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La familia de las normas ISO es reconocida alrededor del mundo debido a que aportan

a las empresas una serie de procedimientos que garantizan el buen funcionamiento de


todos los departamentos de la organización. Por esta razón, cada vez más empresas
implementan estas normas, puesto que quieren ampliar su mercado y ser más
competitivos, además que saben que certificarse en normas ISO es una garantía de
crecimiento y prestigio. En la actualidad existen varias normas ISO como la ISO 9000, ISO
14000, OHSAS 18000 (o ISO 18000) y la ISO 22000. Cada empresa elige qué normas
implementar dependiendo de su actividad económico y/o servicios que presten.

Las normas ISO 9000 (originalmente de 1994) que hacen referencia a los Sistemas de
Gestión de la Calidad, estaban dirigidas principalmente a organizaciones de procesos
productivos, lo cual dificultaba su implementación para las empresas de servicios. Debido
a esto, en el 2000 se consiguió estructurar normas menos complicadas, con el fin de que
todo tipo de organización, sin importar su actividad económica, puedan implementarla
sin problemas, y si lo deciden, certificarse en esta norma. La versión más actualizada de
estas normas es la ISO 9001 del 2015, bajo las cuales las empresas se certifican.

La implementación de estas normas permite a las empresas comprometerse a altos


niveles de resultados, al acelerar y optimizar procesos de producción, así como de
atención. Por otra parte, implementar estas normas implica que la empresa cree un
modelo de trabajo y organización estándar, haciendo que la empresa sea más eficaz a
nivel organizativo, además que la ayuda a alcanzar sus objetivos, mejorar los procesos
continuamente, entre otros.

Para su implementación, las empresas primero deben dar a conocer las normas que van
a empezar a implementar, para esto deben empezar por los directivos, debido a que, si
estos están involucrados en el proceso, será mucho más fácil transmitir esta filosofía al
resto del personal. Después, deberán elegir un equipo encargado de la calidad, el cual
hará un análisis de la situación actual de la empresa, evaluará las necesidades de
capacitación y obtendrá los recursos necesarios para este proceso. Posteriormente, las
empresas deben diseñar el sistema de calidad, en el cual se detallan las actividades de
la empresa, se describe cada proceso y se crea un manual de calidad con sus
procedimientos y métodos; una vez se tenga este sistema de calidad, se pone en
marcha. Es importante y necesario que la empresa comunique la necesidad y los
beneficios de este proceso a sus empleados, concientizarlos de la importancia de la
calidad y capacitarlos. Por último, deben realizar auditorías internas con el fin de verificar
que las normas se están cumpliendo correctamente.

Las ISO 14000 (o Sistemas de Gestión Ambiental) son un estándar internacional de gestión
ambiental publicado en la década de los 90´s. Su objetivo es facilitar a las empresas
metodologías adecuadas para que implanten un sistema de gestión ambiental, en otras
palabras, su objetivo consiste en la estandarización de los procesos productivos y/o de la
prestación de servicios de tal forma que protejan el medio ambiente. Como
consecuencia de esto, las empresas que implementan estas normas se vuelven más
competitivas al cumplir con la alta demanda de productos cuyos componentes y
procesos de elaboración respeten y cuiden el medio ambiente.

Para su implementación, el proceso es similar al de las normas ISO 9000. Al igual que para
estas últimas, la empresa debe informar a los directivos y gerentes del proceso que se
llevará a cabo. Posteriormente, deben identificar qué procesos y a qué áreas afectará la
implementación de estas normas, es decir, definir en dónde se harán los cambios. Luego,
deberán definir qué cambios se deberán hacer para cumplir con las normas e
implementarlos. En este proceso, también es importante involucrar al personal, indicarle
porqué es necesario implementar las normas y capacitarlos e informarlos sobre los
cambios que se harán en los procesos.

Las normas OHSAS 18000 (por sus siglas Occupational Health and Safety Assessment Series)
es un grupo de especificaciones sobre seguridad y salud en el trabajo, cuyo fin principal
es ayudar a las organizaciones a protegerse y a proteger sus empleados de riesgos y
accidentes.

La implementación de estas normas tiene como objetivos reducir los incidentes y los
peligros, reducir el uso de materiales peligrosos, aumentar la satisfacción y confianza de
los trabajadores, minimizar la exposición de los trabajadores a sustancias peligrosas, entre
otros. Debido a esto, al implementar dichas normas, la empresa obtiene ciertos beneficios
como un lugar de trabajo más seguro, en donde sus trabajadores van a sentirse más
confiados y por ende su trabajo será más eficiente; habrá menos accidentes laborales,
lo que implica que no se pierda tanto tiempo y por ende se reducen los costos de la
producción; por otro lado, tanto los accionistas como los clientes se ven satisfechos al
saber que la empresa cumple con las reglamentaciones y que sus empleados trabajan
en un lugar seguro.

El proceso de implementación de estas normas es similar al proceso de las otras normas,


empezando por involucrar a los directivos con el proceso, informándolos de su
importancia y de cómo se llevará a cabo. Igualmente, se deben identificar los riesgos y/o
peligros en la empresa y tomar las acciones necesarias (según las normas) para disminuir
dichos riesgos; por último, se debe capacitar y formar al personal para que tengan
conciencia de la seguridad y salud en el trabajo y darles a conocer las nuevas normas,
empezando así a darle cumplimiento a las mismas.

Por último, es encuentran las normas ISO 22000, las cuales son una integración de un
Sistema de Seguridad Alimentaria que se basa en los Principios APPCC (Análisis de Peligros
y Puntos de Control Críticos en la industria alimentaria), con un Sistema de Gestión de
Calidad basado en la ISO 90001. Su fin principal es garantizar la inocuidad de los
alimentos y promover medidas y hábitos que garanticen la seguridad de estos por parte
de las industrias que participen de alguna forma en este sector. Además, entre sus
objetivos principales se encuentra asegurar la protección del consumidor e incrementar
su confianza, al reforzar la seguridad alimentaria; mejorar el rendimiento de los costos a
lo largo de la cadena de suministro alimentaria. Demostrar que el producto responde a
los requisitos establecidos por los clientes y otras normas, entre otros.

Es importante que las empresas implementen estas normas debido a que de esta forma
proporciona confianza en los clientes y al consumidor final al consumir sus productos, al
igual que a las partes interesadas. Sumado a lo anterior, las empresas obtienen otros
beneficios con la implementación de esta norma, como, por ejemplo, tener un mayor
control y eficiente de los riesgos para la seguridad alimentaria, ahorro de tiempos y costos,
facilita el cumplimiento de la legislación, instaurar la cultura de mejora continua, etc.

Para la implementación de esta norma, como con las otras, se debe hacer un
diagnóstico inicial de cómo se encuentra la empresa frente a estas normas, para así
poder planificar las acciones de mejora y ejecutarlas. Luego se debe validar y verificas
las modificaciones hechas en los procesos para confirmar si cumplen o no con las normas
y decidir si es necesario más realizar modificaciones. Para este proceso es muy importante
involucrar a todo el personal correspondiente, desde los directivos hasta los operarios,
capacitándolos a todos sobre la importancia de implementar estas normas y sobre cómo
se llevarán a cabo los cambios en los procedimientos.

Por razones anteriormente mencionadas, cada vez más empresas buscan certificarse en
estas normas, pues, aunque el proceso puede ser largo, costos y un poco tedioso, debido
a la rigurosidad de las normas, implementar estas normas hacen que las empresas tengan
varios beneficios, como por ejemplo, y entre los más importantes, ser más competitivos
en el mercado, asegurando un mejor puesto en este e incrementando sus ganancias, por
otro lado, cumplir con estas normas conllevan a un ahorro económico de parte de las
empresas al ser más eficientes y disminuir sus costos. Por otro lado, la implementación de
estas normas no solo beneficia a las empresas, sino también a los consumidores y/o
clientes, debido a que al saber que las empresas cumplen con estas normas, se sienten
más seguros y confiados de consumir sus productos, pues saben que estos productos
cumplen con la calidad y requisitos, no solo establecidos por la ley, sino también que ellos
mismo exigen.

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