¿Alguien da un centavo
por los pobres?
Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO-Sede Académica Guatemala, reconocida por el Decreto 96-87 del
Congreso de la República, ratificado por el Ejecutivo en el instrumento de adhesión de fecha 29 de diciembre de 1987.
tributarios del nuevo marco de la eco- dientes más comunes es el que sitúa
La legitimación nomía, impuesto por la contrarrevo- las causas de la pobreza en la cabeza
social de la pobreza. ¿Alguien da un lución conservadora desde finales de de las personas. Según esta concep-
centavo por los pobres?... la década de 1970. Si en la práctica ción, la pobreza constituiría una tara
las reformas pro mercado produjeron mental que impide a los individuos
José Vicente Quino González* un “apartheid a nivel global” (Amin, proponerse metas en la vida. Detrás
citado por Battiston, 2010), en el de esa caracterización se adivinan re-
El lema de la nueva econo- cultura dominante arrastra desde la ámbito de los discursos esta realidad sabios de la clásica separación entre
mía podría muy bien ser: colonia, con las variaciones introdu- también debía reflejarse, aunque in- tradición y modernidad. Los pobres
“cualquiera puede ser Bill cidas de acuerdo a las vicisitudes de vertida, distorsionada. estarían apegados a valores premo-
Gates, si tú no lo eres es cada época. De la misma manera, la Así como en el sistema interestatal dernos, casi bárbaros, inútiles para
por culpa tuya”. sociedad ha forjado representaciones se han construido sucesivos enemi- situarse en un mundo que demanda
Kuttner (2001) sobre el pobre y sobre la pobreza. gos tenebrosos, dentro de los Estados la capacidad de emprendimiento y de
En efecto, en las conversaciones se ha forjado la imagen del enemi- eficiencia.
¡ La culpa es tuya!… Ésta es –pa- cotidianas sobre el tema, todos tie- go en casa. De esa cuenta, el pobre Wallerstein (2002), por otro lado,
labras más, palabras menos– la nen algo que decir. Un estudio rea- pasó de ser un pobre diablo sin mo- ha rastreado los esfuerzos de los
interpelación que el ciuda- ideólogos liberales decimo-
dano común le lanza a una nónicos por mantener la línea
persona pobre. Se trata de divisoria entre los ciudadanos
una suerte de mecanismo de primera clase, los burgue-
especular mediante el cual ses vencedores de la nobleza, y
las personas comunes se las clases peligrosas, los eter-
sitúan frente a los pobres, nos candidatos a convertirse
produciendo una relación en ciudadanos. En el fondo
antagónica entre nosotros de estos esfuerzos siempre se
y los otros. Uno no tendría esgrimía el argumento de la
que detenerse a analizar pa- dicotomía entre pares cate-
labras como éstas, que no góricos –hombres y mujeres,
sólo parecen naturales sino propietarios y no propietarios,
inofensivas. Sin embargo, educados e iletrados–, que re-
el tema se complica cuando mitía a la dicotomía más abar-
estos discursos colonizan la cadora: civilización y barbarie.
arena política y se convier- En todo caso, el propósito ve-
ten en soporte para la toma lado no era otro sino limitar el
de decisiones en materia de grado de realización del princi-
política social y en el tra- pio proclamado: la igualdad de
tamiento de la pobreza por todos los ciudadanos.
parte del Estado. Entonces
Foto: Luis Alejandro de León Soto Hoy los argumentos parecen
las palabras cobran toda su más sofisticados. Pero todos
importancia. refieren a un credo disemi-
lizado por Georges y Flores (2002), tivación y sin metas en la vida, a un nado en las últimas décadas que se
por ejemplo, revela que las opiniones sujeto peligroso, temido y merecedor sintetiza en un sentido común según
Definiendo al pobre,
sobre las causas de la pobreza conce- de una y mil medidas punitivas. El el cual el éxito está destinado a los
definiendo al “otro”
den un peso importante a la falta de inventario de apelativos de viejo y más aptos –los emprendedores e in-
motivación de los pobres y a sus con- nuevo cuño que se le endilgan al po- novadores– y el fracaso sería el justo
Durante toda nuestra historia, la de- ductas irresponsables. Otro resultado bre resulta generoso. Entre perezoso castigo para los menos dotados, con-
finición del “otro” se ha basado en la del estudio que no parece sorpren- y delincuente común de la peor ca- formistas y despistados por naturale-
construcción de estereotipos y en la dente es la asociación que establecen laña, se despliega una amplia gama za. Por supuesto, los pobres engrosan
invención de caricaturas grotescas, los entrevistados entre cultura indí- de matices que configuran el espec- las filas de esta última categoría. Con
ante las cuales no queda otra cosa gena y pobreza. La pobreza existente tro nada envidiable que constituye la estas premisas, sólo queda lugar para
sino tomar distancia. El caso más se debería, en gran parte, al tipo de definición del pobre. una conclusión: los pobres son los
peculiar sigue siendo, sin duda, la valores de la población indígena. De esa cuenta y desde un punto de responsables de su situación por ha-
representación del indígena, que la
A estas concepciones muy criollas vista privilegiado y distante, la socie- ber hecho malas elecciones.
hay que agregar, sin embargo, un dad crea toda suerte de historias sobre A partir de allí, las conclusiones
* Maestro en ciencias sociales por FLACSO-
conjunto de dispositivos ideológicos las personas pobres. Uno de los expe- secundarias salen a la superficie:
Guatemala.