El final del siglo XIX y principios del siglo XX fue un comienzo en la medicina. Con la revolución industrial surge la revolución médica, que da inicio a la transformación de la medicina como ciencia y un establecimiento de las especialidades médicas; con la finalidad de la creación de nuevos aparatos e instrumentos, que hizo que la anatomía sustituyera los viejos sistemas y abandonara los conceptos de las funciones y enfermedades. El mérito de los médicos mexicanos fue adaptarse rápidamente a los pensamientos vigentes. Al finalizar el siglo XIX se introdujo la antisepsia y las prácticas asépticas como acontecimientos notables para la salud y bienestar de las personas; en 1901 se fundó el Hospital General de México, que en la actualidad es la institución más importante en asistencia, beneficencia y enseñanza médica del país. La comunidad médica porfiriana estaba formada por médicos cirujanos, farmacéuticos, parteros y dentistas con titulo legal; para 1900 ya se contaba con 2262 médicos titulados a nivel nacional, de los cuales 525 ejercían en la ciudad de México. En el año de 1878, se insistía en enseñar a los médicos que evitaran enriquecerse a costa del enfermo y que debe ser caritativo con los pobres, los extranjeros, los huérfanos y los desvalidos, así como no prometer curaciones maravillosas o milagrosas; el doctor José Olvera señalo que “ser médico no es un medico como cualquier otro para ganarse la vida”. El doctor Secundino Sosa señala que es fundamental que los médicos se unan para estudiar, consultar y ponerse de acuerdo en sus negocios. El proceso formativo debe contribuir a la maduración de los individuos, siendo capaces para una práctica reflexiva y critica. La competencia clínica abarca la capacidad técnica en el empleo de conocimientos y habilidades para el diagnostico y tratamiento de los pacientes, los efectos de la enfermedad, resolviendo las elecciones entre los valores enfrentados; abarca la capacidad de autoaprendizaje. El aprendizaje clínico exige la interacción cotidiana con pacientes reales La educación médica enfrenta la necesidad de acelerar la transición paradigmática, incorporando los progresos que se distinguen claramente como tendencia. Así como la educación médica se ha ido actualizando, los conceptos referentes a la salud y la enfermedad también han cambiado a lo largo del tiempo. La OMS en la primera mitad del siglo XX definió salud como “estado de completo bienestar físico, mental y social, no solo como la ausencia de afecciones o enfermedades”, lo que se entendió como un sistema de valores que la gente utiliza para interpretar sus relaciones con el orden social. Actualmente se define salud como un recurso para la vida y no el objetivo de la vida, donde, estar sano es la capacidad para mantener un estado de equilibrio apropiado para la edad y a las necesidades sociales. Entender el estado de salud de los individuos es estudiar los diferentes determinantes relacionados con la biología, el medio ambiente, el sistema de salud que atiende y los estilos de vida de cada persona. Los estudios de salud y enfermedad son abordados en diferentes maneras. Una podría ser a la luz de la visión Emic o etic que permite acceder a la información que se encuentra más allá de las apariencias que se pueden observar, lo que permite entender el sentido que estas pueden tener para las personas que las vive. Kleinman en 1980, tuvo como base la patología, el padecimiento y la enfermedad, pudo establecer los conceptos de salid y enfermedad, entendiendo a la paotologia como el mal funcionamiento de procesos biológicos o psicológicos; la enfermedad que se relaciona con las dimensiones sociales de las personas, donde se insertan los procesos de la patología; el padecimiento que incluye los procesos de atención, percepción, respuesta afectiva, cognición y valoración directa ante la enfermedad y sus manifestaciones En 1876 surgió la teoría microbiana se reforzó la idea donde la enfermedad estaba determinada por aspectos medioambientales, por la acción de un agente externo de tipo biológico; se creyó haber encontrado el origen de todos los procesos patológicos. Con todos los cambios y actualizaciones que han surgido en los últimos años, el médico ha sufrido retos en cuanto a su estudio y desempeño en el campo laboral. Una tendencia universal que va hacia la estandarización de los procesos de formación médica tiene que favorecer la homologación profesional; hay algo que no pueden desconocer y es el cómo son las necesidades sociales, la identidad y tradición cultural. No solo se debe tener en cuenta el cambio de la educación médica a nivel global si no también el cambio de las personas dentro de esta participación de cambio. La educación médica no puede ser ajena a la evaluación de las necesidades de cambio, requerimientos sociales, universales, disciplinares que exigen las necesidades actuales. Los estudiantes de medicina salen a trabajar en un sistema de salud con problemática individual, familiar y socialmente cambiante, con un drástico cambio y con una mayor presión laboral, económica, legal y una gran exigencia conceptual debido al avance de la ciencia y la tecnología. La dificultad que tienen los maestros de medicina va de acuerdo al cambio en los estuantes, puesto que actualmente manejan toda la información de manera tecnológica y con un solo clic ya tienen todo resuelto; y lo mismo pasa con los pacientes que buscan todo en internet y ya creen que saben todo o que incluso saben más que el profesional de salud. Cabe destacar que la medicina basada en evidencia es una herramienta de trabajo que deben conocer los estudiantes, pero no hay que limitar totalmente, puesto que solamente nos ayuda a definir ciertos criterios de dualidad por en ella no podemos encontrar la respuesta a la problemática de los pacientes. Todo esto que ha influido en los médicos de las nuevas generaciones quienes creen que no es necesario saberlo todo, sino encontrar la forma de hallar el conocimiento de manera efectiva. No solamente es el turno de los alumno en el querer cambiar para ser mejores médicos, sino que el docente debe ayudar a integrar los conceptos basándose en una fuente más confiable de información. El proceso de cambio requiere motivación y no como la daban anteriormente, mas bien, esta motivación debe ser personal dada por un ejemplo personal, mostrando el amor por el estudio y la práctica profesional, generando interacción con el estudiante. Actualmente existe la necesidad de hacer transformaciones curriculares, donde implementen sistemas educativos donde predomine la participación interactiva del estudiante. Desde siempre ha existido la medicina, se ha enseñado de diferentes maneras y ha ido actualizando para mejorar el trato al paciente y adecuarse a las necesidades de cada país o localidad en el que estén, puesto que cada lugar es diferente y tienen diferentes necesidades. Referencias bibliográficas Alberto Lifshitz. (2007). 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Historiadores, Ensayistas y Gran Público: Historiografía Argentina, 1990-2010. Fernando Devoto (Dir.), Biblos, Buenos Aires, 2010. La Articulo Articulo en XML