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Realidad Social, Liderazgo y Desarrollo sostenible en el Caribe Colombiano

Daniel Felipe Forero Molina

Ingeniería Industrial
Segundo Semestre (2)

dforero0105@gmail.com

Santa Marta, Magdalena


07-10-2019
El siguiente ensayo habla sobre cuestiones medioambientales, descuidos
significativos que el hombre y sus empresas han generado al ambiente. También
sobre el papel que juegan las universidades en cuanto a la resolución de estos
problemas que hoy, precisan de conseguir empresarios y educar profesionales con
una conciencia productiva ambientalmente sostenible.
Realidad Social, Liderazgo y Desarrollo sostenible en el Caribe Colombiano
Los asuntos referentes a la sostenibilidad del ambiente junto a las actividades
humanas y los modelos de desarrollo, son cada vez mas primordiales. Gracias al
cambio climático, la crisis alimentaria o al mal uso de los recursos naturales como
el agua, la pesca, la ganadería, etc. Hacen preferible el asunto de sostenibilidad
dejándolo en un primer plano de la actualidad social y del debate político en todas
sus escalas.
El cuidado del medio ambiente es primordial para garantizar el equilibrio natural del
mundo y por consecuente, una supervivencia y calidad de vida satisfactoria.
Entonces no cabe duda que, optimizar y conservar los recursos naturales con los
que contamos es de vital importancia. Por eso, las universidades de Colombia
deben estar enfocadas a responder las demandas que ofrece la sociedad,
convirtiéndose en fuentes de respuestas hacia esas problemáticas
medioambientales que hoy precisan de soluciones urgentes. Entonces la pregunta
es ¿Cómo el liderazgo transformador promueve un desarrollo sostenible basados
en la calidad de educación?
Las universidades como instituciones académicas que influyen en el entorno social
deben ser centros de referencia, donde aplicar políticas de gestión y toma de
decisiones, sean ejemplo y modelo para la sociedad del Caribe Colombiano. En
Santa Marta cada vez mas se avanza en la línea del liderazgo, para el desarrollo
sostenible de la calidad desde el enfoque humanista, constructivista social y
transformadora. Tanto así que, de hecho, después de un análisis urbano, realizado
por Findeter (https://www.findeter.gov.co/publicaciones/500002/que-es-findeter/) se ha
diseñado un plan para que Santa Marta, se pueda convertir en una ciudad sostenible
y no solo eso, sino que también pueda reafirmar su potencial ambiental, cultural y
turístico, con el objetivo de ser una ciudad mas competitiva, equitativa y
cohesionada.
Cualquier ciudad junto a sus habitantes, que se proponga una serie de principios
básicos, puede llegar a hacer factible la planificación de un proyecto como este para
que a largo plazo llegue a ser un ejemplo de sostenibilidad y competitividad. ¿Cómo
cuáles?: La competitividad, primordialmente para mejorar las condiciones de vida
de las personas, las medidas de control en las emisiones que se producen
relacionadas principalmente a la deforestación y la ganadería extensiva, incluso
también, podemos apoyarnos en las tecnologías de la información (TIC) para
disminuir esas brechas de conectividad y mejorar el acceso al conocimiento para
aquellas poblaciones mas vulnerables y así concientizar a todo el mundo sobre lo
importante que es una sociedad sostenible.
Pero pasa algo con la costa, y es que parte del problema yace en que hay una gran
falta de liderazgo en la región. La razón, es más que todo porque nuestros líderes
políticos colocan de primero sus intereses personales y van perdiendo el camino:
olvidan que como equipo suman, pero individualmente no son mas que un grano de
arena en el desierto. El economista Meisel Roca, también conocido como rector de
la Universidad del Norte en su libro llamado “Liderazgo y el futuro del Caribe
colombiano” señala un dato que llama la atención y es que antes Cartagena y
Popayán eran dos de las tres ciudades más poderosas del país antes de que Cauca
se dividiera en 13 departamentos, lo que quiero decir es que, esta crisis de liderazgo
que tiene el Caribe colombiano viene desde hace tiempo, esto no es algo nuevo. La
participación de la región Caribe resulta decisiva para definir gran parte del rumbo
del país.
Hablando un poco en el ámbito político, si nos vamos a las elecciones
presidenciales del 2014, la influencia de los ocho departamentos caribeños fue
decisiva. Si dividiéramos el país entre la región Caribe y el resto, podríamos ver
como Juan Manuel Santos pierde las elecciones en el resto del país. Fue gracias a
nosotros, la comunidad caribeña, y diciendo esto hago referencia a toda la región,
que obtuvo la victoria, le permitimos ser nuestro presidente. Sin embargo, es
evidente que nosotros tenemos dificultades para traducir ese liderazgo, esa
influencia electoral en el Estado colombiano. De manera mas clara, Colombia no ha
tenido un presidente de procedencia caribeña desde 1894. Ni porque tenemos el
21% de la población nacional.
Hoy en día cada departamento pelea por lo suyo, otorgándole mas poder al gobierno
central. El centralismo de que tanto nos quejamos, lo ayudamos a hacer entre
nosotros mismos, entre todas las regiones. Solo queda el anhelo de que los nuevos
jóvenes lideres que vienes mas adelante, tengan todo esto presente y, en lugar de
estancarse en lo de siempre, lo superen. Como conclusión pienso que se necesita
una renovación del liderazgo Caribe, que las futuras generaciones de dirigentes
tengan un peso electoral (en gobernaciones, alcaldías y congreso), con una visión
nacional y orientada por la ética de responsabilidad.

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