Imagina una gran ciudad con sus calles. En ella hay un gran
rascacielos desde donde se gobierna toda la ciudad. Un gran
rascacielos desde donde se ordena y se dirige todo lo que va
a ocurrir en ella. El control de los alimentos, la limpieza y la
eliminación de las basuras, el tráfico y las relaciones con otras
ciudades y dentro de la propia ciudad. Todo está supervisado
y controlado desde este rascacielos.