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TEMA 3

ANÁLISIS DE DEFORMACIONES

3.1. Deformaciones.- 3.2. Analogía con el modelo tensional.- 3.3. Relación entre tensiones y
deformaciones; Deformaciones para esfuerzos uniaxiales, Deformaciones para esfuerzos
biaxiales, Caso general.- 3.4. Los límites del dominio elástico.- 3.5. Tensión equivalente.
Criterios de Rotura.-

3.1.- DEFORMACIONES
La deformación es, en un sentido generalizado, el cambio geométrico que experimenta un
cuerpo no rígido bajo la acción de acciones (cargas, efectos térmicos,..).
Esta deformación incluirá en general desplazamientos absolutos de sus partículas (corrimientos)
y desplazamientos relativos entre partículas dando lugar a la deformación propiamente dicha,
pues es la variación relativa de la distancia entre partículas la que origina las fuerzas
internas.(fig. 3.1).
De acuerdo con lo anterior, definimos:

Corrimiento o desplazamiento de un punto P, al vector que representa el desplazamiento


absoluto de un punto del sólido, (fig. 3.2).
PP' rP ' rP

A las componentes cartesianas del desplazamiento se les denomina como u, v, w funciones


continuas de (x, y, z).
Resistencia de Materiales

Figura 3.1. Concepto de deformación

Supondremos en nuestro estudio que tales desplazamientos son muy pequeños en


comparación con las dimensiones del resto del sólido, tal y como sucede en las estructuras
resistentes reales.
De igual forma, definimos;

Deformación longitudinal unitaria ( n), en un punto P según una dirección definida por el vector
normal n al alargamiento o acortamiento unitario que experimenta un segmento diferencial
orientado según n, (fig. 3.3).
dr ' dr
n
dr

Figura 3.2. Figura 3.3.

Su valor es adimensional, denominándose por x, y, z, a los alargamientos unitarios en las


direcciones de los ejes coordenados. Estas deformaciones son producidas por las tensiones x, y,
z respectivamente, y se relacionan con ellas como veremos en el apartado siguiente.

Un entorno paralelipédico del punto en el que sólo ocurran deformaciones x, según x,


quedaría deformado como se muestra en la figura 3.4(a) 1. De igual manera se representan
entornos paralelipédicos con deformaciones según y y z.

1 La figura 3.4(a) muestra un entorno parlelipédico deformado según x en el que se ha eliminado el corrimiento de
los puntos situados en la cara yz. En general un paralelepípedo en el que solo ocurre deformación según x, además,
podría estar desplazado y girado como si se tratara de un cuerpo rígido. Iguales consideraciones pueden hacerse
respecto de las figuras (b) y (c).
62
Tema 3 Análisis de deformaciones.

(a) (b) (c)


Figura 3.4. Deformación longitudinal unitaria

Deformación transversal unitaria ( 12) (o distorsión angular) en un punto P, correspondiente


a dos direcciones n1 y n2 del entorno de P mutuamente ortogonales antes de la deformación, a
la variación angular experimentada por estas direcciones durante la deformación (fig. 3.5).

12 ángulo dr1' , dr2' (3.3)


2

Figura 3.5

xy, xz, yz, representarán las variaciones angulares en un punto, según los segmentos orientados
con los ejes coordenados xy, xz, yz. Estas deformaciones se relacionan con las tensiones xy, xz,
yz respectivamente.

Un valor (radianes) positivo de distorsión angular indica una disminución o cierre de un


ángulo inicialmente recto.

En un entorno paralelipédico del punto representan lo indicado en la figura 3.6. Lo que nos
permite relacionar las distorsiones con los desplazamientos:

u v u v
xy lim
x, y 0 y x y x
u w u w
xz lim
x, z 0 z x z x
v w v w
yz lim
y, z 0 z y z y

63
Resistencia de Materiales

Figura 3.6. Deformación transversal unitaria.

Se puede demostrar que el estado de deformación en el entorno de un punto será conocido


cuando se conozcan respecto de un sistema de referencia dado Oxyz los alargamientos unitarios
x, y, z, y las distorsiones angulares xy, xz, yz. A estos seis valores se les denomina
componentes cartesianas de la deformación, siendo posible conocer la deformación en cualquier
dirección a partir de éstas de forma análoga a como ocurría para el estado de tensiones.

3.2.- ANALOGÍA CON EL MODELO TENSIONAL


La deformación en un punto de un sólido elástico admite la descripción con un modelo
matemático totalmente análogo al del estado tensional.
Tal estudio es algo más complejo que en el caso tensional. Nos limitaremos en este curso a
introducir los elementos del estado de deformación y a interpretar geométricamente sus
componentes intrínsecas.

Los seis valores adimensionales x, y, z, xy, xz, yz, definen totalmente la posible
deformación de un punto del sólido considerado, siendo sus componentes funciones de (x,y,z).
Dada la igualdad de los modelos matemáticos, todo lo analizado para tensiones, en cuanto se
refiere a componentes intrínsecas y valores y direcciones principales, es igualmente válido para
deformaciones, y la interpretación inmediata es la siguiente:

Vector deformación d: Representa la deformación total del punto P según la dirección n. No


tiene un significado físico tan directo como ocurría en el modelo tensional. Igualmente, este
vector se puede descomponer en dos componentes intrínsecas e según la normal n, y ½
perpendicular a n.

( ) es la deformación longitudinal unitaria en el punto P según la dirección de n, que será


alargamiento si > 0 y acortamiento si < 0.
(½ ) - deformación tangencial - corresponde al mayor semicierre de una pareja de
direcciones perpendiculares contenidas en el plano definido por d y n, siendo una de estas
direcciones el propio vector n.
64
tag2 xy

,2
2
1 2
xy

Tema 3 Análisis de deformaciones.

En la figura 3.7 se muestra el significado de el vector deformación d y sus componentes


intrínsecas. Sobre esta figura hay que destacar que:
a) /2, son adimensionales.
b) En la figura se han eliminado los posibles movimientos de cuerpo rígido (desplazamiento
y giro entorno a P del conjunto). Los segmentos con rayitas representan las posiciones
finales de los segmentos originalmente orientados según m y n, tras ser desplazados al
punto P y girados de manera equidistante entre n y m.
c) El vector deformación lo podemos apreciar mejor en la figura 3.7 b, en la que se ha
desplazado su origen haciéndolo coincidir con el extremo de un elemento lineal
infinitesimal de longitud “unitaria” n. Entonces (eliminando los movimientos de cuerpo
rígido de éste elemento), el vector deformación representa la deformación “relativa” del
elemento lineal que quedaría como n’.
d) Cualquier pareja de direcciones perpendiculares (n,s) distinta de (n,m) dará una menor
distorsión angular.

dad
1 uni

Figura 3.7.

Por otro lado existirán deformaciones principales e1, e2, e3,, que para el caso de esfuerzo
plano se obtienen que la expresión:
2
x 1 y 2
xy
1, 2
2 2 x y 2
De igual forma existirán las direcciones principales de deformación, o sea, aquellas que
definen la orientación de un entorno paralelipédico en el punto P considerado, que sigue siéndolo
después de la deformación: es decir que no presenta distorsiones angulares. Estas direcciones son
también ortogonales entre sí y se podría demostrar, que para el modelo de sólido elástico que
estudiamos, coinciden con las direcciones principales de tensión.
xy
2 2
tag 2
x y

También, análogamente a como ocurría en el estado de tensiones, la construcción geométrica


de Möhr sigue siendo válida para estados de deformación. Así, para el caso de que sea conocida

65
2xy

Resistencia de Materiales

una de las direcciones principales, podremos representar una circunferencia en un sistema de


referencia cartesiano ( , /2), donde los puntos de la circunferencia representan las
componentes intrínsecas de la deformación ( , /2), para una orientación n determinada
perpendicular a la dirección principal conocida. (fig. 3.8).

Figura 3.8.

En la figura 3.8, una distorsión angular positiva xy / 2 implica un cierre entre direcciones x
e y. No conocemos la orientación final de los segmentos según x e y, pero debido al cierre, el
segmento según x gira en sentido antihorario respecto al segmento y, y por tanto su distorsión
angular es negativa. Razonando de manera semejante la distorsión angular según y resulta
positiva.
x xy

2 2
y xy

2 2
Como se puede apreciar, la analogía entre tensiones y deformaciones consiste en que a cada
plano que pasa por un punto P del cuerpo le corresponde un vector tensión con componentes
y , y análogamente, a cada elemento lineal (dirección) que pasa por P le corresponde una
deformación de componentes y /2.

3.3.- RELACIÓN ENTRE TENSIONES Y DEFORMACIONES


Este apartado es la conexión entre los dos anteriores. Tensiones y deformaciones se
encuentran relacionadas mediante las constantes elásticas del material deducidas de los ensayos
de materiales (módulo de elasticidad longitudinal E, módulo de elasticidad transversal G y el
coeficiente de Poisson . Este último corresponde a la relación entre la deformación transversal
unitaria ( y o z) y la longitudinal en el ensayo de tracción simple ( y = z = - x).

Deformaciones en esfuerzos uniaxiales

Consideremos una barra prismática sometida a tracción. Como conocemos, la barra


experimenta un incremento de longitud l, y se produce un alargamiento unitario x, en la
66
xL 1
xn
ireco
:D L
x

Tema 3 Análisis de deformaciones.

dirección del eje longitudinal de la pieza.

Los ensayos demuestran que, al mismo tiempo se producen deformaciones transversales


y y z , iguales entre sí, de menor valor y de sentido contrario a x.

La relación entre tales deformaciones se expresa por medio de la expresión:


x 1
y z ; siendo
m m
Siendo un coeficiente adimensional denominado Módulo de Poisson.

Para materiales isótropos m = 4 y por tanto = 0,25


Para materiales de construcción = 0,3
Para fundición = 0,25
Para hormigón = 0,10

Recordando la Ley de Hook, podemos expresar las deformaciones transversales en función


de las tensiones:
x
y z
E
Una vez conocido el valor de , se puede calcular fácilmente el cambio de volumen que
experimenta una barra sometida a tracción, figura 3.9

P P

y
L z

x
L
Figura 3.9. Variación de volumen.

Antes de la deformación el volumen de la pieza sometida a tracción será:

V0 Lx Ly Lz

Producida la deformación, las dimensiones en las tres direcciones habrán variado de la


siguiente forma:

Direccion x: Lx x Lx Lx x Lx 1 x

Direccion y: Ly y Ly Ly x Ly 1 x

Direccion z: Lz z Lz Lz x Lz 1 x

67
1V 2x
0f

L
V
1
fxy V
10zx

Resistencia de Materiales

Dimensiones obtenidas teniendo en cuenta las relaciones entre las deformaciones unitarias:
x y z
x ; y x ; z x ;
Lx Ly Lz
Por lo tanto el volumen final valdrá:

2
V f Lx 1 x Ly 1 x Lz 1 x V0 1 x 1 x

Desarrollando y despreciando potencias elevadas de , se tiene:

V f V0 1 x 2 x

Por tanto la variación de volumen experimentada la podemos expresar como:

V
V V f V 0 V0
x 1 2 x 1 2 ;
V0
Todo lo indicado para tracción axial se puede aplicar al caso de compresión axial. El
acortamiento axial irá acompañado de dilatación lateral.

Deformaciones para esfuerzos biaxiales

Consideremos el caso de un elemento sometido a esfuerzos biaxiales cuyo análisis de


tensiones hemos efectuado en el tema anterior.

Al existir esfuerzos principales x, y en ambas direcciones principales X, Y del elemento,


la deformación en cualquiera de esas direcciones dependerá no sólo del esfuerzo en esa
dirección, sino también del esfuerzo en la dirección perpendicular.

Por efecto de la tensión x se tendrá deformación positiva en la dirección del eje X y


deformación negativa en las direcciones Y y Z, mientras por actuar la tensión y se tendrá
deformación positiva en la dirección del eje Y y negativa en las direcciones X y Z. Figura 3.11.

Se tendrá pues, en el caso de una placa delgada sometida a tracción biaxial, los valores que
se indican:
x y
x
E E
y x
y
E E

z x y
E
x x E y x E
x 2 y 2
1 1
Si la placa está sometida a compresión en cualquiera de las direcciones principales, se
pueden utilizar las mismas ecuaciones tomando o con signo menos.
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Tema 3 Análisis de deformaciones.

Caso general.

Para obtener las relaciones entre tensiones y deformaciones, basta con considerar un punto
interior de un sólido elástico rodeado por un paralelepípedo elemental orientado según las
direcciones principales de tensión, que para mayor simplicidad, y sin perdida de generalidad, se
puede imaginar obtenido por superposición de los tres estados tensionales simples indicados en
la figura 3.12.

Figura 3.12.

Cada uno de ellos reproduce el ensayo de tracción simple, y por tanto las deformaciones
serán:
I I I
Estado I: 1
1
2
1
3
1
E E E
II II II
Estado II: 1
2
2
2
3
2
E E E
III III III 3
Estado III: 1
3
2
3
3
E E E

El estado general de tensión corresponde a la suma de los estados I, II y III:

69
Resistencia de Materiales

1
1 1 2 3
E
1
2 2 1 3 (3.12)
E
1
3 3 1 2
E

Que es una relación lineal y constituye la “Ley de Hooke generalizada en ejes principales”.

Si se realiza un cambio de sistema de referencia a ejes cualesquiera x - y - z , se obtiene la


denominada LEY DE HOOKE GENERALIZADA que formalmente resulta ser la misma
relación anterior, pero para un sistema de ejes cartesianos cualesquiera:
1 xy
x x y z xy
E G
1 xy
y y x z xy
E G
1 yz
z z x y yz
E G
E
Donde G
21

3.4.- LOS LÍMITES DEL DOMINIO ELÁSTICO

Según sean las cargas que actúen sobre una pieza de determinado material, este se puede
encontrar en diferentes estados mecánicos. Si se aplica una carga, por ejemplo, a un material
metálico que, como sabemos, está constituido por unas agrupaciones de granos cristalinos de
los átomos, que forman redes cristalinas rigiéndose por determinadas leyes para cada metal,
se produce una alteración de la red cristalina. El equilibrio inicial se rompe apareciendo un
sistema de fuerzas interiores en correspondencia con las variaciones de las distancias entre
los átomos, estableciéndose lo que hemos denominado un estado tensional en
correspondencia con la deformación de la pieza.
Ahora bien, si tras la deformación producida por la carga en el metal sucede que, al
desaparecer la carga como causa de la alteración de la pieza, desaparece también el efecto, (es
decir, la deformación) y los átomos vuelven a ocupar sus posiciones iniciales, estaremos frente a
lo que hemos llamado deformación elástica, que existirá mientras subsista la carga y
desaparecerá cuando cese ésta.
Durante este proceso de carga, fuerzas aplicadas y deformaciones se rigen por la ley de
Hooke. Pero es evidente que si aumentáramos la carga también aumentarían los valores
característicos del estado tensional y, en consecuencia, la variación de las distancias entre los
átomos, pudiendo llegar a romperse los enlaces atómicos de la red cristalina.
Llegado a este punto puede suceder que: a) se mantenga la cohesión con la formación de
nuevos enlaces que sustituyan a los primitivos o que b) no se mantengan y entonces la rotura de

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Tema 3 Análisis de deformaciones.

los enlaces es definitiva. En el primer caso tenemos la deformación plástica que se caracterizará,
al haberse roto enlaces interatómicos, por deformaciones de tipo permanente y en el segundo
caso lo que tenemos es un fenómeno de rotura con separación del sólido en dos o más partes.
La iniciación de deformaciones plásticas ya se comprende que va a producir variaciones
cualitativas de las propiedades del material (aumento del límite elástico, etc.) y no digamos la
rotura de la pieza, que puede producir la ruina de la estructura de la que forma parte. Por eso es
de gran importancia averiguar como se producen y cuáles son las causas determinantes del
comienzo de las deformaciones anelásticas. Muchos han sido los especialistas que han
investigado estas cuestiones. El objetivo que nos proponemos en este apartado es exponer las
diversas teorías o criterios con los cuales se ha tratado de determinar la combinación de tensiones
y sus correspondientes deformaciones que agota el régimen elástico del material.

e
e

Figura 3.13. Figura 3.14.

En un estado tensional simple el problema se resuelve muy fácilmente: se hace el ensayo del
material a tracción y se obtiene en el diagrama de tracción el punto característico correspondiente
a la tensión límite lim para este material. Tomaremos como tal el limite elástico o tensión de
fluencia e.

En lo que sigue y cuando nos refiramos a materiales dúctiles consideraremos como


diagrama elasto-plástico ideal el representado en la figura 3.13, que no es sino la simplificación
al diagrama tensión-deformación visto en el tema 1 para el acero dulce, en el que se ha
despreciado la falta de linealidad entre p y e., se ha confundido e. con f. y se ha supuesto que
alcanzada la fluencia el material se plastifica a tensión constante.

Si se trata de materiales frágiles el diagrama tensión-deformación simplificado para el


ensayo de tracción monoaxial es del tipo indicado en la figura 3.14, que nos indica que el
comportamiento elástico se abandona de forma brusca, produciéndose la rotura sin fluir. Por
tanto, el valor correspondiente a la tensión límite lim para este tipo de material lo tomaremos
igual a la carga de rotura R.

Sometiendo a una probeta a un esfuerzo de tracción se crea en el material un estado


tensional simple. Si la carga aplicada a la probeta es gradualmente creciente, alcanzará un
determinado valor para el cual el material comienza a experimentar deformaciones plásticas
(suponiendo que sea material dúctil). Se dice que el material comienza a fluir.

71
Resistencia de Materiales

Figura 3.15

En un ensayo a tracción realizado en el laboratorio hay seis magnitudes que cuando empieza
la fluencia se alcanzan simultáneamente, tomando cada una de ellas los siguientes valores.
1. La tensión principal alcanza el límite de fluencia a tracción del material e. Esta
tensión principal es máxima pues las otras dos son nulas.

1 = e

2. La tensión tangencial máxima toma el valor max = e/ 2

3. La deformación longitudinal unitaria máxima alcanza el valor e = e/ E

4. La energía de deformación absorbida por unidad de volumen vale

1 e
= e e
2 2E
5. La energía de distorsión, esto es, la energía debida al cambio de forma, absorbida por
unidad de volumen, es.

1 2
d = e
3E
6. La tensión tangencial octaédrica alcanza el valor

2
o e 0,47 e
3
Estas seis magnitudes alcanzan los valores indicados simultáneamente en el ensayo de
tracción que origina en el material un estado de tensión simple. Pero si el estado tensional es
doble o triple, estos seis valores no se alcanzarán simultáneamente. Surge entonces la necesidad
de establecer (con vistas a definir un criterio de plastificación), si alguna de estas magnitudes
puede considerarse limitativa de las cargas que actúan sobre una pieza de material elástico para
que no se produzcan en la misma deformaciones plásticas.

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Tema 3 Análisis de deformaciones.

3.5.- TENSIÓN EQUIVALENTE

Existen infinidad de casos en los que un material va a estar sometido a un estado tensional
complejo. Como generalmente la información que disponemos de ese material es su límite
elástico e (y/o carga de rotura R), obtenido en el ensayo de tracción / compresión, sería
deseable poder establecer algún criterio (criterio de plastificación2), que nos permita encontrar
un estado de tracción monoaxial equivalente al estado triple que se considera y así poder hacer
posible la comparación de esta tensión equivalente con el límite elástico del material3.

Lo anterior quiere decir que el criterio de plastificación que mencionábamos en apartados


anteriores nos puede dar la tensión equivalente equ=f( 1, 2, 3). En este caso, la constante C
que igualábamos a la función f será el límite elástico del material en el ensayo de tracción e=C
(o de forma más general lim=C).

Varios son los criterios que se han propuesto para fijar la tensión equivalente, es decir, la
tensión que existiría en una probeta de ese material sometida a tracción monoaxial tal que tuviera
igual resistencia que el elemento del sólido elástico sometido al estado triple dado.

Si consideramos un material sometido a un estado tensional cualquiera, cuyas tensiones


principales en un punto son 1, 2 y 3 (con la convención 1 > 2 > 3), las tensiones
equivalentes, según los diversos criterios, son las siguientes:

2 En este curso también denominaremos a los criterios de plastificación como criterios de resistencia o criterios de
fallo. La razón es debido a que se entiende en la teoría clásica de Resistencia de Materiales que un elemento
resistente deja de resistir (se agota o falla) cuando llega al final del comportamiento elástico; bien por que comience
a fluir (comportamiento dúctil) o porque rompa (comportamiento frágil).

3 La comparación de un estado tensional triaxial con el monoaxial del ensayo de tracción mediante una tensión
equivalente (o de comparación), suele tener como objetivo primero el comprobar que los cálculos hechos en base a
un supuesto comportamiento elástico son válidos, y en segundo lugar establecer un coeficiente (o margen) de
seguridad frente al fallo. El fallo suele estar identificado por una tensión límite lim (o admisible adm),que se toma
igual al límite elástico en el ensayo de tracción / compresión para el caso de materiales con comportamiento dúctil, o
igual a la carga de rotura en caso de materiales con comportamiento frágil. Esto es debido a que en el ensayo
monoaxial de materiales frágil es muy fácil registrar cargas de rotura y muy difícil de registrar límites elásticos. Por
otro lado, en los ensayos de materiales frágiles los valores de límite elástico y carga de rotura son relativamente
cercanos.

73
Resistencia de Materiales

equiv
3

Si consideramos un material sometido a un estado tensional cualquiera, cuyas tensiones


principales en un punto son 1, 2 y 3 , las tensiones equivalentes, según los diversos criterios,
son las siguientes:
1. Criterio de la tensión principal máxima o de Rankine.

Según este criterio el fallo ocurre cuando en algún punto del sólido la tensión normal
máxima iguala a la que ocurre en el momento del fallo en el ensayo de tracción.

Para 1 >0 equiv = 1

Es decir, si la mayor tensión principal es de tracción y además ésta es la de mayor valor


absoluto, el campo elástico del material en el entorno del punto que se considera está
limitado por ella.

2. Criterio de la tensión tangencial máxima o de Tresca.

Este criterio establece que el fallo ocurre cuando la tensión tangencial máxima alcanza el
valor de la tensión tangencial máxima en el momento del fallo en el ensayo de tracción.

1 3
Para un estado de tensión dado max
2

e
En el ensayo de tracción max
2

equiv =2 max = 1 - 3

Este criterio es razonablemente aceptable para materiales dúctiles sometidos a estados de


tensión en los que se presentan tensiones tangenciales relativamente grandes.

3. Criterio de la energía de distorsión o de Von Mises


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Tema 3 Análisis de deformaciones.

Este criterio establece el fallo del material cuando el trabajo de distorsión alcanza el
mismo valor que en el momento del fallo en el ensayo de tracción.
Para un estado de tensión dado
2 2 2 1
d = 1 2 2 3 1 3
6E

1 2
En el ensayo de tracción d = e
3E

1 2 2 2
equiv 1 2 1 3 2 3
2

Numerosas experiencias realizadas con materiales dúctiles han puesto de manifiesto que
la teoría de Von Mises es la que explica de un modo más satisfactorio el comienzo de las
deformaciones plásticas en estos materiales sometidos a cargas estáticas.

4. Criterio de los estados límites de Mohr.

Establece que la acción anelástica en un punto de un cuerpo en el que existe un estado


tensional cualquiera comienza cuando entre las tensiones extremas 1 y 3 se verifique
1 k 3 equiv

Siendo k el cociente de los valores absolutos de los límites elásticos a tracción y a


compresión del material.
Este criterio es bastante adecuado para materiales frágiles, los cuales suelen presentar
diferente resistencia a tracción que a compresión. Cuando se aplica a materiales dúctiles
con igual resistencia a tracción que a compresión coincide con el criterio de Tresca.
La expresión que se ha indicado para este criterio es una simplificación del mismo. La
base del criterio es la siguiente:
Dado un estado tensional arbitrario supongamos que multiplicamos todas sus
componentes por un mismo número n, lo que equivale a decir que obtenemos un estado
tensional homotético al dado de razón de homotecia n. Si vamos aumentando el valor de
n llegaré un momento en el que el estado de tensión en el cuerpo es límite, es decir, o se
produce la rotura o aparecerán deformaciones plásticas. Figura 3.17.
Procedamos con el mismo material de la operación anterior a variar homotéticamente
diferentes estados de tensión en sus puntos hasta alcanzar el estado límite. Para cada uno
de ellos dibujamos el mayor círculo de Mohr correspondiente. La teoría de Mohr admite
la unicidad de la curva envolvente de los círculos y su independencia de los valores que
toman las tensiones intermedias. La forma de esta envolvente, llamada curva intrínseca,
es una característica mecánica del material que depende de las propiedades físicas del
mismo.

75
Resistencia de Materiales

Si se conoce la curva intrínseca de un material, la determinación del coeficiente de


seguridad de un estado tensional dado es inmediata: Dibujaríamos el círculo homotético
al de Mohr correspondiente al estado tensional dado, que sea tangente a la curva
intrínseca. La razón de homotecia es precisamente el coeficiente de seguridad, ya que
este se define como el número por el que hay que multiplicar la matriz de tensiones para
obtener la correspondiente a un estado tensional que fuera límite.
Debido a la dificultad de obtener con exactitud la curva intrínseca de cada material, nos
quedaremos con la solución aproximada de considerar como curva intrínseca las
tangentes comunes a los círculos límites correspondientes a los ensayos de tracción y
compresión simples. Figura 3.17b.

Figura 3.17 a. Figura 3.17b.

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