Telepresencia consigue que pacientes reciban atención a

distancia
Cardiólogo de Talcahuano atiende desde su oficina a pacientes de San Carlos y Linares con tecnología de televideo.

por Adriana Tapia

El cardiólogo Francisco Albornoz está en una oficina del Hospital

Las Higueras, en Talcahuano. Edelmira, en una sala del Hospital
de Linares. Unos 200 kilómetros de distancia los separan, pero esa
mañana tendrán una consulta médica gracias a la telepresencia, un
sistema utilizado en el ámbito empresarial que de a poco se ha ido
incorporando al área de la medicina y con gran éxito.

Es el caso del programa telemédico Galileo, que se desarrolla este

recinto de la Región del Bíobío para la solución de patologías
cardiovasculares y que es posible gracias a la inversión de Cisco y Telefónica y el apoyo del servicio de salud de la zona. El
sistema cuenta con una pantalla plasma de 65" con tres cámaras, micrófonos y parlantes, y permite la comunicación en
tiempo real entre los hospitales de Talcahuano, Linares y San Carlos. En los dos últimos no cuentan con cardiólogos, por lo
que ahora los pacientes se ahorran extensos viajes y logran una atención oportuna. "En promedio, hemos bajado el
encuentro con el especialista (desde que se solicita la interconsulta) de un año a 54 horas", afirma Albornoz.

Edelmira ha tenido reiterados dolores en el pecho y siente que su corazón se acelera. En Linares, el médico general estimó
que la paciente necesitaba la opinión de un especialista y envió la interconsulta vía formato electrónico a Talcahuano, junto
con la orden para una serie de exámenes. En un par de días y desde el Hospital de Linares ella escuchó el diagnóstico del
cardiólogo que estaba en Talcahuano: no tenía arritmia y le recetó un medicamento para resolver la presión sobre el pecho.
"Para mí fue una sorpresa (esta consulta), no me imaginaba que sería así... Confío en el doctor que todo va a salir bien", dice
la paciente.

La experiencia

El proyecto que mezcla telepresencia, acceso electrónico a las interconsultas y exámenes con archivo histórico se
implementó en octubre de 2010 y hoy está en marcha blanca. En seis meses, los resultados son positivos: se mejoró la
eficiencia de las prestaciones médicas y se otorgan tratamientos más oportunos, gracias a la priorización de cada caso.
Albornoz lo resume así: "Actualmente, entre las interconsultas electrónicas y la telepresencia realizamos alrededor de 15
prestaciones diarias".

Aldo Onetto, gerente de desarrollo de educación y salud de Telefónica, dice que con esto se resuelve el problema de la falta
de especialistas en zonas remotas. "Nuestras características geográficas agudizan el problema, los especialistas no están
dispuestos a ir a vivir a zonas aisladas". Pero falta más, el sistema público de salud no reconoce aún como prestaciones
médicas las realizadas por telepresencia (para efectos de licencia, por ejemplo).

Las especialidades más beneficiadas con este tipo de tecnología son salud mental y derivados, imagenología e interpretación
de exámenes.