El grupo, compuesto por padres de la comunidad LGBT, realizó una protesta silenciosa,
mientras participaba de la eucaristía.
"(...) Es por amor y respeto a esta gran dignidad que corresponde a todo hombre y mujer,
homosexual o no, y que exige de la Iglesia, del Estado y de la sociedad, sinceridad y
franqueza, que los católicos nos oponemos a que los menores de edad puedan ser confiados
en adopción a parejas de personas del mismo sexo y rechazamos una eventual decisión de
la Corte Constitucional en este sentido", afirma parte del mensaje de la Iglesia Católica.
Elizabeth Castillo, vocera del Grupo de Mamás Lesbianas, explicó su decisión: "Nos
sentimos dolidos como católicos de encontrar desde la Iglesia un discurso que dice que no
somos capaces ni aptos para tener hijos, ni criarlos con amor. Por eso estamos aquí; nos
pareció importante dejar sentada nuestra voz de protesta, pues merecemos respeto.
Se supone que esta Iglesia está fundada en un mensaje claro de amor y no se entiende
cómo se envía un comunicado pidiendo que se manifiesten en contra de la adopción
por parte de homosexuales".
Por otra parte, pese a que el comunicado de la Conferencia Episcopal aclara que "la Iglesia
está interesada en que sean reconocidos y eficazmente tutelados los legítimos derechos de
todos los ciudadanos, sin discriminación alguna", la comunidad LGBT teme que esto se
preste para una mayor marginación.
"Creo que ese tipo de mensajes generan discriminación y posibilidades de que suframos
más violencia de la que ya vivimos. Es importante también que la Iglesia Católica entienda
que muchos homosexuales somos católicos y que esos lenguajes y mensajes que envían nos
afectan como miembros de esta Iglesia", afirmó Castillo, quien junto con sus compañeros
recibió la comunión de manos de monseñor Salazar.
REDACCIÓN BOGOTÁ