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Nicole Salazar Salazar

Impacto de la segunda guerra mundial en el derecho

La segunda guerra mundial dejó una cifra aproximada de 60 millones de fallecidos, tanto
civiles como militares. Durante el desarrollo de la misma se cometieron violaciones a lo
que hoy se conoce como derechos humanos. Se arremetió contra la vida, la libertad, la
salud, la integridad de la persona, mediante la ejecución de actos aberrantes. La paradoja
es que dichos actos estaban amparados en lo lícito, es decir, no contravenían con el
ordenamiento jurídico los países en los que se llevaban a cabo. Muchas veces era el
mismo gobierno quien dirigía la comisión de los mismos a través de sus instituciones.
Esto debido a que partidos polítcos con ideologías que incentivaban el ejecutar dichos
actos, como el nazismo en Alemania, el facismo en Italia, se hicieron con el poder. Tales
acontecimientos causaron grandes preocupaciones en la comunidad internacional y en
cada país propiamente dicho, por lo que generó un impacto en la regulación jurídica, tanto
en el ámbito penal como en el constitucional.

Si bien la declaración de Derechos de Virginia 1776 se considera como la primera

declaración de derechos humanos moderna de la historia, no fue sino hasta después
de la segunda guerra mundial en donde dichos derechos comienzan a tener relevancia
real y se comienza a utilizar la constitución para hacer cumplir los derechos civiles
básicos. Es la Declaración universal de derechos humanos 1948, proclamada en la
Asamblea General de Naciones Unidas y elaborada por representantes de todas las
naciones adscritas a la misma, la que establece un ideal común para todas las naciones
y con la que se da origen a la idea de derechos humanos fundamentales. Ellos se
definen como aquellos que tienen reconocimiento constitucional, y al ser esta una ley
fundamental y de mayor relevancia o jerarquía, el Estado debe velar por su protección
y cumplimiento. Además, impiden que el aparato estatal vulnere determinados
atributos de la persona humana. Se crea entonces la justicia constitucional, en donde
unos de los principales encargados de velar por ella serán los Tribunales
Constitucionales, que es un órgano del estado, independiente y autónomo,
cuya función, entre otras, es velar por la constitucionalidad de las leyes y decretos,

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asegurándose de que cualquier normativa se enmarque en los límites que la
constitución establece.

En cuanto al ámbito penal, son 17 los países que deciden formar una comisión de
crímenes de guerra para condenar a los culpables, mediante ello se da la consolidación
del concepto de “crímenes lesa humanidad”. En 1998, 160 países decidieron
establecer la Corte Penal Internacional que es un tribunal de última instancia para el
enjuiciamiento de crímenes graves internacionales, como el genocidio, los crímenes
de guerra y los delitos de lesa humanidad, a parti de lo contemplado en el “Estatuto
de Roma”. La Asamblea de los Estados Partes es su órgano legislativo y está
encargada de supervisar su gestión.

A partir de la declaración de los Aliados 1943, se dio el Acuerdo para la persecución

y castigo de los grandes criminales de guerra del eje europeo, mediante la Carta de
Londres 1945. Con ello se dio la creacicón de los tribunales militares internacionales,
Nuremberg y Tokio. El Tribunal de Nuremberg de crimenes de guerra enjuicio a 19
importantes criminales de guerra. Ello supuso considerar a los individuos como
sujetos de derecho internacional y, en consecuencia, penalmente responsables por los
crímenes internacionales que hubieran cometido y admitir la existencia de una suerte
de ley internacional por encima del derecho positivo, de modo tal que los crímenes
cometidos, en tanto delitos contra la humanidad, debían ser castigados a pesar de la
inexistencia de una ley previa. El tribunal declaró culpable con condena de reclusión
perpetua a cuatro jueces del Tercer Reich, fundamentándose en que se deben hacer
responsables los que promulgan leyes que tenían como propósito el exterminio de
personas inocentes.

Así mismo, las Naciones Unidas han realizado un importante esfuerzo en la protección
de derechos humanos mediante la persecución de los “crimenes contra la paz”, que se
definen como aquellos que tienen como objetivo la dirección, preparación,
desencadenaiento o ejecución de una guerra de agresión o que contraviene tratados,
acuerdos y garantías internacionales.

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Para asegurar la defensa de los derechos humanos en los diferentes estados, se crean
mecanismos supranacionales. Uno de ellos es la firma de tratados internacionales
como el “Pacto internacional de derechos civiles y políticos” en 1966, “La
convención americana sobre derechos humanos: Pacto de San José de Costa Rica” en
1978, a los que las naciones se suscriben y por los que pueden participar de un proceso
judicial, ser demandados y recibir una sanción en caso de incumplimento. Estos son
vinculantes en cada país y tienen un nivel de jerarquía igual al de la constitución o ley
fundamental.

Finalmente, se crean organismos como la “Corte Europea de derechos humano” y

“Corte Interamericana de Derechos humanos”. Esta última es un órgano judicial
autónomo de la Organización de los Estados Americanos. Tiene atribuida, junto con
la “Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, la competencia para conocer de
los asuntos relacionados con el cumplimiento de los compromisos contraídos por los
Estados Parte en el tratado “Convención americana de derechos humanos.”. La
comisión actúa como un sistema de control y evaluación, mientras que la corte se
encarga de tomar una decisión y sentenciar.

En conclusión, el impacto de la Segunda Guerra Mundial fue realmente relevante para

el derecho internacional público y el perfeccionamiento del ordenamiento jurídico de
cada país a fin de salvaguardar la dignidad humana y buscar la paz social que se
fundamenta en la justicia. Gracias a ello se pudo crear y difundir a nivel global el
concepto de derecho fundamental, así como la defensa de los mismos a través de la
justicia constitucional y la institución del Tribunal Constitucional. Tuvo relevancia en
el ámbito penal gracias a la creación de la CPI, para que los crímenes de guerra y lesa
humanidad no queden impunes y a fin de utilizar el derecho penal como un medio
disuasorio al inicio de una guerra. Permitió la creación de diversos organismos
internacionales como la ONU y mecanismos como los tratados internacionales que
permiten el control o límite de poder que cada gobierno pueda tener para evitar la
violación de los derechos humanos.