I. Base bíblica
Hebreos 11:6
Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a
Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Romanos 1:17
Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está
escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
III. Introducción
En ese tiempo de trato de Dios con Israel, aunque era por fe, hubo mayores
avistamientos de la gloria de Dios, precisamente por las características del pacto,
hubo cielos que destilaban maná, nubes que cubrían del calor del sol al pueblo y
columna de fuego que iba delante de ellos por la noche. El arca del pacto era un
objeto que representaba la presencia de Dios, la gloria de Dios sobre el monte Sinaí,
la derrota de todos los enemigos de carne y sangre en el camino hacia Canaán, el
mar y los ríos que se abrieron delante de ellos, eran señales indubitables y visibles
para fortalecer su fe. Luego, en la conquista de Canaán y la posterior repartición de
la tierra, hasta el Calvario, se ve con claridad el trato de Dios con Israel, con señales
incluso físicas, como la circuncisión, pero al cumplirse los tiempos, según las
Escrituras, apareció el Hijo de Dios, para mostrar igualdad de oportunidades entre
Israel y los gentiles, y al mismo tiempo, las condiciones de salvación para todos. Él
vino a cumplir la Ley y a quitarla de en medio, para que, removido el pacto
mosaico, entrara en vigencia el nuevo pacto, donde judíos y gentiles, están bajo las
mismas condiciones, ante la universalidad del pecado y la opción de salvación.
Ahora, Dios no solamente es Dios de los hebreos, sino también de los gentiles, ahí ya
no hay judío ni griego, ni esclavo ni libre, ni varón ni mujer, sino a todos se les
extendió la misma gracia, para que, por la fe, le sean perdonados sus pecados y
hereden eterna salvación, como dice la Escritura en Gálatas 3:8: “Y la Escritura,
previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio de antemano la buena
nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones”.
1ª Timoteo 2:5
Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo
hombre,
Gálatas 3:28
Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque
todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.
Efesios 2:14
Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared
intermedia de separación,
IV. Desarrollo
Lucas 19:10
Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.
Romanos 3:9-11
¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya
hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado. 10 Como está
escrito: No hay justo, ni aun uno; 11 No hay quien entienda, No hay quien busque a
Dios.
Romanos 6:23
Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en
Cristo Jesús Señor nuestro.
Romanos 5:21
para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la
justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro.
Gracia:
Subjetivamente, en el sentido por parte del otorgador, es la disposición amistosa de
la que procede el acto bondadoso, gracia, bondad, buena voluntad en general;
especialmente con referencia al favor o a la gracia divina. Con respecto a ello se
destaca su libre disposición y universalidad, su carácter espontáneo, como en el
caso de la gracia redentora de Dios, y el placer o gozo que él se propone para el
que la recibe; así, se pone en contraste con deuda, con obras y con la ley. (Dicc.
Vine)
La gracia no es una mera intención arbitraria de Dios, sino todo un proyecto con un
marco jurídico acorde con la constitución del universo, esta es la razón por la cual,
ni aún su propio hijo exoneró de la muerte, a fin de que por su sangre los redimidos
pudieran quedar libres de toda condenación, como dice la Escritura: quién nos
condenará si Él es el que justifica (Romanos 8:33).
Romanos 5:1-2; 20
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor
Jesucristo; 2 por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual
estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
20 Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado
abundó, sobreabundó la gracia;
c) Fe (Vínculo de rescate)
Dios es padre de luces y no de tinieblas. Todos los seres que Dios ha formado han
estado dotados de luz. (Ap. Isauro Vielman)
Santiago 1:17
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las
luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.
Hebreos 11:1
Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
Romanos 1:17
Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está
escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Hebreos 11:6
Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a
Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Hebreos 12:2
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto
delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del
trono de Dios.
Efesios 2:8-10
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don
de Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe. 10 Porque somos hechura suya,
creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano
para que anduviésemos en ellas.
Romanos 10:8-10
Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la
palabra de fe que predicamos: 9 que si confesares con tu boca que Jesús es el
Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. 10
Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para
salvación.
Conclusión
Romanos 4:16
Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda
su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de
la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros.