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PERSPECTIVAS DEL MERCADO NACIONAL

E INTERNACIONAL DEL CAFÉ

Lic. Jorge Javier Mora Salas *

La situación tanto del Consejo como del sector cafetalero no tiene muy buenas perspectivas, me da mucha
pena ser el portador de estas noticias; hace escasas 48 hrs. regresamos de las reuniones de la Organiza-
ción Internacional del Café (OIC) en Londres, tuvimos tres sesiones diferentes, la primera con la Asocia-
ción de Países Productores de Café (APPC), donde ya se había diseñado un programa de retención con
todos los productores. Esta retención de carácter unilateral, tenia por objeto poner la balanza horizontal,
porque estaba muy descompensada sobre la oferta y la demanda. Ya estamos entrando en el tercer año de
crisis donde hay más oferta que demanda, debido a muchos factores como la sobreproducción, el gran
crecimiento en ciertos mercados y la incorporación de países productores asiáticos como Vietnam, entre
otros. El crecimiento de estos mercados, y el mayor peso de los países productores asiáticos, es por las
grandes facilidades de crédito que otorgó la banca mundial. Esto inició hace 5 o 6 años con una visión muy
miope de la banca mundial, cuyo objetivo principal es el de reducir la pobreza en el mundo y ellos pensaron
que uno de los sectores sería la producción de café, sin contemplar que iban a distorsionar oferta y deman-
da, calcularon que el crecimiento sería entre un 5 a 12% anual, y solamente ha crecido en un 3%, entonces
con esta situación la Asociación de Países Productores de Café decidió tomar la iniciativa hace un año de
retener parte del aromático.

México no es miembro de esta Asociación porque existe una restricción legal en el Tratado de Libre
Comercio de Norteamérica y no se puede hasta ahora, firmar un convenio internacional que ponga obstá-
culos al libre ejercicio del tratado comercial. Esto sería una retención dictaminada por los gobiernos de los
países para balancear oferta y demanda, de la cual no participamos, sin embargo, nos comprometimos a

* Lic. en Derecho por la UNAM, Maestro en Admon. de Empresas por la Universidad de Otawa Canadá,
Consejero por México en las Ciudades de San Antonio, Texas, Toronto, Canadá y Nueva York, donde fue
también representante y Director de Comercialización del Instituto Mexicano del Café, Presidente Ejecutivo
del Coffe Trading and Consulting Inc. en N.Y., Presidente de la Cámara Mexicana Americana de los Estados
Unidos en el Capìtulo en Nueva York, Presidente Ejecutivo del SautferHoffer Coffe en N.Y., Presidente de
CAFEXA Inc. en N.Y., Es actualmente Presidente Ejecutivo del Consejo Mexicano del Café, entre otras.

"Perspectivas del Mercado nacional e internacional del café."


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trabajar con ellos y hemos logrado una disminución de 75,000 sacos de manera voluntaria por parte del
sector exportador de México.

En el plano mundial se estima una producción de 118 millones de sacos con un consumo de 103, máximo
110 millones de sacos, ante esto y con un tercer año de crisis, los inventarios que existen tanto en países
consumidores como productores, se traducen en un acarreo de 19 a 15 millones de sacos extras, además
de una sobreproducción, por lo que el problema de precios que existe en la bolsa de Nueva York, no es
un problema con posibilidades de corregirse a corto y mediano plazo, y eso ubica a todos los países
productores serios en una situación muy dificil, por eso es que la Asociación de Países Productores de
Café diseñó un programa de retención que se ha llevado a la práctica. Se han retenido alrededor de siete
millones de sacos de todos los países participantes, pero no existe un mecanismo que se pueda usar para
castigar a los países que no cumplan, por lo que en la reunión efectuada en Londres, Inglaterra el 14 de
mayo, se revisaron todas las cifras y se les dio una oportunidad a los países que no han cumplido con sus
cuotas de retención a que lo hicieran. Brasil diseñador de esto, así como el mayor país productor miembro
y que controla la Asociación, recientemente cambió a su Subsecretario de Agricultura y trae ideas diferen-
tes a un programa de retención, porque no se han afectado los precios en la bolsa de Nueva York que era
el objeto principal, entonces si se quita ese programa, obviamente los precios estarán más deteriorados de
lo que ya están. Este es básicamente el escenario que está funcionando en la actualidad, por lo que las
perspectivas no son muy buenas.

Hay varias soluciones, después de la Asociación de Países Productores, se procedió a hacer una Confe-
rencia Mundial de Café, organizada en Londres por la Asociación de Productores de Colombia y apoyada
por la Organización Internacional de Café (OIC), donde participaron cerca de 800 personas entre
divulgadores y patrocinadores, para analizar las diversas opciones y alternativas. Se consideró que hay
mercados cautivos importantes como es China y Rusia, que ellos llaman países emergentes y presentan un
potencial de consumo muy atractivo, obviamente las empresas trasnacionales como Nestlé, StarBooks y
varias europeas también han manifestado su interés en estos países, promoviendo sus productos activa-
mente y han logrado duplicar el consumo. Sin embargo, el caso de China es especial pues hay 1,600
millones de habitantes y sólo consumen 400 mil sacos que más o menos representa el 10% de lo que
México produce, realmente doblar ese consumo no significa mucho en el plano mundial, aunque el esfuer-
zo se reconoce. Durante esta conferencia descubrimos algunas cifras, el negocio mundial de café represen-
ta aproximadamente 55 millones de dólares, y el ingreso a los productores es de sólo 5 millones de
dólares.

El mensaje que nos están enviando es que el grueso de la utilidad del café, que es el producto que nos
ocupa, no está en la producción sino en la comercialización y es ahí donde las empresas grandes no se
quejan, no se escucha lamento alguno de que el precio está muy bajo, están disfrutando de estos márgenes
de utilidad muy buenos, justificadamente devengados, ya que ellos son los que han hecho las campañas
que se hacen en China, en Rusia, transforman el producto, lo distribuyen, dan créditos, financiamientos,
tienen campañas de publicidad, de promoción. Se han preocupado por el producto del café, valga como
ejemplo la empresa Starbooks, que tiene alrededor de diez mil cafeterías en el mundo, se han preocupado
por darle una imagen al café, diferente a la que se le venía dando. Son quienes han diseñado el café
capuchino, prafelatte con leche, mezclados, expresos, etc. Se preocupan por diseñar las máquinas que los
hagan, lo han vendido con un carácter de mercadotecnia con un valor agregado, es decir han generado los

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elementos para el gran margen de utilidad. En cambio los productores, no se han dedicado a esta tarea,
que puede ser una de las grandes soluciones en la problemática del café.

Dentro de las exposiciones Costa de Marfil manifestaba que el ingreso y su balanza comercial dependen en
un 40% de la venta de café, y se ha venido deteriorando, además son productores de robusta y su precio
anda por los 27 – 28 centavos de dólar la libra, por lo que en estos países que dependen de dos o más
productos, la caída ha sido brutal. Se ha compensado un poco con el cacao porque su precio se ha
recuperado. En cambio en nuestro país no es así, su importancia económica en el total, es mínima, enton-
ces la afectación real se da en el aspecto social, preocupación que el Consejo Mexicano del Café hace
suya, ya que afecta a más de tres millones de personas que dependen y trabajan dentro de la producción
de café. La descripción monográfica de nuestro país es que tenemos 750 mil hectáreas sembradas con
café, la gran mayoría de productores tienen menos de 2 hectáreas, más o menos un 70% son pequeños
productores y el resto son medianos y grandes productores, entendiéndose como grandes productores
aquellos que tienen más de 50 hectáreas, por lo que tenemos 280 mil productores que sumados a los que
participan en otras actividades como jornaleros, transformadores, acarreadores, etc. calculamos tres mi-
llones de gentes que dependen de este producto. Entonces cuando vemos otros países como Costa de
Marfil, que tiene una dependencia tan grande del café y que también ellos abandonaron a sus instituciones
que controlaban el café, en virtud de la globalización como lo hicimos nosotros cuando se abandonó la
imagen del Instituto Mexicano del Café, que tenía un mecanismo sensacional, de primer mundo, se deja al
productor a las fuerzas libres del mercado, como estamos actualmente. Pero al desaparecer estas institu-
ciones en todo el mundo, permiten a las transnacionales el deterioro del mercado, y permitan a los países
productores aumentar su producción en forma desordenada. Entonces las perspectivas a nivel mundial no
son muy buenas, se calcula que en dos tres años los precios van a continuar, si no en declive, en estado
depresivo como están en este momento, y eso no nos va a permitir funcionar muy bien. El sector cafetalero
está operando alrededor de un 20, 30%, ya que el costo de producción es de 70, 80 centavos de dólar
por libra y los mercados andan en 59 centavos acorde con Londres hoy en la mañana, por lo que se está
operando por abajo del costo de producción, y por consiguiente surge la pregunta ¿cuánto tiempo pode-
mos operar?. Afortunadamente los pequeños productores si lo pueden hacer, ya que son los dueños de sus
fincas, su destino, sin embargo las opciones que tienen son mínimas, porque el costo de producción que
tienen es su trabajo, es su sudor de mantener sus cultivos produciendo, eso garantiza que se va a poder
sobrevivir la crisis. En cambio los grandes finqueros, si tienen problemas porque se tienen que financiar
para pagar sus jornales, y no va a haber financiamiento ni banco que les preste cuando el costo de
producción es más alto que el de venta. Con esa ecuación económica a los grandes productores de café se
les presenta un panorama muy dificil, además de que ya traen carteras vencidas, el crédito está restringido,
por eso hay que buscar algunas fórmulas, que nos permitan hacer un puente por unos cinco años.

La junta del Consejo de la OIC, de la cual México es miembro, es una organización bilateral por la
participación de países productores y consumidores. Dentro de los países consumidores se encuentran
Estados Unidos y Canadá que se retiraron en 1989, cuando se acabaron las cláusulas del acuerdo interna-
cional donde se establecían cuotas de exportación. Desaparece ese acuerdo porque los republicanos
arribaron al gobierno de los Estados Unidos con la filosofía de globalización; entonces se deshace el
acuerdo internacional y se deja a las fuerzas del libre comercio, que ocasiona un desbalance total en la
oferta y la demanda. México viene participando en un grupo pequeño, porque la fórmula para poder salvar
esta situación es una mayor participación en la comercialización de nuestro producto y darle calidad. Café

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hay por todo el mundo, hay más oferta que demanda, pero de buen café existe poca oferta. Desde hace
unos ocho o diez años en los Estados Unidos, está presente una asociación llamada Speciality Coffe, que
se dedica a manejar puro café gourmet, y ha desarrollado los conceptos de cafeterías, de Starbrooks, es
decir, de máquinas, de cafés especializados, etc. Han desarrollado toda la mercadotecnia y les ha ido muy
bien en la comercialización. México necesita asimilar un concepto de comercialización y calidad. Basados
en esto, el Consejo Mexicano del Café hizo una propuesta para realizar en los estados un retiro del café de
baja calidad; este concepto fue apoyado sorpresivamente por Colombia, que tiene graves problemas en la
comercialización, y por Costa Rica, Nicaragua, El Salvador y Guatemala aunque este último está indeciso,
ya que no tiene problemas de calidad, tiene buen café, sin embargo están a punto de entrar por la vecindad
y han firmado una carta de intención.

Con este concepto en mente en la reunión de la APPC, se le invitó a Brasil a que se sumara al mismo, sin
embargo manifestaron su intención de continuar con la retención, pero que no se oponían y que se suma-
rían al pequeño grupo para nivelar la balanza en un futuro. Brasil produce alrededor de 35, 40 millones de
sacos, con un consumo interno de 13 a 15 millones de sacos, una gran diferencia con otros países. Si
logramos que Brasil y otros países productores se unan a este concepto, a lo mejor con un 5% de reten-
ción y destrucción o retiro de café, logramos balancear la oferta y la demanda, con este concepto de
resolución la APPC lo aprobó. Brasil dijo que era muy posible unirse en esta resolución, porque ellos
quieren calidad, porque se están dando cuenta que los cafés baratos que vienen de esos países que están
desarrollando sus nuevas cafeticulturas son de mala calidad, son cafés de 20 centavos de dólar la libra. Eso
está afectando el gusto y el consumo del café.

La Organización Internacional del Café en su sesión anual hace un análisis de programas de promoción,
producción, administración, etcétera y al final aprobó la resolución del programa de retiro de café. Se trata
de sacar el café más barato que existe en cada país productor, y se deposite para que se le den otros usos
alternos. En Guatemala hay una tecnología que lo usa como combustible sustituto para las cementeras, en
Colombia lo hacen abono por medio de una bacteria, y ese abono se vende caro y se vuelve a reutilizar en
los cultivos de café, o sea que hay consumo alterno para los cultivos de café pero no va al consumo
humano, lo que permitiría balancear la oferta y la demanda. Se aprobó una retención del 5% inicial por
aquellos países que se empiecen a incorporar a este grupo de seis, y lo mejor de todo es que esto nos
permite, si llegamos a la perfección, a que tengamos un mecanismo de control de oferta, como lo hace la
OPEP. Si podemos perfeccionar este mecanismo a nivel mundial dentro del foro de la OIC, con la partici-
pación de los países consumidores vamos a tener un mecanismo de control de oferta y demanda que nos
va a permitir medir cuánto café se puede retener, cuánto producir, y a reflejar precios justos, que cuando
menos cubran los gastos de nuestro producto. Esta posición fue un gran triunfo porque nunca pensamos
que se pudieran conciliar los intereses de productores con consumidores, normalmente son fuerzas encon-
tradas, y con antecedentes de largas reuniones sin llegar a acuerdos, esto se logró en cuatro días.

La segunda fase es ver cómo se va a instrumentar el mecanismo señalado, para lo cual se programó una
reunión en septiembre con el propósito de empezar a dictar las reglas y supervisarlo. Se estima un año una
vez superado el burocratismo internacional, para tener un mecanismo que regule la oferta y demanda, y
obligatorio para los países miembros. Cuando existían cuotas se manejaba por medio de timbres, de
permisos de exportación, los países miembros los regulaban, la organización llevaba un control y se expor-
taban a países miembros y no miembros y había un balance de mercado.

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El problema que se ve en esta etapa inicial, es convencer a Estados Unidos y Canadá que se unan a este
esquema de la Organización, ya se han hecho intentos en una reunión de presidentes Centroamericanos en
Québec. En Canadá hubo un manifiesto de todos los países productores de café de América, urgiendo a
Estados Unidos y Canadá, para que volvieran a ser miembros de la OIC, y se está haciendo cabildeo por
medio de la Secretaría de Agricultura, la Embajada, etcétera. La nota mala es que Vietnam no se apareció
en la reunión, y es el país que ha venido a distorsionar la oferta, porque aumentó su producción de 500 mil
sacos de la posguerra, a 15 millones actualmente, entonces son los principales culpables con apoyo del
gobierno francés, del banco mundial y de los organismos financieros internacionales, que han causado este
desbalance en el mercado, pero los vietnamitas están muy reacios a querer entender que están haciendo
daño a todo el mundo y se están dañando ellos mismos, e inclusive se maneja la noticia de que van a ser
retirados los impuestos al manejo de tierras dedicadas al café y al arroz en Vietnam, así como mandar 60
mil toneladas adicionales al mercado, que estaban reteniendo. Cabe señalar que estaban reteniendo canti-
dades mínimas y no quieren ajustar sus porcentajes, el programa de retención es de un 20% de la capaci-
dad exportable que son 12 millones, y sólo retienen alrededor de 800 mil sacos, en lugar de los 2 millones
y fracción que les corresponde; creo que si ponemos en orden a los demás, con las fuerzas internacionales,
las políticas y el cabildeo se lograrían cambios; vamos por buen camino, aunque es largo y dificil.

Quiero comentarles lo que estamos haciendo en el Consejo y mi visión de cómo salvar esta crisis. Cuando
me invitaron a participar en el Consejo tenía intenciones de establecer programas de comercialización muy
fuertes, muy agresivos, pero la visión me ha cambiado totalmente, por dos conceptos.

El primero es que nuestro consumo interno es muy malo, está la India con 1,000 millones de habitantes,
consumen en promedio alrededor de 50 gramos de café, a pesar de producir otros productos como el té,
mientras que nosotros tenemos 100 millones de habitantes y consumimos 700 gramos por persona al año;
Costa Rica anda por 3.5 kilogramos por persona, Brasil en 2.5 kilogramos por persona, Colombia en 3.0,
El Salvador en 2.0 y Honduras en 1.5 kilogramos por persona. Total que dentro de lo que se considera
países emergentes de consumo, México tiene el consumo más bajo, a pesar de ser un país productor y
creo que por el consumo nos conviene salir. Hay que promover muy fuerte, aumentar el consumo interno.
Los precios de café en un supermercado están alrededor de 30, 40 pesos kilogramo el más barato; hay
hasta de 90 pesos. Considerando que el precio es de 30 pesos el kilogramo, eso nos da convertido en
precio por libra café verde de exportación de 1.20 dólares y la bolsa en Nueva York nos marca un precio
de 59 centavos de dólar por libra, entonces si aprovechamos el consumo interno y comercializamos bien
nuestro café en México, podemos quitarnos la dependencia de la exportación de café que ahorita está en
85 a 15%. Si logramos aumentar nuestro consumo de café o a doblarlo, vamos a tener una relación 50-
50%, lo que pasa es que para aumentar y cambiar la cultura del consumo del café es muy dificil. Tenemos
muchos tabúes, por ejemplo el consumo de refresco, que nos significa un costo de cuatro veces compara-
do con una taza de café. El agua cuesta más que una taza de café, y eso es una señal más de que estas
empresas han sabido comercializar su producto, y esto nos dice que no hemos sabido comercializar nues-
tro café internamente.

Les voy a explicar lo que estamos haciendo en nuestro programa de comercialización (esquema 1), este
programa se presenta a la Secretaría, donde el Consejo será el facilitador, que no el comprador, que les va
a dar todos los mecanismos para que puedan comprar su café. El café llega a una bodega donde va a haber
certificadores de calidad para el café por parte del Consejo, y van a ser concesionadas a los industriales,

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DIAGRAMA DE FLUJO PROGRAMA DE COMERCIALIZACIÓN

APOYOS DEL GOBIERNO


CAFÉ ORO 1
PRODUCTOR BODEGA VIA SAGAR
CONSEJO MEXICANO DEL CAFÉ
EXPORTADOR MECANISMO DE APOYO
% DE RECUPERACION
3 ALMACENADORAS DEL ESTADO FONDO CAFÉ
LOCAL 125
CERTIFICACIÓN CMC 2 20
$ 20%

C
$ 80% M 120
K C 15

TRANSPORTE
5 O A
TI

SEGURO
GARANTIA
A
N CANCELA 6
10
115
R
A

PRECIO EN B OLSA $USD


G 4
5 110

BANCO % APOYO

100
SG 0

10 BODEGA NO CUMPLE CALIDAD


50 75

BROWNSVILLE
3 7
CERTIFICADA 100 65

8 CERTIFICADO
DE CALIDAD
OK FIMAT
FUTUROS VENTA REMATE
9 SG $ 80%
ID LOTE

semi-industriales que van transformar la cereza y el pergamino, en un café de exportación de alta calidad.
Hasta ahí el costo sería totalmente de los productores. Ya certificado, podemos solicitar a una institución
financiera un anticipo para pagarle al productor con la garantía del Consejo Mexicano el 80%, y en este
momento se fija el precio en bolsa, a través de una correduría, pero el café puede estar en Tapachula,
entonces lo vamos a facilitar para que se vaya alguna bodega certificada de Bronsville, y en este momento
es el problema, ya que aunque les hemos pedido a las autoridades de la Bolsa de Nueva York que nos
autoricen certificar Café en Bronsville, se va a llevar tiempo, las reglas que tienen son muy estrictas, esta-
mos viendo que este programa se puede tardar de 8 a 14 meses por las reglas internas que tienen, pero en
sustitución de esto, lo que estamos haciendo es buscar contratos de calidad con grandes compradores,
con grandes consumidores para que los surta el productor con la certificación del Consejo, estos contratos
tienen que ser muy abiertos, porque no podemos hacer compromisos con los productores.

Siguiendo con el esquema, una vez certificado en Bronsville, se entrega el café a la bolsa de Nueva York,
se cierra la posición, se le manda el certificado a la casa de futuros, la casa de futuros ya financió el 80%
por medio de su banco, ya tiene el certificado que ya le da la propiedad del café en la bolsa de Nueva
York y entonces ya puede pagarle el 20% al productor, le da la orden y el banco le paga el restante que ya
se había fijado. En caso de que el lote no cumpla con la certificación de Nueva York, entonces ese café se
pasa a un remate inmediato que se hará con compradores que no compran café certificado, y lo único que

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se va a buscar es liquidar el 80% que se le había financiado al productor. Esto nos manda una señal,
diciéndonos que el certificador que se tiene en Tapachula o en Oatuxco, no está funcionando, esa identifi-
cación es inmediata porque el período de transporte de esta bodega a la de Bronsville no es más de cuatro
días, entonces nos permite detectar la falla y se puede corregir. Los certificadores van a ser entrenados por
el Consejo, y hay compañías certificadoras que nos van a dar fianza para hacerlo y al productor tramposo
no se le vuelve a recibir café. Con estas acciones estamos incrementando la calidad. Ahora, dónde entra el
apoyo del gobierno federal; depende de una escala de precios, puede desde luego asumir algunos de los
gastos tanto de la certificación, del transporte, del seguro, para que el precio que reciban los productores
sea el 100% del de la bolsa. Con ello lo que buscamos es evitar el intermediarismo que existe en el sector,
y con este programa se evitarían los diferenciales tan grandes y los castigos que se habían puesto el año
pasado, que llegaron a ser del 25% por debajo del precio de bolsa, entregado en Laredo.

Tenemos otros programas, como el del censo que esta haciendo el Consejo, precisamente para identificar
todo lo que tenemos en la cafeticultura. El último censo data de 1992, las cifras de 700 mil productores es
de ese año y las hectáreas cultivadas también. Ha habido más cambios en la estructura del sector, hay más
producción, menos hectáreas, en fin, con el programa del censo que es un programa muy avanzado,
estamos contactando con el INEGI, el CEA, ASERCA, etcétera, y lo que buscamos saber es cuánto,
dónde y cómo lo producimos. Tenemos muchas zonas productoras de café que están abajo de 600 metros
de altura sobre el nivel del mar, siendo que genéticamente no es un café que da una buena taza, es café de
baja calidad independientemente de la técnica o cultivo que estemos aplicando, ya que esta altura tiene que
ver con la bioquímica y genética del café, por eso le llamamos café de altura. En Guatemala por ejemplo
están arriba de 2,300 metros, la situación ideal es arriba de 700 metros hasta los 1,800 metros es la franja
ideal para el cultivo, aunque se da en lugares mucho más altos. En Jamaica el famoso café blue mountain
llega hasta los 3,200 metros sobre el nivel del mar, por las condiciones climatológicas del lugar.

Con respecto al fomento del consumo del café, ya obtuvimos un apoyo de Alianza para el Campo, para
hacer promoción, se está mandando un mensaje a los 12 estados productores de café de la república, para
que promuevan entre sus productores que tienen que incorporarse a la cadena de valor agregado que se
le da al café, con el propósito de tener una mejor retribución por su producto y participar más activamente
en la venta de café en el país. Los accesos a recursos son limitados, sin embargo hay campañas de
televisión y espectaculares promoviendo el consumo del café genérico, no de marca específica, esto nos
puede dar un resultado magnífico a corto plazo.

En lo referente a informática, el Consejo Mexicano del Café tiene una página de Internet, que ya está muy
desarrollada, cuenta con los doce estados productores de café, las estadísticas de producción de cada
estado, direcciones y nombres de los ejecutivos de cada estado, tendencias del mercado, precios en línea
del comportamiento en la bolsa, tendencias estadísticas. Además todo lo que es el programa de café,
recetas, direcciones de industriales que promueven sus productos, bolsa de trabajo y vínculos con diversas
organizaciones. Otra de las funciones que se harán vía la informática, es la subasta de cafés que no tienen
acceso a los mercados y que tienen una excelente calidad, y con conexiones con otras instituciones se
subastarán lotes específicos de café que no tienen nada que ver con el mercado. Por ejemplo el café blue
mountain se vende a 60 dólares la libra, y el desmanche, la resaca o el café de desecho en el aeropuerto
de Jamaica de vende en 20 dólares la libra, mientras que aquí café bueno se vende a 90 pesos el kilogra-
mo. Entonces con este sistema de la página trataremos precisamente de darle un mecanismo a los puntos

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de muy buena calidad que van muy por encima de café certificable en las bolsas de Nueva York y que
tengan acceso a estos mercados, todo en forma gratuita.

El fondo cafetero es un fondo que se está planteando instituir con el objeto de promover mecanismos
financieros y de administración de riesgos que permitan enfrentar la crisis de precios, evitando con ello la
descapitalización del sector. Es muy similar al existente en Colombia, que serviría para las crisis como la
actual; es una política que se venía impulsando desde el año pasado, pero no se va a incrementar en este
año, ya que sería un impuesto sobre la exportación del café, una aportación de los mismos productores a
este fondo, pero con la crisis de precio que no se había visto en los últimos 35, o 40 años, este fondo se
tiene como un recurso, pero no se va a activar hasta que los precios internacionales no nos den fuerza. En
Colombia opera cuando los precios bajan, la Federación garantiza un precio tope mínimo, y siguen pagan-
do al productor el costo de producción que son 80 centavos de dólar la libra, para no deteriorar y no
perder mercado. Para darnos una idea de la crisis, México ha perdido alrededor de un 26 % de participa-
ción en los mercados de Estadios Unidos y en los de exportación en general. Nuestra cosecha se redujo en
un 41% hasta hoy. Afortunadamente la cosecha se espera que salga por encima de los 5 millones, siendo
cifras estimadas, con un consumo de 1.3 millones de sacos, quedando de 3 a 3.5 millones de exportación,
y eso es lo que queremos bajar con las ferias, campañas y promociones.

Es conveniente tener una participación más activa en los organismos internacionales, estamos tratando de
participar en toda feria y exposición del sector, incluyendo otras ajenas. Se están realizando acciones para
facilitar financiamiento a aquellas empresas que quieran participar en ellas. Con el Banco de Comercio
Exterior se está en pláticas para que faciliten los fondos que disponen para participar en ferias internacio-
nales, con el objeto de aumentar el consumo interno, la participación y la calidad del producto.

Las normas de calidad de café se actualizaran en sus distintos grados de transformación y presentaciones
para posicionar a México como productor de café de excelencia, en virtud de que se va a exportar.
Podremos imponer normas de calidad muy fuertes, tanto para la torrefacción interna como para la expor-
tación. Esto encaja muy directamente con los programas de la OIC: se contempla el retiro de un 5% de
café de baja calidad, para lo que requerimos tener nuestra norma muy desarrollada, ya se esta actualizan-
do, para llenar estos nuevos tipos de café, algunos de los contratos que estamos buscando con empresas
muy grandes se refieren a este tipo, siendo que bajo la conducción del Consejo los productores ofrecerán
calidades que puedan demandar un premio, sin que el Consejo intervenga como intermediario en este tipo
de comercialización.

Estamos estableciendo una comisión de arbitraje. En todos los países tienen sus reglas internas para los
contratos de café, existiendo ese vacío en el nuestro, y se tiene que recurrir a diversos tribunales e instan-
cias, con el problema de que si es por calidad o por desconocimiento del juez, la situación que lleva
demasiado tiempo definir, sin existir la norma vigente de los contratos de café; por esto la comisión de
arbitraje deberá determinar claramente las especificaciones, y los participantes del mercado deberán so-
meterse voluntariamente, existiendo los formatos muy claros y de fácil interpretación para el sistema jurídi-
co y muy fácil de dirimir. Existirían las cláusulas de adhesión a los que se somete el contrato para dirimir las
diferencias.

Resumen de la conferencia presentada el día 29 de mayo del 2001 en el auditorio del Centro Cultural Isidro Fabela
en la ciudad de México.

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