Sin embargo, confiamos en que Dios nos ha revelado una serie de principios sencillos que
nos pueden ayudar a vivir de una manera verdaderamente feliz.
Cabe resaltar que Dios no nos ha prometido una vida libre de problemas, pero sí una vida
feliz, aún en medio de situaciones difíciles, una felicidad real, obstinada y persistente. Una
felicidad que sabe que Dios puede transformar nuestro dolor en algo bueno. ¿Te interesa?
Por el contrario, si tú sueles tener una actitud positiva, esta serie puede ayudarte a crecer y a
enfocarte más en Dios.
Vamos a empezar por señalar que la felicidad no está en el poder, dinero, fama, estatus, etc.
Todos entendemos esto, pero en la práctica resulta que sí buscamos la felicidad en estas
cosas. Piensa, por ejemplo, ¿cómo te sientes cuando no tienes dinero o cuando alguien
habla mal de ti?
La felicidad tampoco está en el placer. El placer Eclesiastés 2:10-11 Todo lo que quise lo
sano contribuye a la felicidad, pero no es la hice mío; no me negué ningún placer.
felicidad. La búsqueda de placer como un Hasta descubrí que me daba gran
paliativo puede llevarnos a las adicciones, no a satisfacción trabajar mucho, la
la felicidad. recompensa de toda mi labor; 11 pero al
observar todo lo que había logrado con
¿Cuál ha sido tu experiencia respecto a buscar
tanto esfuerzo, vi que nada tenía sentido;
el placer?
era como perseguir el viento. No había
También podemos pensar que el secreto de la absolutamente nada que valiera la pena
felicidad está en enamorarse. Que cuando por en ninguna parte. (NTV)
fin encontremos a ese hombre o mujer especial,
entonces sí vamos a ser felices. Esto es un
engaño. Dios no puso a nadie en esta tierra para
hacernos felices, nuestra felicidad no descansa en los hombros de nadie, es únicamente
nuestra responsabilidad.
Necesitamos comenzar reconociendo que Dios es bueno y que Sus planes son buenos,
incluso en las situaciones difíciles y desagradables, Dios es bueno.
Vamos a aprender que la felicidad es algo dentro de nosotros, no está en las circunstancias
ni en otras personas, es una actitud.
Para reflexionar: