Las propiedades físicas de los suelos, determinan en gran medida, la capacidad de muchos de
los usos a los que el hombre los sujeta. La condición física de un suelo, determina, la rigidez y
la fuerza de sostenimiento, la facilidad para la penetración de las raíces, la aireación, la
capacidad de drenaje y de almacenamiento de agua, la plasticidad, y la retención de
nutrientes. Se considera necesario para las personas involucradas en el uso de la tierra,
conocer las propiedades físicas del suelo, para entender en qué medida y cómo influyen en el
crecimiento de las plantas, en qué medida y cómo la actividad humana puede llegar a
modificarlas, y comprender la importancia de mantener las mejores condiciones físicas del
suelo posibles.