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Para otros usos de este término, véase Turner (desambiguación).
Síndrome de Turner, x
CIE-10 Q96
CIE-9 758.6
DiseasesDB 13461
MedlinePlus 000379
eMedicine ped/2330
MeSH D014424
Aviso médico
Índice
1Historia
2Etiología
3Cuadro clínico
o 3.1Aspectos psicológicos
o 3.2Enfermedades asociadas
4Diagnóstico
o 4.1Diagnóstico prenatal
5Tratamiento
6Véase también
7Bibliografía
8Referencias
o 8.1Notas
9Enlaces externos
Historia[editar]
El síndrome de Turner recibe su nombre en honor a su descubridor, el endocrinólogo Henry H.
Turner, que realizó una descripción por primera vez de las características de unas 7 mujeres
que captaron su atención en 1938. Sin embargo, no fue hasta 1959 cuando Ford y
colaboradores diagnosticaron la causa de estos síntomas mediante un cariotipo (observaron
tan solo un cromosoma X), demostrando así que el síndrome de Turner era resultado de la
ausencia parcial o total del segundo cromosoma sexual en los seres humanos.3
Etiología[editar]
En pocos casos, uno de los padres lleva silenciosamente cromosomas reorganizados que
pueden ocasionar el síndrome de Turner en una hija, pero esta es la única situación en la que
este síndrome es heredado. En general no es hereditario. No se conoce con exactitud cuál es
la causa del síndrome de Turner. A día de hoy, hay dos teorías: la teoría meiótica y la
mitótica:4
La teoría meiótica afirma que durante la formación del óvulo o
los espermatozoides (gametogénesis), alguno de ellos pudo haber sufrido un error y no portar
un cromosoma X. Si el óvulo o el espermatozoide han sufrido esta pérdida cromosómica, el
individuo contará con dicha ausencia (45, X0)
La teoría mitótica, por otro lado, postula que la pérdida de uno de los cromosomas no se
produce en los gametos (óvulo o espermatozoide) sino que tiene lugar más tarde, durante el
primer periodo del desarrollo embrionario (en las primeras semanas de gestación). Esto
explicaría el mosaicismo presente en muchas de estas pacientes; es decir, la existencia en un
mismo individuo de células con contenido genético y cromosómico diferente, teniendo
poblaciones celulares con un solo cromosoma X y poblaciones con dos de ellos (46, XX/45,
X0).
Las investigaciones más recientes apoyan la segunda teoría, y no la primera. En el 75% de los
casos, el cromosoma X ausente tiene origen paterno.
Cuadro clínico[editar]
Pies hinchados
Los rasgos principales son: baja estatura, piel del cuello arrugada (a causa del higroma
quístico en el periodo fetal), desarrollo retardado o ausente de las características sexuales
secundarias (mamas pequeñas), ausencia de la menstruación, ptosis palpebral, implantación
baja de orejas y de cabello, cubito valgo, tórax ancho.
Pueden tener problemas, como carencia de la mucosa natural que lubrica
la vagina, relaciones sexuales dolorosas, osteoporosis, coartación de aorta, válvula aórtica
bicúspide, riñón en herradura, hidronefrosis, agenesia renal, hipertensión
arterial, obesidad, diabetes o dislipemias, tiroiditis de Hashimoto, cataratas, artritis, escoliosis,
o tendencia a infecciones en el oído medio. No suele haber retraso mental pero sí dificultades
para las matemáticas y en el aprendizaje de la comunicación no verbal.
Se diagnostica, a veces, intraútero y más a menudo, al nacer, pero cuando no suele pasar
inadvertido es en la pubertad, cuando existe ausencia o retraso de la menstruación y se
presenta un retraso en el desarrollo de las características sexuales secundarias.
El examen físico revela genitales y mamas subdesarrollados, cuello corto, baja estatura y
desarrollo anormal del tórax (tórax plano y ancho en forma de escudo, con pezones
anormalmente distanciados).
El cariotipo muestra 45 cromosomas con un modelo de 45 X, o es decir, un cromosoma
sexual ausente.
El ultrasonido puede revelar órganos reproductores femeninos pequeños o
subdesarrollados.
El examen ginecológico puede revelar sequedad del recubrimiento de la vagina.
La hormona luteinizante sérica se encuentra elevada.
La hormona foliculoestimulante sérica se encuentra elevada.
Aspectos psicológicos[editar]
Las niñas con ST generalmente tienen una inteligencia normal, pero algunas pueden tener
dificultades de aprendizaje, especialmente en matemáticas. Muchas niñas también tienen
problemas con tareas que requieren habilidades especiales, como lectura de mapas u
organización visual. Los problemas auditivos también son más comunes en niñas con el
síndrome de Turner.5
5Sin
embargo, al medir el CI de un grupo de niñas afectadas por la enfermedad, este se
encontraba dentro de la normalidad pero en los límites inferiores. La base de este hecho se
encuentra en dificultades en el procesamiento perceptivo espacial (se cree que su origen
puede ser una disfunción del sistema nervioso), lo que da lugar a problemas con las
matemáticas y con el dibujo en la edad escolar, aunque estos problemas pueden subsanarse,
en parte, con esfuerzo por parte de las niñas, los padres y los profesores.
Por otra parte, es frecuente un retraso en su madurez emocional. Esta inmadurez está
claramente relacionada con la sobreprotección que reciben de sus padres y familiares, que se
debe en gran medida a que tienden a tratarlas sobre la base de su baja estatura, lo que las
perjudica haciendo que se mantengan inmaduras y dependientes. También es habitual que las
niñas tengan una autoestima baja, debido a los posibles signos físicos del síndrome
(especialmente la baja estatura).
Enfermedades asociadas[editar]
Anomalías renales6
Presión sanguínea alta (hipertensión)6
Obesidad6
Diabetes mellitus6
Infertilidad6
Tiroiditis de Hashimoto6
Cataratas6
Artritis6
Estenosis aórtica o estrechamiento de la aorta infantil6o ensanchamiento de la aorta en un
adulto en * Cardiopatía congénita6
Infecciones del oído medio6
Escoliosis (en la adolescencia)6
Diagnóstico[editar]
Tratamiento