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1.

Motivación

1.1 Que es la Motivación

“La motivación es la voluntad de ejercer un nivel persistente y alto de esfuerzo


hacia las metas organizacionales, condicionada por la habilidad del esfuerzo de
satisfacer una necesidad individual”
S. P. Robbins

Es complicado encontrar una definición precisa y certera sobre este concepto, sin
embargo existen varios autores que a lo largo del siglo pasado han encontrado la forma
de presentar teorías con respecto de la motivación. Ahora bien, el alcanzar un
entendimiento sobre esto es crucial al momento de relacionarlo con las necesidades
educacionales del los estudiantes modernos, pero para alcanzar esto, debemos
comprender lo que otros han dicho sobre motivación. Es por lo mismo que a
continuación se presentan las más importantes teorías sobre el tema.

En primer lugar tenemos la "Jerarquía de las Necesidades" propuesta por Maslow,


quien identifica en el ser humano cinco niveles de necesidades en una estructura
piramidal, manteniendo las necesidades primarias - llámese el alimentarse o vestirse -
en la base y aquellas de autorrealización - tales como independencia y autoexpresión -
en la cúspide. Además aclara que, para alcanzar los niveles más elevados de esta
pirámide, es necesario satisfacer las necesidades previas, lo cual genera en sí mismo,
una motivación con respecto a la realización de ciertas tareas.

Siguiente es Herzberg, quien propone la "Teoría del Factor Dual". Aunque esta
teoría se concentra más en los ámbitos laborales, él notó que el éxito de las personas en
sus trabajos era atribuido a ellos mismos como elementos intrínsecos a su naturaleza.
Por otra parte, su fracaso siempre era relacionado a causales externas tales como las
condiciones laborales o las relaciones personales. De esto destaca que los factores
motivacionales no son los mismos que los desmotivacionales, siendo los primeros los
inherentes al trabajo en sí y los segundos a las condiciones externas que, si bien pueden
ser satisfechas, no garantizan ninguna motivación.

McClelland por su parte se enfoca en tres tipos de motivación; el logro o impulso de


sobresalir a través de metas elevadas, el poder o necesidad de influir sobre otros, y la
afiliación o el obtener relaciones interpersonales que le permitan formar parte de un
grupo. De acuerdo a esto, se desprende que las personas siempre tratan de conseguir un
espacio social en el que sientan cómodos.

Otra teoría relacionada al ámbito empresarial es la de McGregor, quien propone dos


teorías: por un lado está la "Teoría X" que presume que las personas son flojas y por
ende necesitan ser motivadas por medio del castigo. Por otro lado, la "Teoría Y" hace
hincapié en que el compromiso con los objetivos presume una recompensa, inclinando a
las personas a buscar responsabilidades.

Locke también interviene en este tema proponiendo su "Teoría de Fijación de


Metas", las cuales son por sí mismas una fuente de motivación. Él describe que estas
metas deben ser especificas y desafiantes, pero alcanzables y acompañadas de un
continuo feedback que le permita a la persona potenciar sus logros.

Interesante es también la "Teoría de la Equidad" de Stancey Adams. En esta él


plantea que las personas buscan la equidad con sus pares, y que el mantener ese status
es en sí motivante. Más aún, cuando dicha situación de equidad se desvanece, las
personas se sienten motivadas a recobrarla.
Estas teorías y otras no nombradas señalan ciertos elementos importantes sobre la
realidad de la motivación; esta es intrínseca al ser humano y posee un fuerte enlace
social. La motivación tiene relación con el demostrar aptitudes y el no quedar fuera de
un grupo o por debajo del nivel promedio. Esta tiene su base en la superación social y
en la competición de pares en un mismo plano. He aquí entonces la interpretación
global de la motivación; esta es la herramienta que nos impulsa a alcanzar aquellos
status socio-personales que están por sobre nuestra realidad actual, permitiéndonos
lograr así nuevos niveles de satisfacción cada vez más elevados.

Pero para comprender como funciona el proceso motivacional, hemos de entender


que son las necesidades y los impulsos que requieren y crean la motivación en sí
misma...

1.2El Enfoque Holístico

Nuestro primer supuesto concreta que el ser humano, es un ser integro y organizado.
Se debe considerar este supuesto experimental y teórico para poder realizar una teoría y
lograr una experimentación valida sobre la motivación. Un ejemplo consiste en que el
individuo en sí está motivado, y no solamente una parte de él. Según el ejemplo de
Maslow (1991) “Es Pepito Perez quien quiere comer, no el estomago de Pepito Pérez”.
Simplificando el ejemplo, no existe una necesidad de la boca, estomago, o de los
genitales, sino una necesidad del individuo a completarse. Considerando el ejemplo
anterior se da a entender que la satisfacción se da en el individuo en sí, y no en una parte
de él, entendiendo que el alimento satisface el sentido de hambre de Pepito Pérez y no el
hambre de su estomago, según el ejemplo anterior.

El ejemplo sobre el hambre tratado como una mera función del organismo, hizo que
los investigadores no consideraran el hecho, de que cuando las personas sufren de
hambre tienden a cambiar sus funciones gastrointestinales sino además gran parte de
otras funciones del individuo; por ejemplo, la percepción, la memoria cambia, las
emociones cambian, por último el contenido cambia. Los cambios podrían seguir
creciendo abarcando otras funciones, capacidades de carácter psíquicas como
fisiológicas.

1.3 Paradigma para los Estados Motivacionales

No se puede hablar solamente del hambre como un posible paradigma, para los
demás estados motivacionales, en la teoría como en la práctica, debido a su falta de
consistencia y falta de sentido. En un análisis más riguroso y detallado se aprecia que el
hambre es uno de los tantos casos especiales de motivación y no un caso en general.
Dícese ser más aislable a diferencia de otras motivaciones, según los psicólogos de la
Gestalt y los de Goldstein. Por último, no es igual a otras motivaciones en las cuales se
encuentra una base somática establecida, la cual no es común en los estados
motivacionales. Las motivaciones más comunes se pueden apreciar en el transcurso de
un día normal. Como por ejemplo, los deseos de poder comprar nuevos accesorios para
uso personal, de amistad, de encontrar compañía del sexo opuesto, entre otros deseos.
Se les conoce como impulsos secundarios o culturales, son de una naturaleza distinta a
los impulsos primarios, conocidas como necesidades fisiológicas; por ejemplo: las
necesidades básicas de todo ser viviente.

Se ha de suponer que los impulsos se norman por los impulsos fisiológicos. Pero se
sabe actualmente que no se rigen de esa manera. Gran parte de los impulsos no tienden
a ser aislados, ni a su vez ser localizados de manera relativa al cuerpo, tampoco como
algo que solo sucede en el organismo. Es necesario tomar un modelo de investigación
basado en un impulso; por ejemplo, el dinero y/o el amor que cumple con una necesidad
fundamental en nuestras vidas. Aun así con el material que contamos en nuestras manos
no podremos entender su totalidad, pero se puede afirmar que “investigando en
profundidad sobre dicho impulso, lograremos comprender aun más la motivación
general de los seres vivos.

1.4 Medios y Fines

Los impulsos, con los cuales contamos en nuestra vida cotidiana, tienen una
característica en especial: son mayoritariamente medios que cumplen con la función de
alcanzar un fin más que fines en sí mismo. Nuevamente Maslow nos plantea el ejemplo
del dinero. Si necesitamos dinero para poder adquirir un automóvil, y así sentirnos a la
par con los bienes del vecino, en este caso el automóvil de él. El cual nos hace estar a la
par con las satisfacciones personales del vecino. Haciéndonos sentir respetados y
valorados. Un impulso consciente, si es analizado en detalle, se llega a otros fines más
personales del individuo.

Si hablamos de impulsos particulares o deseos, los cuales nos ocurren muchas veces
durante el día, entendemos que no son de mayor relevancia; ni tampoco a donde nos
llevan, como tampoco que significan si son analizados en profundidad. Lo que sí es
relevante se caracteriza por los medios, los cuales serán los necesarios para hacernos
llegar a nuestros fines a los que no podemos proseguir, debido a que no abarcan una
continuación. Quiere decir satisfacer necesidades que asimilan ser fines por sus
características, pero no necesitan de una comprobación o justificación. La singularidad
de este fenómeno suele ser que no se perciben en la media de las personas, sino que se
aprecia como una derivación conceptual de los deseos conscientes, es decir, el estudio y
análisis de la motivación debe de ser abarcado como, el estudio de los fines, deseos, y/o
necesidades humanas.
1.5 Motivación en el Proceso de Aprendizaje

A través de los párrafos anteriores hemos logrado alcanzar un mayor nivel de


comprensión acerca de los que es la motivación y sus causales, pero ahora es necesario
esclarecer en vínculo que existe entre esta y el desarrollo educacional, como la afecta y
que consecuencias conlleva su falta de presencia. Se entiende por motivación, como el
gatillante por el cual nos permite realizar cambios tanto en la vida general como a nivel
escolar. Según Nuñez (1996) la motivación no es solo un proceso unitario, sino que está
constituida por diferentes componentes que no han sido explicadas e integradas a las
teorías.

Cabe decir que a pesar de las diferentes definiciones y opiniones acerca de la


motivación, los especialistas coinciden en que es un conjunto de procesos implicados en
la activación, dirección y la persistencia de la conducta (Beltrán, 1993ª; Bueno, 1995;
McClelland, 1989, etc.). En el contexto escolar, si consideramos el carácter intencional
del ser humano, entiéndase por actitudes, percepciones, expectativas y representaciones
del estudiante, de su labor a realizar, y de la visión que pretende alcanzar, son factores
de primera instancia, los cuales guían la conducta del estudiante en su desarrollo
educacional. Sin embargo para poder realizar un estudio a fondo y poder analizar dichos
casos sobre motivación en el ámbito escolar, debemos de considerar estas variables
personales e internas, como a su vez, las externas; por ejemplo, las provenientes de su
entorno físico, las cuales influyen en su persona como influyen en aquellos con los que
interactúa.

Hay una diferenciación entre los aspectos cognitivos y los de afecto-


motivacionales cuando es abarcada la influencia en el aprendizaje escolar. Es decir, que
ciertos autores realizaban sus estudios basándose solamente en los aspectos cognitivos,
dejando atrás los aspectos afectivos, y viceversa. Cabe mencionar sin embargo que en la
actualidad los estudios modernos demuestran un importante interés en estudiar las dos
clases de aspectos de manera óptima e integra. Según Cabanach: “Se puede afirmar que
el aprendizaje se caracteriza como un proceso cognitivo y motivacional a la vez" (G.
Cabanach et al., 1996, p. 9), dando como resultado una mejora en el rendimiento
académico, es decir, se ha de considerar tanto los aspectos cognitivos como los
motivacionales de manera complementaria.

Para alcanzar un aprendizaje, además de la idea del “querer aprender”,


refiriéndonos así a la disposición, intención y motivación suficientes para conseguir
dicho fin, la presencia del “poder aprender” es incuestionable, considerando dentro de
esto las capacidades, conocimientos, destrezas y estrategias según dicen Nuñez y
Gonzalez-Pumariega (1996). Para finalizar, los especialistas destacados en el tema, tales
como, Paris Lipson y Wixson (1983), Pintrich (1989), Pintrich y De Groot (1990)
relataban que, para obtener un buen resultado escolar, es necesario tener la “voluntad”
como “habilidad” (En G. Cabanach et al., 1996), lo que lleva a la integración de los dos.

Además queremos dar a conocer desde una visión constructivista en el


aprendizaje escolar lo siguiente, que no queda solo reducido a un plano cognitivo en
sentido estricto, sino que hay que abarcar las áreas motivacionales tales como, las
intenciones, metas, percepciones que tiene el estudiante. De manera que demuestra la
estrecha relación que abarca, el ámbito cognitivo y afectivo-motivacional. Los cuales
trataremos como determinantes del aprendizaje escolar basados en lo afectivo-
motivacional, debido a que se quiere resaltar los procesos motivacionales sobre los
procesos cognitivos.

En este párrafo analizaremos aquellas variables, que tienen un mayor desempeño


en la motivación del estudiante. Desde un punto de vista personal como contextual,
como a la vez el rol del docente, el cual desarrolla dentro del salón de clases a favor de
mejorar la motivación de los estudiantes. En la Figura 1 se logra apreciar las variables
contextuales y personales. Las variables contextuales consisten en los elementos clave
del entorno educativo, es decir, profesor, estudiantes, contenido. A su vez las variables
personales afectivo-motivacional fueron las propuestas establecidas por Pintrich (1990).
En la figura además se aprecia la relación entre ámbito cognitivo y afecto-emocional,
como a su vez contexto de aprendizaje del estudiante y variables personales.

Modelo Motivacional de Pintrich (1990)


1.6. - Variables Personales de la Motivación

Si abarcamos las teorías motivacionales existentes de Weiner, Covington y


Berry, Dweck, Nicholls, y Schunk, todos ellos se enfatizan en los siguientes conceptos
“autoconcepto, patrones de atribución causal, y metas de aprendizaje”. Como
resultado su relación determina en gran parte la motivación escolar. Cabe decir qué, son
patrones los cuales un docente debe de poseer, si quiere intervenir en la motivación del
estudiante.

Las variables personales fueron además sacadas del Marco Teórico sobre
motivación establecido por Pintrich (1989), además recogidas de Pintrich y De Groot
(1990). Este Marco Teórico cuenta de 3 componentes, los cuales son: Componente de
Expectativa, Componente de Valor, Componente Afectivo. Cabe mencionar que
algunos autores consideran que el constructo “patrones de atribución casual”, aparte de
haber sido excluido como un determinante de la motivación escolar, estaría relacionado
al último propuesto por Pintrich, debido a su cercanía como resultado de lo afectivo-
emocional, y a su vez por la Teoría de Weiner sobre Motivación de Logro, sobre los
éxitos y fracasos obtenidos.
1.6.1 - Variables Contextuales de la Motivación

El análisis de la motivación académica hoy en día, se ha caracterizado por ser


vista desde la perspectiva humana, es decir, como una variable personal haciendo
referencia a los componentes previamente vistos, tales como; autoconcepto,
atribuciones casuales, metas de aprendizaje, emociones, etc., no considerando los
factores contextuales, ni el modo en los cuales influyen en la motivación. Aun así, estas
variables personales están condicionadas por el entorno donde el estudiante desarrolla
su actividad educacional.

1.6.1.1- Influencia de las variables contextuales en el autoconcepto.

Se ha constatado la importancia que ejercen las interacciones sociales, las cuales


el estudiante desarrolla y mantiene con personas de su entorno; tales como, padres,
profesores y compañeros, en su desarrollo de autoconcepto. Debido a que dicha
información le facilita fomentar su desarrollo, mantener y/o modificar su autoconcepto,
lo cual se verá reflejado en su motivación y rendimiento académico (García, 1993a).

1.6.1.2- Influencia de las variables contextuales en las metas de aprendizaje.

Según Dweck y Leggett (1988) “El tipo de meta que los alumnos persiguen
depende tanto de los aspectos personales como de los situacionales” y de acuerdo a
Ames (1992) entre las variables situacionales, cabe mencionar una serie de elementos
que tienen relación con la organización y estructura de la enseñanza en la clase, tales
como, el sistema de evaluación, la actitud del profesor, la organización de la sala, hasta
el tipo de tareas a realizar. Nuevamente Ames (1992) organiza las variables de 3
formas: diseño de tareas y actividades de aprendizaje, practicas de evaluación y la
utilización de recompensas, y por último la responsabilidad en la sala.
1.6.1.3 - Influencia de las variables contextuales en las emociones de los
estudiantes.

Se ha nombrado con anterioridad, al componente afectivo como el agente que se


encarga de las reacciones emocionales, ante la tarea de los estudiantes. La reacción
emocional que genera el estudiante es debido a la tarea la cual se encuentre realizando,
en especial al contenido de esta misma, no obstante también la técnica metodológica
confeccionada por el profesor para su realización.

Quiere decir que, en este sentido, para que el alumno cumpla con las condiciones
necesarias para estar motivado a aprender de forma significativa, es necesario que
“sentido” a lo que se propone. Esto está sujeto a los factores personales, pero en gran
parte de cómo se le presente la situación de aprendizaje. Para que el estudiante se
encuentre motivado, en una óptima condición para aprender se debe de considerar una
“distancia optima” entre lo que sabe y lo nuevo a aprender. Por ejemplo, si la distancia
es vasta, el estudiante se encontrara desmotivado, es decir, creerá que sus capacidades
no le permitirán asimilar el nuevo aprendizaje, además si la fuente de donde proviene,
es una fuente de fuertes exigencias, podría provocar ansiedad en él. Al contrario de lo
que se afirma sobre que si la distancia es vasta, si la distancia es corta, puede producir
un efecto similar, debido a que el estudiante ya conoce el material a aprender, lo cual
terminara en desmotivación.

El aprendizaje significativo, visto desde una percepción constructivista del


aprendizaje, da por entender que es el agente motivador en el estudiante, debido a que
disfruta realizando tareas o enfocándose en nuevos contenidos. Debido a la razón de que
entiende lo que se le enseña y logra encontrarle sentido alguno. Si el estudiante disfruta
realizando tareas se adquiere una motivación intrínseca, donde pueden aparecer
emociones de carácter positivo placentero.

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