Anda di halaman 1dari 2

UNIDAD 3

Conceptualizaciones básicas
Investigar en teología
El conocimiento teológico es un tipo de conocimiento distinto al de las demás disciplinas sociales y
humanas. No es, como diría su etimología, un estudio sobre Dios ya que para la teología misma Dios
no es un objeto que pueda ser conocido sino más bien el sujeto del cual parte el dato revelado y es
en sí mismo el que determina los alcances y límites de la investigación teológica. Esto quiere decir
que no se puede objetivar a Dios o cosificarlo para convertirlo en algo que se pueda investigar, sino
que la teología parte de lo que Dios mismo ha comunicado a través de las fuentes de la revelación:
Sagrada Escritura, Tradición y Magisterio de la Iglesia. Este es uno de los principios que no se puede
separar del quehacer teológico y todo conocimiento, por tanto, está encaminado a develar el misterio
de su autodonación y revelación a los hombres.

Epistemología teológica
El primer paso para la construcción de una episteme propia de la teología lo dio Melchor Cano (1509-
1560) al proponer, en su obra De locis theologicis, una teoría sobre los lugares teológicos donde el
teólogo puede encontrar la materia prima para la elaboración del discurso teológico. Dicha tarea es
posible por los principios constitutivos de la teología contenidos en la revelación y la fe: Dios que
busca al hombre y le da su Palabra, se comunica con él y el hombre que responde a través de una fe
concreta y esta es la de la fe de la Iglesia orientada por la Tradición y el Magisterio. La teología por
tanto recoge esta doble vía de la Escucha de la Palabra (auditos fidei) y el momento positivo o racional
de dicha escucha (intellectus fidei) donde se aplica racionalmente al dato revelado para hacerlo
comprensible y conducirlo a la práxis que es un momento definitivo de la tarea teológica, la pastoral,
la vida moral y la evangelización por la cual la Iglesia permanece y realiza su identidad misionera.
Vease: [Clic para acceder al articulo]

El método teológico
En el numeral 16 del Decreto de la Optatam Totius, la Iglesia propone un camino (método) para la
formación sacerdotal en el ámbito teológico y pide de manera especial que se formen en los métodos
de la Sagrada Escritura recordando que es el alma de la teología y aclara que todo estudio debe estar
iluminado por la luz de la fe y bajo la guía del magisterio eclesial para que los estudiantes de teología
deduzcan la doctrina católica de la Divina Revelación. Este es solo un esbozo de la preocupación de
la Iglesia por dar orientaciones sobre el cómo de la teología y es precisamente en esta época donde
han surgido múltiples teologías donde se presenta con tanta urgencia la búsqueda de un método.
Incluso, cuando se dice “la teología” se está limitando en un sentido el avance que ha tenido la teología
puesto que hoy son varias las denominaciones que aparecen y se ha transitado hacia “las teologías”
que abarcan otras realidades y otros contextos. Lo mismo ha sucedido con el método del cual
podemos decir “los métodos” porque desde sus inicios la teología fue siempre plural, por ejemplo en
el mismo Nuevo Testamento se puede ver la preocupación gnóstica como una problemática a la que
Juan quiso responder con sus escritos, posteriormente el Evangelio llegó al mundo pagano y surgieron
otras inquietudes. Así se podría hacer un recorrido por la historia de la teología que es a la vez la
historia de cómo los hombres de fe, con una aplicación racional y juiciosa vieron la necesidad de
explicar el misterio contenido en la Revelación a los hombres de cada época y cada contexto iba
necesitando una nueva manera de hacer teología. Véase: Teologías y métodos de Olga Consuelo
Vélez, En

Anda mungkin juga menyukai