En todo proyecto se trabaja con algunos factores sobre los que se tienen poder
de decisión (variables controlables) y otros sobre los que solo se pueden realizar
estimaciones (competencia, consumidores, entorno económico, político, legal).
De acuerdo a lo anterior podemos definir al análisis de sensibilidad como el
proceso de medición de variables que afectan el desarrollo del proyecto de
inversión. El análisis de sensibilidad es una técnica que permite evaluar el
impacto de las modificaciones de los valores de las variables más importantes
sobre los beneficios y consecuentemente sobre la tasa de retorno. Cuando se
evalúa un proyecto de inversión es complicado tratar de determinar que puede
ocurrir en el futuro, y como se van a comportar las distintas variables que forman
parte de este. De lo anterior surge la necesidad de construir diferentes
escenarios (situaciones), que pudieran presentarse durante la ejecución del
proyecto. Estos escenarios o situaciones se relacionan con aspectos
económicos, políticos, sociales, ambientales, legales que afectan de manera
directa la evolución del proyecto y que lo pudieran poner en riesgo. La
sensibilidad es un método que nos permite valorar una o varias opciones de
inversión, es sencillo y práctico, ya que nos permitirá conocer el riesgo y
beneficio que podría representar la modificación de ciertas variables en un
proyecto de inversión. El análisis hace alusión al método que nos permitirá
conocer que tan sensible es nuestro proyecto de inversión a los cambios que
suceden día con día en una economía globalizada como la nuestra.
Permite identificar las variables que tienen un impacto más fuerte sobre los
costos o ingresos permitiéndoles combinar las variables con el fin de obtener
resultados que optimicen la generación de valor en la compañía. Las maneras
en que podríamos realizar un análisis de sensibilidad son:
Otras variables que pueden generar incertidumbre son los ingresos, los costos
en los que se van a incurrir o la vida de la propuesta. En estos casos también se
puede determinar una curva que muestre la sensibilidad de la TIR o el VPN a
cambios en estas variables.
Observemos como las ventas representan una variable muy sensible, con una
variación del 20% a partir del segundo periodo el VPN que obtendríamos sería
de $ -28,687.63 pesos y por tanto se convertiría en un proyecto inviable.
Observemos qué sucedería si no alcanzamos un 17.5% de las ventas a partir del
segundo
Aquí nuestro VPN es de $5,797.14, lo que indica que si las ventas tienen una
variación a la baja, mayor a 17.5% a partir del segundo año, el proyecto dejará
de ser viable y perderemos dinero, pues nuestro valor presente resultará
negativo, tal como lo observamos en nuestro primer cálculo. Con estos ejemplos
podemos observar lo importante que resulta analizar la sensibilidad de nuestro
proyecto a la variación de las cifras con las que fue proyectado
Conclusiones