TEMA:
ALUMNO:
DOCENTE:
ARQ. YULIANA YABAR.
CICLO: IX.
Un puente es una construcción que permite salvar un accidente geográfico o cualquier
otro obstáculo físico como un río, un cañón, un valle, un camino, una vía férrea, un
cuerpo de agua, o cualquier otro obstáculo. El diseño de cada puente varía dependiendo
de su función y la naturaleza del terreno sobre el que el puente es construido.
Su proyecto y su cálculo pertenecen a la ingeniería estructural, siendo numerosos los
tipos de diseños que se han aplicado a lo largo de la historia, influidos por los materiales
disponibles, las técnicas desarrolladas y las consideraciones económicas, entre otros
factores.
Son diversos los materiales que se han ido empleando en la construcción de puentes:
madera, piedra, hierro, hormigón, ladrillo, aluminio y actualmente se han empezado
a utilizar materiales compuestos formados por fibras de materiales muy resistentes
incluidos en una matriz de resina. Y es la resistencia específica del material la que
determina en mayor medida las posibilidades de las estructuras.
Los puentes pueden clasificarse en diferentes tipos, de acuerdo a diversos conceptos
como el tipo de material utilizado en su construcción, el sistema estructural
predominante, el sistema constructivo utilizado, el uso del puente, la ubicación de la
calzada en la estructura del puente.
En cuanto a los elementos que componen un puente se dividen fundamentalmente de
dos partes: la supra estructura y la infraestructura.
Los puentes deben ser inspeccionados con cierta regularidad (2 años) y se utilizan para
ello métodos tradicionales y medios específicos. Las técnicas no destructivas son:
endoscopía y cámara con control remoto, termografía, fotogrametría y topografía
convencional y ensayos no destructivos. La calidad de las estructuras y de los elementos
prefabricados como tubos, vigas, etc., se realiza mediante toma de muestras, ensayo
de materiales, control de fabricación, control en obra y pruebas en obra.
La historia de los puentes, es también la historia de la ingeniería estructural. El
problema de pasar un vano construyendo una estructura fija se ha repetido a lo largo
del tiempo con distintas soluciones. Según se fue avanzando en el conocimiento de los
materiales y la forma en que éstos resisten y se fracturan hizo que se construyeran cada
vez puentes más altos y con mayor vano y con un menor uso de materiales. La madera
quizás fuese el primer material usado, después la piedra y el ladrillo, que dieron paso al
acero y al hormigón en el siglo XIX.
La necesidad humana de cruzar pequeños arroyos y ríos fue el comienzo de la historia
de los puentes. Hasta el día de hoy la técnica ha pasado desde una simple losa hasta
grandes puentes colgantes que miden varios kilómetros y que cruzan bahías. Los
puentes se han convertido a lo largo de la historia no solo en un elemento muy básico
para una sociedad sino en símbolo de su capacidad tecnológica.
Los puentes tienen su origen en la misma prehistoria. Posiblemente el primer puente de
la historia fue un árbol que usó un hombre prehistórico para conectar las dos orillas de
un río. También utilizaron losas de piedra para arroyos pequeños cuando no había
árboles cerca. Los siguientes puentes fueron arcos hechos con troncos o tablones y
eventualmente con piedras, usando un soporte simple y colocando vigas transversales.
La mayoría de estos primeros puentes eran muy pobremente construidos y raramente
soportaban cargas pesadas. Fue esta insuficiencia la que llevó al desarrollo de mejores
puentes. El arco fue usado por primera vez por el Imperio romano para puentes y
acueductos, algunos de los cuales todavía se mantienen en pie. Los puentes basados
en arcos podían soportar condiciones que antes habrían destruido a cualquier puente.
Un ejemplo de esto es el Puente de Alcántara, construido sobre el Río Tajo, cerca de
Portugal. La mayoría de los puentes anteriores habrían sido barridos por la fuerte
corriente. Los romanos también usaban cemento, que reducía la variación de la fuerza
que tenía la piedra natural. Un tipo de cemento, llamado puzolana, consistía en agua,
lima, arena y roca volcánica. Los puentes de ladrillo y mortero fueron construidos
después de la era romana, ya que la tecnología del cemento se perdió y más tarde fue
redescubierta.
Después de esto, la construcción de puentes no sufrió cambios sustanciales durante
mucho tiempo. La piedra y la madera se utilizaban prácticamente de la misma manera
durante la época napoleónica que durante el reinado de Julio César, incluso mucho
tiempo antes. La construcción de los puentes fue evolucionando conforme la necesidad
que de ellos se sentía. Cuando Roma empezó a conquistar la mayor parte del mundo
conocido, iban levantando puentes de madera más o menos permanentes; cuando
construyeron calzadas pavimentadas, alzaron puentes de piedra labrada.
A la caída del Imperio romano el arte sufrió un gran retroceso, durante más de seis
siglos. El hombre medieval veía en los ríos una defensa natural contra las invasiones,
por lo que no consideraba necesario la construcción de los medios para salvarlos. El
puente era un punto débil en el sistema defensivo feudal. Por lo tanto muchos de los
que estaban construidos fueron desmantelados, y los pocos que quedaron estaban
protegidos con fortificaciones.
El diseño de cada puente varía dependiendo de su función y de la naturaleza del terreno
sobre el que se construye. Su proyecto y su cálculo pertenecen a la ingeniería
estructural, siendo numerosos los tipos de diseños que se han aplicado a lo largo de la
historia, influidos por los materiales disponibles, las técnicas desarrolladas y las
consideraciones económicas, entre otros factores. Al momento de analizar el diseño de
un puente, la calidad del suelo o roca donde habrá de apoyarse y el régimen del río por
encima del que cruza son de suma importancia para garantizar la vida del mismo.
Se trata del puente más viejo del Gran Canal de Venecia. Se terminó en 1591 y vino a
reemplazar el puente de madera que se derrumbó en 1524. Es un hermoso puente de
piedra compuesto por dos rampas que se encuentran en el medio en un pórtico que
miles de turistas visitan y fotografían en sus visitas a la ciudad de los canales.
Este es el puente más alto del mundo, con una altura de 343 metros. Se abrió en 2004
y recorre el valle del río Tarn, en el sur de Francia.