CURSO DE INICIACIÓN A LA REPRESENTACIÓN GRÁFICA DE MATERIALES

ARQUEOLÓGICOS

Hasta la introducción de la cámara fotográfica en 1840, la única manera de

mostrar el curso de los trabajos científicos, y ofrecer gráficamente el resultado de los
análisis que el estudio de cualquier disciplina requería, sólo era posible mediante el
dibujo. Esto era mucho más evidente en la investigación arqueológica, donde el dibujo
de los objetos hallados se convertía en la herramienta básica para reflejar las
características diferenciales de cada uno de ellos, a fin de establecer semejanzas y
diferencias, modas y cambios tecnológicos, evoluciones y desarrollos que permitieran
crear tablas tipológicas como vía para el conocimiento de la historia de las
civilizaciones.

Ahora bien, cabe preguntarse si hoy en día, muy avanzada la disciplina

arqueológica que busca el conocimiento del pasado más allá del mero análisis
artefactual, con las tecnologías fotográficas tremendamente avanzadas, en la era de
las imágenes digitales y la manipulación informática de estas, aún tiene sentido el
conocimiento de las técnicas básicas del dibujo arqueológico. Nuestra opinión es que
sigue siendo necesario el manejo de tales técnicas en el desarrollo de cualquier
investigación arqueológica.

El sentido de la representación dibujada de los materiales arqueológicos, más

allá de la fotografía, reside en que la primera muestra sencillamente lo que es la pieza,
mientras que en el dibujo podemos representar lo que conocemos de la pieza
arqueológica. Dicho algo más extensamente; la imagen fotográfica es una
representación óptica, sujeta a las condiciones externas de luz y sombras, sometida a
las posibles deformaciones de los juegos de lentes, sin matices, en presentación
frontal y sin posibilidad de ofrecer a la vista algunos detalles por su tamaño o porque
queden ocultos por otro elemento de la pieza. Tales inconvenientes solamente podrían
solventarse con varias series fotográficas del mismo objeto. Por su parte, la
representación dibujada permite, mediante la utilización de sencillas convenciones y
técnicas, mostrar en una sola imagen todo aquello que pueda resultar interesante
destacar al investigador, haciéndolo evidente en un golpe de vista. La investigación
científica en general, y particularmente en las ciencias humanas, es interpretación y el
dibujo se ofrece una vez más como herramienta indispensable de ella.

A este fin se ha desarrollado este curso, para que el alumno pueda manejar con
soltura las técnicas de representación grafica de la amplia variedad de materiales
arqueológicos que a lo largo de su carrera pueda encontrar e, igualmente, conozca las
convenciones generalmente aceptadas a las que están sujetas los dibujos de
materiales, tanto en su fase de borrador como en la publicación final de los mismos.

El curso incidirá en una serie de puntos. En primer lugar, el dibujo como

sistema de documentación arqueológico; seguidamente el conocimiento y manejo de
las herramientas básicas del dibujo arqueológico, y posteriormente se comentarán las
convenciones y pautas utilizadas en la representación gráfica de materiales. En un
segundo bloque de sentido más práctico se enseñarán las normas generales de
orientación de las piezas, construcción de un eje de simetría, delineación del perfil y la
sección del objeto y la representación de su volumen y de sus posibles decoraciones.

En el caso de los objetos cerámicos abarcaría la orientación de la pieza respecto

del plano de proyección, reconstrucción del diámetro, sección y corte del contorno de
la pieza, vista exterior y perfil, restitución de los vacíos, cambios de orientación de
curvatura, representación de aristas vivas, roturas y deformaciones involuntarias y,
finalmente, representación de decoraciones, detalles menores y deformaciones
voluntarias de la pieza.

Para la industria lítica, se englobarían las diferentes maneras de representación

de ejes y la particular orientación de las piezas líticas, vistas principales y secundarias,
truncaduras, roturas, encostramientos y, finalmente, representación de desbastados,
retoques, bulbos, recortes de buril, fracturas térmicas y estados de la superficie
(persistencia del córtex, pátinas,...)

Con otros materiales, esto es, metálicos, óseos, vidrios, etc. , se mostrarían las
distintas formas de orientación, presentación de vistas, secciones y representación de
decoraciones y detalles que le son propios a cada uno.

Finalmente se haría mención del uso de aplicaciones informáticas para la

presentación final de los dibujos en informes, memorias y publicaciones.

El curso se impartiría durante cinco días consecutivos a un grupo de 6 u 8

alumnos, lo que permitiría un mejor aprovechamiento del tiempo de prácticas de
dibujo. Tras esos cinco días, los alumnos serían reemplazados por otro grupo de sus
compañeros del mismo turno, que verían de nuevo todo el temario del curso, con sus
correspondientes prácticas.

Una vez finalizado el curso, los alumnos recibirán un cuestionario de

evaluación en el que puedan plasmar su impresión sobre los contenidos y la
metodología del curso, a fin de que los organizadores puedan mejorarlo en
futuras ediciones. (Anexo 1)

Procesados los datos de las encuestas de los alumnos, el arqueólogo

encargado de la docencia deberá presentar a la Dirección del Curso de
Arqueología de Tiermes un informe que recoja el devenir diario del curso, así
como las incidencias más significativas, si las hubiera. Se espera también que
en dicho informe el docente plasme su valoración de los alumnos, de sus
capacidades, actitudes y aptitudes, interés por la materia, dedicación, etc

Material necesario:

• Papel barba
• Papel vegetal
• Portaminas 0,5 HB ó B1
• Calibre o pie de rey
• Conformador
• Lupa o cuentahílos
• Estilógrafos de 0,2 y 0,4
• Cuchilla o bisturí
• Escuadra y Cartabón
• Pautas de curvas
• Compás
Bibliografía

• Lucile R. Addington. Lithic Illustration. Chicago, 1986

• L. Adkins y R. Adkins. Archaeological Illustration, Cambridge, 1989
• Patrice Arcelin. Normalisation du dessin en ceramoligie. Montpelier, 1979.
• Michel Feugère. Normalisation du dessin en archéologie: Le mobilier non-
céramique. Valbonne, 1980.
• J. P. Daugas. Normalización de las representaciones gráficas en
ceramología.Orleans, 1971.
• A. Guidi. I metodi della recerca archeologica Roma, 1998
• T.R. Hester. Métodos de campo en Arqueología. México, 1988
• Jane McIntosh. Guía práctica de arqueología. Madrid, 1987.
• Steve Roskams. Teoría y práctica de la excavación. Barcelona, 2004.
 ANEXO 1: Evaluación

Evaluación del curso de dibujo de materiales:

Datos Personales (opcional): ___________________________________________________

Lugar de Estudios: ___________________________________________________________

• Valora tus conocimientos previos de la materia:

0 10 ‫ٱ‬9 ‫ٱ‬8 ‫ٱ‬7 ‫ٱ‬6 ‫ٱ‬5 ‫ٱ‬4 ‫ٱ‬3 ‫ٱ‬2 ‫ٱ‬1 ‫ٱ‬
‫ٱ‬
• Tu impresión general del curso:
0 10 ‫ٱ‬9 ‫ٱ‬8 ‫ٱ‬7 ‫ٱ‬6 ‫ٱ‬5 ‫ٱ‬4 ‫ٱ‬3 ‫ٱ‬2 ‫ٱ‬1 ‫ٱ‬
‫ٱ‬
• Danos tu opinión sobre la metodología del curso:
0 10 ‫ٱ‬9 ‫ٱ‬8 ‫ٱ‬7 ‫ٱ‬6 ‫ٱ‬5 ‫ٱ‬4 ‫ٱ‬3 ‫ٱ‬2 ‫ٱ‬1 ‫ٱ‬
‫ٱ‬
• Tu opinión sobre la parte teórica:
0 10 ‫ٱ‬9 ‫ٱ‬8 ‫ٱ‬7 ‫ٱ‬6 ‫ٱ‬5 ‫ٱ‬4 ‫ٱ‬3 ‫ٱ‬2 ‫ٱ‬1 ‫ٱ‬
‫ٱ‬
Comentarios:
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• Dinos qué te ha parecido la parte práctica:

0 10 ‫ٱ‬9 ‫ٱ‬8 ‫ٱ‬7 ‫ٱ‬6 ‫ٱ‬5 ‫ٱ‬4 ‫ٱ‬3 ‫ٱ‬2 ‫ٱ‬1 ‫ٱ‬
‫ٱ‬
Comentarios:
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• Valora tus conocimientos de la materia tras tu paso por el curso:

0 10 ‫ٱ‬9 ‫ٱ‬8 ‫ٱ‬7 ‫ٱ‬6 ‫ٱ‬5 ‫ٱ‬4 ‫ٱ‬3 ‫ٱ‬2 ‫ٱ‬1 ‫ٱ‬
‫ٱ‬
Comentarios:
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• ¿Qué podríamos mejorar del curso?

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