Tema.

La oración Eficaz
Textos: Santiago 5:16; Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos
por otros para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede lograr mucho. LBLA
NTV. Confiésense los pecados unos a otros y oren los unos por los otros, para que sean
sanados. La oración ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados
maravillosos.
Introducción.
Muchas ves al ora o después de orar nos surgen algunas preguntas tales como: ¿Es
escuchada mi oración? ¿Me escucha Dios cuando le hablo siempre? ¿Cierra Dios sus oídos
a ciertas oraciones? ¿Esconde Dios su rostro de mí?
Estas son algunas de nuestras aseveraciones internas ante las situaciones que se nos
presentan en nuestro tiempo de oración.
El texto base de esta enseñanza está en el marco del texto en donde Santiago el
autor está invitando a la audiencia primaria en el verso 13; la invitación a la oración y la
alabanza, los siguientes versos 5: 14-18; la oración y Fe para Sanar. Notamos que una
forma de la aflicción es la enfermedad, lo cual probablemente explique el tema.
Desarrollo del Texto
1. El privilegio de la sanidad divina. Santiago 5: 14-15,
14 ¿Está alguno entre vosotros enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia
y que ellos oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor; 15 y la
oración de fe restaurará al enfermo, y el Señor lo levantará, y si ha cometido
pecados le serán perdonados
Es que orar en tiempos de enfermedad es a la nuestro deber y nuestro privilegio en
Cristo. “llamen a los ancianos de la iglesia, y oren por él”. Los ancianos, eran líder
reconocidos o designados en la iglesia local ya en los años 40-45 D.C. cf. Hechos 11: 30;
14: 23; 30 Y así lo hicieron, mandándola a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo.
23 Después que les designaron ancianos en cada iglesia, habiendo orado con ayunos, los
encomendaron al Señor en quien habían creído.
La Biblia nos muestra el tema de “ungiéndolo con aceite” en la relación con la
curación, es una práctica que se menciona solo en otro lugar del Nuevo Testamento
Marcos 6: 13; 13 Y echaban fuera muchos demonios, y ungían con aceite a muchos
enfermos y los sanaban.
En la época del Nuevo Testamento puede haber sido un tratamiento médico
corriente empleado en cooperación con la oración. Es evidente que la biblia enseña el tema
de la sanidad divina y nosotros deberíamos de ofrecer la oración de fe por la sanidad de los
enfermos.
2. Curación y Perdón. Santiago 5: 15-16ª;
 15 y la oración de fe restaurará al enfermo, y el Señor lo levantará, y si ha
cometido pecados le serán perdonados. 16 Por tanto, confesaos vuestros
pecados unos a otros, y orad unos por otros para que seáis sanados. La oración
eficaz del justo puede lograr mucho.
En los judíos, comúnmente la enfermedad se atribuía al pecado. Pero Jesús rechazó
esa posición como un principio universal en Juan 9: 1-2; Al pasar Jesús, vio a un hombre
ciego de nacimiento. 2 Y sus discípulos le preguntaron, diciendo: Rabí, ¿quién pecó, éste o
sus padres, para que naciera ciego? En tales casos se supone que el que busca la santidad
también se arrepiente de su pecado y busca el Perdón. En verso 16; Santiago invierte el
orden de la oración, cuando uno se acerca a Dios sinceramente con cualquier necesidad,
recibiremos ayuda.
Esto agregara fe a mi vida, esta parte del texto nos ha de ser tomada como una
práctica cristiana universal, sino más bien entendida en su contexto, siendo hecha la
confesión por el enfermo y la oración por los visitantes.
3. La oración Eficaz. Santiago 5: 16b-18.
16 Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos por otros
para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede lograr mucho. 17
Elías era un hombre de pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente
para que no lloviera, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. 18 Y
otra vez oró, y el cielo dio lluvia y la tierra produjo su fruto.
¿Cuándo podemos esperar que nuestras oraciones reciban respuesta de Dios? Es
evidente que Santiago a través del texto esta clase de oraciones deben proceder de un Justo
verso 16, es decir, de alguien que está en correctas relaciones con Dios y el hombre.
La palabra Eficaz, “Ferviente” fuerza de la oración actuada o inspirada por el
Espíritu, es la oración es activada por el Espíritu1 Santo. Todos sabemos que hay momentos
en que el Espíritu Santo le ayuda así en su oración. Santiago nos recuerda que los que
reciben respuesta a sus oraciones no necesitan ser santos, sobrehumanos, diferentes del
hombre común.
Santiago utiliza un ejemplo de fe del Antiguo Testamento; versos 10-11; (verso 17;
cf. 1 Reyes 17:1; 18:1; 42-45) Elías era un hombre común y corriente como nosotros. Lo
que nos muestra que la oración en el reino natural. La oración no solo nos cambia a
nosotros, sino que también, por medio de ella, Dios cambia las cosas.

1
https://www.gotquestions.org/Espanol/oracion-efectiva.html
 15 de octubre de 2019
¿Le interesa que su oración sea escuchada por Dios? ¿Y que sea respondida?
No estoy poniendo en tela de Juicio que todos nosotros oremos la pregunta que me
embarca es si nuestras oraciones tienen respuestas. Le invitó a que veamos los siguientes
pasajes, el cual nos muestran «Como y cuando Dios cierra sus oídos a la oración»

 Primer Principios de la oración Eficaz

 Isaías 1: 10-18; 10 Príncipes de Sodoma, oíd la palabra de Jehová; escuchad la ley
de nuestro Dios, pueblo de Gomorra. 11 ¿Para qué me sirve, dice Jehová, la
multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de
sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos
cabríos. 12 ¿Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros
delante de mí para hollar mis atrios? 13 No me traigáis más vana ofrenda; el
incienso me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas,
no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes. 14 Vuestras lunas
nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas mi alma; me son gravosas;
cansado estoy de soportarlas. 15 Cuando extendáis vuestras manos, yo esconderé
de vosotros mis ojos; asimismo cuando multipliquéis la oración, yo no oiré; llenas
están de sangre vuestras manos. 16 Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de
vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo; 17 aprended a hacer
el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano,
amparad a la viuda.
o Promesa de Perdón
18 Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como
la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí,
vendrán a ser como blanca lana.

Podemos entender el contexto del texto leyéndolo desde el verso 10-15; 16; 18-20. En
versos 10 Isaías llama a los dirigentes y al pueblo de Jerusalén usando los calificativos
«Príncipe de Sodoma y pueblo de Gomorra»
En el verso 11, señala los sacrilegios de los sacrifico que no van acompañados por la
obediencia en el corazón y en la vida. Recodemos que estos sacrificios «el sebo y la
sangre» eran apartados para el culto. Dios declara que esta hastiado de esa formalidad
providencial de adoradores insinceros, y que le provocan náuseas, el culto verdadero para
Dios es mucho más que ir al templo.
Versos 13, la iniquidad es incompatible con las fiestas solemnes, el incienso y la
invocación son abominaciones cuando falta verdadera sinceridad. Lo expresa seguidamente
en el verso 14.
Verso 15, nos muestra Dios recuerda lo que nuestras manos han estado haciendo en
otros momentos
 El verso 16. Nos muestra cómo se encontraban las manos de los que asistían al templo,
«rojas con la sangre de las victimas que había sido sacrificadas a la ambición de lucro, la
concupiscencia y la venganza.
a. 1 Timoteo 2: 3; 3 Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro
Salvador,
b. Salmos 24: 3-4; ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar
santo? 4 El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a
cosas vanas, Ni jurado con engaño.
El verso 16; este verso nos muestra que deben hacer los que tienen las manos sucias
«Lavaos y limpiaos» ¡guitad vuestra mezquindad! Y para esto es necesario el Espíritu
Santo
El verso 17, Lo que demos de buscar es la «Justicia» ser personas que hacen justicia y que
está en contra de toda opresión.
Verso 18, este verso Dios adelanta un litigio «Venid Luego» y arreglemos la cuestión,
seguido de una resolución de ¡gracia y misericordia!
Los colores que hace referencia el profeta se refieren a los colores de las túnicas de los
príncipes a los cuales Isaías le predico. De igual manera a que nuestros pecados sean rojos
como la sangre pueden ser restaurados por la gracia el carácter mismo de su blancura y
pureza moral. Vemos lo que dice Juan
o Apocalipsis 3: 4-5; 4 Pero tienes unas pocas personas en Sardis que no
han manchado sus vestiduras; y andarán conmigo en vestiduras
blancas, porque son dignas. 5 El que venciere será vestido de vestiduras
blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su
nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.
o Apocalipsis 7: 14; 14 Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos
son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y
las han emblanquecido en la sangre del Cordero.
Resumen: «Los pecados rojos, Blancos Como la Nieve» Dios condena el pecado (4-6);
la invitación de Dios a los pecadores (v. 18ª); Divina promesa de Salvación (v. 18b)

 Salmos 66: 18-20; 18 Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad,

El Señor no me habría escuchado. 19 Mas ciertamente me escuchó Dios;
Atendió a la voz de mi súplica. 20 Bendito sea Dios, Que no echó de sí mi oración,
ni de mí su misericordia.
 Miqueas 3: 4; 4 Entonces clamaréis a Jehová, y no os responderá; antes esconderá de
vosotros su rostro en aquel tiempo, por cuanto hicisteis malvadas obras.
 Zacarías 7: 11-13; 11 Pero no quisieron escuchar, antes volvieron la espalda, y
taparon sus oídos para no oír; 12 y pusieron su corazón como diamante, para no oír la
ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su Espíritu, por medio de
los profetas primeros; vino, por tanto, gran enojo de parte de Jehová de los ejércitos.
13 Y aconteció que, así como él clamó, y no escucharon, también ellos clamaron, y yo
no escuché, dice Jehová de los ejércitos;
 Santiago 1: 6, 7; 6 Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es
semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a
otra. 7 No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.
 Santiago 4: 8; 8 Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las
manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
Lo que los pasajes anteriores nos dejan ver que la actitud al momento de acercarnos a su
trono es válida, que las motivaciones y las expectativas sean las adecuadas al instante que
entremos en ese momento de oración.
Debemos de Permitir al Espíritu Santo nos convenza de nuestras faltas,