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La familia es la célula básica de la sociedad. Es un sistema en transformación, que
mantiene su continuidad y crecimiento a través de un equilibrio dinámico entre
homeostasis y cambio. Este sistema implica que cada elemento este en su lugar para
desempeñar con eficacia y responsabilidad sus funciones en la vida, cuando esto no
sucede se produce un desorden lo que a su vez genera un sinnúmero de implicancias
sistémicas como los trastornos mentales.
Muchas veces estas implicancias tienen un origen trasngeneracional. Es decir algo que
sucedió a los antepasados de la familia. Como uno de los casos de Anne Ancelin
Schutzenberger, psicoterapeuta transgeneracional. Esta tenía una paciente, una niña
francesa de cuatro años que sufría de pesadillas, ansiedad, delirios de persecución,
etc. En las noches producto de sus pesadillas se despertaba tosiendo gritando y sin
poder respirar; y en especial un día del año, cuando los síntomas se degeneraban mas,
este era el 25 de abril por la noche. Según la historia de Francia, en la primera guerra
mundial, tropas alemanas lanzaron por primera vez gases entre el 22 y 25 abril en
Ypres donde muchos soldados franceses murieron por los gases. Cuando Anne, le
pidió a la madre de la niña que buscara la palabra Ypres en el genograma de la familia,
encontró que un hermano del abuelo fue uno de los soldados muertos por los gases la
noche del 25 de abril de 1915. A continuación Anne le pidió a la niña que dibujara el
monstruo que le perseguía en las pesadillas y, dibujó lo que ella llamaba ³unas gafas
de buceo con una trompa de elefante´. Era una máscara antigás de la primera guerra
mundial, reconocible por cualquiera de nosotros, pero la niña nunca había visto ninguna
máscara y nadie nunca le había hablado de la trágica muerte del tío abuelo por
inhalación de gas mostaza. Los síntomas de la niña desaparecieron luego que hizo el
dibujo.
Bert Hellinger, el creador de las constelaciones familiares, afirma que muchos
trastornos mentales como la neurosis y la psicosis tienen su origen en algo que ocurrió
en el sistema familiar, un desorden originado, en el caso de la neurosis: por un
movimiento amoroso interrumpido a temprana edad. Por ejemplo un niño que es
privado de lactar en sus primeros meses de vida, porque la madre tuvo una infección
mamaria. Narra Hellinger después de una experiencia de constelación familiar: el hijo
siente miedo, y se enoja. Ese enojo es el otro lado del amor. Si no amara, tampoco
podría estar enojado. Se enoja porque necesita tanto a su madre y porque la ama.
Cuando entonces la madre quiere ir hacia el hijo después de la separación, el hijo gira
hacia el otro lado porque está enojado con la madre. De esa manera el movimiento
amoroso continúa interrumpido, no alcanza su objetivo.
Cuando una persona cuyo movimiento amoroso hacia la madre o hacia el padre fue
interrumpido muy tempranamente más adelante quiere ir hacia otras personas, en
especial hacia una pareja, en el cuerpo surge el recuerdo de la interrupción temprana, y
sube el dolor. Entonces, en lugar de que esa persona vaya hacia el otro comienza un
movimiento circular. En aquel punto en el cual podría avanzar, dobla hacia la derecha o
hacia la izquierda y vuelve al mismo punto. Allí surge nuevamente el miedo, vuelve a
girar y vuelve a llegar al mismo punto. Ese movimiento circular caracteriza el
comportamiento neurótico. Por lo tanto la solución para neurosis de ese tipo es que el
movimiento amoroso interrumpido sea llevado a cabo retroactivamente, así termina la
neurosis. Con niños pequeños los padres pueden hacerlo personalmente, si saben
acerca de ello. En ese caso sostienen al hijo amorosamente hasta que la resistencia
cese y el hijo se tranquilice. Los adultos pueden hacerlo en el marco de una terapia si
encuentran un terapeuta o una terapeuta que lo comprende y que sabe hacerlo. En
algunas ocasiones una persona también lo logra por sí sola, cuando internamente
vuelve hacia la situación temprana y como hijo pequeño de ese momento se mueve
hacia la madre o el padre de ese momento hasta que en sus brazos llegue a la meta y
se tranquilice.
En al caso de la psicosis, según Hellinger, estos pacientes asumen las consecuencias
de destinos difíciles y culpas graves de generaciones anteriores. Es decir por lealtad al
sistema asumen estas situaciones o movimientos interrumpidos para que el sistema
recuerda y encuentra lo solución de algo que fue negado y excluido. La depresión, de
igual manera aparece cuando uno de los padres fue excluido. Por ejemplo una mujer
que se casa con hombre tiene una hija. El matrimonio fracasa porque el hombre es un
playboy. Se va a temprana edad de casa, la hija no lo recuerda. La niña crece
escuchando a su mama decirle que ella ha sido padre y madre y solo ella es su familia,
esta le da mucho amor, pero en el fondo se siente vacía, que algo falta y se deprime
constantemente. En la constelación se evidencia que es la exclusión del padre que ha
originado los estados depresivos, cuando este se integra a la familia la depresión
desaparece.
Ya Maslow planteaba la importancia para el ser humano de los conceptos de referencia
y pertenencia, por lo que nada puede ser excluido de un sistema familiar; del mismo
modo Ziegarnick en su famoso efecto que lleva su nombre, define la tendencia de las
personas a recordar tareas inacabadas o interrumpidas con mayor facilidad que las que
han sido completadas, es decir los llamados movimientos interrumpido. Por lo que los
trastornos mentales pueden tener un origen sistémico transgeneracional, en algo que
fue excluido o interrumpido generando un desorden en la familia que es evidenciado y
asumido por alguno de los miembros de esta. No obstante aún se necesita más
investigaciones acerca del tema, y si se comprueba fehacientemente estos argumentos
sistémicos, estaríamos frente a un nuevo paradigma y una nueva ola de la psicología,
la verdadera psicología del Alma.
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