El agua no sólo es parte esencial de nuestra propia naturaleza física y la de los demás seres
vivos, sino que también contribuye al bienestar general en todas las actividades humanas. El
agua se utiliza mayormente como elemento indispensable en la dieta de todo ser vivo y ésta es
uno de los pocos elementos sin los cuales no podría mantenerse la vida, es por eso que es muy
importante cuidarla y evitar su contaminación. Los organismos de todos los seres vivos están
compuestos de agua en una alta proporción, siendo que ésta es la que compone los músculos,
órganos y los diferentes tejidos. Por esto, sin agua no es posible la vida.
Los ríos, lagos y mares recogen, desde tiempos inmemoriales, las basuras producidas por la
actividad humana. El ciclo natural del agua tiene una gran capacidad de purificación. Pero esta
misma facilidad de regeneración del agua, y su aparente abundancia, hace que sea el vertedero
habitual en el que arrojamos los residuos producidos por nuestras actividades. Pesticidas,
desechos químicos, metales pesados, residuos radiactivos, etc., se encuentran, en cantidades
mayores o menores, al analizar las aguas de los más remotos lugares del mundo. Muchas aguas
están contaminadas hasta el punto de hacerlas peligrosas para la salud humana, y dañinas para
la vida.
La contaminación del agua como su nombre lo indica va resaltándose en todos los tipos de
agua del planeta, desde océanos, hasta lagos; ríos, entre otros tipos de aguas dulces y saladas
que se encuentran en diferentes regiones.
El agua es necesaria para cultivar y procesar alimentos, también brinda energía a la industria
con el objeto de satisfacer a una población en constante crecimiento. La gestión inadecuada de
las aguas residuales urbanas, industriales y agrícolas, conlleva a que el agua que beben cientos
de millones de personas se vea peligrosamente contaminada o polucionada químicamente
(Vazquez, 2016)
Según un artículo de la OMS en el 2015, se calcula que unas 842.000 personas mueren cada
año de diarrea como consecuencia de la contaminación del agua, de un saneamiento insuficiente
o de una mala higiene de las manos. Esta infección es altamente prevenible, pero sigue siendo
responsable de la muerte de 361.000 niños menores de cinco años, muertes que se podrían evitar
si se abordaran estos factores de riesgo.
La contaminación del agua también provoca que parte de los ecosistemas acuáticos terminen
desapareciendo por la rápida proliferación de algas invasoras que se nutren de todos los
nutrientes que les proporcionan los residuos.
Estas son algunas posibles soluciones para el problema de la contaminación del agua según
(UNESCO, s.f.)
Usar la bicicleta
La mejor manera de reducir la contaminación del agua es disminuyendo el uso de
combustibles fósiles y la mejor manera es hacerlo en bicicleta. A su vez, es una medida
que beneficia a nuestra economía porque reducimos los costos asociados a combustible,
estacionamiento y el movernos en bicicleta resulta entre 50 a 100 veces más barato que
movernos en un automóvil.
El crecimiento de la contaminación en el agua solo ha hecho que cada día mas nos
veamos afectados ya que esta afectación hace que cada uno de nosotros lo esté
desaprovechando el valioso recurso como es el agua y si no dejamos de echar basura o
desechos, nunca se va a lograr llegar al objetivo por el que muchos de nosotros hemos
tratado de luchar de alguna manera así sea con un poco de lo que hemos aprendido sobre
el cuidado ambiental.
El agua es el elemento fundamental para la vida, pues donde hay agua se pueden
desarrollar diferentes formas de vida, dada su importancia merece toda nuestra atención,
para crear una cultura del cuidado del agua, pues, aunque el agua nunca se acabará el
agua potable si se puede acabar.
La contaminación del agua es, por lo tanto, la adición de materia extraña perjudicial que
deteriora la calidad del agua, tanto para consumo humano y de animales como para la
vida marina y el regadío de tierras.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS