Al acercarse el fin de la presente
administración, se agita el ambiente
político y líderes de la oposición llaman
a resolver la “crisis fiscal” que sufre el
país, y que impide que el Estado
mexicano pueda atender las
necesidades urgentes de una población
que aspira a alcanzar niveles de vida
acordes con sus necesidades, y más
cercanos a las de países con que
México se equipara en el mundo, de
similar nivel de ingreso per cápita.
Somos “el pato feo” de la OCDE en
población pobre; en nivel y calidad de
. educación, y en empleos remunerativos,
así como en cumplimiento de las
obligaciones con los derechos humanos
económicos, sociales y culturales; con una economía nacional plagada de abusos por los monopolios que
operan en el país y una población en deplorable estado de salud, por dietas obligadas por la propia
pobreza.
El nuestro es un país que sufre de escasez del vital líquido, no hay oferta de agua potable en todas las
concentraciones poblacionales, ni plantas municipales de tratamiento de aguas para reuso. Tampoco
disponen los gobiernos federal y locales de los recursos necesarios para prevenir y atender los efectos
destructivos de la naturaleza que nos sorprende cada año. En México se requieren costosas acciones
estructurales para relocalizar a mucha gente que casi siempre, muy pobre, habita laderas de montañas,
vados de ríos, y excesivas cercanías a las costas, etcétera.
Por su parte, la cobertura educativa en los niveles de secundaria, preparatoria y profesional es
marcadamente insuficiente: todos los años son rechazados decenas de miles de jóvenes que aspiran y,
para colmo, no vienen bien preparados de las primarias.
Luego, no existen seguros para proteger del desempleo a los trabajadores, ni de la destrucción a la
producción agrícola por condiciones climatológicas adversas, como heladas, inundaciones y tormentas
tropicales; tampoco se provee seguridad social ni protección médica para todos mexicanos, en una
población que está generando un número inmenso y creciente de gente en la tercera edad.
La infraestructura de instituciones financieras no cuenta con entidades, como bancos de desarrollo, que
financien a la amplia gama de mexicanos en actividades productivas. Se cree que los subsidios familiares,
que se dan con recursos del presupuesto, son suficientes para resolver la pobreza pero, de hecho, ésta ha
venido creciendo todos los años, hasta llegar a ser ahora alrededor de 50% de la población del país.
Luego, la infraestructura urbana de la gran mayoría de los centros poblacionales carece de casi todas las
facilidades para hacer la vida amable y libre de riesgos a sus pobladores, protegiéndolos de los lodos, en
tiempos de lluvia y de los polvos, en secas. Ni se diga de la condición de los pequeños poblados,
especialmente en las zonas rurales, de los que hay miles en el país.
México llegó a principios de esta década con 112 millones de personas, prácticamente de la noche a la
mañana, y las condiciones reales del país sobrepasaron la capacidad de atender ese crecimiento en casi
todas sus manifestaciones.
De ahí los recientes planteamientos del presidente del Senado, Manlio Fabio Beltrones, del senador
Francisco Labastida y otros distinguidos senadores: Menores impuestos y tasas, mayor recaudación y que
http://www.informador.com.mx/impresion/270918 14/02/2011
El Informador :: La reforma integral que urge a México Página 2 de 2
todos paguen.
Plantean una opción muy interesante para resolver la pobreza de los gobiernos mexicanos —federal,
estatal y municipal— para que puedan disponer de los recursos necesarios para cumplir sus obligaciones
ante la población.
Incluye decisiones como hacer aplicable la obligación a toda la población, a partir de un nivel mínimo de
ingresos, sin excepciones de ninguna naturaleza. Salvaguardando los ingresos de las clases populares y
gravando el consumo de los sectores y personas de más altos ingresos.
Eliminando la regresividad del impuesto al consumo y haciendo progresiva la renta de las personas y
sectores de altos ingresos. Incluye también la noción de que se pueden bajar algunas tasas de estos
impuestos para propiciar el cumplimiento de parte de todos.
Es cosa de analizar, a nivel nacional, ésta y otras opciones que sin duda surgirán, pero lo importante es
que haya conciencia de esa necesidad, y gracias a la iniciativa del senador Beltrones; porque el México
que todos queremos tiene que pasar por una decisión de darle atribuciones a los tres órdenes de Gobierno
para recaudar recursos y cumplir con las interminables obligaciones con los mexicanos.
Pero ante la necesidad de generar recursos gubernamentales para satisfacer las preocupaciones arriba
expresadas, hay quien pregunta: “¿Y yo por qué?” El desinterés del Gobierno federal, de convicción
neoliberal, no considera que sea su obligación resolver esas magnas necesidades, porque para esta
administración, el mercado es el que las debe resolver.
Esta noticia se puede consultar en: http://www.informador.com.mx/economia/2011/270918/1/la-reforma-integral-que-urge-a-
mexico.htm
IMPRESO: Lunes, 14 de Febrero de 2011
http://www.informador.com.mx/impresion/270918 14/02/2011