El niño casi siempre parece sentirse triste y sin esperanza. Puede que llore mucho
sin ningún motivo aparente.
Frecuentemente parece estar muy enojado, o constantemente está irritable
y tenso; se perturba extremadamente a causa de cosas que importan poco
a otros. A todos los niños un día les puede ir muy mal, pero una tendencia
marcada hacia la tensión, la irritabilidad y el enojo, es motivo de
preocupación.
El niño manifiesta frecuentemente agresión hacia los compañeros, los
adultos o los animales, tal vez cuando piensa que nadie más observa su
conducta. Otros niños tal vez le tengan miedo. Un niño que frecuentemente
aprovecha oportunidades de lastimar o asustar a otros no es un niño feliz,
aunque sonría o se ría durante los actos agresivos.
Frecuentemente es difícil consolarlo o tranquilizarlo cuando está enojado,
frustrado, asustado o de otra manera perturbado, frecuentemente se pierde
en sentimientos negativos.
Se asusta muy fácilmente, parece quedarse inmóvil por temor, o manifiesta
una vigilancia excesiva. Por ejemplo, puede parecer que tiene miedo de
cerrar los ojos a la hora de la siesta.
Experimenta retrasos en el uso del excusado o en otros hitos del desarrollo.
Frecuentemente expresa sentimientos de inutilidad o parece sentirse
excesivamente culpable, ansioso o preocupado.
Parece tener mucho miedo en situaciones que no dan miedo a otros niños.
Frecuentemente tiene problemas de sueño, como pesadillas aterradoras, o
mucha dificultad para dormirse o despertarse. Cualquier perturbación severa
del sueño puede ser un indicio de un problema de salud mental.
Evita actividades que hace poco le gustaban, como jugar con los amigos,
prefiere estar solo y empieza a alejarse de todos.
Parece incapaz de relajarse o se está moviendo constantemente (mucho
más que sus compañeros).
Intenta lastimarse, se lastima a propósito, o dice que quiere lastimarse
Frecuentemente manifiesta una actitud de oposición o desafío a los pedidos
de los adultos. Parece estar muy impulsado a rechazar las reglas o la
orientación.
Muy raramente se defiende ante otras personas que le dan órdenes o lo
intimidan.
Se perturba mucho si hay cambios en su rutina usual.