PRECISIONES SOBRE EL CAMBIO CLIMÁTICO
¿Qué es el efecto invernadero?
El efecto invernadero es un fenómeno natural
necesario para la vida en la Tierra, sin él, la
temperatura sería de 18° C bajo cero, no
tendríamos agua en forma líquida, ni habría forma
de vida alguna. El efecto invernadero consiste en la
absorción de parte de la radiación solar que ingresa
a través de la atmósfera y que es reflejada por la
superficie de la Tierra ocasionando que la
temperatura promedio del planeta sea de 15° C y
que la tierra pueda ser un lugar habitable. Esto se
produce por los llamados gases de efecto
invernadero, tales como vapor de agua, dióxido de
carbono y metano (Ver Gráfico 1).
Gráfico 1 El efecto invernadero
¿Qué está causando el cambio climático?
El aumento en un 70% de las emisiones de GEI
desde la era preindustrial a la fecha (1970 – 2004)
por efecto de actividades humanas está causando
un calentamiento del sistema climático el cual se
evidencia a través de los aumentos del promedio
mundial de la temperatura del aire y del océano, el
deshielo de nieves y hielos y el aumento del
promedio mundial del nivel del mar. De acuerdo con
el Panel Intergubernamental de Cambio Climático
(IPCC, por sus siglas en inglés), de los últimos doce
años (1995 – 2006) once figuran entre los más
cálidos en los registros de la temperatura mundial.
El aumento en el nivel del mar coincide con este
calentamiento, así como la disminución de la
superficie de nieve y hielo.
¿Cómo se originan los GEI?
El dióxido de carbono (CO2) se origina por el
consumo de combustibles fósiles para la
producción de energía y la quema de biomasa para
el cambio de uso de suelo. El metano, se produce
por la producción, extracción y manipulación de
combustibles fósiles, algunas actividades
agropecuarias como la quema de residuos
agrícolas, fermentación entérica de ganado y por la
descomposición de residuos sólidos, emanaciones
de botaderos, entre otros.
IMPACTOS Y ADAPTACIÓN DEL CAMBIO
CLIMÁTICO
El Cuarto Informe Evaluación del IPCC (2007), un
grupo que reúne a cerca de tres mil científicos
expertos de todo el mundo, ha establecido que la
concentración de gases de efecto invernadero
(GEI) se ha incrementado como resultado de la
actividad humana desde 1750 y que se seguirá
incrementando entre 25 y 90% hacia año 2030. De
los últimos doce años (1995 – 2006), once figuran
entre los más cálidos. El aumento del nivel del mar,
a un promedio de de 3,1 mm/año desde 1993,
concuerda con este calentamiento.
Algunos de los impactos regionales proyectados
para América Latina (IPCC, 2007) establecen que
hasta mediados del siglo, los aumentos de
temperatura y las correspondientes disminuciones
de la humedad del suelo originarían una sustitución
gradual de los bosques tropicales por las sabanas
en el este de la Amazonía. La vegetación semiárida
se sustituirá paulatinamente por vegetación de
tierras áridas. Podrían experimentarse pérdidas de
diversidad biológica importantes debido a la
extinción de especies animales y vegetales. La
productividad de algunos cultivos importantes se
vería disminuida, afectando también a la actividad
pecuaria, con consecuencias adversas para la
seguridad alimentaria. “En conjunto, aumentaría el
número de personas amenazadas por el hambre”.
Las alteraciones en los patrones de precipitación y
la desaparición de los glaciares afectarían
notablemente a la disponibilidad de agua para
consumo humano, agrícola e hidroeléctrico.
Hay muchas opciones para evitar el mitigar los
efectos y adaptarnos al cambio climático: mejoras
en la eficiencia energética, el uso de recursos
renovables y de bajo consumo de carbón, como la
bioenergía, la energía solar, eólica y geotérmica.
Asimismo, existe la posibilidad de captar y
almacenar CO2. En esto último, los árboles juegan
un papel importante debido a su capacidad de
capturar CO2 al realizar la fotosíntesis. Además,
brindan servicios ambientales como por ejemplo, la
regulación del agua, la disminución de la erosión de
Tabla 1 Ejemplos de adaptación planificada, por sectores
Tomado del Cuarto Reporte de Análisis del IPCC, 2007.
COMPENSACIÓN DE EMISIONES:
NEUTRALIDAD DE CARBONO
La neutralización de emisiones o ser “carbono
neutral” es reducir y/o absorber la misma cantidad
de gases de efecto invernadero (GEI) que se han
emitido al realizar determinada actividad. Dicha
compensación puede realizarse a través del
mercado (comprando “certificados de reducción de
emisiones”, conocidos como “bonos de carbono”) o
directamente, a través de cambios en el
comportamiento (aunque a través de este último
mecanismo es muy complicado lograr la
neutralidad, lo ideal es una estrategia combinada
de ambos mecanismos). Para lograr la
los suelos, y la belleza escénica, entre otros. Para
afrontar este desafío, se hace necesario
implementar medidas de adaptación para reducir
los impactos negativos del cambio climático.
Algunas iniciativas de adaptación que se enmarcan
en iniciativas sectoriales se mencionan en la
siguiente tabla:
compensación se debe incurrir en los siguientes
pasos: (a) realizar un inventario del total de
emisiones de GEI de una persona, institución,
evento, etc., (b) llevar a cabo acciones para reducir
emisiones y/o adquirir bonos de carbono y
finalmente (c) contabilizar y comprobar la cantidad
de emisiones emitidas y las reducidas/absorbidas.
Es importante señalar que ser carbono neutral no
significa que no se generan emisiones, sino que se
realiza un esfuerzo significativo para tomar
conciencia de cuánto emitimos (o “contaminamos”
en términos de GEI) y se realizan acciones que
mitigan el efecto de nuestras propias actividades.
¿QUÉ DEBEMOS HACER ?
Las emisiones también pueden reducirse con cambios en los estilos de vida y el comportamiento.

En la casa • Apague las luces al salir de las habitaciones.

• Reemplace los focos normales por focos ahorradores.
• Planche cuando haya regular ropa acumulada y evite planchar ropa húmeda.
• Cierre el caño al momento de lavarse las manos y cepillarse los dientes.
• Revise siempre las conexiones y/o tuberías de agua de la casa para evitar las fugas.
• No se duche con agua muy caliente. Prefiera las duchas rápidas.
• Apague los aparatos eléctricos cuando no estén en uso y desenchúfelos cuando salga
de viaje.
• Emplee formas más eficientes de cocinar los alimentos. Use ollas a presión,
descongele los alimentos antes de cocinarlos, no abra constantemente la puerta del
horno para evitar la pérdida de calor.
• Almacene siempre el agua caliente que vaya a emplear en recipientes térmicos, en
lugar de calentar continuamente el agua.
• Mantenga la puerta de la refrigeradora cerrada y descongélela periódicamente.
• Prefiera las pilas recargables a las pilas normales. Deposite las pilas gastadas en
lugares de depósito ubicadas en establecimientos comerciales.
• Prefiera los envases de vidrio a los de plástico.
• Prefiera los envases de agua grandes (de 5 litros o cajas de 20 litros) a comprar
muchas pequeñas botellas.
• Prefiera las bolsas de tela a las de plástico al momento de ir al mercado o comprar el
pan. Pida siempre en los supermercados o tiendas la menor cantidad posible de
bolsas (así sean biodegradables).
• Seleccione los residuos sólidos que se generan en el hogar (residuos de cocina,
papel, plástico, vidrios).
• Enseñe a sus hijos el cuidado por la naturaleza.
• Plante un árbol.
En la • Cierre el caño al momento de lavarse las manos y cepillarse los dientes.
oficina • Imprima sólo cuando sea absolutamente necesario y por ambos lados de la hoja.
• Almacene el agua caliente en recipientes térmicos.
• Numere los interruptores de luz, así sabrá exactamente qué foco está prendiendo.
• Utilice focos ahorradores.
• Implemente un sistema de clasificación de residuos sólidos.
• Done los equipos que no va a usar a escuelas u otras organizaciones.
• Apague su monitor (o ponga su lap top en modo “Suspensión”) cuando vaya a
ausentarse de su oficina por más de media hora (por ejemplo a la hora de almuerzo).
En el • Cuando se trate de distancias cortas (menores a 3 km) CAMINE!
transporte • Emplee más la bicicleta como medio de transporte.
• Mantenga su auto en buen estado de funcionamiento.
• Revise la presión de los neumáticos.
• Evite frenar o acelerar bruscamente.
• Reduzca el tiempo que permanece con el carro detenido y encendido.
• Descargue paquetes innecesarios de la maletera.
• Haga “pool” para llevar a sus hijos a la escuela o para asistir al trabajo.
Fuente: Clima de cambios PUCP, ENOSA, US EPA.

PEGUE ESTAS RECOMENDACIONES EN UN LUGAR VISIBLE, PÁSELAS A FAMILIARES, AMIGOS,

COLEGAS...Y LO MÁS IMPORTANTE: ¡LLÉVELOS A LA PRÁCTICA!
Gabriela Fontenla Razzetto
email: gfontenla@care.org.pe