¿Cómo puede usted estar seguro que aceptó a Cristo? Aquel que dice ser
seguidor de Cristo es aquella persona que ha creído en Dios y que ha tomado la
decisión de recibir a Jesucristo, el Hijo de Dios, para que sea su Señor y Salvador.
Dios envió a Su Hijo Jesucristo al mundo a morir por nuestros pecados. Todos
nosotros hemos hecho, dicho o pensado cosas malas. Esto se le conoce como
pecado, por el cual nosotros merecemos ser castigados. La buena noticia es que
Dios envió a Su Hijo Jesucristo a morir en la cruz por nuestros pecados.
“Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que
todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna”
Juan 3:16
Cuando usted le pide con sinceridad que Jesucristo sea su Señor y Salvador, y
perdone sus pecados, usted está aceptando a Cristo como su Salvador. La Biblia
dice en Juan 1:12 “pero a todos los que creyeron en él (Jesús) y lo recibieron, les
dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios” Entonces cuando usted acepta a
Cristo como Salvador, usted se convierte en un hijo de Dios. Sus pecados han
sido perdonados y Dios dice que usted tiene el regalo de la vida eterna en los
cielos. Usted puede darle gracias Dios todos los días por este maravilloso regalo,
una nueva vida en Jesucristo.
¿Quién es Dios? Como dice la Biblia en el Génesis, “En el principio Dios creó los
cielos y la tierra.” Dios es invisible; Él es Espíritu. Dios es Eterno; Él existe desde
la eternidad; Él no tiene principio ni final. Dios tiene todo el poder y toda la
autoridad. No hay otro poder en el cielo o en la tierra más poderoso que Dios. Dios
todo lo sabe y todo lo conoce: Él lo conoce todo y Su sabiduría es perfecta.
Imagínese a la persona más sabia y poderosa de la tierra, luego multiplíquelo por
un millón y aún ese resultado es una pequeña fracción de quién es Dios.
¿Qué significa para usted el hecho de que el Dios todopoderoso puede perdonar
sus pecados y vive en usted?
La Biblia nos dice en Romanos 5:12, “de modo que la muerte se extendió a todos,
porque todos pecaron.” ¿Cuántos pecados? ¡Todos! Dado a que todos hemos
pecado, todos nosotros debemos encarar la muerte. Nuestro pecado es lo que nos
separa de Dios, y sólo es requerido un pecado para que la separación ocurra.
Nuestras buenas obras no pueden cambiar esta verdad. Sólo imagínese que una
persona es culpable de homicidio y está apelando su caso en la corte: “¡Pero le di
de comer a los vagabundos, Su Señoría! ¡También doné dinero a la caridad, y me
he comportado bien con mi mamá!” Sus buenos actos no borrarán el homicidio
que la persona cometió. Él todavía tiene que pagar la penalidad de sus pecados.
Eso mismo pasa con nosotros. Estamos atascados en nuestros pecados y en
camino hacia la muerte, estamos todos en una situación sin esperanza.
Gracia Mediante la Fe
Como un puente que conecta dos personas separadas, Dios hizo un camino a
través de Cristo para conectarnos con Él. Dios hizo esto porque Él lo quería hacer
– no porque lo tenía que hacer- por Su gran amor hacia nosotros. Esta es la gracia
de Dios, y es dada a nosotros por medio de fe en Su Hijo Jesús, no esforzándonos
para ser buenos. ¿No es esto un gran alivio? Tome un momento y dele gracias a
Dios por salvarle aún cuando usted es un pecador. Dele gracias a Él porque usted
no tiene que ganar Su amor o la salvación.
El pecado nos separa de Dios. ¿Qué pecado necesita confesar para restablecer
su comunión con Dios?
La Nueva Vida
El Espíritu le da una nueva vida. Jesús, en Juan 6:63, dijo: “Sólo el Espíritu da vida
eterna; los esfuerzos humanos no logran nada. Las palabras que yo les he
hablado son espíritu y son vida.” La Biblia nos habla de haber “nacido de nuevo”.
En palabras sencillas lo que esto significa es que el Espíritu le ha dado un nuevo
comienzo, y una nueva naturaleza para que pueda vivir de manera distinta.
Gálatas 2:20 dice: “Mi antiguo yo ha sido crucificado con Cristo. Ya no vivo yo,
sino que Cristo vive en mí. Así que vivo en este cuerpo terrenal confiando en el
Hijo de Dios, quien me amó y se entregó a sí mismo por mí.” Es como un carro
que constantemente está averiado, y alguien le coloca un motor completamente
nuevo. Si es cristiano, usted tiene al Espíritu Santo morando en usted. Ahora sólo
necesita aprender cómo relacionarse con Él y cómo caminar en la nueva vida que
Él tiene para usted. Lea en las próximas lecciones qué es exactamente lo que el
Espíritu Santo cambia en su vida y cómo puede recibir Su poder y gracia.
Nos han dado el don del Espíritu Santo cuando genuinamente le pedimos a
Jesucristo que sea nuestro Salvador y que perdone nuestros pecados. Pero es
nuestra elección vivir llenos y controlados por el Espíritu Santo. Piense en lo
siguiente: Puede tener a un Rey viviendo en su casa. Usted puede pedirle que
viva en un cuarto pequeño, o que se encargue de la casa entera. Asimismo, usted
puede tener al Espíritu Santo en su vida, pero usted intenta controlar su vida, o le
pide a Dios que lo llene del Espíritu Santo para que Él controle su vida por
completo.
¿Alguna vez le han dado una tarea que es demasiado para usted? Es imposible
vivir como Jesús en nuestras propias fuerzas. Es por eso que Dios nos dió Su
Espíritu Santo para ayudarnos a vivir como nuevas criaturas. Jesús dijo: “Sin
embargo, cuando el Padre envíe al Abogado Defensor como mi representante —
es decir, al Espíritu Santo—, él les enseñará todo y les recordará cada cosa que
les he dicho..”( Juan 14:26). Como vímos en la lección anterior, el Espíritu Santo
es el sello de la salvación y quien nos da la nueva vida. Pero Él hace aún más que
esto. Veamos las cosas que Él hace por usted:
El Espíritu Santo tiene todo el poder de Dios porque Él es Dios. El poder de dar
vida del Espíritu Santo lo vemos en la creación. Génesis 1:2 nos relata que “el
Espíritu de Dios se movía en el aire sobre la superficie de las aguas” y que Dios
dijo “¡Hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, para que sean como
nosotros! (Génesis 1:26), lo mencionado demuestra igualdad entre Dios y el
Espíritu Santo. Nosotros hemos recibido el PODER del Espíritu Santo en el
momento que recibimos a Cristo. Romanos 8:11 dice: “El Espíritu de Dios, quien
levantó a Jesús de los muertos, vive en ustedes; y así como Dios levantó a Cristo
Jesús de los muertos, él dará vida a sus cuerpos mortales mediante el mismo
Espíritu, quien vive en ustedes.”
Jesús nos prometió en Juan 10:10 “mi propósito es darles una vida plena y
abundante.” Podemos reclamar esa promesa viviendo en el Espíritu. En la sección
anterior aprendimos que la vida es una batalla entre nuestra naturaleza
pecaminosa y nuestra naturaleza espiritual. Pablo enseña ésta gran lección en
Gálatas 6:7-8 “ Siempre se cosecha lo que se siembra. Los que viven sólo para
satisfacer los deseos de su propia naturaleza pecaminosa cosecharán, de esa
naturaleza, destrucción y muerte; pero los que viven para agradar al Espíritu, del
Espíritu, cosecharán vida eterna.”
“Los que están dominados por la naturaleza pecaminosa piensan
en cosas pecaminosas, pero los que son controlados por el
Espíritu Santo piensan en las cosas que agradan al Espíritu. Por
lo tanto, permitir que la naturaleza pecaminosa les controle la
mente lleva a la muerte. Pero permitir que el Espíritu les controle
la mente lleva a la vida y a la paz.” Romanos 8:5-6
“Tu palabra es una lámpara a mis pies; ¡es la luz que ilumina mi
camino!”Salmos 119:105 “Sí, la hierba se seca, y la flor se
marchita, pero la palabra de nuestro Dios permanece para
siempre.” Isaías 40:8
¿Con cuál persona de la Biblia usted se identifica más? ¿Por qué? ¿Qué ha
aprendido de Dios a través de las experiencias de esa persona?
Cuando usted aceptó a Cristo como Su Salvador, usted comenzó una nueva vida
en Jesucristo. Hay algunas maneras claves en las que la Biblia puede ayudarle a
transformar su vida. Primero, la Biblia le puede enseñar sobre la salvación y la
nueva vida en Jesucristo. Usted puede estar seguro de su salvación. Segundo, la
Biblia le puede ayudar a crecer en su fe. “La fe viene por el oír, y el oír por la
Palabra de Dios.”
De las seis maneras en que la Biblia puede transformar su vida; ¿cuál es la mas
valiosa para usted? ¿Por qué?
¿Existe una forma correcta de leer la Biblia? Muchas veces puede ser un poco
difícil comenzar a leer la Biblia por su cuenta ya que los nombres de los libros, las
personas y lugares son poco familiares para nosotros. Veamos algunos datos que
le pueden ayudar a comenzar: La Biblia se divide en dos partes- el
AntiguoTestamento y el Nuevo Testamento. El AntiguoTestamento cubre la
historia de Israel y su relación con Dios y su espera en Dios en enviar a Jesús
como Salvador. El Nuevo Testamento comienza con la llegada de Jesús en los
primeros cuatro libros (llamados Los Evangelios), seguido por las cartas que nos
informan cómo vivir nuestras vidas ahora que somos cristianos. Ya que Cristo es
el tema principal del Antiguo y Nuevo Testamento, un buen punto de partida para
comenzar su lectura es uno de los cuatro Evangelios – Mateo, Marcos, Lucas o
Juan.
¿Qué le enseñó Dios de Sí mismo y/o de usted, la última vez que leyó la Biblia?
¿Cree que la Biblia son las Palabras de Dios para usted? La Biblia dice lo
siguiente sobre sí misma: “Toda la Escritura es inspirada por Dios…” (2 Timoteo
3:16). Además, cada libro del Antiguo Testamento ha sido citado en el Nuevo
Testamento. Jesús muchas veces citó del Antiguo Testamento tal como lo hizo
Pablo y los otros apóstoles. Una mayor evidencia de la autenticidad de la Biblia es
su poder para transformar vidas. Cuando alguien le preguntó al Dr. Ironsides cómo
supo él que la Biblia no era otro libro más, él dijo: “Por cada persona que usted
traiga cuya vida ha sido transformada por otro libro, yo le traeré 100 cuyas vidas
han sido transformadas por la Biblia.” Millones de vidas dan testimonio del poder
de la Biblia.
Confíe en la Biblia
Pero, ¿cómo nos podemos saber si más palabras fueron añadidas a la Biblia a
través del tiempo y por lo tanto no es confiable? Sabemos que la Biblia es
confiable por las siguientes razones: Los textos antiguos en el Antiguo Testamento
fueron encontrados en una cueva del Mar Muerto en los años cincuenta. Cuando
estos textos se compararon con los textos más recientes, su nivel de precisión fue
de casi un 100%. Lo mismo ocurrió con el Nuevo Testamento. De más de 5.000
manuscritos que existen con fechas entre los años100 al 500 AC, se encuentra
una correlación del 99%. Martin Lutero dijo, “La Biblia es como un león, que se
defiende por sí sola.” La Biblia ha sido el libro más vendido por casi más de 300
años y su poder y confiabilidad han sido confirmados por casi 3.000 años de
historia y poder transformador. Usted puede confiar en la Biblia como la Palabra
de Dios para su vida. Comience a leerla como si fuera Dios comunicándose con
usted y como Su guía sobre cómo debe vivir la vida.
¿En qué forma Dios ha cambiado su vida a medida que ha leído y estudiado la
Biblia?
¿Alguna vez ha escuchado el dicho: “la práctica hace la perfección?” Quizás usted
ha intentado comer saludable anteriormente. Si lo ha intentado, usted sabe que los
resultados no se obtienen de la noche a la mañana, sino siendo consistente para
obtener un resultado que perdure. Esto mismo ocurre al leer la Biblia. Como
cristianos, es importante que desarrollemos un patrón diario de oración y estudio
de la Biblia. Entonces veremos los resultados de obedecer la Palabra a lo largo de
toda nuestra vida. El apóstol Pedro dijo en 2 Pedro 3:18 que debemos “crecer en
la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.” El crecimiento
espiritual es como el crecimiento físico, que requiere de una fuente de nutrición.
Jesús dijo de sí mismo, Yo soy “el pan vivo que descendió del cielo” (Juan 6:51) y
cualquiera que “coma de este pan vivirá para siempre.” (Juan 6:58) Así que para
nosotros poder recibir los beneficios de nuestra relación con Dios, debemos
apartar todos los días, un tiempo con Él en el estudio de su Palabra de manera
que podamos crecer en nuestra fe.
Aparte un Tiempo Cada Día
No necesita un tiempo prologando, pero ayuda si usted es consistente en su
tiempo, por ejemplo, temprano en la mañana antes del trabajo. Ore antes de leer.
Pídale al Espíritu Santo que sea su maestro. Tenga papel y lápiz a la mano,
escriba lo que ha aprendido, y lea de nuevo sus notas como recordatorio de lo que
el Espíritu Santo le ha enseñado. Ponga en práctica lo que ha leído. Si usted leyó
ésta mañana sobre amar a sus enemigos, intente ser amable con esa persona que
ha sido mezquino con usted ese día.
¿Cuál es el mejor momento del día para usted escuchar la voz de Dios al leer su
Palabra? ¿Ha establecido el hábito imprescindible de leer la Biblia diariamente? Si
no lo ha hecho; ¡comienze hoy!
Usted dirá "¿Cuál es la diferencia?" Hay una gran diferencia. Usted puede cambiar
su religión, pero no puede cambiar a su familia. Su familia está con usted para
toda la vida, en las buenas y en las malas. Su familia forma quién es usted. La
Biblia dice: “Pero a todos los que la recibieron, a los que creen en su nombre, les
dio la potestad de ser hechos hijos de Dios;"(Juan 1:12).
La Familia de Dios
Esta familia es llamada la Iglesia, y es el grupo más bello de personas que hay en
el mundo. A los hijos de Dios se les ha dado el privilegio increíble de mostrar al
mundo quién es Dios. 1 Pedro 2:9-10 dice: "Pero ustedes son linaje escogido, real
sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anuncien los
hechos maravillosos de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable.
Antes, ustedes no eran un pueblo; ¡pero ahora son el pueblo de Dios!; antes no
habían sido compadecidos, pero ahora ya han sido compadecidos." Esta familia
se extiende por todo el mundo y se compone de toda cultura e idiomas. No se
limita a un edificio, así como una familia natural no se limita a su casa.
La Iglesia Local
Entonces, ¿cómo puede conectarse a esta familia? Como cristiano,
automáticamente usted es parte de la gran familia de Dios, llamada la Iglesia
universal, pero también Dios tiene una familia más pequeña para que usted sea
parte de ella, llamada la iglesia local. Es como tener parientes en todo el mundo,
pero vive con su familia más cercana. La Biblia dice: "Dios les da un hogar a los
desamparados, y rescata a los cautivos y les da prosperidad, pero a los rebeldes
los hace habitar en el desierto." (Salmo 68:6). La iglesia local es un grupo de
creyentes en Jesús, que se han comprometido a apoyarse unos a otros y seguir a
Jesús juntos. Puede que usted pertenezca a una iglesia local en este momento, o
no, pero todavía nos queda un poco por aprender acerca de todo esto. Tome un
momento ahora y dé gracias a Dios por haber sido adoptado a la familia de Dios y
por el gran plan que Él tiene para usted.
¿En qué forma le alienta el saber que usted es hijo de Dios, que es parte Su
familia para siempre?
Desde el principio, Jesús hizo a sus seguidores tan especiales como Su propia
madre y hermanos. "Señalando a sus discípulos, [Jesús] dijo: "Y extendiendo la
mano hacia sus discípulos, dijo: Mi madre y mis hermanos están aquí. Porque
todos los que hacen la voluntad de mi Padre que está en los cielos son mis
hermanos, mis hermanas, y mi madre." (Mateo 12:49-50) Es por eso que nos
podemos llamar unos a otros "hermanos" y "hermanas" en Cristo.
“Yo me alegro con los que me dicen: Vamos a la casa del Señor."
Salmo 122:1
Jesús dijo, "y sobre esta roca edificaré mi iglesia, y las puertas del Hades no
podrán vencerla." (Mateo 16:18). Pero, ¿cómo construye Jesús Su iglesia? Efesios
4:16 nos da la respuesta: "todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por
todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de
cada miembro, recibe su crecimiento” ¿Usted sabía que ha sido diseñado para
desempeñar un papel importante en la familia de Dios?
¡No se lo Pierda!
Imagínese por un momento a un niño que no quería nada que ver con su familia.
Nunca salió a cenar con la familia, y corría a su habitación cuando llegaba de la
escuela a su casa. Nunca hizo los quehaceres de la casa, se negó a limpiar su
cuarto, y empujaba a su hermano cada vez que lo veía. Este muchacho tenía el
talento para convertirse en un gran futbolista, pero él nunca dejó que su padre le
enseñara a jugar futbol. ¡Piense en todo lo que ese niño se perdería! Sin
mencionar cómo la familia sufriría también.
¿Cómo es su familia? ¿En qué forma le alienta el saber que usted es hijo de Dios
y que es parte de Su familia para siempre?
Hemos hablado mucho acerca de cómo la iglesia es como una familia... entonces,
¿cómo encontrar la iglesia correcta? No todas las iglesias son perfectas, de
hecho, ninguna iglesia es perfecta, al igual que ninguna familia es perfecta. Usted
puede encontrarse en una región del mundo donde no hay iglesias locales
organizadas. Si ese es el caso, ore para que Dios le guíe con otros cristianos con
los que usted pueda tener compañerismo. Si hay iglesias cerca de donde usted
vive, usted debe orar y pedirle a Dios por Su sabiduría para que le ayude a
encontrar la iglesia a la cuál Él quiere que vaya. Aquí hay algunas preguntas que
pueden ayudar a guiarlo en su búsqueda de una iglesia que sea buena para usted.
Jesús es el Único Camino
¿La iglesia cree que la fe en Jesús es la única manera de salvarse de sus
pecados y de tener una relación con Dios? “Ciertamente la gracia de Dios los ha
salvado por medio de la fe. Ésta no nació de ustedes, sino que es un don de Dios;
ni es resultado de las obras, para que nadie se vanaglorie." (Efesios 2:8-9).
Algunas iglesias enseñan cosas "adicionales" que tiene que hacer para ser salvo;
que la fe en Jesús únicamente no es suficiente. Esto es una señal de peligro.
¿Cuáles son las tres cosas a las que usted debe prestar atención cuando esta
buscando una iglesia? ¿Cuál es la importancia de cada una?
"Y cada día el Señor añadía a la iglesia a los que habían de ser
salvos. " Hechos 2:47
"Cuando terminaron de orar, el lugar donde estaban congregados
se sacudió, y todos fueron llenos del Espíritu Santo y
proclamaban la palabra de Dios sin ningún temor." Hechos 4:31
La Iglesia le Necesita
Esta es una responsabilidad maravillosa. Siendo el cuerpo de Jesús significa que
actuamos como Jesús actúa y compartimos con otros acerca de Él. La Biblia hace
esta pregunta: "¿cómo invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo
creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán si no hay quien les
predique? ¿Y cómo predicarán si no son enviados?” (Romanos 10:14-15). Este es
el objetivo principal de la Iglesia – compartir con otros acerca de Jesús diciéndoles
que ellos también pueden ser salvos y ser añadidos a la familia de Dios. Usted
tiene un papel importante que desempeñar. Tal vez Dios le dio el don de cantar
para que pueda cantar de Cristo a otros. O tal vez lo creó para ser maestro y
enseñarle a personas acerca de Jesús. Cualquiera que sea el papel que Dios
preparó para usted, es muy importante, y Su cuerpo no puede funcionar en la
mejor forma sin usted.
¿Cómo le ayuda a usted el ver la iglesia como el cuerpo de Jesús? ¿Pueden los
demás ver a Jesús cuando observan a su iglesia?
Conéctese con alquien
Clame a Dios
Piense en su relación con su mejor amigo. Usted habla con él, escucha lo que él
tiene que decir, y disfrutan de pasar tiempos juntos. Esta es la esencia de la
oración, construir una relación con su Padre Celestial. Él le ama mucho, quiere
escuchar lo que está pensando y guiarle. Dios dice: "Clama a mí, y yo te
responderé; te daré a conocer cosas grandes y maravillosas que tú no conoces. "
(Jeremías 33:3). Su trabajo consiste en clamar y hablar con Él, y Él se
compromete a responder. ¡Qué garantía tan maravillosa! Sus oraciones no tienen
que ser algo elaborado. De hecho, Dios prefiere la honestidad antes que la
repetición vacía de palabras. Simplemente comience hoy diciéndole a Dios lo que
está en su mente y pídale que Él le hable. Usted se sorprenderá de Su respuesta.
" Y ésta es la confianza que tenemos en él: si pedimos algo según
su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en
cualquiera cosa que pidamos, también sabemos que tenemos las
peticiones que le hayamos hecho.” 1 Juan 5:14-15
Parte 22: ¿Para Qué Orar?
¡La oración es realmente una conversación con Dios! ¿Cuándo fue la última vez
que usted disfrutó de este privilegio y de qué habló con Dios?
¿Para qué tomar tiempo de su día para hablar con Dios a quien no puede ver ni
necesariamente escuchar en voz audible? La razón principal por la que oramos es
porque es lo que Dios quiere. ¿Por qué quiere Dios que usted clame a Él? Piense
en la relación entre un padre y un hijo. Un buen padre quiere que su hijo venga a
él con sus sentimientos y necesidades. Es su deseo proveer para su hijo y hacerle
saber que puede confiar en él. ¡Esto es aún más verdadero con Dios! Escuche lo
que dijo Jesús sobre orar a Dios: "¿Quién de ustedes, si su hijo le pide pan, le da
una piedra? ¿O si le pide un pescado, le da una serpiente? Pues si ustedes, que
son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre que está
en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan” (Mateo 7:9-11).
"¿Hay alguien entre ustedes, que esté afligido? Que ore a Dios.
¿Alguno de ustedes está de buen humor? Que cante alabanzas."
Santiago 5:13
Parte 23: Cuándo Orar
¿Si Dios todo lo sabe; por qué tenemos que orar? Piense en al menos dos
razones.
Solía ser que muchas tiendas cerraban los domingos. Si usted necesitaba algo,
tenía que esperar hasta el lunes para conseguirlo. Dios no es así. Sus oídos están
siempre abiertos a escuchar lo que tiene que decir. La Biblia dice: "El Señor no
dejará que resbales; el que te cuida jamás duerme. Toma en cuenta que nunca
duerme el protector de Israel. ". (Salmo 121:3-4). Usted puede saber que puede
venir a Dios en cualquier momento y tener Su completa atención. Sus oraciones
no tienen que ser necesariamente largas. Usted puede disparar una “flecha” de
oración a Dios en cualquier momento: "Dios, necesito tu paz", o "Por favor,
consuélame en estos momentos." Él le ama tanto.
¿Cuán frecuente habla usted con Dios? ¿Qué usted puede hacer para desarrollar
el hábito de hablar con Él más frecuentemente?
"El Señor está lejos de los impíos, pero oye la oración de los
justos." Proverbios 15:29
" Oren en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y
manténganse atentos, siempre orando por todos los santos."
Efesios 6:18
Jesús sabía esto mejor que nadie. Él dijo: "«Padre, te doy gracias por haberme
escuchado. Yo sabía que siempre me escuchas; "(Juan 11:41-42). Como cristiano,
usted tiene la misma seguridad que tenía Jesús para saber que Dios escucha
cada oración. Esta es una gran fuente de consuelo, ya que Dios está tan cerca
como una oración. Él está dispuesto a escucharlo en todo momento, pero a veces
para escucharlo a Él con claridad, usted tiene que ir a un lugar sin distracciones.
¿Alguna vez ha intentado tener una conversación importante con un amigo en un
restaurante muy ruidoso? No es fácil. Así mismo, a menudo tenemos que
encontrar un lugar tranquilo para orar y conectarnos con Dios. Escuche lo que
Jesús hizo: " Muy de mañana, cuando todavía estaba muy oscuro, Jesús se
levantó y se fue a un lugar apartado para orar. "(Marcos 1:35). ¿Tiene usted un
lugar especial donde puede encontrarse con Dios? Si no, busque un lugar para
alejarse del ruido de su vida y pase tiempo allí con Dios hoy. Usted se sentirá
renovado y será más fácil conectarse con Dios.
"Por esos días Jesús fue al monte a orar, y pasó la noche orando
a Dios." Lucas 6:12
Parte 25: Cómo Orar
Aunque podamos hablar con Dios en cualquier sitio y a cualquier momento, es de
mucha ayuda tener un lugar y un momento especial para poder tener
conversaciones más largas con Él. ¿Cuándo y dónde es su sitio especial para
orar?
Es fácil hacer una apuesta cuando el riesgo es bajo, como por ejemplo, comprar la
cena o lavar los platos. ¿Pero qué tal cuando el riesgo es alto? ¿Qué tal si el costo
de perder la apuesta significa que cambiaría su vida por completo? Cuando se
trata de la Gran Comisión, el riesgo es muy alto. Para ser más específico, es de
vida o muerte. ¿Ha conocido a algún cristiano que parece ser un poco radical?
Posiblemente no podía parar de hablar de Jesús… ¿quizás era hasta un poco
vergonzoso? Pablo era tan radical que aun cuando fue puesto en la cárcel por
hablar de Jesús, a él sólo le importaba predicar el evangelio. El dijo “Quiero que
sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han redundado más bien
para el progreso del evangelio, de tal manera que mis prisiones se han hecho
patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás. Y la mayoría de los
hermanos, cobrando ánimo en el Señor con mis prisiones, se atreven mucho más
a hablar la palabra sin temor.” (Filipenses 1:12-14). ¿Por qué estaba Pablo
dispuesto a arriesgar su vida para que el mensaje de Cristo fuese predicado?
Cuando somos niños, alguien siempre nos lleva a toda partes. Pero si alguien nos
pregunta cómo llegar a algún sitio, no sabemos qué decir porque no manejamos
por nosotros mismo. Muchos cristianos se sienten de esa manera con el
evangelio. Ellos generalmente saben qué significa ser un cristiano, pero si alguien
les preguntara como llegar a serlo, ellos no sabrían qué decir. 1 Pedro 3:15 dice:
“Al contrario, honren en su corazón a Cristo, como Señor, y manténganse siempre
listos para defenderse, con mansedumbre y respeto, ante aquellos que les pidan
explicarles la esperanza que hay en ustedes.” Usted no necesita haber sido un
cristiano por muchos años o ser un predicador para compartir el evangelio. Usted
solamente necesita estar dispuesto. Bill Bright describió al evangelismo exitoso
como “tomar la iniciativa para compartir el evangelio en el poder del Espíritu Santo
y dejar los resultados a Dios.” Pero ¿qué es exactamente el evangelio?
¿El conocer el Evangelio le hace querer compartirlo más? ¿Por qué? ¿Cómo le
explicaría usted a alguien cómo puede tener una relación personal con Cristo?
La primera y más importante es orar por la persona con la cual quiere compartir su
fe. (Si vive en un país donde puede ser perseguido por su fe pídale a Dios por
sabiduría sobre cómo proceder). Luego, puede pedirle a Dios para que abra la
puerta y pueda tener una conversación con ellos. Cuando hable con ellos, le
puede preguntar si están interesados en cosas espirituales o si ellos han recibido
a Cristo como Su salvador. Hay panfletos que puede usar que hablan acerca de
Jesucristo. Uno muy bueno es el folleto de las Cuatro Leyes Espirituales de la
Campus Crusade for Christ. Puede leer el folleto con la persona y al terminar
preguntarle si quiere aceptar a Jesucristo como su Salvador. Lo más importante es
decirles que Dios los ama, que Jesucristo murió por sus pecados, y que pueden
aceptar a Jesucristo como su Salvador, si lo desean, orando y pidiendo perdón por
sus pecados y pidiéndole a Jesús entre en sus corazones.
¿Quién necesita escuchar las buenas nuevas del Evangelio y cuáles son algunas
maneras en las que usted puede compartir la Fuente de Vida?
¿Cuándo fue la última vez que el Espíritu Santo le dió la fuerza y las palabras
correctas para compartir el Evangelio?