enseñaza básica. Dada la temática de las leyendas en tanto género, es posible abordarlas desde
diferentes ámbitos de incumbencia. Por esta razón, encontrarán actividades que no tienen que
ver sólo con las Prácticas del Lenguaje sino por el contrario, están íntimamente relacionadas
con las áreas de las Ciencias Naturales y las Ciencias Sociales.
Al mismo tiempo, resaltamos la importancia de los tres ejes correspondientes a las
Prácticas del Lenguaje. En primer lugar, resulta un primer paso hacia la formación de
lectores/escritores a través de la Leyenda y sus elementos formales y conceptuales. En
segundo lugar, la búsqueda y selección de información y su consecuente transmisión, hace
hincapié en la incursión de los niños en el mundo de las bibliotecas y otros soportes como
materiales de estudio. En tercer lugar, la Leyenda hace las veces de un inagotable vehículo de
ideas acerca de la tradición, la cultura popular, y el valor que hoy tiene en nuestra sociedad la
conservación de nuestro patrimonio cultural en un mundo globalizado. La puesta en común y
el debate de estas ideas conforman una herramienta indispensable para la actividad en la vida
ciudadana.
Por último y a modo organizativo, hemos separado las actividades en tres momentos, previo
a la lectura – durante la lectura – posterior a la lectura. Creemos que esta organización ayuda a
una mayor profundización conceptual y mejor reorganización global de los contenidos.
Esperamos que les sea de utilidad.
1) Actividad previa a la lectura de los cuentos para ser realizada junto al docente dado
su contenido teórico. Leamos el prólogo para saber algo más acerca de las leyendas.
¡Lobito corazón!
Acechanza maléfica
a) ¿Quién es El Tío?
b) Marquemos la provincia en que se conoce esta leyenda.
c) ¿Qué fue lo que le sucedió al minero?
d) ¿Qué fue lo que le ofreció El Tío a cambio de su alma?
e) El pobre hombre nunca volvió a subir a las minas, abandonó su oficio y se fue a vivir a
la llanura. Identifiquemos en un mapa de la Argentina de qué color aparecen ilustradas
las llanuras, las zonas elevadas como los cerros, sierras y montanas, y por último, los
ríos.
La Picardía
La lluvia de buñuelos