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Jose Alejandro Martínez – Elki Alfonso Ortega Peñaranda
Contenidos
pág.
Editorial ...………………………………………………………………………….3
Conjunción …………………………………………………………………..5
Disyunción …………………………………………………………………..6
Condicional ………………………………………………………………….7
Bicondicional ………………………………………………………………..7
Teorema ……………………………………………………………………...8
En base a lo anterior, esta revista planteará de la manera mas sencilla posible el funcionamiento de
la lógica matemática para que pueda ser comprendida por alumnos de grados preescolar y básica
primaria. Cabe mencionar que los alumnos no entenderán el tema si el maestro que se los explica no
lo comprende perfectamente; por ello incluimos un capitulo inicial donde se da una explicación
sencilla pero detallada con ejemplos que serán una introducción no solo al tema, sino además a
cómo enseñarlo. A continuación, serán presentadas cinco actividades lúdicas que afianzarán la
comprensión de cada uno de los conceptos fundamentales de este tema.
Deseamos que esta revista ayude a quien es autodidacta como a quien cumple una de las misiones
mas importantes que existe, la de enseñar a otros.
Comité editorial:
Hay quienes consideran al sentido común, como una definición de lo que implica la lógica. Sin
embargo usted concordará en que el sentido común depende del contexto en el que ha crecido una
sociedad. Por ejemplo aunque en algunos países orientales lo lógico es quitarse los zapatos antes de
entrar a la casa, esto puede parecer absurdo a quienes provienen de países occidentales. Este es un
claro ejemplo de que los procesos mediante los cuales se desarrolla el sentido común de un grupo
de personas, esta sujeto a su crianza, lugar de procedencia y tipo de educación recibida, entre otros.
Esta definición de “la lógica” no es útil en ciencias exactas donde las verdades definitivas no
pueden depender de puntos de vista independientes y variados. La matemática como una de esas
ciencias, tal vez la más exacta de todas, requirió en algún punto de la historia, definir un proceso
para evaluar si una afirmación era verdadera o falsa, y que esta definición no dependiera del punto
de vista personal cada matemático.
Veamos un ejemplo con uno de los teoremas mas conocidos en la geometría, una de las ramas de la
matemática; el teorema de Pitágoras. Este dice así: En todo triángulo rectángulo el cuadrado de la
hipotenusa es igual a la suma de los cuadrados de los catetos.
a c
Este teorema se expresa matemáticamente así: a2+b2=c2
b
Si no existiera un método que nos permitiera definir que esta formula sirve para todos los triángulos
rectángulos; que los catetos se suman y no se restan, que van elevados al cuadrado y no a otra
potencia; fácilmente cualquier persona podría rechazar este teorema argumentando que
simplemente en su cabeza no le parece lógico. Para ello es necesario encontrar un método que nos
ayude a comprobar la veracidad de una afirmación o de un conjunto de afirmaciones, y que la linea
de razonamiento usado es correcta y no tiene fallas; convirtiéndolo en un teorema, es decir, una
verdad irrefutable.
Es así como nace la “lógica matemática”, una importante rama de las matemáticas que estudia los
métodos y principios usados para definir si un razonamiento es correcto o incorrecto.
El concepto de proposición es uno de los conceptos básicos de la lógica matemática. Pero… ¿que
es?
Podemos definirla como una afirmación que puede ser falsa o verdadera. En el caso de las
preguntas como “¿que hora es?”, “¿para donde vas” y “¿quieres helado?”; no podríamos decir que
son falsas o verdaderas, es decir, no podemos establecer su valor de verdad, por lo tanto las
preguntas no son proposiciones. Las ordenes que damos a otros tampoco lo son. Tenemos por
ejemplo: “¡vete!”, “¡haz la tarea!” y “¡comete todo!”. A estas tampoco podemos establecerles su
valor de verdad.
Las proposiciones en cambio nos brindan información, como por ejemplo: “la luna es redonda”,
“son las 3 pm” y “está lloviendo”. En estos casos si podemos definir si son verdaderas o falsas, por
ejemplo al mirar el reloj podremos saber si son las 3pm o no. Este tipo de proposiciones que nos
dan un solo dato, las llamamos proposiciones simples. Por ejemplo en el caso de “la luna es
redonda”, afirmamos que es una proposición simple pues solo son da un dato, la forma de la luna y
nada mas.
Cada proposición tiene dos posibles valores de verdad, es decir, puede ser falsa o puede ser
verdadera. Por ejemplo si decimos que “los perros normales tienen cuatro patas”, tras observarlos
podemos definir si esto es verdad o es mentira. En este caso esa proposición es verdadera pues
efectivamente todo perro que sea normal, tiene cuatro patas.
En matemática, con el objetivo de simplificar la escritura, a una proposición se le asigna una letra,
así cada vez que queramos hacer referencia a ella, no tendremos que escribirla de nuevo;
simplemente pondremos la letra que le asignamos. Por ejemplo a la proposición “no hay agua”
podemos asignarle la letra “p”. Así cada vez que veamos la letra “p”, sabremos que en realidad se
quiere decir que “no hay agua”. Las letras mas usadas en la lógica matemática son la “p”, la “q”, y
la “r”.
Parece fácil saber si una proposición es falsa o verdadera, sin embargo definir si dos proposiciones
que van juntas formando una sola proposición es falsa o verdadera, es mas complejo. En estos casos
ya no hablamos de proposiciones simples sino de proposiciones compuestas. Veamos un ejemplo:
Conjunción.
Se le llama así a una proposición compuesta que esta unida por el conector “y”; su símbolo
matemático es “^”. Ejemplifiquemos este concepto con las frases anteriores.
“llueve y María trae paraguas”. Aquí podemos notar como de dos proposiciones simples unidas por
una “y”, surge una compuesta .
La pregunta que surge ahora es: ¿como definir si esta proposición es verdadera o falsa?
Para ello imagínese la escena, esta lloviendo, y su amiga María trae paraguas, entonces alguien dice
que “llueve y María trae paraguas”. Diríamos que es verdad, pues se cumplen ambas condiciones.
Pero, ¿que pasaría si estuviese lloviendo pero María no trae paraguas e hiciéramos la misma
afirmación? Diríamos que la afirmación es falsa. En este ejemplo podemos darnos cuenta que para
que una conjunción sea verdad requiere que las dos proposiciones simples que la componen sean
verdad.
Ahora; ¿como podríamos saber los posibles valores de verdad de una conjunción? Para ello se ha
ideado la “Tabla de verdad”. Veamos en que consiste.
La idea es poder saber si la conjunción es verdadera o falsa en los diferentes casos en que cada una
de sus proposiciones sean falsas o sean verdaderas. Si tenemos dos proposiciones llamadas “p” y
“q” conectadas por una “y”, que pasaría si “p” fuera falsa y “q” verdadera, o si fuera al revés, o si
ambas fueran falsas o ambas verdaderas. Para ello hacemos una tabla que tendrá tantas columnas
como proposiciones y tendrá 2n filas, donde el valor de “n” es el numero de proposiciones; de la
siguiente forma:
Ahora pensemos en como llenarla. Para ello primero ponemos en la primera columna que
representa la proposición “p”, dos valores de “v”(verdadero) y luego dos valores de “f”(falso) de la
siguiente manera.
Comparemos la tabla con las frases para ver si en cada caso la tabla en realidad puede indicarnos el
valor de verdad de la conjunción.
¿que pasaría si…
-Sí esta lloviendo y María sí trae paraguas como lo muestra la primera fila? ¡La conjunción es
verdadera!
-Sí esta lloviendo pero María no trae paraguas como lo muestra la segunda fila? ¡La conjunción es
falsa!
-No esta lloviendo pero María si trae paraguas como muestra la tercera fila? ¡La conjunción es
falsa!
-No esta lloviendo y además María no trajo paraguas como muestra la cuarta fila? ¡La conjunción es
falsa!
3 f v f
4 f f f
Disyunción.
Se le llama así a una preposición compuesta que esta unida por el conector “o”; su símbolo
matemático es “v”. Ejemplifiquemos este concepto con las mismas frases.
“llueve o María trae paraguas”. Aquí tenemos proposiciones simples unidas por una “o”.
Matemáticamente lo expresamos : p v q
p q p^q
1 v v v Notemos que según la tabla de verdad, una disyunción es falsa solo
cuando ambas preposiciones simples son falsas; ¿por qué?
2 v f v Por que en este caso el conector “o” a diferencia de la “y” nos da dos
opciones para elegir, la una “o” la otra, por ello solo basta con que una
3 f v v de las dos sea verdadera, para que toda la disyunción lo sea.
4 f f f
Por lo tanto concluimos que una disyunción es falsa solo cuando sus
proposiciones simples son ambas falsas, en los demás casos es verdadera.
Condicional.
Se le llama así a una preposición compuesta que inicia con la condición “si”, y está unida por el
conector “entonces”; su símbolo matemático es “ ”. Ejemplifiquemos este concepto con las
mismas frases.
“si llueve entonces María trae paraguas”. Aquí tenemos 2 proposiciones simples precedidas por la
expresión condicional “si”, y unidas por un “entonces”. Matemáticamente lo expresamos : p q
De aquí podemos expresar como norma que una condicional solo es falsa si su primera proposición
es verdadera y la segunda es falsa.
Bicondicional.
Se le llama así a una preposición compuesta que está unida por el conector “solamente si”; su
símbolo matemático es “ ”. Comprendamos este concepto con las mismas frases.
“llueve solamente si María trae paraguas”. Aquí tenemos 2 proposiciones simples unidas por un
“solamente si”. Matemáticamente lo expresamos : p q.
Podemos concluir entonces, que una bicondicional es verdadera si ambas proposiciones que la
contienen tienen el mismo valor de verdad, osea, si ambas son verdaderas o si ambas son falsas. En
los demás casos la bicondicional será falsa.
Teorema
Intentemos ahora crear un teorema (una verdad probada e irrefutable) con María y su paraguas; asi
comprenderemos mejor la funcionalidad de estas tablas de verdad. Para ello plantearemos una
conjetura.
Tenemos las mismas proposiciones que hemos estado usando.
p: “llueve”
q: “maría trae paraguas”
La conjetura será: “si llueve entonces María trae paraguas y llueve solamente si María trae
paraguas; o llueve y María no trae paraguas”
En esta conjetura hemos usado los cuatro conectores que ya analizamos. Separemos ahora este
conjetura por partes.
-“[Si] llueve [entonces] María trae paraguas” (condicional)
-“Llueve [solamente si] María trae paraguas” (bicondicional)
-“Llueve [y] María no trae paraguas” (conjunción)
-“Si llueve entonces María trae paraguas [y] llueve solamente si María trae paraguas” (conjunción)
-“Si llueve entonces María trae paraguas y llueve solamente si María trae paraguas, [o] llueve y
María no trae paraguas”
De aquí pueden surgir dos inquietudes; la primera es: ¿como sabemos donde deben ir paréntesis y
donde corchetes? Tengamos en cuenta que las proposiciones compuestas por dos simples siempre
irán dentro de paréntesis y los corchetes nos ayuda a unir dos proposiciones compuestas para
volverla una sola proposición. Y sabemos que los corchetes están bien ubicados por que al mirar la
conjetura escritao en lenguaje común, observamos un punto y coma que nos ayuda a separar de
manera correcta las proposiciones.
La segunda es: ¿ que significa el símbolo “¬” que aparece en la ultima preposición “q”? Este
significa literalmente “no”. Si observamos el teorema en lenguaje común encontramos que al final
dice que María no trae paraguas. La preposición “q” dice que María trae paraguas, por lo tanto la
expresión ¬q (no q) = María no trae paraguas. Así deducimos que los valores de verdad de “q” son
opuestos a los valores de verdad de “¬q”.
Ahora hagamos la tabla de verdad para establecer la veracidad de nuestra conjetura, siguiendo estos
pasos.
1- Definimos el numero de filas que tendrá la tabla, para ello la formula es 2 2, pues solo hay dos
preposiciones simples. Con esto sabemos que la tabla tendrá 4 filas. p q
1
2- En las primeras columnas ubicamos las letras correspondientes a cada
2
proposición simple, en el caso de nuestro teorema ubicaremos la “p” y la “q” así:
3
3- Asignamos valores de verdad a cada letra teniendo en cuenta el orden 4
explicado anteriormente. De esa maneta tendríamos lo siguiente:
p q
1 v v
2 v f
3 f v
4 f f
4- Agregamos una columna para poner el valor de las preposiciones p q ¬q
que tengan el símbolo “¬”. Así tendremos la siguiente tabla: 1 v v f
2 v f v
Recordemos que una preposición con el símbolo “¬”
tiene un valor de verdad contrario a la preposición sin 3 f v f
el símbolo. Tal como observamos en la tabla. 4 f f v
5- Ahora empezamos a definir el valor de verdad de las proposiciones compuestas por dos
proposiciones simples. Podemos empezar de izquierda a derecha. Recordemos que para resolver
cada proposición compuesta por dos simples, debemos tener en cuenta solamente las dos columnas
que contienen sus respectivas proposiciones simples. Para identificarlas con facilidad, subrayaremos
de verde las columnas a tener en cuenta, y de celeste el resultado final.
7- Ahora resolvamos el corchete pues ya tenemos las dos proposiciones compuestas que la
componen, como se muestra aquí
p q ¬q (p q) (p q) [(p q) ^ (p q)]
Estas dos proposiciones compuestas 1 v v f v v v
forman justas una conjunción, y según 2 v f v f f f
la regla, es verdadera solo cuando ambas
proposiciones que la componen son 3 f v f v f f
verdaderas. 4 f f v v v f
9- Por ultimo ya podemos resolver toda la proposición que forma nuestra conjetura. Finalmente
tendremos lo siguiente:
p q ¬q (p q) (p q) [(p q) ^ (p q)] (p ^ ¬q) [(p q) ^ (p q)] v (p ^ ¬q)
1 v v f v v v f v
2 v f v f f f v v
3 f v f v f f f f
4 f f v v v f f f
10- Al finalizar una tabla de verdad pueden haber cuatro resultados.
De esa manera hemos analizado a fondo los conceptos básicos de la lógica matemática. En las
siguientes paginas se presentarán diversas actividades que ayudaran a los alumnos a afianzar los
conceptos adquiridos gracias a las explicaciones del docente.
ACTIVIDADES DE APRENDIZAJE
Autor: Jose Alejandro Martínez Giral
Tema: Proposiciones.
-La luna esta llena. -No vas a ir. -Comes y lavad el plato.
9 + 6= 15 ( ) El sol se ve azul ( ) 2 x 1= 3 ( )
Bicondicional
Disyunción exclusiva
Condicional
Conjunción