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La función educativa
de los Comités Hospitalarios de Bioética:
una visión crítica
Martha Tarasco Michel
Resumen sicamente se carece de un número suficiente de
bioeticistas que trabajen en centros hospitala-
Se realiza una reflexión de la función formadora rios, y por ende quienes no tengan ningún cono-
de los Comités hospitalarios de Bioética, seña- cimiento del área, tendrán un interés limitado,
lando alguna parte de la problemática empírica o bien, no tienen la capacidad de detección de
de los mismos, y sus dificultades de aplicación. dilemas éticos ni de la forma de resolución de
En un segundo momento se señalan los princi- los mismos.
pios antropológicos que podrían guiar los Co-
mités para fundamentar la función docente, ya Para mejorar esta situación, la Comisión Nacio-
que la misma estará sujeta a tres factores: las nal de Bioética ha hecho grandes esfuerzos por
necesidades propias de cada hospital, la par- capacitar en esta transdiciplina con cursos en
ticipación de un bioeticista de profesión, y la línea, reuniones periódicas nacionales y regio-
sensibilización y experiencia, que con el tiempo nales, publicación de la Gaceta, y las videocon-
irá logrando tanto el comité como el personal ferencias, entre otros. Y, por otro lado, Universi-
hospitalario, hacia estos dilemas. Así mismo, dades públicas y privadas ofrecen diplomados,
se enfatiza en que los mismos no se conviertan especializaciones, maestrías y doctorados en
en meras instancias de cumplimiento. Con esos Bioética. Pero el número de estudiantes de esta
elementos se proponen criterios de acción de transdiciplina, es relativamente bajo, si se to-
los mismos. man en cuenta las necesidades del país.
Aunado a la falta de profesionales en bioética,
Palabras clave: antropología, formación, educación. los miembros de los Comités no reciben ningún
Introducción al problema tipo de prestación: no en todos los hospitales
se apoya con disminución de horas asistencia-
México tiene una gran fortaleza en materia del les, para poder sesionar; ni tampoco a los Bioe-
establecimiento de los Comités Hospitalarios de ticistas profesionales extra hospitalarios se les
Bioética, debido al decreto del 14 de Diciembre otorga un salario (2), aunque hayan invertido
delo 2011 en que se indica que deben contar a veces 5 a 6 años de su vida en estudiar una
con este tipo de Comités: “Todos aquellos esta- maestría y un doctorado, y su mera asistencia
blecimientos para la atención médica del sector les implique un gasto de transporte.
público, social o privado del sistema nacional de
salud a los que se refieren los artículos 69 y 70 Estas dos caras de la moneda sobre el bajo
del Reglamento de la Ley General de Salud en número de Comités Hospitalarios de Bioéti-
Materia de Prestación de Servicios de Atención ca registrados en el país, complica la función
Médica, referidos en la primera disposición ge- educativa que éstos deben ejercer en el centro
neral para la integración y funcionamiento de hospitalario. Ya que a menos que se cuente con
los CHB, de acuerdo al artículo 41 Bis fracción I algún profesional certificado de la Bioética, será
de la Ley General de Salud (LGS)” (1) un reto adquirir la autoridad moral sobre sus
Dichos Comités tienen dos funciones básicas: colegas, para impartir educación sobre el tema,
“… apoyo en la toma de decisiones [en] los dile- aunque haya hecho un gran esfuerzo de auto
mas bioéticos que surgen en la práctica clínica estudio.
y la atención médica, así como en la docencia”
(1).Sin embargo, el aprovechamiento de esta Otro problema en el ámbito de la enseñanza de
normativa por los hospitales es inferior a la de- la Bioética, es el contenido de lo que los Comi-
seada1. Y probablemente ello se deba a que bá- tés deben impartir (3). Hay que considerar que
en sí mismos no constituyen un departamento
1
Desde el 2013 a julio del 2017 existen 806 comités
hospitalario, y que las oportunidades de contac-
hospitalarios de Bioética registrados en la Conbioética
to simultáneo con todo el personal del hospital,
http://www.conbioetica-mexico.salud.gob.mx/des-
serán pocas: tal vez alguna sesión general del
cargas/pdf/Listados_Comites/2017/Registros_
Hospital, o algunas clases a los residentes e in-
emitidos_para_CHB_31_julio.pdf

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ternos. O durante el análisis de algún dilema, los niveles. Cuando se realiza el bien, se per-
con los servicios involucrados en el caso. Pero fecciona tanto el que lo realiza, como quien
finalmente el tiempo para cumplir con la función recibe la acción buena. El bien, así entendido,
de enseñanza será muy breve, y por ello el en- no es algo extrínseco al que realiza la acción.
foque educativo es primordial, ya que los profe-
sionales de la salud demandan mayor formación En este sentido el bien es universalizable. Las
en ética (4). acciones que se realizan trascienden al mero
actuar médico. Si se realiza una acción correcta,
Retos como el prohibir una intervención o autorizar un
curso de acción clínica, el beneficio se transmite
Tener grandes metas, pero estar aún en el ca- a todos los niveles, público y privado. De la mis-
mino de conquistarlas, es lógico. Ya desde 1983 ma forma en que el mal, también, daña ad intra
el Hastings Center cuestionaba si el desarrollo y ad extra, porque afecta tanto al que lo realiza,
de los Comités Hospitalarios de Bioética se es- como al que lo padece (12).
taba dando como lo habían propuesto desde el
inicio David Thomasma y Edmund Pellegrino (2, 3. La corporeidad humana no es un armazón
5). Es evidente que ninguna acción humana es exterior. La corporeidad es el ser del hombre.
perfecta, y que además las necesidades y cir- Dicho, en otros términos, no “tengo un cuer-
cunstancias cambiarán. Por ello, también el tipo po, soy un cuerpo viviente”. Este elemento
de modelo de los propios comités es variable. es esencial, ya que no se puede separar la
Pero las funciones de consultoría, que hoy quie- corporeidad del ser humano. La identidad
ren ampliarse a la consultoría individualizada en humana sucede en lo corpóreo. Por ello no
la cama del paciente, con bioeticistas a tiempo es correcto decir “yo hago lo que quiera con
completo (6 – 10), y las educativas, deberán se- mi cuerpo”, porque en realidad, significa que
guir ejecutándose. se pretende hacer lo que se quiera con uno
mismo. Sin embargo, la realidad demuestra
Por ello me permito proponer algunos concep- que no es ilimitado el poder o la factibilidad
tos transversales que deben ser vertidos en la que se tiene para ello. Además de que hay
enseñanza, independientemente de la temáti- deberes tanto personales como colectivos
ca requerida en cada Hospital. Los Comités de en el cuidado de sí. Otro ejemplo de este
bioética, para lograr una auténtica labor edu- tipo de ideas contra intuitivas, sería pensar
cativa deben de partir de varios supuestos y que el dolor que no se experimentara per-
principios. Esos principios por definición, no se sonalmente, sino que fuera el propio cuerpo
demuestran, sino se tienen en cuenta en toda quien lo percibiera de manera separada del
su labor. ser (“Yo no siento el dolor, sino mi cuerpo”).
Este tipo de expresiones son contrarias a re-
1. Insistir en el valor de la persona humana
tanto en los pacientes como en los médi- conocer que la persona es fin siempre, nunca
cos, es crucial para cualquier enseñanza de medio.
la Bioética. La persona vale por sí misma, Por este concepto sobre la corporeidad, no bas-
y así como no se discrimina por sexo, raza, ta la solicitud del paciente, para destruirlo: tal
religión, tampoco se le debe discriminar en sería el caso de la disposición de órganos vita-
cuanto a recibir todo el apoyo para su sa- les en un donador vivo, o de autorizar la expe-
lud, por edad, estado de salud, o estado de rimentación en sí mismo, solo por ser una deci-
conciencia. En realidad, por ninguna circuns- sión autónoma. Hay límites, que salvaguardan
tancia (11) la integridad y la salud. Porque se existe con y
2. Un segundo elemento fundamental es el re- a través del cuerpo. Por ello se cuida. La inter-
conocimiento de que el bien no se limita solo vención sobre la corporeidad debe de contar
al paciente. El bien, si es un bien humano con dos requisitos: por un lado intervenir con
verdadero y no aparente, permea en todos finalidad terapéutica, aún si se trata de ser su-
jeto de investigación, y por otro que en dicha

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intervención el riesgo siempre sea menor que el


beneficio esperado.
Además, es importante señalar que, el cuerpo “Las acciones que se rea-
tiene límites, no solo de inicio y de fín de exis-
tencia, sino también de funcionalidad. Una vi- lizan trascienden al mero
sión 20/20 no es de rayos X, ni de águila. Y ni
el atleta más veloz, puede superar velocidades actuar médico. Si se realiza
con las que todo su organismo no se ponga en una acción correcta, como
riesgo. Este concepto es particularmente impor-
tante que se transmita a los pacientes, ya que el prohibir una intervención
la medicina del deseo, promueve el concepto
contrario.
o autorizar un curso de ac-
4. La información médica es proporcionada
ción clínica, el beneficio se
para el bien del paciente. Se busca no impo- transmite a todos los nive-
ner, sino promover o exhortar la colabora-
ción del paciente. La autonomía debe de ser les, público y privado.”
entendida, en esos términos: es verdad que
el paciente puede oponerse con razones y
pedir explicaciones; y que el médico debe
tener su permiso, pero sin negar el daño o En este sentido, a efecto de perfeccionar el ac-
bien objetivo. Si un tratamiento es propor- tuar intra hospitalario, es conveniente que con
cionado, por ejemplo, en todos los elemen- cierta periodicidad se reexaminen críticamente,
tos, económicos, familiares, capacidad del y con realismo, los protocolos del hospital para
hospital, etc. en principio debe intentarse. eliminar muchos inconvenientes. Me permito, sin
Se pide la colaboración. Aunque es verdad embargo, recordar que el deber del Comité Hos-
que en última instancia alguien pueda rehu- pitalario de Bioética, no es hacer que se cumplan
sarse. El fin en sí mismo es convencer del las normas jurídico – administrativas. Para ello ya
bien o del mal a evitar (11). hay un departamento en cada Hospital. Aunque
nunca se debe ignorarlas, para estar dentro del
5. Y por último, un concepto crucial que hay marco legal; pero el objetivo de los comités es
que considerar y transmitir a través de los aconsejar y difundir el mayor bien ético (13).
Comités, es que al no ser equivalentes las
normas jurídicas con las éticas, a veces su- Respecto a algunas estrategias para la función
cede que algo es legal, pero no es ético, y docente, me permito sugerir tres ámbitos:
viceversa. En ese principio es crucial revisar
y conocer los elementos legales pertinentes La formación científica que va desde clases for-
a los posibles casos a tratar. Pero no basta males, sesiones hospitalarias, publicaciones ac-
con mantenerse dentro de lo jurídico: hay cesibles al personal hospitalario, etc.
que buscar el bien mayor, y no conformarse
con el mínimo común ético: porque se trata La difusión permanente que debe dirigirse no
de la aplicación de la ética a la vida de un solo al personal de salud, sino a todo el hospital,
paciente en lo particular. Ello no exime de y a los pacientes. Para ello las redes de comuni-
realizar una revisión profunda y constante, cación social son óptimas, pero en caso nece-
de las Normas Oficiales, porque también es sario, carteles, avisos a los teléfonos celulares,
conveniente, para saber los límites jurídicos. o pantallas electrónicas, si se cuenta con ellas,
permiten generar información breve, concisa,
clara y sobre todo frecuente.

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La formación extra hospitalaria (14), depen- considerar los elementos anteriores respecto a
diendo del tipo de hospital de que se trate, com- los casos que analicen y a la temática que en-
partirla con la institución a la que pertenezca, señen. También deben proponer acciones que
tanto a través de artículos, como de reportes, eleven la atención con los estándares éticos
por ejemplo. Pero sobre todo tener en cuenta adecuados.
que la Comisión Nacional de Bioética es el ór-
gano más interesado y que mejor podrá redis- Los Comités de ética requieren personal multi-
tribuir los logros de cada comité. Así es que ge- disciplinario para que participen quienes se invo-
nerar un acervo de documentos de enseñanza, lucran, en las decisiones clínicas. Y es convenien-
y compartirlos con la CONBIOETICA es realizar te que se elijan a las personas que dispongan de
un acto ético que redundará en el mayor bien cierto tiempo para la reflexión, o al menos, que
de todos. se les descargue de parte de sus responsabilida-
des para poder cumplir adecuadamente ese tipo
Ahora bien, la formación que debe dar cada de funciones. Sin embargo, la función educativa
comité, también se refiere a la formación de no puede recaer por igual en todos los integran-
hábitos (15 - 17). La transparencia en la in- tes de los comités. Deberá ser en primer lugar
formación de lo que hace el comité, por ejem- en los profesionales de la Bioética, si los hubiere,
plo, en particular si se ha cometido un error. y si no quien tenga mayor capacidad académica
Serán casos que deben informarse a todo el para lograr su auto estudio y tener la capacidad
personal hospitalario. Todos somos suscep- de transmitir dichos conocimientos. Pero la ins-
tibles de equivocarnos. Pero comunicarlo en titución hospitalaria, a su vez, debe fomentar y
primera persona, siempre genera confianza y apoyar el que los miembros de los comités que
respeto. En este sentido la función formativa aún no sean bioeticistas profesionales puedan
también debe abarcar la coherencia y hones- capacitarse en ello.
tidad. Desde la honestidad científica, hasta la
coherencia en la conducta con los pacientes y La educación o su papel educativo es de distri-
con los colegas. bución o propagación de una conducta ética y de
ejemplo. La difusión del conocimiento se refiere
En cuanto a la temática será muy variada, y a fomentar, explicar y dar a conocer los dilemas
dependerá de las necesidades de cada hos- éticos con los que se enfrenta, con el objeto de
pital, pero siempre hay que actualizar en sensibilizar a todos para mejorar su detección,
conceptos generales, dentro de los que es- estudio y sobre todo, prevención. Respecto al
tán contempladas las leyes y normativas, así ejemplo, porque los primeros modelos éticos
como los principios generales de la Bioética. serán los que emanen de los propios miembros
Y recordar que esta formación es cíclica, aun- permanentes del mismo. Si no se demuestra ca-
que es conveniente variar la estrategia. Ade- rácter ejemplar dentro y fuera del hospital, difícil-
más estarán los temas de bioética emergente, mente permeará el mejoramiento de todos en su
tanto de preocupaciones del propio hospital, conjunto. Pero además porque en la enseñanza
o como de algún avance biotecnológico, por de la Bioética es indispensable conocer los fun-
ejemplo. damentos teóricos, pero más aún la experiencia
práctica de vivir los principios éticos y una antro-
Conclusiones pología que sea coherente con dichos principios.
Los elementos antropológicos y éticos iluminan Los Comités deben ser transparentes y cuando
la razón, y de hecho siempre que se actúa cons- detecten debilidades para resolver yo implemen-
cientemente, se hace con base en una jerarquía tar alguna medida, desde un código de ética, una
de principios, aunque sea de manera subcons- mejora de consentimiento informado o cualquier
ciente. La función educativa de un Comité lleva otro punto de conflicto y mejora, deben pegun-
tiempo, es delicada y no es un mero trámite. Así tar y evaluar con otros fuera del mismo comité.
los Comités de Hospitalarios de Bioética deben

12 Gaceta
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Si bien la función de discernimiento sobre la 8. Morley G.Efficacy of the nurse ethicist in re-
conducta de algún miembro del hospital, puede ducing moral distress: what can the NHS
ser displicente, y sin duda es muy difícil, la fun- learn from the USA? Part 2. Br J Nurs. 2016.
ción educativa del comité es lo contrario: por- Feb 11-24; 25(3):156-61.
que para enseñar hay que aprender y el conoci-
miento siempre es placentero, y compartirlo lo 9. Spike JP Training in clinical ethics consulta-
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