SEXTA CARTA: DE LAS RELACIONES ENTRE LA EDUCADORA Y LOS

EDUCANDOS

MICHELLE ALEJANDRA JIMÉNEZ CAVIEDES

ID: 374538

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

BOGOTÁ D.C

2014
 SEXTA CARTA: DE LAS RELACIONES ENTRE LA EDUCADORA Y LOS
EDUCANDOS

MICHELLE ALEJANDRA JIMÉNEZ CAVIEDES

ID: 374538

Proyección y participación comunitaria

NRC: 15151

Profesora:

EDITH MONTOYA MOSQUERA

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

FACULTAD DE EDUCACIÓN

LICENCIATURA EN PEDAGOGÍA INFANTIL

BOGOTÁ D.C

2014

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 RESUMEN

Freire habla de conocer-enseñar y aprender en el aula de clase, pero para esto

debemos darle libertad a los estudiantes y debemos tener respeto mutuo entre el
educador y el educando, el educador puede contar testimonios como base de lo que se
está proponiendo y con estos testimonios puede llegar a soluciones de dificultades o
problemas.

A veces los educadores hablan acerca de muchas conductas y reglas de la clase, pero
no las aplican, entonces estos estudiantes se sienten sin libertad de hacer las cosas y
la maestra se siente sin libertad bajo la rectoría del colegio, no es nada difícil de
comprender si hablamos de “no hagamos lo que no nos gusta que nos hagan”. Ahora
bien, Paulo nos habla de la situación del estudiante cuando su maestra hace todo lo
contrario a lo que dice, afirma que estos niños “captan” más fácilmente lo que la
maestra hace creando una desconfianza en lo que la maestra dice.

Algunos docentes se defienden con la frase “haz lo que digo y no lo que hago” es una
frase para reparar los errores que a veces se cometen en el aula de clase, pero resulta
inútil, ya que como docentes no deberíamos utilizar excusas sino tratar de hablar con
coherencia, sin contradecirnos con las acciones que podamos llevar a cabo, este tema
parece innecesario, pero en realidad es un punto demasiado importante ya que con el
simple hecho de que como docentes no actuemos como se debe genera un deterioro
en la relación entre los estudiantes y la educadora que hasta incluso puede llegar al
punto en que los estudiantes se revelen.

Por otro lado existe el maestro inseguro y débil el cual le queda grande la clase, el que
se deja irrespetar por los estudiantes y le da miedo los mismos, debemos recordar que
los estudiantes sienten el miedo de su educador y es por eso que algunos empiezan
actuar de manera irrespetuosa.

También encontramos a la maestra dispuesta a ayudar e intervenir en el cambio

positivo de sus estudiantes, una maestra que rete a sus estudiantes de manera humilde

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y les enseñe a confiar en si mismos. Los educandos son el puente para realizar la
intervención en la realidad a corto o largo plazo, la tarea de los educadores que nombra
Freire es conocer la realidad en la que vive cada estudiante y dar testimonios de
disciplina, de cuidado, de honradez, de salud etc. sin olvidar que cada estudiante
tiene su propia cultura.

Todos los educadores tienen algo nuevo que enseñar sin importar que contenidos le
correspondan a cada uno; matemáticas, español, geografía o historia, enseñemos el
valor de la democracia, de los valores, el combate contra el autoritarismo y los cambios
positivos y fundamentales del país, superemos junto a los infantes las injusticias
sociales.

Freire resalta una frase “Los más capaces organizan el mundo, producen; los menos
capaces, sobreviven” no seamos parte de los menos capaces ni permitamos que
nuestra futura generación de jóvenes pertenezca a los que sobreviven. Al dar
testimonio seamos objetivos y eficaces, aclarando que nadie es perfecto pero luchando
día a día se pueden superar algunas fallas o defectos. El resultado de estos efectivos
docentes se ve con la participación activa de los educandos.

Tenemos que tener en cuenta que los educandos pueden poner a prueba a sus
educadores sin buscar el fracaso de estos, sin embargo tenemos que reaccionar
auténticamente siempre, claro que no falta el estudiante que quiera hacer fracasar a su
docente, pero no tenemos que rendirnos. Nunca burlemos los derechos de los
estudiantes por más mínimos que sean, siempre permitamos que ellos curioseen,
pregunten, critiquen, duden etc. No nos sintamos mal si nos ponen a prueba.

Paulo Freire resalta la importancia de evaluarnos mutuamente como estudiantes y

docentes para luego observar, comparar, seleccionar y establecer relaciones.

Nunca dejemos de lado la alegría de vivir ni el derecho a soñar, seamos parte de la

solución y no nos deprimamos por las cosas o dificultades que pueden llegar a suceder
con los estudiantes, llevemos la marea y de una u otra manera hagamos que esta
cese.