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ENEAGRAMA Y

SISTEMA FLORAL ARCOIRIS


DOS NODOS DE UNA MISMA RED

Autora:
Psic. Carola Bustamante Gallardo

Capítulo escrito para el Libro “Sistema Floral Arcoiris.


Un asombroso camino de crecimiento humano”, de
Dra. Julia Nancy Martínez, Prólogo de Rigoberta Menchú Tum.
(Ediciones B, Santiago de Chile, año 2010)
ENEAGRAMA Y SISTEMA FLORAL ARCOIRIS
Dos nodos de una misma red.

Carola Bustamante Gallardo


Psicóloga – Terapeuta Floral

En este capítulo, aventuramos un vínculo entre dos saberes diferentes y complementarios,


que coinciden en aspectos fundamentales para un proceso terapéutico de calidad: el
conocimiento sobre el Eneagrama y las Esencias Florales del Sistema Arcoiris1. La
intención de este primer acercamiento es dar luz a una parte del tejido que entrelaza
ambos caminos, y visibilizar cómo las Esencias Arcoiris pueden potenciar el trabajo
terapéutico y transformador desde el Eneagrama.

Podemos considerar el Eneagrama2 como un modelo descriptivo de la Personalidad, que


nos permite estudiar determinados aspectos de sus características desde una perspectiva
holística. Sin embargo, el estudio del Eneagrama tiene un potencial mayor que sólo definir
una taxonomía descriptiva de los diferentes Eneatipos3 y de las teorías y conocimientos
que la sustentan. Es principalmente un mapa que guía el camino del autoconocimiento,
facilitando un proceso de transformación personal y espiritual, hacia el despertar de la
conciencia y la conexión con nuestra verdadera Esencia.4

En la siguiente figura, se muestra el símbolo gráfico del Eneagrama y la ubicación de cada


eneatipo:
9

8 1
1.

7 2

6 3

5 4

En el estudio del Eneagrama, como en la mayoría de las disciplinas transpersonales, la


Personalidad es considerada como la degradación de la conciencia y de la vida emocional,
una “máscara” tras la cual se oculta el Ser verdadero. Es “aquello que no es el Ser”, pero
como el adormecimiento de la conciencia es tal, no logramos ver esta limitación que nos
separa de nuestra esencia, somos ciegos a nuestra propia ceguera hasta el punto de
creernos libres.

1
Sistema de Terapia Floral de origen cubano, elaborado por la Dra. Julia Nancy Martínez.
2
Los orígenes del Eneagrama se remontan a unos 4.500 años atrás, en antiguas enseñanzas en Medioriente (Babilonia) y
en órdenes Sufi. La síntesis que se presenta se basa en los postulados de autores contemporáneos como Claudio Naranjo,
Oscar Ichazo y A. H. Almaas, que han recopilado y sistematizado este antiguo conocimiento. Ver Bibliografía.
3
Nueve Tipos de Personalidad o Ego, según el Eneagrama descrito por C. Naranjo.
4
En palabras de C. Naranjo, un proceso de autoconocimiento transformador.
La Personalidad es la forma que desde niñas o niños adoptamos para defender nuestra
vida y bienestar, mediante una suerte de “adaptación” ante la falta de amor incondicional,
de cuidado, de confianza básica, o de atención –aquello que necesitamos en nuestro
proceso de crecimiento. Este mecanismo interfiere con nuestra sabiduría esencial -el
aspecto sano de nuestro Ser-, y se sostiene en el tiempo, automatizando la conducta y las
respuestas ante las situaciones de la vida. Nuestro actuar no es libre ni creativo, pues
usamos respuestas obsoletas de acuerdo a condicionamientos generados en la infancia
temprana (especialmente en los primeros 2 a 4 años), que son “perfeccionados” a medida
que crecemos, y manifestados de maneras diversas de acuerdo a la historia personal.

Un camino para acercarnos a la comprensión de nuestro Ser verdadero, es conocer y


comprender nuestro Ego. La propuesta del Eneagrama como camino de
autoconocimiento, es justamente la de iniciar un proceso donde empecemos a “ver” y a
reconocer nuestros condicionamientos y los rasgos que conforman nuestro ego, mirar “lo
que no somos” para encontrar caminos que nos acerquen y conecten con “aquello que
somos”. Al hacernos más concientes de nuestros patrones condicionados, al ver con más
claridad cómo es la prisión de nuestra alma y pasar por entre los barrotes, nos situamos
en la búsqueda de sintonía con nuestra Esencia, con los Centros Superiores del Ser en
cada eneatipo, donde podemos vivenciar una energía más plena de amor universal.5

Es un viaje hacia nuestra alma y nuestro espíritu, una experiencia expansiva, de despertar
de la conciencia, de apertura del corazón y de conexión con la diosa o el dios que es cada
ser humano. “Cuanto más profunda es nuestra comprensión y experiencia de la Esencia,
reconocemos que no es sólo nuestra esencia, sino la esencia divina de todas las cosas, y
lo único que hay realmente presente”.6

En función de este panorama evolutivo, es posible vislumbrar que el Sistema Floral


Arcoiris, además de ser en sí mismo un Programa de Mejoramiento Humano, es un
recurso complementario y potenciador del proceso de autoconocimiento que propone el
Eneagrama. Existe una gran coherencia entre ambos enfoques, dado que el Sistema
Arcoiris plantea el inicio del proceso de crecimiento personal desde el nivel de la
personalidad, ascendiendo paulatinamente -y de acuerdo a los logros y necesidades que
cada persona muestre durante el proceso- hacia la armonización con el alma (despertar
anímico) y la conexión con cualidades espirituales, que serán puestas en función del
mayor despliegue del potencial humano, en la integralidad y evolución del Ser y la
Humanidad. Y dado que las esencias florales actúan de forma espiritual y energética,
poseen la misma cualidad transpersonal que el trabajo de transformación que propone el
Eneagrama.

Entonces, podemos ver dos niveles continuos en la acción terapéutica de las Esencias
Arcoiris, como también dos niveles continuos en el proceso de autoconocimiento desde el
Eneagrama. Hagamos un paralelo entre ambos:

5
Apuntes de las clases de Claudio Naranjo, en el Programa SAT 1, Santiago de Chile, Octubre de 2001.
6
A.H. Almaas. “Facetas de Unidad. El Eneagrama de las Ideas Santas” La Liebre de Marzo, Barcelona, 2002. (p. 225)
Nivel Eneagrama Sistema Arcoiris
Pasiones (centro emocional inferior) 30 Flores Silvestres
Personalidad
o Ego Fijaciones (centro intelectual inferior) 7 Fórmulas para Chakras

7 Mariposas
Despertar anímico, ayudan al
Esencia Virtudes (centro emocional superior) alma a manifestar las Virtudes.
o Alma
Ideas Divinas (centro intelectual superior) 7 Orquídeas
Cualidades espirituales,
conectan alma y espíritu.

Magnolia
Conciencia expandida,
altruismo y fraternidad.

LOS ENEATIPOS Y LAS ESENCIAS ARCOIRIS

A continuación, presentamos una muy breve descripción de los Eneatipos, tanto a nivel del
Ego como de la Esencia, y sugerimos algunas Esencias Florales Arcoiris que pueden
apoyar y potenciar el proceso de crecimiento y transformación en cada uno.

Tipo 9
Pasión: Pereza
Fijación: Indolencia

Este eneatipo es, en cierto sentido, el más central de todos, pues en el nivel de la
Personalidad corresponde a lo que conocemos como el origen del oscurecimiento de la
conciencia: el Olvido de sí. Y como veremos luego, los demás eneatipos pueden
entenderse como diferentes manifestaciones de este Olvido del Ser.

Prevalece una insensibilización o indolencia, como un "callo en el alma", producto de un


gran sufrimiento. La inercia espiritual y sobreadaptación socioambiental configuran una
estructura de la personalidad que tiende a una escasa conexión con la propia experiencia
(“no verse a sí mismo/a”), un adormecimiento de los propios sentimientos, y una cognición
eclipsada (distractibilidad), que alimenta la falta de interioridad. Suelen ser personas
generosas, abnegadas, dispuestas a soportar una gran carga por el bien de otros, en una
condescendencia excesiva a las demandas de los demás, lo que puede tornarlas
trabajólicas; al mismo tiempo, renuncian a sus propios derechos y autopostergan
resignadamente la satisfacción de sus propias necesidades. Tienden a "fundirse" con los
demás, a dejarse llevar por la corriente en una suerte de simbiosis o confluencia7, en que
viven a través de los otros. Actitud de simplicidad y concretismo en la acción, muchas
veces acompañado de torpeza motora. Dada la inercia que envuelve la conciencia,

7
Mecanismo de defensa descrito por Fritz Perls, en que el sujeto, para ser aceptado o no entrar en conflicto con figuras
importantes, se mimetiza con ellas, debilitando los límites de su Yo para fusionarse al otro.
tienden a resistirse a los cambios, y a sobreadaptarse a las condiciones del entorno, con
una actitud conciliadora que minimiza o evita los conflictos.

Un propósito central del proceso terapéutico para este eneatipo, consiste en propiciar un
movimiento (“sacudón”), una alerta conciente que le permita salir de la inercia y atender la
propia experiencia y necesidad, promoviendo que sus emociones lo movilicen
energéticamente.

En el nivel de la Esencia, la Virtud del 9 es la Acción Esencial, un hacer para la propia


esencia, no un hacer compulsivo o superficial, sino un hacer con sentido: conectado con la
propia necesidad, viéndose a sí mismo/a, atendiendo los deseos propios. La Idea Divina
del 9 es el Amor Divino, y es también la Idea más fundamental, pues las demás Ideas no
pueden establecerse sin ella. Es el corazón de la realidad, su cualidad amorosa y
placentera intrínseca, cuando la contemplamos sin distorsión, sin las dicotomías que
produce el filtro del ego.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

7. AZAHAR: Estimula el desarrollo de la alerta conciente, permitiéndonos despertar del


letargo perezoso de la conciencia. Promueve la claridad ante la confusión mental, y nos
permite concentrarnos mejor, con menos distracción. Reaviva emociones adormecidas y
sentimientos aplanados, y trabaja la torpeza integral de la personalidad. Nos movemos
más armónicamente en el espacio físico, menos tropiezos o caídas.

19. GUAYABA: En sinergia con Azahar, estimula la concentración y la alerta,


disminuyendo la distracción. Despeja la mente y estimula el despertar de la conciencia.

27. PETREA: Ayuda a vencer la resistencia al cambio que se produce por inercia de la
personalidad. Ayuda a comprender que todo esfuerzo merece descanso.

39. ONCIDIUM LURIDUM (Orquídea 2): Ayuda a desarrollar el sentido que nos alerta
sobre la indolencia y la inercia, marcando la diferencia hacia el movimiento y la acción
conciente.

Tipo 6
Pasión: Miedo
Fijación: Duda

Este eneatipo tiene como núcleo central el miedo, aunque no se manifieste en la conducta.
Dudan de sí mismos/as, inseguros de su poder y de sus propias capacidades para encarar
las situaciones; es por esto que con frecuencia muestran una alerta hipervigilante, como
mecanismo de control de los “peligros” –que en general son fantasmas o enemigos
inexistentes-, con lo cual se sienten menos inseguros, pero al mismo tiempo les hace
perder espontaneidad. Desconfían de casi todo, y muestran una ansiedad considerable
que les provoca confusión mental y ambivalencia (un extremo es la crisis de pánico).
Algunos son jerárquicos y obedientes, temerosos de la autoridad, muy regidos por el
“deber ser”, racionales y abstractos. Suelen tornarse autoritarios y severos, testarudos y
obstinados. Con frecuencia creen “tener la razón”. Otros son irritables, tensos y rígidos,
con una dureza bastante hostil. Suelen ser “el Comandante”, que lidera y organiza,
llegando fácilmente al fanatismo idealista. Responde ante el miedo enfrentándose
agresivamente a lo que lo provoca. Y otros típicamente asustados, temerosos y cobardes,
más débiles, tímidos y sumisos, que necesitan que alguien fuerte les proteja. Manifiestan
el miedo que inhibe y paraliza, con excesivo control y cautela ante los riesgos.

Una orientación relevante en la terapia, es ayudarle a recuperar la confianza en sí


mismo/a y en la vida, lo que le permitirá soltar el control compulsivo y la hipervigilancia
sobre los variados aspectos vitales, y desarrollar así su espontaneidad y flexibilidad.

En el nivel de la esencia, la Virtud del 6 es el Coraje, la conexión con el corazón lleno de


amor para aceptar que la vida implica riesgo y que podemos “viajar sin mapa”. La Idea
Divina es la Divina Fuerza y Divina Fe; es la certeza profunda que la Esencia existe en
cada persona, reconociendo que realmente nuestra verdadera naturaleza es de origen
divino. Es un saber en el corazón más que un conocimiento mental, y cuando la fe está
presente, sentimos confianza, seguridad, apoyo, relajación y valor, que nos hace
perseverar y nos da fuerza para seguir adelante en los momentos de adversidad.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son

6 ROMERILLO BLANCO: Ayuda a conectar con el Coraje ante el miedo, a mantener el


equilibrio en situaciones de tensión e incertidumbre. Nos conecta con la seguridad y
confianza en las propias capacidades. Muy útil en el abordaje de las crisis de pánico y las
pesadillas. Ayuda a controlar reacciones agresivas y hostiles.

16. MARILOPE: Nos ayuda a superar las dudas sobre nuestras propias capacidades. Nos
da la libertad interior que nos permite soltar el control represivo.

1. CALISTEGIA: Nos aporta calma y serenidad ante emociones perturbadoras que


producen ansiedad e inquietud.

34. MARIPOSA ROSADA: Nos ayuda a desarrollar confianza y esperanza, apaciguando


el pánico ante situaciones de emergencia.

Tipo 3
Pasión: Vanidad
Fijación: Falsedad

En este eneatipo lo central es la identificación con una autoimagen ideal de sí mismo/a


(autoengaño), máscara construida como respuesta a las expectativas de los demás. Se
ven a sí mismos/as a través de la mirada de los otros, con una gran necesidad de
atención, una “brillantez social plástica” para agradar y seducir a los demás. Buscan el
éxito y temen al fracaso, basando su existencia en sus logros materiales, eficiencia y
estatus social (prestigio). Muestran un alto nivel de competitividad y pragmatismo en la
acción, hasta el extremo de usar a los demás para sus propios fines. Suelen ser
controlados, calculadores y superficiales, mostrándose seguros/as de sí mismos/as,
aunque en realidad desconfían del fluir de la vida y no dejan nada al azar. Falta de
veracidad en relación a sus sentimientos, como si estuvieran todo el tiempo actuando,
simulando, y cambiando según el escenario que se les presenta (“camaleón”). Todo esto
converge en una baja autoestima, desesperanza, y un temor a la soledad ante el vacío
existencial, “no sé quién soy, sólo sé el papel que represento… ¿hay algo más en mí?”.

Un aspecto central en la terapia es la conexión con la propia interioridad, con el temido


vacío existencial, para darse cuenta de la máscara que ha sido construida, y comenzar a
conectar con la autenticidad y la genuina alegría de vivir que viene desde el Ser, sin hacer
esfuerzo alguno.

En el nivel de la Esencia, la Virtud del 3 es la Veracidad, en el sentido de mostrarse como


es, sintiendo lo que le pasa, conociendo su experiencia, sincerándose consigo mismo/a y
conectando con la vida interior más auténtica. La Idea Divina del 3 puede entenderse de
tres maneras interrelacionadas, y por eso tiene tres nombres: Divina Armonía, Divina
Ley y Divina Esperanza; trata del funcionamiento de lo que existe, de la actividad, las
transformaciones, movimientos, procesos; se trata de comprender la unidad de la
existencia, en el universo no existe la separación ni el tiempo, somos una presencia
dinámica que está cambiando continuamente, el flujo de la presencia re-creándose a cada
instante como un campo unificado, que se auto-revela espontáneamente y sin esfuerzo.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

22. DORMIDERA: Nos ayuda a desarmar el autoengaño, las apariencias, reconociendo


los sentimientos genuinos aunque sean angustiosos.

9. MELOCOTONERO: Nos ayuda a mejorar la autoestima, a sanar la herida que nos deja
el vacío de Ser que hay tras la máscara.

3. AGUINALDO LILA: En sinergia con Dormidera y Melocotonero, nos ayuda a


transformar la falsedad y la angustia por el vacío existencial, en alegría y paz interior.

18. CORALILLO: Ayuda a vivir con espontaneidad, con menos apariencias y control.

Tipo 1
Pasión: Ira
Fijación: Perfeccionismo.

Lo que caracteriza a este eneatipo es una actitud perfeccionista y “bien intencionada”, en


una especie de obsesión por corregir “lo que no está bien”: el mundo, la gente, etc.
Dedicados a hacer “lo correcto”, generalmente no reconocen sus impulsos o los niegan,
reaccionando de formas contrarias a éstos. La ira está eclipsada tras el perfeccionismo, y
lo que se ve es el resentimiento, la severidad, la rigidez, la hiper-exigencia, la crítica.
Suelen decir no al placer y a los impulsos, regidos por el “deber ser” y “la pureza”.
Probablemente, de niños/as lucharon por ser perfectos y no cometer errores, con el fin de
obtener afecto y aprobación. Suelen ser vehementes y discutidores, desde un sitial de
superioridad del que tiene “la verdad” sobre cómo debería ser el mundo, imponiendo su
manera de actuar, a veces con desprecio hacia los demás. Conservadores, “moralistas”,
serios, disciplinados, hipercontrolados, formales, detallistas y poco espontáneos (fríos).
Claros en sus razonamientos, intelectualizan para no conectarse con sus emociones y con
sus sensaciones físicas.
Un foco terapéutico relevante consiste en acercarse al disfrute de la vida con todas sus
“imperfecciones”, tratando de hacer cada vez menos juicios sobre cómo es el mundo o las
personas, intentando mirarlas a un mismo nivel y con menos exigencias.

En el nivel de la Esencia, la Virtud del 1 es la Serenidad y la Aceptación, en el sentido de


calma y paz para aceptar la realidad como está siendo ahora, dejar que la vida fluya sin
intervenirla, dándole tiempo para que se transforme y evolucione, viendo la belleza en
todo. La Idea Divina es la Divina Perfección, es la conciencia de que la Realidad es un
proceso que tiene dirección y propósito, y si la experimentamos tal como es -sin
distorsiones, juicios o preferencias-, percibimos su perfección intrínseca, que está bien
como está, está completa, y no hace falta corregir ni agregar nada.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

8. ROSA CHINELLIS: Nos mueve a ablandar el corazón, despejando la obstrucción; nos


permite fluir con mayor flexibilidad mental y física, disminuyendo la rigidez.

30. GENCIANA: Nos ayuda a relajarnos y a aminorar los esfuerzos por manifestar la
perfección.

1. CALISTEGIA: Nos provee calma, serenidad y paciencia.

44. RODRIGUEZIA VENUSTA (Orquídea 7): Ayuda a manifestar el sentido que nos aleja
del perfeccionismo, aprendiendo a dejar fluir los principios más elevados del Ser.

Tipo 7
Pasión: Gula
Fijación: Charlatanería

Un rasgo característico de este eneatipo es la fraudulencia, en el sentido de una máscara


que ha sido planificada estratégicamente, racionalmente, con astucia y oportunismo, cuyo
motivo no es reconocido. La Gula podría traducirse en “más siempre es mejor”: más
experiencias, más proyectos, más y más, pero con poca profundidad. No inhiben sus
impulsos, sino más bien los fundamentan, haciendo que parezcan buenos y nobles, y al
mismo tiempo niegan la culpa (autoindulgencia). Suelen tener un humor alegre,
chispeante, optimista, persuasivo. Hedonistas, saben sortear los obstáculos para el placer,
aparentemente felices y “libres de problemas”. Evita “la cruda realidad”, la frustración y el
dolor, entusiasmándose idealizando un “futuro prometedor”, viviéndolo imaginariamente
con escasa conexión con la realidad terrenal presente. Esto les hace ser personas poco
comprometidas e irresponsables, que saltan de una relación en otra, de un proyecto en
otro, de manera superficial y con poca disciplina. Ágiles y seductores/as a través de su
intelecto y sus palabras (relatos), con gran necesidad de ser escuchadas, pero con poca
capacidad para escuchar a otros y para empatizar. Les cuesta estar solos y mirar a su
interior. Buenos “vendedores de pomadas”.

Un foco inicial en el proceso terapéutico es lograr quietud y silencio, para aprender a


escucharse y escuchar, para conectar con el presente y vivir lo que esté sucediendo
ahora, con una mayor profundidad en la experiencia, aunque sea un tanto dolorosa o
frustrante.
En el nivel de la Esencia, la Virtud del 7 es la Sobriedad, templanza, trabajar con sencillez
para lograr un estado de satisfacción que le permita no estar a merced de los apetitos; ser
más moderado en la búsqueda del placer, y no verlo como la única meta de la vida. La
Idea Divina es la Sabiduría Divina y el Plan Divino; es la conciencia que la Realidad
existe como sucesión de momentos, cada uno de ellos experimentado como “el presente”,
y que sólo en el presente podemos experimentar el constante despliegue del diseño del
Cosmos, la evolución real. No necesitamos crearnos fantasías o planes de cómo vamos a
ser. Si estamos realmente en el presente, no estamos en nuestra mente planificadora, las
cosas son espontáneas, confiamos en que suceden según el Plan Divino.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

20. CONCHITA AZUL: Nos ayuda a desarrollar la capacidad de introspección, de estar en


silencio para escuchar verdaderamente.

17. AROMA: En sinergia con Conchita Azul, nos mueve a aprender a escuchar, y a
desarrollar compromiso con las tareas de la vida.

15. MANGO: Nos ayuda a desarrollar constancia, para terminar lo que empezamos, para ir
de lo superficial a lo profundo

32. MARIPOSA ANARANJADA: Desarrolla la templanza y moderación, para regular los


apetitos y pasiones desmedidas, y aprender a manifestar el silencio oportuno.

Tipo 5
Pasión: Avaricia
Fijación: Distanciamiento

Un rasgo característico es el aislamiento y la retención, especialmente a nivel afectivo, “no


pido para no tener que dar”. Le cuesta entregarse y confiar, “si doy, me puedo quedar sin
nada”. Esto indica una conciencia de la carencia, y una desconfianza en el flujo de la vida.
Muy observadores, testigos “objetivos” o imparciales, generalmente logran que sus
sentimientos y pensamientos no intervengan (desapegados). Hipersensibles e intuitivos,
aunque amortiguan su sensibilidad emocional, aplanando sus sentimientos. Mantienen
pocas relaciones cercanas, disfrutan de su soledad, renunciando al mundo. Viven
austeramente, se autoabastecen, minimizan o niegan sus necesidades, lo que les da una
sensación de autonomía y resguardo de su privacidad. Suelen mostrar indiferencia,
frialdad emocional y vacío, dado el empobrecimiento derivado de vivir “en su mundo
interno”. Son muy sensibles a las expectativas de los demás, experimentan miedo a ser
“tragados” en relaciones “absorbentes”, no permiten ser explotados y muestran
negativismo ante las exigencias o demandas. Silenciosos, introvertidos, tímidos, con gran
dificultad para expresar la rabia. Intelectualidad que sirve para evitar la acción, pensadores
con “hambre de significado”, investigadores, estudiosos; les cuesta concretar sus geniales
ideas en el mundo terrenal y cotidiano.

Un paso terapéutico inicial es aprender a estar en el mundo, sin renunciar a lo material.


Aprender a abrirse al mundo, y en ese proceso, descubrir lo que puede ser recibido sin
exigencias ni condiciones.
En el nivel de la Esencia, la Virtud de 5 es el Desapego y la Generosidad, saber que
somos seres humanos temporalmente, que se está de paso en el mundo, y por tanto se
puede disfrutar de estar en él sin identificarse, sin renunciar y sin apegarse, dejando fluir la
vida. Con esto, no necesita retener los sentimientos, y puede tener la experiencia que al
dar, siempre viene de vuelta. La Idea Divina del 5 es la Divina Omnisciencia y Divina
Transparencia, la conciencia de que cada individuo está íntimamente conectado con todo
el Cosmos, con todo lo que hay; la conciencia que la separación entre los seres no existe,
eso es sólo una trampa de la mente; la comprensión de nuestro lugar como seres
humanos dentro de la Unidad de la existencia, cada uno como una parte inseparable del
todo, sostenidos por la totalidad en la que confiamos y a la que nos entregamos.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

22. DORMIDERA: Nos ayuda a aprender a recibir, a salir del encierro, a no huir de la
realidad. Trabaja la hipersensibilidad.

4. MANI: En sinergia con Dormidera, nos brinda apertura a las relaciones y al mundo.

28. PALMA REAL: Nos brinda el necesario equilibrio dentro-fuera. Nos ayuda a ser
menos tímidos, indiferentes y apáticos.

42. IONOPSIS (Orquídea 5): Desarrolla la capacidad de asombro que transforma la


indiferencia y despierta la conciencia.

Tipo 2
Pasión: Orgullo
Fijación: Adulación

Un rasgo característico es el autoengrandecimiento, a través del cual transforma


inconcientemente su carencia en super-abundancia, pero falsa. Se ve como una persona
feliz, con mucho para dar, creando desbordados estados emocionales que tapan o
reprimen sus necesidades. Tiene gran necesidad de dar, “necesita que lo necesiten”.
Aduladores e histriónicos, usan sus halagos en seducir y manipular para conseguir algo,
en vez de pedir lo que necesitan. Suelen ser personas soberbias y autosuficientes,
ocupando una posición de privilegio, poder y ayuda a otros; hedonistas, caprichosas,
despreocupadas y rebeldes ante cualquier restricción de su libertad, con dificultad para
aceptar responsabilidades, reglas y autoridad. Bajo la aparente abundancia, se esconde
una gran necesidad de amor, de ser amado/a, en que “brilla para ser visto/a”.
Conquistadores/as, buscan la confirmación a través de sentirse irresistibles. Algunos son
invasores y ambiciosos, que insisten y consiguen lo que buscan.

Un foco importante en la terapia es hacer contacto con su carencia, con necesitar algo y
pedirlo sin manipulaciones. Un paso relevante es que “sepan lo que sienten” -en vez de
sólo representar o emocionalizar las situaciones-, y hacer conciente su necesidad.

En el nivel de la Esencia, la Virtud del 2 es la Humildad, simplemente ser lo que es, con
sencillez, sin tratar de probar o de conseguir algo. Humildad no entendida como ser
obediente o servil, sino como ser lo que se es, sin una autoimportancia falsa. La Idea
Divina del 2 es la Voluntad Divina y la Divina Libertad, el darnos cuenta que la Realidad
fluye con cierta fuerza, y que la verdadera libertad consiste en desplazarse con ella, con
esa fuerza que es conciencia viva y presente, pues existe una voluntad unificada en el
funcionamiento total del Universo. Nuestro funcionamiento y nuestros actos humanos son
inseparables del funcionamiento del todo, y están en armonía con ello.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

22. DORMIDERA: Nos mueve a aprender a recibir, a decir lo que necesitamos. Ayuda a
despejar la falsa abundancia, y a despertar la humildad.

26. AMOR SECO: Despeja el autoengaño de la soberbia, que oculta la propia incapacidad
y temor. Nos ayuda a reconocer el valor de la humildad, con sencillez, sin necesidad de
llamar la atención con “brillos”.

31. MARIPOSA BLANCA: Ayuda a desarrollar la modestia, reconociendo plenamente la


propia realidad; así la bondad no se transforma en soberbia.

38. ONCIDIUM LEMONIANUM (Orquídea 1): Ayuda a desarrollar la dignidad necesaria


para reconocer nuestras carencias y limitaciones, y la gratitud en el proceso de recibir.

Tipo 4
Pasión: Envidia
Fijación: Insatisfacción

En este eneatipo vemos por lo general una historia de vida dolorosa, de pérdida, rechazo
o abandono. Así, la persona se queda fijada a un sentimiento de carencia e insatisfacción,
que conduce al ansia por “lo que falta”, una necesidad constante de ser saciado. Ante
esto, está permanentemente demandando, reclamando, quejándose, deseando lo que no
hay o lo que otros tienen, con una frustración que le lleva a autovictimizarse y
autodenigrarse. Suelen ser masoquistas, con predisposición a sufrir, tendencia a
deprimirse y autoimagen pobre. Gran dependencia del amor de los demás, necesitan ser
reconocidos como alguien “especial”. Les cuesta mucho apreciar lo que efectivamente
tienen y conectar con el placer. Muy emocionales y sensibles, se sienten fácilmente
heridos, desamparados, y lloran con facilidad, usando esto para conseguir amor. Culpan a
otros de su necesidad insaciable de amor, “se tiran al suelo para que les recojan”, y si eso
se frustra, reclaman al otro por su falta de apoyo. Suelen ser melancólicos y dramáticos,
tenaces y esforzados, algunos muy arrogantes y competitivos, otros más vergonzosos,
refinados y retraídos.

Un aspecto esencial del proceso terapéutico, es lograr la aceptación y el amor a sí


mismo/a, y la satisfacción con lo que efectivamente hoy tienen. Es fundamental dar pasos
para conseguir el autoapoyo, el aprecio por lo que hay, y la valoración de sus logros.

En el nivel de la Esencia, la Virtud del 4 es la Ecuanimidad y el Contentamiento, una


gratitud por lo que tiene, por lo que la vida le ha dado, con un ánimo equilibrado y
centrado, sin extremos emocionales, incluso frente a las “desgracias” podemos poner
buena cara. La Idea Divina del 4 es el Divino Origen, la conciencia de que todo empieza
o se origina en la divinidad, también los seres humanos hemos nacido de la divinidad, ella
es nuestra fuente y a ella retornaremos. Es la comprensión de que todo lo que puede
percibirse y experimentarse –incluso aquello que es doloroso-, es la manifestación del Ser
en su despliegue y en sus distintas formas. Y que estamos conectados siempre e
inseparablemente con lo divino, pues lo divino no está fuera de nosotros.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

2. CERRAJA: Nos mueve a la aceptación y conformidad con nosotros mismos. Nos ayuda
a trabajar pérdidas y carencias que producen depresión.

25. ESCOBA AMARGA: Trabaja la nostalgia y el pesar por el abandono.

12. ROSA BLANCA: Nos ayuda a disminuir nuestro apego, dependencia y celos.

35. MARIPOSA JASPEADA: Nos ayuda a perdonar nuestro pasado, y a desarrollar la


compasión que nos hace más libres y que nos permite avanzar en el proceso de
crecimiento, comprendiendo que todos vamos en camino, y que algunos van más lejos.

Tipo 8
Pasión: Lujuria
Fijación: Venganza

Este eneatipo se caracteriza por una gran insensibilidad, que le da un aspecto duro,
“bruto”. Es frecuente que en la edad temprana hayan sufrido un gran dolor, al que
sobrevivieron parándose en sus propios pies; tal vez abusados, descuidados o
abandonados por los adultos (mundo hostil). Ante el dolor de su “niño/a herido/a”, se
insensibilizaron, despreciando y negando la debilidad y el miedo. Suelen tener un carácter
fuerte y masculinizado, de acción, rebelde e insumiso, atrevidos y confrontadores, anti-
autoridad. Permanente sed de intensidad, la que habitualmente necesitan para poder
sentir. Impulsivos, desinhibidos y osados. No sienten culpa -porque la niegan-, pero sí
mucha desconfianza y enojo ante el mundo. En eso, pueden convertirse en abusadores y
sádicos castigadores, que hacen justicia por su propia mano, vengándose del mundo con
agresividad. Niegan su necesidad de amor y suprimen la ternura. Evitan la interioridad y el
dolor siendo hedonistas, muy extrovertidos y exhibicionistas.

Generalmente resistentes a acercarse siquiera a un proceso terapéutico. Sin embargo,


cuando lo intentan, un foco especial es recuperar poco a poco la capacidad de sentir y de
perdonar. Para ello, previamente es necesario regenerar la confianza perdida, tanto en las
relaciones como en la visión que tiene del mundo.

En el nivel de la Esencia, la Virtud del 8 es la Inocencia, en el sentido de ver al mundo sin


dobles intenciones, estando en el aquí y ahora, con una visión desprejuiciada al vivir,
como los niños y niñas, que viven el momento espontáneamente, confiadamente. Es como
perder la vergüenza de desenterrar al niño/a ingenuo, renunciando a la dureza. La Idea
Divina del 8 es la Verdad Divina, la conciencia de que el Cosmos existe objetivamente,
más allá de nuestros filtros y prejuicios, lo comprendamos o no. Y que podemos
experimentar la Verdad de la Realidad de un modo más completo cuando vemos cada
momento de un modo fresco, sin preconcepciones sobre lo que debe suceder. Así, los
hechos de nuestra situación adquieren sentido, riqueza y profundidad, puesto que nos
ubican en el ámbito de lo que realmente existe, más allá de la superficie de las cosas.

Algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el proceso terapéutico son:

8. ROSA CHINELLIS: Ablanda el corazón duro, trabaja sentimientos de odio y rencor.

12. ROSA BLANCA: Trabaja la dominación y la posesividad, y el respeto a la libertad del


otro. Desarrolla la pureza de intención y el perdón necesario para alejar la venganza.

28. PALMA REAL: Equilibra el exceso de extroversión, disminuye la arrogancia y el


exhibicionismo.

41. BRONCHOELIA CATLEYA (Orquídea 4): Ayuda a desarrollar el amor por nuestro
“niño/a interno/a” que ha sido herido/a, despertando la ternura hacia todo lo que existe. La
fortaleza manifiesta su grado máximo cuando expresa un acto sublime de ternura.

A modo de cierre…

El aporte que propone este capítulo ha consistido en vincular el conocimiento del


Eneagrama con algunas Esencias Arcoiris que pueden potenciar el trabajo terapéutico de
cada Eneatipo, especificando ejemplos para cada uno. Al terminar esta síntesis, es posible
apreciar que estamos sólo en el inicio de otro gran camino, y que podemos profundizar
mucho más en el tejido que une los saberes ancestrales, poniéndolos a disposición de las
necesidades y desafíos que tenemos hoy como Humanidad.

Bibliografía

1. Martínez, Julia N. (1999), “Sistema Floral Arcoiris de Cuba. Programa de


Mejoramiento Humano”. C. Habana, Cuba.
2. De la Rosa, Gustavo. (2009), “Esencias florales de Bach. Un enfoque
transpersonal”. Edición independiente. Chile.
3. Naranjo, Claudio. (2001) “Carácter y Neurosis, una visión integradora”. Ed. La
Llave, España.
4. Naranjo, Claudio. (1999), “Autoconocimiento Transformador. Los Eneatipos en la
vida, la literatura y la clínica”. Ed. La Llave, España.
5. Almaas, A.H. (2002) “Facetas de Unidad. El Eneagrama de las Ideas Santas”. Ed.
La Liebre de Marzo. España.
CAROLA BUSTAMANTE GALLARDO. Psicóloga (U. de Concepción), Pedagoga Teatral
(PUC) y Terapeuta Floral (UAHC). Realiza relatoría y capacitación en organizaciones y
comunidades, así como estrategias de autocuidado en espacios laborales. Dirige grupos
de autoconocimiento y transformación, generando una metodología que incorpora la
creatividad, el juego y las emociones en una experiencia integradora. Trabaja con mujeres,
jóvenes y adultas, desde una perspectiva humanista y transpersonal, integrando la
espiritualidad en el desarrollo y recuperación de la vida emocional. Se ha formado en los
Programas SAT de Claudio Naranjo en Chile y Argentina, y en Psicodrama y Teatro.
Psicoterapeuta especialista en atención de mujeres, en Viña del Mar y Santiago de Chile
(consulta privada).
Docente en Diplomado en Terapia Floral (UAHC) y en Diplomado en Arte, Plástica y
Terapia, de Espacio Sagrado (www.espaciosagrado.cl).

carolabustamanteg@yahoo.es

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