El cuento narra las aventuras de Pedro, un niño que vive en una casita en el bosque junto a su Abuelo. Un día, Pedro
abre la cerca que protege la casa y, desobedeciendo a su Abuelo, sale al bosque a jugar con el Pájaro y el Pato; entonces
hace su aparición un Gato que persigue al Pájaro. De repente, aparece el Lobo que, de un bocado, se traga al Pato.
Mientras Pedro intenta atrapar al Lobo con una cuerda, ayudado por el Pájaro, aparecen unos Cazadores con la intención
de matar al Lobo. Pedro los convence para que le dejen negociar con el Lobo. Este, al escuchar a Pedro, escupe al Pato y
todos se hacen amigos felizmente.
Los protagonistas están representados por uno o varios instrumentos cuyos sonidos nos hacen recordar el carácter de
cada personaje. Así, Pedro será interpretado por instrumentos de cuerdas (violines, violas, violonchelos y
contrabajos),el Pájaro será la flauta travesera, el Pato, el oboe; el clarinete representará al Gato, el fagot, al Abuelo, las
trompas, al Lobo y los Cazadores serán los timbales.
En este sentido, fue el niño terrible ( enfant terrible) de la música rusa de la primera década del siglo XX, no sólo en su
faceta de compositor, sino también en la de intérprete. Con fama de músico antirromántico y futurista, sus primeras
obras, disonantes y deliberadamente escandalosas, provocaron el estupor del público.
Un año después de los hechos de la Revolución Rusa, octubre de 1917, Prokofiev dejó su país para instalarse en
Occidente, en busca de la tranquilidad necesaria para componer. Japón, Estados Unidos y Francia fueron los países en
que se presentó, no siempre con fortuna. El poco éxito y la añoranza que sentía por su patria fueron dos de las razones
que le llevaron en 1933 a regresar de forma definitiva a su país.
El estilo de Prokofiev derivó entonces hacia posiciones más clásicas, con lo que el componente melódico de sus
composiciones ganó en importancia. Algunas de sus páginas más célebres datan de esta época: los ballets La Cenicienta
y Romeo y Julieta, inspirado en el Romeo y Julieta de Shakespeare, el cuento infantil Pedro y el lobo, las partituras
para dos filmes de Sergei Eisenstein, Alexander Nevski e Iván el Terrible, las tres «sonatas de guerra» para piano, la
Sinfonía núm. 5, la monumental ópera Guerra y paz... Falleció el mismo día y año que Stalin, el 5 de marzo de 1953.
Es una ocasión única para acercar la música a los niños y a sus familias, recomendándoles que disfruten de los cuentos
que se han traducido a obra musical, tanto en teatros como en casa.
ACTIVIDADES
Actividad 1 · La cubierta Observa la cubierta del cuento Pedro y el Lobo y dibuja lo que crees que va a pasar a
continuación.
Actividad 2 · Pictogramas
Ahora ya sabes que les pasó a Pedro y el Lobo. Seguro que eres capaz de completar el texto con los
pictogramas.