolescentes al momento de cometerse el delito y
el accionar del victimario bajo efectos de alcohol y/o drogas.