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Situación de la RSE en Latinoamérica

Hacia un desarrollo sustentable

Situación de la RSE en Latinoamérica

Hacia un desarrollo sustentable

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 URUGUAY

Situación de la RSE en Latinoamérica

Hacia un desarrollo sustentable

Elaborado por

Coordinado por

Septiembre 2005

ISBN 956-8388-02-8
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 URUGUAY

Esta publicación ha sido elaborada por la Red Interamericana de RSE, alianza de instituciones
académicas y de investigación vinculadas a esta temática, con el propósito de responder a su misión
de generar y difundir conocimientos y capacidades para acelerar la adopción de una cultura de
Responsabilidad Social Empresarial, que contribuya a la competitividad y al desarrollo sostenible.
Se agradece la invaluable colaboración del Ministerio de Economía de Holanda, que permitió
desarrollar los informes de los diez países que incluyó este estudio: Argentina, Brasil, Chile, Colombia,
Costa Rica, El Salvador, México, Panamá, Perú y Uruguay.

La Red Interamericana de RSE cuenta con el apoyo de la Fundación Interamericana (IAF).

Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 URUGUAY

Índice

Colaboradores 9

Prólogo 11

Presentación 13

Argentina: un país que despierta a la RSE 15

La ciudadanía: por una gestión responsable 17
El Estado: tareas pendientes 18
Los empresarios: mayor conciencia social 18
La sociedad civil: presión desde abajo 19
Beneficios y oportunidades 19
Desafíos 19
Reflexiones 21
¿En qué estamos los argentinos? 21

Brasil: compromiso con el desarrollo sustentable 23

El Estado: desafíos y pobreza 25
Los empresarios: agentes activos del desarrollo 25
La sociedad civil: generando puentes de confianza 26
Reflexiones 28
¿En qué estamos los brasileños? 28

Chile: la RSE empieza por casa 31

La ciudadanía: por un mejor clima laboral 33
El Estado: reorientando su rol 34
Los empresarios: creciente adopción de la RSE 35
La sociedad civil: fomentando una cultura solidaria 35
Beneficios y oportunidades 36
Desafíos 36
Reflexiones 37
¿En qué estamos los chilenos? 38

Colombia: de la filantropía a la estrategia 39

La ciudadanía: conforme con el asistencialismo 41
El Estado: acciones concretas 42
Los empresarios: RSE y fundaciones 42
La sociedad civil: rol activo 42
Beneficios y oportunidades 43
Desafíos 43
Reflexiones 44
¿En qué estamos los colombianos? 44
 URUGUAY

Índice

Costa Rica: los cambios están en camino 45

La ciudadanía: receptora de obras sociales 47

El Estado: escasa participación 48
Los empresarios: por debajo de la ley 48
La sociedad civil: relaciones sustentables 48
Beneficios y oportunidades 49
Desafíos 49
Reflexiones 50
¿En qué estamos los costarricenses? 51

El Salvador: en la ruta hacia la competitividad 53

La ciudadanía: sus nuevas exigencias 55

El Estado: carencia de incentivos 56
Los empresarios: las tareas del buen vecino 56
Beneficios y oportunidades 57
Desafíos 58
Reflexiones 58
¿En qué estamos los salvadoreños? 59

México: dejando atrás la filantropía 61

La ciudadanía: fuerte asociación de RSE y compromiso con la comunidad 63
El Estado: el freno de la ley 64
Los empresarios: pasando de la filantropía a la RSE 64
La sociedad civil: impulsando una cultura filantrópica 65
Beneficios y oportunidades 65
Desafíos 65
Reflexiones 67
¿En qué estamos los mexicanos? 67

Panamá: familiarizándose con el concepto RSE 69

La ciudadanía: atisbos de valoración 71
El Estado: promoviendo el voluntariado 72
Los empresarios: apoyo a causas sociales 72
La sociedad civil: decisiones responsables 73
Beneficios y oportunidades 73
Desafíos 73
Reflexiones 74
¿En qué estamos los panameños? 75
 URUGUAY

Índice

Perú: incorporando un nuevo enfoque de negocios 77

La ciudadanía: más exigentes 79
El Estado: responsabilidad voluntaria 79
Los empresarios: confusión entre RSE y filantropía 80
La sociedad civil: a favor de la RSE 81
Beneficios y oportunidades 81
Desafíos 81
Reflexiones 82
¿En qué estamos los peruanos? 83

Uruguay: promoción y creciente adopción de la RSE 85

La ciudadanía: RSE y apoyo a la comunidad 87
El Estado: un desempeño discreto 88
Los empresarios: asimilando el concepto 88
La sociedad civil: positiva influencia 89
Beneficios y oportunidades 89
Desafíos 89
Reflexiones 91
¿En qué estamos los uruguayos? 91
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 URUGUAY

Colaboradores

Alicia Rolando IARSE – Instituto Argentino de Responsabilidad Social Empresaria

Alejandro Roca Argentina

Giuliana Ortega UNIETHOS

Tarcila Reis Brasil

Andrea Henríquez VINCULAR – Pontificia Universidad Católica de Valparaíso

Karina Toledo Chile
Nelson Núñez

Claudia Cárdenas Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas – Pontificia Universidad

Guillermo Galán Javeriana
Colombia

Miranda Orantes CIDH – Centro Internacional para el Desarrollo Humano

Jorge Nowalski Costa Rica

Paola Cristiani FUNDEMAS – Fundación Empresarial para la Acción Empresarial

Rhina Reyes El Salvador

Lizeth Leal EGADE – Escuela de Graduados en Administración y Dirección de Empresas

Gerardo Lozano Instituto Tecnológico de Monterrey
México

Lourdes Pérez Excelencia Empresarial

Panamá

Pedro Franco Universidad del Pacífico

Perú

Eduardo Shaw DERES – Desarrollo de la Responsabilidad Social Empresaria

Uruguay
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 URUGUAY

Prólogo

En la era de la globalización de los mercados, el rol de las empresas ha dejado de delimitarse a la producción de bienes y
servicios, para evolucionar hacia una visión integral basada en la construcción de valor para sus distintos grupos de interés
o stakeholders, sin cuyo apoyo la organización dejaría de existir.

Se trata de un cambio en el paradigma de intereses de la empresa que ya no sólo debe dar resultados y satisfacciones a
corto plazo a sus accionistas, sino al conjunto de actores sociales: trabajadores y sus familias, sociedad civil, consumidores,
sector público, proveedores, la sociedad en su conjunto, etc. Esta nueva manera de “ser” empresa se conoce como
Responsabilidad Social Empresarial (RSE).

La motivación de esta actitud empresarial reemplaza el enfoque tradicional de carácter filantrópico, vinculado a apoyar a la
comunidad mediante acciones caritativas, por una nueva mirada, donde la RSE es parte integral de la estrategia de negocios
y, por lo tanto, una inversión que debe ser planificada y evaluada, con el fin de generar un retorno adecuado, contribuir al
logro de los objetivos estratégicos de las empresas y, simultáneamente, satisfacer las expectativas de sus stakeholders. En
definitiva, es una propuesta ganar-ganar.

El proceso de apertura comercial de América Latina implica un gran desafío en términos de RSE. Los mercados desarrollados
están mostrado exigencias progresivas a las importaciones latinoamericanas, impulsados por el creciente protagonismo de
sus consumidores, a quienes ya no les bastan las variables de precio y calidad a la hora de seleccionar un producto para
su consumo y al optar por un servicio. Por ello, integrar la RSE a la gestión estratégica de las empresas de la región se
convierte en un imperativo de competitividad.

Para lograr este objetivo, se hace necesario conocer el estado de desarrollo de la RSE en Latinoamérica, a fin de contar con
un marco que rescate la diversidad que existe en torno a esta temática en cada país, y así poder definir estrategias que
permitan acelerar el proceso de adopción. Este estudio corresponde a la actualización de una investigación anterior de Vincular,
“Situación de la RSE en Latinoamérica y el Caribe”, desarrollada en el año 2003 por encargo del Banco Interamericano de
Desarrollo.

Este estudio, denominado "Situación de la Responsabilidad Social Empresarial en Latinoamérica: Hacia un Desarrollo Sustentable”
fue elaborado en conjunto por algunas de las principales instituciones especializadas en la temática de Argentina, Brasil,
Colombia, Costa Rica, Chile, El Salvador, México, Panamá, Perú y Uruguay, miembros de la Red Interamericana de RSE. Los
resultados que se presentan buscan contribuir al fomento de una cultura de la RSE en el continente, que junto con permitir
incrementar la competitividad de las empresas, beneficie a la sociedad en su conjunto.

Agradecemos la invaluable colaboración del Ministerio de Economía del Reino de Holanda, que ha permitido desarrollar esta
investigación, que aspiramos se convierta en la base de un trabajo sistemático de investigación y desarrollo de la Responsabilidad
Social Empresarial en la región.

Dante Pesce
Director Ejecutivo
Vincular – Responsabilidad Social Empresarial
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso – Chile
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable

Presentación
En Latinoamérica coexisten variados matices respecto a
la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), en directa
relación a las prácticas corporativas más recurrentes,
historia local, nivel de exigencia de los consumidores, etc.
La tendencia que se observa en la mayoría de los países
analizados, demuestra que aún prevalece un enfoque de
responsabilidad social más asociado a la filantropía, que
tiene sus orígenes, principalmente, en una fuerte influencia
de la religión católica.
No obstante, existen países que demuestran significativos
avances en materia de adopción del concepto de RSE,
asociado a mayor calidad y competitividad. Esto,
básicamente, como consecuencia de presiones o incentivos
de mercado (tratados comerciales, exigencias de clientes),
como también una mayor conciencia de los beneficios
que generan la estabilidad y la paz social.
Fue posible comprobar que el sector privado, ha ido
tomando conciencia de la necesidad de preocuparse por
responder a las necesidades sentidas de la población y
contribuir a aumentar su calidad de vida, pues requiere
de sociedades estables para producir y prosperar.
Un desafío fundamental resulta ser la plena incorporación
de las PyMEs a la RSE, las que juegan un rol fundamental
en la economía y sociedad de la región, especialmente
como fuentes de empleo y generadoras de riqueza. Cabe
destacar al Banco Interamericano de Desarrollo, que a
través del Fondo Multilateral de Inversiones, está impulsando
una serie de proyectos en la región, tendientes a instalar
la RSE en las PyMEs. Los primeros resultados son
alentadores, lo que está contribuyendo a derribar el mito
de que la RSE es una temática exclusiva de las grandes
empresas.
En este contexto, es posible reconocer que no sólo el rol
de la empresa ha cambiado en la sociedad. El gobierno
y la sociedad civil también están tomando conciencia de
la necesidad de trabajar mancomunadamente con las
empresas a fin de alcanzar el desarrollo. Se tiende a
instalar cada vez mejor el concepto de las alianzas de
colaboración público-privada.
Una señal de mercado muy relevante es el desarrollo de
la Norma ISO 26000 de Responsabilidad Social, que
permitirá hacer converger la multiplicidad de estándares
existentes y facilitar su implementación en las empresas.
La Red Interamericana de RSE cumple un rol relevante en
URUGUAY
este proceso, ya que participa como institución experta,
contribuyendo a expresar la voz del continente ante esta
nueva ISO.
Si bien los avances son alentadores, queda mucho camino
por recorrer. Existen y se visibilizan iniciativas exitosas
que dan cuenta de los beneficios que conlleva la adopción
de RSE, también se cuenta con instituciones que apoyan
su desarrollo, las cuales se han unido con sus pares
latinoamericanos para desarrollar iniciativas conjuntas,
como esta investigación, lo que permite vislumbrar un
creciente avance de esta temática.
Bajo la autoría de instituciones especializadas en la
temática de RSE de las Américas, en las páginas siguientes
se presentan los informes de diez países Latinoamericanos
participantes en este estudio: Argentina, Brasil, Chile,
Colombia, Costa Rica, El Salvador, México, Panamá, Perú
y Uruguay. En estos se da cuenta de las iniciativas
emblemáticas de RSE; la visión de los principales actores
de la sociedad (ciudadanía, Estado, empresarios y sociedad
civil); así como los desafíos y oportunidades en materia
de RSE. Además, se presentan las instituciones que
promueven y contribuyen al desarrollo de esta temática
en el continente.
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Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 ARGENTINA
Un país que despierta a la RSE

Muchas compañías han comprendido

la necesidad de asumir una actitud
proactiva en materia de
Responsabilidad Social Empresaria
frente a la acuciante realidad
económica de amplios sectores de
la población. Esto marca el despertar
de Argentina a esta temática.
Argentina
 Argentina

LA CIUDADANÍA:
POR UNA GESTIÓN RESPONSABLE

Hace ya algunos años que la ciudadanía está haciendo

explícita la falta de confianza en las instituciones y su
reclamo de transparencia para todos los sectores, incluido
Argentina el empresarial.

Un país que despierta Según un estudio de opinión realizado por Decisión

Consultores en agosto del 2002, en el cual se entrevistaron

a la RSE a más de 500 personas, un tercio declaró que ya había

escuchado hablar de RSE. ¿Los datos más sobresalientes?
Un 86,5% de la muestra valoró como importante que la
empresa que comercializa un producto tenga un
comportamiento socialmente responsable; un 87% manifestó
disposición a cambiar de marca por productos de compañías
que gestionan con criterios de RSE; y el 53% declaró que
consideraría la posibilidad de pagar un precio levemente
superior por dichos bienes y servicios.

El mensaje es claro. Además de calidad en productos y

servicios, la sociedad demanda -al menos de palabra- una
gestión responsable frente al medio ambiente y la sociedad.

La profunda crisis socioeconómica, política e institucional Por todo ello, el ejercicio de la RSE se está convirtiendo 17
que sacudió a Argentina a fines del 2001 es clave para en un factor clave para lograr competitividad. Hablar de
entender el proceso de afianzamiento del movimiento por una gestión empresaria exitosa supone, cada vez más,
la Responsabilidad Social Empresaria (RSE) en el país. La hablar de una organización que logra su rentabilidad
crisis operó como un gatillador fundamental para despejar económica sin descuidar la sostenibilidad ambiental y la
la inercia e impulsar al empresariado local a la acción. Es equidad social.
decir, suscitó en algunas compañías y emprendedores la
reflexión acerca del rol que les compete cumplir en la
sociedad.
VALOR DOMINANTE
Simultáneamente, en numerosos centros urbanos,
distribuidos a lo largo y ancho de la nación, adquieren
visibilidad grupos de empresarios fuertemente
comprometidos con la incorporación de la RSE en sus Maximización de beneficio
respectivas regiones de influencia. Córdoba, Rosario, económico
Mendoza, Bariloche, Buenos Aires, Paraná, Tucumán y Comportamiento
Ushuaia son algunas de las ciudades donde se crean -con empresarial
Servicio a la sociedad para
mayor o menor grado de formalidad, según el caso- una mejor calidad de vida
organizaciones abocadas a la promoción y difusión del
concepto, así como a la práctica de la RSE a través de
talleres, conferencias de especialistas y seminarios de
discusión.
VALOR EMERGENTE

Un país que despierta a la RSE

 Argentina
EL ESTADO: TAREAS PENDIENTES
El sector político cumple un papel clave en el proceso de
adopción de la RSE, ya que de él depende generar un
marco favorable para ello, abrir canales de diálogo francos
con el sector privado, brindar acceso a la información y
marcos regulatorios claros, que brinden estabilidad
económica y jurídica. En este sentido, aún queda mucho
por hacer en Argentina.
Si en el sector privado aún es baja la compresión del
concepto en su integridad, en el sector público es todavía
menor. La falta de información, los enfrentamientos del
Estado con el sector privado y la situación aún no resuelta
de los servicios privatizados atentan contra la posibilidad
de entablar un diálogo franco y articular políticas comunes
entre los sectores público y privado en relación a esta
temática.
La debilidad y fragilidad jurídico-institucional de Argentina
es otro factor que contribuye a sostener un entorno de
informalidad y corrupción, que no es precisamente el más
favorable a la hora de promover e instalar la RSE como
práctica concreta tanto en las grandes empresas como
en las PyMEs, de gran importancia como generadoras de
empleo y riqueza para el país.
Las empresas funcionan dentro de un sistema social y,
por ende, se encuentran en contacto permanente con el
18 mercado y el Estado en relación a la producción,
comercialización y distribución de bienes y servicios. En
este sentido, el apoyo del gobierno puede constituir un
avance para el desarrollo de la RSE en el país y para la
superación de ciertas limitaciones que puedan presentar
las empresas.
ESTADO
SOCIEDAD
EMPRESA CIVIL
El indudable papel histórico de la empresa como
institución creadora de riqueza y motor de
desarrollo social en las regiones en vías de
desarrollo, así como las prácticas y experiencias
innovadoras en el campo de la Responsabilidad
Social de la Empresa, llevan a analizar la necesidad
de establecer alianzas con otros agentes sociales.
Un país que despierta a la RSE
La encuesta electrónica "Mitos y verdades de la
Responsabilidad Social Empresaria", realizada
durante el 2004 por el Instituto Argentino de
Responsabilidad Social Empresaria (IARSE) junto
a la consultora especializada Perspectivas Sociales,
demostró que el otorgamiento de beneficios o
exenciones por parte del Estado a las firmas
socialmente responsables es un factor reconocido
por la población.
LOS EMPRESARIOS:
MAYOR CONCIENCIA SOCIAL
Los temas vinculados a la ética y la Responsabilidad
Social Empresaria son conceptos que hasta hace algunos
años eran ajenos para una amplia mayoría del empresariado
local.
El contexto convulsionado, producto de la crisis
socioeconómica vivida en el país, se constituyó en una
ventana de oportunidad para entablar un proceso de
diálogo y sensibilización de las empresas en torno a
temas vinculados a la RSE, que desde entonces comenzaron
a tener cada vez mayor presencia en eventos, conferencias,
seminarios y en el propio léxico de las compañías.
Hoy, a cuatro años del momento más álgido de la crisis
argentina, muchas compañías han comprendido la
necesidad de asumir una actitud proactiva frente a la
acuciante realidad socioeconómica que vive el país, con
altos porcentajes de la población viviendo por debajo de
la línea de la pobreza.
Diversas actividades internas relativas a la gestión reflejan
que temas como la atención al cliente, la conciencia
ambiental y el otorgamiento de beneficios a los empleados
están siendo de gran interés en empresas de todo tamaño.
Además, se observa que gran parte de las compañías
realizan algún apoyo a organizaciones de la comunidad.
Un estudio empírico sobre 147 empresas, realizado
en julio de 2004 por Beatriz Balián de Tagtachián,
académica de la Universidad Católica de Argentina,
muestra que el 70% de las compañías consultadas
(de diferentes tamaños) presta algún tipo de
apoyo a organizaciones de la comunidad. El tipo
de apoyo se presenta en tres perfiles diferentes:
atomizado (pequeñas ayudas a una multiplicidad
de asociaciones), simbólico (pequeñas ayudas
acostumbradas) y concentrado (focalización en
un tema o asociación).
Las grandes empresas se orientan por lineamientos
de política institucional, mientras que las de
menor tamaño, son impulsadas por el contacto
directo con necesidades personales que motivan
una acción voluntaria. Se destaca que ambas
empresas presentan un grado de involucramiento

con temas asociados a vulnerabilidad o debilidad,
especialmente en lo que se refiere a pobreza, no
pudiéndose establecer fehacientemente la relación
entre el tamaño de las empresas y el tipo de
aporte que realizan a la comunidad.
LA SOCIEDAD CIVIL:
PRESIÓN DESDE ABAJO
La sociedad civil argentina está siendo cada vez más
exigente con las empresas, situación que ha sido apoyada
por experiencias organizacionales orientadas hacia la
"rendición de cuentas". Este proceso ha sido acompañado
por una mayor profesionalización del Tercer Sector, lo que
ha dado como resultado una mejor administración en el
ejercicio del factor "presión desde abajo" (1).
En este contexto, un tema central ha sido la exclusión
social que le da a Argentina y también a los países
latinoamericanos características no sólo de desigualdad
y heterogeneidad sino de división. Por lo general, este
tema es tratado desde una perspectiva económica,
considerando especialmente los niveles de desocupación.
Sin embargo, es posible extenderlo hacia otras dimensiones
sociales como la educación, familia, vivienda, política y
salud, entre otras, problemas a los que las organizaciones
de la sociedad civil están respondiendo y reorganizando
sus actividades en función de la realidad que generan.
De este modo, están teniendo cada vez mayor protagonismo
en la promoción de acciones de compromiso con el entorno
social (2).
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
La RSE genera conciencia y responsabilidad hacia los
demás, es decir, un cambio cultural a través del cual se
puede acceder a significativos beneficios y oportunidades
de crecimiento para el país. Para ello, se debe tener
conciencia de la importancia que la RSE tiene para el
engrandecimiento de Argentina y trabajar para su
fortalecimiento, difusión y puesta en práctica.
(1) Índice de Desarrollo de la Sociedad Civil de Argentina: Formosa/Jujuy/Mendoza/Rio Negro/Santa Fe. Argentina, PNUD-BID, 2000.
(2) BALIÁN, Beatriz. Exclusión Social, Sociedad Civil y Sector Privado. Argentina, 2003.
Un país que despierta a la RSE
Argentina
DESAFÍOS:
RECUPERAR EL TIEMPO PERDIDO
Pese a que Argentina avanza cada vez más en materia de
RSE, presenta un atraso en relación a países vecinos como
Brasil o Chile, donde el tema está más difundido entre el
sector empresarial y por consiguiente ha alcanzado mayor
grado de desarrollo y profesionalización.
Sin embargo, la demanda de información, de capacitación
y de herramientas para encaminarse hacia una gestión
socialmente responsable es creciente entre las compañías
nacionales y las transnacionales con operaciones en
Argentina. De a poco, la RSE se va instalando en ámbitos
empresariales: numerosas firmas ya implementan acciones
específicas; otras ejecutan programas sostenidos a lo largo
del tiempo; las más interiorizadas procuran adquirir mayores
conocimientos e instrumentos a fin de profesionalizar su
gestión; algunas inclusive han creado gerencias o áreas
especiales al interior de sus compañías para que se
aboquen específicamente al tratamiento del tema.
Pero los desafíos son muchos y resulta evidente que aunar
esfuerzos entre todos los sectores que componen la
sociedad es la clave para recuperar el tiempo que Argentina
ha perdido.
"La Responsabilidad Social Empresaria no implica
solamente destinar muchos recursos o hacer
grandes inversiones. Si bien resulta difícil ejercerla
en un contexto inestable como el nuestro, también 19
es cierto que este entorno deja al descubierto lo
vulnerable de la sociedad, cuáles son los sectores
con mayores necesidades. Es cuestión de aplicar
lo que uno sabe hacer y de ser creativos; sólo
basta con proponérselo", sostiene María Amelia
Videla, gerente de Responsabilidad Social
Corporativa de Manpower Argentina.
La opinión es representativa del sentir de un amplio
conjunto de compañías líderes en RSE y conscientes de
que no pueden permanecer ajenas a este proceso de
cambio que concierne a todos los argentinos, con miras
a lograr un país sustentable, justo y equitativo.
 Argentina
IARSE y la Escuela de Negocios FUNCER desarrollaron
el "Ciclo anual de actualización y profundización del
concepto de la RSE y su incorporación en la gestión
tendiente a la competitividad y la sustentabilidad de
la empresa", entre marzo y septiembre del 2005,
destinado a proporcionar información sobre cómo y
cuándo la RSE se incorpora como uno de los ejes de
la estrategia empresaria, y a abordar la relación
empresa/comunidad desde la perspectiva integral de
la política de RSE.
GRANDES Y CHICAS
Una de las principales constataciones del estudio conducido
por la académica Beatriz Balián de Tagtachián es que a
mayor número de empleados de una compañía, aumenta
la proporción de actividades comunitarias. Según la
investigadora "las empresas más grandes muestran un
comportamiento coherente teniendo en cuenta, por un
lado, su cumplimiento con el aspecto del negocio
20 (observancia de los aspectos legales impositivos, atención
al cliente, beneficios a empleados) y, por otro, su aporte
a actividades comunitarias". Mientras tanto, en las
empresas más pequeñas "se observan limitaciones en
relación con aspectos formales, pero algunas igualmente
mencionan hacer ayuda comunitaria".
De la investigación se desprende que existen dos lógicas
diferentes de acción comunitaria: "una, de las empresas
más grandes, orientada por lineamientos de política
institucional y la otra, en las compañías de menor tamaño,
impulsada por el contacto directo con necesidades
personales que motiva una acción voluntaria". Cabe
destacar que ciertas compañías llevan adelante desde
hace algún tiempo iniciativas que pueden ser enmarcadas
dentro de los parámetros de la Responsabilidad Social
Empresaria, aunque muchas veces desconocen esta
terminología específica.
Un país que despierta a la RSE
En su libro "La Responsabilidad Social Empresaria en las
pequeñas y medianas empresas", publicado en octubre
del 2004, Ricardo Lesser concluye que en Argentina el rol
de las PyMEs en el avance de la RSE es reducido,
reconociendo la inexistencia de estudios abarcativos
que releven la cuestión de
la RSE en un universo tan
complejo como el de estas
empresas. El autor
considera que es probable
que las PyMEs lleven
adelante algún tipo de
gestión social y ambiental,
aunque sin los
convencionalismos
técnicos con que lo hacen
las compañías globales.
Sí se perciben más signos de esta actitud en aquellas PYMEs
que trabajan para el mercado externo y deben dar respuesta
a regulaciones de difícil elusión. Compelidas por estas
demandas externas -y en medida variable por la opinión
pública y el mercado-, dichas empresas han incorporado
comportamientos tendientes a disminuir su impacto sobre
el medio ambiente. La sinergia de ese proceso las habría
llevado a algún tipo de gestión social con su entorno inmediato.
Lesser también afirma que las compañías globales "están
reconociendo que la cooperación con las PyMEs puede
ayudarles a mejorar su propia cadena de valor". Por efecto
dominó, poco a poco, las empresas pequeñas y medianas
deberán comprender que para ser exitosas, sustentables y
convertirse en subcontratistas estables tendrán que cumplir
con ciertas normativas de conducta y certificaciones varias.

REFLEXIONES
En líneas generales, se percibe una toma de conciencia
y mayor preocupación del empresariado por el contexto
en el cual sus compañías operan. Lentamente, empiezan
a comprender que la Responsabilidad Social Empresaria
excede la mera filantropía y constituye un aspecto central,
estratégico de su gestión.
Las empresas más grandes muestran un comportamiento
consistente: cumplen con las exigencias básicas y hacen
aporte comunitario. Empresas de todo tamaño presentan
un grado de involucramiento con situaciones de debilidad
o vulnerabilidad de la sociedad.
Esto indica que hoy, recién en forma incipiente, se está
perfilando un nuevo liderazgo empresarial. Por eso las
actividades en distintos puntos del país precisan ser
fortalecidas, apoyadas, para que las empresas involucradas
puedan profundizar sus programas de RSE. Aún no existe
una representación empresaria nacional que impulse el
tema y, con carácter federal, abarque la diversidad del
mundo empresario (compañías chicas, medianas, grandes,
nacionales y extranjeras). Otro factor que atenta contra
una difusión seria y sostenida de la práctica es la ausencia
de datos estadísticos abarcativos sobre el estado de las
prácticas e iniciativas de RSE en Argentina.
El trabajo sostenido de las organizaciones promotoras y
de los grupos regionales de empresarios ha generado un
compromiso creciente de parte del mundo de los negocios,
aunque las acciones y programas a veces resultan
insuficientes ante la magnitud de los problemas sociales
y económicos que padece tanto Argentina como numerosas
naciones de la región latinoamericana.
De allí la necesidad de sumar en este proceso a otros
actores de la sociedad, como el sector público y los medios
masivos de comunicación, que no se muestran
especialmente motivados en relación a los temas de RSE
y muchas veces descreen de que este sea un movimiento
genuino en pos del cambio social. La premisa es que la
RSE se transforme en una oportunidad, un punto de
inflexión, para generar -desde los diversos sectores que
conforman la sociedad- un genuino cambio cultural que
fortalezca la vida democrática y contribuya al desarrollo
sustentable del país.
Algunos datos indican que el cambio se está gestando.
La sociedad civil y el mercado argentino exigen cada vez
mayor transparencia y credibilidad de parte de las empresas.
De acuerdo al estudio realizado por la académica Beatriz
Balián, la visión de las fortalezas que genera la relación
con la comunidad, presenta dos enfoques diferentes: uno
con énfasis en el interés comercial y el otro en responder
a las necesidades de la sociedad.
Un país que despierta a la RSE
Argentina
Los lineamientos a seguir para alcanzar los objetivos
planteados se enfocan en cuatro aspectos: los ejes de la
economía y el trabajo; las asociaciones y la solidaridad;
la formación personal; el cuarto referente es de tipo
negativo, se trata de la política, el Estado y la seguridad,
en cuanto se reafirma la opinión desfavorable por su falta
de eficacia. A grandes rasgos podría señalarse una línea
tradicional en la que se apoya a organizaciones de antigua
data, en forma acostumbrada, donde la empresa ocupa
el lugar superior en la relación y, por otro lado, una visión
más moderna caracterizada por una búsqueda más
comprometida con el bien común.
Lo concreto es que muchos han comprendido que, como
dice el líder y creador de AVINA, Stephan Schmidheiny
"no existen compañías exitosas en sociedades fracasadas",
y han comenzado a tomar cartas en el asunto.
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
ARGENTINOS?
- En el año 2002 se crea formalmente el Instituto Argentino
de Responsabilidad Social Empresaria (IARSE), con la
misión de "promover y difundir el concepto y la práctica
de la Responsabilidad Social Empresaria para impulsar
el desarrollo sustentable de Argentina, trabajando junto
a las empresas a través de redes de información,
intercambio de experiencias y colaboración mutua". Este
instituto está abocado específicamente a la promoción
del tema a nivel nacional, edita regularmente un boletín
electrónico que reciben más de 30 mil suscriptores, así 21
como un portal de noticias sobre RSE que supera las 35
mil visitas mensuales.
- En ciertas ciudades del país, grupos de empresarios
comprometidos con la instalación de la RSE en sus
regiones de influencia han creado diferentes organizaciones
promotoras del tema, con mayor o menor grado de
formalidad. Tal es el caso de Valor Empresario -VALOS-
(Mendoza), Consejo Empresario de Entre Ríos (Paraná),
el Centro de Responsabilidad Social Empresaria de la
Fundación Libertad -REDDO- (Rosario), Nodo IARSE
Bariloche, Fundación del Tucumán, Fundación de Apoyo
a la Pequeña y Mediana Empresa -FUNDAPYME- (Ushuaia),
entre otras.
- La Cámara de Comercio de los Estados Unidos en
Argentina (AmCham) entrega anualmente -desde hace
siete años- el Premio Ciudadanía Empresaria, reconociendo
las acciones socialmente responsables de empresas del
sector privado. El galardón tiene alto reconocimiento y
año tras año aumenta el número de empresas que
compiten por obtenerlo.
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 BRASIL
Compromiso con el desarrollo sustentable

Brasil cuenta con una serie de

iniciativas ejemplares de
Responsabilidad Social Empresarial,
impulsadas por el sector privado y
por una sociedad civil organizada.
La RSE en Brasil es considerada una
estrategia rumbo al desarrollo
sustentable, al promover
simultáneamente eficiencia
económica, equilibrio ambiental y
equidad social.
Brasil

Brasil
Compromiso con el
desarrollo sustentable
La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en Brasil se
fortalece y gana dimensiones más concretas en la década
del 90 por la vía de la movilización de grupos de
empresarios, ejecutivos, consultores y representantes de
ONGs que buscaban debatir en torno al tema y estimar sus
primeras implicancias, así como evaluar sus contribuciones
potenciales, tanto para la expansión de los mercados y de
los negocios como para la construcción de un mundo mejor
y más justo. En consecuencia, el impulso de la RSE no
surge por influencia del gobierno como en otros continentes.
EL ESTADO: DESAFÍOS Y POBREZA
Es posible constatar que el actual gobierno ha redoblado
sus esfuerzos para eliminar la extrema pobreza y el hambre
en el país. A nivel internacional, en el Foro Económico
Mundial, realizado en Davos (Suiza) en enero de 2003 y
durante la Cumbre Ampliada del G-8, efectuada en Francia
en junio del mismo año, Brasil propuso la creación de un
fondo internacional destinado exclusivamente al combate
del hambre y la miseria. El actual gobierno es "consciente,
a pesar de que la cuestión no será resuelta del todo
solamente con la implementación de buenas políticas
sociales, sino con la adopción de un modelo de desarrollo
incluyente y sustentable a lo largo del tiempo" (1).
En el campo de la RSE, se necesita mayor apoyo del
gobierno. Una serie de proyectos de ley están actualmente
tramitándose en el Congreso, aunque todavía en estado
incipiente y sin una aproximación más profunda de la
temática.
(1) Objetivos de Desarrollo del Milenio - Reporte Nacional de Acompañamiento. IPEA, Brasilia, 2004.
(2) La Iniciativa Privada y el Espíritu Público: La evolución de la acción social de las empresas privadas en las regiones Sureste y Noreste. IPEA,
Brasilia, junio 2005.
Compromiso con el desarrollo sustentable
BRASIL
Instituto Ethos - Conferencia Internacional 2005
LOS EMPRESARIOS:
AGENTES ACTIVOS DEL
DESARROLLO
Un estudio del Instituto de Investigaciones Económicas
Aplicadas (IPEA) demuestra que la mayor parte del sector
privado brasileño está involucrado de alguna manera en
el área social. De acuerdo con los resultados de la
Investigación Acción Social de las Empresas (2ª edición),
en 2003, 71% de las empresas privadas de la región
Sureste de Brasil y un 74% de las empresas de la región
Noreste desarrollan acciones en beneficio de la comunidad.
Fueron escogidas como foco inicial de la 2ª edición de la 25
investigación las regiones Noreste y Sureste porque en
éstas se concentran cerca del 70% de las empresas de
Brasil, 70% del PIB nacional y 78% de la población
brasileña que vive en condiciones de pobreza (2).
El estudio afirma que entre fines del 90 y el 2003, se
observó un crecimiento generalizado de empresas que
actúan en el área social.
En el universo empresarial, se observan relevantes cambios
en la forma de gestión de las compañías brasileñas. Es
creciente el número de empresas que adoptan
voluntariamente criterios de RSE como catalizador de las
relaciones comerciales del mercado, como es el caso de
las recientes experiencias de grandes empresas que han
comenzado a utilizar criterios de RSE para evaluar a sus
proveedores, por ejemplo Banco Real/ABN Amro, Belgo
Minera, Petrobras y CPFL Energía.
También se observan notables avances en el mercado
financiero, que reúne casos de éxito en el campo de RSE,
los que son considerados benchmark tanto en el plano
nacional como en el internacional.
 BRASIL
- Brasil está entre los países con el mayor número
de bancos que adhieren a los Principios de Ecuador
(www.ifc.org/equatorprinciples).
El Unibanco fue el primer banco brasileño y de
países en desarrollo en integrar el grupo
(www.ir.unibanco.com/por/res/equ/index.asp),
ejemplo seguido por otros bancos brasileños
como Bradesco e Itaú.
- Además se ha consolidado el llamado Nuevo
Mercado junto a la Bolsa de Valores de São Paulo,
enfatizando principalmente prácticas de buen
gobierno corporativo.
- Cada vez ha sido más claro el involucramiento
de varios fondos de pensión con la RSE. La
Asociación Brasileña de las Entidades de Previsión
Complementaria (ABRAPP) lanzó en 2003 criterios
de inversiones socialmente responsables para
Fondos de Pensión, la primera iniciativa de este
género en el mundo (www.uniethos.org.br).
- La Bolsa de Valores del Estado de São Paulo
(Bovespa) está en vías de lanzar el Índice de
Sustentabilidad Empresarial (ISE), índice de
acompañamiento de desempeño de acciones para
empresas que adoptan criterios de RSE, como el
Dow Jones Sustainability Index y el FTSE4GOOD
Index. El ISE es el cuarto índice de este tipo
lanzado en el mundo (Portal Examen, Nuevo Ìndice
de la Bolsa de Valores para evaluar la
sustentabilidad empresarial).
- Es creciente el número de instituciones financieras
que incluirán cláusulas socioambientales en
26 contratos de concesión de créditos.
- El Banco Real /ABN AMRO constituyó en el 2001
el Fondo Ético, primer fondo de inversiones de
América Latina con un portafolio compuesto
integralmente por empresas consideradas
socialmente responsables. El ejemplo fue seguido
por el Banco Itaú (www.bancoreal.com.br) (3).
La relevancia de la RSE en Brasil también se refleja en
la creciente adhesión de las empresas nacionales a
modelos e iniciativas de responsabilidad social y
sustentabilidad, destacando especialmente las que tienen
intereses internacionales. Actualmente, 73 empresas
brasileñas están certificadas SA 8000, norma de Social
Accountability International (SAI), posicionando a Brasil
en 4º lugar en el número de certificaciones de esta norma,
sólo superado por Italia, China e India. Cerca de 150
empresas son signatarias del Pacto Global de la
Organización de las Naciones Unidas (PNUD). Las directrices
del Global Reporting Initiative (GRI) son utilizadas por 10
empresas brasileñas para la elaboración de sus reportes
de sustentabilidad - la tendencia es que este número
aumente ya que en el 2004 fue lanzada, en conjunto con
el Instituto Ethos y UniEthos, una versión en portugués
de las directrices. Además, 442 empresas respondieron
(3) Puntos desarrollados en base al texto A Responsabilidade Social Empresarial no Brasil, de Tarcila Reis Ursini.
Compromiso con el desarrollo sustentable
a los Indicadores Ethos, herramienta de extrema relevancia
nacional, que también ha sido adoptada por otros países
de América Latina.
Brasil ha actuado como promotor de las Metas del Milenio
de la ONU, a través de: diversas acciones de diseminación
impulsadas por empresas brasileñas; desarrollo de
publicaciones con innovadoras aproximaciones,
relacionando las Metas del Milenio a la realidad empresarial;
y la campaña brasileña para la diseminación de los
Objetivos de Desarrollo del Milenio, reconocida por el
PNUD como una de las cinco más exitosas del mundo y
que tiene como uno de sus hitos la Semana Nacional por
la Ciudadanía y la Solidaridad (www.pactoglobal.org.br).
LA SOCIEDAD CIVIL:
GENERANDO PUENTES DE
CONFIANZA
A través de la sociedad civil organizada las temáticas
sociales y ambientales ganan una nueva y sólida base.
Según estadísticas de la Asociación Brasileña de
Organizaciones No Gubernamentales (Abong), el número
de ONGs presentó un crecimiento significativo en la última
década, triplicándose entre 1996 y 2002, pasando de
2.800 organizaciones a cerca de 8.600 (www.abong.org.br).
Entre las ONGs dedicadas a la RSE destaca el Instituto
Ethos de Empresas y Responsabilidad Social, fundado en
1998, con el objetivo de diseminar la práctica de la RSE
y contribuir a que las empresas y la sociedad alcancen
el desarrollo sustentable. Actualmente, Ethos cuenta con
más de mil empresas asociadas de diferentes sectores y
tamaños, que facturan en conjunto, por año, lo
correspondiente a cerca del 30% del PIB brasileño.
También destaca en Brasil la creación del Foro Social
Mundial (FSM), un espacio abierto de encuentro - plural,
diversificado, no gubernamental y no partidario- que
estimula de forma descentralizada a las organizaciones
y movimientos de nivel local e internacional, involucrados
en acciones concretas de construcción de un mundo más
solidario, democrático y justo. El FSM, que se desarrolló
en Porto Alegre en enero de 2005, reunió a 155 mil
participantes, de 6.872 organizaciones de 151 países.
Como ejemplo de otras organizaciones que realizan
un destacado trabajo en la temática de RSE en
Brasil, podemos citar: Asociación Brasileña de
Empresarios para la Ciudadanía (Cives); Consejo
Empresarial Brasileño para el Desarrollo Sustentable
(Cebds); Fundación Abrinq; Grupo de Institutos,

Fundaciones y Empresas (GIFE); Instituto Akatu;
Instituto Brasileño de Análisis Sociales y
Económicos (Ibase); Instituto Brasileño de Gobierno
Corporativo (IBGC); UniEthos Educación para la
Responsabilidad Social y el Desarrollo Sustentable,
entre otras.
Foro Social Mundial 2005. Seminario "La
Implementación de los Objetivos de Desarrollo
del Milenio en Brasil", organizado por el Instituto
Ethos.
En la mesa: Luciano Muñoz (PNUD); Ana Pelianno
(IPEA); Luiz Alberto Santos (Casa Civil de
Presidencia de la República); André Spitz (Asesor
Especial); Francisco Menezes (Consea); Oded
Grajew (Instituto Ethos); Ronaldo García
(Presidencia de la República); Caio Magri (Instituto
Ethos).
Las tres primeras ediciones del FSM se realizaron
en Porto Alegre, Brasil (2001 a 2003), la cuarta,
en Bombay, Índia, y la quinta, nuevamente en
Porto Alegre. En ésta se desarrollaron 2.500
actividades, distribuídas en once espacios temáticos
del territorio social. Los FSM 2006 y FSM 2007
serán realizados en África y, simultáneamente, se
efectuarán foros temáticos y regionales alrededor
del mundo.
www.forumsocialmundial.org
Brasil también sobresale en el escenario internacional en
el campo de la normalización de la Responsabilidad Social.
A fines del 2002 el órgano oficial de normalización nacional
- la Asociación Brasileña de Normas Técnicas (ABNT) -
(4) REIS, Tarcila y SEKIGUCHI, Celso. Desarrollo Sustentable y Responsabilidad Social: Rumbo a la Tercera Generación de Normas ISO: Innovación,
Legislación e Inserción Social. Colección Uniemp Innovación, Editorial Cortez. 4º volúmen, Sao Paulo, 2005.
Compromiso con el desarrollo sustentable
BRASIL
creó una comisión, denominada Grupo Tarea sobre
Responsabilidad Social (anteriormente denominado Grupo
Tarea sobre Responsabilidad Organizacional), para producir
y diseminar los conceptos relativos a la gestión de RSE
y sus herramientas en Brasil. La comisión también
representaba la posición brasileña en el foro de discusión
internacional de la norma ISO Responsabilidad Social (4).
Los trabajos de esta comisión implicaron la creación de
una norma de RSE brasileña, la ABNT NBR 16001, una de
las pocas normas nacionales de Responsabilidad Social
en el mundo. El reconocimiento al liderazgo de ABNT y
a los avances de Brasil en el campo de la RSE, contribuyeron
a que la Asociación brasileña fuese electa conjuntamente
con la entidad normalizadora de Suecia - Swedish Standard
Institute (SIS) - para presidir de forma compartida el Grupo
de Trabajo de ISO Responsabilidad Social, responsable
de coordinar el proceso de desarrollo de la futura norma
internacional ISO 26000. Es la primera vez en la historia
de ISO que la coordinación mundial de los trabajos queda
a cargo de un país desarrollado junto a uno en vías de
desarrollo.
Jorge E. Reis Cajazeira,
Gerente de Excelencia
Empresarial de Cia. Suzano
de Papel y Celulosa, y
presidente mundial del
Grupo de Trabajo de ISO
Responsabilidad Social,
representando a ABNT. 27
En el campo académico la RSE también se ha multiplicado.
Aunque todavía no posee una inserción definitiva en los
programas curriculares de las universidades, comienza a
dar señales de madurez. Un ejemplo, es el número de
estudiantes universitarios que se inscribieron en la 5ª
edición, de 2005, del Premio Ethos Valor, que contó con
375 trabajos de graduación y pos-graduación inscritos,
de 545 estudiantes universitarios. Es notorio, también,
que diversas universidades y centros de investigación se
organizan en la creación de iniciativas que permiten a
alumnos y académicos profundizar en el campo de la RSE
y del desarrollo sustentable. Algunos ejemplos son:
Fundación Don Cabral (FDC), Fundación Getulio Vargas
(FGV), Universidad de Campinas (Unicamp), Universidad
de Sao Paulo (USP), Universidad Federal de Río de Janeiro
(UFRJ) y Universidad Federal Fluminense (UFF).
 BRASIL

REFLEXIONES

Luego de lo expuesto, queda claro que Brasil reúne casos

empresariales de éxito en la incorporación de RSE en la
gestión. La suma de todas estas experiencias genera una
masa crítica relevante, a pesar de no ser la realidad de
todo el país. Debido a que es un país vasto y complejo,
Brasil presenta peculiaridades en cada una de sus regiones,
que se encuentran en diferentes etapas en relación a la
adopción de prácticas de RSE y desarrollo sustentable.
En este sentido, un gran desafío es la expansión de estas
experiencias hacia otras regiones de Brasil, evitando la
concentración de buenas prácticas en los grandes y
principales centros comerciales. Existen oportunidades
de avance, como la incorporación de las prácticas y
principios de RSE de forma sistemática en la gestión por
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
un número mayor de empresas, el desarrollo de iniciativas BRASILEÑOS?
con foco en las cadenas de producción, iniciativas dirigidas
a pequeñas y medianas empresas, y experiencias efectivas La evolución histórica del Instituto Ethos, en el ámbito
de involucramiento de stakeholders. de la RSE, ha ocurrido en tres fases:
Para impulsar el proceso de adopción de una gestión Fase 1 - Promover el movimiento de RSE, que involucró:
socialmente responsable, es fundamental un proceso de diseminación de la visión y el concepto de RSE,
educación para la sustentabilidad dirigido hacia funcionarios sensibilización y movilización de las empresas.
y socios.
Fase 2 - Estimular prácticas de RSE, a través de la
A pesar de la relevancia de los avances antes presentados realización de acciones concretas y comprensión del
y de las señales de que se camina en la dirección correcta, concepto; valoración de la RSE por el mercado y por
los resultados agregados para la nación aún no acompañan la sociedad.
28 la velocidad de las necesidades de los individuos y del
planeta. Es en este sentido que se torna imprescindible Fase 3 - Consolidar el concepto y las prácticas, a través
el fortalecimiento de las acciones conjugadas entre el de alianzas con agentes inductores de las prácticas
sector productivo, la sociedad civil y los organismos empresariales y alianzas con socios para su desarrollo
multilaterales para que la velocidad de las transformaciones en RSE.
necesarias sea alcanzada y efectivamente proporcione un
mundo mejor para todos y haga emerger una nueva La situación actual del movimiento de la RSE en Brasil,
conciencia política y planetaria. diagnosticada por el Instituto Ethos es la siguiente:

"En este constante - Liderazgos sociales y empresariales valoran la RSE.

mejoramiento de las
prácticas empresariales, - Existe un significativo número de empresas interesadas
existen empresas que ya en ser percibidas por el mercado y por la sociedad
evolucionan ampliamente en como socialmente responsables.
la gestión de sus indicadores
- estando próximas a la - La RSE todavía es marginal en los procesos decisorios
excelencia - y se cree que de las empresas y en las relaciones comerciales.
están cerca de dar un salto
en dirección a modelos de - La RSE y el desarrollo sustentable todavía no figuran
mayor consistencia sistémica, con importancia en las agendas gubernamentales.
como de sustentabilidad
empresarial, derivado del
concepto de desarrollo
sustentable".
Ricardo Young, Presidente de Ethos y UniEthos

Compromiso con el desarrollo sustentable

 BRASIL

Sobre la base de la situación actual descrita, el Instituto Ethos reconoce que actualmente los principales desafíos y factores
críticos de éxito son:

Desafíos Factores críticos de éxito

Integrar la RSE en las prácticas comerciales y en los Tratamiento inclusivo de las empresas en permanente
procesos gerenciales de un grupo significativo de proceso de aprendizaje.
empresas.

Conectar la RSE con el desarrollo sustentable en el Reconocimiento, valorización y diseminación de

debate público. buenas prácticas por el mercado y la sociedad.

Integrar la RSE y el desarrollo sustentable a las Diálogo abierto y franco con diversos sectores, con
políticas públicas. proposición de agendas positivas.

Extender la RSE a un número mayor de organizaciones. Desarrollo de conocimientos y metodologías para el

apoyo a prácticas concretas.

Movilización y alianzas con agentes inductores en

el comportamiento de las empresas: medios,
instituciones educacionales, entidades empresariales,
ONGs, organizaciones sindicales, organizaciones
multilaterales y de cooperación internacional.

29

Compromiso con el desarrollo sustentable

Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 CHILE
La RSE empieza por casa

Numerosas investigaciones acerca

de las tendencias, percepciones y
buenas prácticas de Responsabilidad
Social Empresarial han demostrado
que esta temática en América Latina,
y particularmente en Chile, está
avanzando a pasos agigantados y
que se asocia fundamentalmente al
respeto y la cooperación de todos
los sectores de la sociedad para el
mejoramiento de la calidad de vida
laboral.
Chile

Chile
La RSE empieza por casa
Los antecedentes de la Responsabilidad Social Empresarial
(RSE) en Chile datan de 1920, cuando comienzan a
vislumbrarse, con mayor fuerza, una serie de acciones
filantrópicas. En un principio, estas actividades obedecían
a inquietudes personales de empresarios filántropos, por
lo que eran circunstanciales y estaban desligadas de la
estrategia empresarial. Pero la globalización de la
economía, la liberalización de los mercados y una sociedad
cada vez más exigente, comenzaron a modificar los
paradigmas hacia posicionamientos de mayor compromiso
con la sociedad y a una nueva realidad donde los espacios
en los que interactúan actores gubernamentales, privados
y sociedad civil se entremezclan. Esto ha provocado que
desde la década del 90, la RSE comience a entenderse
como una visión de negocios y a cobrar relevancia e interés,
desde una perspectiva más proactiva, a nivel del sector
empresarial, estatal y de la sociedad civil, a través de
ONGs ligadas a temas medioambientales, de desarrollo
humano y potenciación del capital social.
Hoy, esta temática ha dejado de ser un tema incipiente y
está comenzando a desarrollarse más ampliamente.
Representantes de cada sector de la sociedad comienzan
a entender que no son independientes del resto, que les
compete un rol importante en el desarrollo de esta temática,
y que las entidades que los componen no deben ser
instituciones volcadas en si mismas, sino que deben
comportarse de modo responsable ante cada uno de los
grupos con quienes interactúan y ser capaces de participar
del desarrollo social del país.
Esto ha incidido en que la sociedad, en general, comience
a familiarizarse con el tema y las empresas empiecen a
La RSE empieza por casa
CHILE
adoptar políticas corporativas que abarquen aspectos
vinculados a esta materia, como preocuparse del desarrollo
integral de los trabajadores, del cuidado del medio
ambiente y de la comunidad aledaña a sus operaciones,
entre otros aspectos.
LA CIUDADANÍA:
POR UN MEJOR CLIMA LABORAL
El concepto de RSE es conocido y exigido por consumidores,
principalmente de países desarrollados, pero también se
ha extendido al país, pues los chilenos cada vez más se
familiarizan con esta temática y valoran las prácticas
vinculadas a ella. Sin embargo, consideran que su adopción
no es del todo generalizada, dado que aún existen
empresarios que adoptan una visión utilitarista de corto
plazo, que necesariamente debe cambiar por un enfoque
sustentable.
Esta situación es avalada por investigaciones, como el
estudio internacional MORI 2005 "Responsabilidad Social
Corporativa", que mide la percepción y valoración de los
consumidores chilenos frente a la conducta socialmente
responsable de las empresas. Sus resultados reflejan que
las compañías que se preocupan del impacto de sus
operaciones en la sociedad y que orientan su gestión a
un equilibrio y alineamiento de sus objetivos con los
requerimientos de su entorno, efectivamente obtienen el
33
reconocimiento de la opinión pública nacional, lo que se
transforma en una variable competitiva de gran importancia.
Según el estudio, alrededor del 90% de los consumidores
esperan que las grandes compañías los provean de
productos seguros y sanos de acuerdo a las leyes y a la
protección del medio ambiente; en segundo lugar, se
ubica el trato a los empleados. Sin embargo, entre las
condiciones necesarias para declarar a una compañía como
socialmente responsable destacan la calidad de vida de
sus trabajadores, 92%, y la preocupación por el medio
ambiente, 79%.
Al detenerse a analizar estas percepciones es posible
comprender la necesidad de que las empresas incorporen
la opinión de sus públicos de interés en su estrategia de
negocio, poniendo en práctica la RSE e incorporando sus
principios rectores de manera transversal en todo su
accionar. Pero lo concreto, es que en el país aumenta de
manera creciente la cantidad de consumidores que se
familiarizan con esta temática y que ya no sólo discriminan
por precio y calidad. Prueba de ello, es que un 55% de
los consumidores afirma que una empresa vende más
productos si es socialmente responsable. En definitiva, la
RSE ya está en la mente de los chilenos.
 CHILE
CHILE
"La incorporación de la RSE
debe ser transversal a todas
las áreas de la empresa,
formar parte de la cultura
organizacional y basarse
en un alineamiento entre
los objetivos estratégicos
de la compañía y los
requerimientos de sus
stakeholders", señala el
director ejecutivo de
Vincular, Dante Pesce.
Una buena empresa debe ser consecuente entre el discurso
y la práctica, convirtiendo las palabras y buenos deseos
en acciones concretas.
EL ESTADO:
REORIENTANDO SU ROL
El Estado percibe la RSE como una temática abordada
más ampliamente por países desarrollados que por
aquellos en vías de serlo, y aún no llega a un consenso
34 sobre cuánta incidencia puede tener en esta materia y
menos, sobre cuán activo debe ser su rol al respecto.
Esto es ratificado por un estudio realizado en el 2004
por Red Puentes Chile en conjunto con el Programa de
Acción de Mujeres (PROSAM) titulado "Visión acerca de
la Responsabilidad Social Empresarial en organismos del
Estado", el cual indagó en ocho organismos públicos
sobre las visiones, enfoques e iniciativas en relación al
concepto y prácticas de RSE que algunos organismos
gubernamentales habían desarrollado hasta ese momento.
Las conclusiones de la investigación entregan señales
divididas sobre el rol que debería cumplir el Estado en
el marco de la RSE. Mientras algunos de los organismos
creen que "el sector público debe asumir un rol de agente
activo, convocando a las empresas a incluir políticas y
prácticas de responsabilidad social", otros señalan que
la falta de políticas públicas que coordinen las actividades
privadas en el área y la promuevan mediante incentivos,
"dejaría el tema circunscrito únicamente al compromiso
social y a la filantropía de los empresarios, negándole su
carácter estratégico global".
(1) Agenda Ciudadana. Red Puentes. Chile, agosto 2005.
La RSE empieza por casa
El gobierno debe ser un promotor de normas que protejan
a los trabajadores; debe educar y capacitar a la sociedad
acerca de esta temática, como un concepto de calidad
de gestión y educar al empresariado, específicamente en
lo que respecta a las prácticas sociales exigidas por los
tratados de libre comercio suscritos entre Chile y otras
naciones desarrolladas.
Esto, porque a nivel global la gestión empresarial alejada
de la ética se repite con facilidad gracias a la permisividad
legal y a un Estado cuyos sistemas de control, fiscalización
y regulación son cada vez más frágiles. Como señala el
economista e investigador del Centro de Estudios
Alternativos (CENDA), Jacobo Schatán, "el debilitamiento
del rol protector del Estado ha variado desde una visión
de defensa del bien común, de protección de la soberanía
nacional y de los grupos de población en desventaja, al
predominio de una ideología y modelo económico neoliberal
en la que prevalece el mercado". Por lo tanto, el Estado
debe centralizar esfuerzos por tener un rol más activo en
la aplicabilidad de la RSE (1).
Sin embargo, existen destacadas iniciativas de RSE
impulsadas por el gobierno, bajo un enfoque de
competitividad. La Comisión Nacional de Investigación
Científica y Tecnológica (CONICYT), a través del Fondo de
Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDEF),
y la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO)
han apoyado una serie de proyectos pioneros a nivel
regional, destinados a desarrollar instrumentos concretos
de gestión de RSE, tendientes a mejorar la competitividad
de las empresas, incluyendo a las PyMEs a través de la
adopción de esta temática.
Se distingue, además, la relación establecida con gremios
empresariales para llegar a acuerdos, especialmente en
temas medioambientales y de apoyo a la comunidad, con
la finalidad de poner atención y responder a las exigencias
internacionales. Ejemplo de ello es el Acuerdo de Producción
Limpia (APL) y el programa de Buenas Prácticas Agrícolas
(BPA), iniciativas establecidas por Comisiones de la CORFO
junto a otros organismos de gobierno y sectores
empresariales, que buscan elevar los estándares
ambientales y a la vez contribuir a mejorar la competitividad
de las empresas. También existen otras iniciativas
emblemáticas que surgen del esfuerzo coordinado entre
industriales organizados y el gobierno, como la creación
en 1958 del sistema mutual de seguridad laboral que se
convirtió posteriormente en Ley de la República, razón
por la cual todo trabajador en Chile tiene derecho a recibir
de su empleador prevención ante accidentes del trabajo
y enfermedades laborales.

El presidente ejecutivo de la
Asociación Chilena de
Seguridad (ACHS), Eugenio
Heiremans, señaló en una
entrevista al diario El
Mercurio, en septiembre de
2005, que "no hay que
olvidar que existe la
responsabilidad social de
todas las organizaciones que
componen la sociedad, de modo que así como el
Estado debe buscar la calidad de vida de los
trabajadores, tiene que dar las reglas del juego para
que sus propias organizaciones cumplan más allá
de lo que la ley indica. Creo que hay que tener muy
presente que la responsabilidad social de las empresas
en ningún caso debe suplir el compromiso de los
gobiernos en la solución de los grandes problemas
sociales".
LOS EMPRESARIOS:
CRECIENTE ADOPCIÓN DE LA RSE
La preocupación por temas sensibles para la sociedad es
una conducta tradicional del empresariado chileno, que
tiene sus orígenes, principalmente, en una fuerte influencia
de la religión católica. Esta fructífera actividad social,
asociada a la filantropía, se ha constituido en la base para
dar paso a una respuesta y compromiso más sistemático
de la empresa con sus distintos grupos de interés.
"Legitimar la RSE como componente indisoluble de toda
gestión de negocios, es un objetivo que se está cumpliendo
con creces: definitivamente, la RSE es hoy un tema
fundamental en el país", asegura el presidente de la
Comisión de RSE de la Confederación de la Producción
y del Comercio (CPC), Gonzalo García.
Las diversas acciones vinculadas a la RSE que desarrolla
el empresariado chileno son muestras de la relevancia
que esta temática está teniendo en el país. Se observa
una creciente adhesión de empresas a modelos e iniciativas
mundiales de RSE. Siete compañías chilenas -Codelco,
Forestal Terranova, Shell, Endesa, Minera Escondida,
Gerdau AZA y Chiletabacos- emiten reportes de
sustentabilidad bajo la modalidad del Global Reporting
Initiative (GRI), mediante los cuales dan a conocer
públicamente su desempeño económico, social y ambiental.
También, empresas y organizaciones como la ACHS, Banco
Estado, Empresas CMPC, Forestal Terranova, Grupo
Santander-Chile, Minera Escondida, Toop and Brand y
Vincular de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
(PUCV), están suscritas al Pacto Global de la Organización
de las Naciones Unidas.
Por otro lado, numerosas empresas se están suscribiendo
a los APL. Según el Consejo Nacional de Producción Limpia,
han firmado este acuerdo 1.671 empresas de algunos de
La RSE empieza por casa
CHILE
los principales sectores productivos del país: celulosa,
construcción, químico, productores de cerdo, fundiciones,
salmonero, vitivinícola, servicios de alimentación,
productores de pisco y uva pisquera. En tanto, 1200
empresas han adoptado programas de BPA, según datos
de la Fundación para el Desarrollo Frutícola (FDF).
Otro hito importante de destacar son las 7.322 empresas
involucradas en formación dual, educación teórico - práctica,
donde la fase práctica es realizada en instalaciones de la
empresa. Además, la Corporación Unitaria de Trabajadores
(CUT) inauguró en septiembre de 2005 un Observatorio
Laboral, con el fin de incrementar la capacidad de
negociación, influencia y cooperación de los sindicatos en
las empresas y aumentar el diálogo con los diferentes
actores, para promover el respeto a los derechos de los
trabajadores, como pilar fundamental de la competitividad
de las empresas y del país.
Estas tendencias indican que los empresarios están
conscientes de los beneficios que conllevan las prácticas
vinculadas a la RSE y su incorporación al sistema de
gestión de la empresa, en el contexto de apertura de los
mercados. Reconocen que está creciendo el interés en
esta temática, y que por ello, los enfoques empresariales,
tradicionalmente centrados en la satisfacción del accionista,
están empezando a ampliar su visión, prestando atención
a un conjunto más amplio de stakeholders.
LA SOCIEDAD CIVIL:
FOMENTANDO UNA CULTURA 35
SOLIDARIA
La sociedad civil, representada principalmente por
fundaciones sin fines de lucro, ONGs y entidades académicas,
ejerce un creciente escrutinio sobre las empresas y observan
la RSE como una posibilidad de superación de las barreras
del subdesarrollo, mediante el aumento de la calidad de
vida y el mejoramiento de la imagen del país, que favorece
la competitividad de la empresas.
Este sector asocia el concepto de RSE a la preocupación
por el medio ambiente, por su fuerza laboral y por el
compromiso con el entorno social. En este sentido, el
papel que les toca desempeñar radica en articular esfuerzos
y fomentar una cultura solidaria para que no existan
mundos aislados sino que unidos por valores comunes.
Gran parte del desarrollo de la RSE se origina como
una reacción a las acciones de trabajadores, grupos
ambientales, de consumidores, de derechos
humanos, políticos, de movilización ciudadana y
de opinión pública frente a acciones de
irresponsabilidad empresarial. Esto ha estado
presente en las luchas sociales muchas veces sin
el concepto de RSE, sino bajo otras orientaciones
y urgencias.
 CHILE
Estos grupos pueden ejercer demandas e influencias
constantes. Hacia el Estado para que implemente políticas
de RSE y ejerza sus roles de regulación, fiscalización y
control, mediante participación vinculante en procesos
de decisión de políticas públicas en esta materia. Hacia
las empresas para que contribuyan permanentemente a
la resolución de problemas sociales, laborales y ambientales
a nivel local, nacional e internacional, garantizando la
participación democrática, efectiva y transparente de los
grupos de interés e iniciativas conjuntas, desde la inversión
comunitaria hasta procesos de sostenibilidad de las
empresas de largo plazo.
Pese a que el sector puede representar un rol activo en
la promoción de la RSE, aún mantiene un discurso ajustado
a los paradigmas más habituales, preferentemente
asistencial. Sin embargo, dentro de este segmento, destaca
la academia, desde donde surgen iniciativas de participación
en temas de RSE: la Pontificia Universidad Católica de
Chile es miembro de la red Social Enterprise Knowledge
Network (SEKN); la Pontificia Universidad Católica de
Valparaíso (PUCV) creó en el año 2001 Vincular, primera
iniciativa universitaria chilena dedicada al desarrollo de
consultoría, capacitación e investigación aplicada en RSE;
y trece universidades integran la red Universidad Construye
País, un programa de responsabilidad social universitaria
patrocinado por Fundación Avina.
Estos destacados grupos estiman que existe una clara
necesidad de sinergia con otros actores como el gobierno
36
nacional y local, entre otros, para generar el cambio
cultural que implica esta temática.
Red Puentes desarrolla un fondo de iniciativas
ciudadanas concursable, cuyo fin es crear vínculos
de colaboración entre las organizaciones de la
sociedad civil y el empresariado, así como fortalecer
capacidades para el manejo de conflictos y
monitoreo.
El Proyecto "Universidad: Construye País" es una
iniciativa que nació a comienzos de 2001 impulsada
por Corporación Participa en asociación con el
Grupo Avina, con la finalidad de coordinar, desde
las universidades, un trabajo destinado a generar
visiones y prácticas de RSE al interior de las
universidades y en la sociedad.
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
La incorporación de la RSE genera una alta valoración de
mercado que permite a las empresas retener clientes y
legitimarse ante sus empleados y accionistas. Estos
beneficios empresariales, favorecen a múltiples públicos
y mantienen un clima de armonía entre empresa y sociedad.
La RSE empieza por casa
A nivel de sector productivo, la RSE se constituye en una
oportunidad para obtener ventajas competitivas, debido
a que diferencia a las empresas del resto, aumenta su
competitividad en un mercado donde los productos son
cada vez más homogéneos, mejora la calidad de vida
interna y su imagen exterior, favoreciendo la inversión
extranjera.
Asimismo, se reconocen beneficios para el país en términos
del fortalecimiento de una imagen pública que lo lleva
a convertirse en una economía más dinámica, con mejores
ingresos, mayores fuentes laborales y mayor consumo.
Esto brinda la posibilidad de superar las barreras del
subdesarrollo, a través de la generación de conciencia y
responsabilidad hacia los demás. También genera
oportunidades de entrada comercial a países desarrollados
mediante el cumplimiento de estándares y certificaciones
internacionales. Muestra de ello es que aquellas empresas
que han incorporado buenas prácticas, en general, han
sido certificadas por las normas ISO.
La visualización de esta serie de beneficios y oportunidades,
evaluadas positivamente por la sociedad, está produciendo
un efecto multiplicador que permite masificar los aportes
al desarrollo social. Las organizaciones se están alentando
a adoptar o expandir esfuerzos de RSE que incrementen
estos positivos impactos.
DESAFÍOS
Integrar la RSE a la gestión estratégica de empresas,
sectores productivos y países, se convierte indudablemente
en un potencial elemento diferenciador en un mercado
globalizado.
Gran parte de las empresas que promueven o se identifican
con la RSE, la abordan desde el campo de la inversión
comunitaria, el marketing con causa o el cumplimiento
de normas de calidad técnico-productiva, como son las
ISO 9000 y 14000. Factores como éstos indican que en
el país se está produciendo un notable desarrollo del
tema, el cual se ha ido internalizando en los organismos
empresariales más importantes.
Adicionalmente, existen instituciones focalizadas en el
tema, que han avanzado en la inclusión y desarrollo de
proyectos de RSE en PyMEs. Se trata de proyectos pioneros
a nivel nacional y regional, que se constituyen en un
enorme desafío dada la relevancia que tienen estas
empresas como generadoras de riqueza, empleo y cohesión
social.

En el proceso de desarrollo de la norma ISO 26000 de
Responsabilidad Social, Chile ha tenido una relevante
participación dado que, a diferencia de otros países en
desarrollo, conformó el Comité Espejo, integrado en forma
voluntaria por 48 organizaciones representativas de todos
los sectores solicitados por ISO, lo cual sitúa al país en
una posición de liderazgo a nivel continental.
Sin embargo, el proceso está comenzando y es necesario
mantener e incrementar la participación de todos los
estamentos de la sociedad.
Dado que la RSE implica un cambio cultural, es necesario
educar en todos los niveles, para lo cual es fundamental
efectuar mayor difusión y visibilizar experiencias exitosas
de compañías que han incorporado este concepto,
concientizar a la población a ser responsable y contribuir
a la formación de ejecutivos en el tema.
Los resultados del Análisis de Tendencias,
Percepciones y Buenas Prácticas de RSE en Chile,
realizado por Vincular entre el 2003 y 2004,
indican que la RSE adquiere particularidades que
es necesario reconocer para poder determinar las
estrategias más adecuadas que permitan acelerar
su adopción. En Chile, particularmente, la RSE es
percibida como una ventaja competitiva en una
economía globalizada, con lo cual se demuestra
la importancia de integrar esta temática en la
estrategia de la empresa y cumplir cada uno de
los desafíos planteados.
REFLEXIONES
La entrada de Chile a los mercados mundiales y la
proliferación de normas que exigen mayor compromiso
con el desarrollo sustentable, han generado un cambio
en la visión de cómo las compañías se relacionan ambiental
y socialmente con el entorno. Por ello, la incorporación
de la RSE en el quehacer de las empresas se ha
transformado en un factor esencial para el éxito del
negocio.
La RSE empieza por casa
CHILE
Existen numerosas experiencias y casos prácticos de RSE
desarrollados por destacadas empresas chilenas que tienen
el poder de generar un efecto multiplicador. También se
observa una nueva demanda de la sociedad, hacia una
mayor orientación social de parte de las empresas.
De esta manera, "la aproximación al tema ha ido
evolucionando desde una acción social caritativa - vinculada
con el empresario filantrópico, motivado por razones
personales - hacia una respuesta y compromiso más
sistemático de la empresa, asumiendo un rol social frente
a la comunidad. También ha ido surgiendo con fuerza una
concepción de la empresa como una entidad que, como
un solo cuerpo, actúa tanto en la generación de riqueza
como en el comportamiento ético social".
(www.empresa.org).
No obstante, aún existe un camino por recorrer para hacer
que esta temática se incorpore como una manera de "ser"
empresa. Entre las iniciativas que marcan tendencia en el
desarrollo de la RSE, destacan los APL, las BPA, las
políticas de RSE dirigidas a mejorar el entorno laboral y
la implementación de acciones concretas de RSE en
establecimientos de educación técnica (formación dual)
y superior. Además, el ámbito académico y de investigación
ha comenzado a incorporar la RSE en las mallas curriculares
de diversas carreras universitarias.
Pero la internalización de la RSE no es espontánea, se
requiere de un trabajo e incentivos en materia de
colaboración entre organizaciones ciudadanas, empresas
y gobierno. En estos ámbitos se está tomando conciencia 37
de que la tarea de fortalecer y promocionar la RSE debe
ser compartida de modo que exista una cooperación
sistemática y efectiva entre todos los actores involucrados,
y la confianza necesaria para lograr un trabajo trisectorial.
Si bien Chile está en una etapa bastante más incipiente,
comparado con el nivel alcanzado en el mundo desarrollado,
tanto los gobiernos como diversas organizaciones de la
sociedad civil y también algunas compañías, se han unido
para llegar a acuerdos en torno a la adopción voluntaria
de normativas de RSE, especialmente en temas
medioambientales y de apoyo a la comunidad, con la
finalidad de poner atención a las señales internacionales.
Paralelamente, se han constituido organizaciones dedicadas
a promover y posicionar la temática, como AcciónRSE,
Fundación PROhumana, Sofofa Responsabilidad Social,
Unión Social de Empresarios y Ejecutivos Cristianos (USEC)
y Vincular.
Entre las destacadas labores de estas organizaciones
destacan los seminarios de RSE realizados anualmente
por PROhumana y el primer Diplomado Internacional en
RSE impartido por Vincular, en Chile, en el 2005.
Es posible afirmar, en consecuencia, que Chile ha dado
grandes pasos en esta temática, pese a que aún quedan
muchas etapas por superar.
 CHILE
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
CHILENOS?
- El centro Vincular se encuentra ejecutando, desde marzo
del 2004, el proyecto "Adopción de la RSE en las PyMEs
en Chile", con financiamiento del BID y de la Corporación
de Fomento de la Producción (CORFO). Esta iniciativa,
pionera a nivel mundial, busca en un plazo de cuatro
años, mejorar la competitividad de al menos 150 PyMEs
de los principales sectores exportadores del país. Para
ello se han desarrollado estrategias por sectores productivos
en RSE, con el apoyo de los gremios empresariales más
importantes.
- Red Puentes Chile, en la primera etapa del Fondo de
Iniciativas Ciudadanas, finalizada en septiembre de 2005,
apoyó a cinco organizaciones en el desarrollo de proyectos
de RSE. Además, capacita en RSE a dirigentes de la VII
Región del país.
- En el marco de la III Conferencia Interamericana de RSE
organizada por el BID junto a la CPC, en septiembre de
2005 en Santiago, se lanzó el estudio "Situación de la
Responsabilidad Social en las PyMEs de Latinoamérica",
coordinado por el BID e IKEI, del cual se constata que
las MiPyMEs chilenas presentan un mayor grado de
conciencia sobre la importancia de la RSE en comparación
con sus pares latinoamericanas y que existe una tendencia
notoriamente mayor a realizar actividades internas.
38
La RSE empieza por casa
- En octubre de 2005 comenzó a desarrollarse un segundo
proyecto FONDEF, adjudicado a Vincular, "Modelo de
Mejoramiento de la Productividad a través de la Calidad
de Vida Laboral", cuyo principal objetivo es medir el
grado de satisfacción e insatisfacción laboral de los
empleados y establecer planes concretos de acción. Para
su desarrollo se cuenta con el especial apoyo de ACHS,
dado que se utilizará la metodología de su Balance Social
Interno, eficaz instrumento de gestión de personal, que
aplica desde hace 30 años constituyéndose en el primer
programa de este tipo en Chile y Latinoamérica. En un
plazo máximo de diez años el modelo será transferido a
más de 500 empresas chilenas de distintos sectores y
tamaños.
- Para una segunda etapa del período 2004 - 2005, el
Proyecto "Universidad: Construye País" se ha propuesto
potenciar el desempeño de sus 15 universidades socias
en relación con su responsabilidad social, desarrollar
metodologías de encuentro entre las universidades y su
entorno local, regional y nacional y hacer aportes a
políticas nacionales desde la reflexión universitaria con
criterios de RSE. Con este propósito, desarrolla cuatro
líneas de acción: experiencia demostrativa en la macro
región sur de Chile, sobre el vínculo universidad-región;
políticas públicas de educación superior; difusión del
concepto y la práctica de RSE; y experiencia piloto de
innovación curricular.
 COLOMBIA
De la filantropía a la estrategia

En Colombia la Responsabilidad
Social Empresarial no es un tema
nuevo. Los empresarios la han
aplicado desde una perspectiva
filantrópica, cumpliendo con su cuota
de retorno a la sociedad. Pero la
evolución, no sólo del concepto sino
de las prácticas, ha hecho que en el
país la RSE se haya ido introduciendo
en la estrategia de negocio de las
diferentes empresas, con el objetivo
de contribuir a la generación de valor
para la sociedad.
Colombia

Colombia
De la filantropía
a la estrategia
Uno de los temas emergentes y que ha cobrado enorme
vigencia para las empresas de todos los sectores en el
mundo es la Responsabilidad Social Empresarial (RSE).
Este concepto y las prácticas que de él se derivan, han
llegado para quedarse y están llevando a las empresas a
un cambio de paradigma en el enfoque de sus negocios:
integrar en sus estrategias profundas miradas sociales,
culturales y ambientales para generar valor público en
todos sus grupos de interés a través de su positiva actuación
en la sociedad.
Colombia vive un momento en el cual la RSE deja de ser
algo abstracto y se integra como parte fundamental en la
gestión de la empresa. La pregunta sobre el recurso
humano, el medio ambiente, las relaciones con la
comunidad y con sus grupos de interés cobra otro
significado y aparecen nuevos sentidos para las actuales
prácticas. Pero, ¿hasta dónde se aplican los principios de
RSE al interior de las empresas colombianas? En realidad,
lo que hoy en día se plantea es una nueva idea de empresa
en la que el acatamiento a los estándares mínimos
internacionales, de respeto por las condiciones humanas,
pasa a ser una cuestión intrínseca al proceso de
construcción de la empresa responsable.
En este contexto, la compañía colombiana debe asumir su
papel como agente moral y económico, tomando para sí el
concepto de RSE, que empieza a ser desarrollado. Bajo
estos principios, los proyectos y programas de las empresas
deben estar encaminados hacia la promoción del desarrollo
humano y la construcción de capital social, dentro de la
orientación hacia la construcción de un proyecto de país
que sea viable a largo plazo.
De la filantropía a la estrategia
COLOMBIA
Sociedad
Empresa
Se ha generado un cambio de paradigma en la
relación empresa – sociedad. La empresa ya no gasta
en las necesidades de la sociedad de manera reactiva,
sino que invierte de manera proactiva.
LA CIUDADANÍA: CONFORME
CON EL ASISTENCIALISMO
Las condiciones de vida en Colombia no han llevado a
crear consumidores exigentes, preocupados de la cadena
de valor que representa cada producto que adquieren; al
contrario, termina siendo una ganancia tener acceso a
todo lo necesario. En ese orden de ideas, la ciudadanía 41
percibe como socialmente responsable a aquella empresa
que se ocupa de aportar económicamente a la solución
de las necesidades básicas de quienes le rodean. Sin
embargo, a medida que el concepto se institucionaliza,
queda en evidencia que la RSE es mucho más que ocuparse
de las necesidades de la comunidad. Se va entendiendo
que es relevante que la empresa tenga un comportamiento
socialmente responsable al interior de sí misma, pues es
la forma de no proyectar imágenes equivocadas.
En la medida que los procesos de capacitación, formación
y comunicación de la RSE se acercan al ciudadano, se
comienza a gestar una población informada capaz de hacer
exigibles, tanto al sector público como privado, los
beneficios de una nueva visión de las relaciones entre
empresa y sociedad.
Foro de RSE
Universidad
Javeriana,
Bogotá 2005.
 COLOMBIA
EL ESTADO:
ACCIONES CONCRETAS
Existe una conciencia creciente por parte del Estado que
las empresas deben ser motor de cambio social y colaborar
con la construcción de la paz. Se considera que los graves
problemas de violencia y pobreza que tiene la sociedad
colombiana, no pueden ser solucionados sólo por el
Estado y que, por lo tanto, las empresas deben asumir
un papel más activo.
La RSE se ha ido posicionando en la agenda del gobierno
en las últimas décadas y más cuando se está inmerso en
procesos de privatización, en los cuales muchos de los
bienes sociales, por excelencia a cargo del Estado, pasan
a entidades privadas.
En Colombia existen muchos esfuerzos por parte del
gobierno para impulsar y priorizar la RSE: 1. En el campo
de la seguridad social, el ministerio pertinente viene
trabajando con la Comisión Empresarial de Asesoramiento
Técnico en Asuntos Laborales, promoviendo ambientes
de trabajo seguros, que conllevan al aumento de la
eficiencia y la reducción de los costos. 2. El Departamento
Nacional de Planeación viene trabajando en la Agenda
Interna para la Productividad y la Competitividad. 3. Las
superintendencias como órganos de inspección y vigilancia
adelantan una serie de acciones y programas sobre RSE,
que comprometen a sus vigilados. 4. El programa
presidencial de lucha contra la corrupción, motiva en
42
especial el control social y ciudadano. 5. La Dirección de
Regulación del Ministerio de Comercio, dentro de sus
funciones, dirige el sistema nacional de normalización,
acreditación y certificación, dentro del cuál se enmarca
la participación en la creación de la norma ISO 26000 de
Responsabilidad Social. 6. La Superintendencia de Valores
se hace cargo de los temas relacionados con Gobierno
Corporativo.
Los esfuerzos son muy puntuales y focalizados en el
gobierno colombiano, pero revelan la clara y manifiesta
intención de apoyar la RSE como mecanismo estratégico
de desarrollo y crecimiento económico.
LOS EMPRESARIOS:
RSE Y FUNDACIONES
El empresariado colombiano tiene una larga tradición
filantrópica que desde hace varias décadas lo motivó a
generar acciones y espacios de ayuda a la comunidad
para superar las diferentes crisis políticas y económicas
del país. Estas acciones se formalizaron a través de la
creación de fundaciones empresariales, las cuales son
muy numerosas y significativas. Pese a que en Colombia
el concepto y la práctica sobre la RSE han cambiado
De la filantropía a la estrategia
paulatinamente y existen empresarios preocupados por
el tema y su aplicación, un gran sector sigue considerando
esta práctica más como filantropía que como el verdadero
compromiso que tiene la empresa en contribuir al desarrollo
y al mejoramiento de la calidad de vida de empleados,
familia y comunidad en general.
En este sentido, la Asociación Nacional de Empresarios
de Colombia (ANDI) realizó en el 2004, entre 124 empresas
afiliadas, la segunda encuesta de Responsabilidad Social
Empresarial y sus resultados revelaron que las empresas
que respondieron la encuesta invirtieron el 2,5% de sus
ventas en acciones de responsabilidad social, sin contar
los aportes parafiscales. Además, reveló que el 98,3% de
los empresarios apoya la idea de asumir voluntariamente
códigos de conducta. A su vez, el 66,4% apoya el diseño
y aplicación de normas que midan el cumplimiento de
las obligaciones en esta materia.
"En la empresa se ha tratado de dignificar el trabajo
y mantener los valores de la RSE pese a los
innumerables retos que ello implica. Y es que si no
lo hacemos no habrá empresas, por lo que todos
tenemos que contribuir a hacer mejor y más viable
este país". Eduardo Macía Restrepo, Gerente General
Crepres & Waffles de Colombia.
LA SOCIEDAD CIVIL: ROL ACTIVO
En Colombia la sociedad civil ha jugado un rol importante
en la difusión, desarrollo y consolidación de la RSE, lo
que se manifiesta en diferentes proyectos, ejecutados por
ONGs y empresas para dar origen a fundaciones
empresariales y corporaciones mixtas de desarrollo, como
el caso de Corporación Calidad e Innovar, Corpoeducación,
Transparencia por Colombia y Corporación Colombia
Internacional. Por otro lado, existe una cantidad
considerable de ONGs cuyo papel central es brindar a la
población más marginada programas de nutrición,
educación, creación de microempresas y planes de
capacitación, entre otros.
En consecuencia, los diferentes actores de la sociedad
civil dan muestra de un rol activo, en la solución de las
problemáticas que más aquejan al país.
También, entidades académicas se han ocupado en los
últimos años de propiciar discusiones en profundidad
sobre la RSE, desde las verdaderas motivaciones que
llevan a una empresa a incorporarla, hasta la generación
de modelos que permitan su real implementación. De
igual manera, las Cajas de Compensación Familiar empiezan
a utilizar como estrategia de negocio, la RSE, convirtiéndose
en actores relevantes para su difusión e implementación.

La sociedad civil se ha articulado a esfuerzos
internacionales de manera clara y decidida. Es el caso
del Grupo de Ética y Responsabilidad Social Empresarial
de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas
de la Universidad Javeriana y el Centro Colombiano
de Responsabilidad
Empresarial, los
cuales son miembros
activos de la Red
Interamericana de
RSE.
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
Hablar de beneficios globales generados por la RSE no
sería del todo apropiado, debido a que el tema apenas
está cobrando cierta relevancia entre los empresarios
colombianos y en general en toda la sociedad. Proyectos
propiciados por empresas de forma individual han
beneficiado a algunas poblaciones, pero no han tenido
un mayor impacto a nivel del territorio nacional.
La RSE genera beneficios a quienes la implementan desde
diferentes puntos de vista. En el caso colombiano, se está
iniciando un proceso de identificación de estos beneficios,
contextualizados con la realidad local, pues algunos
estudios a nivel internacional sobre el tema muestran que
la RSE mejora el desempeño financiero, disminuye costos
de operación en las prácticas relacionadas con el medio
ambiente y el clima laboral, y mejoran la imagen de la
empresa, entre muchos otros resultados.
Le queda al país la tarea de comprobar los beneficios de
ser socialmente responsable y de difundir las experiencias,
a fin de que se conviertan en programas dignos de imitar.
En contextos como el colombiano, en el cual las empresas
están ingresando crecientemente al mercado internacional,
la RSE se convierte en una ventaja competitiva que les
permitirá acercarse de manera más segura a la competencia.
Políticas claras de RSE generan mayor confianza por parte
de los inversionistas en la economía nacional y en el
manejo de recursos de las empresas, pues se asume una
administración transparente de la información.
En todos los sectores de la economía los consumidores
pueden confiar en los productos, se desarrollan
oportunidades de creación de nuevos negocios que, a
través del manejo de estándares internacionales, permiten
incursionar en nuevos mercados, más exigentes pero más
rentables, con innovación y creatividad, lo que a futuro
hace crecer la economía, mejora las relaciones laborales
y comerciales.
De la filantropía a la estrategia
COLOMBIA
Las acciones de RSE generan, entonces, la oportunidad
de crear confianza en los productores, en los consumidores,
en los inversionistas, etc. Y la confianza es un valor
fundamental que apunta al fortalecimiento de las redes
de capital social, elemento esencial para alcanzar el
desarrollo del país.
DESAFÍOS
El desafío para Colombia radica en desarrollar cada uno
de los ámbitos de acción de la RSE, posibilitando el uso
de estrategias y herramientas que aumenten la productividad
y la rentabilidad de los negocios, estableciendo mercados
estables que acerquen a los clientes. Junto con ello, se
requiere desarrollar políticas y programas de calidad
laboral. El Estado debe respaldar las iniciativas del sector
privado y motivar a la sociedad civil a participar activamente
de ellas.
Otro desafío primordial consiste en motivar e incentivar
el fortalecimiento de una cultura de RSE, tanto en las
empresas del sector público como privado, generando
altos niveles de responsabilidad en los empleados, a fin
de que la RSE se vea involucrada en las actividades diarias
de la empresa y sea parte de su estrategia de operación.
También se requiere integrar a las pequeñas y medianas
empresas al proceso de desarrollo de la RSE en el país,
pues economías como las colombianas cuentan con una
gran cantidad de PyMEs que están en capacidad de
implementar sistemas de gestión para acercarse a procesos 43
de certificación de calidad, no sólo en sus procesos sino
en sus acciones socialmente responsables. En este sentido,
el desafío está en promover la certificación de las empresas
en diferentes normas y estándares internacionales que
avalen sus acciones en RSE.
Finalmente, la academia está llamada a desempeñar un
papel fundamental en la formación de profesionales cuyo
criterio laboral se fundamente en la promoción de acciones
socialmente responsables que hagan de Colombia un país
mejor.
La formación en RSE es fundamental para los nuevos
profesionales de todas las áreas. Ese será uno de
los desafíos del país.
 COLOMBIA

REFLEXIONES Además de empresas organizadas existen promotores de la

La sociedad colombiana ha estado cada vez más abierta
al proceso de globalización, a la influencia que conlleva
sumergirse en los mercados internacionales. Por ello, la
RSE ha llegado a la agenda del país de manera decidida
y aunque en términos generales en Colombia no se
perciben alcances significativos en esta materia, puesto
que no existe aún una conciencia colectiva al respecto,
los logros están sectorizados.
Se pueden señalar ejemplos concretos: 1. Indupalma: es
una empresa pionera en cultivo de palma de aceite en
Colombia, que a través de un programa de cultivo permitió
convertir a 300 campesinos en propietarios de parcelas.
2. Alquería: estableció una alianza entre la empresa y los
pequeños productores de leche de una región del país,
a fin de beneficiar a la comunidad. 3. Crepes & Wafles:
la mayoría de sus empleados son mujeres madres, cabeza
de familia, para quienes constantemente se desarrollan
planes de adquisición de vivienda, programas de salud,
planificación familiar, orientación sociofamiliar, recreación,
educación, capacitación y entrenamiento, lo cual les
permite crecer personal y profesionalmente. 4. Asociación
Nacional de Industriales (ANDI): realiza acciones de RSE,
como creación de Cajas de Compensación, Código de
Ética - Decálogo Empresario, Balance Social, Comités RSE
(10 ciudades con 450 participantes), Encuesta Anual de
RSE.
44 ¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
COLOMBIANOS?
- El FondoDe la filantropía
Multilateral a la estrategia
de Inversiones (FOMIN) del Banco
Interamericano de Desarrollo aprobó una donación de
1.160.000 dólares a la Confederación Colombiana de
Cámaras de Comercio (Confecámaras), con el objeto de
ayudar a 400 PyMEs a adoptar prácticas de RSE.
RSE en el país, es el caso de:
1. Centro Colombiano de Responsabilidad Empresarial
(CCRE): organización no gubernamental que se ha dedicado
a la divulgación, promoción, investigación y asesoría de
empresas en temas relacionados con RSE y ética de las
organizaciones.
2. Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo
Sostenible (CECODES): corporación conformada por 28
empresas y tres gremios, pertenecientes a las áreas más
importantes de la economía colombiana -minería, petróleo,
agroindustria, manufactura, construcción, comercio, banca
y seguros-. Promueve la cooperación entre el gobierno, el
sector privado y la sociedad civil, impulsando altos estándares
de manejo ambiental y ofreciendo soluciones para lograr un
marco institucional que permita al sector empresarial contribuir
efectivamente al desarrollo sostenible en Colombia.
3. Grupo de Ética y Responsabilidad Social Empresarial
(GERSE): la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas
en el contexto de los valores propios de la Pontificia
Universidad Javeriana, desarrolla fuertes procesos tendientes
a promover el conocimiento y la cultura de la RSE en sus
profesores, estudiantes, personal administrativo y demás
actores involucrados en su quehacer.
4. Compartamos con Colombia: entidad que presta
servicios profesionales a un selecto grupo de entidades sin
ánimo de lucro, para aumentar su viabilidad y efectividad,
además de incrementar el flujo de donaciones extranjeras,
asesorar en el diseño y en la implantación de estrategias
de RSE.

- Colombia se está preparando para desarrollar programas

de capacitación y formación en RSE, acordes a cada uno
de los grupos de interés. Se busca capacitar a empresarios,
consumidores, profesores, agentes de gobierno y
estudiantes, a fin de que el concepto quede fortalecido
y a la vez se generen prácticas de mayor calidad.

- GERSE inició un proceso de documentación de prácticas,

pues existen numerosas experiencias en el país que
merecen ser contadas y convertirse en ejemplos a seguir
por aquellos que inician su camino en la RSE.

- La tendencia en Colombia es el desarrollo de eventos

de RSE vistos desde el sector público, gremios y desde
la concepción teórica del concepto.

De la filantropía a la estrategia
 COSTA RICA
Los cambios están en camino

Si bien la Responsabilidad Social

Empresarial se encuentra en una
etapa incipiente en Costa Rica,
presenta un gran potencial para
contribuir al desarrollo, tanto de las
comunidades aledañas a las
empresas como de la sociedad en
general.
Costa Rica

Costa Rica
Los cambios están
en camino
No es posible establecer una fecha que marque el inicio
en la adopción de la Responsabilidad Social Empresarial
(RSE) como estrategia de negocio en Costa Rica. Si bien,
a través del tiempo muchas empresas han contribuido por
medio de la filantropía al bienestar de las personas, es
posible distinguir dos períodos en la historia económica
del país para referirse a la adopción de prácticas de RSE.
Un primer período data de los años 30, cuando compañías
extranjeras, como las bananeras, tuvieron que invertir en
infraestructura física y social para crear enclaves que les
permitieran operar en zonas aisladas de los centros
poblacionales de la época. Las intervenciones de esas
compañías fueron vistas como necesidades del negocio y,
en muchos casos, como parte del proceso de explotación
agrícola basado en mano de obra barata.
Un segundo periodo data de los últimos 15 años, cuando
los esfuerzos del país por atraer inversión extranjera
conllevaron la llegada de multinacionales como Intel,
Baxter Healthcare, Abbot y Procter & Gamble, cuyas
políticas corporativas incluyen la RSE como imperativo de
negocio. A partir de la operación de éstas y, en menor
medida, de otras empresas de capital extranjero, nacional
o mixto, se dio origen a la "RSE moderna".
Vale la pena aclarar que entre los dos periodos
mencionados, las intervenciones empresariales tomaron,
en general, un enfoque filantrópico, por lo que el impacto
de las empresas, más allá de su papel tradicional, fue
mínimo.
Esta "RSE moderna" ha adquirido una importancia
creciente, producto de su potencialidad para incidir
positivamente en el desarrollo de los países. Sectores
tanto de la sociedad civil como del Estado empiezan a
notar que las exigencias derivadas del fenómeno de la
globalización, requieren la incorporación de mecanismos
e instrumentos que ayuden a los países a mejorar su
posicionamiento en el mercado global. En este entorno,
se reconoce que las empresas deben trascender su papel
tradicional hacia uno más activo en la provisión de bienestar
social, sin que disminuya su rentabilidad.
Los cambios están en camino
COSTA RICA
LA CIUDADANÍA:
RECEPTORA DE OBRAS SOCIALES
En Costa Rica es frecuente el incumplimiento de la ley,
por ejemplo, la morosidad de pagos, indicio de que no
todas las empresas que operan cumplen con la legislación
laboral vigente. Asimismo, no hay un discurso sobre el
desarrollo de nuevas leyes ni de la mejor aplicación de
la legislación actual por parte de las empresas. Este vacío
provoca en la ciudadanía una percepción simple respecto
de la RSE, visualizándola principalmente en hechos que
afectan directamente a la comunidad.
Desde el punto de vista de los consumidores, las prácticas
de RSE deben ser más que estrategias orientadas a resolver
problemas causados por los procesos de producción. Se
requiere de una actitud política que genere voluntad,
capaz de producir encadenamientos para la incorporación
de las empresas en el desarrollo del país, donde todos
los ámbitos: económico, social y ambiental, tengan igual
importancia. Las prácticas de RSE deben constituir
estrategias que las empresas cumplan para generar
bienestar.
Los consumidores reconocen que un elemento fundamental
de los resultados de implementar prácticas de RSE es que
las empresas tomen conciencia de que su incorporación
también sirve como estrategia de mercadeo. Cuando las
prácticas de RSE sean valoradas desde un punto de vista
publicitario por parte de las compañías, se logrará un
posicionamiento diferente de éstas en el mercado y serán 47
más quienes vean los beneficios que genera una buena
reputación.
Los ciudadanos de comunidades aledañas a
empresas que llevan a cabo prácticas contaminantes
o perjudiciales para la vida, cuestionan firmemente
estas actividades y exigen el desarrollo de mejores
prácticas.
 COSTA RICA
EL ESTADO:
ESCASA PARTICIPACIÓN
Desde el punto de vista político-institucional no existe
gran involucramiento en torno a la ejecución o fomento
de prácticas de RSE. El esquema ha quedado al arbitrio
fundamentalmente del mundo empresarial. Algunos
ministerios directamente afectados con las tendencias
económicas mundiales conocen de la RSE y de sus
implicaciones. Sin embargo, hasta el momento no han
tenido incidencia alguna en el impulso de esta temática
como tema a incluir en la agenda de desarrollo.
Aún así puede observarse el interés por parte de algunas
instituciones que han llegado a valorar la importancia de
transitar a esquemas consecuentes con las exigencias de
la globalización. En este sentido, el Ministerio de Trabajo,
entre otras instituciones, se ha pronunciado a favor de
la promoción de prácticas de RSE, para lo cual se considera
necesario pasar de una labor de simple inspección a las
empresas, a una más bien preventiva, educando y
concientizando a la población sobre los beneficios
potenciales de implementar prácticas socialmente
responsables.
La RSE es concebida como una nueva filosofía que
debe ser implementada sin la necesidad de un
aparato coercitivo que exija su acatamiento. Por lo
tanto, la RSE no constituye una barrera sino más
48 bien un esquema que genera sostenibilidad,
productividad y competitividad.
LOS EMPRESARIOS:
POR DEBAJO DE LA LEY
En Costa Rica no es fácil encontrar empresas que
manifiesten un compromiso público de acatamiento a la
ley para su funcionamiento, ya sea dentro de su filosofía
empresarial, objetivos estratégicos, su misión o visión.
En el país, la buena imagen de una compañía no está
condicionada por sus prácticas conformes a la ley, es
decir, no es necesario que una empresa esté en regla
para posicionarse bien en el mercado, vender o producir
mercancías y generar utilidades. No se dan a conocer las
infracciones a la ley hasta que una empresa comete daños
significativos que captan la atención, ya sea de los medios
de comunicación o de organizaciones sociales que tratan
temáticas relacionadas con el perjuicio cometido. Por otro
lado, las empresas explícitamente no hablan ni llevan a
cabo esfuerzos para promover el respeto por los Derechos
Humanos (DDHH). Los mencionan a través de subcategorías,
estrechamente relacionadas con el funcionamiento de la
empresa, es decir, en el contexto de los derechos laborales
Los cambios están en camino
o en caso de violaciones graves, que atraen la atención
nacional e internacional.
No obstante, existen casos que demuestran que la RSE
ha ido permeando las nociones de algunos empresarios.
Un claro ejemplo de ello se observa en el Hotel Punta
Islita, ubicado en la provincia de Guanacaste, el cual ha
implementado en su estrategia un enfoque de
fortalecimiento de la comunidad en la que opera, al
determinar que su bienestar incide, entre otros aspectos,
en la productividad de los empleados del hotel, así como
en la sostenibilidad de los proveedores. El gerente del
hotel, Eduardo Villafranca, manifiesta que "tanto las
grandes empresas como las pequeñas y medianas (PyMEs)
son actores que pueden ayudar a subsanar los
desequilibrios sociales que antes eran responsabilidad
del Estado, a través del impulso de programas de desarrollo
social".
En la misma línea, el gerente general de la subsidiaria de
Centroamérica de Sc Johnson, Paul Bornemisza, afirma
que "se requiere construir un círculo virtuoso de generación
de valor, que comience con el desarrollo de una fuerza
de trabajo productiva. Las iniciativas de RSE de la empresa,
tanto en lo interno como en lo externo, están estrechamente
ligadas a fortalecer este círculo". Lo anterior es indicativo
de cómo las prácticas sostenibles se han extrapolado a
Costa Rica. En mayor o menor grado, se encuentran
empresas, tanto grandes como PyMEs, que comienzan a
ver la importancia de controlar sus impactos para asegurar
su sostenibilidad. Además han surgido organizaciones
que promueven y trabajan conjuntamente para obtener
efectos multiplicadores en RSE.
LA SOCIEDAD CIVIL:
RELACIONES SUSTENTABLES
Algunos sectores de la sociedad civil, como la academia
a través del Instituto Centroamericano de Administración
de Empresas (INCAE), Consumidores de Costa Rica y el
Centro Nacional de Producción más Limpia (CNP+L), entre
otros, coinciden en que la aplicabilidad de prácticas de
RSE pueden incidir de forma positiva en el desarrollo
sostenible del país. En este sentido, INCAE considera que
partiendo de la premisa y del hecho de que la propia
competitividad de los negocios puede verse seriamente
afectada en el mediano o largo plazo, en caso de persistir
las principales brechas que mantiene Costa Rica y la
región en temas como educación, tecnología, corrupción,
salud, desempleo y barreras burocráticas, se hace imperativo
contar con una mayor contribución de las empresas para
mejorar la plataforma competitiva nacional. La forma más
simple de hacerlo es canalizando prácticas de RSE mediante
acciones que contribuyan a superar las principales barreras
que frenan el desarrollo de los países.

BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
La incorporación de la RSE hasta el momento no se ha
apreciado en aspectos prácticos que puedan ser
considerados como beneficios. Sin embargo, existe la
percepción de que su implantación en el mercado
costarricense puede beneficiarlo de múltiples maneras.
Desde el punto de vista de consumidores locales, les
permite acceder a mejores condiciones de compra,
facilitando el acceso a la información respecto de productos
y entregando mejores oportunidades de ejercer
positivamente sus derechos ciudadanos. En términos de
industria local, permite posicionarse en el mercado, dado
que las condiciones de contexto frente a la región son
claramente positivas para el país.
Además, la adopción de prácticas de RSE puede abrir
paso al diálogo y análisis para el cambio, al desarrollo
de guías que aseguren la calidad de su gestión, a normas
para asegurar su replicabilidad en el tiempo y, por ende,
a la sostenibilidad de las prácticas.
DESAFÍOS
En Costa Rica, los desafíos que se presentan están
asociados a las nuevas relaciones comerciales que se
establecen a partir de los Tratados de Libre Comercio
(TLC). En este sentido, hay sectores que visualizan que
ante la apertura comercial, el sector privado, por ejemplo,
no encontrará mayores problemas, ya que los esquemas
a través de los cuales se desenvuelven habitualmente no
son muy diferentes de las exigencias que se incluyen en
los TLC, por lo que la RSE se constituye en un factor de
fácil incorporación. Esto se verá reflejado en requerimientos
tales como: esquemas de comercialización más eficientes,
nuevas estrategias económicas y nuevas formas de
competencia a través de educación y capacitación.
Por otro lado, el sector público sufrirá una ruptura con
los esquemas de comercialización y distribución. El punto
medular será tratar de garantizar la confianza de los
consumidores en un esquema de apertura.
Las empresas públicas deberán adoptar modelos de
competencia a los cuales no están acostumbradas. Existe
un riesgo latente en el mantenimiento de la competencia.
En este contexto, otro sector afectado serán las PyMEs,
las cuales tienen gran importancia como generadoras de
empleo, de ingresos, dinamizadoras del desarrollo local
y complemento de las operaciones de grandes empresas.
Éstas deberán ajustarse, eventualmente, a los imperativos
de la globalización. Será necesario un replanteamiento en
su forma de hacer negocios, comenzando por abordar los
problemas relacionados con el cumplimiento de las normas.
Los cambios están en camino
COSTA RICA
Cabe destacar que las PyMEs tienen grandes dificultades
cuando se trata de cumplir con normas mínimas, situación
que retrasa el desarrollo del país, mientras que las grandes
empresas con las que van a competir o a las que les van
a suministrar, han llevado a cabo los estudios necesarios
y están en regla en aspectos elementales para continuar
con su negocio.
PROMOTORES DE LA RSE EN COSTA RICA
Las empresas que desarrollan prácticas de RSE pueden
recurrir a organizaciones, asociaciones o instancias del
gobierno para aunar esfuerzos, mejorar sus operaciones,
aumentar su impacto en el desarrollo e incrementar su
rentabilidad. Las alianzas estratégicas en un mundo cada
vez más competitivo permiten que cada quien realice el
trabajo que desempeña mejor, lo que se traduce en mayor
eficiencia, reducción de costos y sostenibilidad.
Ejemplos de organizaciones que desarrollan aspectos de
la RSE, fundamentalmente en el área de la educación, son
el Centro Internacional para el Desarrollo Humano (CIDH)
y Amigos del Aprendizaje (ADA), los cuales a través de
investigaciones, generan material para el desarrollo de
capacidades de empresas y públicos interesados. CIDH,
en sociedad con el Instituto del Banco Mundial, ha
elaborado cinco módulos para capacitación en RSE, que
cubren los aspectos de sensibilización e introducción de
conceptos, beneficios de la RSE, competitividad
(implementación de la RSE), RSE como instrumento para 49
el desarrollo local, y RSE y producción más limpia.
Asimismo, ADA enfoca sus esfuerzos en el desarrollo de
capacidades para niños en educación preescolar en las
áreas de comunicación y lenguaje. Su trabajo lo desarrolla
junto a empresas como Intel y Procter & Gamble, quienes
han adquirido conciencia en torno a la necesidad de
apoyar esfuerzos para mejorar las destrezas de un recurso
humano "potencial" que eventualmente les será útil. La
ayuda de dichas empresas se lleva a cabo en el marco de
las prácticas de RSE.
También existen organizaciones que trabajan más a un
nivel de gestión de la RSE, acompañando técnicamente
a las empresas en su implementación. Un ejemplo de este
tipo de organizaciones es el Centro de Gestión Tecnológica
e Informática Industrial (CEGESTI), que en el marco del
programa Reducción de la Pobreza y Mejoramiento
Ambiental, trabaja en el fortalecimiento de las capacidades
de las PyMEs de la región, así como en la identificación
de oportunidades y acceso a mercados. Para este fin,
CEGESTI ha desarrollado una metodología que incluye
fases de investigación, conceptualización de la estrategia
de la empresa a largo plazo e implementación, enfocándose
en procesos de mejoramiento continuo.
 COSTA RICA

La organización Rainforest Alliance, que se desarrolla en
el marco de un enfoque ambiental, ha elaborado una
serie de estándares para la reducción y eliminación de
ciertas externalidades negativas tanto ambientales como
sociales. Sus esfuerzos han tenido incidencia en la
transformación de prácticas ambientales y sociales de
empresas como, Chiquita Brands. La organización también
ofrece herramientas sobre procesos de mejoramiento
continuo en sectores como eco-turismo, silvicultura, cítrico
y en la industria bananera. Además, certifica a empresas
que implementan dichos programas, con un plan de
seguimiento y mejoramiento continuo, protegiendo los
recursos naturales, la tierra y las comunidades locales.
Se hace imperioso reforzar aspectos como la
sensibilización y diseminación de información, la
inclusión de todos los sectores productivos en
procesos de cambio para aumentar sus niveles de
competitividad e incentivar la colaboración estratégica
entre sectores productivos, sociales y políticos.
REFLEXIONES
Las iniciativas socialmente responsables de las empresas
alrededor del mundo han ganado protagonismo en los
últimos años. Una de las razones que explican este
50 fenómeno es la lógica de la globalización, la cual está
abriendo nuevas fronteras económicas y generando
desafíos para las empresas. Éstas se ven obligadas a
implulsar un cambio en el modelo de negocios adoptado,
para responder tanto a dichos desafíos, como para tener
éxito en la nueva economía.
gobierno, por lo que sólo los sectores directamente
afectados son quienes saben de las implicaciones y del
contenido de sus prácticas asociadas.
La RSE no es parte de la estrategia de desarrollo del país,
por lo que no sorprende que pocos sectores políticos
conozcan el tema. El Estado no se atribuye ningún rol en
la contribución al desarrollo de esta temática. Esto abre
un gran desafío para el sector, relacionado al
condicionamiento comercial y la sostenibilidad de las
empresas, lo cual va a depender en gran parte de la
incorporación de prácticas de RSE en su gestión.
Uno de los principales impulsores de la RSE en el país
son las empresas. Las escasas compañías que lo están
llevando a cabo, piensan que eventualmente pueden llegar
a condicionar las relaciones comerciales. La opinión acerca
de las tendencias en el país indica que esta temática
progresivamente irá afectando las oportunidades de
negocio.
Asimismo, representantes de ONGs como el Centro Nacional
de Producción más Limpia, asociado a la Cámara de
Industrias, establecen que las empresas se vuelven más
competitivas al mejorar sus sistemas de distribución, la
calidad de sus productos, su cobro y todos aquellos
aspectos que de una u otra forma tienen una incidencia
directa en la competitividad de la empresa y en el mercado
en el que se desenvuelven.
En definitiva, la RSE va a ser un componente esencial en
el desarrollo del país, porque a medida que se incorpore
a nivel general en la estrategia de desarrollo, logrará
posicionarse de una manera diferente, incrementando así
su desarrollo.

La globalización arrastra un sinnúmero de problemas

ambientales y sociales, los que a su vez van acompañados
de un creciente escrutinio por parte de actores sociales
diversos, como ONGs, sindicatos y asociaciones de
activistas en todo el mundo. Dichos grupos han trabajado
por el replanteamiento del papel y la función que han de
desempeñar las empresas, ya no sólo como creadoras de
riqueza sino también como facilitadoras y contribuyentes
al bienestar social.

No obstante, la población costarricense reconoce escasos

grupos concientes de la tendencia de RSE. Aunque se
han realizado esfuerzos para sensibilizar y concientizar
acerca del enfoque, son pocos quienes participan
activamente en la difusión y discusión del tema.

La ciudadanía no se atribuye ningún rol en materia de

RSE, es más, la gran mayoría desconoce el enfoque. En
el país la difusión de esta temática ha sido escasa, con
excepción de algunos periódicos que han escrito reportajes
sobre el tema. Por otro lado, no es una política de

Los cambios están en camino


¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
COSTARRICENSES?
CIDH es la organización más activa en el movimiento de
RSE en Costa Rica. Prueba de ello son las múltiples
iniciativas en las que se encuentra involucrada:
- Programas de intercambio de experiencias y actividades
relacionadas a la gestión de la RSE en la dimensión social,
contribuyendo a la sensibilización de algunos sectores a
nivel local. Estas iniciativas se originaron ante la necesidad
de desarrollar condiciones competitivas en Centroamérica
que permitieran una inserción en los mercados
internacionales. Su finalidad es incidir en la formación de
una masa crítica y en la discusión de políticas públicas.
- Desarrollo de material didáctico para la capacitación en
prácticas sostenibles, tomando en consideración el esquema
de producción más limpia y de eco-eficiencia.
- Sensibilización y desarrollo de capacidades para gestión
de RSE en diferentes stakeholders, con el propósito de
expandir prácticas de RSE como un instrumento de
competitividad y desarrollo local.
- Desarrollo de un módulo de gestión que incorpore la
RSE a partir del ámbito ambiental para poder normalizar
Los cambios están en camino
COSTA RICA
prácticas asociadas a ella, en los temas de producción
más limpia y de eco-eficiencia, el cual será impartido
próximamente.
Costa Rica participa activamente en el proceso ISO 26000
de Responsabilidad Social, el cual se encuentra
desarrollando una guía que homologue los estándares
internacionales de la temática.
También han comenzado a proliferar espacios de discusión
en torno a los alcances y posibilidades de la aplicación
de la RSE. Un ejemplo es el Comité Técnico de Normalización
(CTN), iniciativa desarrollada por el Instituto de Normas
Técnicas de Costa Rica (INTECO). El comité surge como
un esfuerzo para discutir los aspectos que han de ser
tomados en cuenta en la elaboración del estándar
internacional ISO 26000. Los miembros dan sus aportes
de acuerdo a los intereses de su sector. Se reúnen
representantes de la sociedad civil y del Estado para
definir aquellos aspectos que pueden incidir positiva o
negativamente en la aplicación de este estándar en el
país. Bajo este contexto, se ha establecido la importancia
que reviste un abordaje consciente de la situación de las
PyMEs en relación con la adhesión de grandes empresas
a estándares que puedan llegar a condicionar las prácticas
de las compañías a lo largo de toda la cadena productiva.
51
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 EL SALVADOR
En la ruta hacia la competitividad

Que la Responsabilidad Social

Empresarial haya dejado de ser
exclusiva del sector privado y haya
pasado a formar parte de la agenda
nacional es uno de los principales
logros que ha alcanzado El Salvador
en los últimos años. Esta temática
ya no se relaciona sólo con actos
aislados de filantropía, sino como
una política concertada de amplia
participación a escala nacional, que
no sólo provee bienestar y
responsabilidad al país, sino también
competitividad.
El Salvador

El Salvador
En la ruta hacia
la competitividad
La existencia de negocios entre empresas de distintos
tamaños, industrias, regiones y continentes, que realizan
transacciones comerciales de productos o servicios, está
impulsando el fortalecimiento de la competitividad por
parte de las empresas.
La dureza de los 36 años de guerra interna, ha generado
en el empresariado salvadoreño un profundo compromiso
con la reconstrucción del país y la comprensión de que
no es posible separar el crecimiento económico del
crecimiento social que requiere El Salvador. Esto significa
que el desarrollo empresarial y económico tiene el
incentivo del propio logro, estando éste al servicio de
una causa superior, coincidente con el bien común. Por
ello, el sector privado está adquiriendo un rol que va más
allá del tradicional generador de utilidades, comenzando
a incorporar, como un imperativo estratégico, un conjunto
de prácticas de negocios que propicien el desarrollo de
sus empleados, la comunidad y el medio ambiente, a
través de códigos de conducta y valores éticos. Muestra
de ello, lo constituye la creación de organismos como la
Fundación Salvadoreña para el Desarrollo (Fusades) y la
Fundación Empresarial para la Acción Social (Fundemás),
el desarrollo de la Escuela Superior de Economía y
Negocios (ESEN) y la activa presencia empresarial en
temas sociales.
Bajo este contexto, se observa que parte de la estrategia
para enfrentar estos desafíos corresponde a la adopción
de políticas y prácticas de Responsabilidad Social
Empresarial (RSE).
Hablar de competitividad puede resultar equivalente a
hablar de RSE, dado que la incorporación de prácticas
En la ruta hacia la competitividad
EL SALVADOR
vinculadas a esta temática posicionan a las empresas en
los niveles de los más altos estándares internacionales.
Por lo tanto, la adopción de acciones de RSE en los
diferentes procesos productivos, puede convertirse en una
eficaz herramienta para enfrentar los retos de la
competitividad responsable y la sostenibilidad.
LA CIUDADANÍA:
SUS NUEVAS EXIGENCIAS
En países desarrollados, los consumidores están siendo
cada vez más exigentes, pues demandan productos y
servicios que, además de cumplir con altas normas de
calidad, también garanticen la preservación del medio
ambiente y el respeto a los derechos laborales. Asimismo,
exigen la creación de códigos de conducta que rijan la
actividad empresarial, entre otras acciones de esta índole.
Esta situación se está extendiendo a la población
salvadoreña, donde ya se está generando una cultura que
premia o castiga a las empresas y a sus productos o
servicios, dependiendo de la calidad de la oferta y del
nivel de cumplimiento de algunas prácticas tácitamente
establecidas.
En este contexto, el sector empresarial del país ha adquirido
un rol protagónico. Por ello, organizaciones de la sociedad
civil se han volcado a estudiar este nuevo fenómeno,
destacando la investigación realizada por Fundemás, en
el año 2003 con el apoyo de la Fundación W.K. Kellogg 55
y la asesoría del Banco Mundial, cuyo objetivo era conocer
la situación actual de la RSE y promover en las empresas
la adopción de prácticas que contribuyan a la satisfacción
de las necesidades presentes y futuras de la población.
"La RSE es un imperativo estratégico que fomenta
en las empresas la incorporación de políticas y
prácticas que contribuyen a establecer relaciones
con los accionistas, los empleados, la comunidad
y el medio ambiente, a través de un nuevo paradigma
de principios y valores éticos; posicionando al sector
empresarial como un agente competitivo en beneficio
del desarrollo económico y social". señala el
presidente de Fundemás, Roberto H. Murray Meza.
 EL SALVADOR

EL ESTADO: Algunas cifras…

CARENCIA DE INCENTIVOS
El rol del Estado debe encontrarse claramente definido
para que la línea de separación entre el rol de la empresa
no se encuentre difusa y ambos puedan realizar sus
gestiones de la mejor manera posible.
Si bien el sector privado ha realizado grandes avances
en la adopción de RSE, el tema no ha permeado a todo
el empresariado, básicamente por la inexistencia de
incentivos por parte del Estado. Cabe señalar que existe
una gran masa de trabajadores no calificados, cuya
principal ocupación ocurre en sectores informales de la
economía.
72,1% de las empresas encuestadas cumplen con
la norma mínima del IFC, la cual establece que la
actividad económica de la empresa está en
concordancia con los estándares internacionales
para reducción de la pobreza y mejoramiento de
las condiciones de vida de la gente. Además, según
esta clasificación, el 10.6 % de las empresas
nacionales poseen una posición de liderazgo en el
tema de la RSE, lo cual les asegura un nivel
adecuado de sostenibilidad.

Es cierto que las funciones básicas de los gobiernos son

las mismas en todas las regiones, pero en América Latina
y, en particular, en El Salvador, es necesario y prioritario
construir un Estado que actúe como actor facilitador para
que las empresas adopten políticas y prácticas de RSE.

LOS EMPRESARIOS: "Los empresarios han comenzado a tomar acciones

LAS TAREAS DEL BUEN VECINO concretas en este tema, pues entienden que más
que una moda, las prácticas de RSE son una
estrategia que dará mayor valor a sus productos
La política de las empresas debe ser la del buen ciudadano
y servicios. Habrán empresas y empresarios renuentes
o del buen vecino, quien además de hacer uso de sus
56 a este tema, pero es un hecho que existe una nueva
derechos, también debe cumplir sus obligaciones con la
lógica en los mercados. La RSE es - y lo será aún
comunidad, el medio ambiente y todo lo que le rodea.
más en el futuro- un factor competitivo crucial",
Dicha responsabilidad comienza desde adentro y, para
explica el miembro de la Junta Directiva de Fundemás,
gozar de total credibilidad, también se extiende a toda
César Catani Papini.
una red de proveedores que cumplen con prácticas de
RSE en áreas fundamentales, según el giro de la empresa.

El estudio "Situación Actual de la Responsabilidad Social PRINCIPALES RESULTADOS DEL ESTUDIO

Empresarial en El Salvador", realizado por Fundemás,
dirigido a 463 empresas de todos los tamaños y sectores
económicos, distribuidas en la totalidad del territorio
nacional, permitió calificar y clasificar a las empresas
encuestadas, utilizando los indicadores del Marco de
Sostenibilidad de la Corporación Financiera Internacional
(IFC), brazo del Grupo del Banco Mundial que promueve
inversiones sostenibles del sector privado en los países
en desarrollo, como una manera de reducir la pobreza y
mejorar las condiciones de vida de la gente (www.ifc.org).
La calificación IFC establece una serie de normas
internacionales cuyo cumplimiento produce beneficios
para la empresa, la sociedad y el país. Esta calificación
sienta bases objetivas, comparables y creíbles para calcular
el valor agregado, en términos de competitividad, que se
obtiene de realizar prácticas de RSE.
Principios, valores éticos y gobernabilidad
3 de cada 4 empresas poseen un código de ética,
desarrollado con un alto grado de participación. Dicho
código es difundido en un 77% a sus trabajadores y es
revisado al menos una vez al año en el 60% de las
empresas.
Lugar de trabajo y derechos humanos
4 de cada 10 empresas tienen programas constantes de
capacitación y 1 de cada 3 da empleo a discapacitados,
brindan oportunidades laborales a jóvenes sin experiencia
y a personas mayores de cuarenta años de edad.

En la ruta hacia la competitividad


Mercadeo
8 de cada 10 empresas cuentan con políticas y normas
para evaluar y seleccionar proveedores. 2 de cada 3
mantienen programas continuos de mejora de productos,
servicios y procesos, y 9 de cada 10 verifica con antelación
que la publicidad esté de acuerdo con la legislación de
defensa del consumidor.
Medio ambiente
3% de las empresas encuestadas han adoptado la norma
ISO 14000 y el 5% trabaja con otro tipo de certificación
medioambiental, mientras que 8 de cada 10 empresas
desarrollan estudios y soluciones en este tema.
Comunidad
60% de las empresas encuestadas realizan acciones en
el área social. En promedio, las empresas están destinando
un 4% de su presupuesto total a la ejecución de programas
dentro de la comunidad y el 6% a programas de apoyo
a las municipalidades. De igual forma, se constató que
durante los últimos años, las empresas han invertido en
promedio el 1.5% de sus ventas totales en desarrollo
profesional o educativo de sus empleados.
Política pública
3 de cada 10 empresas tienen definidas políticas sobre
prácticas de anticorrupción y soborno. 23% participan en
la formación de propuestas sociales, económicas y políticas
de Estado y 4 de cada 10 participan en asociaciones o
foros empresariales.
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
Los beneficios de la RSE pueden ser medidos a través de
información cuantitativa y cualitativa.
Diversas empresas han experimentado grandes beneficios
tangibles, tanto en su operación general como en algunos
ámbitos específicos de la RSE.
La adopción de una estrategia integral de RSE implica
mayor eficiencia y competitividad, lo cual se comprueba
midiendo el impacto en la sociedad. Se trata de una
estrategia ganar - ganar que contribuye al desarrollo
sostenible.
(1) Instituto Argentino de Responsabilidad Social Empresaria - Iarse, 2005.
En la ruta hacia la competitividad
EL SALVADOR
Muchas empresas que han desarrollado iniciativas de RSE
dirigidas a sus trabajadores, han notado que la percepción
de éstos ha cambiado favorablemente. Sienten que las
empresas les dan más estabilidad laboral por guiarse por
principios de RSE. El desarrollo de estas iniciativas, además,
permite retener empleados competitivos.
Estas percepciones y beneficios se traducen en una "licencia
para operar", la cual es un trato establecido informalmente
por los empleados, los clientes y la comunidad hacia una
empresa, en el cual se manifiesta la credibilidad en ella.
¿Cómo puede un país de 6 millones de habitantes
y un ingreso nacional bruto de 13,6 billones de
dólares competir a la par ante China, un país de
1280 millones de habitantes con un ingreso nacional
bruto de 1,234.2 billones?
En gran parte, estas nuevas oportunidades y retos
que llegan naturalmente por participar en una
economía de libre comercio pueden ser abordados
desde una diferente perspectiva y visión. La visión
de un país que se distinga por ofrecer un importante
valor agregado: competitividad responsable nacional.
Por lo tanto, es clave comprender el concepto y
los beneficios de la RSE, ya que es una de las vías
que potencialmente contribuirán al desarrollo
económico y social sostenible. Cabe destacar que
de acuerdo a los dos más altos ejecutivos de
Business for Social Responsibility (BSR) -institución 57
líder en la promoción de políticas y prácticas de
RSE en Estados Unidos- El Salvador tiene el potencial
y condiciones favorables para convertirse en un
país reconocido mundialmente por ser
competitivamente responsable (1).
 EL SALVADOR

DESAFÍOS W.K. Kellogg y asistencia técnica del Banco Mundial,

proporcionó datos estadísticamente confiables sobre las
áreas de la RSE (misión y visión, valores éticos, lugar de
Una efectiva estrategia de RSE implica que las empresas
trabajo, derechos humanos, medio ambiente, mercadeo,
tomen en cuenta los costos y beneficios que su accionar
comunidad, política pública y gobernabilidad), presentando
puede generar en la sociedad y en el medio ambiente.
la información obtenida según una distribución por sector,
por tamaño y por zona geográfica.
Como señala la Directora Ejecutiva de Fundemás, Rhina
Reyes de Fuentes, "falta mucho por hacer. El tema de la
Los datos de esta investigación fueron alentadores. El
RSE está en construcción a nivel mundial, pero como país
Presidente de Fundemás, Roberto Murray Meza, indicó al
estamos en el camino correcto".
sector empresarial que "lo que traemos, con este estudio,
son buenas noticias, ya que los empresarios están
"Existen áreas de RSE donde hay una gran oportunidad
comprendiendo que existe una nueva forma de ser
de mejorar, por ejemplo, en el ámbito medioambiental
competitivos".
se encontró que el 3% de las empresas encuestadas han
adoptado normas ISO 14000 y que el 5% trabaja con otro
Los resultados reflejaron un avance significativo en materia
tipo de certificación", asegura Reyes.
de RSE en el país y permitieron verificar que el desarrollo
de la RSE puede afectar los niveles nacionales de
Para enfrentar estas oportunidades se están desarrollando
competitividad, es decir, que las empresas que poseen
importantes iniciativas, como el convenio establecido con
planes para implementar políticas y prácticas de RSE en
Forum Empresa para crear una organización salvadoreña
los diferentes ámbitos de su sistema productivo gozarán
con enfoque en el concepto de RSE. Además, existe un
de una ventaja frente a otros competidores.
compromiso con el Banco Interamericano de Desarrollo
(BID) de ser la contrapartida salvadoreña del Programa
Entre las principales conclusiones que se presentan en
para el Desarrollo de Emprendedores (EMPRETEC), franquicia
el estudio, destaca que numerosas empresas poseen un
de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio
código de ética, que en la mayoría de los casos difunden
y el Desarrollo (UNCTAD).
a sus trabajadores. También se identifican varias compañías
preocupadas de respetar los derechos de sus trabajadores.
Por su parte, el sector privado ha establecido el compromiso
Además, la mayoría cuenta con programas de evaluación
de apoyar los esfuerzos del Estado para enfrentar los
y selección de proveedores, mejora continua de producto,
desafíos de la educación y del desarrollo sostenible.
servicios y procesos, y orientan sus campañas publicitarias
58 a la defensa del consumidor.
Otro gran desafío para el país es extender la adopción
de políticas y prácticas de RSE hacia sectores empresariales
Cabe señalar que el trabajo de las empresas con la
más pequeños. Para ello, existen organizaciones que
comunidad es el ámbito más conocido de la RSE. El
ejecutan programas de capacitación que fomentan el
estudio indica que el 60% de la totalidad de empresas
desarrollo y fortalecimiento de comportamientos
encuestadas realiza acciones en el área social.
emprendedores, para contribuir a la competitividad de la
empresa, con énfasis en las PyMEs.
Ante el panorama que presenta el país en la actualidad,
la pregunta no es si los empresarios y las empresas deben
Pese a que aún queda mucho por hacer, cabe destacar
o no subirse al tren de la RSE. La gran pregunta es cómo
la amplia contribución que Fundemás ha realizado en el
se suben, si el camino a la apertura comercial ya está
fomento y desarrollo de la RSE.
listo para ser transitado.

REFLEXIONES
Fundemás inició en el año 2000 la reflexión sobre la RSE
y sus implicaciones para la competitividad responsable
del país y la región. También se ha profundizado el debate
sobre la importancia que tiene la RSE para los diferentes
sectores productivos.

La evolución del escenario económico de los últimos

años, las nuevas condiciones de los mercados y la reciente
firma del acuerdo comercial entre Centroamérica y Estados
Unidos fueron el marco propicio para presentar en abril
de 2004 el primer estudio sobre la "Situación de la
Responsabilidad Social Empresarial en El Salvador". Esta
investigación, que recibió apoyo financiero de la Fundación

En la ruta hacia la competitividad


¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
SALVADOREÑOS?
Fundemás desarrolla programas de capacitación que
fomentan el desarrollo y fortalecimiento de comportamientos
emprendedores, para contribuir a la competitividad de la
empresa, con énfasis en las PyMEs.
Se preocupa de concientizar, fomentar y apoyar el desarrollo
de políticas y prácticas de negocio socialmente responsables
que contribuyan al bienestar del ser humano, las
organizaciones y la sociedad para impulsar progreso
económico y social de El Salvador.
Fomenta nuevas formas de colaboración y asociatividad
creativas, que permitan atender necesidades y problemas
sociales complementando esfuerzos y recursos para lograr
mayor efectividad.
Contribuye al desarrollo de iniciativas innovadoras a fin
de mejorar los niveles educativos de la población
salvadoreña, desarrollar una mayor competitividad en el
entorno internacional y propiciar el progreso económico,
social y cultural del país.
En la ruta hacia la competitividad
EL SALVADOR
Con el convencimiento de que la RSE no es una moda,
sino una estrategia de negocios que contribuye a la
competitividad responsable y sostenible de las empresas,
Fundemás desarrolló en el año 2004, los siguientes
productos:
- Guía práctica para empresas, en la que se resume la ley
mercantil sobre los principales artículos que tienen relación
con la implementación de la RSE.
- Juego de indicadores de RSE, con los cuales las empresas
tanto grandes como PyMEs pueden medir su nivel de
cumplimiento en las diferentes áreas de la RSE.
- Inventario de prácticas de RSE, en el que se presentan
las acciones de RSE que ya se ejecutan en algunas empresas
salvadoreñas, con el objetivo de orientar los esfuerzos de
empresas que aún no saben cómo trabajar en el tema.
- Juego de casos prácticos de RSE en El Salvador.
Corresponde a ejemplos de experiencias exitosas de
empresas radicadas en el país.
Todas estas publicaciones se presentan en un novedoso
formato para facilitar la lectura y están a disposición del
sector empresarial del país en las oficinas de Fundemás.
59
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 MÉXICO
Dejando atrás la filantropía

Las empresas mexicanas practican la

Responsabilidad Social Empresarial desde
mucho antes que el concepto fuera acuñado.
Desde la década de los 50, los grupos
industriales más importantes ya contaban
con programas para la educación de los hijos
de sus empleados, para la adquisición de
vivienda y de involucramiento con la
comunidad, entre otros. Éstos se
desarrollaban con un enfoque muy
filantrópico y poco estratégico. Sin embargo,
en la actualidad las empresas mexicanas
trabajan en la integración de la RSE a su
estrategia general.
México
 MÉXICO

línea de acción, es decir, a la

línea la vinculación
vinculación y compromiso
compromiso
con la comunidad.

Exitosos empresarios
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México sector empresarial

sector empresarialmexicano.
mexicano.

Dejando atrás Ética empresarial

la filantropía Calidad de vida Cuidado y

en la empresa RSE preservación del medio
ambiente

Vinculación y
compromiso con la
comunidad y su
desarrollo

Lorenzo Servitje, Fundador de Grupo Bimbo, la

En México, la RSE nació como filantropía empresarial, es
decir, se desarrolló en sus orígenes como una acción
paternalista, otorgando donativos con escaso enfoque
estratégico y control del uso de los recursos que se
donaban. En la mayoría de los casos, las donaciones se
otorgaban a instituciones en las que el fundador o el
director ejecutivo tenía una relación amistosa o familiar
con el dueño o con el director de la empresa. El otorgar
los recursos a conocidos despertaba la confianza que éstos
serían utilizados en la forma correcta.
En 1986 con la entrada de México al Acuerdo General sobre
Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), se inició un
proceso de liberación sin precedentes. Hoy, el país tiene
decenas de acuerdos comerciales con diferentes naciones,
lo cual ha generado una gran presión competitiva, que
aunada a las demandas de los diferentes grupos de interés,
ha impuesto un reto en el que los sectores público, privado
y social trabajan de la mano para hacer de México un país
sólido y capacitado para hacer frente a las demandas del
mercado global.
LA CIUDADANÍA:
FUERTE ASOCIACIÓN DE RSE Y
COMPROMISO CON LA
COMUNIDAD
Aunque en México se reconoce que la RSE tiene cuatro
líneas de acción: ética empresarial; cuidado y preservación
del medio ambiente; calidad de vida en la empresa; y
compromiso con la comunidad y su desarrollo; está muy
arraigada la idea de que la RSE es equivalente a la última
empresa de alimentos más grande de
Latinoamérica, ha promovido dentro de ella un
gran número de actividades filantrópicas y de
RSE. El Grupo participa en importantes proyectos
comunitarios, como la reforestación de áreas
naturales protegidas de la República Mexicana,
así como en diferentes iniciativas para el bienestar
de la sociedad.
63
Carlos Slim dirige la empresa Telmex, de la que
depende la Fundación del mismo nombre. Sus
metas son: lograr el desarrollo de México mediante
programas de educación, salud, nutrición y cultura.
La Fundación también apoya el proyecto para la
renovación del centro histórico de la ciudad de
México, encabezando el comité a cargo de este
proyecto. Además, efectúa donaciones a una serie
de causas sociales (1).
Manuel Arango es también un importante promotor
de la filantropía. Fundó en 1988 Cemefi, centro
que se encarga de promover esta práctica en la
sociedad mexicana.
Por otro lado, Cemefi ha desarrollado un programa
de RSE que eventualmente llevó a la creación del
distintivo "Empresa Socialmente Responsable".
Este reconocimiento se otorga a compañías que
desarrollan algún tipo de programa de RSE.
Además, Arango es parte del comité del Caracol
de Plata, una organización que premia a los
mejores mensajes comerciales en materia de
progreso social.

(1) AGÜERO, Felipe. La Responsabilidad Social Empresarial en América Latina. Escuela de estudios internacionales, Universidad de Miami, mayo
2002.

Dejando atrás la filantropía

 MÉXICO
EL ESTADO:
EL FRENO DE LA LEY
La visión de los líderes estatales ha creado un ambiente
favorable a la expansión de la participación de las empresas
en actividades de inversión social, además de estimular
una mayor interacción con organizaciones sociales. Sin
embargo, un mejor flujo de actividad e interacción en
este campo depende de cambios relevantes en la
legislación, por lo que el rol del gobierno cobra gran
importancia.
La acción del Estado mexicano ha ido evolucionando en
el tiempo. En la década de 1860, se le atribuyó la labor
de beneficencia, creándose incluso un organismo
denominado Dirección General de Fondos de Beneficencia.
Más adelante, la nacionalización de las propiedades de
la Iglesia tendió a inhibir las donaciones de muchas
organizaciones privadas, por lo que el Estado asumió
toda la responsabilidad por la beneficencia. A comienzos
del siglo 20 se creó una Junta de Beneficencia con la
finalidad de hacer posible la caridad privada o la filantropía,
mediante garantías legales y fiscales. Ésta, que adoptó
el nombre de Junta de Asistencia Privada, comenzó a
regular los Institutos de Asistencia Privada (IAP) y
permaneció bajo el control del gobierno. Después de la
Revolución, el control estatal fue reforzado y se limitó
fuertemente el apoyo a las organizaciones privadas.
Esto indica que a pesar de la importante labor de
64 beneficencia que el Estado ha desarrollado a lo largo de
la historia, la inercia de la cultura estatista, protegida aún
por numerosas normas, hace que el flujo de recursos
entre los sectores privado y público sea muy difícil, lo
que complica a su vez una política social efectiva de
asociación público-privada (2).
Alberto Núñez, presidente de la Confederación Patronal
de la República Mexicana (Coparmex), en una
entrevista a la revista Expansión, realizada en el
2004, señaló que "la sociedad no sólo debe ser
víctima de la parálisis política, sino actores. No basta
que los contribuyentes seamos sólo espectadores.
Hay que dar propuestas de lo que se debe hacer,
definir el país que queremos ser: una economía de
mercado socialmente responsable para lograr un
México más fuerte y justo".
(2) AGÜERO, Felipe. La Responsabilidad Social Empresarial en América Latina. Escuela de Estudios Internacionales, Universidad de Miami, mayo
2002.
Dejando atrás la filantropía
LOS EMPRESARIOS:
PASANDO DE LA FILANTROPÍA
A LA RSE
La globalización de los mercados ha traído como
consecuencia demandas de diferentes grupos de interés
y una mayor competencia. Con el convencimiento de que
así debe ser, un mayor número de empresas incorporan
en sus operaciones prácticas de RSE. Algunas de ellas
son empresas multinacionales que trasladan la cultura
de sus casas matrices y las implementan en el país; otras
son grandes empresas mexicanas. Además, existen
pequeñas y medianas empresas (PyMEs), que por iniciativa
propia o por necesidad implementan programas de RSE.
Sin embargo, este sector, que representa más del 90%
de las empresas en México, sigue constituyendo el gran
reto para llevar las actividades de RSE a gran escala. En
la actualidad universidades y otras organizaciones trabajan
en el desarrollo de herramientas para la incorporación de
la RSE en las PyMEs.
Las razones que han motivado a las empresas mexicanas
a realizar actividades de RSE van desde las puramente
altruistas, donde el enfoque estratégico es bajo; hasta
razones utilitarias, donde se busca, en cierta forma, lograr
beneficios para la empresa, como una mejor posición
competitiva.
En las grandes compañías se observa una transición muy
importante en el desarrollo de actividades de RSE. Están
pasando de una visión filantrópica hacia un enfoque más
estratégico. Pese a que en el camino las empresas se
han topado con una serie de dificultades, poco a poco
las han ido superando, de modo que en la actualidad es
cada vez mayor el alineamiento de los programas de RSE
a la estrategia de la empresa. Por ello, el futuro de la
RSE en el país se presenta muy optimista.
De acuerdo a los resultados del programa Empresa
Socialmente Responsable (ESR), desarrollado por
Cemefi, con el fin de reconocer a las compañías más
destacadas en este ámbito, es posible argumentar
que cada vez son más las empresas que implementan
programas de RSE.
En el primer año de su lanzamiento, se otorgó el
distintivo a 17 empresas, en su mayoría
multinacionales. En el año 2005, 84 empresas fueron
merecedoras de este distintivo, las cuales ya no sólo
corresponden a multinacionales, sino que se han
sumado compañías nacionales y PyMEs.
Cabe destacar que es altamente probable que un
mayor número de empresas lleven a cabo acciones
de RSE, pero por falta de difusión de éstas y/o escasa
profesionalización no han participado en la
convocatoria al distintivo de ESR.
 MÉXICO

LA SOCIEDAD CIVIL: BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES

IMPULSANDO UNA CULTURA
FILANTRÓPICA
Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) y entidades
académicas, ejercen un creciente escrutinio sobre las
empresas.
Ante la necesidad de promover la cultura filantrópica y
principalmente de RSE, se han creado algunas instituciones
y organizaciones preocupadas de esta temática, como por
ejemplo Cemefi, que se funda en 1988.
Muchas de las empresas que desarrollan iniciativas
vinculadas a la RSE lo hacen buscando integrar la creación
de valor social, económico y ambiental, es decir, llegar
a una situación ganar-ganar, logrando beneficios tanto
para la sociedad como para la empresa. Para lograr esta
meta, es necesario adquirir un enfoque estratégico que
permita desarrollar esta temática.

Este tipo de organizaciones pueden constituirse en un

gran aliado, cuando las empresas perciben presiones y
demandas de la sociedad, y enfrentan temas de legitimidad,
donde la RSE puede ser una buena respuesta. Las OSC,
centros de investigación y otros actores, pueden generar,
diseminar, multiplicar y legitimar ideas sobre esta temática.

DESAFÍOS
Pese a los avances que en los últimos años ha presentado
el país en materia de RSE, son muchos los desafíos que 65
quedan por delante.

Hace falta que un mayor número de empresas se

comprometan con su entorno, capaciten a sus empleados,
Un ejemplo es el Comité Nacional de la Productividad
exijan prácticas transparentes, procuren el cuidado del
e Innovación Tecnológica (Compite), una organización
medio ambiente y cumplan con sus obligaciones. Con
sin fines de lucro dedicada a la consultoría
estas acciones no solamente aseguran su permanencia,
especializada, que busca mejorar la productividad y
además ayudan a que el país genere mayores oportunidades.
la calidad de las PyMEs. Compite ofrece talleres para
enseñar y monitorear una metodología creada por
Otro gran reto es integrar programas de RSE en las PyMEs,
la General Motors con el fin de mejorar la
pues a pesar de que la mayor parte de la investigación
administración cualitativa y la productividad. Dicha
en la que se basa este informe se ha hecho en empresas
metodología fue cedida a la Secretaría de Economía
grandes, principalmente multinacionales, más del 90% de
del Gobierno de México en 1994. A los talleres sobre
las empresas mexicanas se encuentra en la categoría de
esta metodología, administración operacional e ISO
PyMEs.
9000 (en materia de calidad), se añadió uno sobre
Responsabilidad Social e Integridad en los negocios,
Pero, sin duda, el mayor desafío es acercarse más a un
como continuación natural de una serie de talleres
enfoque estratégico en la adopción de la RSE, es decir,
sobre administración cualitativa (3).
integrar las preocupaciones de la sociedad y la comunidad
a la administración diaria y a la planificación estratégica
de las empresas, yendo más allá de la filantropía.

(3) AGÜERO, Felipe. La Responsabilidad Social Empresarial en América Latina. Escuela de Estudios Internacionales, Universidad de Miami, mayo
2002.

Dejando atrás la filantropía

 MÉXICO

ALGUNOS PROMOTORES DE LA RSE prácticas de RSE en la región. La sede en México esta en

Cemefi
Es la organización mexicana más importante en materia
de RSE, que agrupa a empresas, fundaciones e individuos
para la promoción de una cultura filantrópica. También
promueve la sustentabilidad de las organizaciones sin
fines de lucro y el involucramiento cívico. A través de su
programa sobre gobierno y políticas públicas, estudia y
cabildea a favor de una legislación que facilite la inversión
social intersectorial; y proporciona asesoramiento y
consultoría a empresas sobre estos temas. Genera una
interacción entre organizaciones donantes, fundaciones
sociales de las comunidades y organizaciones sociales.
Además, con apoyo externo, ha generado información
sobre las actividades filantrópicas en México.
Cemefi ha contribuido a agrupar a 32 empresas y 14
fundaciones empresariales en el Foro de Empresas
Socialmente Responsables, que sostiene ser el primer y
único grupo formado por empresas, con el exclusivo
propósito de discutir la RSE.
También promueve talleres para alianzas intersectoriales,
incluyendo empresas, gobierno y organizaciones sociales,
que tratan temas específicos, y se llevan a cabo
principalmente en regiones. (Centro Mexicano para la
Filantropía, disponible vía Web en www.cemefi.org)
Consejo de Coordinación Empresarial (CCE)
66
Es la organización cumbre que agrupa a las cámaras de
comercio, industria, banca, agricultura, seguros, Coparmex,
etc. Las metas de la CCE son: identificar cambios que
puedan interferir con los objetivos de las empresas y las
fundaciones de una economía de mercado; proporcionar
directrices a las empresas para que asuman la RSE;
promover los beneficios de una economía de mercado
socialmente responsable en un Estado democrático de
derecho; promover una cultura empresarial basada en el
ser humano, que conciba a la empresa como una
comunidad de personas que obedecen las leyes y respetan
el medio ambiente; e instilar en la sociedad las virtudes
de una cultura empresarial. (Consejo de Coordinación
Empresarial, disponible vía Web en www.cce.org)
la EGADE-Tecnológico de Monterrey, Campus Monterrey.
(Social Entreprise Knowledge Network, disponible vía Web
en www.sekn.org)
Fundación del Empresariado Chihuahuense (Fechac)
La Fechac, formada en 1990, es esencialmente un fondo
que establecieron los empresarios, con el apoyo del Poder
Ejecutivo y Legislativo, para beneficio de la comunidad,
creando un vehículo para la filantropía. Es una organización
independiente, autónoma, privada y sin fines de lucro,
dedicada a atender las necesidades críticas de la comunidad
y a elevar la calidad de vida de los chihuahuenses.
Promueve la RSE bajo el concepto de la corporación como
un ciudadano, el que si bien no es idéntico al concepto
de ciudadanía personal, reconoce claramente que las
empresas tienen derechos y responsabilidades que van
más allá de la maximización de ganancias a corto plazo.
(Fundación del Empresariado Chihuahuense, disponible
vía Web en www.fechac.org.mx)
Alianza por la Responsabilidad Social Empresarial en
México (AliaRSE)
La visión de AliaRSE es "lograr que la empresa sea y se
perciba como creadora de valor y generadora de un
bienestar que promueve el bien común, por medio del
ejercicio de su responsabilidad social, apalancando,
coordinando y facilitando la sinergia de los esfuerzos de
nuestras organizaciones en beneficio del país y en particular
de nuestros miembros". AliaRSE es miembro de Forum
Empresa, alianza hemisférica de organizaciones basadas
en RSE y compañías asociadas que comparten la visión
de promover esta temática en América.
(http://mx.groups.yahoo.com/group/ResponsabilidadSoci
alEmpresarial/)

Social Entreprise Knowledge Network (SEKN)

La SEKN o Red de Conocimiento de Iniciativas Sociales,

es una colaboración formada para hacer frente a la
necesidad de generar capital intelectual en empresas de
la región. Se fundó en el 2001 y actualmente está
conformada por nueve escuelas de negocios de América
Latina y España, la Escuela de Negocios de Harvard y la
Fundación Avina como socio estratégico. La SEKN se
dedica, entre otras cosas, a la promoción de las mejores

Dejando atrás la filantropía


REFLEXIONES
En México, la actividad en materia de RSE nació y aún
mantiene profundas raíces en la filantropía, llevándose a
cabo más bien como una acción paternalista. Existen una
serie de organizaciones de filantropía de larga data, entre
las que destacan: la Fundación Mexicana para el Desarrollo
Rural (FMDR), fundada en el año 1963, y la Asesoría de
Microempresas A.C. (Admic), que comenzó sus operaciones
en 1979. Ambas eran iniciativas empresariales colectivas
de amplia cobertura geográfica y de un alto nivel de
organización, que operaban directamente. Sin embargo,
su peso e importancia relativa disminuyeron
significativamente con el tiempo (4).
En la actualidad se han logrando avances importantes en
materia de RSE y se está creando un ambiente favorable
a la expansión de la participación de las empresas en la
actividad de inversión social, junto con un estímulo para
incrementar la interacción con organizaciones sociales. El
sector privado se ha involucrado en actividades que han
ayudado a combatir algunas necesidades sociales. Asimismo,
existe un número sustancial de actividades desarrolladas
a título personal, generalmente asociadas a grandes
empresas y fundaciones.
Se aprecia un creciente -aunque muy desigual- número
de iniciativas en el campo de la RSE. Estudios realizados
por Cemefi, por el Tecnológico de Monterrey, otras
universidades y centros de investigación, indican que un
mayor número de empresas participan en estas actividades,
aunque, en algunos casos, los montos involucrados son
relativamente pequeños y la mayoría de las iniciativas
carecen de un plan permanente (5).
La RSE se ha visto impulsada por la activa presencia de
un número de organizaciones internacionales interesadas
en promoverla. Entre ellas, figura Synergos, que trabaja
con Cemefi y otros centros para mejorar la capacidad
organizativa en este campo; la Fundación Kellogg, que
promueve su programa de liderazgo en filantropía, a través
de la Universidad Iberoamericana, y apoya a Cemefi y a
otras fundaciones; la Fundación Interamericana, que otorga
donaciones a un número de fundaciones empresariales
en todo México; y Cemex, quien en colaboración con el
Tecnológico de Monterrey y el Banco Mundial ofrecen una
cátedra empresarial en ciudadanía corporativa.
Las actividades más visibles son efectuadas por fundaciones
con el apoyo de empresas a nivel regional o funcional.
También existe un número de firmas activas en la práctica
de actividades de RSE, vinculadas a medio ambiente,
situación habitacional, desarrollo comunitario, servicios
financieros, cultura, ciencia y tecnología, capacitación
laboral, nutrición, empoderamiento sin fines de lucro y
(4) GREAVES, Patricia. Empresas y Empresarios: Algunas Tendencias Actuales de la Filantropía Corporativa en México. Trabajo presentado en
la Cuarta Conferencia ISTR, México, 5-8 julio 2000.
(5) AGÜERO, Felipe. La Responsabilidad Social Empresarial en América Latina. Escuela de Estudios Internacionales, Universidad de Miami. mayo
2002.
(6 ) AGÜERO, Felipe. La Responsabilidad Social Empresarial en América Latina. Escuela de Estudios Internacionales, Universidad de Miami, mayo
2002.
Dejando atrás la filantropía
MÉXICO
promoción de la filantropía.
Pero aún no hay claridad respecto a qué significa y qué
conlleva exactamente la RSE, por lo que quienes la practican
actúan bajo diferentes interpretaciones. Quedan pendientes
una serie de retos, principalmente la integración de la
RSE a la estrategia general de la empresa, su institucionali-
zación y su alineamiento.
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
MEXICANOS?
- En 1997 Cemefi creó un programa de RSE. En el año
2001 lanzó la convocatoria del distintivo ESR que evalúa
a la empresa en cuanto a los estándares de: calidad de
vida en la empresa, ética empresarial, vinculación de la
empresa con la comunidad y cuidado y preservación del
medio ambiente. Cemefi está tratando de promover la
RSE de manera más sistemática, al atraer empresas al
Foro para que hagan presentaciones a altos niveles
administrativos y organicen seminarios sobre el tema.
También tiene un acuerdo de cooperación con la revista
Expansión, mediante la cual provee de historias sobre el
tema y colabora en dos ediciones especiales cada año.
La actividad sobre RSE es tomada en cuenta por la revista
para la calificación de las 500 principales empresas y en
la selección de las 10 más admiradas.
- FECHAC hace frente a inundaciones muy severas en la
región. Inició sus operaciones en 1990, cuando a solicitud
67
de líderes empresariales, el gobierno aprobó un impuesto
especial que generó recursos administrados por la
Fundación. El impuesto ha sido renovado anualmente y
actualmente afecta a más de 26 mil empresas. Desde su
establecimiento, se han distribuido 7 millones de dólares
en 40 comunas, para 600 proyectos, la mayoría en beneficio
de la región de la Sierra Tarahumara. La Fundación está
organizada mediante la representación de empresas en
los consejos comunales y regionales, quienes participan
en el proceso de toma de decisiones acerca de la asignación
de donaciones. El éxito de la Fundación ha sido comunicado
en un estudio realizado por la Universidad de Columbia,
apoyado por el Instituto Synergos, que lo presenta como
un caso emblemático de una innovadora iniciativa público-
privada. También ha recibido una donación de la Fundación
Interamericana para proporcionar préstamos y asistencia
a microempresarios, bancos comunitarios y mujeres que
solicitan préstamos (6).
- Recientemente se lanzó el Pacto Mundial en México. A
éste se adhirieron 235 empresas, lo cual hace pensar que
la RSE tendrá un impulso muy importante en los años
venideros.
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 PANAMÁ
Familiarizándose con el concepto RSE

A pesar de que la mayor parte de

iniciativas que se realizan en materia
de Responsabilidad Social
Empresarial no nacen de una
planificación estratégica, Panamá
está concentrando todos sus
esfuerzos para arraigar este
concepto en la cultura empresarial,
mediante el trabajo coordinado entre
empresa, gobierno y sociedad.
Panamá

Panamá
Familiarizándose con
el concepto RSE
Las prácticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE)
en países del primer mundo, están motivando a muchas
entidades preocupadas del tema a replicar estos avances
en países menos desarrollados. Prueba de ello es que la
Organización de las Naciones Unidas haya considerado a
Panamá como uno de los países para la promoción y
desarrollo de la RSE, lo cual marca el inicio de un camino
hacia la adopción de esta temática.
Una vez declarado país piloto, durante el Foro Económico
Mundial celebrado en Davos el año 1999, se creó la Red
del Pacto Global de Panamá la cual cuenta con 65
organizaciones firmantes, de las cuales 43 son empresas,
4 organizaciones empresariales, 2 universidades, 1
institución de carácter educativo, 13 fundaciones e
instituciones de apoyo a excluidos, 1 cooperativa y 1
institución del Estado.
Este movimiento y la experiencia de otros países
latinoamericanos más avanzados en el desarrollo y
adopción de prácticas socialmente responsables, han sido
los principales impulsores para que representantes de
cada uno de los sectores que componen la sociedad,
comiencen a contribuir al desarrollo social y económico
del país a través de la incorporación de iniciativas de RSE,
pues están cada vez más convencidos de sus externalidades
positivas. Dentro de éstas, destaca la identificación de un
mayor reconocimiento de la opinión pública nacional, que
puede transformarse en una importante ventaja
competitiva.
Esta nueva visión está logrando que la sociedad, en general,
comience a familiarizarse con la temática y a valorar las
cualidades de un "buen ciudadano corporativo", término
que en el país se asocia al compromiso con la comunidad,
sobre una base de filantropía e inversión social.
Familiarizándose con el concepto RSE
PANAMÁ
LA CIUDADANÍA:
ATISBOS DE VALORACIÓN
A pesar de que el concepto de RSE aún no está
suficientemente compenetrado y es ajeno a gran parte de
la población, la sociedad panameña está mucho más
cercana de esta temática, en relación a unos años atrás.
Esto gracias al sistemático trabajo de instituciones nacionales
dedicadas al tema, que están logrando insertar gradualmente
el concepto en el país.
En el año 2003, el Centro Empresarial de Inversión Social
(CEDIS) con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas
para el Desarrollo (PNUD) en Panamá, realizó el primer
estudio destinado a medir la adopción de RSE en las
empresas. En ese momento los resultados indicaban que
pocas compañías manejaban el concepto, considerando
todas las áreas y principios que éste abarca. Sin embargo,
hoy el panorama está cambiando favorablemente y la
población así lo percibe.
Mediante iniciativas concretas realizadas por empresas
nacionales, se ha comenzado a identificar, valorar y
dimensionar los beneficios y el positivo impacto que la
aplicación íntegra de esta temática genera en la calidad
de vida de la sociedad.
Algunas cifras…
- 44% de las empresas no tienen una estrategia de RSE 71
- 33% de las empresas tienen estrategias concentradas
en aspectos claves de RSE
- 90% de grandes empresas y 56% de medianas tienen
un funcionario o división responsable de RSE
- 76% de grandes empresas y 37% de medianas tienen
un código de conducta escrito y difundido
- 67% de las empresas realizan actividades de RSE
directamente y no vía terceros
- 31% de la difusión de acciones de RSE son orientadas
hacia la sociedad
- 84% de las empresas cuentan con una estrategia de RSE
para los trabajadores
- 47% de las empresas cuentan con un presupuesto para
actividades de RSE
- 70% de las empresas no utilizan métodos o herramientas
para medir el impacto de sus prácticas en RSE, sólo un
4% utiliza el balance social
- 20% de las empresas apoyan proyectos que surgen de
iniciativas propias de la empresa
- 58% de grandes empresas y 29% de medianas realizan
proyectos ambientales
- 36% intervienen en la mejora de los procesos productivos
y/o manejo de los desechos
 PANAMÁ
Los dos temas con más alto porcentaje de intervención
por parte de las empresas son educación (69%) y
salud (56%). En tanto, la niñez es el grupo poblacional
con mayor cantidad de proyectos (86%).
Estos resultados indican la necesidad de incorporar
preocupaciones de la población en la gestión empresarial
y de intensificar los esfuerzos para promover en el país
y sobre todo en el sector empresarial el concepto de RSE,
para que a corto plazo los panameños lo incorporen en
su actuar y a la hora de optar por un producto o servicio.
EL ESTADO:
PROMOVIENDO EL VOLUNTARIADO
Pese a que la debilidad administrativa es una característica
endémica del país, el sector público está realizando
grandes esfuerzos para promover la RSE en Panamá. La
iniciativa más visible del sector gubernamental, es realizada
por la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) con el
respaldo del trabajo voluntario de sus colaboradores.
La ACP ha realizado actividades dirigidas a apoyar
instituciones benéficas y centros escolares, apoyar a la
niñez y a otros grupos vulnerables, promover valores
éticos, morales y ambientales; pero lo más importante,
a generar sinergia social.
72
Reparaciones a la Escuela de Buenaventura
Los integrantes del equipo de ACP realizaron
diversas labores: reparación del techo y las bancas,
pintura del establecimiento, vaciado de piso,
construcción de un depósito, construcción de un
gallinero y arreglos generales en la periferia y el
acceso al plantel. Además, se entregó a los niños
bolsas con útiles escolares.
Familiarizándose con el concepto RSE
LOS EMPRESARIOS:
APOYO A CAUSAS SOCIALES
En Panamá cada día son más las empresas que incorporan
la RSE y que la comienzan a identificar como una estrategia
de negocio.
El tema que ha tenido mayor relevancia es la ética
empresarial, sobre todo por las denuncias de corrupción
a todo nivel: político, ciudadano y empresarial.
Sin embargo, las mayores prácticas se concentran en el
apoyo a causas para las que se solicita auxilio. En estas
acciones escasamente participan los trabajadores, es decir,
no se ha desarrollado el voluntariado corporativo.
En Latinoamérica, en general, la RSE crecientemente es
considerada un factor clave para mejorar la competitividad
de las empresas y, por ende, del país. Esto ha generado
en los empresarios panameños un creciente interés por
internalizar el tema desde un enfoque integral y desarrollar
estrategias de RSE.
También están tomado conciencia de la necesidad de
mejorar las estructuras gubernamentales, y lograr la
creación de estándares y regulaciones que sienten las
bases legales de la RSE, como por ejemplo a través de
la creación del Comité Espejo, que represente al país en
la creación del estándar internacional ISO 26000 de
Responsabilidad Social.
Sin embargo, factores que aún están presentes en la
cultura, como la condición de élite del empresariado, el
fuerte sello de lugar de intercambio comercial más que
de producción y la volatilidad de los capitales, son desafíos
que deben ser considerados a la hora de plantearse el
nuevo rol que este sector debe desempeñar en el fomento
y desarrollo de la RSE en el país.
"Existen iniciativas como la
Fundación Sus Buenos Vecinos
que son el eco de la
responsabilidad social y humana
que tienen las empresas para
con la comunidad en la que
convivimos. La Fundación le da
permanencia al compromiso que
adquirimos con los marginados
de nuestro país, logrando que
este compromiso no sea el Federico Humbert,
resultado de una política Presidente de la
empresarial circunscrita a la Fundación sus
dirección de hoy, sino que le Buenos Vecinos de
imprime una continuidad al Panamá
cumplimiento de la obligación
social que como empresa
tenemos".

LA SOCIEDAD CIVIL:
DECISIONES RESPONSABLES
Tanto en Panamá como en Latinoamérica, la sociedad civil
comienza a ser más exigente y a decidir su compra de
acuerdo a parámetros que van más allá del precio y calidad
del producto. Se está valorando crecientemente el
comportamiento socialmente responsable de las empresas.
La sociedad civil tiene la capacidad de ejercer cierta
influencia en la creación de conciencia del consumidor
final. En este sentido, pueden motivar a que las empresas
reconozcan la RSE como un elemento relacionado con la
competitividad y a plantearse el desafío de avanzar hacia
iniciativas más específicas, a partir de las capacidades y
compromisos existentes.
A este sector le compete un rol activo en la vinculación
entre empresa y comunidad, y en la promoción de esta
tendencia, que si bien debiera ser incorporada por razones
éticas y morales, no se puede desconocer que se verá
acelerada por otros factores, como la globalización de los
mercados.
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
En cuanto a cultura e imagen país, los logros han sido
menores pero importantes. Hay una mayor conciencia
social, cuidado del medio ambiente y preocupación por
la ética en todos sus ámbitos. Esto fortalece al país y va
cambiando paulatinamente la cultura del "juega vivo"
que existe en Panamá.
Las empresas obtienen evidentes beneficios, que van
desde una mejor imagen y mayor aceptación, hasta un
aumento en las ventas por la preferencia de los clientes.
Además, las empresas pioneras ya tienen casos de éxito
que mostrar, lo que invita de manera natural a otras
compañías a incluir el tema como parte importante de su
estrategia de negocio.
Además, y desde un punto de vista más global, las
empresas obtienen legitimación, credibilidad y mayor
compromiso de los trabajadores.
En este sentido, la RSE es una ventaja competitiva para
la empresa, debido a que la diferencia del resto y aumenta
su competitividad en un mercado donde los productos
son cada vez más homogéneos, mejora la calidad de vida
interna y su imagen exterior, favoreciendo la inversión
extranjera.
Familiarizándose con el concepto RSE
PANAMÁ
Entre las oportunidades que brinda la RSE a las instituciones
especializadas en el tema, está el desarrollo de metodologías
de diagnóstico y evaluación para las empresas. Sin
embargo, para esto es necesario transferir el conocimiento
adquirido.
La puesta en práctica de programas de RSE en las empresas
es una gran oportunidad para adquirir liderazgo y mejorar
la gestión empresarial con visión de largo plazo, lo cual
puede generar la capacidad necesaria para que las empresas
locales compitan en el mercado internacional. Esto puede
traer grandes beneficios económicos, sociales y ambientales
para la ciudadanía en general y, por supuesto, para el
país.
DESAFÍOS
Existen factores importantes en el país que pueden
contribuir al impulso de esta temática. Los principales
son:
- La Red del Pacto Global.
- Las organizaciones firmantes del Pacto Ético Empresarial.
- Los casos de éxito que comienzan a divulgarse.
La Red del Pacto Global ha sido una de las principales
impulsoras de la RSE en Panamá. Pese a que ha existido
una alta adhesión, las acciones concretas se han hecho 73
esperar, por lo que existe la oportunidad de intensificar
su labor con el apoyo de los empresarios y de la sociedad.
También se cuenta con empresas que publican algún tipo
de balance social o informe de sustentabilidad, como por
ejemplo, los informes con indicadores de la Global Reporting
Initiative (GRI).
Sin embargo, las iniciativas de RSE son abarcadas por
pocas empresas, lo cual se constituye en una gran
oportunidad de liderazgo para aquellos que quieran
llamarse "buenos ciudadanos corporativos". Sin duda, un
desafío que se traduce en potentes oportunidades futuras,
si es que se adopta la RSE como un modo de gestión y
de hacer empresa.
Pero esto requiere un esfuerzo profundo y continuo de
cambio. Un aspecto clave es la difusión de experiencias
que permitan a empresas panameñas desarrollar
metodologías de diagnóstico, planificación y evaluación,
para apoyar el desarrollo de programas que realmente
causen impactos positivos en el país. Para eso es esencial
 PANAMÁ
la creación de mecanismos de información que sean de
fácil acceso para las micro, pequeñas y medianas empresas
(MIPyME), y para la sociedad en general. Todo este
proceso debe apoyarse en especialistas con conocimiento
especializado en el tema, a fin de facilitar la transferencia
de conocimiento, metodología y herramientas a las
empresas y, sobre todo, a las MIPyME.
REFLEXIONES
Las acciones que desarrollan las empresas en el campo
de la RSE se valoran y se transforman en una variable
competitiva real. Es gratificante para el país contar con
ejemplos de esfuerzos empresariales destacados no sólo
a nivel nacional sino en un contexto global, lo cual muestra
que el país está avanzando y que el desarrollo de
programas significativos en RSE, permite incluso contar
historias de éxito, muchas de ellas dirigidas a contribuir
con instituciones benéficas del país.
En diciembre de 1996 el Banco General de Panamá creó
la Fundación "Sus Buenos Vecinos" con el objetivo de
dirigir los aportes que realiza a más de 65 instituciones
benéficas del país, asociaciones, clubes cívicos y personas
que se dedican a combatir el hambre y la ausencia de
orientación en los niños y a darle alegría y cobijo a los
ancianos. Posteriormente, la Junta Directiva de la
Fundación creó "Vecinos en Acción", con el objetivo de
involucrar de manera estratégica al personal en las
actividades de apoyo a la comunidad. Este programa se
74 presentó como caso de estudio en la reunión de aprendizaje
del Pacto Global de las Naciones Unidas, realizada en
Brasil en diciembre de 2003.
Su compromiso fundamental es el desarrollo de programas
que buscan la conservación de la naturaleza, la mitigación
de los riesgos a la salud, así como el beneficio y desarrollo
social sostenible. Ejemplo de ello lo constituye su
programa de recolección de aceites usados RECOIL, el
cual se desarrolla desde el año 2003 con la finalidad de
prevenir y mitigar los riesgos a la salud por causa del
manejo inadecuado de aceites usados, y garantizar la
apropiada disposición de desechos.
La red de estaciones de servicio ACCEL®, es
considerada una empresa social y ambientalmente
responsable. Está adherida al Pacto Global de las
Naciones Unidas en Panamá, desde el año 2001.
Por otro lado, hay quienes están conscientes de los
problemas económicos y sociales que sufre el país, y han
estado dispuestos a canalizar sus esfuerzos en fomentar
y apoyar la educación de excelencia.
Familiarizándose con el concepto RSE
En 1999 el Grupo Empresas Bern crea la Fundación
Bern, con el fin de ser el vehículo que permita
establecer y operar instituciones de educación
básica y de nivel superior con los más altos
estándares, en áreas de alta necesidad. Los
objetivos de la Fundación son: ayudar a la
comunidad por medio de una enseñanza bilingüe
de calidad; brindar orientación moral y cristiana;
buscar la excelencia en la formación integral del
individuo; desarrollar el proyecto en cuatro etapas
(pre-escolar, primaria, secundaria y educación
para adultos); brindar educación espiritual y crear
un comedor infantil para los estudiantes del
colegio.
Esta es una institución sin fines de lucro, presidida
por Miriam de Bern y con una junta directiva
compuesta por miembros de la familia Bern y de
diferentes sectores de a sociedad. Actualmente,
la fundación opera dos colegios: suizo-panameño
de las Américas, en Mañanitas; y suizo-panameño
de Valle Dorado, en la Chorrera.
Cabe destacar la labor de los gremios empresariales que
en un movimiento liderado por la Asociación Panameña
de Ejecutivos de Empresa (APEDE), con la facilitación de
a Red del Pacto Global y la colaboración del Departamento
del Comercio de Estados Unidos, en el marco del "Programa
de Buen Gobierno", firmaron el año 2003 el Pacto Ético
Empresarial, comprometiéndose al desarrollo e
implementación, en conjunto, de una iniciativa medular
compuesta por siete vertientes que confluyen y se
complementan entre sí, para la instauración de una cultura
ética empresarial en forma sostenible y duradera.
En definitiva, pese a que los programas se están recién
desarrollando, corresponden a iniciativas de empresas
privadas que demuestran que Panamá está creciendo de
la mano de la RSE.

Pacto Ético Empresarial
1.Lineamientos básicos para la elaboración de
códigos de conducta ética empresarial
2.Diálogo y coordinación permanente
3.Capacitación en materia de ética empresarial
4.Desarrollo de un Manual de Ética Empresarial
y de otras herramientas de capacitación
5.Cooperación entre el sector público y el sector
privado
6.Instauración del actuar ético empresarial en una
forma sostenible y duradera
7.Creación de un mecanismo de evaluación y
certificación de la conducta ética
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
PANAMEÑOS?
- La Red del Pacto Global, cuya sede se encuentra en la
APEDE, está fortaleciéndose internamente y desarrollando
programas, principalmente de información y apoyo a las
empresas firmantes. El PNUD Panamá acompaña a la Red
en sus actividades y ésta, como parte del Pacto Global,
busca la convergencia de todos los actores sociales
relevantes: gobierno, empresas, trabajadores, organismos
no-gubernamentales, además de facilitar buenas prácticas
basadas en los principios universales promovidos por la
ONU.
Familiarizándose con el concepto RSE
PANAMÁ
La Red ha realizado un esfuerzo importante por aumentar
la cantidad de firmantes del Pacto Global en Panamá,
mediante la difusión de los conceptos en diferentes
actividades.
- El Centro Empresarial de Inversión Social (CEDIS),
organización privada sin fines de lucro, establecida en el
año 2000 y auspiciada en sus inicios por la Fundación
W.K. Kellogg, como participante de su programa Liderazgo
en Filantropía en las Américas, ha adquirido el compromiso
de liderar el tema RSE en Panamá. Para ello realiza
programas de capacitación, información, investigación y
difusión de la RSE, mediante los cuales ayuda a las
empresas y a la sociedad a implementar políticas y prácticas
que les permitan alcanzar un éxito económico y social
sustentable a largo plazo, desde cómo integrar sus valores
éticos en las prácticas diarias hasta la manera en cómo
invertir en la comunidad. De igual forma, procura ser un
ente que constituya y coordine redes de cooperación,
tanto nacional como internacional, que apoyen la promoción
de esta temática.
- También es destacable la labor que realiza la organización
empresarial Compass, perteneciente a la Red Forum
Empresa, que agrupa a importantes empresarios panameños
y centra su actividad en la promoción al interior de las
empresas y en trabajos de mejoramiento de la calidad de
la educación.
75
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 PERÚ
Incorporando un nuevo enfoque de negocios

Una serie de estudios acerca de la

Responsabilidad Social Empresarial
indican que Perú está avanzando
cada vez más en el desarrollo de
esta temática. Además, es posible
distinguir que muchas de las
empresas que la aplican ya no lo
hacen como una mera actividad
filantrópica sino que la están
integrando de manera transversal a
sus actividades y procesos.
Perú

Perú
Incorporando un nuevo
enfoque de negocios
Diversas investigaciones acerca de las tendencias de la
Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en Perú, que
van desde recopilaciones históricas sobre la evolución del
tema, hasta estudios más específicos que incluyen el grado
de adopción de prácticas socialmente responsables en
determinadas empresas, han ayudado a comprender los
grandes avances que el país ha tenido en relación a esta
temática. Sin embargo, también han dejado en evidencia
que la RSE aún no es un tema institucionalizado y que
existe gran cantidad de organizaciones que se dedican a
actividades exclusivamente asistencialistas y filantrópicas,
pese a que algunas compañías nacionales han emprendido
proyectos y estrategias de RSE desde una dimensión tanto
interna como externa.
Uno de los estudios más importantes sobre la evolución
histórica de este concepto es "Empresas, fundaciones y
medios. La Responsabilidad Social en el Perú", realizado
en el año 2000 por Felipe Portocarrero, Cynthia Sanborn,
Sergio Llusera y Viviana Quea, destinado a documentar la
naturaleza y alcance de las fundaciones en el Perú,
identificar los factores que facilitan u obstaculizan la
movilización de recursos privados hacia prácticas de RSE
y proporcionar información a líderes empresariales y
autoridades públicas sobre cómo mejorar su impacto social.
También existen estudios que dejan ver los avances que
esta temática ha tenido en el país, tales como:
"Responsabilidad Social, una nueva forma de gerencia"
de Baltazar Caravedo, Pilar Mariscal, Karem Salinas y Juan
Carlos Villacorta, publicado en el 2000, que muestra un
ranking de las empresas peruanas socialmente
responsables; "Cómo promover la Responsabilidad Social
en el Perú. Marco legal e institucional", realizado en el
2001 por Javier de Belaúnde, Beatriz Parodi y Delia Muñoz,
que propone reformas en la legislación peruana con el fin
de promover la RSE; "Responsabilidad Social Empresarial:
un compromiso necesario", desarrollado en el 2001 por
Marcela Benavides y Guida de Gastelumendi, en el que se
recoge información sobre el grado de avance de las
empresas en el tema y se exponen algunos casos de éxito;
entre otros.
Incorporando un nuevo enfoque de negocios
PERÚ
LA CIUDADANÍA:
MÁS EXIGENTES
El impacto de la globalización en la economía actual, ha
llevado a la sociedad a exigir mayor responsabilidad social
a las empresas. El individuo es consciente de que forma
parte de una sociedad donde la satisfacción de necesidades,
como el empleo o la generación de riqueza se adoptan
de manera intrínseca, generando nuevos requerimientos.
Hoy en día, el éxito sostenible de una compañía depende
exclusivamente del nivel de desarrollo de los agentes que
la rodean y se involucran con ella directa o indirectamente.
Los ciudadanos se encuentran en un proceso de
concientización sobre la RSE; esperan que las empresas
se preocupen y se comprometan con el desarrollo y la
mejora de la calidad de vida de la sociedad. Una parte
de la ciudadanía se encuentra familiarizada con lo que
significa esta temática, especialmente los académicos,
consultores de negocios y grandes empresas reconocidas
por su labor en esta materia. Por otro lado, en el país
existen esfuerzos de la Asociación Peruana de Consumidores
(ASPEC) para promover el consumo responsable, con la
finalidad de que los consumidores adopten un criterio
asociado a la RSE a la hora de adquirir los productos en
el mercado.
Otros sectores de la ciudadanía se están involucrando en
la RSE gradualmente, especialmente en la difusión a nivel
empresarial. Ejemplos de ello son: Perú 2021, asociación
sin fines de lucro que busca contribuir al desarrollo de 79
una visión nacional compartida, donde se incorpore el
tema de la RSE como herramienta de gestión; y la
Universidad del Pacífico, a través de sus desayunos
empresariales con líderes de diversas empresas peruanas.
La RSE se ha enfocado básicamente a la empresa privada,
mas no a la empresa pública, la cual podría proporcionar
los medios para promover la responsabilidad social en el
país e incorporarla en sus planes de trabajo. Esto indica
que es necesario seguir realizando esfuerzos para difundir
el tema en la sociedad y generar así un proceso de
sensibilización gradual, que pueda ser difundido a todo
nivel, para lograr un mayor compromiso con el tema.
EL ESTADO:
RESPONSABILIDAD VOLUNTARIA
Una serie de estudios acerca de la RSE indican que este
tema está planteando nuevos retos al sistema legal, dado
que sirve como instrumento para favorecer, estimular y
promover condiciones para el desarrollo del país.
Se propuso en alguna oportunidad una "Ley de
Responsabilidad Social", la cual no tuvo el éxito esperado
entre los legisladores. A partir de ese suceso, quedó claro
que la RSE no debe ser regulada, sino promovida a partir
de iniciativas públicas, apoyadas en un marco legal
 PERÚ
favorable que la fomente y que también otorgue las
pautas necesarias para que sean las propias empresas
las que adopten prácticas socialmente responsables.
Es necesario que el gobierno se involucre en el desarrollo
y fomento de la RSE, pero también se debe contar con
el aporte y esfuerzo del sector privado y de la sociedad
civil.
Es preciso que el sector empresarial sea repotenciado,
eficaz, honesto y subsidiario de la sociedad civil, y que
no exista una lucha del gobierno contra él, sino que se
reconozca el rol fundamental que cada cual representa
y se asocien de manera estratégica para impulsar el
desarrollo del país.
Las empresas peruanas están conscientes de que deben
cumplir con todos los requerimientos que exige el Estado,
lo que aún no entienden es que la adopción de la RSE
es voluntaria y que va más allá del estricto cumplimiento
de la ley; es así como algunas empresas grandes
comprometidas con la RSE realizan proyectos que de
alguna u otra manera el Estado no puede desarrollar.
El libro "Cómo Promover la Responsabilidad Social
en el Perú. Marco legal e institucional", de Javier
de Belaúnde, Beatriz Parodi y Delia Muñoz, busca
demostrar cómo el tema plantea nuevos retos al
sistema legal dado que sirve como instrumento
para favorecer, estimular o promover condiciones
80 para el desarrollo de la RSE en el Perú. Este texto
analiza el sistema jurídico peruano, ubicando la
RSE en los ámbitos tributario, laboral y
medioambiental, planteando propuestas de reforma
en la legislación peruana con el fin de promover
la responsabilidad social; analiza mecanismos
complementarios con los de orden legal que
surgen a partir de la autorregulación, como el
establecimiento de códigos de conducta o
declaraciones de principios; y analiza las opiniones
y críticas de empresarios y representantes de
gremios empresariales.
LOS EMPRESARIOS:
CONFUSIÓN ENTRE RSE Y
FILANTROPÍA
Según el estudio "Empresas, fundaciones y medios. La
Responsabilidad Social en el Perú", las empresas peruanas
invierten escasamente en la realización de actividades de
RSE y/o filantropía. Existen diversas compañías que
cuentan con programas de responsabilidad social a nivel
externo (salud, educación y medio ambiente), pero que
Incorporando un nuevo enfoque de negocios
aún no han sido extendidas a las operaciones internas
de las organizaciones. Esta situación se da básicamente
porque dentro del contexto empresarial peruano se
confunde RSE con filantropía, lo que hace que las empresas
se demuestren más renuentes hacia la adopción de
prácticas socialmente responsables.
Otras tendencias observadas en el país se refieren a: falta
de compromiso institucional en materia de RSE por parte
del sector privado; bajo nivel de inversión por parte de
las organizaciones privadas en el desarrollo de actividades
que promuevan la responsabilidad social corporativa; falta
de involucramiento de los trabajadores en actividades de
carácter voluntario; y ausencia de personal dedicado
exclusivamente a los temas de RSE dentro de las
organizaciones.
Una investigación realizada por Baltazar Caravedo, durante
el año 2000, sobre la base de 153 empresas de diferentes
áreas geográficas y tamaños, mostró por primera vez en
el país un ranking de las 20 empresas peruanas más
socialmente responsables. Esto sirvió para motivarlas a
mejorar sus niveles de competitividad en el tema e
incentivar a otras empresas a realizar actividades de este
tipo. Las empresas que comprendieron la muestra fueron
consultadas sobre los siguientes temas: percepción del
concepto de RSE, naturaleza de las políticas sociales en
las empresas, modalidades de intervención en la
comunidad, instancias en que participan en las tomas de
decisiones, instrumentos de medición empleados, criterios
que utilizan las empresas para asignar recursos, beneficios
reconocidos, dificultades para invertir socialmente, códigos
de ética y reglamentos internos, actividades de integración
para el personal, capacitación, causas sociales en las que
invierten las empresas y recursos destinados para
actividades de RSE. El estudio de cada una de estas
variables entregó un panorama alentador, pues determinó
que año tras año se va incrementando el número de
empresas que realizan acciones de RSE tanto a nivel
externo como interno.

LA SOCIEDAD CIVIL:
A FAVOR DE LA RSE
La sociedad civil y, principalmente, las ONGs se han
transformado en impulsoras de la participación ciudadana
en asuntos de interés social. En este contexto, actividades
de algunas empresas se han visto cuestionadas, debido
a la presión realizada por estas entidades. Además, han
sido las abanderadas de una transformación en los
paradigmas del desarrollo, aportando propuestas y
estrategias exitosas en el marco del desarrollo humano
sostenible.
Por lo tanto, los integrantes de la sociedad civil se han
convertido en importantes stakeholders de las empresas,
debido a su fuerza, poder de influencia y negociación.
Existen publicaciones que compilan temas referidos a los
orígenes del espíritu asociativo peruano, desde las épocas
incaicas hasta la actualidad. Muchas hacen referencia a
ONGs y explican las labores que éstas realizan en el país,
así como las formas de voluntariado y filantropía.
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
La adopción de la RSE como filosofía empresarial trae
consigo una serie de oportunidades y beneficios. Algunos
de ellos son:
- Capacidad de identificar a los stakeholders de la empresa
para el diseño de estrategias empresariales alineadas a
sus requerimientos.
- Mejoramiento del desempeño financiero y reducción de
costos, por ejemplo, a través de la adopción de iniciativas
orientadas al medio ambiente y al clima laboral que
puedan reducir los costos drásticamente y disminuir los
gastos de improductividad.
- Mejoramiento en la gestión de los recursos, a través de
la incorporación de tópicos como reutilización y reciclaje.
- Mejoramiento en la imagen de marca y reputación frente
al público y ante la comunidad empresarial, a través de
la participación de la empresa en actividades de la
comunidad.
- Incremento de las ventas y fidelidad del cliente, a través
de la inclusión de criterios socialmente responsables en
los productos y servicios ofrecidos.
Incorporando un nuevo enfoque de negocios
PERÚ
- Mejoramiento en la evaluación de los proveedores de
insumos y materias primas.
- Incremento de la productividad y calidad, a través de
los esfuerzos de la empresa para generar mejores
condiciones de trabajo, disminuyendo los impactos
ambientales o incrementando el compromiso de los
empleados en la toma de decisiones.
- Habilidad para atraer y retener empleados, dado que
éstos valoran y evalúan el desempeño socialmente
responsable de las compañías.
También se observa la incorporación de la responsabilidad
social por las normas ISO, a través de la elaboración de
la ISO 26000, cuya finalidad es desarrollar una guía escrita
en un lenguaje sencillo, entendible y utilizable para aquellos
que no necesariamente son especialistas en el tema y así
puedan incorporarla en sus operaciones. Con ello, se
constata que la RSE adquiere cada vez mayor importancia,
siendo incorporada en aspectos de la gestión empresarial
y no sólo en cuestiones meramente filantrópicas.
La incorporación de la RSE en los sistemas de calidad de la
empresa permite un mayor ahorro, disminuye el desempleo,
garantiza el funcionamiento rentable de las empresas y satisface
las necesidades explícitas y tácitas de los clientes. Por ejemplo,
al brindar una mejor calidad de producto o servicio, incluyendo
los criterios de responsabilidad social y marketing responsable,
las necesidades de los clientes se verán satisfechas e incluso
éstos incrementarán su fidelidad. 81
DESAFÍOS
Los empresarios peruanos tienen el reto de acercarse más
a las entidades de la sociedad civil, a fin de lograr potenciar
las actividades de RSE en el país. El diálogo y el intercambio
de información son los pasos fundamentales para lograr
mejores resultados en el desarrollo de esta temática.
Un reto muy importante es promover la difusión de la
RSE a través de los medios de comunicación, pues cumplen
un rol fundamental en la diseminación de actividades de
RSE del sector privado y de otras organizaciones.
El número de fundaciones existentes en el país es aún
reducido y son escasas las empresas que establecen
programas de donaciones y voluntariado corporativo dentro
de sus actividades. Ello se constituye en un desafío para
la empresa privada, sobretodo para las más grandes y
sólidas del país, en cuanto al desarrollo de obras sociales,
relacionadas a sociedad, género y medio ambiente.
 PERÚ
Esta temática no sólo debe identificarse con iniciativas
vinculadas al sector empresarial, sino también al público.
En este sentido, es conveniente que el Estado asuma la
RSE dentro de su agenda para la ejecución de alianzas
con el sector privado que permitan satisfacer las necesidades
no cubiertas de la sociedad.
Por su parte, la comunidad académica debe incorporar
estos temas dentro de las mallas curriculares de las
carreras que imparte. Actualmente, pocas universidades
peruanas han integrado el tema en la formación integral
del alumno. Si bien existen esfuerzos por parte de las
universidades en dictar cursos libres sobre RSE, no debe
dejarse de lado su incorporación en cursos de carrera,
pues esto permitirá que el alumno desarrolle una visión
de la RSE tanto a nivel externo como desde la perspectiva
interna de una organización. Ello es esencial para formar
futuras generaciones que no sólo cuenten con la condición
de especialistas en su área, sino que también tengan
conciencia de los beneficios que la RSE puede ofrecerles
al incorporarla en las organizaciones donde se desarrollen
profesionalmente.
También es importante destacar que la RSE se ha
desarrollado básicamente por las grandes empresas del
país, ya que las pequeñas y medianas no cuentan con
los recursos suficientes para su aplicación. Esta situación
más que una excusa, debe ser un reto para que las PyMEs
desarrollen la RSE tanto interna como externamente. Por
esto, es necesario contemplar un proceso de sensibilización
y capacitación hacia este sector empresarial, a fin de que
82 puedan aportar al tema a partir de los recursos con los
que cuentan e incluso generen alianzas con sus pares,
para desarrollar alternativas conjuntas en pos del desarrollo
sostenible y la responsabilidad social.
Incorporando un nuevo enfoque de negocios
REFLEXIONES
Existen variadas publicaciones que permiten comprobar
el grado de avance que ha tenido Perú respecto al
desarrollo de la RSE. Es posible destacar los estudios de
casos de RSE en empresas peruanas, realizados por la
Universidad del Pacífico y que son publicados anualmente
en formato de libro.
También existen estudios enfocados en el carácter
corporativo de la RSE, que integra a todas las partes
interesadas de la empresa y permite generar mayor valor
para ésta y la sociedad en su conjunto. Ejemplos de ellos
son los artículos de investigaciones que realiza Perú 2021.
Esta entidad desarrolló la investigación "Guía para el
Diseño de Estrategias de RSE", en la cual se expone la
situación de esta temática en los últimos años y la
importancia de abarcarla de manera transversal en la
empresa.
El sector privado muestra una serie de características que
permiten determinar en qué medida la RSE se ha
incorporado en las organizaciones. Sin embargo,
investigaciones realizadas por Felipe Portocarrero y Cynthia
Sanborn, del Centro de Investigación de la Universidad
del Pacífico, indican que dos de las principales
características de este sector son la falta de un compromiso
institucionalizado con respecto a la RSE, así como la
negativa a establecer prácticas socialmente responsables
dentro de la gestión de la organización. Estos dos factores
permiten entender el bajo nivel de inversión por parte
de las organizaciones privadas en el desarrollo de
actividades que promuevan la temática. También se infiere
de estos estudios, la falta de involucramiento de los
trabajadores en actividades de carácter voluntario, así
como la ausencia de personal dedicado exclusivamente
a los temas de RSE en la organización.
Los sectores económicos peruanos que demuestran un
mayor desarrollo de la RSE son el minero y el energético.
Las actividades de estas empresas implican el uso de los
recursos naturales del país, por lo que se les exige un
manejo adecuado para evitar daños al medio ambiente.
Muchas mineras han adoptado planes y programas de
RSE internos y externos que se ven reflejados en las
denominadas Memorias Sociales o Balances Sociales,
mediante los cuales se busca informar a sus grupos de
interés sobre la marcha de sus actividades y el impacto
que tienen en su entorno.
La creciente importancia que las compañías nacionales
están otorgando a la RSE se puede fundamentar desde
PERÚ
dos puntos de vista. El primero, considera que es importante
su adopción por el compromiso ético que le cabe a la
empresa, en la búsqueda de que sus acciones impacten
de manera positiva a los grupos que la rodean. El segundo,
considera que se debe implementar porque es
económicamente rentable. Según el gerente general de
Perú 2021, Henri Le Bienvenu, "cuando se implementa
esta forma de gestión, hay una reducción de costos
operativos, como por ejemplo disminución en los costos
de contratación y entrenamiento, ya que se disminuye la
rotación de personal. También se reducen costos al contar
con un manejo de desechos, reciclaje o eficiencia
energética".
Sin embargo, son numerosos los casos de empresarios
peruanos que han adoptado la RSE debido a las exigencias
del mercado o simplemente como una "moda" que ha
llegado al sector privado. Sin duda, esto es un punto
desfavorable puesto que induce a pensar que el tema no
está siendo desarrollado por convicción, sino por obligación
o presión del entorno. Ante esta óptica, se hace necesario
que la sensibilización de la RSE sea trabajada con más
fuerza para lograr que las acciones emprendidas sean
más que palabras, y se transformen en acciones realizadas
y asimiladas, no forzadas por el entorno.
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
PERUANOS?
- La labor de diseminación y difusión de la responsabilidad
social a nivel empresarial ha venido realizándose gracias
Incorporando un nuevo enfoque de negocios
a las iniciativas de Perú 2021, asociación civil que promueve
la RSE en el país, mediante la realización de desayunos
empresariales, conferencias, publicaciones y artículos de
interés dirigidos al sector empresarial.
- En julio de 2005 se realizó el primer desayuno de
trabajo, donde se presentó el Modelo de RSE Perú 2021.
Se planea seguir realizando este tipo de actividades para
lograr sensibilizar al sector empresarial en la ejecución
de prácticas socialmente responsables.
- Por otro lado, el Centro de Investigación de la Universidad
del Pacífico, investiga desde el año 1999 los temas de
responsabilidad social, el tercer sector y la filantropía.
Producto de esta labor se ha logrado una presencia muy
destacada en América Latina y la participación en varias
redes importantes. En este marco, participa en
PerúPromesa, iniciativa nacional de la Fundación W.K.
Kellogg, cuyos productos son una Biblioteca de
Responsabilidad Social y el Concurso de Responsabilidad
Social para Estudiantes Universitarios.
- Además, la universidad ha sido seleccionada para formar
parte de la Red SEKN (Social Enterprise Knowledge
Network), un selecto grupo de instituciones de educación
superior cuyo principal objetivo es estimular un mayor
compromiso y prácticas efectivas de los líderes actuales
y futuros de las empresas y de las ONGs, en
emprendimientos con fines sociales.
83
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable
 URUGUAY
Promoción y creciente adopción de la RSE

La globalización y el significativo
avance de la tecnología, sumado a
un aumento de las necesidades
sociales, consecuencia de una fuerte
crisis económica que ha comenzado
a revertirse, han estimulado a la
sociedad uruguaya y al empresariado
a interiorizarse sobre la importancia
de la Responsabilidad Social
Empresaria, concepto que hoy está
presente en muchos países y cuya
práctica en Uruguay aumenta
considerablemente.
Uruguay

Uruguay
Promoción y creciente
adopción de la RSE
En Uruguay, desde hace muchos años, las empresas han
venido desarrollando diferentes acciones que hoy, a la luz
de los nuevos conceptos, son consideradas iniciativas de
Responsabilidad Social Empresaria (RSE). Esto se ve
reflejado en las respuestas de empresarios cuando se les
consulta si en su empresa desarrollan la RSE. Si bien la
primera respuesta puede ser negativa -debido a la falta
de conocimiento sobre lo que implica este término- una
vez que se indaga sobre las distintas acciones y programas
que la empresa desarrolla, se descubre que éstos se
enmarcan en el concepto de RSE: simplemente no se
consideran como tales y se desarrollan en forma aislada
o puntual.
La RSE ha tenido un gran impulso desde principios del año
2000, a raíz de diversas inquietudes surgidas de algunos
empresarios y en especial desde la academia, en particular
por parte de la Universidad Católica del Uruguay.
El contexto internacional ha llevado a que esta temática
sea fuertemente promovida, principalmente porque la
mayoría de las empresas internacionales que operan en
el país desarrollan sus programas corporativos globales
de RSE, dándoles un perfil local. Paralelamente, se
destacan innovadores programas de RSE impulsados por
empresas nacionales. Diversas compañías que mantienen
relaciones comerciales con mercados del exterior,
principalmente el europeo, han encontrado que la
incorporación de la RSE es un elemento clave para
mantener dichos mercados.
El crecimiento del concepto RSE, apoyado por el avance
de las telecomunicaciones, ha permitido que temas, noticias
e información relativa a sus prácticas asociadas, tengan
cada vez mayor penetración en el país. En consecuencia,
los medios de comunicación han comenzado a jugar un
papel importante.
Promoción y creciente adopción de la RSE
URUGUAY
Por otro lado, el involucramiento de determinados actores
de relevancia con presencia global, tales como el Banco
Interamericano del Desarrollo, el Banco Mundial, ISO, etc.
ha sido un factor de peso para que Uruguay comience a
comprender la importancia de esta temática.
LA CIUDADANÍA:
RSE Y APOYO A LA COMUNIDAD
Pese a que en Uruguay no se han desarrollado estudios
profundos sobre la RSE y su impacto, principalmente en
lo que se refiere a mediciones, ni tampoco investigaciones
de opinión pública, salvo algunas más abarcativas en las
que se mencionan temas referidos a RSE, un primer
relevamiento que la organización DERES (Desarrollo de la
Responsabilidad Social Empresaria) llevó a cabo a principios
del año 2001 y en el cual se hacía una pregunta abierta
sobre acciones involucradas a la temática, sin dar una
definición del concepto en sí, arrojó que existía una fuerte
identificación de la RSE con acciones de apoyo a la
comunidad, estableciéndose una línea muy débil entre
RSE y filantropía.
Afortunadamente, esta visión está cambiando y se ha
comenzado a comprender que existe una brecha entre
RSE y filantropía pura.
Según el estudio "Monitor de RSE", realizado por MORI
y GlobeScam, la ciudadanía tiene una fuerte expectativa
respecto a lo que las empresas pueden hacer en términos 87
de RSE y pretenden que las mismas se involucren más
allá de su rol tradicional. La mayoría opina que las grandes
empresas deberían involucrarse en la solución de problemas
sociales. En general, existe una visión de que las acciones
de RSE realizadas hasta el momento son insuficientes,
aunque existe un porcentaje importante que considera
válido que las empresas reduzcan su apoyo a la comunidad
cuando están pasando por problemas financieros.
En tanto, existe una opinión dividida sobre si el Estado
debería regular la RSE. Una leve minoría se muestra a
favor de una regulación, mientras una proporción mayor
opina lo contrario, al estimar que puede implicar un
incremento de precios y desempleo.
"La RSE bien aplicada se
convierte en una potente
herramienta de gestión
empresarial".
Omar Braga
Presidente de DERES
 URUGUAY
EL ESTADO:
UN DESEMPEÑO DISCRETO
Un capítulo aparte merece el Estado como generador de
posibles políticas que promuevan el desarrollo de la RSE,
así como en su rol de administrador de las mayores
empresas del país.
Aunque promueve prácticas de transparencia, cuidado
del medio ambiente y programas de apoyo comunitario,
entre otros, no existe explícitamente ninguna señal o
pronunciamiento en torno a la RSE.
En cuanto a las empresas públicas (propiedad del Estado),
si bien no existe la incorporación de la RSE formalmente,
varias de ellas tienen departamentos, comisiones o
programas que están trabajando la temática. Tal es el
caso de la Administración Nacional de Telecomunicaciones
(ANTEL), la Administración Nacional de Usinas y
Transmisiones Eléctricas (UTE) y la Administración Nacional
de Combustibles, Alcohol y Portland (ANCAP).
Aún son muy limitados los incentivos tributarios para las
empresas que se embarcan en programas de apoyo
comunitario o apoyo a fundaciones. No obstante, existen
exitosos ejemplos de programas conjuntos, que han
logrado vencer la rigidez normativa y la fuerte burocracia
que conspira en contra de diversas iniciativas promovidas
por empresas, ONGs, etc.
88
El gobierno recientemente electo ha dado una orientación
especial en lo que se refiere al tratamiento de los temas
sociales. Actualmente está siendo tratada en el Parlamento
una ley sobre voluntariado social.
Empresarios, directivos y autoridades nacionales
en el lanzamiento del Manual para la Confección
del Balance Social, mayo 2004.
Promoción y creciente adopción de la RSE
Las conferencias sobre RSE concitan cada vez
más el interés de empresarios y público en
general.
LOS EMPRESARIOS:
ASIMILANDO EL CONCEPTO
La tendencia respecto a la RSE en el sector empresario,
está en diferenciar claramente la RSE de la filantropía. El
crecimiento de la temática en el país viene incrementándose
desde todo punto de vista: empresas interesándose en
el tema, universidades, cámaras, asociaciones, etc.
El ritmo de crecimiento de la RSE en Uruguay es similar
al desarrollo que está teniendo en el resto de Latinoamérica.
La existencia de temas específicos sobre RSE en
prácticamente todo congreso o evento internacional de
corte empresarial, lleva a que quienes participan, retornen
con la inquietud y la trasladen a sus empresas y
asociaciones gremiales.
En general, las empresas que se han involucrado con la
RSE son aquellas que tienen una clara visión de largo
plazo y sustentabilidad. Han incorporado el concepto más
amplio de stakeholder, dándole mucha importancia al
relacionamiento e involucramiento con los mismos y en
especial, al impacto que tienen en la comunidad.
Las empresas comprometidas con la RSE tienen la
convicción sobre los beneficios que ésta genera tanto
para el negocio como para la sociedad. Esto lleva a que
no sólo se posicionen como líderes en la adopción de
esta nueva forma de gestión, sino que trabajen activamente
en su difusión y promoción, procurando involucrar al
resto de la comunidad empresaria.
Estos empresarios consideran que la RSE es una poderosa
herramienta de gestión, la cual permite desarrollar la
estrategia de la empresa con una sinergia muy fuerte, no
sólo entre todos los colaboradores internos de la empresa,
sino también con los stakeholders externos.

LA SOCIEDAD CIVIL:
POSITIVA INFLUENCIA
En Uruguay numerosas organizaciones de la sociedad civil,
más allá de sus objetivos específicos, han comenzado a
incursionar en la temática de la RSE con distintos propósitos:
facilitar el relacionamiento ONG/sector privado (Asociación
Cristiana de Dirigentes de Empresa - ACDE, Communitas);
promover la incorporación de la RSE en nuevos y futuros
emprendedores (Endeavor, DESEM - Capítulo Uruguay de
Junior Achievement); canalizar acciones y programas de
RSE por parte de las empresas (Fundación Zonamérica y
Fundación Logros); apoyar diversos programas de promoción
de la RSE (Fundación AVINA, BID); y desarrollar distintos
relevamientos de base sobre temas vinculados (Instituto
de Comunicación y Desarrollo - ICD).
No obstante, la ciudadanía le da escasa importancia al
rol de las organizaciones de la sociedad civil en la
promoción de transparencia en las empresas. Una mayoría
opina que esa función es insignificante o limitada (1). Por
lo tanto, uno de los principales desafíos respecto a la
sociedad civil será lograr una activa participación de los
distintos sectores que la componen, a efectos de generar
sinergia con el sector privado en temas vinculados a la
RSE. Por ejemplo, consumidores diferenciando a las
empresas por su conducta; mayor vinculación ONGs -
sector privado, etc.
BENEFICIOS Y OPORTUNIDADES
En términos generales, la aplicación de la RSE ha permitido
que las empresas mejoren su relación con la comunidad,
su imagen y las relaciones con sus trabajadores.
En particular, algunas compañías han optimizado el uso
de recursos, a través de programas medioambientales;
han reducido accidentes de trabajo y ausentismo,
involucrando a los trabajadores en la educación para la
prevención de accidentes, así como en la promoción de
una vida sana; y han mejorado su relación con la comunidad
y sus trabajadores, a través de programas de voluntariado.
Las prácticas de RSE están generando un cambio en la
cultura empresarial. El involucramiento en temas sociales,
que conlleva una mayor exposición y visibilidad de las
empresas, ha generado un amplio vínculo entre éstas, sus
trabajadores y la sociedad.
Uno de los temas a destacar y que podría incluirse como
novedad en las prácticas empresariales, es la paulatina
y creciente aparición, específicamente en el año 2005, de
reportes de RSE por parte de varias empresas, lo cual
hasta hace poco prácticamente no se conocía en el país.
(1) ICD-CIVICUS-PNUD, Índice de la Sociedad Civil en Uruguay. Montevideo, Uruguay 2005.
Promoción y creciente adopción de la RSE
URUGUAY
Otro aspecto que impacta en la cultura, ha sido la
incorporación de la RSE por parte de las universidades.
Si bien aún no se ha logrado un gran avance en la
incorporación de esta temática en las mallas curriculares,
se está trabajando crecientemente a nivel de monografías
y tesis de grado.
Por otro lado, se distinguen empresas que a través de
certificaciones externas (FSC y Eurep Gap) han accedido
a mercados más exigentes, así como casos de compañías
que mediante programas de calidad de vida laboral han
logrado disminuir costos, entre otros aspectos, lo cual
refleja los beneficios estratégicos que implica la adopción
de la RSE.
Adicionalmente, esta temática permite mejorar
sustancialmente la calidad de vida de los trabajadores.
A través de una nueva forma de gestión de recursos
humanos, se promueve una mayor transparencia de
información hacia los trabajadores, mejoras en términos
locativos, desarrollo de balances trabajo-familia, trabajo-
tiempo libre y programas de integración con las familias.
Además, se brindan oportunidades de realización personal,
mediante programas de voluntariado y se incrementan las
condiciones de empleabilidad, a través de programas de
desarrollo profesional (capacitación), entre otros. Todo
ello tiene un retorno, que se traduce en menor rotación
y mayor sentido de pertenencia.
En tanto, el involucramiento de la empresa en programas
de apoyo a la comunidad genera cambios muy positivos 89
para el desarrollo socioeconómico de la misma.
Cada vez más, las empresas están sujetas a
obtener la "licencia social" para operar, la que
se obtiene a través de una gestión alineada con
el concepto de desarrollo sustentable. Por ello la
RSE se constituye en una herramienta óptima
para contar con empresas perdurables en el tiempo
y aceptadas por la sociedad, respondiendo al
concepto expresado por el World Business Council
for Sustainable Development (WBCSD): "las
empresas deben ser económicamente viables,
socialmente aceptables y medioambientalmente
sanas".
DESAFÍOS
Empresas que vienen trabajando con un enfoque RSE
desde hace ya algunos años, no sólo perciben esta temática
como una ventaja competitiva, sino que pueden dar
testimonio de ello. Sin embargo, aún no existen mediciones
que permitan demostrarlo. Para quienes aún no han
asimilado el tema, éste es uno de los aspectos que mayor
duda genera y que hace más lenta la incorporación de la
RSE.
 URUGUAY

La importancia creciente que desde mercados externos

se le da a temas de RSE, muchas veces transformándose
en "barreras no arancelarias", es clave para acceder a
los mismos. Esto puede ser visto como una gran
oportunidad para las empresas y, en especial, para las
PyMEs, que podrán apuntar a nichos de mercados con
consumidores que incorporan las prácticas éticas y
responsables de los proveedores en sus criterios de
compra.

Cabe destacar que en el "Libro Verde", lanzado en el año

2001 por la Comisión de las Comunidades Europeas, se
resalta la importancia que la Unión Europea asigna a
aspectos vinculados a la RSE en sus negociaciones
comerciales, haciendo referencia específica al Mercosur.
"La sinergia entre la empresa y el tercer sector
es clave".
Generar un clima de RSE, tanto desde el sector privado
como desde el Estado, que permita dar una señal de
Roberto Horta
transparencia, ética y responsabilidad fiscal, social y
Directivo de DERES
medioambiental, se traduce en un elemento atractivo
Lanzamiento de Un Techo para Uruguay, 2005
para la inversión extranjera, tan necesaria para el país.

LA IMPORTANCIA DE LA COOPERACIÓN Y SINERGIA PRINCIPALES PROMOTORES DE LA RSE EN URUGUAY

Un aspecto que resulta absolutamente necesario es la
sinergia entre los sectores que conforman la sociedad.
Si bien la RSE es un tema integral dentro de la empresa,
el ejercicio de diversos programas o acciones de RSE
deben llevarse a cabo en conjunto con otros actores de
90 la sociedad. Aquí se destaca la necesaria integración en
ámbitos de apoyo a la comunidad: "know-how de la
empresa" y sus recursos deben coordinarse con el "know-
how social" de las organizaciones del tercer sector, para
desarrollar con éxito programas conjuntos entre empresas
y ONGs.
Otro aspecto es la sinergia con el ámbito educativo,
principalmente el universitario, donde ya se han comenzado
a incorporar los conceptos de RSE en distintas carreras
a fin de que los futuros tomadores de decisión manejen
esta temática tempranamente. Aquí es clave el apoyo que
organizaciones como DERES y sus empresarios miembros
le brindan a las diferentes universidades.
Si bien el Estado tiene una fuerte participación en temas
sociales, falta una mayor sinergia con el sector privado.
Finalmente, para que se pueda lograr una relación más
efectiva entre los distintos sectores, se debe trabajar en
unificar el criterio de "qué se entiende por RSE", ya que
existen distintas interpretaciones sobre su significado.
Desde la ciudadanía, en general, existe la opinión de que
si bien existen casos concretos, aún hay mucho camino
por recorrer. Predomina la opinión de que la actitud del
sector privado hacia las organizaciones de la sociedad
civil es mayormente indiferente.
DERES es la única organización que está focalizada en
promover la temática de RSE en el país. La organización
está integrada por empresas (privadas y públicas) y nace
de un impulso conjunto entre la Universidad Católica del
Uruguay y un núcleo de empresarios vinculados a la
misma.
Actuando activamente desde mediados del año 2001,
DERES ha sido uno de los principales difusores e impulsores
de la RSE en Uruguay.
Mediante diversas acciones, convoca anualmente a cientos
de empresarios, académicos e integrantes de la sociedad
civil, brindándoles conferencias, seminarios y talleres con
la finalidad de generar una mayor conciencia sobre la
importancia creciente de la RSE y su incidencia en el
desarrollo socioeconómico del país.
La publicación de herramientas, relevamiento de casos,
así como la interacción con otras organizaciones de RSE
a través de su participación en la Red Interamericana de
RSE, en Forum Empresa y en Global Partner Network de
Buzones in the Community (BITC), ha permitido brindar
al empresariado local información actualizada de los
avances de la RSE en la región y en el mundo.
ACDE es una organización empresarial miembro de
UNIAPAC (originalmente Unión Internacional de Asociaciones
Patronales Católicas), cuya misión es agrupar a dirigentes
de empresa con el objetivo de promover organizaciones
empresariales eficientes, que sean capaces de generar
estructuras socioeconómicas más justas y humanas,
basadas en la concepción cristiana del hombre y de la

Promoción y creciente adopción de la RSE


sociedad. Siendo una de las asociaciones empresariales
de mayor trayectoria y reconocimiento en Uruguay, los
conceptos relacionados a la RSE han estado explícitamente
presentes en sus diversos programas e iniciativas desde
su fundación.
En el año 2003, ACDE
lanzó el "Índice de
RSE". Hasta su
segunda edición, en el
año 2005, habían
participado más de 150
empresas.
Anuncio de lanzamiento
del Índice de RSE
Rosario Ferro
Presidenta de ACDE
(2002-2004).
REFLEXIONES
Al realizar una evaluación del conocimiento sobre la RSE
en el sector empresarial, desde mediados del año 2001
(primer relevamiento realizado por DERES) hasta el año
2005, es posible establecer que el avance ha sido muy
importante, en especial a nivel de los principales líderes
empresariales, cámaras, asociaciones y otros ámbitos que
nuclean a los mismos.
El comportamiento del sector privado indica que existe
un número importante y creciente de empresas que están
tomando cada vez mayor conciencia sobre la importancia
de la RSE, incorporando el concepto como tal.
Las diversas acciones o programas (internos, comunitarios,
de medio ambiente, etc.) que las empresas tradicionalmente
desarrollaban en forma independiente, están siendo
visualizadas no como algo aislado, sino como un conjunto
más delimitado, que responde a la visión de RSE.
Un claro ejemplo de los avances que la RSE está teniendo
en el sector empresario, es la percepción de un creciente
interés en comenzar a informar públicamente sobre lo que
las empresas realizan en esta materia, ya sea a través de
testimonios, reportes o presencia en medios de
comunicación.
No obstante, y dado el distinto grado de avance de la
RSE entre las empresas, también se percibe la creciente
necesidad de sistematización o existencia de herramientas
que faciliten su incorporación en forma más integrada a
la gestión, a las operaciones cotidianas, involucrando a
toda la organización y no sólo a los niveles más altos.
Promoción y creciente adopción de la RSE
URUGUAY
Si bien los principales promotores de la RSE en el país
son DERES y ACDE, dado el avance y penetración que
esta temática ha tenido en el país, existe una gran cantidad
de "otros actores" que han comenzado a incorporar la
temática, no como tema central, pero sí en forma
complementaria a sus objetivos principales, dentro de los
cuales es posible distinguir al sector académico,
asociaciones, gremios empresariales, ONGs, fundaciones,
organismos multilaterales y medios de comunicación. Sólo
en el año 2004 se desarrollaron más de 30 actividades
vinculadas a la RSE.
Desde la óptica de los consumidores y del público en
general, existe un gran desconocimiento sobre el significado
de la RSE. La impresión más generalizada se refiere a un
concepto filantrópico, sobre la contribución de las empresas
a la comunidad. En otro sentido, los consumidores
demuestran un fuerte involucramiento en programas de
apoyo comunitario impulsados por empresas, pero no
toman en cuenta el desempeño responsable de éstas al
momento de la decisión de compra.
También se puede afirmar que la RSE aún se identifica
como un concepto apto únicamente para las grandes
empresas, por lo que acercar este tema a las PyMEs es
un desafío en el que se ha comenzado a trabajar.
Todo indica que la RSE tomará cada vez mayor fuerza en
el Uruguay y que este crecimiento será impulsado por los
diferentes actores promotores directos de esta temática,
así como también por parte de las organizaciones del 91
tercer sector, que ven en ellas mismas una oportunidad
para que las empresas canalicen sus iniciativas de RSE.
¿EN QUÉ ESTAMOS LOS
URUGUAYOS?
Diversas organizaciones e instituciones han incorporado
actividades, acciones y programas de RSE, de las cuales
se destaca lo siguiente:
- DERES tiene programada una serie de conferencias y
talleres dirigidos al sector empresarial. Próximamente, se
comenzarán a desarrollar proyectos que apunten a la
promoción de la RSE en las PyMEs y a la diseminación
y difusión de la RSE en diversas ciudades del interior de
Uruguay. Actualmente, está en curso un relevamiento de
base sobre RSE.
- ACDE ha lanzado la tercera edición del Índice de RSE y
continuará con sus programas de capacitación y
profesionalización de ONGs como apoyo a las organizaciones
del tercer sector.
- UNIT, miembro ISO en Uruguay, continúa con actividades
de capacitación, acompañando el proceso de desarrollo
de la norma ISO 26000 de Responsabilidad Social.
Situación de la RSE en Latinoamérica
Hacia un desarrollo sustentable