HUELLAS EN LA VÍA

Desde un punto de vista de la investigación judicial, las huellas son el resultado de la

aplicación de maniobras a lo largo de las fases de un siniestro, son los rastros dejados
por un elemento sobre una superficie durante su contacto y se presentan en estricto
sentido en cumplimiento del principio criminalístico de intercambio de características. Esto
permite determinar la posición, el momento de la colisión y la velocidad de los vehículos.

El principio de intercambio de características plantea que cuando dos cuerpos “A” y “B”
interactúan, se produce un contacto inevitable entre dos elementos distintos, lo cual
necesariamente genera una transferencia de elementos materiales, en muchos casos una
transferencia mutua o intercambio, de evidencias físicas tangibles.

HUELLAS DE ACELERACIÓN

Las huellas de aceleración se producen por el patinaje de la llanta sobre superficies con
elevada capacidad de adherencia, apreciándose en algunas ocasiones, restos de
materiales lanzados en sentido contrario a la marcha del vehículo. Generalmente su
registro sobre la vía inicia de forma recta, de color intenso y a medida que se aleja, su
culminación es irregular, tenue. Si bien no siempre posee estrías, el ancho coincide con el
del neumático y, habitualmente, son muy cortas, menores a un metro.

Se produce debido a que el conductor pisó a fondo el acelerador manteniendo a fondo el

embrage y cuando largo el pedal de embrague, se marca.

HUELLAS DE FRENADO

Las huellas de frenada se produce por el bloqueo de las ruedas, generando que los
neumáticos realicen contacto permanentemente en la misma zona de la banda de
rodadura, formando virtualmente que la energía cinética que durante el frenado se
transforma en trabajo, se convierta en calor en las zonas de contacto del neumático y la
superficie de la vía. Este calor localizado provoca un incremento sensible de la
temperatura en la zona, llegándose a ablandar el compuesto de caucho del neumático, y
ante la abrasión a que está sometido se desprenden partículas del mismo, depositándose
sobre el pavimento y formando así estas huellas.
Se trata de una huella oscura, que presenta estrías longitudinales en la misma dirección
de la huella (estas estrías se deben a las ranuras del dibujo del neumático). Su ancho
coincide con el del contacto del neumático con el piso y en cuanto a largo, alcanza más
de un metro. Comienza con una marcación suave, demarcación de restos de caucho, y
que va intensificándose en color al llegar a su culminación, una que tiene forma recta. Al
observar la huella de frenado, se puede apreciar si el labrado de las llantas está en
buenas condiciones dejando unas estrías en el interior de la marca de deslizamiento, o
por el contrario si el labrado está gastado se notará una marca completamente tatuada.

HUELLAS DE RODAMIENTO

Las huellas de rodamiento se producen por ruedas sin bloqueo, apreciable en superficies
blandas como tierra, nieve, arena, barro, entre otros, o por aquellas superficies que se
deforman al sobrepaso de un vehículo, dejando marcado el dibujo de la banda de
rodadura y su labrado. Igualmente se pueden observar sobre superficies duras siempre y
cuando exista humedad entre las dos superficies, sea agua o aceite entre algunos
ejemplos a mencionar.

Estas clases de huellas también pueden encontrarse en las ropas de las víctimas o en el
mismo cuerpo al momento de un aplastamiento o compresión.

HUELLAS DE EFRACCIÓN

Las huellas de efracción se producen cuando un elemento de mayor dureza actúa sobre
otro, creando impresiones, marcas de fricción u otras estriaciones. Estas huellas son
producidas por las partes bajas de metal, tal como el sistema de dirección y de
suspensión, y la delantera en otros casos. Generalmente se pueden encontrar en
colisiones frontales, centrales y excéntricas.

Para determinar si son de reciente data, los bordes son filosos con ángulos de 90°; son
de antigua data, los bordes tienen curvas, están desgastados y no tienen filo.

HUELLAS DE VELOCIDAD CRÍTICA EN CURVA

Las huellas de velocidad crítica en curva se produce cuando un vehículo toma una curva
y la velocidad sobrepasa los límites contemplados para el diseño de la vía debido a las
diferentes fuerzas que actúan sobre la masa, en estos casos incidiendo la fuerza lateral
(fuerza centrífuga). El peso del vehículo se traslada sobre las llantas externas a la curva
marcando un dibujo a partir del centro de la banda de rodadura hacia los hombros
externos de la llanta, en algunos casos se apreciará una línea delgada en curva,
dependiendo de la velocidad de ingreso o de maniobra.