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Ya no te desearé
Adrián Pimentel Vargas
27 Divagando… entre
la incongruencia y la verdad
Tere Castillo
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Mirando las miradas que te miran
revista de literatura y creación Carlos Bravo Vázquez y Alecto
No. 17, Diciembre 2010, es una publicación impresa y electrónica mensual editada por
Colectivo Trajín: ◙ Elizabeth Llanos ORGANIZACIÓN Y LOGÍSTICA ◙ Marlene Galicia 33 Bandeja de entrada
DIFUSIÓN Y PROMOCIÓN ◙ Arturo Texcahua EDITOR
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El Conde del Valle de Quauhnáhuac Fue hijo de una mujer abandonada debido a que el pa-
dre, al enterarse de que lo sería, puso pies en polvorosa y
nunca más se le volvió a ver en la Civac, ni en Jiutepec, ni
en Morelos, ni en México: huyó hacia un suburbio de Nue-
A
va York donde, años más tarde, murió desangrado debajo
de un puente como consecuencia de las seis puñaladas que
lejandro Mendívil nació en la Ciudad Industrial le dio un sujeto intoxicado con alguna potente droga. Sus
del Valle de Cuernavaca (Civac) un día martes, últimas palabras fueron: ―Perdóname, Teresita. Perdóname,
alrededor de las once de la noche. Ese día, por la tarde, un hijo o hija‖. Terminó en la fosa común, donde se pudrió.
camión de la Corona chocó contra una base de luz, lo que Teresa trabajaba en una fábrica y con lo poco que gana-
dejó sin energía eléctrica a buena parte del municipio de ba procuró dar un buen desarrollo al pequeño Alex. La pri-
Jiutepec. Alex nació a oscuras, apenas alumbrado por unas mera sorpresa, después de resignarse a que el pequeño
velas. El médico que atendió a la madre del recién nacido jamás probaría su leche, fue que los cuatro colmillos de su
mostró cierta resistencia a creer que era un bebé normal y dentadura fueron los primeros en brotarle. Cuando Alejan-
en cambio lo miró de manera sospechosa. dro sonreía, en lugar de causar ternura, provocaba en su
—¿Ocurre algo? –preguntó la novel madre. familia una especie de temor que obligaba a que sus tíos
—Es que… alejaran a sus primos y no les permitieran jugar con él.
—¿Es que qué, doctor? ¿Mi hijo no está bien? (Cabe destacar la entereza del muchachito, pues nunca se
—Su hijo está muy bien. Lo que pasa es que… no en- sintió triste ni mucho menos ofendido. Por el contrario,
tiendo por qué su comportamiento; es como si no acabara extendía sus brazos y jugaba a volar.)
de nacer, sino que se me figura que el pequeño tiene ya al En lugar de la leche, Alex, de niño, prefirió el jugo de
menos un año. betabel, por encima de otros líquidos. Una rareza más, se
Alex, ciertamente, desde sus primeros días mostró un decía la madre. Pero una mañana se asustó más y de alguna
comportamiento inusual. Un ejemplo fue su rechazo al se- forma su hijo le pareció en verdad extraño, recordó las pa-
no, el desprecio por la leche. Otro es que nunca se le es- labras del médico cuando le dijo que no era un bebé nor-
cuchó llorar por las noches y en cambio estaba despierto mal. En esa ocasión, cuando fue a la escuela por Alex
hasta el amanecer, momento exacto en que cerraba los ojos –quien ya contaba con seis años–, la maestra le dijo a Tere-
para dormir. sa que el niño había tenido un comportamiento fuera de
lugar durante el recreo. Ocurrió que Aurelio, compañerito
de clase, iba corriendo y cayó de cara sobre el pavimento.
De su nariz comenzó a escurrir sangre y Alejandro corrió
para levantarlo. Sin embargo, al tiempo de ayudarlo, co-
menzó a chupar la nariz del otro niño. Sorbía y descansaba
un momento, hasta que la profesora se percató y fue a sepa-
rarlo. Alex, ofendido, le mostró su dentadura y en seguida
hizo un movimiento con el brazo derecho, como si se cu-
briera el rostro con una capa.
Ya en casa, su madre lo abordó:
–¿Por qué hiciste eso, Alejandro? ¿Eh?
El niño no dijo nada; sólo bajó la vista.
–¡Contesta! ¿Por qué le chupaste la sangre a Aurelio?
¿Estás loco o qué?
–Es que… es que tenía mucha sed.
–¡Para eso hay agua!
–Pero el agua no me quita la sed y la sangre sí.
De castigo no le permitió salir a jugar y el pequeño se
dispuso a ver la televisión. Esa tarde descubrió a su igual en
una película: Chiquidrácula. Fue tal la emoción que experi-
mentó, que pidió a su madre que le comprara un traje de
vampiro. Por supuesto que Teresa no aceptó y en cambio
pareció preocuparse, pues la actitud de su hijo no era como
la de otros párvulos.
El pequeño se fue convirtiendo en silencioso, incluso
aparentaba ser meditabundo. Además del de betabel, su
bebida favorita era el jugo de tomate. Podía tomarse dos
litros en una sola sentada. Al terminar se iba a dormir y
soñaba con volar bajo el amparo de la noche. El chamoy era
Michele Santos (Momo1)
su golosina más amada.
6 Diciembre 2010 2010 Diciembre 7
Narrativa Jorge Arturo Hernández G. El Conde del Valle de.... Narrativa
En el primer piso buscó el sitio donde se reúnen los do- qué haría con él. Llegaron a casa y Teresa se despidió por-
nantes y se mantuvo en la sala, inmóvil. De una puerta sa- que se le hacía tarde para ir al trabajo.
lieron dos personas presionándose el brazo con un trozo de Semanas después, Alejandro consiguió una pareja que
algodón. Una chica de bata blanca nombró a dos personas. accedió a permitir extraer de su intimidad, a chupetones, el
Alejandro siguió a ambas y nadie se percató de que un ex- color de la herida. Era una chica pálida, ojerosa, que calza-
traño sujeto con aliento alcohólico buscaba el almacén del ba unas botas gigantes y vestía siempre de negro y a veces
líquido rojo. Comenzó a desesperarse hasta que vio cuando combinaba sus vestidos con blusas color vino. Esa chica
la chica colocó un par de envases, cuyo contenido era preci- fue abordada por Alex –quien iba pasado de copas– en el
samente lo que ansiaba beber. centro de Cuernavaca, dos días antes. Precisamente comen-
No disimuló ni procuró ser discreto y fue directo al gra- zaba su periodo y al ver que el borrachín se acercaba, se
no. Tomó uno de los recipientes y mordió el plástico; el molestó y estuvo a punto de marcharse de no ser por lo que
chorro de sangre comenzó a escurrir por las comisuras de escuchó:
los labios y su camisa color mamey se manchó. Uno de los –¿Tienes un poco de sangre que me invites? Me siento
donantes se percató y enseguida dio aviso a la muchacha muy mal…
que lo atendía. Ésta, sorprendida, lanzó un grito que se es- Sus ojos brillaron. Marcharon al hotel más cercano y ahí
cuchó incluso en la sala de espera. ―¡Policía!‖, gritó. pactaron su amor. Sin embargo, es sabido que la felicidad
―Llamen a un policía, por favor‖. Luego se acercó hacia el dura muy poco y este asunto terminó en tragedia.
bebedor de sangre, quien ya había abierto un segundo enva- Alex, feliz, contó a Solís, su amigo, el motivo de su
se y bebía el contenido placenteramente. En ese momento alegría y éste, para festejar, lo invitó a ponerse una buena
llegaron dos guardias y sometieron a Alex. No opuso resis- peda en alguna cantina del centro. Fueron a El Danubio; ahí
tencia, por el contrario, tenía el rostro lleno de satisfacción. se bebieron seis cubetas y salieron rebotando en compañía
Toda la gente que estaba al paso miró con cierta aver- de dos damas que también empinaron el codo con singular
sión al chico que llevaba la camisa con varias manchas de alegría y quienes les prometieron una noche inolvidable.
sangre. Los guardias lo trataron sin exceso de fuerza, pues Pero antes pidieron que las llevaran a cenar a fin de que se
notaron que no representaba ningún peligro. No fue el caso les bajara el mareo.
de los municipales, que lo subieron a la camioneta y con el Los cuatro beodos bajaron de un taxi en la avenida Plan
rigor de los toletazos lo trasladaron al sector más cercano. de Ayala, a la altura de la taquería El Chiringuito, adonde
En los separos el muchacho durmió y reposó la cruda. entraron. Las damas pidieron alambre y Solís siete tacos al
No escuchó ninguna de las discusiones que sus compañeros pastor. Alex estaba a punto de quedarse dormido y no es-
de celda sostuvieron en torno a si es más fácil asaltar a una cuchó cuando le preguntaron qué iba a pedir para cenar.
mujer o a un homosexual, o si deben usar la violencia con- –¡Aahh! –exclamó Solís–. A este cabrón le gustan los
tra quienes oponen resistencia a ser despojado de sus pro- tacos de moronga. ¿Venden aquí? –preguntó al mesero, el
piedades o es preferible huir en ese momento. Tampoco le cual no supo responder y debió preguntar al parrillero. Al
tocó una naranja de las que repartió una señora que se volver dijo que sí tenían–. Pues tráele unos cuatro para em-
acercó al sitio sólo con ese fin. Alex estuvo dormido duran- pezar, carnal…
te toda su estancia hasta que un policía lo despertó de un Alejandro volvió en sí al tercer taco. Preguntó de qué
botazo en la cabeza. eran y resolvieron su duda. Al terminarse el cuarto pidió
–Tú, pendejo, ya levántate. Ya vino tu jefa a sacarte. dos más y comenzó un ataque de hipo. ―Ya valió madre‖,
Tardó en reaccionar, pero el uniformado lo ayudó a le- dijo, y se encaminó al baño. Vomitó escandalosamente y
vantarse jalándolo del cabello. algunos comensales dejaron su cena a medias. La borrache-
Su madre estaba muerta de vergüenza ante el agente del ra no le permitió darse cuenta de lo condimentada que esta-
Ministerio Público, quien aún estaba ebrio debido a que un ba esa moronga y el daño fue irreparable.
día antes había sido informado de que sus ingresos por ex- No hubo culpables; nadie sabía que Alejandro Mendívil
torsiones aumentaron en setenta por ciento en el último mes Trejo era alérgico al ajo y esa noche la fiesta terminó en
y el asunto iba in crescendo. Por esa razón, él y tres de sus tragedia. A las dos de la mañana, personal del Servicio
policías se pusieron una guarapeta de campeonato en un Médico Forense llegó al sitio para levantar el cadáver. Te-
table del bulevar Quauhnáhuac en donde se jambaron seis resa ahora ya no sintió vergüenza: lloró para sí misma y
frascos de ron y uno de tequila. comenzó a entender la soledad de su hijo. Recordó una a
Se escucha raro decirlo, pero la justicia fue benévola con una las escenas en que Alex había transgredido las reglas y
el joven y su madre Teresa Trejo. Porque, tratándose de una se tumbó sobre el cuerpo del difunto. Ya no iba a estar más
institución federal a la que el chico causó el daño, los seis- con ella El Conde del Valle de Quauhnáhuac.
cientos pesos de la multa impuesta fueron sólo con el afán
de que la madre aflojara algunos billetes porque el agente
del MP requería urgentemente un plato de pancita y una
caguama bien fría para paliar el mal que lo embargaba.
Madre e hijo se fueron; el joven no dijo una sola palabra
en todo el camino, aun cuando su madre le había preguntado
El paraíso es un instante
abyecta, obediente, y a la que debía sumarse cada mañana Durante muchos años su madre se encargó de bañarlo,
en su trabajo o en el camino. A pesar de que se sentía rele- de cambiarlo. Incluso ya grande, en más de una ocasión,
gado por sus vecinos nunca le importó lo que pensaran de intentó encontrarle novia. Nunca dejó de llamarlo bebé. No
él. Sin saber por qué, despreciaba a los dos hombres que sabía si debía alegrase por su suerte, ya que durante todo
quisieron abusar de su madre o de él cuando era niño. Nun- ese tiempo se había dejado conducir por los demás, sin te-
ca supo realmente lo que quería y eso exactamente era lo ner problemas con nadie. Se sentía culpable, cansado de ser
que le inquietaba. el hombre cabalmente pulcro y refinado. Contemplaba con
El barco anunció con la tercera ocarina su salida. Flavio una mezcla de resentimiento y curiosidad la alegría en los
ya caminaba a un costado del niño de las rosas. Oía cada niños.
una de sus palabras. Casi su aliento. Sabás yacía completamente desnudo. Su ano era una
––Dame una. ¿Cuánto valen? ––agregó con un movi- caverna donde el demonio mayor de Narciso se metía san-
miento de manos que hacen los ciegos para encontrar un grante una y otra vez. Luego de cada espasmo de placer
respaldo. Con ello consiguió la reacción que buscaba. ¡ah! Las lágrimas que corrían de los ojos de Sabás eran
––¿Eh? ––El chico titubeó un poco debido a la forma como ángeles sin Dios para Narciso. Esto era un orgasmo
sorpresiva en la que apareció Flavio.–– Veinte pesos, pero para él: sacrificar el cuerpo menudo del niño con su miem-
como ya me quiero ir se la voy a dejar a diez ––agregó son- bro a punto de eyacular. El paraíso es un instante, repetía.
riendo y confiado por la apariencia de aquel hombre. El Flavio introdujo la mano diestra en su pantalón y ante la
viento húmedo del mar le enmarañó los cabellos. Mientras mirada confusa de Julián comenzó a masturbarse
caminaban por la arena, Flavio logró crear un ambiente ––Sigue, sigue leyendo ––repetía excitado. Julián se pu-
ameno con la plática y despertó en el niño una leve alegría so de pie. Quiso correr pero la mano izquierda de Flavio no
que terminó aprovechando. A punto de dar la una, sólo el se lo permitió. Un brillo de temor se formó en los ojos de
ruido de las olas se escuchaba en aquella playa, como si los Julián.
demás se hubieran puesto de acuerdo para dejarlos solos.
Las palmeras se mecían casi al mismo ritmo que los botes Por unos instantes intentó forcejear. Se movía
que flotaban en el mar. El niño se había acostumbrado a como un pez vivo en la red. Sus esfuerzos fueron
vender con la claridad de la luna.
––¿Cuántos años tienes? ––preguntó Flavio. En ese
vanos, él se lo impidió. Le propinó un duro gol-
momento quiso darle un abrazo pero se contuvo. pe en la frente, luego le ordenó que caminara a
––Diez ––respondió ciñendo las cejas. lo largo de la playa...
––Deberíamos descansar un poco, me duelen las piernas
––dijo Flavio sentándose en la playa. ––Espera, espera ––dijo con falso recato.
––No, ya se me hizo tarde y aún no termino ––dijo el En la arena lo apretó levemente.
niño mirando hacia la avenida. Algo de aquel hombre lo ––Quédese con el ramo de flores ––dijo Julián. Algunas
ponía nervioso. Flavio se dio cuenta. lágrimas empezaron a correr de sus mejillas.
––Me llamo Flavio. Tú cómo te llamas. La pregunta Con delicadeza Flavio le bajó el short hasta las rodillas
aumentó la incomodidad del chico. Volteó hacia los lados con todo y calzoncillo.
buscando algo que le devolviera la confianza para quedarse. El silbido del viento y la resonancia de las olas las vivió
Flavio notó el error que había cometido e intentó corregir. como música de fondo. Sentía el cielo bajo los pies. Le
––Oiga, ¿qué le pasa? ––dijo el niño con cierto asom- introdujo el dedo medio en el ano al ritmo de las olas que
bro, Flavio se hizo el desentendido. Fingió un fuerte dolor pisaban en la arena sus sombras. Julián lloró de forma aho-
en el muslo de las piernas. gada.
Después de algunos minutos. Con la apariencia de que ––Nadie jamás te hará daño hijo. No debes asustarte,
ya se sentía mejor, y con el gusto de que el niño se había aquí estoy yo para protegerte. Ya no andarás solo por la
sentado, lo convenció para que se quedara un rato con él. playa, pueden llegar los hombres ––dijo Flavio entre balbu-
––Hazme un favor, necesito que me leas un fragmento ceos. Después lo colocó en posición fetal y le sumió su
del libro ¿podrás? Me gusta mucho. Desafortunadamente miembro. Julián soltó un alarido que se perdió en la oscuri-
perdí la vista ––dijo colocando la mano en la frente mien- dad. Al terminar separó su miembro manchado de sangre y
tras bajaba la mirada. recargó al niño en el pecho.
El niño demoró en la respuesta. ––¿Te das cuenta? Yo jamás le haría daño a mi hijo
––Me llamó Julián ––hizo una pausa–– Nunca lo había ––agregó con una sonrisa delirante. Lo llevó al mar. Con el
visto ––dijo con cierta duda. Flavio olvidó que le había agua limpió la sangre que corría entre las piernas de Julián.
preguntado su nombre. Sólo tenía ojos para mirarlo. Estaba Por unos instantes intentó forcejear. Se movía como un pez
concentrado en su objetivo. Con cierto desdén Julián se vivo en la red. Sus esfuerzos fueron vanos, él se lo impidió.
sentó cruzado de piernas debajo de una sombrilla de palapa. Le propinó un duro golpe en la frente, luego le ordenó que
El hombre bendijo la suerte de ese día. Nuevamente quiso caminara a lo largo de la playa, aunque por ratos volteaba,
darle un abrazo, pero se contuvo. Un deseo fetichista por la figura estática de Flavio lo asustaba. Éste no lo perdió de
las prendas desaliñadas del niño le incrementaba el ansia. vista hasta que la sirena de una ambulancia lo distrajo, re-
cordó vagamente que su madre lo esperaba en casa.
Todo un alboroto.
Una apasionante algarabía.
Podría intentarlo…
El problema son sus ramificaciones más salvajes,
las ligaduras que están cerca de sucumbir:
hoy casi son una nostálgica elegía.
Si en este momento intentara un cantar a las delicias del extirparle a las letras la sangre y carne y la humanidad
deseo, y el sentido.
no podría ser una rapsodia amorosa,
ni novela de fuego: epitalamio sería. En este momento, no podría ser de otra manera:
con sílabas aumentar los senos, hasta convertirlos en
Incluso de cualidades dulces, ¿verso de arte mayor?
construida con delicadas insinuaciones, Utilizar un zeugma simple que redujera abultamientos
y aunque perfumara rimas y voluptuosidades, de abdomen,
y escribiera verso de pie quebrado a los cuerpos nuevos tropos literarios incrementando el volumen de
cavernosos. las caderas,
una sinalefa para estrechar cinturas y, a toda costa,
Y aunque adornara letras y flujos y gemidos y vaivenes… evitar figuras de diálogo y argumentación.
y de las contracciones de membrana hiciera metáforas
puras… Hoy no puedo escribirlo.
Aun cuando con esmero cultivara un perfecto castellano; Sería un garabato sobre relaciones carnales de un hombre
y aprendiera reglas gramaticales, y ―SU mujer‖,
recursos literarios, o de los deseos reprimidos de una esposa, de la
ortografía. “señora de…”,
Aun con palabras rimbombantes: o del cuerpo de “puta” a quien sólo le respetan el apellido
sería un epitalamio, triste como elegía. paterno.
A menos…
Que sobre tu cuerpo sea,
y que unidad táctica de humedades y de sueños sea.
Arte posmoderno otros esperando que la coyuntura internacional los rescatara. Héro-
es que cambiarían al mundo desde una plaza sin considerar que el
Gran Papá no se tocaría el corazón por unos cuantos hijos rebeldi-
llos.
L
Regresando al papel, sea por ecologistas o acaso para que el
rumor vuele más lejos pero al fin, la invitación llegó en revolución
y yo casi la rompo en la primera impresión.
a promesa de una exposición de arte como ningu-
Pasando al título, léalo ahora conmigo para que se entere de
na no es nueva. Años ha que me llegan invitacio-
una vez:
nes que advierten sobre la obra inédita del inventor del
―Café sobre Café‖ o de la escultura más refinada y pequeña GIRO ARTÍSTICO DE NOVENTA GRADOS
que jamás se hubiera visto. Por lo anterior se podría pensar que se pusieron a pintar en las
La de hoy era distinta por lo menos en la redacción. A esquinas. No es difícil después de todo, La Fuente vista por el haz
saber, se advertía un giro de 90 grados y ya desde ahí espe- sería expulsada de su pedestal y enviada a un vertedero.
raba algo anormal, original o imposible. Veamos pues la línea que advierte sobre
En el remitente firmaba El Gran Glotín y como tema el LOS NUEVOS VALORES NACIONALES.
2 de octubre. ARTE JUVENIL. EL FUTURO DE MÉXICO Y PRESEN-
Suelo ignorar las fiestas cívicas que por infructuosas se TE DEL ARTE MUNDIAL EXPUESTO EN UNA SOLA PLA-
van desgastando. Hay que ver a los jóvenes que gritan: sa- ZA.
ben de historia más o menos lo mismo que usted y yo de JÓVENES TALENTOS BUSCANDO UNA OPORTUNI-
monodrópteros baleares. DAD PARA MOSTRARNOS LO MEJOR DE SU INTERIOR.
Me río, mas la suscripción de El Gran Glotín es un ali- ¡Escatológico!; ¿o no?
ciente. Si lo consideraron entre los críticos patrocinadores Disculpe usted. Suelo considerar las cosas muy literalmente y
no es por algo insignificante. Ya sabe usted: El Personaje pensé en arte más moderno quizá del sugerido por este documen-
capaz de dar el veredicto final, indiscutible, perfecto. El to.
hombre preparado que dicta líneas de campaña precisas, LA ENTRADA SERÁ LIBRE Y ASISTIRÁN A LA INAU-
escribe discursos refinados y nunca con una sola mentira. GURACIÓN LOS EXPOSITORES.
Claro. ¿Qué se puede esperar de los hombres de pala- Desde luego puedo no asistir si considero la libertad aludida en
bra?: preparados, instruidos y ávidos de conocimiento que esa línea pero... ¡Fallarle a El GRAN GLOTÍN!
acumulan y no dejan empolvar. En fin: Artemisa les ha Ni pensarlo además, La Diosa podría no volver a pintar nada
dado por llamar a la curadora y exponente principal. Su en México y yo me habría perdido esta GRAN EXPOSICIÓN.
fama es la de una mujer capaz de dislocar un edificio para ¡Nunca!
que su arte innove. Eso, claro, es parte de la publicidad que No está demás ver y escuchar la opinión de lo más granado de
he visto en las revistas donde, por el formato, La Diosa se los medios antes de las ediciones matutinas pero hasta ahora, salvo
ha negado a presentar cualquiera de sus obras. que los "NOVENTA GRADOS" se refieran a la vuelta que debo
dar a este papel para seguir leyendo, no veo otra justificación.
Michele Santos (Momo 2)
Marea
El marco es Tlaltelolco y el motivo... Aquí está. La firma de El Gran Glotín debajo de lo increíble;
Después de Don Pedro parece que no hubo nada relevante lo nunca visto.
en esa zona hasta el 68y a partir de ahí, más y más ganas de LA INNOVACIÓN.
resolver ambas hecatombes. LO ESPERAMOS EN LA PRIMERA EXPOSICIÓN DE
Sí. Digo bien: hecatombes. Primero aquellos bueyes en MURALES EN EL SUELO.
día de plaza, en plena guerra confiados al Sol después, éstos EGG
Santa paciencia
Hey Cristina
Mirando las miradas denunciándolos, al gobierno del Congo y a los países que lo sos-
tenían y exigirles modificaciones en las condiciones laborales y
que te miran de vida de los pueblos del Congo Belga, que no necesariamente
se llevaron a cabo, pues pesó más el interés del capital que las
condiciones de vida a que eran sometidos aquellos. Al mismo
El último libro de Mario Vargas Llosa, por tiempo que empieza a darse cuenta de que Irlanda, de donde era
Carlos Bravo Vázquez. El sueño del celta es nativo, sin llegar a los extremos en los que se encontraba el Con-
el título de la más reciente novela de Mario go, también estaba sometida a la colonización inglesa; que sus
Vargas Llosa, escritor peruano que obtuvo el habitantes carecían de los derechos ciudadanos que tenían los
premio Nobel de Literatura 2010, sin duda ciudadanos ingleses; que los primeros en realidad eran tratados
alguna por la solidez de su obra literaria que como ciudadanos de segunda, en su propio país. Situación que
abarca cuento, novela, ensayo, análisis y era favorecida por aspectos culturales, como el hecho de que la
crítica literaria. En El sueño del celta el autor lengua y religión practicadas en Irlanda ya no fueran las propias,
reconstruye la vida de Roger Casement entre sino el inglés y el anglicanismo, impuestos como consecuencia
los años de 1903 y 1916. Precisamente los de la colonización de que fueron objeto y que pocos de sus habi-
más intensos en la vida de este nacionalista tantes las conservaran. Durante su estancia en la cárcel, en la
irlandés, que lo llevaron de pertenecer al cuer- soledad en la que lo mantiene el gobierno inglés, que lo acusa de
po diplomático de Inglaterra a luchar en contra de esta nación, traición y le niega las visitas, Casement realiza una profunda
justo en los inicios de la primera guerra mundial, en un intento por reflexión acerca de los acontecimientos en los que se vio involu-
lograr la independencia de su país de origen, y a su muerte. Al crado para promover un levantamiento armado, que hipotética-
principio de la novela el autor presenta un rápido repaso de su mente llevaría a la independencia de Irlanda; también piensa en
origen familiar y con ello cultural, que le permite mostrar la ver- su familia, en especial en su madre que le inculcó el catolicismo,
tiente católica que adquirió de su madre, quien a escondidas del sin perder la esperanza de que el gobierno inglés le conmute la
padre, lo bautiza y le inculca los principios de esta religión, que pena de muerte por la prisión perpetua. Su visión acerca de Ingla-
durante los últimos días de su vida lo mantendrían en permanen- terra y la transformación de su personalidad adquieren otro as-
te tensión, dada la formación anglicana que recibe en el seno pecto al ser enviado a Perú, país americano en el que una com-
familiar. Posteriormente, con una estructura que se acerca a la pañía inglesa obtenía el caucho de la selva amazónica, de forma
perfección, en cuanto a su forma, en la novela, que es más una semejante a como se extraía en el Congo; explotando a los habi-
biografía, el autor describe el involucramiento de Casement en la tantes de los pueblos nativos hasta hacerlos desaparecer, no sin
diplomacia inglesa, al mismo tiempo que narra las últimas horas antes obligarlos a vivir en condiciones que los obligaban a perder
de su vida. Lo que le permite recuperar los acontecimientos en la dignidad humana. Pero a diferencia de lo que ocurre en el Con-
los que participó este ciudadano universal, prácticamente desco- go, que era una colonia, para entonces Perú ya era un país inde-
nocido, para, a través de la novela, recuperarlo y darle vida, a él pendiente, con leyes que establecían el carácter de su gobierno y
como individuo y a sus planteamientos en contra del colonialismo regulaban sus relaciones con los demás estados y con su socie-
y de denuncia de la crueldad y vileza de la que es capaz el hom- dad. Situación que aprovecha el autor para emitir una severa
bre en su afán por acumular riquezas. Con una tensión sostenida, crítica a la debilidad del estado nacional peruano, que en ese
que obliga al lector a mantener fija la mirada en las páginas del momento se mostraba incapaz de defender su territorio frente a
libro, a lo largo de la novela se reconstruyen varios procesos. El los estados vecinos y a sus ciudadanos, ante la explotación de
cambio de visión y con ello de su personalidad, acerca de su que eran objeto por empresas de capital extranjero, en este caso
perspectiva laboral como diplomático al servicio de la corona inglés, que lo obligaban a depender de éstas para mantener una
inglesa, a partir de presenciar las barbaridades que comete el ser presencia en su frágil frontera con Colombia, a costa, incluso de
humano contra sus semejantes, en el Congo y la indignación que la explotación, que lleva al exterminio, de sus ciudadanos y de
esto le provoca; el cambio de percepción sobre Inglaterra; la re- sus recursos naturales. Es precisamente durante su estancia en
flexión interna acerca de lo hecho durante su vida; la adopción de Perú donde madura su decisión de luchar por obtener la indepen-
una sexualidad libre de prejuicios, entre otros. Es justo durante su dencia de Irlanda; donde el amor que sentía por Inglaterra, su
estancia en el Congo Belga, adonde es enviado con la misión de cultura y forma de gobierno, se transforma en rencor y odio. Es
elaborar un informe detallado sobre las condiciones laborales y también donde termina de conformar esa personalidad obsesiva
de vida de los nativos, cuando Casement inicia una serie de re- por el trabajo; donde libera sus impulsos sexuales y asume abier-
flexiones en torno al discurso que se empleaba para justificar la tamente sus preferencias; donde el clima, las plagas y su obse-
colonización de este país africano, según el cual su ocupación lo sión por el trabajo terminan por minar su salud, y personalidad,
conduciría a la modernidad, lo que hipotéticamente lo sacaría del hasta quebrantarla. Al entregar su informe al gobierno inglés y
atraso y la ignorancia en la que se encontraban sus habitantes. darlo a conocer al público se convierte, involuntariamente, en una
Reflexiones que pasan por dos procesos. Se percata de que con- celebridad cuya popularidad rebasa las fronteras inglesas; se le
tra todo lo que establecía el discurso colonialista, en realidad la reconoce como un defensor de los derechos humanos. Pero para
colonización encubría métodos de explotación salvaje, no sólo de entonces su salud y su personalidad estaban por completo dete-
los recursos naturales, sino sobretodo de niños, mujeres y hom- rioradas. Por lo que después de pasar un tiempo en una clínica,
bres que eran obligados a entregar cuotas de caucho sin retribu- decide separarse del cuerpo diplomático de Inglaterra, para dedi-
ción alguna, manteniéndolos en condición de esclavitud; someti- carse, en la medida de sus fuerzas y sin descanso, a luchar por la
dos a los más crueles castigos físicos y morales para obligarlos a independencia de Irlanda, a vincularse con quienes, desde diver-
cumplir con las cuotas que se les imponían, que los mantenían en sas posturas, militaban por esta causa dentro y fuera de su país.
permanente estado de humillación, al ser rebasada su dignidad Fue tal su obsesión por lograr la independencia de su patria que,
por el instinto de sobrevivencia. Si ésta es la modernidad de los en la coyuntura del inicio de la primera guerra mundial, considera
países europeos, en realidad ésta, y quienes la imponen, son los que la única forma de lograrlo es estableciendo una alianza es-
verdaderos salvajes, no aquellos pueblos a los que despectiva- tratégica con Alemania, enemiga histórica de Inglaterra. Perspecti-
mente se les asigna este adjetivo, es la conclusión a que llega va que lo lleva a romper con quienes estaban luchando por lograr
Casement al entregar su informe, que en la diplomacia internacio- cierta autonomía para Irlanda, al aislamiento del grupo en el que
nal sería usado, por parte de la corona inglesa, para desprestigiar, participaba, al fracaso y aplastamiento a sangre y fuego del levan-
tamiento armado que lleva a cabo, que no es apoyado con un
ataque alemán a Inglaterra, como pensaban y habían acordado bien, que si sólo que superara mis expectativas la recomendaría
con el gobierno alemán. Finalmente Casement es apresado y en mi programa de radio/tv por internet, y, tengo que admitirlo,
acusado de traición a su patria, que en ese momento y dado el superó mis expectativas. Al salir de la película me quedé con un
carácter de Irlanda con respecto a Inglaterra, era ésta, y conde- mucho mejor sabor de boca que el obtenido en las anteriores
nado como tal, al conocerse sus nexos con el gobierno alemán películas, y no gracias al smoothie de cereza que me había toma-
para atacarla. Es indudable que sólo la fascinación que provocó do, sino porque la película era una adaptación mucho más fide-
la vida de este personaje en el autor de la novela es lo que lo digna del libro. La película te lleva de la mano, cubriendo todos
llevó a indagar sobre él con tanta minuciosidad, en archivos y los huecos, sin obligarte, como en las otras, a tener que leer los
bibliotecas y a través de entrevistas a historiadores del Congo, libros para entenderle. Añádanle a esto que los actores han ma-
Bélgica, Inglaterra, Irlanda, Perú, Nueva York y España, para durado y mejorado su trabajo, que se cuenta con las actuaciones
obtener el material fidedigno y necesario que le permitiera elabo- de gente como Alan Rickman, Ralph Fiennes y Helena Bonham
rar, con la libertad del escritor, esta fascinante novela. Por lo que Carter, que no obstante de haber aparecido en las otras películas
además de escritor se confirma como investigador de primer ni- no habían tenido una dirección digna. Sólo por esta película
vel, en el mundo. Fascinación que sólo podía provocar en alguien considero que Yates no es un destroza-libros harrypotteriano —la
que, guardando proporciones, también se asume como un defen- tercera es la vencida— y a esto añadámosle el toque dramático-
sor de los derechos humanos y las libertades del individuo, que lo catastrófico, por ser el desenlace de la historia, y los efectos es-
han llevado a denunciar cualquier violación a éstas, aun cuando peciales que nunca han sido problema. El filme corta exactamen-
sus denuncias han propiciado la ruptura con sus amigos más te en el clímax de la historia, para hacernos esperar con mayores
entrañables y en no pocos casos a la incomprensión de sus pos- ansias la llegada de la siguiente película... que ya quiero ver.
turas. A través de la literatura, Mario Vargas Llosa ha reconstrui- ¿Qué festejamos los mexicanos?
do escenarios que ningún ensayo sociológico, antropológico, ¿Centenario, bicentenario, reali-
histórico o desde la perspectiva de cualquier disciplina humanísti- dad o ficción?, por Carlos Bravo
ca o social, haya sido capaz de construir, sobre la crueldad de las Vázquez. En unos cuantos días ter-
dictaduras (La fiesta del Chivo), la adopción de conductas y acti- minará el año 2010. Año en el cual
tudes ante la propia individualidad y lo social (El paraíso en la se conmemoraron dos eventos cen-
otra esquina y Los cuadernos de Don Rigoberto) e incluso sobre trales de la llamada historia nacional,
las contradicciones de la personalidad que pueden llevar a la de aquella que de alguna u otra for-
autodestrucción (Travesuras de la niña mala). Por lo que, en este ma impacta a la mayoría, si no es que a la totalidad de los mexi-
caso, el premio Nobel que recién se le adjudicó, es más que me- canos. Por lo menos, esa idea fue la que se nos vendió a través
recido por este ciudadano universal, cuya obra literaria es reco- de una intensa campaña publicitaria cuyo eslogan rezaba:
mendable leer. “Doscientos años de ser orgullosamente mexicanos”, frase que
Harry Potter y la muerte de nos remitía a la lucha que inició un grupo de criollos en contra de
los libros, por Alecto. Para la imposición en el trono de España del hermano de Napoleón
mí los bestseller son un buen Bonaparte, y que reclamaba el regreso del, así considerado en
inicio a la lectura, cuando se ese entonces, legítimo rey de España. Legitimidad que por cierto
es un neófito en ésta, digo, sólo la daba la iglesia y la tradición; no necesariamente el pueblo.
pero no hay que quedarnos “Cien años de la revolución”, reza otro eslogan que nos lleva al
ahí. Qué mejor para esto que levantamiento armado al que convocó Francisco I. Madero en
la saga de Harry Potter, libros 1910 en contra de la reelección de Porfirio Díaz en la presidencia
sencillos, con un lenguaje de la República, y que sólo buscaba un cambio generacional, en
básico y una temática simple. Por éste y otros motivos Harry Pot- el grupo en el poder, dominado en ese momento por ancianos; y
ter fue llevado a la pantalla grande, con un éxito monetario increí- que por tanto no pretendía ningún cambio en la estructura econó-
ble para Warner Bros y gran gusto para personas de todas las mica y social del país. También se conmemoran los diez años de
edades, pero desilusión y fracaso para otros muchos al confron- que Vicente Fox llegara a la presidencia, político que surgió de
tarse la película con el libro. Aceptémoslo, en un noventa por esa amorfa y nunca bien definida llamada sociedad civil, a la que
ciento el libro es muy superior a la película, esto refuta aquella arrastró tras de sí el legendario Maquio, allá por el también me-
frase que sentenciaba una modernidad absoluta “Una imagen morable año de 1988, quien murió en un “accidente vehicular”,
dice más que mil palabras”. Y las películas de Harry Potter son después de que la dirigencia de su partido, el PAN, acordara con
prueba de ello. Las primeras seis películas de la saga fueron un Carlos Salinas de Gortari una alianza estratégica, como le llama-
fraude total, aunque muchos dicen que la tercera película, la diri- ron al ardid político para detener el avance del izquierdismo de
gida por Cuarón, Harry Potter and The Prisoner of Azkaban, ha Cuauhtemoc Cárdenas, que tanto temor les provocó. Al fin y al
sido la mejor y la más parecida al libro. En lo personal, para mí es cabo el programa de gobierno de Salinas y el del PAN coincidían
igual de mala que las otras aunque ciertamente Colombus, con casi en todo. También se conmemoran diez años de que la ciuda-
The Philosopher's Stone y The Chamber of Secrets, primera y danía del Distrito Federal eligiera por primera ocasión, después
segunda película, y Newell con The Goblet of Fire, cuarta parte, de que durante más de setenta años lo tuvieran prohibido, a sus
se llevan el premio como destroza-libros harrypotterianos. Yates gobernantes inmediatos, con los que hipotéticamente el ciudada-
no se salva, considerando que sus dos películas The Order of the no del Distrito Federal establece contacto directo: los jefes dele-
Phoenix y The Half-Blood Prince, quinta y sexta, son muy incom- gacionales. Así las cosas, en realidad ni se conmemoran doscien-
pletas, dejan huecos que, sino has leído los libros, no son fáciles tos años de ser orgullosamente mexicanos, porque la indepen-
de llenar. Con estos precedentes, el día del estreno mundial de la dencia se obtuvo hasta 1821 y décadas después de esta fecha el
séptima y última película de la saga, titulada Harry Potter and the sentimiento de pertenencia a la nación mexicana, en muchos
Deathly Hallows (en su primera parte debido —dicen los produc- rincones del país, continuaba siendo prácticamente inexistente,
tores— a la extensión del libro, aunque en realidad no es el más este fue producto del proceso educativo que inició Juárez una vez
largo, y evidentemente prevalecen las razones económicas para que derrotó al segundo imperio; ¿qué se puede festejar de 1821?
esta división), yo iba con la peor actitud posible, hasta sin ganas Ni cien del inicio de una revolución que, de acuerdo con el discur-
de verla, pero tenía que hacerlo para confirmar mis sospechas o so modificó a la estructura económica y social del país. Ésta, la
aceptar mi equivocación. Me senté en mi butaca muy bien ubica- revolución social, vendría después; justo cuando terminó la etapa
da y acordé con la persona que me acompañaba que si sólo, lean maderista, después de un cruento golpe de estado de los viejos
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