Cuando se produce lactato en los músculos, se producen iones de hidrógeno excesivos junto
con el lactato. Si existe una acumulación sustancial, los músculos se vuelven muy ácidos.
Estos iones de hidrógeno causan problemas con la contracción de los músculos durante el
ejercicio. Los atletas describen una sensación de "quemar" o "apretar" en los músculos cuando
se desintegra el desempeño. Cuando el lactato es producido, el ion de hidrógeno es producido;
cuando el lactato sale de la célula, los iones de hidrógeno salen de la célula con el lactato. Por
lo tanto, el lactato no es la causa de la fatiga muscular. Pero es directamente relacionado con
la acidez que se cree ser la verdadera causa de ella.
Aunque a los atletas no les gusta esta sensación de quemar, realmente es un mecanismo de
defensa contra daño al músculo. Demasiada acidez puede descomponer la fibra muscular. Se
teoriza que una de las causas del entrenamiento excesivo ("over-training") es demasiado
entrenamiento en niveles que producen altos niveles de ácido.
Los atletas pueden producir menos lactato o despejar el lactato más rápidamente de sus
músculos, el proceso reducirá los iones de hidrógeno problemáticos que inhiben su
desempeño. La investigación en los últimos años ha demostrado que aunque es importante
una producción menor, la clave para el éxito atlético es poder despejar el lactato del
músculo donde es producido. Si el atleta entrena bien, su cuerpo moverá o transportará el
lactato a otro lugar rápidamente y resolverá el problema de tener niveles muy altos de lactato
en los músculos. Esto significa que cuando un atleta compite en un alto nivel podrá mantener
niveles altos de esfuerzo durante más tiempo si su cuerpo despeja el lactato rápidamente.
Segundo, para los eventos que duran menos de 10 minutos (por ejemplo, la natación, el remo,
el ciclismo en pista, el patinaje, y muchos eventos de correr), la habilidad de producir grandes
cantidades de energía hacia el final del evento es crítica para el éxito. El lactato sanguíneo es
una indicación de cuánta energía ha sido generada. Por lo tanto, una de las mejores maneras
para probar si el atleta ha generado niveles altos de energía hacia el final de un evento, es
medir los niveles de lactato en la sangre después de un esfuerzo máximo. Mientras más alto,
mejor.
La medición de lactato tiene dos usos muy importantes, los cuales mencionamos a
continuación:
Primero: el lactato es una de las mejores señales para el éxito en el entrenamiento. Existen
tres mediciones de lactato que se deben observar.
El sistema aeróbico - Una de las mejores mediciones del sistema aeróbico es el nivel de
velocidad o esfuerzo en el umbral de lactato. Otro método sería utilizar un punto de referencia
fijo de lactato, como 4.0 mmol/l. Muchos programas miden el esfuerzo o la velocidad que se
necesita para producir 4.0 mmol/l y mantienen un registro de esto a lo largo del tiempo.
Mientras mayor sea la velocidad o el esfuerzo para producir esta cantidad de lactato, más
eficiente es el sistema aeróbico.
El sistema anaeróbico - se ha aceptado el nivel máximo de lactato como una medición de
cuánta energía produce el sistema anaeróbico. Cuando un atleta está trabajando en su máximo
esfuerzo, el o ella generará mucho lactato. El sistema anaeróbico es más poderoso si está
produciendo más lactato en un nivel máximo de esfuerzo. Por lo tanto, el lactato sanguíneo
durante un máximo esfuerzo es una buena medida de la cantidad de energía que el sistema
anaeróbico ha sido entrenado a producir. Por ejemplo, si un atleta ha incrementado el lactato
producido después de un esfuerzo máximo de 10,0 mmol/l a 13,0 mmol/l, entonces este atleta
completará su carrera con un tiempo más rápido.
Esta medida es muy importante pero es menos conocida como una señal de adaptación
atlética. La única manera en cual se puede medir esta propiedad es mediante una prueba de
ejercicio graduado. Es la taza en cual el lactato se acumula en la sangre mientras la intensidad
del ejercicio se incrementa. Dos atletas, mientras incrementan la intensidad, pueden generar
incrementos en niveles de lactato sanguíneo a tazas muy diferentes. Para cualquier evento
atlético que requiere de un componente anaeróbico sustancial, mientras más lentamente se
acumula el lactato en el cuerpo, mejor será el desempeño atlético. Dos atletas que encuentran
que sus primeras dos mediciones son iguales, pero que difieren en cuanto a la taza en cual el
lactato se acumula en la sangre, obtendrán diferentes resultados en cuanto a su desempeño.
El atleta que acumula el lactato en una taza más lenta generalmente se desempeñará con
mayor velocidad.
Segundo: el lactato es la mejor medición disponible para medir la intensidad de una sesión de
entrenamiento. El lactato sanguíneo es una indicación de que el sistema aeróbico no puede
soportar la carga de ejercicio. Por lo tanto, el nivel de lactato indica cuánta presión la sesión
está imponiendo sobre el sistema aeróbico. El entrenador debe asegurar que la sesión de
entrenamiento produce el nivel apropiado de estrés en el sistema, ni demasiado, ni muy poco.
Semejantemente, si el entrenador quiere presionar el sistema anaeróbico, producir sesiones de
tolerancia al lactato, etc., la cantidad de lactato producido es una indicación del éxito de una
sesión de entrenamiento.
Esto era y sigue siendo un área de controversia. No existe ningún consenso claro sobre
exactamente qué significa éste término y hoy, muchos científicos del deporte prefieren
simplemente eliminar el término. Sin embargo, el término sigue siendo utilizado por los
entrenadores, los libros, los medios de comunicación y algunos científicos del deporte. Aunque
falta consenso en cuanto a la terminología, existe poco desacuerdo entre entrenadores en
cuanto a los conceptos de entrenamiento asociados con esta terminología.
Originalmente, algunos científicos del deporte pensaron que había un punto de esfuerzo en
cual el cuerpo comenzaba a utilizar la energía anaeróbica fuertemente. Este punto
correspondía a un cambio repentino en los patrones del consumo de oxígeno en comparación
a la producción de dióxido de carbono junto con una rápida acumulación de lactato en la
sangre. Siendo que era un cambio rápido, se le aplicó el término "umbral". Debido a que se
creía que la acumulación de lactato se debía al incrementado uso de energía anaeróbica
causado por la falta de oxígeno, se le aplicó el término "anaeróbico". De ahí que se utiliza el
término "umbral anaeróbico" para describir este cambio repentino. Hoy en día, a la mayoría de
los científicos del deporte no les gusta utilizar el término "umbral anaeróbico". No representa un
cambio repentino a metabolismo anaeróbico y puede que no tenga nada que ver con la
privación de oxígeno. Muchos han comenzado a utilizar otros términos, como "umbral de
lactato" o "Comienzo de la Acumulación de Lactato Sanguíneo". Sin embargo, el término
"umbral anaeróbico" sigue siendo el favorito entre los entrenadores, los atletas y los medios de
comunicación. La abreviación UA [AT en Inglés] ha llegado a tener una aceptación general
dentro de la terminología del entrenamiento.
El término "umbral anaeróbico" es comúnmente utilizado para describir un fenómeno que
ocurre en todos los atletas - el nivel de velocidad o esfuerzo que genera un nivel constante de
lactato en la sangre. Cualquier incremento en el esfuerzo o la velocidad por encima de este
nivel causará que el lactato y sus ácidos asociados incrementen en forma constante, y esto
eventualmente le forzará al atleta a parar su actividad. La cantidad de tiempo que toma hasta la
suspensión del ejercicio dependerá de cuán por encima del esfuerzo máximo en estado fijo se
encuentra el atleta, el evento en cual el atleta está compitiendo, el tipo de atleta (fuerza o
resistencia), y su acondicionamiento.
Hemos mencionado que el paso que está en 1.0 mmol por encima de los niveles de lactato
base, corresponde, aproximadamente, al paso en cual se corre un maratón. Para los
corredores de distancia es muy útil conocer este punto y analizar su progreso sobre la base de
cuánto cambia este punto con el entrenamiento. Un atleta bien acondicionado puede correr,
montar la bicicleta, o remar durante varias horas en este paso y no reducir su velocidad. Los
triatletas del Ironman y los ciclistas de distancia también compiten en un paso cerca de este
nivel.
Para la mayoría de los atletas, el otro umbral (el que nombramos el "umbral de lactato") es el
más importante paso o nivel que deben conocer. El umbral de lactato es el paso más rápido
que un atleta puede mantener durante un período de tiempo extendido sin acumular cantidades
adicionales de lactato. Muchos entrenadores creen que este paso ejercerá la mayor cantidad
de estrés en los músculos. Obviamente si los atletas aumentaran su velocidad, ejercerían más
estrés y promocionaría más adaptación en las fibras que no han sido reclutadas hasta llegar a
niveles intensos de ejercicio que se encuentran por encima del umbral de lactato.
Sin Embargo, los esfuerzos por encima del umbral de lactato generan excesos de lactato y
cerrarán a los músculos en poco tiempo. Por lo tanto el volumen total de ejercicio será menor.
Además, los esfuerzos frecuentes en niveles por encima del umbral de lactato pueden dañar la
estructura celular de los músculos.
Esto obviamente variará de un atleta y otro dependiendo de cuán bien acondicionados están, el
tipo de entrenamiento, su composición muscular, su dieta, su tolerancia para la incomodidad, el
ambiente, y otros factores. Se puede sostener el paso en 1,0 mmol sobre la base durante
horas. El atleta quema un alto porcentaje de grasa en este paso y nuestros cuerpos tienen
suficiente grasa para varias horas de ejercicio (incluso los atletas con un bajo porcentaje de
grasa corporal). Mucho del entrenamiento para atletas de distancia y resistencia se dirige a
entrenar a los músculos a quemar más grasa.
Un atleta generalmente puede entrenar en el umbral de lactato (LT o MLSS) durante
aproximadamente 60-90 minutos. El factor limitativo es el combustible para la energía
(glucógeno) y esto dependerá mayormente en los tipos de entrenamiento recientemente
utilizados y en la dieta. Cuando un atleta tiene poco glucógeno, los músculos no pueden
sostener el paso o el esfuerzo LT y el atleta perderá velocidad. Se necesitan 36- 72 horas para
reponer los niveles de glucógeno completamente.
Un atleta que entrena durante un período extendido a nivel LT o más, solo podrá completar una
sesión de entrenamiento similar hasta que el glucógeno en el cuerpo haya sido reemplazado.
No todos los atletas tienen estos mismos resultados.