¿Será posible la existencia de una moral única?

Para poder dar una respuesta a lo que nos plantea la interrogante, primero
definamos el concepto básico de lo que es la moral
La moral la podemos definir como el conjunto de normas y reglas de acción
destinadas a regular las relaciones de los individuos en una comunidad social dada.
Entonces si tomamos la definición anterior de lo que es la moral, el significado,
función y validez de esas relaciones, se ven obligadas a variar históricamente en
las diferentes sociedades, del mismo modo que unas sociedades suceden a otras,
dado el carácter cambiante de la misma vida del hombre.
Con esto se podemos decir que la moral cambia a través de los tiempos, o, dicho
de otra manera, que tenemos diferentes tipos de morales según el momento
histórico en que nos encontremos; así se puede hablar de una moral feudal, que se
da en la edad media, una moral burguesa en la sociedad moderna, etc.
El origen de la moral es la costumbre, arranca de las pautas vinculadas al grupo
social y a la tarea de supervivencia. Desde ahí los códigos de comportamiento han
ido evolucionando y necesitando de la razón y el entendimiento como nueva fuente
de la moral. En ese sentido hablamos de filosofía moral: ética. Ahora podemos
argüir que la ética siempre será una actividad teórica y la moral una práctica, más
conectada a la acción. Es curioso cómo Aristóteles distinguió entre virtudes éticas,
encaminadas hacia la consecución de un fin y orientadas al terreno de la práctica,
y las virtudes dianoéticas, puramente intelectuales.
La moral es en definitiva un hecho histórico, y, por tanto, la ética, como ciencia de
la moral, no puede concebirla como algo dado de una vez y para siempre, sino que
tiene que considerarla como un aspecto de la realidad humana que cambia con el
tiempo; y como tal, la moral se caracteriza por estar haciéndose constantemente,
produciéndose de una manera continua a través del tiempo.
Entonces si hacemos una pausa y analizamos lo antes planteado, podemos darle
una respuesta a la interrogante, que no podemos afirmar que exista una moral única
debido a que los hechos nos demuestran que como seres humanos nos rigen un
montón de factores que no nos permiten que practiquemos una única moral, si no
que siempre serán distintas entre las diversas sociedades.
Estamos tan divididos en el mundo en la forma de pensar, que nosotros mismos nos
estamos destruyendo. Un claro ejemplo muy cercano, fue el hecho que ocurrió con
las Amazonas, este incendio del cual todo mundo nos dimos cuenta es claro ejemplo
de cómo estamos divididos en la forma de pensar moralmente, porque para muchas
personas lo tomaron tan natural que se estuviera quemando ese montón de
bosques con toda esa flora y fauna sin hacer nada al respecto, hubo otras personas
que hicieron todo lo posible por minimizar el daño que estaba ocasionando el fuego.
Entonces analizamos este lamentable hecho, Como es posible que hay personas
que ocasionan estos incendios forestales, sin pensar en el daño que estamos
ocasionado para el mundo entero, porque como sabemos las amazonas es
considerado el pulmón o pulmones de nuestro planeta, entonces ahí es donde
reflexionamos que no todos practicamos la moral de la misma forma, lo que para
muchos es correcto, para otros no lo es.
Ahora planteado el caso anterior, hay un tema muy interesante que da mucho
debate a nivel mundial y que es digno recalcarlo en este tema. Estamos hablando
del aborto, como todos sabemos el proceso de abortar en sencillas palabras es
quitarle la vida un ser humano que está en proceso de desarrollo de su cuerpo.
Ahora surge el debate, ya que muchas personas avalan que el aborto sea
implementado de manera legal, pero también está la contraparte de personas que
no están de acuerdo. Ahora bien, analizando el caso desde el punto de vista moral,
se considera que este acto es incorrecto, ya que ante los ojos de Dios todos somos
iguales y además como sabemos, todos tenemos derecho a la vida, y desde luego
el feto se encuentra en su estado de formación, ya es considerado un ser humano
más.
Ahora concluyendo con el tema podemos darnos cuenta que no podemos decir que
existe una moral única, aunque hay que recalcar que todos practicamos una, pero
de diferentes formas o diferentes ideologías, lo que ocasiona que siempre se
generan desigualdades en el mundo.